Osito Mediador: El Escape

[Hayame Snape Potter Black]

Hayame no estaba convencida en lo absoluto, sus pasos parecía que estaban a punto de formar un enorme hueco en medio del piso de aquel departamento de Accidentes justamente cuando este era nuevo; fantástico, otra cosa que le tendría que explicar a Matt si algún día se decidía a regresar como director, el cómo la vampiro se había cargado con aquella zona tan solo por estar girando una y otra vez en el mismo sitio sin sentir que pudiera detenerse y todo por culpa de esa maldita ansiedad que le carcomía y le hacía latir el corazón demaisado rápido

No tenía remedio y al mismo tiempo no tenía salida, era su propia mente la que la estaba castigando y no encontraba una mejor manera de librarse de esos pensamientos que le gritaban una y otra vez; por un momento se cubrió los oídos pero solo hizo que esas voces de culpa la atormentaran aún más fuerte, si no estuviera tanto en sus cabales, ya se habría matado.

-Debí de haberla acompañado, debí de haber ido con ella, yo le había jurado que la protegería toda la vida y eso es lo último que terminé haciendo...

Espetó con tanto odio hacia sí misma que le sorprendía no haberse derretido tan solo por todo ese poder que sentía que estaba guardando por dentro y que quería controlar a toda costa; y por un segundo casi poéticamente irónico, pensó que quizás hasta de esa manera se hacían los obscurus y solo faltaba que ella misma estuviese formando uno

Fantástico, ahora una razón para arrestarse a sí misma

Se preocupaba demasiado.

[Lisette Ryddleturn]

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Una profesora mágica se encontraba llevando en aquellos momentos a los niños magos más pequeños de excursión al ministerio para mostrarles cómo funcionaba y a dónde iban todos los funcionarios todos los días

Les explicaba a dónde iban sus papás, los que trabajaban para el gobierno y lo peligroso de sus trabajos cuando tenían que atrapar a los magos malos que hacían daño a los muggles

 

Y cómo debían de siempre dar aviso de cualquier cosa mala que vieran a sus padres y cómo permanecer silenciosos para que los magos tenebrosos no los vieran y luego, contarle a algún mayor

-Un mago tenebroso!

 

Uno de los niños se había detenido al lado de la cabina telefónica y apuntaba hacia una esquina como si estuviera haciendo el mejor de los descubrimientos

-No se dice en voz alta, Billy

Anunció la profesora con paciencia mientras suspiraba fuertemente, a sabiendas de que iba a necesitar bastante tiempo para que el chico entendiera cómo hacer correctamente las cosas

-Recuerda que si ves uno, debes de esconderte calladito y luego, contárselo a un adulto pero sin gritarle, entiendes eso?

Le dijo y se acercó para palmear la cabeza del niño pero este se movió con cara de miedo y volvió a apuntar hacia un lado de la cabina telefónica a la que se suponía que entrarían de uno en uno para ver su funcionamiento

 

La bruja suspiró otra vez y levantó la vista, para luego darse cuenta de que en efecto había una persona escondida y tirada al lado de la cabina y no solamente eso, estaba sangrando y parecía muerta

-Aléjense hacia allá!... Timmy, aléjate!

Le ordenó la mujer comenzando a agitar la mano hacia un lado y se acercó a la muchacha en el piso para luego tocar su rostro y darse cuenta de que apenas y tenía un poco de calidez

-Merlín...

Susurró y en menos de un momento ya había cubierto el cuerpo y mandaba a gritos a dos de los niños mayores a meterse a la cabina y buscar por ayuda de los guardias para poder salvar a esa joven

Muy herida, quejándose muy suavemente y apenas con vida pero al menos había llegado finalmente a casa y pronto, estaría más segura de lo que había estado hasta ese momento...

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[Hayame Snape Potter Black]

Hayame había ido por unos momentos a revisar los papeles que habían estado preparando por si tenían nuevos trabajadores en Accidentes pero al mismo tiempo, pensaba que estaban perdiendo el tiempo; últimamente no había nadie que quisiera trabajar realmente en el Ministerio y casi podía escuchar los ecos de sus voces por las paredes en blanco, ya que ni siquiera llegaban casos nuevos que no estuvieran relacionados todo el tiempo con la política

Desde las renuncias de los ministros y la elección del nuevo, todo rodaba en política, política y política

Incluso países que solían ser aliados se hacían a un lado como si tuvieran temor a contagiarse de algo que se fuera a convertir en una revuelta a futuro entre sus propios ciudadanos; ella no podía culparlos, salir a Ottery era literalmente ver a las personas encerradas en sus casas y asomándose muy de vez en cuando por las ventanas, con temor a ser levantados o atacados si eran lo suficientemente tontos como para asomar siquiera la nariz a la banqueta

Ya contaba un par de meses desde la última vez que hubieran tenido noticias de Italia y un par de semanas, desde que sus instintos estuviesen en luces rojas, recriminándose una y otra vez por haber mandado a la Ryddleturn sola a aquel trabajo; no importaba cuántas veces Ashley o Babila o Xell o incluso su hermana le dijesen que todo estaría bien, ella seguía sospechando que sus sentimientos no estaban exagerando esta vez

Diablos en verdad que comenzaba a preocuparse y hasta a ponerse paranóica de la falta de noticias de Lisette

 

Movió una mano y le indicó a un par de ayudantes externos que continuasen preparando los formatos de bienvenida y de inscripción, que aunque no sintiese que sirvieran de algo, eran obligatorios; realmente tenía que presentar el registro de que había presentado todos aquellos papeles pero le estaba costando el contentrarse y los muchachitos que iban por el empleo de verano no se lo hacían más sencillo

Una mujer que parecía su clon pero con cabello azul se acercó a la vampiro, sus ojos aqua observándola suavemente para luego, separar los labios pero la pelirroja fué mucho más rápida

-Noticias?

-Ninguna todavía, me temo -musitó la chica temblando un poco por la manera fría en la que la mujer le respondía pero realmente se sentía triste por la otra

-Oye... crees que podrías hacerme un favor?

 

-Por supuesto, lo que necesites -respondió la chica clonada parpadeando varias veces con sorpresa y la pelirroja se apoyó en sus manos, bastante cansada

-Ve a Italia, encuentra a Vicenzo que es mi contraparte en el Ministerio y en el Departamento de Accidentes -le pidió -necesito saber si realmente recibieron a Lisette y si es así, porqué sigue detenida allá cuando ya debería de regresar -indicó pero entonces detectó la mirada de su hermana menor y levantó la mirada bastante hastiada -ahora qué?

Editado 8 de Octubre del 2019 por Hayame Snape Potter Black

[Ashley Peverell]

-¡¡SEÑORA SNAPE, SEÑORA SNAPE!!

Una bruja había llegado de repente hasta donde se encontraba la otra bruja que dejaba ver su desespero y su preocupación por la otra muchacha lo que había terminado por acallar a la Peverell que se quedó con las ganas de hacer algún comentario al respecto pero ella siempre había sido muy educada y sabía que cuando las personas acudían con aquella expresión de alarmas significaba que tenían información muy importante y por eso tenían que dejarlas hablar así que cuando la hechicera que acababa de llegar le dió una tímida mirada a la hermosa niña esta le sonrió de regreso y le dijo con una tierna mirada que podía hablar primero, así que la mujer ministerial asintió varias veces y entonces, se dispuso a hablar.

Entonces Ashley Peverell se acercó a la recién llegada que parecía que necesitaba tomar bastante aire para poder recuperarse porque se notaba que había hecho aquel camino corriendo pero Ashley era comprensiva a pesar de la situación tan delicada que atravesaban y le puso una mano en el hombro para que supiera que la estaban apoyando y que no la iban a regañar por tomarse las emergencias de forma seria como era que debía de ser todo el tiempo.

-¿Qué sucede Madame?

Podía ver que la pobre mujer seguía respirando agitada pero estaba haciendo todo lo posible por recuperarse para poder dar su información y luego, las miró a todas con una cara muy seria y se paró de manera más firme para poder demostrar su profesionalismo.

 

-Encontramos a una bruja que forma parte del Ministerio de Magia porque eso venía en sus credenciales y decía que pertenecía al Departamento de Accidentes pero realmente se ve que la pobre mujer estaba muy grave y no dejaba de murmurar su nombre señora, pero por lo mismo que se notaba que estaba tan grave se la han llevado directamente a la Clínica Médica de Santos Mangos para ser atendida de urgencia, señora. Y se trata de la señorita Lisette Ryddleturn, lo hemos podido confirmar también con su identificación, señora.

[Hayame Snape Potter Black]

Sin pensarlo, la bruja hizo a un lado a su hermana para tomar a quien tenía delante por los hombros y verla directamente a los ojos, como si tuviese el sentimiento de que podría estarle mintiendo; pero no, aunque la mirada de la bruja pelirroja era intensa y el rojo voraz de sus ojos atravesaba el alma de quien tenía delante, podía darse cuenta de que no le estaba mintiendo y que incluso, quizás hasta podía temerse una reacción violenta de la Snape si siquiera sospechaba de una mentira.

Pero de todas maneras, tenía que asegurarse, su corazón palpitando con fuerza no quería llevarse una decepción, porque si no...

-Realmente...? -tragó en seco -estás 100% segura?

Realmente no tenía que preguntarle más, eso era evidente.

Le dirigió una mirada entre angustiada, feliz, llena de sentimientos que chocaban con fuerza a su hermana y a las personas que estaban presentes con ella, como si nuevamente pudiese respirar; la angustia, el miedo y la preocupación sumados a los ataques de los meses pasados, le estaban pasando factura pero no importaba:

Lisette estaba de regreso

 

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Se habían movido a toda velocidad para llegar hasta Ottery y de ahí, a la clínica de Santos Mangos donde como directora se había pasado cualquiera de sus protocolos por el forro, no le interesaba en lo más mínimo; quería ver con sus propios ojos a la chica, quería ver que estuviera respirando y solo porque tenía la consciencia de saber que ese no sería el momento correcto, le preguntaría qué demonios había pasado para regresar en el estado que le habían descrito.

Solo se detuvo lo suficiente por delante del pasillo que la llevaría a la habitación donde le dijeron que estaba la chica y si se aferró al brazo de su hermana menor, fué para estar segura de que no lo estaba soñando.

[Lisette Ryddleturn]

El exterior de la habitación de la muchacha rubia era un caos por todas partes en las que las enfermeras y los medimagos iban de un lado a otro intentando revisar todo lo que pasaba

Las mujeres en especial parecían bastante tristes y algo preocupadas por el estado mental de la Ryddleturn en el interior del cuarto y murmuraban entre sí en voz baja, intentando mantener la calma

Pero era evidente que había algo que estaba fuera de lo normal puesto que trataban de evitar mirar al interior de la habitación y de vez en vez negaban con la cabeza apesadumbradamente

Una de las elfinas de Lisette daba vueltas afuera de la habitación, mirándose las pequeñas manitas con desesperación y entre las piernas de las enfermeras

Y de vez en cuando soltaba unos cuántos murmullos en contra de sí misma, como si lo que hubiera sucedido en aquellas tierras lejanas fuera por completo toda su culpa

Finalmente cuando aquellas personas llegaron, la elfina los vió con sus enormes ojos azules anegados en lágrimas de angustia y de gran tristeza, apenas tomando algo de aire

-Señorita Snape!

Exclamó la elfina con su voz aguda y alta, jadeando con mucho miedo

-Es una bendición ver que ha llegado! Ah de mi pobre ama, mi pobre ama que nunca ha hecho nada malo en su vida y ahora está sufriendo tanto!!

Lloraba la pobre y diminuta criatura estirándose suavemente las claras orejas

[Kiyotaka Ayanokouji]

En los santos mangos.-

 

El mago había ido por una revisión de rutina, a su edad ya no era tan fácil andar de un lado a otro... y mas con tanto daño encima... el mago había vivido una larga vida para el ritmo de vida que lleva... ya que aun no ha tenido la suerte de morir... lo cual quedándose sentado en una silla releía una y otra y otra vez aquel papel que el medico le había dado...

 

--Conmoción cerebral, posiles alucinaciones... migraña... insomio... comprension cevera entre las vertices de la medula... literalmente ya deberia estar en silla de rueda.--

 

Decia con un poco de preocupación hacia el mismo, pero entonces miro a varios elfos y medicos corriendo de un lado a otro, seguido de unas chicas que conocia perfectamente, cosa que suspirando con algo de dificultad se levanto y se acerco a ellas...

 

--Estan bien?.--

[Hayame Snape Potter Black]

La vampiro caminaba con una expresión perdida ahora y demasiado pensativa, con toda la angustia de pensar que la chica rubia podía estar demasiado grave; y mientras andaban, se cuestionaba una y otra vez porqué no había sido lo suficientemente fuerte como para haberse impuesto a las necesidades de las personas de aquel sitio y haber tomado la iniciativa para ir a buscarla por su cuenta sin esperarse a arreglar todo lo que había ocurrido en el Ministerio

Después de todo, ya se había encargado de todos los funerales de los muertos que había aparecido debido a los ataques de los osos que accidentalmente, ella había liberado; y había encerrado a todos los demás que habían sido puestos en libertad por los primeros osos, aquellos que se habían quedado rezagados o sin vender por la gala de San Valentín y que le tenían todavía más coraje a las personas por no darles la consideración que se merecían como seres vivos y mágicos, que tenían la capacidad de hablarles

Apenas y dió un pequeño salto cuando aquel muchacho les habló, levantando la mirada sin notar que habían llegado hasta la puerta donde Lisette se estaba recuperando

Miró un poco a la elfina y luego, a quien acababa de hablar

-No... creo que... -respondió con una sombra sobre los ojos y luego, intentó asomarse un poco al interior de la habitación como si tuviera la esperanza de notar algo en aquel sitio

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[Ashley Peverell]

La niña rubia caminaba rápidamente al lado de su hermana, suspirando porque por fin la veía con quizás un poco de brillo en la mirada debido a que ahora sabía un poco acerca de la persona que la tenía muy preocupada desde su desaparición pero al mismo tiempo temía en cierta manera que eso no fuera suficiente y que la Snape terminara por hacer alguna locura y eso no les convenía a nadie de ellos, necesitaba que la hechicera pelirroja estuviese cien por ciento concentrada en lo que tenía delante y en el ministerio, el departamento de accidentes necesitaba a al menos uno de sus jefes de departamento bien centrado en lo que los mantendría unidos hasta que obtuvieran alguna respuesta de su director de departamento que estaba desaparecido desde hacía demasiado tiempo.

-Morning Glory

La hermosa niña rubia de grandes ojos se acercó a la elfina que parecía estar al borde de una crisis de nervios al igual que su hermana pero no podía darle tiempo para que ninguna de las dos se pusiera a las lágrimas por lo ocurrido y lo mejor era averiguar bien cómo se encontraba la Ryddleturn en esos momentos.

-¿Cómo está Lisette?

Le preguntó nuevamente a la criatura y entonces, observó al hombre mago que acababa de llegar con ellas y pareció mirarlo con un poco de desconfianza, era el hombre que había llegado a la casa de su hermana con antelación y no sabía muy bien qué pensar de él pero si su hermana mayor le estaba respondiendo de todas maneras entonces ella podía hacerlo también, suponía.

-¿Acabas de llegar al pueblo? ¿No te has enterado de la guerra que tiene la Inglaterra de la Magia con los demás países por la profecía?

[Hayame Snape Potter Black]

La bruja observó por algunos momentos a su hermana que era la que le hablaba ahora al chico que acababa de llegar al hospital mientras que algunas enfermeras que estaban alrededor, los observaban; al parecer estaban alertas en caso de que la vampiro pudiese atacar accidentalmente o de forma distraída al recién llegado pero realmente la Snape no parecía tener muchos ánimos para hacer algo como aquello justo en esos momentos

De hecho había dejado escapar un pequeño suspiro cuando vió que su hermana era la que respondía, y decidió finalmente hablar con un tono de voz levemente lánguido

-Como dice mi hermana, en estos momentos el país está metido en una guerra muy extraña

La voz de la vampiro sonaba extrañamente hueco y sin emociones, como si de alguna manera no fuera capaz de expresarse adecuadamente o de reaccionar

-Tuvimos que mandar a una persona a uno de los países donde obtendríamos información importante... de un... -se detuvo por unos instantes y frunció el ceño -esa persona acaba de regresar y nos tememos que se encuentra bastante grave en estos momentos -suspiró y se pasó una mano por la frente -cómo demonios se me ocurrió...?