Un pizzico di Milano (MM B: 111024)

[Wendolyn Maxwell]

Luego de que sirvieran el vino, miré a Heb probar aquel líquido mientras respondía a mi pregunta. De cierta manera envidiaba a mi hermano, el había podido contar con la atención de nuestra madre desde muy pequeño, algo que por razones de fuerza mayor se me había negado. Tomé un sorbo de vino, pensando en lo que él comentaba, y podía concluir que a nuestra madre le gustaba mucho viajar al que una vez llamaron "nuevo mundo".

 

Escuché atenta su pregunta y no pude evitar sonreí ante su última frase, podía sentir como un ligero rubor se instalaba en mis mejillas.- Gracias, también me alegra que seas mi hermano.-Le sonreí mientras jugueteaba con mi copa.- Bueno, ella y yo siempre nos mantuvimos en contacto a través de cartas. Recibía noticias suyas como dos o tres veces al mes y venía a visitarme para mi cumpleaños.- Al finalizar aquella frase muchos de los recuerdos pasaron por mi mente haciendo que me quedara mirando la copa ausente por unos segundos antes de regresar mi atención al joven frente a mi.

 

-Disculpa. Me fui por un segundo.- Reí ante esto algo apenada.- Veamos, cuéntame Heb, ¿qué haces en tus ratos libres, aparte de pasar un lindo día con bellezas como yo o nuestra tía?.- Pregunté sonriendo con diversión, bastante curiosa por saber un poco más sobre sus gustos y aficiones.

 

@@heberth portillo

[heberth portillo]

- Bueno Wen en mis ratos libres, me gusta leer cualquier tipo de libro que contenga buena informacion; asi podre estar saber algo más que me sirva para otra ocasión- le conteste a Wen después de su pregunta - Aunque tambien me gusta practicar los hechizos que se hasta el momento, además comer y dormir que son mi hobby favorito...jejejeje - al decir esto ella no pudo evitar reír conmigo.

 

Nuestras charla estaba bastante interesante, estamos conociéndonos mejor y la verdad mi hermana era encantadora y me gusto mucho estar en el restaurante con ella, Mientras conversabamos llegó el meso con las órdenes que pedimos. - Wowwww, Que delicioso se ve esto - comente mientras el mesero servía la mesa - Ahora si a comer se dijo Wen - dije mirando a mi hermana - Huele delicioso - dije mientras aspiraba el olor de la comida recién servida en la mesa.

 

Empezamos a comer tranquilamente, y seguimos conversando a su vez .- Bueno Wen y a ti que te gusta hacer; cual es tu comida favorita, el color que te gusta, mejor dicho cuéntame todo de ti - le dije mientras servía más vino en las copas. La tarde estaba estupenda y la verdad el sitio, su decoración, su música relajante, daban ganas de quedarse allí por varias horas; la comida estaba deliciosa, hasta ahora empezaba a comerla y ya estaba pensando en el postre, debería ser igual de delicioso a esto, la verdad tendré que venir con mi madre un dia de estos a este lugar, o mejor que vengamos los tres con wen.

 

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[Wendolyn Maxwell]

- Pues tenemos más en común de lo que pensaba, querido. Mis hobbys favoritos tambien son comer y dormir.- Reí ante nuestras ocurrencias. Me encantaba el rumbo que tomaban nuestras conversaciones, la naturalidad con la que platicábamos y la confianza entre nosotros. Claro que el ambiente en donde nos encontrábamos tenía mucho que ver.

 

Bebí un sorbo de vino para pasar aquella risa y el mesero llegó con nuestros pedidos. Heberth tenía razón; los platillo se veían y olían realmente deliciosos. No esperé mucho tiempo antes de llevarme unos pocos ravioli a la boca y masticarlos lentamente para poder saborearlos; realmente estaban exquisitos.

 

-Hmm.. No creo que te pueda contar todo de mi, se me escaparía algún detalle.- Sonreí observando cómo rellenaba nuestras copas de vino.- Gracias. Pero respondiendo a tus preguntas; todo lo que se pueda comer me encanta, excepto aquello que contenga pescado, lo aborrezco.-Hice una mueca de desagrado, de solo pensarlo sentía nauseas.- Me gusta mucho el color azul, y no lo preguntaste pero como extra mi número preferido es el siete. Ahora te toca a ti responder, señorito- Le guiñe un ojo divertida.

 

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Editado 15 de Marzo del 2018 por Wendolyn Maxwell

[heberth portillo]

- Bueno por donde empezar querida hermanita - le dije a Wen después de su respuesta - a mi me gusta caminar por las calles de ottery, mirando las mansiones y demás castillos que se ven por el lugar; además me encantan los animales no mágicos - tomé un sorbo de vino - una vez en uno de mis paseos me encontré un gatito pequeño blanco con manchas negras, sus ojitos eran azules; realmente era bonito, pensé hasta llevarlo a la mansión a escondidas, pero mientras lo acariciaba apareció una niña diciendo que era la dueña y se lo tuve que entregar - Reír después de recordar eso - Bueno en cuanto a colores me encanta el azul y ahora más que nunca ya que entre a Ravenclaw - rei un poco - Me gusta leer uno que otro libro en especial los de pociones, Hechizos y animales mágicos -

 

La comida estuvo realmente deliciosa, pero en cuanto la terminamos mire a Wen - Quieres postre, cierto? - le dije mientras ella miraba al mesero que acababa de pasar con un postre cerca a nuestra mesa; espere a que el mesero estuviera cerca para pedirle los postres. - Disculpa me podrias regalar la carta de los postres - le dije mientras él empezaba a recoger los platos en los que nos habían servido la comida.

 

La conversación era más grata a cada momento, estaba conociendo a mi hermana que era sumamente maravillosa, su forma de pensar era muy linda; a pesar de que mi madre la hubiera alejado de mi lado, sentía como si la conociera de toda la vida y era algo que me hacía sentir muy bien, ni pensar en todas las travesuras que me perdí con ella, ahora tendría todo el tiempo del mundo para empezar a hacerlas; compartir con ella y vivir buenos momentos juntos.

 

El mesero llegó con la carta la cual traía el nombre de unos postres que realmente no sabía ni pronunciar bien, Panna cotta de frutos rojos y canela, Migliaccio Napolitano, Zuppa inglesa con crema pastelera de chocolate, Zeppole Di San giuseppe con crema pastelera, Crostata de mermelada y frambuesas, entre otros más, mire a Wen esperando que ella fuera la primera en pedir.

 

@@Wendolyn Maxwell

[Wendolyn Maxwell]

Adoraba a mi hermano, se notaba a leguas lo buena persona que era, además de muy tierno e inteligente.- A mi también me encanta leer.- Dije sonriendo justo después de escuchar su respuesta.- De niña era lo único que podía hacer, estuve muy enferma durante mucho tiempo. En parte fue por eso que nuestra madre tuvo que dejarme.- Hice una ligera mueca mientras me encogía de hombros.- Recuerdo que mis libros favoritos eran los de encantamientos, hechizos de combates y criaturas mágicas, sobre todo me encantaban estos últimos. En cambio pociones se me da fatal. Tal vez puedas ayudarme con eso.- Le guiñe un ojo divertida.

 

La comida transcurrió con tranquilidad, y hablar con Heb era muy fácil . Nunca había podido entablar conversación medianamente una larga con absolutamente nadie, pero con él era todo lo contrario. Sentía como si todo el tiempo que pasamos separados no existiera, sabía que podía confiar en él. Por fin tendría a alguien con quien compartir mis ideas y tener miles de aventuras. Sonreí al imaginar todas aquellas cosas que podríamos hacer ahora que el destino nos reunía.

 

Poco después de terminar los platos tan exquisitos uno de los meseros pasó con una bandeja con diversos postres. Heb preguntó si deseaba uno y me sonrojé por lo evidente que seguramente fui al quedarme viendo esos manjares. -Me leíste la mente, hermanito.- Murmuré con una pequeña risa al ver que como llamaba al mesero para pedir el menú de postres mientras recogía los platos ya vacíos.

 

El mesero trajo las cartas consigo y miré atenta los nombres de aquellos postres. - Hmm.. Quiero la Panna cotta de frutos rojos, por favor.- Dije entregando la carta, y el joven se retiró en cuanto mi hermano ordenó el dulce de su preferencia.- ¿Hay alguna otra cosa que quieras saber sobre mi?.- Pregunté sonriente mientras esperábamos.

 

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Editado 17 de Marzo del 2018 por Wendolyn Maxwell

[heberth portillo]

En realidad ya no encontraba otra palabra para describir a mi hermana más que una, Maravillosa, es era la palabra perfecto para describirla, su forma de ser y el hecho de hacerme sentir tan bien, no tenía otra palabra más que decir. Me dolió mucho saber que por culpa de una enfermedad creció lejos de mi, pero eso ya no sería así, ahora en adelante ella podría contar conmigo para todo, ya la tenía junto a mi y no le volvería a perder.

 

- Cuéntame lo que tu quieres - Le respondí ante su pregunta, con una gran sonrisa.

 

Wen ya había ordenado su postre, pero estaba vez era yo el que no sabía qué pedir, pensé por varios minutos indeciso por que probar que me tocó usar un método científico muy eficaz para ese tipo de situaciones; puse mi dedo en la carta y empecé a decir mentalmente, "De tin marín de do pingue, cucara macara titere fue, yo no fui fue tete pegale pegale que ella fue" cuando mire nuevamente la carta el dedo había quedado en Crostata de mermelada y frambuesas, le dije mi orden al mesero y este se retiró a traer los postres que habíamos encargado.

 

Me quedé por unos segundo mirando a mi hermana fijamente, y pude ver en ella algunos gestos de nuestra madre, realmente me sentía feliz de tener a mi lado a una hermana, pero ya wen era algo más que eso, se había vuelto en una gran amiga en poco tiempo, de ahora en adelante me preocupa siempre por ella y la cuidaría de todo mal, aunque ahora solo la cuidaría de que no fuera a comer demasiado.

 

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[djvash Asturias]

Ulric elfo domestico atendiendo el local

 

El elfo se encontraba en la planta de arriba reajustando y acomodando todo el destrozo que habían ocasionado las dos señoritas que anteriormente estaban en el local, ellas lo hicieron para molestar al dueño del establecimiento ya que las dejo en medio del recorrido que les estaba dando y para ellas eso fue algo muy molesto, cuando en el instante escucho la puerta abrir, dos personas entraron un joven y una señorita, el mismo pensó que eran una feliz pareja.

 

No les presto mucha atención aun cuando ellos se sentaron para degustar algo de comida. Ulric nunca se había percatado que una persona ayudaba al amo djvash con el establecimiento, ya que le encargo conseguir elfos para poder atender. Negó con la cabeza y después de limpiar la parte de arriba decidió dar el servicio que mejor sabia.

 

—El amo me encargo el local a mí, será mejor que apartes tus narices de esto-- le dijo al mesero en las cocinas y este asintió, después de todo ya había entregado todo lo que le habían ordenado.

 

—Buen día, madame, caballero-- saludo realizando una reverencia —espero se encuentren bien, si necesitan algo más Ulric esta para atenderlos, permítanme mencionarles que el amo djvash Asturias es el encargado de este lugar, pero por el momento no está disponible, y, yo me encargo del mismo cuando él no está

 

El elfo miro a los dos presentes, al parecer estaban muy bien, y no les hacia falta nada. —si llegan a necesitar algo mas no duden en llamarme los atenderé con gusto b]

 

Realizo una reverencia mas prolongada y camino detrás de la barra, era un elfo muy entrometido, pero a su vez muy servicial, cumplía con todo lo que le solicitaban.

 

 

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[Wendolyn Maxwell]

- Es más fácil cuando me preguntan.- Comenté divertida mientras dirigía mi vista al techo, pensando qué otra cosa contarle.- Bueno, ¿te gustan los deportes? En mi tierra natal usualmente no se encuentran muchos fanáticos del quidditch gracias al quadpot, pero a mi me encanta, encuentro fascinante ese deporte, aunque esta temporada ha estado algo floja, ya no es lo mismo, los equipos han decaído muchísimo. Igual sigue siendo entretenido.

 

Estaba por preguntarle si alguna vez lo había jugado cuando un elfo se acercó a nuestra mesa realizando una sutil reverencia a ofrecer sus servicios. Al parecer su amo, el dueño, lo dejaba como encargado del establecimiento en su ausencia.- Gracias, Ulric. Te llamaremos si es necesario.- Respondí amable al elfo, quien realizó una reverencia aún más exagerada que la anterior y se marchó.

 

- Interesantes criaturas, ¿no crees? ¿Tienes algún elfo?- Miré a Heberth esperando su respuesta.

 

El joven mesero se acercó con los postres y sonreí al ver aquellos manjares frente a nosotros. Sin duda mi hermano había escogido un buen lugar para comer, con un servicio rápido e impecable y unos platillos más que deliciosos. Sin mucha demora tome un poco de la panna cotta con la cuchara y la llevé a mi boca; una sonrisa se instaló en mis labios, después del primer bocado. La consistencia era muy suave y su sabor incomparable.

 

Miré el postre de mi hermano con una sonrisa traviesa; pensaba quitarle un poco. Así que procedí con un movimiento rápido a tomar un poco de la tartaleta y comerla antes de que pudiera detenerme.- Está sabrosa, pero no tanto como lo mio.- Dije riendo mientras sacaba mi plato de su alcance.

 

@@heberth portillo

[Valky]

Miró nuevamente el vaso y luego de escuchar que no la dejaría marchar si no se la bebía, se la tomó de un solo trago. Ahora solo tenía que dejar que actuara y recuperar en algo las energías. Dejando de lado el vaso levantó la mirada hacia el mago de ojos verdes, quizá conocerlo no era tan mala idea.

Empezaba a sentirse mejor, aunque en realidad, lo que la bruja necesitaba no era ninguna pócima que le devolviera las fuerzas, lo que ella necesitaba y deseaba era alimentarse. Desde hacía varios días que no consumía nada de sangre y su cuerpo se la estaba pidiendo a gritos, odiaba sentirse así, odiaba su naturaleza y en lo que se había convertido.

Apartando aquella idea y más que todo esa sensación de malestar que le daba tener sed, finalmente hablo, aquello podría ser el inició de una rara amistad entre ellos o quizá no, quizá el pasado y las cosas que sucedieron entre ellos fueran más fuertes, eso solo el tiempo lo diaria.


—En realidad no conozco mucho de ti DJ, tan solo algunos de los recuerdos de ella — comentó—Aunque al estar atrapado como estabas…no creo que hayas cambiado demasiado…— hizo una pausa — Creo que de los dos la que más a cambiado soy yo… así que, ¿Qué te gustaría saber de mí? — preguntó.

Aquella pregunta era como darle vía libre para que la conociera o supiera que había sido de ella en todos los años en los que él había estado cautivo en un medallón.

—Ya que vamos a estar aquí un rato más… me gustaría un poco de tequila — añadió, aquella, luego del vodka era su bebida favorita.

[djvash Asturias]

La observaba atento, como le había mencionado no la dejaría irse hasta que se sintiera mejor. Al parecer ella lo había entendido pues de un sorbo bebió la pócima sin decir mas. La vi como poco a poco recuperaba algo de energía, pero, o quise indagar mas al verla algo cansada.

 

Ya le había comentado que no seria mala idea conocerla, pero, pensaba que eso a ella no le gustaría. Estaba completamente equivocado, puesto que me dijo que no conocía mucho de mi, y era realidad, solo lo que había visto de mi al salir cuando estaba Val.

 

Suspire al escuchar decirme que creía que yo no había cambiado y que la que si lo había hecho había sido ella. Encendí un nuevo cigarrillo al momento que me preguntaba sobre que era lo que quería saber de ella. No esperaba esa pregunta que me dejo un poco perplejo, aun no podía creer eso.

 

Y antes de abrir la boca, me dijo que ya que iba a estar un rato mas si le podía servir un tequila. Me coloque el cigarrillo en la boca y camine al estante detrás del escritorio, lugar donde guardaba todos los licores que había conseguido por mis viajes alrededor del mundo. Tome una botella y le serví en un vaso.

 

--Lo tomas solo o gustas que le sirva algo mas?-- le pregunte --En cuanto a lo otro, que fue lo que te hizo cambiar?-- aun no daba crédito a que me dejara preguntarle sobre ella que mi pregunta fue algo boba.