♔ The Ramen Kingdom ♔ (MM B: 106259)

[Shena Cindy de Ryvak M.]

Entraron finalmente al recibidor del local, entre risas y bromas y Tofu fue quien de pronto nos hizo voltear hacia el extremo donde él apareció, el joven elfo caminaba animado hacia ellos con una bandeja de plata, sus pies torpes se enredaron y tropezó cayendo al suelo y tirando la bandeja haciendo u ruido estruendoso. La elfina volteo a verlo con gesto enfadado, tenía ganas de gritarle, pero se contuvo frente a nosotros, no sin enviarle un silencioso reproché por su accidente fulminando le con su mirada.

 

Tofu se levantó tomó la bandeja con ambas manos y bajando su mirada dijo su nombre y pidió disculpas para después ofrecer su ayuda.

 

Me dió una especie de simpatía su actuar, no tan hábil pero si valiente para aceptar sus limitaciones y seguir adelante, lo miré y dije:

 

--Los menús, gracias.

 

Después volví la mirada a la elfina, pues parece la que se encarga de los meseros y el servicio en general.

 

--Buenos tardes, deseamos ir al cuarto piso, reunión de amigos y queremos celebrar, por favor otorgue la sala mágica de Aladino o una que tenga disponible rápido ya que tenemos hambre y es mucha molestia que nos den entremés mientras elegimos algo del menú? Nos interesa mucho visitar los jardines y el ojo de agua, por lo que, nos indica dónde se encuentran las escaleras? O es que tiene ascensor éste restaurante?

[irina selene]

Después de lo sucedido con mi otra familia de la muerte de mi padre, mi mundo se me había venido abajo se desmorono y una parte de mi con el debido a que el había sido aparte de todo mi mejor amigo y perderlo fue un golpe muy fuerte, cuando me entere sali del Castillo pero no solo fue eso ya que también con mi hermano Jeremy habíamos tenido problemas y lo único que se me había ocurrido hacer era irme lejos de aquí a pasar ese sentimiento que tenia y asi poder regresar cuando me sintiera mucho mejor para poder hacer lo que sabia que a mi padre le gustaría que era seguir en la orden.

 

Tiempo después había recibido una lechuza en donde Jeremy me decía que quería verme algo que me hizo pensar en sobre por que abría hecho eso y por supuesto sentí un poco de nervios ya que después del problemas que tuvimos anteriormente no quedamos muy bien ya aun tenia enojo hacia el, suspire por un momento viendo la carta pensando en si seria correcto regresar y vernos. Mande la respuesta a el diciéndole que volvería para poder vernos en algunos días. Saque de mi camafeo que había tenido desde que me case y de eso ya era mucho tiempo, una plumita que mi padre me dio en ese momento y que después de todo este tiempo guardaba con mucho cariño.

 

Varios días ya habían pasado desde esa carta y era momento de volver después de pensarlo mucho.Arme mis maletas y salí rumbo a el lugar en el que habíamos acordardo vernos.Horas pasaron hasta que por fin llegue a ese negocio que se llamaba The Ramen Kindom .Me había costado un poco encontrarlo ya que por mucho tiempo ni había pasado por estos lugares. Al entrar vi que era un agradable lugar que oilia muy bien, sonrei un poco buscando una mesa para esperarlo y que no faltaria mucho por llegar esperaba eso, miles de cosas se me vinieron a la mente como que le diría o el motivo por el cual me habia citado y que me hizo volver cuando dije que no lo haria por obvias razones.

 

El tiempo paso y me trajeron la carta para ver los platillos o diferentes Ramens que se servían en este lugar dejando aun lado la carta mientras que lo esperaba y no tardo mucho cuando lo vi entrar dirigiéndote hacia donde yo me encontraba-Hola Jeremy- dije algo seria enfocándome en la carta- ¿Para que me hiciste venir?- mirandolo fijamente.

Editado 13 de Junio del 2018 por irina selene

[Jeremy Triviani]

El mago ingreso al bonito lugar sin prestar atención a la decoración, realmente su cabeza estaba en otras cosas. Después de mucho tiempo por fin había llegado el momento de volver a juntarse con su lejana hermana. Parecía que el rubio no tenía suerte con sus familiares, todos sus hermanos se iban de viaje abandonándolo por uno u otro motivo. Generalmente luego de una fuerte pelea, como era el caso actual con Irina.

 

Después de mucho pensarlo, había escrito una nota con una invitación al reencuentro. Buscó con la mirada donde estaba la mujer y no le costó reconocerla. Su hermana era una bruja llamativa. Se acercó a la mesa donde estaba, frunciendo el cejo por todas las cosas que quería gritarle, aunque no en público. Eso se vería muy mal de su parte. Contó hasta mil y uno para mantener la calma.

 

-Bueno… aquí estamos después de tanto tiempo…- Su tono era el de alguien molesto, no respondió el saludo solo se sentó frente a la mujer- Podrías haberte tomado el lujo de mandar una lechuza ¿No? - Observó la comida e hizo señas al mesero - La especialidad de la casa para dos, por favor- Le dijo sin preguntarle a Irina si quería eso o no.

 

El Askar estaba demostrando su falta de tacto para mantener una conversación dentro de los límites cordiales. Miró de forma desafiante manteniendo la mirada de la bruja. Parecía que las cosas no iban a llegar a ningún lado bueno, pero debía intentarlo. Irina era parte de su pasado y le gustara o no, compartían una relación familiar, que el tiempo no había borrado.

 

- Te cite para verte ¿Acaso no tengo derecho a saber si sigues viva o no? -La voz afilada del mago no tenía ningún rastro de piedad - ¿Qué hiciste en este tiempo? ¿Tienes algún bastardo que deba conocer?

 

 

@@irina selene

[Alexander Fox]

“Siempre hay una primera vez para absolutamente todo"

 

Eso fue lo que pensó cuando entró por primera vez a ese local hace un año atrás. Un sitio al cual Alexander llegó por sana y pura curiosidad, lo que nunca esperó fue salir conociendo a personas maravillosas, a pesar que ya no tenía contacto con ninguna y una ya no se encontraba. Un suspiró salió de sus labios cuando observó con atención la fachada de ese delicado sitio, era un estilo asiático, por lo cual jamás imagino que se llevaría bien con él, pero le agradaba el sitio sus buenos recuerdos lo traían allí.

 

-Mmm… - ahora que recordaba, no había invitado a nadie, y tampoco tenía claro como había viajado por el camino del recuerdo, pero ahora tenía hambre y detestaba comer solo, hacía tiempo que no buscaba a nadie desconocido para invitarlo, esos abusos de confianza no habían desaparecido del todo, pero debía confesar que ya no actuaba tan impulsivamente, pero los hábitos nunca se olvidan.

 

Sonrió con diversión, mientras acomodaba su cabellera roja, algunas cosas no cambiaban y por lo menos su ropa era un claro ejemplo de ello, iba vestido con solo unos blue jeans y una camisa negra larga con unos zapatos deportivos, era lo mejor que él podía vestirse, nunca había sido bueno con la moda y eso no cambiaría al parecer.

 

En esos momentos comenzó a entrar al local, admirando el recibidor tan limpio y pulcro, con colores que demostraban la temática del sitio, antes de poder pedir alguna mesa observó a los alrededores, había personas a su alrededor pero ninguna que a sus orbes dorados le pareciera aconsejable, hasta que una joven dama apareció en el recibidor, le analizó con cuidado, observando su esencia, intentando no ser demasiado maleducado.

 

-Bella dama, disculpe ¿se encontrara esperando a alguien? – preguntó con acercándosele con su típica tranquilidad y confianza para sonreírle caballerosamente, esperando que no le incomodara - puesto que sería un honor para mi si gustara almorzar conmigo- agregó con naturalidad.

 

@@Beryl Serenity Hawthorne

[Beryl Serenity Hawthorne]

Era un día soleado en el callejón diagon, había salido de mi apartamento en Londres para pasear un poco por la ciudad y pues que mejor opción que esta bella parte secreta del Reino Unido, lejos de los muggles, quería un tiempo relax solo para mi así que me escape de la rutina a vagar por las pintorescas calles de Diagon.

 

Caminaba sin rumbo por la zona pero hice una pequeña parada en una cafetería por un poco de frappe de galleta, mi dulce vicio desde que llegué de Rusia al hermoso Londres, después de esperar mi bebida unos minutos salí del lugar con destino indeterminado.

 

Por merlín, había demasiadas tiendas y restaurantes que no sabía a donde entrar, caminé unas calles más hasta que enfrente de mi encontré un establecimiento que me llamó la atención, era un restaurante oriental, era muy bonito, muy al estilo japonés, sin pensarlo entré a probar un poco de su menú.

 

Al cruzar la puerta apenas di unos pasos y la voz de un joven hablándome me desvió de mi destino, volteé para ver quién me llamaba, no era nadie familiar para mí pero tenía una pinta bastante amable, se acercó a mí y me preguntó si estaba esperando a alguien.

 

-Hola…Mmm, no, venia vagando por la zona y decidí probar un poco de la gastronomía oriental- Le respondí amablemente al joven pelirrojo y justo después de responderle el chico me invitó a comer con él, era algo extraño recibir ese tipo de invitaciones de gente desconocida pero honestamente no quería comer sola y el pelirrojo no se veía como alguien peligroso así que acepté su invitación.

 

El joven me sonrió amablemente y nos dirigimos a tomar una mesa en el restaurante, nos sentamos frente a frente, hubo un silencio incomodo en la mesa hasta que me armé de valor para romper el hielo entre nosotros que éramos unos perfectos desconocidos que sorprendentemente íbamos a compartir mesa para almorzar.

 

-¿Suele hacer invitaciones a extraños muy a menudo? Jejejeje, Mi nombre es Beryl Serenity Rambaldi Gryffindor y usted?-dije amablemente al joven pelirrojo.

 

 

@@Alexander Fox

[Alexander Fox]

Alexander observó con tranquilidad a la joven dama, una mujer de una brillante cabellera rubia aunque quizás lo que más le destacaba era ese curioso lunar en su mejilla, el pelirrojo quedó encantado cuando fue aceptada su invitación, aquello le pareció un golpe de suerte, se alegraba no haber sido reconocido como alguien malo o molesto, por lo cual sin más se acercó al mostrador y pidió una mesa para dos en el segundo piso.

 

Había cierta incomodidad, consideraba que era algo natural después de todo, las cosas habían sido improvisadamente, y aunque el vampiro ya estuviera acostumbrado a ello, sabía de buena mano que otras personas no. Se sorprendió cuando la primera a tomar la palabra fue la dama, pero sonrió encantado por ello.

 

-Un placer conocerle, soy Alexander Fox Lockhart – se presentó con tranquilidad – Le confieso que me encanta invitar a personas desconocidas, después de todo son amigos que todavía no has conocido – se explicó con una leve risa, aquella frase se la habían enseñado hace ya un tiempo y a pesar que al principio no la tomó en serio, desde que había llegado al mundo mágico se convirtió en una ley para él.

 

-Y considero que tengo un buen ojo para conseguir a personas amables y dulces – reconoció con tranquilidad – y ¿usted? Aunque me encanta que haya aceptado ¿esta bien? – preguntó curioso, mientras observaba los colores del lugar, no había cambiado en nada seguía conservando su gran armonía y tranquilidad.

 

-¿Ha comido este estilo de comida? – preguntó con tranquilidad.

 

@@Beryl Serenity Hawthorne

[Beryl Serenity Hawthorne]

bservaba al joven Lockhart mientras contestaba mis cuestionamientos, toda la incomodidad se estaba esfumando de la atmosfera, aquella persona era muy educada y amable conmigo, qué decir de su aspecto físico, él no era alguien normal, tenía características anatómicas similares a mi especie, tenía mis sospechas que aquel hombre era inmortal.

 

 

-Jejejeje, interesante, debo confesarle que me cayó de sorpresa su repentina invitación-dije al joven pelirrojo.

 

 

Probé mi té helado mientras hablaba el pelirrojo cuando de repente escuche que me tiraba cumplidos en forma de indirectas, me sonroje, parecía un tomate, la verdad no estaba acostumbrada a recibir ese tipo de comentarios de personas desconocidas para mí, también no podía negar el hecho de que aquel chico era demasiado atractivo, me estaba provocando sensaciones antiguas.

 

 

-Estoy bien, creo que después de mucho tiempo debo de conocer a gente nueva-dije mientras bebía de nueva cuenta mi té-La verdad, no, estaba vagando por diagon y al ver el local quise probar un poco de comida oriental-Añadí.

 

 

Mientras el joven tomaba de nueva cuenta la palabra, el mesero regresaba con nuestras órdenes, todo olía exquisitamente y que decir del aspecto de la comida, era lo más hermoso que había contemplado en mi vida, creo que hice una buena elección al entrar a este local de comida, entré sola, conseguí un nuevo amigo y una comida sumamente deliciosa.

 

 

-Cuénteme de usted, quien es y de su vida, disculpe mi atrevimiento pero soy una persona sumamente curiosa, Jejejeje-Dije mientras observaba sus lindos ojos café dorado.

 

 

@@Alexander Fox

[Vladimir Karkarov]

El lugar estaba completamente listo, el capacious extremis funcionaba de maravilla. Era hora de que Vladimir enviara su noble y fiel lechuza por todos los lugares de Ottery y el Callejón, para dejar su pequeña invitación para el que quisiera asistir a su fiesta de apertura.

La gran Nox emprendió vuelo por entre las nubes, cargando consigo las invitaciones para que todos los brujos y las brujas pudieran saber de tan excelente actividad. Su vuelo era ligero, suave cual viento y sus alas no producían el menor ruido. Así fue, durante todo el día y la noche, solamente reposando para descansar de cuando en cuando.

 

 

[Alexander Fox]

Estaban siendo atendidos con una gran rapidez y eficiencia por lo cual ya ambos podían disfrutar de sus respectivas bebidas, por su parte Alexander había preferido un poco de sake, solo para combinar más con el ambiente del lugar. Observó con tranquilidad a la joven daba realmente había acertado en su decisión de pedirle a la señorita Beryl que le acompañara a almorzar, la dama tenía un aire muy delicado y suave, además de una apariencia hermosa que la hacia una excelente compañía.

 

-Siempre será interesante conocer a personas nuevas, hoy por lo menos yo he tenido suerte – sonrió con suavidad – este local sirve comida deliciosa, espero le guste – y como si lo hubiera invocado el mesero decidió aparecer con la comida, aquello dio soporte a sus palabras, la fragancia de todo era extraordinario.

 

-Entonces tenemos eso en común, la curiosidad es algo que jamás he podido controlar, quizás eso me ha metido en algún que otro problema – respondió haciéndole un guiño con el ojo. Tomó uno de los palillos mientras paseó su mirada a su comida por unos momentos - A ver… como le respondo esa pregunta sin sonar mal – agregaba mientras se fijaba en los refinados movimientos de su acompañante, guardo un momento de silencio para sonreir.

 

-Soy un hombre tranquilo, aunque con un poco de mala suerte para encontrarme con cada aventura, aunque confieso que las disfruto, me gusta disfrutar del alcohol y de la compañia, por lo pronto espero poder trabajar en San Mungo – sonríe divertido – aunque quizás lo único más interesante de mi es mi propio ser – agregó para mostrarle sutilmente sus colmillos de vampiro, el pelirrojo sospechaba que su bella compañera también resultaba ser una vampireza por lo cual decidió darle a conocer aquello.

 

Alexander nunca había sido bueno hablando de si mismo, no ocultaba mucho, pero tampoco dejaba dar información, por lo cual se distrajo con facilidad con el sabor de la comida, y es que estaba disfrutante del ramen, aunque todavía le fuera dificil comer con los palillos.

 

-Mmm… delicioso, y dígame ¿qué me puede contar de usted? – preguntó curioso, ahora era su turno.

 

@@Beryl Serenity Hawthorne

[Anthony R. Dracony M.]

El acontecer de aquellos detalles le hicieron dimensionar el sin número de actividades que llevaba a cabo antes y ahora su vida era rutinaria restando aquella chispa que antes gozaba...paso su mano distraídamente por su torso, sintió los colgantes que lleva consigo, previniendo tener lo necesario en caso de presentarse algún incidente de riesgo o peor aún, de un peligro de alto grado de dificultad, es preferible sobrellevar la molestia de cargar con ellos y no utilizarlos, que requerirlos y no contar con ellos cuando pudiera ser la única forma de salir airoso de aquella eventualidad "mortal"....si, los últimos acontecimientos vividos, era lo que le había enseñado a estar en guardia aún cuando estuviera divirtiendo se o descansando...

 

 

No quería lamentarse de "no disfrutar la vida", cosa en la que Shena Cindy se encargaba siempre de organizar actividades donde él gozaba de su maravillosa influencia...está en deuda con la bella castaña, en cuanto surja la oportunidad, le agradecerá con un lindo detalle; tal vez un señalador de libros con un paisaje de su casa...su casa...se escucha tan fantástico! en la compañía de ella ha logrado obtener bastantes cosas que deseaba y ahora son una feliz realidad.

 

Escucho lo que su novia le menciono a la elfina (que paciencia de criatura aguardando con su figura formal y servicial) y asintió a sus disposición al cuarto piso así como de pasar al jardín y a la laguna con sus carpas doradas y talapias de plata...

 

Hace mucho que no se relaja como antes, tampoco ha visitado el Banco Mágico o la Magic Mall y antes soñaba con ello....emite un suspiro pero también muestra una sonrisa a @@Dennis Delacourt verla tan animada, le hace recordar de esa época en que él mismo era como la rubia...

 

La elfina nos mostró el camino y me sentí afortunado de ir con tan bella compañía y la misma es una promesa segura de un memorable recuerdo que anhelo mucho y me hace falta para "tomar la iniciativa de regalarme alegres vivencias" con las personas que amo.