El Día de la Verdad

[Lisa Weasley Delacour]

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Se mordió la lengua para evitar soltarle una burrada a la fémina. ¿Lealtad? ¿Acaso sabia ella lo que significaba aquella palabra para el rumano? Tenso sus músculos e inspiro buscando la calma. Mandar a volar a sus posibles aliados no seria la mejor forma de empezar aquello y lo sabia. Podía llegar a entender sus razones para desconfiar, mas si alguien llegaba ante ella y le enseñaba sin tapujos la marca tenebrosa, no obstante el tiempo era justo y necesitan un plan de acción inmediato. Los segundos corrían en contra.

 

Las sospechas en cuanto a la ayuda que tendrían de parte de los miembros de la Orden del Fénix dejo a Luca pensando por un rato. Sabia cuanto le podía doler aquello a su prima y mas aun a su mujer, pues ambas pelearon con firmeza por mantener unido al bando y que este fuese respetado y temido por los amantes de las artes oscuras. ¿Como habían llegado a aquello? No lo tenia claro. Otra tarea mas a la extensa lista. Debía hallar respuestas de como y cuando aquellos guerreros habían dejado de creer y proteger la luz.

 

… Es magia antigua ….Cosas que decir …. todas maneras – Elvis estaba hablando pero el no le estaba prestando atención, no toda al menos. Sus pensamientos estaban en la ceremonia de iniciación al bando de las serpientes. Como el líder de aquella secta barata había entrado en su ser, en su esencia. Seguramente, ademas de apoderarse de recuerdos, de imágenes, de ideas, había instaurado un derecho de veto muy eficaz en su cuerpo, impidiéndole así revelar ciertas partes de la historia. ¿Como podría darles información sin incidir en aquel contrato no verbal firmado al aceptar la marca?

 

Ya lo vería, por el momento era hora de mirar el presente. Cuando volvió en si, El ya muy agotado Hunter creaba un traslador con destino seguro. Tocó aquella lata justo en el momento preciso pues los tres se desaparecieron del ministerio a la velocidad de la luz. El estudio de la casona le resultaba familiar, seguramente de alguna batalla pasada. Como si estuviese en su casa, ojeó la habitación, memorizando cualquier salida viable en caso de necesitarla – Me gusta – Pronunció un dhampir ya con su apariencia real - ¿Como de seguros estamos aquí? - Era el primer tema a tratar

Off (etiquetadme en la Gry ^^)

[Mael Blackfyre]

Mansión Gryffindor.~

La lata emitió un destello azulado sacándonos del Ministerio de Magia. Automáticamente los tres aterrizamos dentro del Estudio Mayor en la Mansión Gryffindor. Respiré el aire de casa. Si. Era realmente relajante, aunque tenía que admitir que la situación no lo ameritaba. Miré a Darla para asegurarme que se encontraba bien y luego, escuché las palabras del joven harapiento mago.

— Al cien por ciento, Van Halen. ¿Con quién crees que estás hablando? —le contesté a secas mientras ambos invitados tenían la libertad inclusive de aparecer allí dentro a propia voluntad. Si los tres éramos un equipo, teníamos que tener ésa movilidad por cualquier cosa. ¿Algunos más se sumarían? Esperaba que si

Miré alrededor. No había nadie. De hecho, estaba seguro que no había nadie dentro de la mansión. A pesar de eso, moví mi varita y la entrada a la habitación se selló mágicamente

— No tenemos mucho tiempo —guardé mi varita y llevé a la mesa más cercana algunos pergaminos que tenía allí. Solo tenía algunos datos mínimos como nombres. También había recortes de periódicos y fotografías—. He estado buscando pero me he encontrado con algunos callejones sin salida —no hablaba muy bien de mí al admitir aquello. Pero tal vez proponiéndolos ambos me ayudaban—. Pero todo me indica que el Inquisidor y Aaron Yaxley son la misma persona. He buscado pistas. He intentado buscar información y todo me lleva a eso.

Era una conjetura que no había compartido con casi nadie más. Solamente lo sabían otras dos personas pero realmente no habían mostrado demasiado interés. Le mostré a ambos los titulares que rezaban los desastres que habían ocurrido en el mundo mágico, como los ataques a Hogwarts, San Mungo y el MACUSA. Tambien el desastre que el ex Ministro había hecho con los Sagrado 28 en aquella reunión, la disolución del Estatuto del Secreto y la guerra contra Bulgaria.

— Pero cada vez que me acerco se me escapa. Y no solo eso. Claramente que los mortífagos tienen que ver. La otra vez, estuve en la bótica de Cissy Macnair y rescaté a Sagitas secuestrada. La llevé a mi negocio y automáticamente llegaron a nosotros 2 mortífagas. Aaron suelto es un peligro y no logro dar con su paradero. Ni con el Inquisidor —¿sabían de las restricción de las fronteras? Yo mismo las había cerrado. Pero aún no había noticias

— Tal vez tú tienes más información útil. Necesitamos información. Necesitamos actuar ya.

A todo esto corría una gran ventaja, y era que Sagitas Potter Blue ahora era primera Ministra.

@@darla Potter Black @@Lisa Weasley Delacour

[Darla G Dumbledore]

Scarlet Akane

En la Mansión Gryffindor fingiendo ser Darla Potter Black

 

El aterrizaje en el estudio de la Gryffindor fue extraño, no podía recordar su la Potter Black alguna vez estuvo allí. Un escalofrío la obligó a retirar rápido la mano de la lata, evitando un roce que había hecho arder la apagada marca en su brazo, sepultada hacía más de un año en el tatuaje original de rosas y espadas. Observó la mirada de Elvis y le dedicó una sonrisa para tranquilizarlo, ella estaba bien. El Van Halen comentaba algo pero ella seguía recorriendo con la mirada el lugar, buscando un recuerdo y una imagen mental del escenario en el que el Gryffindor los acababa de encerrar, la seguridad ante todo.

 

En silencio se acercó a la mesa y observó los recortes que Elvis había volcado sobre ella, mordió su labio, sentía que había estado un año ausente. Podía sondear todo lo que quisiera la mente de Darla pero solo encontraría la vida cotidiana con Seba, sus viajes a Londres, sus idas día a día a Gringotts hasta su renuncia, su atender el local. Nada, lo único que había fue al inicio de la guerra con Bulgaria, habían utilizado los contactos de la Akane para estar informados y la red de contrabando para organizar un cambio del hogar de los Granger a la ciudad que eligieran, iban a dejar un portal al estilo del de Chrookshanks en su local para ir y venir pero lo cerrarían si todo se desmadraba, aunque nunca llegaron a habilitarlo. Las palabras de Elvis la trajeron de regreso, levantó la vista de los papeles, miró al mago y volvió a buscar la nota a la que había hecho referencia.

 

--Aaron --susurró sin poder evitarlo pensando en el que había sido uno de los magos más apreciados por Darla en su otra vida. Mordió su labio, esas ideas era preligrosas. Los ojos de Scarlet volvieron a mirar con preocupación a Elvis.

 

--¿La rescataste? La tenían en la Delacour cuando... --se calló en seco, cuando ella había intentado ayudar a Nathan y Roxanne, dejando que una mortífaga se la llevara. Recordó la orden muda recibida de su compañera por la cual se había llevado de allí a Caelum Black. De pronto para la propia Scarlet los recuerdos se cerraron ¿sus recuerdos? ¿Por qué Darla no quería que recordara nada de Caelum. De pronto se dio cuenta que habia olvidado a alguien más, a Luca y desvió la mirada, y la atención, esperaba, hacia él.

 

--¿Qué sabes de Aaron? --preguntó ella misma dándose cuenta que aquel germen de idea no había salido de ella. ¿Me dejarás fingir ser tú o pretendes volver? gruñó en su propia mente, sintiendo un frío vacío como respuesta, esperaba que la del Van Halen fuera una más provechosa. Ya tendrían tiempo de discutir qué demonios estaba pasando con el trato entre las dos brujas.

 

 

@@Lisa Weasley Delacour @

Editado 27 de Noviembre del 2020 por Scarlet Akane