Kiosko: Una mordida rapidita (MM B: 95066)

[Seba Granger]

-Yo estoy muy bien, gracias- pues la verdad no muchos debían saber que era parte de esta franquicia, hasta a mi se me olvidaba a veces, -Hace mucho que me incluyeron en la sociedad, era el negocio de mi hermana Akiza, aun trabaja con ustedes- bueno eso creía sabia que era un poco dispersa la Ravenclaw y cada cierto tiempo se volvía a perder por todo este mundo.

-¿Quieres tomar algo? aunque tendrás que ser paciente recién me acostumbro a todo esto. ¿Hoy no trabajabas?, ¿Sabes si Darla aun estaba en la oficina?- no podía dejar de preguntar el paradero de mi novia, extrañaba encontrarme con ella en los ascensores o tal vez salir a comer juntos desde el ministerio.

-La verdad que no se muy bien si Darla se acordara que trabajo aquí, creo que se lo comente un día que teníamos mucho trajín en nuestro negocio- la duda se me vino a la mente por algunos segundos mientras me ponía tras la barra para servir lo que la Black me pidiera.

[Darla G Dumbledore]

 

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Kímberly escuchó con atención y algo de sorpresa las palabras de Seba, aunque no entendía muy bien por qué no debía saberse que formaba parte de esa franquicia, aunque se lo respetaba. Asintió al oír el nombre de su compañera de Cuartel y sonrió ante le comentario de que trabajaba con ellas.

 

--Pues por lo que he visto de ella, a veces es despistada y algo perdida, pero hace un buen trabajo, tu novia la aprecia en verdad --comentó la rubia encogiéndose de hombros, sin entender del todo a veces los gustos de su jefa.

 

Las preguntas de Seba iban una tras otra y Kim sonrió divertida, se notaba sus nervios como novato en el lugar, pero eso no le incomodaba, en manos más inexpertas había estado algunas veces. Pensó despacio antes de responder a cada pregunta que el mago le había lanzado como cañón de bolas de práctica.

 

--Me encantaría ¿qué me recomiendas? --dijo observando el cartel con el listado de bebidas para luego agregar --Darla terminaba de tratar un tema relacionado con las citaciones --se detuvo algo indecisa, sabía que el tema era delicado --tú sabes, por los fenixianos revelados, yo salí antes, ella prefirió arreglar sola con la jefa los cuestionamientos de los Warlocks.

 

Asintió una vez más al escuchar lo del trajín en su local, no era de extrañar, la Potter Black andaba enloquecida entre su trabajo ministerial y su hobby y trabajo en el Callejón.

 

--Entiendo, es normal, con tantas cosas a uno a veces se le escapan los detalles. ¿Dijiste que pensaban remodelar? ¿No pensaron hacer un encantamiento agrandador? --comentó señalando el tamaño interior del local que se podría mejorar.

 

 

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[Seba Granger]

Llevaba poco conociendo a Kim, o más bien de algunos años pero luego de separar las oficinas y yo haber dejado de trabajar ahí, no nos veíamos mucho así que no sabía muy bien que podían demostrar sus cambios de rostro.

 

-Si es bastante perdida la verdad- reí un poco, -Pues es bueno que la aprecie, es su cuñada, me gusta que se lleven bien- me seguía sorprendiendo con sus gestos, acaso ella no hablaba mucho con la Ravenclaw, recordaba que la Black tenía un carácter un poco fuerte, por no decir que a veces me había parecido un poco gruñona.

 

Levante un poco la ceja al escuchar su pregunta, sabía que había jugo recién hecho de naranjas, y podría hacerle algún batido, pero no estaba segura si la bruja se estaría refiriendo a eso, o algo más fuerte.

 

Mordí mi labio cuando se refería a las citaciones, sabia o estaba seguro que ella estaba enterada que estaba frente a un fenixiano y en ese momento comencé a pensar como lo estaría llevando Darla en la oficina con ese asunto, siendo que su propio novio era uno de ellos.

 

-Podría ofrecerte alguna bebida refrescante, hay con y sin alcohol, aunque con la segunda opción tendrías que ayudarme un poco- la mire por unos instantes antes de seguir.

 

-¿Aun intentan arrestarla a ella también?, ¿Tu no vienes a dejarme citación verdad?- me encogí un poco de hombros.

 

-Supongo que se podría hacer eso, aunque por ahora lo que se quiere hacer es un cambio de look, cambiar la pintura y cosas así- el tema era cambiado pero estaba casi seguro que podríamos volver a lo del ministerio.

[Darla G Dumbledore]

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Sonrió ante los comentarios de Seba sobre que eran cuñadas y debían llevarse bien, en sus tiempos las cuñadas eran celosas de sus hermanos, lo había averiguado con algún pretendiente que había tenido antes de que Scarlet la convirtiera. Esperaba que al menos su jefa tuviera mejor suerte con la hermana de su prometido. Se quedó pensativa, al descubrir que no sabía bien cómo sería Akiza, ya que no habían tenido oportunidad de charlar mucho en las oficinas con la joven bruja.

 

--Algo refrescante, sin alcohol, hoy no estoy de ánimos para otra cosa, ha sido un día ajetreado y pretendo seguirlo un poco más, aunque seguro has notado que los de nuestra raza no se ven afectados por el alcohol, pero disfruto no solo de ello sino de todas las clases de bebidas, si me entiendes --agregó con gesto de picardía al referirse a los diversos tipos de bebidas --pero un zumo frutal estará bien.

 

Las preguntas de Seba la sorprendieron, haciéndola tensar y viéndolo a los ojos, negó con la cabeza, sonriendo amablemente.

 

--No seré yo quien te cite Seba, tranqui, de hecho ella hubiera preferido no citarte pero no ha tenido más remedio, aunque ha intentando por todos los medios no hacer notar tu presencia en los hechos del Atrio, pero con testigos y El Profeta --suspiró --le fue casi imposible. Y si, uno de los Warlocks, Bastian Karkarov lo ha intentado, enjuiciarla y quitarle su lugar, pero ella ha obtenido información sobre él y sabe que no todos los warlocks lo apoyaron en sus decisiones por lo que no aceptará más sus órdenes, es difícil, ella está muy estresada pero no te lo dirá para no preocuparte.

 

Sabía que en cierta forma estaba traicionando a Darla al contarle a su novio que tan al extremo de sus fuerzas estaba con aquella situación, a veces le gustaría tener la habilidad de obliviar a todos en el mundo mágico para que nadie más recordara quién se reveló o no.

 

--¿Te tomas una copa de jugo conmigo? y te contaré lo último que ocurrió --quizás hablar de ello podía resultar en algo bueno.

 

 

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[Seba Granger]

Reí con el comentario de su raza, si lo tenia muy claro que a ellas no les afectaba nada el alcohol, no es que Darla bebiera mucho cuando estaba junto a mi, pero si sabia que gustaba de algunas bebidas un poco mas fuertes, -Pues corren dos zumos de fruta- dije a Kim mientras buscaba algunos cubos de hielos del congelador, ademas de algunas frutas como plátano, naranja y unos trozos de piña, no era muy asiduo a la ultima pero le daba buen sabor.

Puse el contenido en una juguera y le di al botón para que hiciera su magia, -Si te entiendo bien, aunque no por los sabores, soy como dicen los muggles abstemio- busque unos vasos altos y unas pajillas para ponerle.

Sabia que ella intentaría tratar que pasara desapercibido de aquella revelación, pero si lo había hecho era por que lo había sentido, ademas no tenia nada que esconder, jamas había usado de mala manera mi varita en contra de ningún mago, fuera de mi bando o el otro.

-No te preocupes, solo hay que seguir el curso de la investigación, tampoco quiero que ella se meta en problemas por mi culpa- me extraño un poco lo que de decía del warlock y sus compañeros, pensaba ellos siempre tiraban para un lado.

-Claro que tomare una copa contigo, por lo que ves no es que tenga muchas mesas que atender- dije señalando tras ella que estaba todo tranquilo por ahora, prepare una tabla de quesos, no sabia si a ella le gustaban como a Darla.

Serví ambos vasos y pase uno a Kim, -Espero que este bueno- sonreí con timidez.

[Darla G Dumbledore]

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Era bueno ver reír a alguien, Kimberly lo sabía, había tantos dramas en la vida y en el mundo mágico que la risa del prometido de su amiga le arrancó una nueva sonrisa. Asintió a sus palabras sobre zumos de frutas y se acomodó mejor, disfrutando de aquel momento de relax. Eso también era muy bueno, poder ocupar la cabeza en algo que no fuera el trabajo y el estar pendiente de interrogatorios, investigaciones y demás.

 

--¿Nunca has probado nada con alcohol? --dijo con curiosidad la Black, por su crianza no se veía bien que las señoritas bebieran demasiado, salvo alguna copa de licor, pero luego, como guerrera de la Akane había tenido oportunidad de descubrir un mundo nuevo en todos los aspectos, incluyendo la cultura alcoholica de diversos países.

 

Las palabras de Seba la hicieron regresar a este mundo y a esta época, sonrió negando con la cabeza.

 

--Tú no tienes idea de hasta donde ella llegaría para defenderte, si ella hubiera podido borrar y desaparecer cada prueba que te incriminaba lo hacía y si tiene que oponerse a todo el cuartel para protegerte lo hará, así pierda definitivamente su puesto y... --lo miró a los ojos en forma significativa, ambos sabían qué más era Darla y qué más estaba dispuesta a resignar por él.

 

Seba había mientras tanto finalizado de preparar las bebidas y servía un par de vasos con una mezcla homogenea de colores, donde el aroma a plátanos, naranjas y piña prometían un excelente sabor.

 

--Estoy segura que estarpa genial --dijo Kimberly extendiendo la copa hacia él para brindar --por tí y por Darla, por vuestra eterna felicidad.

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[Akiza Ravenclaw H.]

Días después.

 

Con un leve suspiro, me dirigí hacia el local, estaba con un leve temblor en mi cuerpo, no me sentía nada bien. Parecía que aquello volvía aparecer en mi cuerpo, no lo podía creer...cuando vi la entrada del negocio, me dirigí hacia la parte de atrás para que no me vean esas dos personas que estaba hablando tranquilamente...uno de ellos era Seba y otra persona que realmente no conocía. Seguí avanzando, esperando que Christine esté en las cocinas, así me pueda ayudar con lo que necesito. Al llegar, entré a la cocina me di cuenta que no estaba mi elfina...di un suspiro y sentí como la fiebre comenzó a aumentar y caí al suelo...-Christine...ven acá- dije en voz baja.

 

Apareció un poco malgenia, cómo siempre, así que traté de sonreír lo hacía sin embargo al verme en el suelo, fue directamente hacia mí con la preocupación en su rostro. -Ama...que le sucede- me preguntó y abrió más sus ojos.- No...me diga que volvió esos síntomas.- comentó muy preocupada.

 

-Así es...ya sabes que hacer...-dije levemente antes de que desapareciera la visión y cayera en el mundo de la inconsciencia.

 

Christine, elfina de Akiza

 

Estaba preocupada, ya que su ama se puso mal cómo en esa ocasión que volvió del otro mundo...sabía que no fue atacada, porque no tenía ninguna herida, no sabía que podía volver a reproducirse, sabía que tampoco podía llevarla a San Mungo porque no iban a comprender de que se trate pese que parezcan algo normal. Le acosté encima de una manta mientras que con otra la tapaba, terminé y fui rápidamente a su pequeña oficina que había en el lugar, y comencé a realizar una poción, era un poco compleja, al menos le ha preparado bastante tiempo.

 

Comencé a encender las hornillas, y coloqué los ingredientes, sabía que iba a oler un poco mal y se extenderá por todo el lugar, no me importó, sólo esperaba que no atraiga al nuevo amo, ya que no creo que iba a reaccionar de buena manera. Seguí batiendo y el fuerte olor a madera quemada comenzó a ambientarse en el sitio, así que supe que realmente está saliendo de manera apropiada. Así que esperé que esté lista, mientras ponía compresas frías en la frente hirviendo de mi ama..."Ama que le pasó" pensé preocupada.

[Seba Granger]

-No, nunca he probado el alcohol, jamas me llamo la atención ni en los tiempos de mas joven en las fiestas de colegio cuando muchos quieren probar, me parecía algo innecesario- sabia que era un poco raro que un hombre adulto no gustara ni para compartir con los amigos, pero yo era raro.

-Ella también sabe que por ella haría cualquier cosa, lo que me pidiera, sabe que soy capaz de dar mi vida por la de ella si así es necesario, y se muy bien como es ella, todos estos años juntos me han demostrado lo que ella vale- bebí un poco del zumo que había preparado.

Sonreí con el brindis de la amiga de mi novia, -Por Darla y por mi, daré hasta la ultima gota de mi sangre por hacerla feliz- bebí un nuevo trago para luego ofrecerle de la tabla de quesos.

-¿Te acostumbras a vivir en Londres?- luego de hacer la pregunta dude un poco, la verdad no sabia bien de que lugar venia ella, ni siquiera sabia donde vivía ahora que caía en eso.

De un momento a otro un olor extraño comenzaba a llegar hasta donde estábamos con la bruja, pero estaba seguro que no habían sido encendidas las cocinas, al menos no había llegado nadie que pidiera algo que debiera cocinarse, tal podía ser en los alrededores, por un instante ignore el aroma.

-¿Que opinas de todo esto?, de todo lo que ocurrió en el atrio, no te veo sorprendida con que yo sea de ese bando- comente a Kim mientras que el olor era aun mas fuerte, algo andaba mal, ¿se estaba quemando el local?.

-¿Hueles lo mismo que yo?- estaba casi seguro que para ella era mas potente.

-Un segundo...- comente mientras ingrese al lugar buscando la causa del hedor.

[Patri Gryffindor L]

- ¿En serio era tan débil? - caminaba por las calles del Callejón Diagon sin poder dejar de pensar en lo ocurrido en la Mansión Gryffindor. Ciertamente había ido para conocer a mis familiares pero - ¿dónde había quedado el rencor que sentía por haber sido abandonada? - En ese niño... Desde el primer momento en que el pequeño Gryffindor puso los ojos sobre mí, mi corazón se había hablando. - Le tenía tanta envidia...Él estaba disfrutando de una infancia feliz mientras que yo.. en fin.

 

Había salido corriendo de esa casa, atemorizada. Conocer a todos aquellos Gryffindor había sido duro y, desde luego que no iba a quedarme a disfrutar de su feliz parillada. Molestaria, de eso estaba segura; y ya bastante mal había quedado con derramar aquellas est****as lágrimas recordando mi pasado.

 

No sabía que me había desviado de mi camino hasta que me encontré frente a ese pequeño local. Seguramente el rico olor que desprendía me había atraído hasta él; eso, o el pensamiento de la parrillada que mi maravillosa nueva familia estaría degustando en este momento... sin mí. En cualquier caso, aún no era demasiado tarde para comer y, siendo sincera, estaba muerta de hambre, por lo que decidí entrar.

 

Una vez dentro, tomé asiento en la única mesa de pie alto que había. El asiento era un poco incómodo pero no me tomaría mucho tiempo comer algo e irme, por lo que no me importó. Cuando me hube decidido, un elfo tomó nota y ahí me quedé esperando por mi pedido. Esperaba que no tardara demasiado y que el día pasara rápido.

Editado 4 de Enero del 2017 por Patri Gryffindor L

[Seba Granger]

Llevaba unos días sin pasarme por el local, había tenido muchos asuntos con las nuevas fiestas y la venida del nuevo año, ademas que tenia a mi madre en casa y quería pasar mas tiempo con ella y mi novia, cuando no estaba en el banco intentaba repartir mis horas entre los negocios, familia y bando.

Aquel día pase para ayudar a los elfos con las remodelaciones que aun no terminaban por el clima frió que caía, ademas cada día había que quitar la nieve que caía sobre el quiosco o sobre las sombrillas que cubrían las mesas y trataban que el calor se mantuviera pese a que estaban al aire libre.

Cuando estaba por dar algunas indicaciones a uno de los elfos, divise que una compañera de bando había ocupado una de las mesas, me acerque hacia ella.

-¿Ya te atienden?, ¿Te puedo ayudar en algo?- pronuncie a esta, era mas bien nueva aun, así que no estaba del todo seguro que me conociera.

@@Patri Gryffindor L Disculpa la tardanza.