Libro del Caos

[Darla G Dumbledore]

La pelirroja se sentía desorientada, en realidad esperaba que el Uzza les diera más señales de qué hacer y cuándo, ¿tendría que utilizar solo ese hechizo que él les había indicado? No es que fuera una mujer que necesitara la guiaran, pero tampoco quería pasar por encima de él, utilizar el caos era algo que le resultaba interesante, sabía que podía manejarla, su vida había sido un caos alguna vez, aunque ahora tuviera el más fuerte y seguro de los cauces.

 

La pregunta de Dennis también era interesante y el señor del Caos aún no les daba ninguna respuesta. ¿Sería correcto llamar a Bakari de esa manera? Había leído al hombre muchas veces, lo recordaba, comentarios sobre él. No, el guerrero era mucho más que eso, sabía que no era uno de los señores del caos pero si el más digno de saber su magia en ese momento. Sus conocimientos no tenían desperdicio ni límites.

 

—¿Qué hace ahora un cíclope si lo invoco? La magia de bando a desaparecido, como si a todos nos hubieran aplicado un obliviate ¿qué utilizaría él si lo invocara o no podría hacer nada?

 

Mientras le preguntaba al guerrero sobre la invocación del cíclope ya Dennis había lanzado contra ella una andanada de flechas tras invocar la rueda del poder. Las flechas de fuego no parecían ser tan poderosas como debían pero inmediatamente la pelirroja había pensado en una salvaguarda mágica, el efecto fue instantáneo y la vampiresa se volvió intangible siendo atravesada por la invocación de flechas de fuego sin recibir ningún daño.

 

—Invoco las fuerzas del caos para obtener poder –no sabía si la suerte del caos la iba a favorecer como esperaba. Embrujo punzante, pensó e inmediatamente el rayo plateado surgió desde su varita hacia Dennis, esperaba que Bakari pronto les dejara usar otros hechizos o les explicara éstos y confiaba en que su compañera rival supiera evitar que le impactara el hechizo que le había lanzado o los efectos similares a una reacción alérgica la dejarían deformada y con un agudo dolor que incluso le impediría ver bien.

 

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@@Dennis Delacour

[Dennis Delacour]

1d3-2

Rueda del tiempo

[Dennis Delacour]

El Uzza guardaba silencio ante las inquietudes que sus pupilas lanzaban para aclarar dudas que pudieran costarles errores al usar los poderes de aquel libro que era un poco complicado a su parecer comparado con los otros libros que había cursado antes, tantos elementos actuando en un duelo podrían ser algo bastante enredado.

 

Darla se defendió de su ataque con habilidad y luego lanzo una nueva pregunta a Bakari que aunque estaba presente de cuerpo no podía decir lo mismo de su mente, escucho la nueva pregunta de la bruja esperando también la aclaración para entender más sobre esos poderes. - cuando se usa el señor del caos, cuantas criaturas al tiempo pueden estar convocadas? - pregunto con la esperanza de entender mejor.

 

Sin tener claro lo de los rangos se le hacia un poco aburrido seguir usando la rueda del poder ya que no sumaba ni restaba nada al suelo por lo que probaría otra cosa. Vio como de la varita de su oponente empezaba a salir un rayo - invoco las fuerzas del caos para disponer del tiempo - pero el Rayo siguió su curso y no se vio afectado - salvaguarda mágica - pensó justo antes de ser alcanzada por aquel rayo debido a la distancia que recorrió.

 

Habia intentando anular el ataque de la bruja volviendo el tiempo con la ayuda de los poderes del caos pero no había ocurrido nada por lo que el resultado de la rueda del tiempo simplemente no le había aportado nada.

 

El silencio del Uzza seguía presente asi que solo les quedaba esperar mientras continuaban aquel duelo. -espiskey- pensó para continuar curandose de los daños causados por el cinaede usado antes por Darla, había sido más fuerte de lo esperado debido al nivel mágico de la bruja que al parecer tenía más experiencia que ella.

 

Esperaba que no se molestara aquel Guerrero por usar un poder diferente al indicado pero de alguna manera tenían que ir practicando los poderes de aquel libro si querían avanzar en el.

 

@@Darla Potter Black

 

Rueda del tiempo

[Darla G Dumbledore]

1d7

Señor del Caos

[Darla G Dumbledore]

La pelirroja lo pensó, la pregunta de Dennis no estaba mal e incluso creía que ella misma podía responderla. Esperaba que a la bruja no le molestara y no era que ella quisiera hacer alarde, pero luego de meditar lo de las criaturas recordó que lo había leído.

 

--Los niveles mágicos del veinte al veintinueve pueden utilizar una sola vez los hechizos por duelo, los niveles treinta a en adelante pueden dos veces creo que la cantidad de criaturas dependerá de que si ambos magos pueden invocar o cuántos magos hubiera en una redada y su nivel mágico astuto no usar de nuevo un poder que no puedes o eso creo --Darla no estaba del todo si al aprender había excepciones lo que sí le parecía buena idea probar otros hechizos.

 

--Y ya que estamos en medio del caos... --la bruja respiró profundo, era arriesgado y apenas estaba aprendiendo a utilizar el libro pero --invoco las fuerzas del caos para invocar a un señor del caos --los ojos de Darla se abrieron como platos mientras jugaba a la suerte con la situación que acababa de plantear.

 

Entre ella y su rival, sin interponerse o evitar los hechizos de Darla hacia Dennis, había un cíclope, su maldita pregunta se había materializado frente a ella. El gigante de un ojo la miró y pareció hacer un gesto de estoy listo para que me ordenes. ¿Pero qué? ¿Qué podía mandarle usar? No era Mago Oscuro, no era Templario, no era nada. Darla se encogió de hombros como haciendo un gesto de no tengo idea de qué puedes hacer y por lo visto le leyó la mente porque el ciclope lanzó una andanada de disparo de flechas hacia Dennis mientras la propia pelirroja movía su varita. Dennis se había salvado del rayo del embrujo punzante, ¿podría salvarse ahora de las flechas? Darla se apresuró a intercala su siguiente hechizo antes de que Dennis se volviera a curar del cinaede.

 

--Morphos --tras pronunciar el hechizo la túnica que llevaba Dennis se había transformado en un pequeño escorpión que comenzó a correr por el centro de la espalda de la rubia hacia su cuello con la intención de picarla en el lado derecho del mismo, era un toque loco, dos pequeños picotazos uno junto al otro como si la propia Darla, como vampiresa, mordiera a la bruja, claro que ella estaba a tiempo de dejar que aquello pasara o evitarlo. En realidad no quería dañar a la bruja, no tenía nada contra ella, al contrario, y además sabía que Seba la apreciaba.

 

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@@Dennis Delacour

 

off: perdón, los malditos guiones se me habían borrado

Editado 23 de Junio del 2019 por Darla Potter Black

[Bakari]

Bakari contempló a las dos muchachas mientras expresaban sus dudas sobre los hechizos y las consecuencias según las Leyes del Caos. Permaneció impasible, analizando a cada una de ellas. La señorita Potter Black falló en su primer intento puesto al usar las fuerzas del Caos, con lo que su hechizo Cinaede no salió nada ni provocó ninguna reacción en la otra muchacha. Tampoco reaccionó cuando la Señorita Delacour, confundida por la audición del hechizo de su contrincante, se defendió de él cuando no había funcionado.

 

- ¡Débiles e insignificantes muchachas...! - dijo en voz alta. No le importaba que le oyeran. Él era un Uzza orgulloso y ver esos dos intentos patéticos le demostraban que era un error obedecer aquel contrato que les obligaba estar allá, en vez de su amada Tierra de los Uzza.

 

La llegada de la alumna rezagada tampoco provocó ninguna reacción del Uzza. Se mantuvo distante, mirando a las alumnas quienes habían decidido seguir atacándose. Era prometedor que admitieran que sólo la práctica les llevaría al dominio del Libro, así que se mantuvo firme, con las manos en la espalda, buscando los defectos en el uso de las fuerzas del Caos.

 

- No creería que los daños serían eternos, ¿verdad, señorita Malfoy? Veo que usted se tomó su tiempo para curarse las heridas. ¿Dejó cicatrices? - Una leve mirada de reojo hacia Beltis fue el reconocimiento máximo que hizo el Uzza sobre la presencia de la mujer. - Las cicatrices son el mapa de nuestras victorias.

 

El Uzza se balanceó un poco sobre sus pies, orgulloso de mostrar sus propias heridas de guerra, un balance positivo de su propia vida y sus batallas en este mundo. Se movió de forma lateral para dejar pasar unas flechas de fuego que se iban desvaneciendo, sin mover los pies de su lugar de vigía.

 

- Mejor esta vez.

 

Se adelantó un par de pasos hacia ellas pero manteniendo un poco la distancia. Le convenía que supieran que no les interesaban ellas aunque el placer de Guerrero le obligaba a quedarse en aquel lugar.

 

- ¿Desde cuándo no hay bandos, señoritas? Creo que están en un error. Por lo que sé, cualquiera puede ser lo que quiera y defender la ideología que quiera. Por lo que sé, señoritas - enfatizó estas palabras, - los bandos y sus acciones perduran en la medida que cualquiera quiera defender una forma de pensar diferente al contrario. Es cierto que son sociedades anónimas que casi nadie conoce a sus miembros y que corren tiempos oscuros en los que apenas se están manifestando en el pueblo. Pero eso no es ninguna excusa para que, quien lo sea, use los hechizos que... sepan.

 

Era un Uzza al que acostumbraban de tachar de loco pero sabía bien las cosas que pasaban en el pueblo. A ningún Uzza se le escapaba nada de aquella ciudad en la que estaban obligados a permanecer mientras les atara el Segundo Contrato.

 

- Así, el nivel superior o inferior ustedes lo conocen mejor que nadie, sabiendo si son simples... ¿Cómo los llaman ustedes? Neutrales, recién graduados o... algo más. Por mí no se preocupen. Nunca me han interesado sus guerras, así que tampoco me importan los rangos que puedan o no tener en... alguno de esos denominados bandos. Sólo me preocupa saber si saldrán vivos de estas prácticas con el Libro del Caos.

 

Aunque no entendía el miedo que se había extendido entre los habitantes de aquella gran ciudad sobre bandos y la paz que parecían respirar entre comillas desde hacía meses, intentaba respetar a aquella sociedad tan incomprensible para él. Para todos los Uzza, en realidad. No parecían dignos descendientes del Gran Merlín.

 

- Lo que importa realmente es la magia que ustedes crean conocer. Con una Rueda del Tiempo, el Caos usa un multiplicador de la potencia del hechizo que les ha lanzado su oponente. Es una breve pero intensa manipulación del Tiempo para que su efecto sea más poderoso o menos poderoso, lo que influirá en la gravedad con que impacte en ustedes. Si impacta en negativo, tendrán la suerte de que no les afecte. Aunque El Caos es voluble, puede burlarse y hacer que el daño sera mucho más intenso. Será la suerte lo que dictamine lo que suceda.

 

Y la Suerte fue quien hizo que la Señorita Potter Black se tuviera que responder a sí misma sobre su propia pregunta. Bakari enarboló una sonrisa que, en algunos, podría parecer una burla.

 

- ¿Es que desconoce los hechizos que puede hacer el Cíclope, señorita Potter Black? Durante tres turnos, este "mercenario" le obedecerá en todo, usando los hechizos que usted le mande. Conoce perfectamente los hechizos que corresponden a ese rango de mago oscuro - acentuó un poco más la mueca - o de templario. Si no quiere reconocerlo, aguántese con hechizos de neutrales que poco le ayudarán a sobrevivir y vencer en su duelo. Que nadie oiga hablar de los bandos no significa que hayan desaparecido sino que nadie se atreve a usar en público esos hechizos, tal vez por miedo, tal vez por ignorancia, tal vez... ¿Es que es usted una kijkuyu, señorita Potter Black, o usted, señorita Delacour? Es lo equivalente a una gallina.

 

El Uzza no estaba dispuesto a reconocer que un Obliviate se hubiera encargado de hacer borrar los recuerdos de la existencia de los hechizos de los famosos bandos. Era miedo, era orgullo mal controlado, era desconocimiento, era... La Vulnerabilidad de los Seres de aquellas tierras lo que estaba provocando esta negatividad que los hacía vulnerables.

 

- ¡Débiles! - volvió a decir en voz alta; se giró hacia la figura rubia que contemplaba a las duelistas, aún con las dos manos a la espalda. @@Beltis Malfoy estaba muy cerca para ignorarla.- ¿Se atreve a enseñarles alguna cosa del Caos, mujer? Tal vez pueda responder la pregunta que ha hecho la Señorita Delacour y que ha contestado mal la señorita Potter Black.

 

Volvió la vista hacia aquellas dos mujeres que danzaban a su alrededor en un símil de duelo.

 

- ¿O prefiere empezar ya el duelo final para demostrarme que conoce todos los conocimientos suficientes de este gran libro? Ustedes dos, no olviden curarse, si lo necesitan. No quiero muertos en mi clase.

[Dennis Delacour]

1d7

Señor del caos

[Dennis Delacour]

Darla se había tomado la libertad de responder a una de las preguntas que la ojiazul había lanzado al Uzza lo cual agradeció con un asentimiento de cabeza aunque para ser sincera no le quedó tan claro como esperaba pero suponía que con la práctica de los poderes de aquel libro terminaría comprendiendolo mejor.

 

Al fin el Uzza había salido de su estado meditativo para responder a las preguntas que las brujas habían lanzado durante lo que llevaban en aquel duelo a la espera de aclarar dudas, aunque como era de esperarse Bakari les había respondido no sin antes haberles indicado que no eran más que brujas débiles o incluso les había dado a entender que eran unas gallinas a lo cual la Delacour no hizo ni siquiera un gesto de molestia, había tenido que ver a lo largo de su vida con muchos magos o guerreros que se creían mejor que otros y eso le había permitido no darles la importancia que a veces buscaban y evitar que lo que dijeran fuera algo que le causara incomodidad. Aunque lo que le dio a entender después de aquellas palabras fue que la respuesta que su oponente le había dado no estaba del todo bien.

 

La bruja utilizo ahora el poder del señor del Caos y ante ella un cíclope se hacía presente para responder a todas las ordenes que la Potter Black le diera, era fascinante ver algo así realmente, la magia siempre encontraba formas de asombrarla. De pronto vio cómo un puñado de flechas salieron en su dirección justo cuando la bruja empezaba a pronunciar otro hechizo — Silencius — dijo apuntando con su varita a la bruja justo cuando decía Mor... evitando que terminara de decir aquel conjuro. Sin embargo las flechas habían logrado impactar en su humanidad, con la ventaja de que ninguna había dado en un órgano vital las quito con su mano.

 

Tenía que tomar más riesgos en ese duelo con el caos — Invocó las fuerzas del caos para invocar a un señor del caos — dijo y junto a ella se hizo presente una hechicera cuya belleza superaba cualquier cosa antes vista en el mundo, es que podría asegurar que incluso superaba por mucho la belleza de las veelas, era algo hipnotizante y a la vez maravilloso de ver.

 

Estaba tan concentrada en la imagen de la hechicera hasta que una punzada de dolor la sacó de sus pensamientos, pensando — Curación — sanó por completo del daño que le había ocasionado el Cinaede y también de las heridas de las flechas. Ahora estaba sana nuevamente por completo al menos por ahora.

 

La hechicera otra vez atrapaba su atención y sabiendo que eso no era normal empuñó su varita y pronunció — Finite incantatem — y nuevamente empezaba a sentir su mente un poco más despejada del control de aquella criatura aunque por ahora debía preocuparse del efecto que causaba en ella así como de combatir a su oponente.

 

—¿Por que pareciera que el libro del caos sirve más para complicarte que para brindarte ayuda a la hora de una batalla? — preguntó a Bakari quien seguía mirandolas con desprecio.

 

Señor del Caos

 

@@Darla Potter Black

[Darla G Dumbledore]

1d3-2

Rueda del tiempo

[Darla G Dumbledore]

El chillido del Uzza llegó hasta sus oídos, como para que no, no se necesitaba tener poderes vampíricos para oír que sí estaba vivo y despierto después de todo. No le asombraba para nada que les gritara de esa forma, ya había oído hablar de él, así que se contuvo de gritarle ella misma, especialmente cuando había llegado junto a ellas alguien más. Se sorprendió de ver a la rubia en el lugar, no recordaba cuándo fue la última vez que se cruzó con ella. Hacía mil años en el mundo mágico que permanecía tranquila y esperaba, no iba a cambiar ahora.

Las palabras del Uzza fueron tan… medidas, no negaba que para él las cicatrices eran premios, y seguramente tenía razón. A ella no le quedaban, incluso algunas de cuando era una simple mortal habían casi desaparecido por completo, creía que era su propia voluntad de seguir manteniendo esos “recuerdos” los que hacían los notara apenas más pálidos sobre su piel.

Se sorprendió y estuvo a punto de olvidar lo que hacía al escuchar el “mejor esta vez”, eso sí que era sorpresa, pero le alegró. Lo siguiente la dejó pensando, era cuestión de “política” tal vez, él tenía razón, se mordió el labio y supo que tenía un pequeño problema de conciencia. No. Era de seres humanos, o no tan humanos, según su raza. Que sepan… esas palabras resonaron en su cabeza, ella sabía, los había enfrentado, a uno y otro, mordió su labio. ¿Quién podía, hoy, impedirle usara esos hechizos? Entrecerró los ojos sin perder de vista a Dennis.

La rubia había enviado un silencius, ¿la había intercalado? Se dio cuenta que había perdido el ritmo en eso. Debía concentrar su mente y estar segura lo que le llevó a hacer una pregunta un poco… loca…

—En todo duelo siempre hubo “tiempos”, acciones, momentos, “turno” para actuar. Mi mercenario aquí presente ¿actúa como yo o tiene sus propias reglas como un tercero? ¿Me explico? —A decir verdad habían variado tantos las normas desde que ella había aprendido a lanzar hechizos con Sakurazukamori que no tenía idea en ese momento de en dónde estaba parada.

El ceño de la Potter Black se frunció, había recurrido a los conocimientos de la Akane para saber que la etnia Kĩkũyũ vivía en Kenia, se sorprendió de saber que una de las guerreras neófitas de Scarlet había sido de esa región cercana al Valle del Gran Rift.

—Dudo a ellos les guste le llamen gallinas —dijo entre dientes, aunque no podría decirse si fue ella o la Akane la que habló, el alter ego que poseía a la Potter Black a veces lograba escapar y a veces su horrocrux le permitía dar señales de vida.


—Sin muertos —dijo Darla para agregar tras ello — invoco a las fuerzas del caos para disponer del tiempo –la suerte estaba del lado de la Delacour y el hechizo que había lanzado previamente Dennis resultó efectivo para silenciarla, Darla insultó para sus adentros, aunque sospechaba que aquello era una paradoja, sobre todo porque pensaba que no había silenciado su morphos sino su invocación de la rueda del tiempo.

Como si le hubiera leído la mente, el cíclope hizo un movimiento, por un momento pareció que iría tras el guerrero, pero ni él ni la Potter Black estaban tan locos, así que apuntó a Dennis y por la mente de la criatura pasó un Fuego Púrpura. El cíclope se había ubicado a seis metros de la bruja, por lo cual la invocación surgió como una llamarada violeta que de impactar a la joven la dejaría inconsciente, él había logrado lanzar su hechizo casi a la par que la Potter Black tras el silencius de Dennis e intercalando su siguiente hechizo, que parecía haber salido en su contra al invocar a una hechicera.

—Incarcerus —pronunció la pelirroja, intercalando al segundo hechizo de Dennis, tras que ésta intentara silenciar su morphos, pensando que si las cuerdas ataban los tobillos, las muñecas a la altura de las caderas y los codos a la altura de la cintura de Dennis, ésta estaría bastante detenida como para que la hechicera que había invocado la terminara seduciendo y besando.

Y no sería ese el único problema de la muchacha con su hechicera, como si quisiera reforzar la situación el cíclope volvió a atacar a Dennis.

—Séneca —el hechizo más odiado por la Potter Black había sido utilizado, el efecto dejaría sin voz a Dennis, su próximo hechizo podría ser verbal pero por tres turnos, podría usar solo no verbales. Eso seguro no le gustaría a Bakari, no había visto no verbales en el libro del caos.

 

 

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Off: perdón, olvidé la captura

Editado 26 de Junio del 2019 por Darla Potter Black