╚ Parque Acuático Witch ╝ (MM B: 102556)

[Anthony R. Dracony M.]

Era tan agradable, desperte con un nuevo sentido que me llenaba. La perspetiva de disfrutar el parque acuatico era un gran motivador, así que lance rapidamente las frazadas y dispose mis cosas para empezar el día que parecia sería de lo mejor.

 

Me vesti y llame a servicio de cuartos. Esto estaba de lujo, el desayuno estuvo genial, me alegre bastante porque tenía muchisimo que no disfrutaba de una grandiosa comida como aquella. No quise perder más tiempo, abandone la habitación y emprendi la marcha para comenzar la diversión, muy animado fui de principio al lugar de lanzamiento, me parecio ver que era una de tiro con armas.

 

Era bueno ver que había tiro al blanco, me sonrei al pensar que podría practicar todo lo necesario para volverme muy bueno, era de esas cosas que comenzaban a agradarme mucho, hacer todo lo posible por mejorar en esa cosas que serian fundamentales, inclusive debería practicar lanzar mi daga...no se talvez y fuera necesario aprender para en futuro, uno no estaba seguro de disponer siempre de varita y pues una daga prevista en una poción efectiva siempre seria un arma útil.

[Helike R V PB]

Me metí en el baño de la habitación y me di un buen duchazo, sobre todo para sacarme el cloro de la piscina y que el pelo no se me estropease. Con la varita en mano, sequé todo mi cuerpo y enseguida puse mis prendas... Al menos en el tiempo que había estado el monedero de piel de moke en los vestuarios mi elfina aprovechó la ocasión, para cambiarme la ropa. Sonreí. Había sido un acierto más que notable al hacerla trabajar para mí.

 

Saqué un pantalón vaquero, zapatillas de deporte, una camiseta blanca... Obviamente me las coloqué después de poner mis prendas interiores. Después de colocarme un jersey fino, coloqué mi varita detrás del bolsillo del pantalón. Até mi pelo en una cola de caballo y salí a la habitación principal de la suit. Me fijé en que Ithilion dormía cómo un bendito, el día de piscina lo había dejado agotado.

 

- Oye -le dije con cariño al oído- ¿te parece bien, pedir comida china? No sé si tenéis por aquí y la verdad es que me apetece -comenté con una sonrisa.

 

- Y luego, no sé, incluso podemos beber un poco de cava, me apetece -asentí contenta.. Iba a ser una velada interesante.

[Valky]

— Lo que el ama necesita son unas vacaciones o al menos un día lejos de aquí— decía una elfina caminando detrás de Valkyria.

 

— Lo que necesito es que guardes silencio Osiris… llevas días con lo mismo — respondió la bruja sin detenerse a mirarla— No puedo irme por ahí y dejarle solo— añadió.

 

— Pero ama… tampoco es que se pueda hacer mucho — respondió la criatura sin dar su brazo a torcer — Además yo me puedo quedar pendiente del amo y avisarle si pasa algo — aquellas palabras hicieron detener el andar de la castaña.

 

Levanto la mirada hacía un cuadro que esta colgado en la pared y era verdad, tenia que tomarse un tiempo para ella, lucía un aspecto realmente lamentable. Intento recordar cuando fue la ultima vez que descanso y fue inútil, simplemente no lo recordaba. Sus ojos miel que hace tiempo atrás brillaban llenos de vida, lucían apagados, presos de la preocupación.

 

 

— Tu ganas Osiris... ve a cuidar a tu amo y cualquier cosa que suceda me avisas, por insignificante que esta sea.

 

 

Dio un suspiro y continuó su camino hasta llegar a su habitación en donde cambió su ropa de casa por unos pantalones de mezclilla, una camiseta blanca y debajo de estos un terno de baño. Se coloco unas zapatillas y tras guardar algunas cosas más en su bolso entre ellas su varita salio del castillo Haughton.

 

 

Aun no tenía ni idea de a donde iría, pero recordaba que en el callejón Diagón había un parque acuático, y eso era lo que necesitaba, un lugar en el cual poder divertirse un rato. Quizá luego invitaría a alguien para que la acompañara, aunque por ahora prefería estar sola. Recorrió las calles del Diagón hasta que llegó al Parque Acuático Witch, había varias personas ahí por lo que la castaña busco una zona tranquila en la cual tras despojarse de su ropa y quedar solo con su terno de baño lista para tomar algo de sol.

[Deax Black Lestrange]

Deax Black Lestrange

 

 

No sabía ni cómo se le había ocurrido pasar la tarde descansando en aquel parque. Primero, no tenía compañía y ahora tenía que pasarla solo viendo cómo todos los presentes se divertían entre ellos. Segundo, no pensó que el Sol estaría tan brillante esa tarde. Estaba un poco irritado y con dolor de ojos, ya que había olvidado llevar sus gafas protectoras o unas gafas para el Sol y aquel brillo estaba empezando a hacerle doler la cabeza; Rulkol, su elfo, todavía le recodó algunas veces que se colocara los lentes antes de partir pero él, siempre por llevarle la contraria, no le hizo caso.

 

“Pero bueno, siempre que haya comida, un lugar para pasarla bien y buena lectura, no hay ningún problema” pensó mientras se acercaba a un kiosco para pedir algo de comer y una bebida refrescante. Ordenó solamente una bebida de limón y caminó, con su libro en mano, buscando una silla o un sitio cómodo para leer.

 

De pronto, el Sol dejó soltar un reflejo de su Luz tan brillante amenazando con dejar ciego al mago, éste solo cerró con fuerza sus ojos y, sin dejar de avanzar, llegó hasta donde se encontraba una fila de sillas playeras. La ceguera temporal que la luz le había provocado le hizo perder la dirección de su camino y tropezar con la primera silla de la fila que se encontraba vacía. Esto hizo que perdiera el equilibrio y cayera sobre ella, lanzando su bebida sobre el cabello y las ropas de la bruja que se encontraba descansado al lado.

 

–Argg.. –se quejó cuando terminó de caer. La mitad de su cuerpo estaba en la silla y la otra estaba sobre la chica –yo… Lo siento –se disculpó volviendo sus ojos a la bruja, percatándose de que eran del mismo color que los suyos.

 

 

–¡Ah, sí! Lo lamento –se levantó apresurado, había olvidado el pequeño detalle de que estaba sobre ella. Se quitó la toalla que llevaba al hombro, y que hacía juego con su pantalón corto de color beige y su camisa de lycra blanca, y se la dio para que pudiera limpiarse la bebida que había vertido sobre ella –lo bueno es que… puede limpiarse –lanzó una pequeña sonrisa y señaló uno de los grandes toboganes que había en el parque.

[Helen Evans]

Sonreí ante las palabras de mi madre, ella tenía razón aquel no era el momento ni el lugar para hacer esas preguntas, así que simplemente asentí cuando ella indicó que se encontraban bien los dos, me bastaba con eso por el momento, así limpié las lágrimas que habían caído sobre mi rostro y me giré en dirección de mi hermano:

 

— ¿Alguna vez has estado en un parque de diversiones? ¿Uno mágico?

 

El pequeño negó con la cabeza lentamente y lo tomé de la mano.

 

—Pues bien, hoy conocerás uno realmente divertido te parece

 

La sonrisa de Apros reflejaba lo contento que estaba con la idea, en ese momento escuché las palabras de mi madre y aunque notaba duda en su voz, no tenía porque dudarlo ni un segundo así que apenas lo dijo añadí:

 

— Por supuesto que me encantaría, ¡Estadía con los Currington!

 

 

[Valky]

Una de las cosas que más amaba de la magia era que le permitiera tomar el sol, sentir los cálidos rayos abrigando su fría piel era algo que realmente amaba, quizá esa fue la razón de haber escogido aquel lugar para relajarse y descansar. Recogió su larga cabellera castaña en una coleta para que no se enredara con la suave brisa que corría en el lugar y cerro sus ojos para intentar tomar una pequeña siesta.

 

 

No supo cuanto tiempo permaneció dormida, pero lo que si sabía era que nadie merecía ser despertada de aquella manera. — Pero que dia.... — alcanzo a decir cuando quedo empapada, movió la cabeza para despabilarse completamente pero en ese momento caía sobre ella un joven alto de cabello castaño y porque no decirlo muy apuesto. Sus miradas se cruzaron un par de segundos antes de que él notara que estaba sobre ella.

 

 

Al mismo tiempo que el joven se ponía en pie y se disculpaba ella hacia lo mismo intentando limpiarse el liquido que estaba sobre ella, sin poder evitar notar que su piel quedaba pegajosa. Miró al desconocido por un momento, suspiro para calmar su enojo y luego, incluso para sorpresa suya dijo.

 

 

— Un accidente le pasa a cualquiera... aunque deberías tener mas cuidado — Tomó la toalla que él le ofrecía y termino de limpiarse — si... eso es lo bueno — añadió sonriendo por su comentario y volvía su mirada hacia los toboganes. — eso y que por suerte no ha sido algo que pudiera manchar la ropa... sino me deberías un traje de baño nuevo — comentó

 

 

— Gracias... — dijo Valkyria entregándole de regreso la toalla y al hacerlo fijarse que el joven mago llevaba un libro en la mano — creo que debería agradecer que en la caída no soltaras el libro y me sacaras un ojo — comento sonriendo.

[Jank Dayne]

- ¡Expecto Patronum!

Exclamó Hank, cubriéndose del sol con una mano. Los lentes negros que llevaba puestos hicieron que el patronus se reflejara sobre el plástico, pero ni eso pudo incomodarlo. Una esfinge con un hermoso rostro salió de repente, y se quedó en aire esperando instrucciones, igual que siempre. Existía una firme relación, como si el patronum tuviera vida propia, pero unida por un lazo infinito con su creador.

- Parque Acuático Witch, ahora - dijo a la criatura, quien marcó una excelente marcha hacia los oídos de aquellos quienes estarían dispuestos a luchar. Hank alisó su camisa ligera, sintió una especie de arena en los pies descalzos y pasó su mano sobre la bermuda marrón. En su otra mano tenía una bebida morada, mientras que en la otra sujetaba a Libra, su fiel varita roja. Luego de dar unos cuántos pasos, localizó a Valkyria entre unas sillas playeras, juntada con otro muchacho. A éste no le prestó atención; por el contrario, contó los metros en la mente, y eran siete los que lo separaban de la bruja.

- Valkyria, tus días como reclutadora para el bando mortífago han llegado a su fin - dijo Hank, apuntándole con su varita -, así que prepárate a luchar, o a confesar.

[Adryanie]

—¿Quién? — Miró extrañada el patronus con forma de esfinge que alcanzaba a decirle el nombre de la bruja que sospechaban era mortífaga. No lograba pornunciar el nombre, era un nombre que nunca había escuchado y viniendo de la voz e Hank se le hacía aún más inentendible — ¿Valeria? Valeshka, Valery...— Se repetía nombres a ella misma a ver si alguno coincidía con el que había dicho el patronus pero no, pero de algo si le sonaba aquel nombre y era quizá de algún trabajador del Ministerio — Bueno, mortífago es mortífago.

 

 

Dijo encogiéndose de hombros para atravesar las llamas del polvo flu que había allí en la academia donde ella se encontraba tomando un descanso luego de un difícil día de ser profesora. Se metió a la chimenea y luego de abrir sus labios para pronunciar "Diagón" Sintió el típico mareo y luego a sus oídos llegó el bullicio que se escuchaba casi siempre en el Caldero Chorreante.

 

Echó un rápido vistazo a los clientes que no parecian tomarle la mayor importancia, era un lugar muy transitado por los magos y recibía un gran tránsito de ellos allí. Se arremangó la túnica y caminó a paso apresurado hasta el lugar icho por la esfinge "El parque Acuático" ¿Qué acaso ese no era un negocio de una de sus compañeras de bando ¿Sunar? Tal vez se equivocaba de cualquier manera llegó al frente del lugar y espero pacientemente a sus compañeros.

 

Hacía este típico frío de invierno y estos vientos que no dejaban que nadie estuviera con menos ropa de la necesaria. Ella aún con la túnica y un abrigo dentrosentía frío, hasta pensó en ponerse unas mallas de ejercicios por debajo del jeans pero no era posible. Se le ocurrió que quizá ese lugar tenía que tener ambientadores o algo similar.

[Lestat Rambaldi]

El castaño de ojos azules, se encontraba aquella noche tranquilo en su comoda habitación, sus muebles acolchados reflejaban sus tonalidades artísticas bajo aquella luz artificial, cuando d pronto un patronus plateado inrumpió en su alcocba quedándose ahí donde se encontraba su alfombra de terciopelo rojo.

Era un patronus de una esfinge, no sabia que fenixiano lo había enviado, pero su mensaje era claro y fuerte, había que ir a ayudar.

Rápidamente se puso en pié colocó aquella luz en su rostro con su varita de roble ingles, y en un segundo después ya estaba listo para aquella redada.

 

Lestat tomo mentalmente la dirección, y en un segundo después estaba en aquel local, era uno de esos parque acuaticos de la ciudad, se llamaba with y apareciendo en le lugar con un short playero y sin camisa, resplandecía bajo aquella luz en su rostro.

Miró a un lado y vió a su compañero,— a con que eras tu, amigo —, no reconocía ese patronus, dijo divertido, y levantó la varita sonriendo a su compañero de bando que al parecer había conseguido a una seguidora de la marca tenebrosa.

—¿oye, esta es la chica?... es una lastima— dijo lamentandose y colocándose a unos 7 metros de valkyria y apuntando directamente con su varita.

oculto bajo aquella luz no seria reconocido, pero observó que mas y mas compañeros venian en aquella redada, como siemrpe se demostraba la union en el bando de la luz, todos sintonizados para el bien mayor.

 

 

 

 

[Jank Dayne]

- Levicorpus!

 

Pensó Hank en el acto, sin dar oportunidad a nada. No había que hacerlo, de todos modos. La orden había buscado las pruebas necesarias para aquel acto, y aún así, se consideraba demasiado permisivo. Valkyria quedó patas arriba al instante, quedando a un metro y medio del suelo exactamente. Su cabello chocó contra éste apenas, debido a la altura..

 

Notó que Adry estaba a su lado, y solo asintió. Un inglés no estaba acostumbrado a tales grados de temperatura en pleno verano, no señor. Fue absorbiendo el contenido de su bebida a medida que redondeaba el perímetro, quedando a la espalda de la mortífago. Ni siquiera miró a Drex, su acompañante. Hank se enfocaba en su misión y solo eso; los sentimientos estaban para la almohada.

 

- No me explico cómo puedes ir por ahí.. siendo así, siendo lo que eres - dijo, volviendo a estar frente a ella. Se arrodilló -, pero toma esto como una advertencia. A partir de ahora, sabes que estaremos vigilándote. Sabemos quién eres.

 

Dio una cabeceada a sus compañeros para que se acercaran. Eran sus turnos ahora..