Jump to content

Matthew Black Triviani

Magos Expertos
  • Mensajes

    3.938
  • Ingresó

  • Última visita

  • Días ganados

    36

Todo lo publicado por Matthew Black Triviani

  1. Matthew Black Triviani Se echó la capa de lana negra sobre los hombros, encima de un sencillo traje de color y unos pantalones de vestir grises, finalmente se calzó su sombrero. La clase parecía ser un poco aburrida, y lo que él debía hacer no podía hacerlo con tantas personas a su alrededor, si bien podría utilizar algunas maldiciones para penetrar la mente del acusado y entender bien que es lo que había pasado, pero eso también dejaría en evidencia que clase de mago era, y posiblemente no terminaría para nada bien. Un atisbo de sonrisa apareció en el delgado rostro del mago, mientras el elfo personal del gitano. Termidor, tenia como afición enfrentarse a los magos que amenazaban a sus señores, se consideraba el adalid de la caballerosidad y acababa por verse en aprietos más veces que las que él mismo reconocía. Claro que Matthew no estaba en peligro, pero no le quitaría aun esa idea de la cabeza... Prefería mantener al elfo con navaja a su lado, alguna vez podría serle útil, pese a su evidente rechazo por su raza. —Imperio—pronuncio en voz baja a unos metros del acusado, su Conocimiento en Maldiciones y también el ser un mago tenebroso le permitían hacer uso de aquel encantamiento que lo ayudaría a manipularlo a su voluntad. Podía haber usado su habilidad en la Legilimancia, pero prefería hacer las cosas a la antigua. Las brujas quemadas en Salem estaban desapareciendo nuevamente por las sombras del salón. Aquella barrera mágica que había implementado para protegerlos de cualquier ataque estaba desapareciendo, pero, Black, siendo diestro en el manejo de las Artes Oscuras, pensó rápidamente en un plan y se apresuro a cumplir con su misión, protegerlos, forzadamente, ya que prefería verlos a todos corriendo por el lugar y rayos viajando en todas direcciones. —Salvio Hexia Levanto la surda, mientras que con la mano que ocupaba su varita, hacia un sutil movimiento hacia abajo, como si cortase el aire. Aquel encantamiento era muy eficaz como Defensa contra las Artes Oscuras. Luego de eso, retomo su camino hacia el acusado, para preguntarle que lo llevo hasta donde estaba ahora, mientras se encontraba con aquel maleficio. Tercer post del conocimiento Conocimiento de Maldiciones.
  2. Turno especial de penales de entretiempo. 3. Athelstan Wessex. Dado de bloqueo + Double Eight Loop vs Sofía Díaz.
  3. @ Martin N Roses , Paso a confirmar que participare como colaborador de las siguientes selecciones: Inglaterra Rumania Egipto
  4. Nombre del equipo: Trolebuss. Capitana: Luciana Aymar Jugadores: Guardián: Sevelinda Parada (Estados Unidos) - -> 8 Golpeador: Carminha Branco (Brasil) - -> 10 Golpeador: Joanne Fontaine (Estados Unidos) - -> 12 Cazador: Dimitry Belikov (Rumania) - -> 10 Cazador: Aedis "Mosquito" Greengrass (Inglaterra) - -> 12 Buscador: Belmont Dubois (Francia) - -> 11 Presupuesto: 8+10+12+10+12+11 = 63.
  5. Partidos Octavos de Final: Inglaterra vs Argentina Italia vs Uganda Escandinavia vs Bulgaria Japón vs Jamaica Brasil vs Egipto Australia vs Rumania Escocia vs Perú Francia vs Estados Unidos
  6. *camina con los talones para que lo escuche* ¿Cómo seso de ke amá tiene novio y vos aprobaste? o_ó ¿CUANTAS VACAS PEDISTE? decime que pediste vacas, necesitamos vacas. 😧 

    1. Jeremy Triviani

      Jeremy Triviani

      Pedí vacas suficiente para formar nuestro propio pais ganadero. 🙊 Seremos los nuevos pasión de gavilanes. (?

      #VacasLocas #TrivianisGanaderos

    2. Matthew Black Triviani

      Matthew Black Triviani

      Es muy mucho importante tirarle caca a los Malfoy :ninja: además de ser una familia ganadera (?) Seguimos por las gallinas.

      #LaVacaLoLa

  7. @ Martin N Roses , entiendo, me habían dicho que viniera y dijera que iba a participar con ese personaje, la verdad no tengo idea de como se maneja, solo hice lo que me dijeron que haga para participar. (?) Tenia entendido (por terceros) que podía seguir inscribiéndome, que habías dicho que no existía problema con ello; parece ser que se mal interpretó todo y el mensaje llego como teléfono descompuesto hacia mí. So... Si mi personaje es de Bulgaria, lo mismo que el de Inglaterra ¿lo puedo manejar yo? o lo hará otra persona? caso que no me gustaría. No entendí muy bien lo de ser colaborador ¿Cuál seria la función de ello? lo que quiero es participar en realidad. Gracias por responder a la brevedad.
  8. —Fue horrible nada más —tomó aire y asintió—. Sigamos, ¿qué más podría pasar? Quizás, había sido demasiado pronto para juzgar la inventiva de la anciana. Observó al muchacho de reojo y no pudo evitar soltar una mueca de sonrisa al escuchar sus palabras —Claro que soy el real, si quieres puedes tocarme, para que veas que no estoy mintiendo. —siempre, sus palabras tenían un doble sentido— Vamos. Sentía que debía protegerlo, una sensación innata que pocas veces tenia, pese a que él, era evidentemente capaz de cuidarse. Pronto un aroma extraño llegó a su nariz y frunció el ceño en respuesta, como si no le gustara. Y es que no lo hacia. Era extremadamente dulzón, lo bastante como para que su cabeza empezara a doler como reflejo inmediato a su olor. Alzo la mano libre, puesto que tenia la otra moviendo las hojas de los vastos arbustos, para tapar sus fosas nasales y no tener que respirar más de aquella cosa. Pero a medida que los segundos pasaban, ya el problema no era el olor y sino la confusión que lo tenia embobado. Se sentía como tener un hechizo encima, uno desorientador, quizás solo era parte de una jugada de la Arcana, sentía que estaban próximos a algo. Hess tenia razón, el lugar estaba repleto de criaturas, tanto inofensivas como extremadamente peligrosas, Matthew aún no tenia la capacidad de comprenderlas, su conexión a ella se basaba mucho en los artefactos Uzza que fue recolectando de sus viajes a las diferentes Islas de los guerreros, pero, Sauda los había despojado de todo articulo mágico, valiéndose por si mismos y sus conocimientos adquiridos hasta el momento. ¿Qué debía hacer? La muralla de cristal que habían encontrado parecía solo permitir el paso a aquellos seres que formaran parte del paraje, el gitano pensó por unos cuantos segundos que podía hacer, utilizar su Metamorfomagia no iba a ser necesario, ya que parecía ser que eso leía las mentes, se alimentaba de los recuerdos y pensamientos. ¿Seria como Caronte? —¿Debemos pagar con un recuerdo para pasar?—preguntó a Hess. En un intento ahogado, tomo su brazo esperando que éste no se lo cortara por hacerlo, cerro sus ojos y concentró toda su energía en un intento de utilizar la Proyección Mágica e intentar pasar hacia el otro lado, pero, para su infortunio, la muralla los rechazó... Debian mermarse con la naturaleza, ser capaces de engañar a aquel organismo y que los dejara pasar. Decidió huronear la mente de su compañero, difícil, por las barreras que había implementado en su mente, pero, por ese momento parecía haberse entregado totalmente a sus recuerdos, Matthew los veía borrosos, pero le dieron una idea... Mientras él pudo lograrlo e invitaba a que pasase por el mismo lugar, se decidió a imaginar los campos de cerezos del Castillo Ravenclaw, donde solía pasar el tiempo con su amado Alexander... Se entregó completamente a ello, y dio unos cuantos pasos, hasta estar del otro lado. —Lo hemos logrado, estamos a unos metros de la Pirámide... Nuevamente. —ladeo su cabeza y juntos caminaron hacia la entrada, donde Sauda los estaría esperando.
  9. Matthew Black Triviani —Ryddleturn... —hizo una breve pausa en sus palabras, lo recordaba, aunque ahora no tenia muy en claro que estaba haciendo para ganarse la vida—. Entiendo, las brujas vigilaran que ningún mago quiera blandir su varita aquí dentro, si eso sucede, ellas se encargaran rápidamente de ofuscar sus ataques. —medio sonrió y continuo jugando por al rededor del estrado, con dirección nuevamente hacia la mesa del acusado y su abogado Macnair. Sus sentidos se alertaron casi de inmediato, su aguda audición había captado un zumbido proveniente de la ante sala, aún con su varita en mano se dirigió hacia el umbral que conectaba ambos espacios y pudo ver una bandada de Imps intentando ingresar al lugar, ¿Qué hacían esas criaturas oscuras en aquel lugar? si bien eran muy poco amenazables, casi inofensivas, eran muy fáciles de manipular por otros magos, Black dibujo una floritura en forma de uve —Flipendo—su varita se iluminó y la pequeña manada de imps habían sido aturdida con aquel conocimiento de Defensa Contra las Artes Oscuras. —Asquerosas criaturas—murmuró mientras pateo una con su pie. Parecían estar siendo manipuladas, por lo que se decidió gracias a sus Conocimientos en Maldiciones, pudo determinar que se encontraban bajo la maldición Imperio. Solo un mago oscuro podría ser capaz de utilizar aquella técnica, sus finos labios dibujaron una sonrisa al ver la perspicacia del invocador, se devolvió a la sala donde se encontraban todos y solo camino hacia la mesa vacía a un costado del acusado, se sentó y aguardó. Segundo post del conocimiento Conocimiento de Maldiciones
  10. Matthew Black Triviani —¿Tribunales? ¿Juicios Mágicos? —inspiró y desapareció cuando traspaso el umbral de su habitación. Brasil - Castelobruxo No entendía muy bien lo que estaba haciendo en aquel salón repleto de personas jugando con sus varitas a ser magos diestros en el arte de la magia, no disfrutaba tampoco el estar rodeado de personas que no conocía, prefería hacer las cosas en solitario, pero, aquello parecía ser interesante, la directiva que tenia el gitano sobre uno de los conocimientos impartidos era observar con delicadeza lo sucedido y determinar que tipo de maldición había sido empleada y determinar si era culpable o inocente. ¿Si lo declaran culpable, lo ahorcarían? en ese caso ¡CULPABLE! gritó en su mente al mismo tiempo que su cuerpo se tenso. Aún recordaba algunos hechizos que podían ser de utilidad para la clase. —Cistem aperio—prenunció y un destello de luz blanca emanó de su arma mágica, abriendo el cofre que estaba a un costado, ahí donde encontraría pergaminos con los Conocimientos de Maldiciones necesarios. No recordaba que alguno de los presentes se hubiera presentado, conocía a sus dos profesores, no recordaba muy bien de donde, pero solo esperaba que los hubiera conocido en buenos términos y no en algún lugar a punto de asesinarlos con un objeto punzante a causa de sus problemas con el alcohol. Con cada paso que daba arrastraba su pesada túnica negra, adornada con cadenas de hierro en los hombros que simulaban ser plata, fastidiado pisaba sus talones en todo momento, esperando hasta sentir una verdadera amenaza en el tribunal, pero Matthew parecía ser el único que sentía algo raro, además de lo evidente. Obvio, su cara de desquicia en todo momento, incluso cuando fingió que no había corrido por medio tribunal en boxes y sin calzado, pero otra vez se vio interrumpido por un comentario de quien parecía ser el abogado defensor. ¿Macnair? entrecerró sus ojos y lo analizo visualmente, sabia que un Mortifago en esa sala era malo, pero, ¿dos? si se trataba de una misión suicida, no estaba enterado, debía tener cuidado, el objetivo de Black era aprobar los conocimientos, no un enfrentamiento, aunque... La diversión jamás estaba de más. —¿Cuál es el delito que presuntamente cometió el acusado?—interrumpió toda conversación sin importarle nada—. No puedo comenzar con mis directivas si no mencionan lo que esta pasando, solo veo que entregan... —observó la mano de Macnair—Piedritas. Parecía que de un momento a otro se había convertido en un fiscal. Se acercó hacia el acusado y dejo caer bruscamente sus manos en la mesa laqueada, intentando que éste temiera por su actitud, —¿Acaso mataste a alguien?—inquirió, con una maquiavélica sonrisa en su sombrío rostro. Se acercó un poco más hacia él —Te felicitaría, pero la verdad es que acá tengo que jugar el papel del bueno—le susurró y volvió a si, mientras acomodaba el traje que traía bajo su capa. Materializo su extensión mágica y por lo bajo invocó el Aura del Escudo Fantasmal, brujas incineradas en la antigua casa de brujas de Salem aparecieron por los rincones del tribunal, posicionándose en diferentes puntos de la habitación, para proteger a los presentes de ataques y eso, serviría como una Defensa contra las Artes Oscuras, al menos por un rato. Primer post del conocimiento Conocimiento de Maldiciones.
  11. Hola buenas tardes, vengo a confirmar que jugaré para Egipto con Georgiev Radev, solo debo cambiar su nacionalidad a Egipto y todo listo. Gracias. 0/
  12. Hola, vengo a pedir los galeones (?) Y un Baby Fénix. Espero que alcance, y no suceda como la última vez '-'
  13. Vuelvo a pedir la entrada, quiero conocimientos y la modalidad de Castelobruto es horrible. 😅 así que vengo a acumular tiempo para poder cursar *o* Nick: Matthew Black Triviani ID: 121315 Link a la ficha: https://www.harrylatino.org/forums/topic/111218-ficha-de-matthew/ Y también a espiar a la Ericen
  14. Que quilombo son ahora los conocimientos, de haber sabido no gastaba galeones. 😒 No sé emplear un conocimiento que supuestamente estoy "aprendiendo" '-'

    1. Jeremy Triviani

      Jeremy Triviani

      Amén. 

      Coincido completamente. xD Tampoco me agrado el cambio. Lo vi innecesario. 😧

    2. Matthew Black Triviani

      Matthew Black Triviani

      @ Jeremy Triviani , no entiendo las mazmorras, imagínate un conocimiento mesclado con eso, tengo que rolear algo que supuestamente estoy aprendiendo, lo cual no es problema, pero me gustan las clases más... Es como comer la pizza con tenedor xD. 

    3. Jeremy Triviani

      Jeremy Triviani

      Si, lo entiendo. xD A mi me gustaba también la otra forma. Se me complica mucho seguir el hilo de toda la clase, leyendo cosas que no son necesarias para mi rol, pero si lo son para la coherencia de la trama. Por eso no me anote este mes. D

  15. ¿Se pueden hacer mazmorras? 🌚

    1. Rory Despard

      Rory Despard

      De las que están en Ilver?  Entiendo que sí D;

    2. Sagitas E. Potter Blue
    3. Matthew Black Triviani

      Matthew Black Triviani

      ¡Gracias! Me toca ver cuál puedo, y si hay de grupo reunir a ver quiénes quieren. 😂💛

  16. Nombre del Negocio: Hell Moon Link a la Bóveda del Negocio: Bóveda Nº110639 Trámite a Realizar: Modificación de bóveda. Actualizar nick de dos propietarios: 1.- Link del tópico de la ficha del o los dueños y links a sus respectivas bóvedas personales: Malum Luxure || Bóveda - 25% Matthew Black Triviani || Bóveda - 25 % Gracias.
  17. Matthew Black Triviani —Simplemente no lo hago, una parte de mi solo desea poder arrancarte las extremidades sin algún tipo de remordimiento. —dibujo una media sonrisa mientras acariciaba su cuello, estaba seguro de que en sus oscuros ojos podía verse reflejada la piel nívea de Alexander—. Pero algo dentro me detiene, y solo me hace protegerte, cuidarte e incluso, esperarte... —¿Egoísta, dices?— soltó una carcajada y dejo caer su cuerpo en totalidad en la cama. Estiro su azabache cabellera hacia atrás con ambas manos, acompañando aquel gesto de un suspiro. ¿Por qué se había quedado? aquella pregunta que recurría a su mente a diario, nunca había tenido una respuesta, simplemente no quería encontrarla, solo sentía algo, y hacia mucho tiempo que eso no sucedía, por lo que solo decidió conservarlo, quizás por el mero hecho de sentir que pertenecía, que tenía... Afecto. Mientras expresaba sus sentimientos, Matthew recorría con sus labios la mejilla de él, disminuyendo la velocidad al llegar a la comisura de sus labios, su respiración se había acelerado y su mano izquierda rozaba de nuevo el abdomen; levantó la mirada, misma mirada que ahora estaba cargada de deseo y travesura; sonrió y rozo sus labios con los de él mordiendo ligeramente la línea de su labio inferior. —¿Seguro que huyes de mí, y no de tí?—preguntó en un susurro al alejarse unos centímetros de sus labios para luego morderle el labio inferior. —Me genera orgullo que pudieras aceptar quien eres en realidad, lo que sientes y aprendas que tu independencia no depende de nadie, más que de tí. —justo, cuando estaba por decirle cuánto lo deseaba, se percato que Termidor seguía allí, por lo que con un ademan de su mano izquierda lo despachó.
  18. Nick del usuario: Matthew Black Triviani Link a la bóveda del usuario: Bóveda
  19. Hess era un muchacho algo peculiar. Aún lo recordaba cuando fue su alumno en una clase de hace mucho tiempo... Estaba seguro, que el encantamiento les mostraría caminos diferentes. No obstante, logro mantenerse tranquilo por lo que quedaba de arena. Dentro del bosque, los arboles frondosos adornaban su camino y dejaban respirar incluso mejor a sus pulmones, como si estuvieran exhalando todo el oxigeno que el y su cerebro necesitaban en ese momento. La bifurcación no estaba muy lejos de donde habían empezado a andar y cuando la diviso, hubo un extraño silencio mucho mñás pesado que el que habían estado manejando hasta entonces. Las pupilas de Black pasaron primero en el camino de la izquierda, donde habían luces y plantas de colores, y luego hacia el camino de la derecha, donde todo era oscuro y mucho menos agradable que el primero. Cuando se detuvo, creyó saber lo que Ollivander estaba pensando, por lo que decidió robarle la idea al instante. Apretó sus dientes, sonriendo, dejando relucir algunos de ellos chapados en oro. Después de guiñarle un ojo, renuente a dar un discurso de despedida porque se encontraría en cuanto pasaran el segundo tramo hacia la pirámide, se adentro en el camino oscuro y tétrico de la derecha, metiendo su mano entre los tapujos de su túnica, buscando la varita como un reflejo automático a lo desconocido, pero... ¡SAUDA! gritó en su mente, ella la había tomado. El sol parecía haberse apagado ahí dentro. Las hojas de los arboles y sus largas ramas parecían unirse como un pesado nido de algún arácnido fantástico hecho de madera, cerrando el paso de la luz y el aire que había estado apreciando en un principio. Y por supuesto, más que asustada parecía maravillado. Aquello era una expresión de cólera en la misma naturaleza y le encantaba. Pero pronto algo se interpuso en su camino y perdió la sonrisa, un poco de calor que portaba orgulloso en sus mejillas y la seguridad de quien sabe todo va a salir bien; una baúl de cuatro cajones, blanca como para que la viera incluso en la penumbra, se sacudía ligeramente cada cierto tiempo mientras que una de las gavetas amenazaba con abrirse una y otra vez. —Un Boggart... Entrecerró los ojos y, hizo uso de su metamorfomagia, Aailyah no había prohibido la utilización de sus habilidades aprendidas, simplemente, el uso de artefactos mágicos, los cuales Matthew se había despojado. Su cuerpo adopto la figura de una pequeña niña de diez años aproximadamente, sus ojos se tornaron color verdes, grandes, como los de un elfo, su piel extremadamente nívea y una voz melodiosa para intentar engañar a aquel No-ser. Se quedó observando cada sacudida como hipnotizado, escondiendo sus ahora pequeñas manos detrás, haciendo que de sus extremidades crecieran las características garras negras que su Licantropía le proporcionaban. No tenia miedo a un Boggart, sino a lo que pudiera ver en él en un principio. Era una persona que se caracterizaba por conocer tanto sus debilidades que las evitaba constantemente, casi olvidando que existían. Pero, ¿realmente estaba listo para saber cual era el peor de sus miedos? Tragó saliva, lanzando un pequeño insulto inofensivo a Sauda con el muro mental alzado, sabia que ella podía oírlo, incluso, estaba seguro que se encontraba escondida entre los arbustos observándolo como una acosadora. Conforme se aceraba, los movimientos eran más violentos, se notaba que la criatura lo sentía. Y sin más abrió el baúl. La potencia de la magia lo mandó hacia atrás unos cuantos pasos, los que tuvo que maniobrar con manos y pies para no caer preso del viento que había salido de la gaveta. No había nada flotando, ni al frente, sino más bien abajo, ante sus pies. Como si alguien hubiera succionado la vitalidad que movía su cuerpo, el color de su piel bajó hasta darle un parecido bastante grande con una hoja de pergamino, acompañando los temblores que pronto sacudieron su cuerpo tanto o más que la cómoda segundos atrás. A sus pies, tendido en una posición anómala, Keaton miraba al infinito con la expresión de horror aún plantada en su rostro. Sangre, aquí, allá, por todos lados. —No, no —murmuró, ya sin demasiado equilibrio, al tiempo en que sus extremidades fallaban y lo hacían descender el nivel hasta quedar sentado en la tierra. Sus ojos reflejaban el pánico que estaba sintiendo, aun cuando algo muy en el fondo de su cabeza le recordaba de forma constante que todo era una jugarreta del No-ser. Pero, ¿por qué era tan real? no podía dejar de mirarlo, ni pensar en nada mas que el terror que le provocaba haberlo perdido. Cerro los ojos con fuerza, aspirando por la nariz todo el oxigeno que le faltaba y soltando el carbono como un bufido desesperado, antes de abrir los ojos. No, no lo había perdido, él estaba bien, en algún lugar... Tomo impulso y se levantó, observando aquella situación, pensando en una totalmente distinta, en un viejo miedo, que logro superar, una Acromántula se había formado intentando atacarlo. Simplemente la miró y continuo su camino. El efecto fue inmediato en la criatura y pronto, lo que era horrible, paso a ser la cosa más risible de la vida. Avanzando a paso veloz por el bosque. Tardó mucho menos de lo que hubiera tardado caminando y llegó agitado al otro lado, donde aún no había nadie. —¿Ollivander?—dijo en voz baja, atreviéndose a mirar hacia el otro camino.
  20. Nick: Matthew Black Triviani ID: 121315 Nivel: 44 Conocimiento: Conocimiento de Maldiciones - Defensa Contra las Artes Oscuras y si me dan los galeones, Idiomas. (creo que puedo hacer 3)(? Link a la Bóveda: https://www.harrylatino.org/forums/topic/111237-bóveda-de-matthew-b-triviani/ Link a la Ficha: https://www.harrylatino.org/forums/topic/111218-ficha-de-matthew/
  21. Matthew Black Triviani —Hay cosas que se escapan de tí, aunque seas mi esposo. Rendido en sus brazos, luego de aquel beso, sus labios se movieron al unísono de aquella palabra. Matthew simplemente sonrió y se dejo golpear por la maldición que su amado durante tantos años, expulsó contra el. Pudo sentir el escozor por cada parte de su cuerpo, sus puños se habían cerrado y sus garras habían aflorado, generando cortes en ambas palmas por la fuerza ejercida, para intentar así, soportar el dolor de aquel fugaz rayo escarlata. Su cuerpo había chocado violentamente contra la pared, haciendo que varios cuadros de la habitación se cayeran al piso, una mofa se figuro en sus facciones mientras tocaba su abdomen y quejidos involuntarios emanaban de el. Cerro los ojos por unos segundos y se dejo caer completamente, regresó las pupilas a Keaton. Le gustaba pensar que aquella personalidad perduraría. Lo vio. Una persona como Black sabia reconocer la desesperación, porque solía causarla una y otra vez en sus enemigos, en los que le temían. Pero la expresión de Alexander no se parecía en nada a ese tipo de desesperación. Él pedía a gritos ayuda, su ayuda. Era curioso pensar como se había reído hacia unos años de aquella expresión, en todos los comentarios punzantes que se le habrían ocurrido en un segundo a raíz de aquellos ojos vidriosos y en como, ahora era incapaz de verlo a los ojos sin sentir la necesidad de ayudarlo. Se levantó entre el pequeño alud de polvo que la descarga de magia había generado y como pudo se acercó hacia sus aposentos, para caer a un costado del pelinegro. Suspiró. —Cuanto aumenta tu poder se desata el verdadero Keaton, que paradójico —chasqueó los dedos y de pronto el vaso de Ginebra fue remplazado por el elfo domestico personal de Matthew, en silencio—. También te amo, Alexander... De lo contrario, no estaría aquí, no hubiera dejado que me ataques... Pero me haz hecho vulnerable, perdí la magia y la razón. Regresando la bebida a sus labios, ésta vez se permitió saborear. La primera acción fue casi como quemar su garganta para que las palabra duras emergieran, ahora tocaba relajar sus cuerdas vocales para el relato que seguiría a continuación; el lema de la familia por algún motivo siempre hacia retumbara la voz de su padre en las paredes del cráneo. Se giro apoyando su cabeza en el brazo derecho, mientras acomodaba sus cabellos alborotados y secaba las lagrimas de Triviani, como él, había jurado nunca amar a nadie, pero en el fondo de su oscuro corazón, Alexander pudo hacerlo sentir y por consecuencia, prometió protegerlo, amarlo y siempre esperarlo, aun si fuera el fin del mundo, siempre lo esperaría en la terraza donde se habían conocido, en aquella sombría y bella torre. —Te ves tierno cuando lloras. Aunque para serte sincero, tu personalidad malvada me agrada más. —rodeo su rostro con la gema de sus dedos hasta llegar al mentón para proporcionarle un suave beso en la comisura de los labios. —Creo que me he acostumbrado a tu abandono, pero ¿volverás a irte? siempre regresas, nos amamos, y vuelves a desparecer, como si estuvieras huyendo de alguien—hizo una pequeña pausa— Ha pasado tanto tiempo, y tantas cosas con el.
  22. Matthew Black Triviani Sus pasos seguros lo guiaban a través de los terrenos Ravenclaw, donde el rumor de amenas conversaciones lejanas lo tenían sin cuidado, así como todo lo demás. Tenia los ojos fijos en aquel papel, un pergamino extendido entre sus elegantes manos donde la tinta brillaba tanto que era imposible ver algo más que el mismo nombre de Alexander. Black veía perfectamente, su tinta era mate, y el contenido insignificante, pero dentro de sus prioridades, se encontraba el saber si realmente era verídico aquel mensaje o se trataba de una juerga de Hawthorne. Anhelaba con todo su podrido corazón, encontrarlo nuevamente. Apareció en la sala de los Ravenclaw, en un abrir y cerrar de ojos, como era su costumbre. Suspiró después de un rato de silencio, no tendría mas remedio que comunicarse con el elfo. De reojo, miró al sirviente, aún encorvado en una reverencia, y una mueca de disgusto se dibujo en sus facciones bonitas. Detestaba a aquellas criaturas, tal vez demasiado, razón por la que él y sus primos habían optado por tener Squibs en su lugar; inservibles en igual medida, pero al menos no tan desagradables. —Busco a Keaton, ¿dónde puedo encontrarlo? El elfo balbuceó un par de sugerencias y el pelinegro asintió, sin darle tiempo a más explicaciones. No obstante, se detuvo al pie de las escaleras y solicito una ultima cosa, antes de aparecer arriba. —Tráeme un poco de Ginebra en cuanto lo encuentre, tal vez dos —subió sin decir nada más y la mueca de su rostro desapareció al tiempo en que un estruendo proveniente de la partida del elfo retumbo en la sala—. Esplendido. Una leve brisa llegó hasta él, y al parecer en un descuido Alexander dejo escuchar sus pensamientos, por lo que rápidamente pudo saber donde se encontraba, en la vieja habitación que compartían, apretó sus pasos hasta llegar a ella, y con una floritura de su varita hizo que se abriera violentamente... Frente al gitano, estaba él, con su estilo tan muggle, sus ojos oliva resaltaban con la escasa luz de las velas, su cabello perfectamente desordenado. —¿Debería asesinarte acá mismo? —apretó con fuerza a Frida. Se mordió el labio, tomó el vaso que el elfo posaba en una bandeja de hierro símil plata, recurrió al alcohol y ahogo cualquier quiebre que podría haber tenido. Secó sus lagrimas, adoptó un semblante sombrío y trató de comportarse como el hombre que era entonces. Se acercó hacia su en aquel tiempo esposo, lo rodeo por la cintura y simplemente lo beso sin darle tiempo a una explicación.

Sobre nosotros:

Harrylatino.org es una comunidad de fans del mundo mágico creado por JK Rowling, amantes de la fantasía y del rol. Nuestros inicios se remontan al año 2001 y nuestros más de 40.000 usuarios pertenecen a todos los países de habla hispana.

Nos gustan los mundos de fantasía y somos apasionados del rol, por lo que, si alguna vez quisiste vivir y sentirte como un mago, éste es tu lugar.

¡Vive la Magia!

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.