Adrian Wild

Puntos de Vida: 100 PV Puntos de Poder: 7 PP - 1 PP (Cinaede) = 6 PP - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - Aunque temía de los posibles efectos favorables que pudiera causarle aquella Rueda del Caos a Bakari, me sentí aliviado al ver que, efectivamente, había ganado tiempo con la fortuna de la rueda anteriormente invocada y aquella maldición que le había lanzado. Tras un infructífero hechizo por su parte y mi protección de los sentidos, sin embargo, vi un gran número de filamentos de fuego volando hacia mí. Por suerte, el espacio que nos distanciaba era el suficiente como para que me diera tiempo a generar a mi alrededor un «Obsistens» que absorbió por completo toda aquella andanada ígnea. Sobre el domo que nos protegía, aquel huracán parecía crecer y expulsar rayos en todas las direcciones. La tormenta era ahora un gigante sobre nuestras cabezas, furibundo, que parecía imbuir todo a nuestro alrededor de auténtico Caos. Pensé en invocar a uno de los Señores del Caos, pero todavía no me sentía preparado para enfentarme a uno al que no pudiera controlar después. Necesitaba ganar algo más de tiempo. — Úsala... Úsala... —Las voces del Caos se arremolinaron en mis oídos. No tuve que preguntar a qué se referían. Bakari ya me había dado aquella respuesta. — Invoco la Rueda del Caos —dije, haciendo aparecer en la palma de mi mano el dado de diez caras que lancé al aire. La rueda que había aparecido sobre mi cabeza comenzó a girar. Y desapareció. No senti nada especial, pero no podía perder más tiempo. — Cinaede. El gas venenoso recubrió al instante la figura del Guerrero Uzza y provocó graves heridas en todo su sistema respiratorio. Aquello me daría el tiempo que necesitaba. Bakari necesitaría limpiar sus conductos con un "Anapneo" de inmediato, pero aún así le quedarían secuelas del daño ya producido, así que si quería curarse del todo debería detenerse a ello. Esperaba que tomara aquella decisión, pues en el fondo sabía que aquel Guerrero estaba más que acostumbrado a sufrir heridas y continuar con la batalla. - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - Resultado del dado para la Rueda del Caos:

ID: 83911 Nick: Adrian Wild Link a la Bóveda Trastero: Bóveda Nº107285 Link a la Bóveda de la cual se hará el descuento: Bóveda Nº78776 Link a Tópic de la clase o a la prueba: Prueba Nivel Mágico: 25 Fecha: 2022-03-24 Nombre del producto: Libro de los Ancestros Consumible o Libro de Hechizo: Libro de Hechizos Nivel (del libro): 25 Precio: 25000 G Precio total: 25000 G

Hola @ TwilightNad ¡Puedes rolear donde quieras! Por supuesto. Esto es simplemente un espacio más de rol y para que vayas "pasando" por tareas para con tu personaje, que vayas asimilandolo y creandolo. Recuerda de hecho que tenemos la tarea de rolear en una familia que quieras, así que solo tienes que lanzar rol y me dices donde y te sigo. Siéntete libre de explorar y rolear donde te plazca de toda la zona de rol.

— Dos han rastreado uno de los minerales hasta algún punto del océano Pacífico, pero dicen perder el rastro en las proximidades del archipiélago de Chiloé. Otro se encuentra en Ottery; ha presenciado la aparición de una repentina tormenta por toda la zona residencial. Los demás siguen con la búsqueda. Eric me daba aquella primera actualización de lo que los rastreadores habían logrado averiguar en apenas unas horas. Dos humeantes tazas del segundo café negro de la mañana reposaban sobre mi escritorio, lleno de papeles y un mapa en el centro, donde íbamos marcando localizaciones, realizando anotaciones en los márgenes. Un cuaderno de tapas negras estaba abierto sobre este con un párrafo a medio escribir. La pluma estilográfica descansó bajo mi mano cuando alcé la vista hacia el secretario. — ¿Crees que la tormenta de Ottery está relacionada con el huracán de la primera planta? — ¿Se sabe el lugar exacto que la ha podido originar? — El rastreador está lidiando con el temporal, pero cree haber visto una especie de cúpula conteniendo "algo brillante y vientos desenfrenados" en unos jardines que bien podían pertenecer a la familia Gryffindor. — Entonces, ¿tú que crees, Eric? ¿Son las rosas rojas... Rojas? Mi afilado y soberbio comentario pareció molestar al hombre, y con razón. Hizo una mueca con la boca y suspiró profundamente. Estaba frenando las palabras que se le agolpaban en la garganta para no contestarme de mala manera. Tampoco me hubiera importado que lo hiciera; estaba en todo su derecho. Finalmente pareció recomponerse y acertó a decir: — Tenemos que ir a Ottery. — Tenemos que ir a Ottery —confirmé, con una sonrisa satisfecha. Eric dudó unos instantes cuando hube recogido todo para dejarlo a buen recaudo en uno de los cajones sellado mágicamente y me dispuse a salir del despacho, con la capa ya sobre mis hombros. — También he escuchado en la radio que unos muggles han abierto fuego en Stonehenge. En principio está todo bajo control, pero se esperan más altercados. — Pues que los esperen. ¿No están los departamentos de Seguridad Mágica y Accidentes perimetrando la zona y protegiéndola? —pregunté, convencido. — Sí —afirmó Eric. — Entonces estoy seguro de que serán capaces de resistir. No quería sobrevalorar la labor de ambos departamentos, pero no podíamos hacer allí mucho más de lo que ya se estaba haciendo y tratar de dar con uno de aquellos minerales y su propietario era prioritario frente a cualquier otro asunto. Y más cuando parecía que Mael no tenía el control sobre lo que aquella esfera era capaz de causar. — Vamos Eric, tenemos que llegar hasta uno de esos minerales y su dueño antes de que cualquier organismo se lo quite y el desastre pueda ser aún mayor. El hombre asintió y ya por fin habíamos abandonado el despacho, dirigiéndonos hacia los ascensores, cuando al abrirse las puertas del que esperábamos, un memo con forma de avioncito de papel me dio directamente en la cara. Chasqueé la lengua molesto y lo abrí con un profundo suspiro. — mier**. Eric me miró sorprendido por mi franca expresión. Solía mantener bastante las formas cuando me encontraba con mis empleados de la oficina; quisiera o no, el Ministerio todavía se cubría con capas y capas de protocolos, etiquetas y formalidades, algunas de ellas bastante arcaicas, y siempre era mejor mantenerse dentro de los márgenes que determinaban el "correcto comportamiento de un alto cargo ministerial". Imagen, siempre la imagen sobre todo lo demás. No me disculpé ni dije nada más. Le pasé la nota al secretario para que la leyese. Me citaban en el despacho del Ministro lo antes posible. — Voy a Ottery, te mantengo informado —dijo Eric, sin pensarlo dos veces. Aquella iniciativa por parte del hombre me agradó, aunque me preocupaba bastante que fuera solo y le pasara algo o pudieran descubrirle. Sin embargo, no teníamos tiempo que perder. — Ten cuidado, Eric. Sé discreto. El hombre me miró fijamente con sus ambarinos ojos y asintió, desapareciendo por las escaleras. No quiso ni esperar a que llegara otro ascensor para él, dejándome que cogiese yo el que ya estaba ahí para ir a la primera planta. No tardé en llegar frente a la puerta de las oficinas del Ministro. Toqué con los nudillos un par de veces, esperando a ser atendido. «Tanto tiempo sin vernos y vaya un momento para citarme, Rory», pensé tratando de apartar de mi cabeza todo lo demás. Confiaba en que el ahora Ministro de Magia no cometiera la indecorosidad de usar ningún tipo de habilidad como la legeremancia, pero a falta de oclumancia con la que poder proteger todo lo que pasaba en aquel momento por mi cabeza, tenía que evitar que lo ocurrido rondara por ella a toda costa. Llamé a la puerta con dos golpes. Ah, espera... Si ya había llamado. @ Rory Despard

Bueno, bueno, ¡bueno! Vaya pedazo de cacho de resumen XD Fan, fan, fan. En mi parte tengo que hacerte una pequeña corrección, espero que no sea tan confuso mi segundo post en el rol. En esta parte que dices: Los rastreadores no van a internarse en los monolitos. Es el contacto del departamento de Misterios (supuesto Inefable) el que, a cambio de poner a Adrian y a Eric en contacto con el equipo de rastreadores (que lo que van es a buscar a los poseedores de los minerales), él, el Inefable, sea parte del equipo especializado que entre en los mundos de los monolitos más adelante, cuando se inicien las investigaciones en estos, porque el propósito de Adrian es que antes de que nadie más pueda entrar a los mundos, haya un equipo formado que revise la viabilidad de las investigaciones, mundo por mundo, y que haga informes de la situación de cada uno, protecciones y medidas de seguridad, etc. Ese será el anuncio oficial que haga a los medios una vez haya comprobado que los minerales no se van a usar para el mal ¬¬ jajajaja Ese es el propósito y la trama que se me ocurrió para darle chicha :3

Puntos de Vida: 100 PV Puntos de Poder: 7 PP - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - Tras desvelar a los dos últimos Señores del Caos y mientras terminaba su explicación, Bakari me condujo hacia una zona alejada de donde habíamos estado hasta entonces, dejando a Martin aparte de lo que fuera a ocurrir a continuación. La tormenta pareció enfurecerse aún más cuando el ultimo de los Señores del Caos, que gozaba del privilegio mismo de llevar dicho título por su imprevisibilidad, apareció en la sexta porción de aquel gran círculo de piedra. El viento rugió y los truenos y relámpagos parecieron fusionarse en un huracán que hizo vibrar todo el espacio, amenazando con destruir el domo de protección que impedía que aquel temporal nos llevase consigo. Las voces del viento, hasta entonces difíciles de entender, se hicieron totalmente comprensibles para mis oídos. Era el Caos, susurrando los cambios en su interior, esas corrientes, como las de aire que nos azotaban, que iban de un lado para otro, y a las que podías sumarte o dejar pasar. Era toda esa energía suelta y descontrolada que cruzaba por todos los recovecos del cuerpo y te permitía atraparla durante unos instantes para tratar de canalizarla hacia algo concreto. El Caos me estaba hablando; me decía que podía hacer uso de él y que quizá, y sólo quizá, pudiera ayudarme. Un tremendo respeto por hacer uso de semejantes fuerzas me inundó y temí no ser capaz de demostrar que podía canalizarlas. «¿Cómo conseguiré que el Caos me sea favorable?», pensé. Cada vez que vuelvo a aquel pensamiento me doy cuenta de que todavía no había entendido del todo lo que significaba que "el Caos te sea favorable". No era cuestión de aprender a dominarlo, sino de adaptarse a su aleatoriedad. Bakari invocó a una de las ruedas tras advertirme que tuviera cuidado y estuviera alerta en todo momento. Asentí, apretando los dientes ante su invocación, y antes de que pudiera decir o hacer nada, el Guerrero ya me había cegado con aquella nube de huesos cristalizados. Sentí el fuerte escozor y tuve que cerrarlos, pero no me amedranté. El Caos me susurró. Tampoco dudé. Tenía que atrapar aquella oportunidad. — Invoco la Rueda del Tiempo. —Un dado de tres caras apareció en mi mano y la rueda giró sobre mi cabeza, aunque no pude verla. Lancé el dado y confié en su efecto. Supe que había sido el deseado cuando, con una ráfaga de aire que pareció crear una onda expansiva, recuperé la vista y Bakari parecía encontrarse en la posición inicial. Me sorprendió, desde luego, pero tenía la suficiente experiencia como para saber que no podía dormirme en los laureles—. Ahora sí que hemos empezado la prueba. «Maldición», pensé en una rápida batida de mi varita hacia el maestro Uzza. Aquello me daría tiempo, pues su siguiente hechizo no saldría bien. Pero tuve la sensación de que quizá debiera protegerme ante lo inesperado. — Cantar de Eleboro —murmuré, protegiendo todos mis sentidos de cualquier ataque que pudiera afectarlos. Todavía no me creía que la suerte me hubiera favorecido de aquella manera. Las voces del Caos parecieron reirse a mi alrededor. Tenían razón. Aquello no había hecho más que empezar. - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - Resultado del dado para la Rueda del Tiempo:

Buenos días/tardes/noches, paso a informar al maestro @ Bakari de que este fin de semana (25, 26 y hasta la noche del 27) estaré de viaje y no podré meterme en el foro. Espero que de suficiente tiempo para la prueba del libro entre estos días hasta el 24 y el día 28 (el 27 por la noche me intento pasar). Gracias ^^

Eric entraba y salía de la oficina sin parar. Quería disimular sus nervios, pero era más que evidente que lo estaba. No había pasado ni una hora y ya se había recorrido medio Ministerio de Magia tratando de buscar un equipo de rastreadores en quienes poder confiar y lo suficientemente discretos para poder llevar a cabo nuestra investigación... Particular. No cogía el teléfono y tampoco lo usaba para entrar en contacto. Se servía de memos invisibles o muy pequeños, confidenciales. No parecía estar muy contento con las respuestas que recibía. Me levanté de mi escritorio, pues la silla me ardía ya de estar tanto tiempo allí parado, pensando y planificando rutas y señalando posibles ubicaciones. Salí del despacho y me acerqué a la mesa del apurado secretario. En cuanto me vio, rompió uno de los memos que había recibido y lo tiró a la basura, asegurándose de quemarlo con un movimiento de varita. Alcé una ceja, un gesto más que suficiente para que se acercara a mí, sostribándose sobre el escritorio, y comenzara a susurrarme: — No podemos contar con ningún rastreador del Ministerio, todos mantienen vínculos con el Departamento de Seguridad, es imposible que les pidamos plena confidencialidad. —Sus ojos ambarinos destelleaban hasta el punto de parecer fuego y su voz salía crispada, forzando el susurro hasta el punto de que pude sentir cómo se resentían sus cuerdas vocales—. Sin embargo —bajó el tono y pareció relajar la voz—, acabo de recibir un memo con información importante. Un contacto del Departamento de Misterios conoce a un equipo de rastreadores externos con los que... Bueno, a veces colaboran. Nos ofrece darnos indicaciones para reunirnos con ellos, pero... — Eric, sin rodeos, ¿qué nos pide a cambio? — Entrar en el equipo que vaya a explorar los mundos detrás de los monolitos. Puse los ojos en blanco. Comprendía que, para un Inefable, aquello era una oportunidad de oro. No quise preguntarle a Eric sobre la identidad del contacto, sabía que no podía dármela debido a la propia confidencialidad que protegía los datos de todos los empleados de aquel departamento, así que simplemente asentí. No podíamos negarnos a la única ayuda de la que disponíamos, y debatir sobre quienes formarían aquel equipo era un problema del futuro. — Pídele la información, voy a preparar todo para reunirnos con ellos. No pudimos casi ni movernos. El ministerio entero tembló. Agudicé el oído pero no pude distinguir el origen de aquello. ¿Habría sido el atrio? ¿Más declaraciones de guerra sobre dragones? ¿O había sido un terremoto? El secretario y yo nos miramos, desconcertados. El temblor persisitió unos minutos. Las paredes se resquebrajaron y aparecieron varias fisuras en el marmol del suelo. Procedía de las plantas inferiores, eso seguro. De pronto, paró. — Aprovecha el caos, ve a hablar con tu contacto. Yo voy a ver qué ha ocurrido; quizá esto nos de un tiempo muy valioso. ¡Corre! Cerré a cal y canto con varias protecciones mi despacho y la oficina y bajé apresurado las escaleras, revisando en cada planta los efectos de aquella sacudida. Me alivió comprobar que el origen no estaba en el Departamento de Accidentes; eran más que conocidos, algunos de ellos de primera mano, los desastres que este departamento había causado alguna vez. No fue hasta que llegué a la segunda planta que vi un boquete en el suelo, que entendí de dónde procedía el núcleo de aquel desastre: las oficinas del Ministro y el Personal de Apoyo. — ¿Qué ocurre, señor Wild? —me preguntó un Auror que corría también hacia los ascensores del segundo piso. — Estoy tan sorprendido como tú, Hawkings. —Ambos nos acercamos al gran boquete que había en un lateral de su departamento. Me asomé, tratando de dispersar el polvo que todavía flotaba por toda la zona—. Parece un despacho, ¿sabes el de quién es? Hawkings negó. Regresamos a la zona de las escaleras y los ascensores y emprendimos la marcha hacia allí. El primer piso era una nube de polvo y el origen de todo aquel desastre, el susodicho despacho, parecía haber sido zarandeado desde su centro. La puerta había salido volando hacia el pasillo y todos los muebles estaban contra las paredes, resquebrajadas. En el centro, tanto en el techo como en el suelo, se habían formado dos agujeros imperfectos. Era como si un huracán se hubiera desatado en aquella sala... «Un huracán», pensé, abriendo mucho los ojos. — Mael Blackfyre —dijo el Auror. — ¿Cómo? —Tardé en salir del aturdimiento y mis pensamientos. — Es su despacho, el de Mael Blackfyre —repitió. Mael Blakfyre. Su despacho. Mael Blackfyre. Indicios de un viento huracanado. Y el único mundo que yo había visitado con la payasa y del que casi no salíamos vivos, había sido una gran bola de gases nocivos, tormentas y vientos huracanados. Aquello no podía ser coincidencia. Ya tenía al segundo sospechoso de poseer una de aquellas esferas. — Menuda ha liado el señorito Director de Educación Mágica —comentó Hawkings, revisando todos los daños desde el hueco de la puerta. — Sí... Menuda. Enseguida comenzó a venir más y más personal de otros departamentos a ver qué había ocurrido, informar a quienes debían ocuparse de tal desastre y atender a los afectados y posibles heridos del departamento. Aproveché el mogollón para escaquearme y regresar corriendo a la quinta planta. En cuanto llegué, Eric me estaba esperando en la puerta cerrada de la oficina. — Lo tengo, ¿qué ha pasado? — Un huracán en un despacho —contesté, mirando a mi secretario con cara de circunstancias—. Creo que tenemos un sospechoso. ¿Cuándo hemos quedado con ellos? — En media hora. — Perfecto, vamos. No hay tiempo que perder.

¡Sí Pik! Yo también he estado pendiente y lo he visto ahora. Os dejo por aquí el link (con subtítulos en Inglés porque no han lanzado nada en español, pero bueno, seguramente se puedan poner los subs en español automáticos del youtube para quien lo necesite). Quería poner para que se vuera el vídeo directamente pero no sé si se puede, así que dejo el link sin más: https://www.youtube.com/watch?v=wKbHWgiGIYU&t=43s Pinta bien, pero pinta a que no va a ser multijugador, así que bueno... Al menos espero que todo el mundo abierto y rpg esté guay y entretenido. Lo bueno es que podremos explorar un detallado Hogwarts y Hogsmeade (y terrenos circundantes parece ser, más allá de...) y la parte de combates es dinámica y con combinaciones de hechizos. Veremos. De fecha, han puesto con todo su ... "HOLIDAYS", dejándolo más que en el aire, así que imagino que será hacia Navidades .-.

Abrí mucho los ojos al escuchar las palabras del maestro Bakari. Parecía haber leído mis pensamientos sobre el trol y a punto estuve de preguntarle si ellos, los Uzza, poseían también conocimientos como la Legeremancia o la Oclumancia. Estaba seguro de que sí, pues sus magias eran bastante poderosas y probablemente el hecho de leer las mentes era incluso parte de su naturaleza, así que traté de disimular mi sorpresa. No me atreví a abrir la boca y me contuve, consciente de que quizá debiera cuidar más lo que pensaba frente a desconocidos que no sabía si serían capaces de leer mis pensamientos. Cada vez veía más necesario asistir a las lecciones de los Arcanos para dominar todas aquellos poderes; quizá me hacían más falta de lo que creía. Lo que sí tomé muy en cuenta fue el último consejo del Guerrero Uzza antes de que prosiguiera presentándonos al resto de señores del Caos. Las dos siguientes me resultaron realmente curiosas. Una ninfa y una hechicera que parecían ser representaciones mismas del yin y el yang. ¿Se complementarían igual? Según la explicación, no era una complementariedad lo que se conseguía si coincidían; más bien era una neutralización de energías. Al mirar a la Hechicera se me vinieron a la mente los cantos de las sirenas que atraían a quien las escuchase con fines bastante temibles. El Caos y su aleatoriedad me resultaban cada vez más atractivos, aunque algo en mi consciencia parecía alterarse al pensar en todas las consecuencias explicadas hasta el momento. La tormenta comenzaba a parecer el clima habitual de aquel lugar. Con ella nos traía a los señores del Caos, y en el viento las voces seguían susurrando palabras que no llegaba a comprender. Negué con la cabeza cuando Bakari volvió a preguntar si teníamos alguna duda. Miré a Martin por un breve instante, corroborando también su respuesta. Sólo quedaban dos.

— Toda la comunidad internacional está expectante a la espera de la resolución de nuestro Comité, Adrian. La Unesco está que trina y no sé por cuánto tiempo más puedo retener a la prensa, tanto mágica como muggle. El presidente del Comité de Patrimonio de la Unesco ha mandado un mensaje al Ministerio de Cultura muggle, ofreciendo todo su apoyo legal y de protección del monumento para evitar que ningún muggle pueda acceder al recinto sin autorización y estoy seguro de que la Confederación Internacional de Magos ya está haciendo lo correspondiente para el tránsito del personal mágico. No tenemos mucho tiempo para que la impaciencia se traduzca en algún altercado. Me mantenía en silencio, con el mentón y mis labios apoyados sobre los dedos de las manos, con la mirada perdida en algún punto de la camisa de mi secretario, mientras sentía su ansiedad crecer hasta casi invadir toda la sala. El teléfono no dejaba de sonar y a veces incluso había intervalos de casi cinco minutos hasta que alguien, fuera del despacho, lo descolgaba para contestar. Sabía perfectamente lo que había que hacer, y sabía lo que todo el mundo estaba esperando de nuestro Comité: dar una resolución favorable para nuestro Ministerio de Magia en la que accediésemos a la ayuda y colaboración internacional, así como entre la comunidad mágica y la muggle, para llevar a cabo las investigaciones pertinentes respecto a Stonehenge y los últimos sucesos acaecidos durante las festividades de San Valentín. Una resolución, en la que, además, asumiríamos la responsabilidad como país albergador de la construcción monolítica, poniéndonos a la cabeza de las investigaciones, la protección y la salvaguarda del mismo, corriendo con parte de los gastos y apoyando en todos los trámites administrativos, ofreciendo incluso espacios y planes de investigación y residencia para profesionales de todo el mundo que quisieran realizar su trabajo en las inmediaciones del monumento. Por supuesto, deberíamos imponer ciertos límites y restricciones, muchos de ellos diferentes para magos y muggles. Sin embargo, había algo que la comunidad internacional, tanto mágica como muggle, no estaba teniendo en cuenta, puesto que lo desconocía: existía un reducido grupo de personas que se habían aventurado a explorar aquellos desconocidos mundos con los que cinco de los monolitos conectaban y habían salido de ellos con algún tipo de mineral de propiedades igualmente desconocidas. Personas que habían casi desaparecido del mapa, borrando cuidadosamente en muchos de los casos el rastro de la magia que emanaba de aquellas esferas y que podría permitir localizarlos y obligarles a entregar aquellos minerales a las autoridades ministeriales competentes. Sí, sabía que eran esferas, porque había visto a una bruja salir de uno de los monolitos con una de ellas destelleando entre sus dedos, y creía saber de quién se trataba. Y quizá, lo que no entendiera la comunidad internacional, era que hasta saber el efecto o las consecuencias que podían acarrear aquellos misterios extraídos de tierras completamente desconocidas, lo que había que hacer era cerrar por completo el acceso a Stonhenge y los mundos descubiertos, cuyos peligros podían ser inimaginables, y no sólo a título individual. Lo sabía porque yo, guiado por una inconsciencia que no supe ni de dónde surgió, también había viajado a uno de esos planetas y no había salido muy bien parado junto con mi hermana Sagitas. — Adrian, Adrian, ¿me estás escuchando? Dirigí la mirada hacia hacia los ojos del muchacho, directa y segura. — Sí, te escucho. ¿Qué más podía decirle? No podía dar el visto bueno a que otros magos y brujas se adentrasen en aquellos mundos y pudieran arriesgarse a no volver o, quizá peor aún, a regresar con algo entre sus manos que quizá no deberíamos seguir sustrayendo de aquellos planetas, una magia desconocida que podría poner en peligro a todos, o beneficiar demasiado a unos pocos, o romper el equilibrio de aquellos mundos que, demonios, ¡eran desconocidos! ¿Y si era importante preservarlos y mantener las esferas en su sitio? Tampoco podía contarle todo aquello a mi secretario e involucrarle en posibles acciones al márgen de la ley y las investigaciones ya en curso. — Sólo tienes que firmar el acuerdo y dar el visto bueno a la nota de prensa, y prepararemos enseguida la rueda de prensa. —Sintió mi mirada inquisidora—. L-lo he redactado ya. S-sólo la versión en la que estamos de acuerdo. Asumí que no había otra opción y... —Mi ahora intencionado silencio le incomodó aún más, pero se sobrepuso y cogió aire para soltarme de golpe—: No podemos negarnos a dar nuestro consentimiento, Adrian. Se nos echarían encima. Debemos permitir las investigaciones. — No podemos, Eric. —respondí entre mis dedos. Como era de esperar, se quedó mudo y sus ojos se llenaron de temor e incluso rabia. Por supuesto, estaba en desacuerdo. Fue a contradecirme pero le frené en seco separando una de mis manos de mi rostro indicándole que no lo hiciera—. No es que no quiera. Es que no podemos. Torcí la mandíbula y apoyé los antebrazos sobre la mesa, cruzando los dedos de mis manos en un puño, mirando fijamente a mi secretario. Tenía que contárselo, no podía hacer otra cosa; si tenía que iniciar una investigación exprés paralela para intentar encontrar a aquellas personas que tenían los minerales y asegurarnos de que Stonehenge, sus monolitos y los mundos tras ellos eran seguros, no podía hacerlo sin su ayuda y contando con su plena discrección. — Eric cierra la puerta. —Mi tono fue lo suficientemente grave como para que el muchacho comprendiera que aquello era serio y que debía limitarse a obedecer y atender. En cuanto volvió a estar sentado frente a mí, toqué mi Anillo de Salvaguarda contra Oídos Indiscretos para que nadie pudiera inmiscuirse en nuestra conversación—. Esos mundos poseen magias que desconocemos. Y hay personas, de las que entraron, como yo, que han salido con fragmentos de esas energías. No sabemos el poder que albergan o lo indispensables que puedan ser para esos planetas y las consecuencias que pueden derivar de dichas sustracciones. No podemos permitir que alguien más pueda salir de ninguno de los monolitos con Merlín sabe qué poder entre sus manos. » Sé que el tiempo apremia y que todos los organismos se van a impacientar, pero tenemos que tratar de entrar en contacto con las personas que tienen las esferas para comprobar que está todo en orden, que no suponen un peligro, ni ellas ni sus portadores y después sí, investigar los planetas con un equipo plenamente preparado para corroborar que todo está en orden. Pero debemos saber qué magia es con la que estamos tratando, cuál es su origen y qué efectos y consecuencias existen con las acciones ya realizadas. Dejé que el chico procesara toda la información para después añadir: — ¿Entiendes por qué no podemos todavía acordar nada? —Eric asintió, con los labios fruncidos en un gesto de extrema seriedad—. Bien, entonces intenta retrasar como sea los acuerdos y ponme en seguida en contacto con los mejores rastreadores de los que dispongamos en el Ministerio. Tenemos que dar con esas brujas y magos cuanto antes. — Pero, ¿y por qué no avisamos a las autoridades del Ministerio? Quizá estemos metiéndonos donde no nos llaman, Adrian. — Porque esos magos y brujas no van a dejar que las autoridades les quiten un bien tan preciado. —Reflexioné unos segundos antes de decir—: Y porque creo que sé quién puede ser una de esas brujas y no nos conviene que el Departamento de Seguridad sepa que andamos tras la pista. —Le miré con apremio—. Retrasar y rastrear, Eric. A la de ya. OFF: Espero que les incite y guste a todes para sumarse a una trama conjunta ❤️

Nombre del equipo: Houdini's Treat Capitán: Kenzo Ito Jugadores: Guardián: Maida Black Yaxley (Bulgaria) - - > 9 Golpeador: Bomani Said (Egipto) - - > 10 Golpeador: Akiki Naigaga (Uganda) - - > 11 Cazador: Kenzo Ito (Japón) - - > 12 Cazador: Mica Gryffindor (Escocia) - - > 9 Cazador: Cillian Ryddleturn (Inglaterra) - - > 10 Buscador: Thiago Moraes (Brasil) - - > 9 Presupuesto: 70 (9+10+11+12+9+10+9)

Partidos de Octavos de Final: Inglaterra vs Argentina Italia vs Uganda Escandinavia vs Bulgaria Japón vs Jamaica Brasil vs Egipto Australia vs Rumania Escocia vs Perú Francia vs Estados Unidos

Escuché a Bakari darme la respuesta que deseaba. Lo miraba algo fascinado, pues a pesar de su apariencia, era mucho más sereno y cálido de lo que había imaginado en el principio. Mantenía las distancias, claro está, pero en su voz no había tanta frialdad como cabría esperar. Asentí y, al instante, me giré abruptamente hacia donde un relámpago había impactado, en el centro de uno de los seis segmentos del círculo de piedra sobre el que estábamos. Allí apareció el Cíclope, el primero de los Señores del Caos. Carraspeé cuando el maestro Uzza mencionó dos de los rangos de los bandos. No era ningún secreto que estos existiesen, y todavía tanto los poderes públicos como ellos mismos estaban en constantes tiras y aflojas. Hacía mucho tiempo que me había mantenido al margen de todo aquello tras mi paso por la Orden del Fénix, aunque siempre trataba de enterarme de cómo estaba la situación en ambas partes. No era tarea fácil, pero entre rumores, conocidos y despistes de lenguas aflojadas por la confianza, siempre lograba captar alguna que otra información verídica, aunque no pudiera contrastarla del todo por mantener mi discrección. Sin embargo, me tensé al dudar de mi compañero. No conocía nada de él más allá de lo que nos había unido en aquel evento e, instintivamente, miré su rostro, por si percibía algún tipo de alteración. — Increíble ver a un cíclope tan de cerca, ¿verdad? —dije, camuflando el verdadero propósito de mi mirada hacia él. Bakari también se dirigió hacia Martin, y casi lo agradecí, pues desvió la atención del moreno y con ella, toda posible sospecha sobre mi involuntaria acción. Otro destello a mis espaldas me hizo girarme y ver el nuevo ser que se había sumado a nuestra reunión. — Un trol... —murmuré para mis adentros, al mismo tiempo que Bakari lo mencionaba y comenzaba con su explicación. Realmente molestos los troles. Desde luego que usar los poderes que ofrecía el Caos era arriesgar mucho, y debían ser usados muy inteligentemente, en una situación o muy crítica, de modo que no hubiera otra opción más que la muerte, o muy favorable, en la que se tuviera espacio suficiente para poder soportar un contratiempo más. Iba a ser realmente difícil practicar con semejante poder. Faltaban cuatro Señores del Caos, así que tras observar unos segundos al est****o trol, que daba vueltas sobre sí mismo, desorientado, regresé mi mirada hacia Bakari, esperando a que terminara con su explicación. Mi temor aumentaba aún más mis ganas por enfrentarme a la prueba que nos tuviera preparada.

OFF ROL No te preocupes, no hay un tiempo definido, simplemente eso que tú misma has dicho: mientras no se quede la tutoría parada durante un período largo de tiempo, nos acoplamos al ritmo que necesites. No deja de ser un espacio de ocio, lo muggle va primero. Seguimos con el rol por aquí y cuando quieras ir a alguna familia a rolear me dices o comienza sin miedo rol por allí y te sigo. Te dejo el rolito aquí para que lo continúes. Rolea todo cuanto quieras para la elección de tu varita. Me encantaría ver rasgos de tu personaje característicos, que describas cómo sería su varita ideal... Échale imaginación, cómo te gustaría que fuera ese momento en su historia. Hazlo con gusto ON ROL Leí por encima la invitación que la muchacha había recibido por parte de Ollivander's para acudir a comprar su varita. Era curioso cómo un simple gesto como aquel mantenía en buena posición y estima a la casa elaboradora de varitas más prestigiosa de nuestra comunidad. Sonreí ante la aparente inquietud de TwilightNad por la elección de su varita. — La elección de la primera varita es un acontecimiento bastante relevante en la vida de una bruja, y en Ollivander's vas a encontrar la atención adecuada para ello. Podrás probar varias varitas hasta encontrar la que sientas que conecta contigo de una forma muy especial. No te preocupes si necesitas más tiempo del que estés imaginando que es lo normal. Es una búsqueda difícil, pero es muy importante que te vayas completamente satisfecha con tu adquisición —le comenté. Y entonces, la aparente inquietud estalló en verdadero nerviosismo y la chiquilla comenzó a aturullarme a preguntas sobre todo. Literal, sobre todo. Pareció darse cuenta de ello y hubo un momento en el que paró en seco y se distrajo con el escaparate de una tienda de chocolates de diversos y peculiares tipos, formas y sabores. Reí a carcajadas ante aquel cambio tan repentino. Me recordó en cierta manera a mí mismo hacia muchos, muchos años atrás. También me podían las ansias por conocer y también me distraía con la misma facilidad. — ¿Tienes hoy la ceremonia de selección en Hogwarts verdad? Esta noche te seleccionarán para una de las cuatro casas. Gryffindor, Slytherin, Ravenclaw y Hufflepuff. La casa que te escoja (o escojas) será tu familia dentro del colegio durante el curso, y quién sabe la cantidad de amistades que sacarás de ella, o incluso de las demás. No te preocupes, todo eso, así como las materias que cursarás, lo descubrirás más tarde y poco a poco. —Apoyé una mano sobre su hombro, sacándola un poco del ensimismamiento con aquel dulce escaparate—. Y tranquila, volveremos luego a por unos cuantos dulces. Lo primero es lo primero. Mira, ahí está Ollivander's. La hice girarse para toparnos con la fachada del local de venta de varitas, a la que me acerqué y cuya puerta abrí, cediéndole el paso a la chica. Entré detrás de ella y cerré la puerta a nuestras espaldas. Al local entraba una tenue y mortecina luz por las cristaleras de la fachada, y se podía apreciar un leve brillo procedente de un tragaluz al fondo de uno de los estrechos pasillos que formaban las amplias estanterías. En el mostrador había un timbre. Le hice una indicación a TwilightNad para que lo tocara y ser atendidos. — Vamos, es hora de descubrir tu varita —la alenté. @ TwilightNad

Buenas tardes, maestro @ Bakari Como he roleado la duda en este post, vengo también a hacerla en el off, por si mi intento de mantener la coherencia dentro del rol no la ha dejado clara, y así la resolvemos mejor por aquí. Todos los poderes del libro, es decir, invocar la Rueda del Tiempo y lanzar los dados, por ejemplo, son en cualquier momento de tu turno sin sustituir ninguna de las acciones del turno, ¿no? ¿O sí es a costa de una de las acciones? Otra duda, no planteada en el rol porque todavía no hemos llegado, es qué se aplica igualmente al invocar a un Señor del Caos, si también el invocarle cuenta como acción dentro del turno o no, y aparte de invocarle, puedes hacer tus dos acciones. Gracias.

Otro hombre se nos incorporó segundos después de que aquel último relámpago incidiera en el borde del círculo de piedra. Recordé haber visto el primero casi al momento de aparecer yo. ¿Sería que los relámpagos anunciaban la aparición de alguien nuevo en aquel terreno? Al girarme hacia el individuo, pude reconocer sus rasgos al retirarse la capucha. Era Martin Black, el director internacional del Comité de Quidditch, organizador de los últimos grandes acontecimientos de este deporte a nivel mundial, y quién había contado conmigo para el partido de la gala de San Valentín, en Roma. Quise estrecharle la mano, mas no sentí apropiado saludarle afectuosamente frente a Bakari, así que me limité a asentir levemente con la cabeza. Bakari comenzó a hablar, y me sorprendió que fuese directo al grano. Estaba acostumbrado al misterio con el que teñían muchos maestros sus clases y lecciones, buscando la belleza o incluso sus propias razones en estas, y todavía no me había hecho del todo con aquella actitud directa y segura que poseían los Guerreros Uzza. No se andaban con chiquitas y parecían, además de tener un gran sentido del honor y la responsabilidad, valorar y saber cómo economizar el tiempo. Atendí en completo silencio a la explicación, visualizando cada rueda al iluminarse cuando él quería y a los diferentes tipos de dados que iban conectados a ellas y que determinarían los efectos del poder de cada una. Todo aquello estaba también explicado en el libro que ya había leído de cabo a rabo, pero ver y sentir la potencia del poder del Caos a nuestro alrededor fue mucho más aclaratorio que cualquier nota a pie de página. No me di cuenta de cuándo había terminado de explicarnos todas las ruedas, pues seguía observando con atención el movimiento de la Rueda del Tiempo, reflexionando sobre su uso. Era como si aquel artilugio estuviera imbuido de alguna manera con la misma o una magia muy parecida a la que constituía un giratiempos. Quizá poseyera una mínima parte de aquella magia. Quién sabe. Existían muchos tipos de magia y todavía no se sabe si tuvieron algún origen común o proceden de orígenes diferentes. Quizá la magia de los Uzza influyó en la que nosotros conocemos o viceversa, se encontraron en algún otro punto de la historia y compartieron propiedades como las que posiblemente compartían el giratiempo y la Rueda del Tiempo. «¿Alguna duda les ha surgido?». Regresé la mirada al guerrero y a su nada afable rostro. — Yo sí tengo una. —Fui directo, tomando ejemplo del maestro—. Estos poderes, invocar las ruedas, entiendo que consumen la suficiente energía como para no ser usadas, por ejemplo, más de una o dos veces por duelo. Eso lo entiendo. —Había leído aquello en el libro, pero mi duda iba más hacia un lado estratégico—. Sin embargo, ¿usar la rueda en un duelo supone la pérdida de una de tus dos acciones, o no consume acción? La pregunta se quedó en el aire flotando unos segundos, hasta que un leve susurro pareció acercarla a los oídos de Bakari.

Oye pues para la bajita participación que he tenido, me he llevado más de lo esperado xD Imagino que especificamos aquí como ha hecho Goderic qué criatura baby queremos: Baby Fénix. Espero que así sea, si no ya me paso por el topic que corresponda. Gracias por la galita aunque apenas pude rolear apurado al final, pero me ha parecido muy guay leer todo ^-^ Sigo fascinado con la creatividad para crear tramas en las galas. ❤️

El día se había levantado especialmente frío. Ni una sola nube coronaba el despejado cielo azul de aquella zona de Escocia, lo que pronunciaba aún más la sensación de estar plenamente a disposición del fuerte viento gélido que soplaba. Era primera hora de la mañana y la luz del sol apenas había comenzado a incidir en los terrenos del inmenso castillo, ofreciendo tímidamente su calidez. El mismo astro parecía saber que aquel día no podría hacer nada por aplacar las bajas temperaturas. Permití que sus rayos se posasen en mi rostro durante unos minutos, justo antes de contemplar el reloj de pulsera de mi muñeca izquierda. Era la hora. Había citado a Aysha Triviani allí en Hogwarts, en la puerta oeste que daba al camino que descendía hacia la cabaña del guardabosques. No solía faltar a mi desayuno con él los jueves por la mañana, el cual solía alargarse, y esta vez no iba a ser menos, aunque tuviera otras responsabilidades, como encargarme de la tutoría de una nueva muchacha que todavía no sabía bien si se trataba de una estudiante de la escuela o de alguna nueva o tardía incorporación a nuestra sociedad mágica. Esperé pacientemente, aunque el reloj ya había marcado los dos minutos siguientes a la hora de nuestra quedada. En tres minutos serían en punto, y esa era la hora a la que solía tocar la puerta de la cabaña. Quizá debiera haber citado a la muchacha después de mi desayuno, pero me había parecido buena idea que pudiéramos extendernos en este con el guardabosques mientras charlábamos para conocernos, antes de proceder con cualquier otra actividad que necesitase hacer Aysha. Así, además, podría comenzar a establecer nuevas relaciones con un personal normalmente olvidado como lo era aquel solitario hombre que se ocupaba de los terrenos y las criaturas de Hogwarts. Volví a mirar el reloj de pulsera. Quedaba un minuto para en punto. «Aysha Triviani», recordé el nombre de la chica. Triviani. Vaya. Era demasiada la fama que precedía a esa familia como para que su apellido no suscitara cierta inquietud. Aunque en mi caso, esa inquietud era reemplazada por una severa curiosidad. Quizá fuera una buena oportunidad para conocer más a fondo a los Triviani.

¡Bienvenida a Hogwarts, @ Aysha Triviani Soy Adrián, (sí, no varié mucho al crear mi personaje, jajaja) y soy de España, encantado. Bienvenidísima a tu tutoría personalizada. En esta podremos sumergirnos poco a poco en todo el movimiento del foro y sus espacios, y podrás plantearme todas las dudas que tengas respecto a estos y su funcionamiento. Pero sobre todo, comenzaremos a descubrir tu personaje, su historia, qué hace en en mundo mágico y cuales son sus perspectivas de futuro. Por ello, utilizaremos este topic como nuestra zona personal tanto en OFF ROL (como lo es esta parte que estas leyendo ahora mismo) como en ON ROL (lo que vendrá después, y lo jugoso de toda la zona del Juego de Rol). Aunque quizá ya lo hayas visto o te lo hayamos indicado otras veces, te dejo de nuevo el link al subforo que contiene todo el Manual del Rol, así como al foro del Expreso de Hogwarts, donde siempre hay actualizaciones sobre el juego y noticias varias del equipo. Manual del Rol: https://www.harrylatino.org/forums/forum/475-manual-del-rol/ Expreso de Hogwarts: https://www.harrylatino.org/forums/forum/178-expreso-de-hogwarts/ No te preocupes por no leerlo todo, sólo te lo dejo para que sepas siempre donde acudir en caso de dudas respecto a algo del funcionamiento del juego, pero siempre podrás contar con topics de dudas en los diferentes subforos y, en lo que dure nuestra tutoría, por supuesto tienes este espacio para ir preguntando todo lo que se te ocurra. En esta tutoría veremos todo lo básico para empezar a rolear y conocer todas las posibilidades del juego. Para completar la tutoría, deberemos cumplir los requisitos/objetivos que pongo a continuación, los cuales iré tachando o validando según los vayamos cumpliendo. OBJETIVOS Crear la ficha. Crear la bóveda. Conversar sobre el pasado del personaje. Crear objetivos que pueda tener a futuro, pensar su empleo ideal. Averiguar sobre familias existentes. Rolear en alguna familia acompañado de su tutor. Ayudar a resolver cuestiones que surja sobre la tutoría o poner en práctica roles que el aspirante esté interesado en realizar. Intercambio de hechizos on rol. Como primera tarea y antes de pasar con el rol, puedes ir creando tu ficha de personaje y tu bóveda personal y traerme los links a las mismas para revisarlas. Si ya las has abierto, simplemente trae los links. Puedes crearlas en los siguientes subforos: Ficha de Personaje: https://www.harrylatino.org/forums/forum/346-rpm-registro-público-mágico/ Bóveda Personal: Información - Foro de apertura Por último, indicarte un par de normas o información útil para la tutoría: NORMAS — No hay límite de tiempo para acabar la tutoría, pero una inactividad prolongada podrá ser motivo para finalizarla y retomarla desde el punto que se considere inscribiéndote de nuevo. — En este topic y como excepción al resto del foro, podremos postear una misma persona de seguido en caso de ser necesario (por ejemplo, poner un OFF por resolver una duda y que el siguiente post sea de la misma persona contestando al rol que tengamos en curso). Ya está, son en realidad anotaciones. Y sin más dilación, dejo el OFF ROL y paso al ON ROL en el siguiente post, rol que puedes seguir al ritmo que quieras y como gustes. La premisa principal, sobre todo para tus primeros roles, es que vayas conociendo a tu personaje, que nos vayas mostrando poco a poco su historia, cómo piensa, se siente, se mueve, viste... Encuentra tu lugar dentro de él. Y sobre todo, ¡sin miedo! Ve probando estilos y longitudes, y así encontrarás tu o tus formas de rolear. ¡Estoy deseando leerte!

Aquella escalofriante brisa parecía llevar voces consigo, casi las mismas que había escuchado al tocar el traslador que me llevaría directo al punto de reunión con el Guerrero Uzza; a ratos, estas parecían desvanecerse en el aire, alejarse, para después retornar, arremolinándose alrededor. Era un páramo desértico y oscuro, cuyo cielo parecía haber sido modificado de alguna manera, falto por completo de cualquier atisbo de luz. Por encima de este, un manto de nubes presagiaba tormenta. «Al menos estaremos protegidos», pensé, demasiado inocentemente para lo usual. Si algo había aprendido acudiendo a aquellas lecciones con los guerreros del pueblo Uzza era que nunca podías confiarte demasiado. Una de aquellas voces pareció enredarse en mi pelo y tirar de él, lo que me hizo levantar la vista para observar a la figura que se erguía en el centro de lo que parecía un amplio círculo de piedra inserto en aquel terreno. Amplio no, inmenso. Yo apenas había aparecido en uno de los bordes de su diámetro, y pude apreciar que este se extendía mucho por detrás del maestro. Con paso decidido avancé hacia la imponente figura del guerrero, sintiendo las ráfagas intermitentes de viento colarse por los los huecos de mi cuerpo y empujar la oscura capa en diversas direcciones. Fui cómodo, sencillo y de oscuros tonos, dispuesto y preparado para cualquier prueba que se le pudiera antojar a Bakari. La oscuridad se pronunció al esconderse las últimas luces del día por detrás de la montaña de extraña forma que había detrás de mí. Sin embargo, el primer rayo de la tormenta iluminó la plataforma, cayendo hacia uno de los laterales de la zona protegida por aquel techo de oscuro cielo. — Buenas tardes, maestro Bakari —pronuncié con aplomo al estar frente al Guerrero Uzza, manteniendo una prudente y respetuosa distancia con él. Aprecié sus nada amables rasgos y distinguí las ruedas que flotaban sobre su cabeza. Había leído sobre ellas en el libro; lo que no imaginaba era que fuera posible tal demostración de su control. Sin duda, aquel hombre era un gran conocedor del arte del caos. Con aquella estampa, casi podría afirmar que parecía dueño y señor del caos. Permanecí en silencio, sin saber si recibiría alguna respuesta o si esperábamos a alguien más. Todavía no conocía demasiado sobre el código de los Uzza, pero esperaba que mi saludo no hubiera sido irrespetuoso. Ante la duda, el silencio era lo mejor. Otro relámpago iluminó todo a nuestro alrededor. Desde allí pude apreciar que aquel círculo parecía estar dividido en secciones por unas líneas en relieve que salían desde el centro y se extendían hacia los extremos de la circunferencia. Seis sectores pude contar. Seis eran los Señores del Caos. Aquello iba a ser la mar de interesante. Estaba ansioso por decubrir los misterios de aquel libro.

ID: 83911 Libro de Hechizos: Libro del Caos Justificante de compra del Libro (Link al post del Concilio de la bóveda trastero): https://www.harrylatino.org/forums/topic/107285-bóveda-trastero-de-adrian-wild/?do=findComment&comment=5412083 Link a la Bóveda: Bóveda Nº78776 Link a la Ficha: Adrian Wild

OFF ROL ¡Genial lo de la bóveda! Ya he tachado las tareas de crear la ficha y la bóveda del personaje en el primer post. Y por lo que veo, pronto tacho también las de las familias. No te preocupes mucho por darle rol a tu elección de familias. Ya tienes, en la historia de tu personaje, la coherencia y conexión con la Granger, que va a ser tu sanguínea. La adoptiva muchas veces se acaba acoplando según vas roleando y encontrando conexiones. Eso depende de ti, de si quieres tenerlo todo conectado en historia o prefieres elegir alguna familia como adoptiva por tener esos beneficios de donaciones, etc. y ya con la marcha darle coherencia mediante las relaciones que vayas creando con otros personajes. Yo por ejemplo, desde el principio metí las dos en mi ficha, la Dumbledore y la Potter Black. Relacioné mi historia con la de mi entonces madre sanguínea y la PB roleaba con ellos, Sagitas, etc. como mi segunda familia. Al final le di la coherencia de que, como la user que manejaba a mi madre sanguínea dejó de entrar, pues fue como si mi madre desapareciera y fuera la PB quienes me acogieron y dieron otro lugar. Así que si te llama la atención alguna puedes cogerla como adoptiva, o si prefieres irlo encontrando sobre la marcha, pues lo puedes hacer más adelante cuando lo sientas. En cuanto a rolear en una familia, consiste en que te acompañe, por hacer puentes y que podamos rolear un poco, a cualquier mansión/castillo de tu preferencia. Quizá pueda hacerte una visita en la Granger. Puedes rolear cuando y cuanto gustes por allí y yo me puedo incorporar al rol ^^ (Por ejemplo, puedes rolear tu llegada, si Sophie está disponible vuestro encuentro después de tanto tiempo... Ese sería un bonito rol. Y yo puedo aparecer por ahí en algún momento). Sólo como sugerencia. Evidentemente, rolea lo que quieras, pero ya que tienes confirmada esa familia, aprovecha y pásate por su topic de rol ^-^ ON ROL Contemplé unos instantes a la impresionada muchacha. Parecía estar procesando todo aquello antes de poder encontrar una respuesta clara a mis preguntas. Y en ese pequeño silencio, encontré todo lo que necesitaba saber. Realmente acababa de llegar al mundo mágico, y comprendí que lo primero que la chiquilla intentó hacer era reunirse conmigo, su tutor, en busca de respuestas, una guía y compañía para sus primeros pasos, compras de materiales incluidas. Imaginé que la habrían citado en Hogwarts tarde o temprano, así que quizá debería empezar por organizar nuestros tiempos. Dejé el libro que había tomado entre mis manos de nuevo en la estantería, pero antes de poder decir nada, ella comenzó a explicarme sobre la lista de objetos que le habían enviado y con los que debía hacerse. Aproveché sus palabras para echar una última ojeada y terminar mi análisis del estante en el que me había quedado, llegando hasta el final de la línea. Como temía, había apenas dos ejemplares del libro y un par más dedicados a las compañías teatrales mágicas más sonadas. El estante de abajo estaba dedicado a músicos y grupos musicales. Seguro que me quedaba por revisar alguna que otra estantería, pero las prioridades del día se habían reorganizado con el encuentro con TwlightNad. — Bien, creo que he acabado aquí por hoy —le indiqué a la tutoranda—. Quizá te pueda acompañar a por tu varita y hacer las compras que necesites. ¿Tienes que estar a alguna hora en el castillo? Imagino que para la comida o la cena, a más tardar. —No esperé la confirmación para decir—: En marcha pues, no perdamos más tiempo. Con un gesto cordial hacia el librero tras el mostrador, caminé hacia la puerta de entrada, dejando pasar a un par de brujas antes de salir. Una vez fuera miré a mi alrededor y percibí que el Callejón Diagón comenzaba a llenarse con más gente. Me giré hacia TwilightNad y señalé a sus espaldas, hacia la parte oeste del callejón. — Ollivander's está por allí, ¿vamos primero a por tu varita? En el fondo me alegraba haber coincidido un día antes. Así podía acompañarla a un acontecimiento tan emocionante e importante como la elección de su primera varita. Además, podríamos aprovechar el paseo para que me contase un poco más de ella. Aguardé a que me respondiera antes de seguir aturullándola a prenguntas. @ TwilightNad