☽The Cawing Crow☾ (MM B: 102478)

[Alexis Miller]

Mis ojos se levantan ante la oscuridad del tiempo y solo escucho voces, las aves se arremolinan en mi cabeza, aves sin ojos, con varas incrustadas en sus cuencos, son libres vagabundas y con sus alas extendidas como hadas oscuras. Estoy como una lápida sobre la barra que sostiene mi cuerpo, es una llama invisible, una espada fría, persistente cólera que quiere acabar con todo, con el mundo seco, con el mundo desangrado, acabar con todo.

 

-el tiempo es relativo… pareciera a mis ojos que solo te vi ayer–Mi sonrisa se transforma en una especie de actuación surreal, se queda trabada en mis labios al oír su ligera pregunta ¡acaso debe meterse en los asuntos de los demás? Sus ojos verdosos… mis demonios…. Ladeo el rostro y no quiero verlo, no quiero herirlo como se espera de mi manía por los verdes que me quiere hacer caer… - no, Myddrin pero tú sabes, qué… es…

 

Acentuando cada palabra, siento como mi pecho empuja, arde, sombrío a veces apagado y ardiente, de pronto se siente desierto sin bordes donde poder sostenerse…. Estoy sola contra el mundo, con dos demonios, con mi propio sabor a muerte… esa sed no es saciada, clama por más sangre pero su calma, sus bromas me atraen a la realidad….

Tendría que ser tonto para no darse cuenta que Miller ya no es la misma de antes… pero el sí puede hacer un cambio para calmar a la nueva y recuperar lo que queda… - No estoy nerviosa y si te extrañe... quien mas puede aguantar la locura y frialdad de esta mujer?? - y la ansiedad desaparece.

 

Bebo un trago con ese dulzor que quema mi garganta… el vino siempre es la solución, la madera, la cosecha, mi cabeza se esclarece, mi mirada vuelve, pero temo mirar sus ojos no quiero los demonios regresen – vine a beber…. Tenía mucha sed…. – y la pregunta final no tiene respuesta - Myddrin por que estas solo? Quieres realmente saber? – y mire sus ojos finalment, los míos azules profundizan en el prado de sus verdes…. Me levante…. – salgamos de aquí…- mis intenciones? No las se.

[Leonardo Myrddin E.]

-¿Que quién más puede aguantarte? De eso no estoy nada seguro- Respondió, dándole otro sorbo a su vaso, y volviendo a mirarla a los ojos. Sabía que estaba tentando a la misma muerte al hacerlo, pero no le importaba. Estaba ya demasiado acostumbrado a arriesgar la vida. Aquella chica era como una caja de sorpresas.

 

-¿Por qué estoy solo, dices? Pues porque dejé a mi hijo en el castillo, y porque hay veces en las que me gusta andar solo- Dijo, mirando su vaso con aparente interés. La situación se había tornado muy extraña. La chica no había respondido a su segunda pregunta y además estaba actuando demasiado raro, incluso para ser ella.

 

-¿Salir? Pero ¿Por qué hacerlo? La noche es joven pequeña Alexis- Dijo, volviendo a llenar su vaso. -Todo a su tiempo, niña. Todo a su tiempo...- Murmuró distraídamente.

 

-¿Tu actitud extraña es a causa de esos demonios que llevas?- Preguntó, mirándola de nuevo -No eres la única que lleva otros seres dentro.- Si no tenía cuidado, podría acabar verdaderamente muerto

[Alexis Miller]

Los sonidos, las risas, las voces, las luces, los elixires, las danzas... todo es un giro de carrusel en una sala de alfombras bordadas y que las carcajadas maquilladas con lujuria y la embriaguez de los cuerpos hace que todo se torne en diferentes colores. Las bandejas pasan frente mío, hombres hermosos, mujeres hermosas, Sostuve mi caja con la certeza de que íbamos a salir, el notaba algo raro en mí y claro, era un mago pero no podía adivinar por ser mago si no por ser un viejo conocido.

 

Me has llamado niña… Myddrin te odio por ello - miro nuestras copas, él se toma las cosas con calma y a mis demonios les parece divertido, ¿Acaso también rechazo mi invitación?? la sonrisa puede dibujarse de tantos tonos y esta es la verdadera sonrisa que emana de los labios de esta Mujer. – gracias…- y no tenía a bien recibir la copa y agradecer por el vino…porque mi agradecimiento no tenía nada que ver con el licor.... si no con su determinación a sacar lo mejor de mí.... a entrar en esa mente llena de espejos llena de payasos, de sangre de muerte de deseo.

 

-No tienes que preguntarme todas esas cosas Myddrin, ya nadie puede salvarme – adquirir color y sostener mi cajita entre mis dedos me hizo relajar, yo sabía lo que decía, yo sabía que aunque pudieran salvarme esto formaba parte de mí, y muy interiormente… me gustaba… me gustaba y es un crimen aceptarlo.

 

mis ojos brillaban, un resplandor se apoderaba de mi porque ya no estaba aquella loca hablando ya no eran los demonios, estaba yo…. Siendo observada como yo realmente soy, una de las pocas veces que permitiría que eso pasara.

 

Aun la gente no se atrevía a mirarme, un ente rodeaba mi ser… y tome sus manos – es hora de moverse... quieres? – pero no lejos, la pista de baile era nuestro centro…la botella también que traía entre mis dedos sosteniendo con mis brazos el corazón que había arrancado.

[Leonardo Myrddin E.]

-Y me seguirás odiando por el resto de tu vida- Respondió el castaño, bebiendo otro sorbo de su bebida. Miró una vez más a aquella mujer. Estaba sonriendo. Aquella sonrisa se veía de una forma muy diferente a la forma maliciosa que tenía al sonreír. Incluso ella se veía diferente -Ummm... gracias por...qué?- preguntó, volviendo a llevar el vaso a sus labios y mirándola de reojo.

 

-¿Salvarte? Oh, dudo mucho que puedas salvarte. No existe tal cosa como la salvación. Lo único que puedes hacer es afrontarlo. Contrólalos- Dijo, dejando su vaso en la mesa, y mirándola a los ojos. -Es lo único que podrías hacer- En aquel momento, se puso a recordar a Mekyue, el vampiro que tenía encerrado en su cuerpo desde que era un niño, y aunque fue algo duro al principio, finalmente pudo mantenerlo a raya, evitando que lo perjudicara de alguna forma.

 

-¿Quieres...bailar?- Preguntó el Myrddin, en el momento en que ella lo tomó de las manos, y lo sacó de sus pensamientos.-Si claro. ¿Por qué no?- Respondió con una sonrisa.

 

-¿Sabes? Creo que sería mucho mejor si guardaras tu cajita- Dijo, poniendose de pie, y yendo hacia la pista de baile.

 

@@Alexis Miller

[Alexis Miller]

Sólo comprendemos aquellas preguntas

Que podemos responder.

FriedrichNietzsche

Curiosa es la vida cuando te presenta a tu némesis, aquel con el que puedes hablar y entender, pero no te entiende, rehúye tu historia, te hace dudar… me pregunta muchas cosas y no presto atención a ellas, porque aunque mi mente divaga estoy con él, estoy despierta – dime… ¿Por qué crees que quiero controlarlos? – oh frialdad desmedida que juega con mi vida, sonrío al ver sus ojos, él puede entender quizás mi molestia, quizá amoldarse a mis pensamientos pero nunca querrá entender que disfruto con mis sombras, que amo mis demonios porque he aceptado mi realidad.

 

Y algo me inquieta, no es la hora, no es la multitud acercándose para también moverse a la pieza que llevamos, es el tic tac en mi cabeza, el tic tac de un corazón en mi cajita que no se guardar… lo ha mencionado y abrí mis azules chocando con los suyos que se sorprenden – Myddrin… si la cajita se mueve yo también… si dices algo no sobrevivirás esta noche...

 

Lo amenazo, no quiero que se involucre, me agrada, bailo con él, sé que el frio ha invadido nuestro espacio y hablo otra vez- Debería disculparme? Myddrin me debes más que un baile – susurre medio sonriendo, perdiéndome en la danza con sus pasos sin acuerdo, le sigo, sonrío… me he olvidado del tiempo y nada más que mi cajita preocupa esta mente que baila y se une a la diversión de ser alguien normal por una noche, de ser una mujer.

 

 

 

off:

@@Leonardo Myrddin E. perdonameee la esperaaa si hasta de mis clases habia dejado de asistir porque pasaba por un momento de cero inspiracion <3 no te enojes :')

[Leonardo Myrddin E.]

-No sé tú, pero a mi no me gusta que me controlen. Si voy a hacer algo, prefiero que sea por voluntad propia- Respondió el Myrddin a la pregunta de la chica, mirando fijamente a aquellos ojos de color azul que lo atrapaban con mucha facilidad. Era cierto, detestaba que el alma del vampiro que habitaba su cuerpo tomara control de él, y por más veces que lo había amenazado con expulsarlo de su cuerpo, no lo había hecho, debido a que se había acostumbrado a su silenciosa compañía.

 

-Ok, como quieras. Sólo era una sugerencia- Murmuró con una sonrisa, sin quitar en ningún momento la vista de sus ojos. La caja olía a sangre, lo había sentido nada más ella había llegado, lo cual había despertado la curiosidad del castaño respecto a aquél objeto, y a su portadora.

 

-¿Algo más que un baile?- Preguntó con curiosidad, mientras la hacía girar. -¿Qué es lo que tienes en mente? Soy todo oídos- El Myrddin la acercó a él, volviendo a tomar su mano, y colocando la otra en su cintura. -Podríamos ir a otro lugar- murmuró, a sabiendas de que aquello era algo arriesgado, pero a la vez lo interesado por la idea de conocer un poco más de aquella persona que lo acompañaba.

 

@@Alexis Miller y tú que no me creíste ¬¬

[Fokker]

Era una noche normal en el bar, varios grupos esperaban su momento para subir al escenario y deleitar al publico, al mismo tiempo de tener la oportunidad de darse a conocer en el mundo de la música. El encargado del negocio, el viejo Atticus, se veía atareado en particular esa noche, y no por la cantidad de grupos, sino porque uno de los dueños decidió hacer el salto al escenario, y como tal trataba de darle las máximas comodidades posibles.

Entre tanto, el chico de orbes rojas se encontraba sentado junto a la barra balanceando su copa sobre la palma de la mano por unos segundos, antes de beberse el contenido de la misma y hacerla girar sobre la mesa sin perderla de vista. Era su manera de olvidarse de la actuación de la noche, no deseaba estar nervioso, mejor dicho, ansioso, esa es la palabra que describía al joven esa noche. Tomó el estuche negro que se encontraba apoyado a la barra aun lado suyo, para colocarlo sobre la misma y extraer el contenido, que era una magnifica guitarra que utilizaria en la presentación.

La idea de fundar un negocio como aquel era justo para participar como solista, idea que compartía con su socio y hermano, idea que decidió no posponer mas. Traía puesta una casaca negra, camisa blanca, jeans oscuros y zapatos del mismo color. La gente era poca, pero eso no le importaba, Atticus finalmente le informó que llegó su turno. El pelinegro cogió la guitarra entre sus manos y fue directamente al escenario, subiendo las escaleras. Saludo a los tres músicos que lo acompañarían en su actuación, de ellos sabia que eran los mejores del lugar.

Esperó unos minutos, y viendo que todo estaba correcto, dejó que el baterista marcará el inicio con sus baquetas, la música fluyo suave, y a pesar de que no tuvieron ensayo previo, y el ritmo era el correcto. El chico se dejo de llevar entonces, tocando la guitarra y se adelanto en el escenario tomando algo de aliento antes de empezar la canción.

Yo estaba en un club con mi guitarra

no había mucha gente y de espaldas

andaban conversando. ♫

dejó escapar las primeras notas sin fijarse en el publico, le importaba más estar disfrutando lo que siempre quizó hacer. Sus manos, sus dedos se deslizaban ágilmente entre los trastes plateados de la fina guitarra negra, parecía algo mágico. se rectifico al instante, la música simplemente es magia.

Pero sentí un amor que me miraba,

concho de vino el pelo, delgada,

ojos de caramelo. ♫

Entonces sintió algo, esa sensación inequívoca de ser observado, aunque era obvio que estuviera las miradas de los presentes, así que no le dio tanta importancia y siguió con lo suyo. Pero la sensación seguía. Afiló la vista e hizo una rápida búsqueda, algunos parecían prestarle atención, otros solo hablaban y bebían, pero una chica le llamó la atención, por el simple hecho de que al sentirse observada desvió la mirada.

Dicen que el amor es todo un proceso,

yo te juro que es mentira,

mi alma la amó en ese momento. ♫

No le dio importancia pero la curiosidad lo venció por completo, y no perdió la vista de ella a partir de ese momento, esa extraña sensación que decían atracción, o quizás eso que nombran como amor comenzó a surgir en su ser. Perdió por unos segundos el control de sus acciones, y perdió el ritmo de la música, los miembros de la banda se miraron entre sí, y se escuchó algún silbido de parte del público.

Perdí la razón, perdí las palabras,

Perdí la noción del tiempo,

fue claro, no fue un presentimiento

Siempre ocurre pero no es igual

siempre ocurre pero no es igual

no es igual. ♫

Recuperó el control rápidamente, tranquilizando a sus colegas, pero sin dejar de pensar en ella, qué es lo que sucedía con él, esas cosas no pasaban realmente y menos en un momento así, donde se supone que en lo único que debía pensar era en su actuación y en disfrutarla.

Me estoy enamorando,

se que para toda la vida

me estoy enamorando,

se que para toda la vida. ♫

Terminó pronto la canción y un par de su repertorio de aquella noche, no fueron pocos los aplausos que recibió por la misma, algo que en verdad no esperaba, pero ahora solo estaba obsesionado con aquella dama misteriosa, y luego de pensarlo, sabia lo que tenia que hacer al bajar del escenario, y solo alcanzó la guitarra a un elfo. Prácticamente fue directa a ella, y aunque esa acción fue algo agresiva, la joven no "escapó" como pensaba, sino que lo esperaba.

Tres de la mañana llamé a tu cuarto.

discúlpeme señorita, me encanta, me gusta,

soy sincero. ♫

Se presentó como tal, uno de los dueños del bar y preguntó si le agradó la presentación. uno de los empleados llegó al poco rato con una botella de buen vodka y se lo ofreció. La joven respondió con una sonrisa, y lo invitó a sentarse en su mesa. Él expresó los deseos de conocerla un poco más, pero el primero le contó algunos detalles de su vida, mientras la mujer solo veia de su copa y sonriendo a cada momento, por ultimo le dijo que ella le gustaba y quería pasar una agradable noche y espero por su respuesta.

Después de una hora de estar callada,

me dijo yo te sigo y te amo

desde hace mucho tiempo. ♫

Hubo una pausa incomoda entonces, mientras ella terminaba de beber su copa, minutos que fueron eternos para el chico. Pensó, no sin razón que fue un poco apresurado en sus acciones y que nada ocurre tan de pronto, pero finalmente ella respondió, lo que deseaba escuchar,. Cambiando el momento de tensión por una sonrisa de alivio en el chico acompàñado de un corto ¡uff !

Me estoy enamorando,

se que para toda la vida

me estoy enamorando,

se que para toda la vida. ♫

Entonces la conversación solo fluyó y las copas y las risas llegaron hasta la madrugada, la gente empezaba a retirarse y ambos chicos quedaron solos. No podía negar que aquella cita no planeada estaba saliendo de lo mejor, estaba encadilado con su voz, pero sus ojos son los que mas le llamaban la atención. La noche aún era joven, y asi se lo dio a entender sugiriendo ir a algún otro lado. Ella dudo por unos segundos, pero finalmente aceptó, el joven entonces tomo su mano y salieron juntos de aquel local.

Con su voz de niña quedé obsesionado,

tomé un taxi a escondidas.

mi alma llegó antes que mi cuerpo. ♫

La luna brillaba y a pesar que era una noche de invierno, algo que no parecían notar debido al calor de sus cuerpo y solo se dejaron llevar por aquel momento. Y ya sea por los estragos del licor o solo por el instinto de ambos se acercaron, él tomándola por la cintura y ella elevándose sobre sus pies.

Su boca temblaba frente a la mía,

juntamos las narices, los labios,

morimos en silencio. ♫

Me estoy enamorando,

se que para toda la vida

me estoy enamorando,

se que para toda la vida. ♫

El cielo pronto indicó que la noche estaba terminando y que el día estaba por llegar. Pero a ambos jóvenes no pareció importarles, no hallaron lugar donde pasar el resto del día, pero eso no importaba. Los dos sabían que todo finalizaría apenas se despidieran, pero eso no les importaba, solo querían disfrutar de cada uno, y eso es lo que hicieron, sabiendo que nadie los iba a juzgar, que nadie les iba a impedir estar juntos por ese día.

Tu voz sobre mis labios

yo la respiro todavía

Tu pelo entre mis dedos

lo que me mata y me hipnotiza

tu piel bajo mis manos

lo que deseo todo el día ♫

Porque a veces esa es la vida, solo dejarse llevar, hablar de tonterias y recordar al día siguiente aquella noche de lujuria, de pasión pero también de amor fugaz.

[Fokker]

Era una noche normal en el bar, varios grupos esperaban su momento para subir al escenario y deleitar al publico, al mismo tiempo de tener la oportunidad de darse a conocer en el mundo de la música. El encargado del negocio, el viejo Atticus, se veía atareado en particular esa noche, y no por la cantidad de grupos, sino porque uno de los dueños decidió hacer el salto al escenario, y como tal trataba de darle las máximas comodidades posibles.

Entre tanto, el chico de orbes rojas se encontraba sentado junto a la barra balanceando su copa sobre la palma de la mano por unos segundos, antes de beberse el contenido de la misma y hacerla girar sobre la mesa sin perderla de vista. Era su manera de olvidarse de la actuación de la noche, no deseaba estar nervioso, mejor dicho, ansioso, esa es la palabra que describía al joven esa noche. Tomó el estuche negro que se encontraba apoyado a la barra aun lado suyo, para colocarlo sobre la misma y extraer el contenido, que era una magnifica guitarra que utilizaria en la presentación.

La idea de fundar un negocio como aquel era justo para participar como solista, idea que compartía con su socio y hermano, idea que decidió no posponer mas. Traía puesta una casaca negra, camisa blanca, jeans oscuros y zapatos del mismo color. La gente era poca, pero eso no le importaba, Atticus finalmente le informó que llegó su turno. El pelinegro cogió la guitarra entre sus manos y fue directamente al escenario, subiendo las escaleras. Saludo a los tres músicos que lo acompañarían en su actuación, de ellos sabia que eran los mejores del lugar.

Esperó unos minutos, y viendo que todo estaba correcto, dejó que el baterista marcará el inicio con sus baquetas, la música fluyo suave, y a pesar de que no tuvieron ensayo previo, y el ritmo era el correcto. El chico se dejo de llevar entonces, tocando la guitarra y se adelanto en el escenario tomando algo de aliento antes de empezar la canción.

Yo estaba en un club con mi guitarra

no había mucha gente y de espaldas

andaban conversando. ♫

dejó escapar las primeras notas sin fijarse en el publico, le importaba más estar disfrutando lo que siempre quizó hacer. Sus manos, sus dedos se deslizaban ágilmente entre los trastes plateados de la fina guitarra negra, parecía algo mágico. se rectifico al instante, la música simplemente es magia.

Pero sentí un amor que me miraba,

concho de vino el pelo, delgada,

ojos de caramelo. ♫

Entonces sintió algo, esa sensación inequívoca de ser observado, aunque era obvio que estuviera las miradas de los presentes, así que no le dio tanta importancia y siguió con lo suyo. Pero la sensación seguía. Afiló la vista e hizo una rápida búsqueda, algunos parecían prestarle atención, otros solo hablaban y bebían, pero una chica le llamó la atención, por el simple hecho de que al sentirse observada desvió la mirada.

Dicen que el amor es todo un proceso,

yo te juro que es mentira,

mi alma la amó en ese momento. ♫

No le dio importancia pero la curiosidad lo venció por completo, y no perdió la vista de ella a partir de ese momento, esa extraña sensación que decían atracción, o quizás eso que nombran como amor comenzó a surgir en su ser. Perdió por unos segundos el control de sus acciones, y perdió el ritmo de la música, los miembros de la banda se miraron entre sí, y se escuchó algún silbido de parte del público.

Perdí la razón, perdí las palabras,

Perdí la noción del tiempo,

fue claro, no fue un presentimiento

Siempre ocurre pero no es igual

siempre ocurre pero no es igual

no es igual. ♫

Recuperó el control rápidamente, tranquilizando a sus colegas, pero sin dejar de pensar en ella, qué es lo que sucedía con él, esas cosas no pasaban realmente y menos en un momento así, donde se supone que en lo único que debía pensar era en su actuación y en disfrutarla.

Me estoy enamorando,

se que para toda la vida

me estoy enamorando,

se que para toda la vida. ♫

Terminó pronto la canción y un par de su repertorio de aquella noche, no fueron pocos los aplausos que recibió por la misma, algo que en verdad no esperaba, pero ahora solo estaba obsesionado con aquella dama misteriosa, y luego de pensarlo, sabia lo que tenia que hacer al bajar del escenario, y solo alcanzó la guitarra a un elfo. Prácticamente fue directa a ella, y aunque esa acción fue algo agresiva, la joven no "escapó" como pensaba, sino que lo esperaba.

Tres de la mañana llamé a tu cuarto.

discúlpeme señorita, me encanta, me gusta,

soy sincero. ♫

Se presentó como tal, uno de los dueños del bar y preguntó si le agradó la presentación. uno de los empleados llegó al poco rato con una botella de buen vodka y se lo ofreció. La joven respondió con una sonrisa, y lo invitó a sentarse en su mesa. Él expresó los deseos de conocerla un poco más, pero el primero le contó algunos detalles de su vida, mientras la mujer solo veia de su copa y sonriendo a cada momento, por ultimo le dijo que ella le gustaba y quería pasar una agradable noche y espero por su respuesta.

Después de una hora de estar callada,

me dijo yo te sigo y te amo

desde hace mucho tiempo. ♫

Hubo una pausa incomoda entonces, mientras ella terminaba de beber su copa, minutos que fueron eternos para el chico. Pensó, no sin razón que fue un poco apresurado en sus acciones y que nada ocurre tan de pronto, pero finalmente ella respondió, lo que deseaba escuchar,. Cambiando el momento de tensión por una sonrisa de alivio en el chico acompàñado de un corto ¡uff !

Me estoy enamorando,

se que para toda la vida

me estoy enamorando,

se que para toda la vida. ♫

Entonces la conversación solo fluyó y las copas y las risas llegaron hasta la madrugada, la gente empezaba a retirarse y ambos chicos quedaron solos. No podía negar que aquella cita no planeada estaba saliendo de lo mejor, estaba encadilado con su voz, pero sus ojos son los que mas le llamaban la atención. La noche aún era joven, y asi se lo dio a entender sugiriendo ir a algún otro lado. Ella dudo por unos segundos, pero finalmente aceptó, el joven entonces tomo su mano y salieron juntos de aquel local.

Con su voz de niña quedé obsesionado,

tomé un taxi a escondidas.

mi alma llegó antes que mi cuerpo. ♫

La luna brillaba y a pesar que era una noche de invierno, algo que no parecían notar debido al calor de sus cuerpo y solo se dejaron llevar por aquel momento. Y ya sea por los estragos del licor o solo por el instinto de ambos se acercaron, él tomándola por la cintura y ella elevándose sobre sus pies.

Su boca temblaba frente a la mía,

juntamos las narices, los labios,

morimos en silencio. ♫

Me estoy enamorando,

se que para toda la vida

me estoy enamorando,

se que para toda la vida. ♫

El cielo pronto indicó que la noche estaba terminando y que el día estaba por llegar. Pero a ambos jóvenes no pareció importarles, no hallaron lugar donde pasar el resto del día, pero eso no importaba. Los dos sabían que todo finalizaría apenas se despidieran, pero eso no les importaba, solo querían disfrutar de cada uno, y eso es lo que hicieron, sabiendo que nadie los iba a juzgar, que nadie les iba a impedir estar juntos por ese día.

Tu voz sobre mis labios

yo la respiro todavía

Tu pelo entre mis dedos

lo que me mata y me hipnotiza

tu piel bajo mis manos

lo que deseo todo el día ♫

Porque a veces esa es la vida, solo dejarse llevar, hablar de tonterias y recordar al día siguiente aquella noche de lujuria, de pasión, pero también de amor fugaz.

[Anthony R. Dracony M.]

Miré la gran cantidad de carteles en mi mano...no, no, no...me venía bastante sueño...seguí caminando para no sucumbir al deseo de quedarme quieto y tumbarme ahí mismo. Me pongo a caminar más aprisa, tratando de espantar el sueño...y eso que apenas estoy iniciado!! ¡por Merlín!miró el local que me parece conocido, porque antes pasaba mucho a los locales y me entretenía durante el día.

Pienso en que faltan muchos locales, mejor veo como dejar el cartel sobre uno de los muros...así no tendré que entretenerme y antes de que me marche, coloco el cartel,

http://i.imgur.com/Sj4P7g7.png

Si pegar los carteles no era tan complicado, pero el cansancio me da sueño...creo que tendré que hacer un alto para descansar ...miró al frente y veo un buen lugar...una heladería para tomar un delicioso helado... http://www.harrylatino.org/topic/109623-feria-del-libro-magica/

[Juli10]

Caminaba lentamente por las calles de aquel callejón. Estaba vestido con una remera manga corta de color blanca, arriba una campera negra, unos jeans de color de la campera y unas zapatillas negras con detalles blancos. Aquel lugar estaba algo tranquilo por lo que solía ser antes, durante unos minutos de caminata, llegue hasta un lugar, el cual parecía ser una especie de bar, dirijo mi vista hacia el letrero

 

-¿The Cawing Crow?-

 

Dije con suavidad, no le di importancia... ya que ir a sentarme solo a beber algo solo, no era de mi agrado, tampoco era un chico solitario, así que decidí pasar de largo de aquel lugar, camine varios metro del lugar, hasta que pude visualizar a una chica bastante familiar, la cual había hablado unos días antes.

No nos conocíamos muy bien todavía, es mas, no estoy seguro de avernos dichos nuestros nombre. Supuse que una buena formar de conocer a alguien seria charlando, pero seria un poco raro charlar en medio del callejón, voltee mi cabeza para ver aquel bar, decidí ir a hablar con ella, para ofrecerle si quería acompañarme a tomar algo y si aceptaba, conocernos mejor

 

Camine lentamente hacia la chica, la cual estaba parada allí, llegue hasta ella, estaba un poco nervioso ya que seria un poco raro invitarla por invitar así que decidí hablarle primero

 

 

-Hola...- Dije suavemente al ver a la chica -¿Como estas? No se si te acuerdas de mi soy el chico con quien hablaste un rato aquel día... no se si te acuerdas de mi-