Jump to content

- Hell MooN - (MM B: 110639)


Malum Luxure
 Compartir

Publicaciones recomendadas

Oniria:

 

 

 

Sí, definitivamente se había casado. Ahora quedaba descubrir... ¿Con quién? La miré. Mis pupilas se dilataron. Aquello significaba, según la cultura popular, que estabas enamorado de alguien. ¿De cuántas personas podía yo estar enamorada? Mi corazón albergaba sentimientos inescrutables. Me estremecí cuando las manos de Leah me recorrieron. Aquella piel... hacía tanto tiempo... y sin embargo, no había conseguido olvidarla. Mi memoria era, en efecto, táctil. Mis recuerdos eran puramente epiteliales, estaban inundados de caricias, telas, texturas. Mis párpados se cerraron transportándose al pasado.

 

Pero estábamos aquí. A unos centímetros la una de la otra.

 

"Voy a besarte". No respondí, pero mi silencio sólo era un reclamo, una expresión de mi deseo que no sabía cómo manifestar. Era uno de esos instantes en que las palabras se deshacían en mi boca antes de poder formularlas. Sus labios se posaron en los míos, y yo los moví con toda la dulzura que supe. "Este amor ya sin mí te amará siempre". Mis sentimientos se mantenían intactos. Mi corazón, de haber podido, hubiese latido con fuerza, como un fuego artificial en su recorrido hacia la desintegración.

 

––Yo te quiero. No sabes cuánto. ––Musité, estrechándola.

 

@

35BOZ9V.gifTpCoX6y.gif


aHbQ7xv.png


http://i.imgur.com/cLhW49K.gifhQEsmVo.gif



Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

De haber estado limpia, ¿habría obrado igual? Supo que sí cuando sus brazos la apretaron como solían hacerlo. Su perfume seguía siendo el mismo y lo inhaló con verdadera devoción, activando todos los recuerdos que existían de ella. Nunca había conocido a nadie igual y, ciertamente, la había esperado. Por mucho tiempo. Su abrazo se alargó por mucho tiempo, hasta que sintió ganas de besarla otra vez, cada parte de su cuerpo. Los recuerdos de hicieron demasiado vívidos y pudo ver con claridad una escena en específico, una bañera... se separó de ella.

-No, no lo sé. Te fuiste antes de saberlo.

Fue consciente por primera vez de la cascada y de dónde estaban, así que con sumo cuidado, se sentó en el borde. El donido del agua al caer despejaba su mente, las gotas frías la alejaban de la memoria de su cuerpo entre las burbujas aromáticas. Ladeó la cabeza y su largo cabello rubio se fue hacia un lado. La estaba analizando.

-Quiero... -cerró los ojos un momento, pensando en algo que tal vez no debería aparecer en su cabeza. Sísifo. Sísifo era terriblemente parecido a Oniria y eso que sentía era un ligero arrepentimiento-. Te quiero.

Y lo hacía, con cada fibra de su ser. Pero, había un dejo en su tono que dejaba entrever algo más. Algo que a ella no le pasaría por alto pero que no iba a mencionar. No iba a ceder tan pronto, le debía una explicación.

-¿Por qué volviste? -el motivo de su partida le importaba mucho menos que ese.


@@Oniria

"%20alt=YwwEbg4.gif


"%20alt=


"%20alt=hQEsmVo.gif3lqIQgZ.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Oniria:

 

 

 

 

Después de escuchar sus palabras, sentí una oleada de culpabilidad.

 

––Me fui por miedo. Creo que... ¿me deprimí?

 

No sabía de qué otra forma expresarlo. Hasta ese momento de mi vida no había sido consciente de mi propia inestabilidad mental, de mis demonios internos.

 

––Lo siento ––balbuceé––, debí darte una explicación. A ti y a mucha gente. Pero no supe gestionar todo lo que sentía. Hay alguien... bueno, podemos hablar de eso en otro momento.

 

Me senté al borde de la cascada, junto a ella. Al menos su reacción no había sido del todo mala. En su rostro leía sentimientos encontrados. Probablemente, confusión.

 

––He vuelto porque necesito encontrar respuestas. Y porque fui muy cobarde. Y porque no puedo huir más, alejarme de las personas a las que quiero... me estaba destruyendo.

 

Mi mirada se ensombreció. Crucé las manos, clavé la vista en el suelo. Mis palabras eran sinceras. En mi corazón se había instalado una profunda melancolía. En el fondo sabía que mi marcha era, en cierto modo, comprensible dadas las circunstancias, pero eso no tranquilizaba mi conciencia.

 

––Tienes derecho a enfadarte. A odiarme si quieres. Lo entenderé. Lo que me pasó me quedaba demasiado grande, y he tardado años en aprender a manejarlo. Y aquí estoy, ahora, intentando arreglar lo que dañé.

 

@

35BOZ9V.gifTpCoX6y.gif


aHbQ7xv.png


http://i.imgur.com/cLhW49K.gifhQEsmVo.gif



Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

-No te disculpes más -su voz era más amable de lo que era su rostro, que estaba ligeramente contraído-. Está bien.

Cuando se sentó, su mirada se detuvo en su perfil. Siempre le había gustado su perfil, la forma de su rostro. Suspiró. Estaba triste y no le gustaba verla de esa manera, era como ver un bosque sin hojas. Volvió a notar el parecido con Sísifo y se mordió el labio inferior. ¿Por eso le había gustado él? Pero, en principio, ¿qué hacía pensando en él? Sacudió la cabeza con ligereza para apartarlo de aquel momento y contra todo pronóstico, acomodó la cabeza en el hueco que quedaba entre el cuello y el hombro de Oniria.

-No estoy enfadada. Te odio por irte y dejarme. Pero sabes bien que no te odio. Tampoco tienes que arreglar nada, creo que estoy bastante bien.

Bajó la mano por su brazo hasta meterla entre las suyas, que estaban cruzadas.

-Me alegra que estés de vuelta. Te extrañé -la palabra le supo rara en la boca, así que le besó el hombro para olvidarlo-. Es imposible estar cerca de ti sin pensar en mil cosas que no debería pensar.


@@Oniria

"%20alt=YwwEbg4.gif


"%20alt=


"%20alt=hQEsmVo.gif3lqIQgZ.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Oniria:

 

 

 

 

Cuando su mano se introdujo entre las mías, se me contrajo el pecho. Sentí un gran peso instalándose en mis entrañas, un nudo en la garganta. Avispas. Tenía ganas de llorar. Leah. La besé en el pelo.

 

––Te quiero... ––susurré–– gracias.

 

¿Sabría Leah algo de Sísifo? O más importante... ¿Sabría Sísifo algo de mí? Evidentemente estábamos conectados mentalmente, o al menos yo sentía su voz, sus pensamientos en mi cabeza, pero quizás él no, o quizás habría interpretado que eran alucinaciones auditivas y que estaba volviéndose loco. Hasta donde conocía y había podido investigar, si mis fuentes eran fidedignas, él había estudiado psiquiatría, así que la explicación más convincente que le encontraría a todo aquello sería justo aquella: brotes psicóticos.

 

Mis cejas se habían alzado, mi rostro estaba tenso. No me había percatado, y esperaba que Leah tampoco, pero conociéndola, daba por hecho que no perdía detalle.

 

––Cuéntame... ––comencé, intentando desviar su atención–– ¿Con quién te casaste?

 

Intenté que la pregunta sonara ilusionada, como si realmente me alegrase de su compromiso. Y no es que no fuese así. Sencillamente me rompía el corazón haberme perdido tantos acontecimientos importantes. Probablemente la vida de mis seres queridos habría cambiado drásticamente y ya no serían exactamente como los recordaba.

 

@

35BOZ9V.gifTpCoX6y.gif


aHbQ7xv.png


http://i.imgur.com/cLhW49K.gifhQEsmVo.gif



Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

La pregunta no la tomó por sorpresa aunque sí esperaba que la formulara un poco más adelante, no en ese momento, que seguía admirando la suavidad de su piel. Levantó la cabeza y se irguió, no con incomodidad, más bien como si no supiera cómo debía enfrentar el problema. Y viniendo de ella, era mucho decir. Tardó un par de minutos en responder y cuando lo hizo, tenía las pupilas perdidas en algún punto del local, en las personas que bailaban sin mucho ritmo en el interior. Su voz era muy suave en comparación al resto de sonidos que llegaban hasta ellas.

-Con Taugirl, hace poco más de dos años.

Sabía muy bien lo que aquella respuesta podía producir en Oniria, así que no se movió ni un poco, se limitó a girar la cabeza y esperar su reacción. Tenía una expresión difícil de interpretar pero había algo casi palpable en su rostro y era, sin duda, el hecho de que estaba preocupada. Por ella. Porque le importaba. Porque no quería hacerle daño. Suspiró y miró hacia abajo, viendo sus manos entrelazadas. Oniria siempre había sido notoriamente más blanca que ella y esa visión la reconfortó, le encantaba el contraste. Pero a su vez, tuvo la sensación de que ya lo había vivido antes y no precisamente por ella.

-Creo que he estado alucinando contigo -admitió, alejando una vez más a Sísifo de su cabeza-. Si cierro los ojos un instante puedo recordar todo con claridad. A veces es agobiante pero resulta adictivo.

Rozó la línea de su mentón con los labios, llegó a su boca y volvió a besarla, esta vez no supo por cuánto tiempo.

-Ya, lo siento -murmuró después de un rsto, aunque no se alejó del todo.


@@Oniria

"%20alt=YwwEbg4.gif


"%20alt=


"%20alt=hQEsmVo.gif3lqIQgZ.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Oniria:

 

 

 

 

Aquella afirmación me cayó como un jarro de agua fría. Ese nombre. Un eco entre mis sienes, una piedra rebotando sin cesar contra mis huesos. Un aullido. Apreté la mandíbula. Definitivamente, me había perdido demasiadas cosas, pero no podía culpar a nadie salvo a mí misma.

 

––Entiendo...

 

Estreché su mano, como una muestra de que estábamos en paz. Aunque la sorpresa me mantenía inmóvil, congelada como un cuerpo cubierto por una película de hielo, debía mantener la compostura. Lo último que pretendía era hacerle daño a Leah. Contemplé su cabello. Aquellos destellos de oro viejo. En ese instante me pareció el tono de un metal que se había oxidado tanto como un corazón detenido durante décadas. Bello, vetusto, pero innegablemente desgastado. Puse atención a sus palabras, que me hicieron sospechar de que lo que temía eran más que suposiciones.

 

––No has alucinado... ––la corté–– has conocido a Sísifo.

 

Aquella frase salió despedida de mis labios como una sentencia de muerte, invadida de terror. En ese instante, el frío me propagaba como una peligrosa septicemia, una infección contaminando mi torrente sanguíneo. Quizá eran imaginaciones mías, pero estaba convencida de que no me equivocaba. Algo en la expresión de Leah me hacía pensar que efectivamente sabía a quién me refería.

 

Volví a besarla. Por tercera o cuarta vez tras encontrarnos luego de varios años. Y en nuestros labios era como si el tiempo no hubiese transcurrido, como si ellos perdonaran mejor que la conciencia y siguieran reconociendo a la perfección el camino que debían recorrer. Con los ojos cerrados, se dibujó en mi memoria la silueta borrosa de una bañera, y el dolor atravesó mis tripas como cientos de cuchillas lacerantes.

 

@

Editado por Oniria

35BOZ9V.gifTpCoX6y.gif


aHbQ7xv.png


http://i.imgur.com/cLhW49K.gifhQEsmVo.gif



Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Separó los labios para decir algo pero se quedó repentinamente quieta. La primera vez que lo había visto, cruzando el bar de Pascual, lo primero que había pensado era en ella. Se lo había expresado, incluso. Pestañeó. No había forma de que aquellos dos fueran hermanos, ¿o sí? No... no, podía ser. Sísifo era distinto físicamente, era artístico y poético y... era igual. Era muy igual. Sintió una gota de sudor frío recorrer su espalda.

-No es tu hermano -era una afirmación más que una pregunta, porque ya lo había visto antes-. Ay, por Merlín.

Tenía un enredo en la cabeza monumental y ahora empezaba a preguntarse si había hecho lo correcto al acercarse a él en primer lugar, husmeando en sus recuerdos para vivir una vez más en presencia de Oniria, la Oniria que había decidido volver... La miró.

-Antes has mencionado a alguien, regresaste por él. ¿No es cierto?

Pero algo en su mente hizo click involuntariamente. Una imagen apareció frente a sus ojos, difusa, un recuerdo que no era suyo. Se vio a sí misma en la misma bañera con la que ella estaba soñando desde que la vio. Sin quererlo, le había leído la mente. Todo sus músculos se tensaron con una deliciosa sensación conocida y un calor exorbitante se apoderó de ella. Sabía que Oniria no lo iba a pasar por alto. Enrojeció lentamente ante sus ojos.

-Lo siento, a veces no puedo controlarlo, fue el contacto visual -balbuceó mucho más de lo que nunca había balbuceado.

La bañera, las burbujas aromáticas, su piel. Tenía que empezar a pensar en otra cosa. En Sísifo, por ejemplo.


@@Oniria

"%20alt=YwwEbg4.gif


"%20alt=


"%20alt=hQEsmVo.gif3lqIQgZ.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Oniria:

 

 

 

 

––No, no es mi hermano ––respondí, al principio seria, pero destensando lentamente mis facciones–– no exactamente.

 

Leah debía estar alucinando tanto como yo. ¿Qué tipo de relación tendría con Sísifo como para ponerse tan nerviosa? No me importaba demasiado, pero me preocupaba ligeramente pensar que aquel joven pudiera estar suplantándome de alguna forma, que mis amigos pudieran estar sustituyéndome. No era una posibilidad remota, sino, de hecho, bastante probable y comprensible.

 

––Sí, he vuelto por él, en parte. Y me fui por él, también, cuando descubrí de su existencia e investigué sobre lo que somos... lo que soy.

 

Rasqué mi nuca. Lo que me había destrozado al enterarme de todo aquello era que, en cierto modo, mi identidad era un tanto ficticia. Yo no existía aleatoriamente, de manera casual como los demás. Un mago me había traído al mundo para perpetuarse y había sembrado en mí, en nosotros, su personalidad. Mis pensamientos y los suyos estaban conectados. No sabía qué era mío, propio, auténtico realmente. Había perdido todo sentido del yo, de autopertenencia.

 

Comprobé en el rostro de Leah que se había transportado a mundos más amenos. Por su rubor y su ligera sonrisa, supe que me había leído el pensamiento anteriormente, y que se encontraba inmersa en una bañera construida con hilos de recuerdo. No pude evitar prorrumpir en carcajadas.

 

––Esto es un poco surrealista. Tú casada, yo con un doble al que has conocido, regresando años más tarde... y aquí estamos, como dos adolescentes que siguen manteniendo una promesa de amor.

 

Esbocé una sonrisa. La abracé.

 

––También he pensado mucho en esa bañera. En ti, en general. Me alegro de que algunas cosas no hayan cambiado...

 

@

35BOZ9V.gifTpCoX6y.gif


aHbQ7xv.png


http://i.imgur.com/cLhW49K.gifhQEsmVo.gif



Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

-Es bastante surrealista -asintió enérgicamente y se permitió reír con ella-. Hay muchas cosas que no han cambiado, algunos cambios parecen muy grandes solo por ser diferentes. No ha cambiado mi forma de verte o de buscarte en las páginas de mis libros, en un verso. Tampoco ha cambiado la forma puberta que tiene mi cuerpo de reaccionar hacia ti.

Rodó los ojos, aprovechando el abrazo para acariciar su espalda. Antes solía pasar mucho tiempo haciendo aquello, cuando habían tenido días de ensueño interrumpidos por la maldita de Juliene. Sísifo volvió a aparecer en su cabeza, como un constante recuerdo de que había empezado a liarse con alguien más. Alguien que pertenecía a Oniria, a su vida, a su pasado. Vaciló.

-¿Tengo que preocuparme por él?

Probablemente sí, pero no por lo que pasará entre ellos sino por lo que iba a pasar si alguno se enteraba de qué tan lejos había llegado con el otro.

-Me ha empezado a doler la cabeza de pronto con todo este enredo.


@@Oniria

"%20alt=YwwEbg4.gif


"%20alt=


"%20alt=hQEsmVo.gif3lqIQgZ.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Unirse a la conversación

Puedes publicar ahora y registrarte más tarde. Si tienes una cuenta, conecta ahora para publicar con tu cuenta.

Guest
Responder a esta discusión...

×   Pegar como texto enriquecido.   Pegar como texto sin formato

  Sólo se permiten 75 emoji.

×   Tu enlace se ha incrustado automáticamente..   Mostrar como un enlace en su lugar

×   Se ha restaurado el contenido anterior.   Limpiar editor

×   No se pueden pegar imágenes directamente. Carga o inserta imágenes desde la URL.

Cargando...
 Compartir

Sobre nosotros:

Harrylatino.org es una comunidad de fans del mundo mágico creado por JK Rowling, amantes de la fantasía y del rol. Nuestros inicios se remontan al año 2001 y nuestros más de 40.000 usuarios pertenecen a todos los países de habla hispana.

Nos gustan los mundos de fantasía y somos apasionados del rol, por lo que, si alguna vez quisiste vivir y sentirte como un mago, éste es tu lugar.

¡Vive la Magia!

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.