Instituto Internacional de Investigación a la Magia.

[Tauro M.]

Cuando la situación no podía ponerse más difícil, cuando las cosas no podían hacer sino empeorar, una nueva miembro se les unió. Es como si un representante por cada raza se hubiese puesto de acuerdo para reunirse y firmar algún tipo tratado. Un vampiro, dos demonios, un semi-demonio y una mujer lobo, que lejos de no sé, presentarse como cualquier otra persona normal, había decidido caer en sus cuatro patas sobre ellos para evitar que se fueran a los golpes. Y por supuesto que había leído sus pensamientos, ella se lo había permitido. ¿Qué pretendía? Quizás le hubiese dado las gracias por romper el momento de liberación de Jeremy, quién había reaccionado de manera inesperada también, esta vez no usándola de escudo como en el Juan Valdez, pero no podía tener ningún pensamiento bueno hacia alguien que quería actuar de salvadora.

 

— ¡Por supuesto que hay un demonio! Lo noté prácticamente mucho antes de que llegaras, gracias —dijo liberándose incluso de la protección del Triviani. Estaba exasperada.

 

Su atención se desvía hacia Sophie, quién logra terminar el ritual y se encuentra de la mismísima Lilith. Es obvio que su presencia no es del agrado de Tauro, quién evita mirar hacia allá. No es que desteste a Lilith, no podría, pero no se siente cómoda ante ella.

 

Las instrucciones de Sophie son tan claras como difíciles de seguir al pie de la letra. No tiene muy en claro cual es el sacrificio, qué es lo que deben entregar a cambio por la ayuda prestaba por Lilith, pero está segura que se centrará en el único hombre, aparte de Asmodeos, que se encuentra en la habitación.

 

— Jeremy —susurró respirando con dificultad, recuperando de a poco el aire — ¿Crees poder conservar esa fuerza de vampíro pero sin perder la cabeza conmigo? —. No todo era malo, cuando el Triviani estaba así era más fuerte, tenía más vitalidad y era más rápido, lo sabía —Asmodeos seguirá atacando y —esta vez miró a la mujer, Cissy, —si vuelve a perder el control quizás necesitemos de alguien que logre mantenerlo a raya. El pentac.ulo está creado con sangre de demonio y así debe seguir, pero no podré seguir si tengo que ocuparme de los ataques del demonio y además de mis heridas.

[Lisette Ryddleturn]

Laboratorio de Herbología

La bruja frunció el ceño durante varios momentos mientras que intentaba percibir algo de lo que pasaba, para entonces aferrarse con los ojos muy abiertos a uno de los muros esperando no caerse con todo y estos por los temblores que habían atravesado los laboratorios

Si había algo que podía asegurar con toda la fuerza de su certeza, era que si bien los estallidos y algunos parpadeos de las luces eran habituales por los diferentes experimentos que hacían los magos que usaban las instalaciones, ese tipo de movimientos en el piso no era normal

Así como no lo eran ni los aromas ni los silencios que les habían seguido, dándole un vistazo a lo que hacía la Snape que parecía poner mayor seguridad al menos a la puerta de entrada y salida del laboratorio

Algo bueno surgía de eso pero definitivamente no era algo que apreciara debido a que sus pobres plantas ahora estaban regadas en el piso, al menos las que utilizaban las macetas más pesadas y una de ellas se lamentaba y les gruñía

-Esto no había sido parte del trato de la guerra, y yo que pensaba que no había nada peor que traer a tu hermana a trabajar conmigo, ella es todavía más peligrosa que tú, lo sabes?

Le dijo y entonces, señaló una puerta cercana de donde había mandado a la Peverell momentos antes a por unas muestras, por supuesto muchísimo antes de que llegara Hayame con ella

Y ahora estaban las tres encerradas en aquel sitio

[Ashley Peverell]

LABORATORIO HERBOLOGÍA

La bruja en esos momentos empezó a salir por una segunda puerta que estaba ubicada del otro lado del laboratorio y que había permanecido cerrada hasta aquellos momentos, no había sido necesario ni verla ni abrirla porque no hacía ruido, ahora que estaba enferma la Peverell estaba intentando ser lo más discreta posible incluso cuando Lisette le había ofrecido que la ayudara en sus investigaciones para las plantas durante la guerra porque sabía que la pobrecita rubia que se veía un poco menos luminosa que de costumbre, necesitaba trabajar en algo, a la pobre de Ashley no le gustaba quedarse quieta porque eso nada más era para los árboles y ella no era un árbol, era una de las mujeres más valientes que había dado la casa de Gryffindor en años.

Y había detectado la presencia de su hermana mayor que en esos momentos parecía estar indecisa como siempre porque la pelirroja era una de esas hechiceras a las que les encantaba batirse en duelo con todo, incluso con una mesa de investigación si esta se estaba interponiendo en su camino pero esperaba que esos temblores fueran por cualquier cosa excepto por las tonterías que hiciera su hermana y que por lo normal siempre traían consecuencias de las que ninguna estaba muy dispuesta a pagar precisamente, sobre todo cuando esas consecuencias muchas veces podían estar con vida y querrían devorarlas, así como esos feos demonios gigantes que vivían en las profundidades subterráneas de la casa de Lisette.

-Se siente un aura muy maligna en el exterior, definitivamente no debemos de salir de esta habitación aunque detecto maldad en tu mascota también, hermana

Dictaminó la hermosa rubia parpadeando sus enormes pestañas de cervatillo mientras miraba al extraño animalejo que se escondía debajo de una mesa, como si pudiera contener toda su maldad en esos momentos tan solo mirándola con ese odio monumental que no cabía en ese pequeño cuerpo de lagartija negra.

[Hayame Snape Potter Black]

Laboratorio de Herbología

-Y ahora es que me dices eso??

La bruja pelirroja miraba con incredulidad a la chica que había sido su novia y que parecía bastante alterada con todas sus macetas especiales hechas añicos después de los movimientos que hubieron y que agrietaron parte del piso; la Snape emitió un gruñido fastidiado y movió la varita con un latigazo muy veloz, para que aquello pudiera repararse y que nadie se fuera a accidentar, solo le faltaría que una de ellas pisara uno de esos trozos afilados y ahora necesitaran un médico

El demonio en forma de dragón de llamas negras debajo de una de las mesas de repente pareció tensarse en sobremanera y emitió varios chillidos y resopló algunas llamas negras

Hayame alzó una ceja, aquella criatura nunca se había comportado de esa forma

Al menos no desde que virtualmente la secuestrara de la casa de Lisette

-Y ahora qué te pasa?

Le soltó al animalito, acercándole un poco los dedos (le daba igual que le llevara alguno, siempre podía hacerselo crecer con una poción y ya), pero entonces cuando escuchó hablar a Lisette, frunció el ceño por las implicaciones que tenían lo que había dicho

-Pero no puedes estar...?

Había comenzado a decir cuando la voz de su hermanita menor la hizo dar un respingo, golpeándose la parte superior de la cabeza con la mesa debajo de la que se había asomado; y sobándose ahora con una mano y dejando ver un ojo cerrado, volteó a ver a su pequeña hermana Ashley que iba bien campante con ellas

-Y con un demonio, estabas hablando muy en serio -se quejó con Lisette

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[Jeremy Triviani]

Jeremy entendió las palabras de Tauro, así se lo hizo saber con un entendimiento, se controlaría, o por lo menos lo intentaría en la mayor medida de lo posible. Es que sus ansias de volver a tomar su sangre, lo dejaba sin defensas. Se limpió con la manga la comisura del labio donde la sangre demoníaca aún había dejado un pequeño rastro. El impulso se iba calmando con cada respiración profunda que intentaba hacer, aunque ya andaba jadeante buscando aire que no estuviera viciado de plasma.

 

-Me controlare -Dijo al final, mirando por primera vez a la mujer que se había aparecido allí por medio del ritual - ¿Ella es Lilith?

 

No se acercó al demonio, porque no estaba seguro de que entendiera el idioma en el que hablaban. Se sentía bastante expuesto sin su varita. De reojo miró al lobo que aún seguía esperando alguna cosa, con la mirada desaprobatoria en sus rasgos minimalistas. Le levantó el pulgar para que entendiera que todo estaba bien, aunque nada lo estaba. Aquella extraña mujer demoníaca tenía una expresión malévola que estaba lejos de ser algo normal.

 

-No sé si nos entiendes, pero no queremos hacerte daño… -Le dijo mostrándole las palmas de las manos para que viera que no tenía ninguna forma de dañarla - Sólo necesitamos ayuda con un diablito que se escapó de tu… del infir… del mundo donde vives -Terminó sin mayores explicaciones a las que le dijo Sophie. ¿No habían robado al demonio Asmodeus de los brazos de su madre?

 

 

 

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[Lisette Ryddleturn]

Laboratorio de Herbología

La chica alzó la mirada por unos momentos sabiendo lo que aquello le estaba afectando a su amiga por haber descubierto que había metido en esos asuntos a su hermana menor también

Pero es que en realidad necesitaba de una ayudante y Ash con la enfermedad que tenía necesitaba de un poco de trabajo que no la tuviera moviéndose de un lado hacia el otro!

No esperaba que justo un laboratorio tan importante y grande como aquel, lleno de profesionales capacitados fuera a entrar en estado de emergencia de esa manera

Le dió una rápida mirada a Ashley como pidiéndole que tomara asiento y luego, volvió a agitar su varita para seguir reparando todas las plantas que se habían caído y lastimado

-No fué mi intención, yo solamente quería ayudar a tu hermana, realmente le urge el trabajo y este era el mejor que tenía a la mano mientras todos nos estamos reorganizando

Le explicó a la Snape para luego sostenerse mejor a una mesa cercana cuando pareció que todo retumbaba otra vez y los ojos claros de la muchacha comenzaron a ver en todas direcciones

-Qué ha sido eso?

[Hayame Snape Potter Black]

Laboratorio de Herbología

Las brujas en aquella estancia se miraron fijamente sin moverse un milímetro mientras que parecían razonar acerca de qué hacer a continuación

A la Snape le salieron varias de gotitas de sudor en la cabeza porque no se había aprendido los procedimientos para actuar de buena manera ante una emergencia y ahora todas estaban encerradas no solamente con un demonio de dragón negro en llamas que con un mal humor podía ponerse a quemarlo todo sino con una bruja enferma que como comenzara a estornudar o mover su varita a lo bestia, iba a hacer estallar más cosas lo que aumentaria el sitio y el encierro cosa que ella no quería

Ya bastante tenía cumpliendo condenas ajenas y además el tener que lidiar con que volvieran a abrir las cárceles, haciendola tener sueños donde la arrastraban a una celda que ella no deseaba como para además, que la acusaran por culpa de alguien más; una cosa era que aceptara que la acusaran con bases de por medio donde ella realmente causara los desastres y/o las muertes resultantes de cualquiera de sus actos (cosa que era más común que extraño) pero una muy diferente pagar los platos rotos de su hermanita

Se señaló los ojos y luego la señaló a ella como amenaza para luego, darle una mirada algo irritada a Lisette y se encogió de hombros

-Entonces qué propones tú que hagamos? -espetó de mala gana cruzándose de brazos

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[Tauro M.]

Lilith los miró fastidiada, como si fueran poca cosa y lo cierto es que delante de ella lo eran. Ya no había necesidad de que Tauro siguiera derramando sangre, la invocación estaba hecha y Lilith se adaptaba rápidamente a su mundo, valiéndose de sus propias fuerzas para permanecer en él. Miró, sin embargo, con odio el pentác.ulo que le impedía salir y moverse a sus anchas y se sintió ofendida.

 

— Me traen aquí, sin mi permiso, interrumpiendome de quizás asuntos más importantes y luego me encierran cual animal en una jaula. ¿Quiénes creen que son? —La madre de todos los demonios en su forma humana era increíblemente hermosa, se veía delicada e incluso dulce, pero estaba ese algo en su voz que la hacía sonar temible. Su apariencia no era más que la que utilizaba para mezclarse entre los humanos, pero debajo de todo ese glamour se escondía algo horroroso.

 

— No, no es así —se apresuró a disculparse Tauro —Tuvimos que improvisar en el camino y no pudimos preparar algo que fuera de tu agrado, a tu altura —. No se movió, sino que prosiguió —Asmodeus ha decidido venir a jugar un poco y creo que lo hemos entretenido bastante, pero amenaza con quedarse... para siempre —aquellas dos últimas palabras ocasionaron algo en Lilith, cuyo semblante cambió a la de una madre a la que acaban de desobedecer y no está para nada contenta —Con gusto te dejaremos salir, si nos ayudas te daremos una ofrenda mucho mejor —. Los ojos de la demonia se posaron de inmediato en el vampiro.

 

— De hecho... Nunca he tenido en mi colección a alguien que sea medio demonio —. Para Tauro aquello no tenía sentido alguno, Jeremy era vampiro —Quizás si me lo pudiera llevar a él, por una noche, los perdonaría por el atrevimiento.

 

No había lugar en el mundo en el que Lilith no saliera ganando, por lo que lo que decía no era del todo cierto. Si Jeremy se marchaba con ella, jamás volvería. Por otro lado, necesitaban sacar a Asmodeos o incluso para su madre sería difícil llevárselo una vez se sintiera más parte de este mundo.

 

—¿Qué tal unas minutos, aquí, ahora mismo? —lamentó no tener el tiempo para discutir con el Triviani su destino, por segunda o tercera vez consecutiva, sabía que no estaría contento con la idea, pero esperaba un esfuerzo de su parte por entender mejor la situación y agradecer después lo que la bruja hacia por él.

[Hayame Snape Potter Black]

Laboratorio de Herbología

El pequeño demonio negro parecía reírse de forma divertida ante la situación que estaban atravesando las brujas mientras que se cruzaba las patas delanteras y se recostaba mejor por debajo de la mesa de laboratorio donde se había ubicado

Realmente había sido algo bastante desafortunado para él el haber sido tan pequeño que la captura que le habían hecho le hubiera resultado tan sencilla a la bruja pelirroja que era quien lo había encerrado en la pequeña caja de primera mano; todos los demonios que existían por debajo de la mansión Ryddleturn sabían porqué se encontraban en ese sitio y que a final de cuentas le debían lealtad a la matriarca o al patriarca que reinara sobre sus tierras en esos momentos aunque... realmente no sentían demasiado apego por su nueva maestra y ya algunos habían intentado devorarla anteriormente

Los demonios más grandes iban a reírse de él grandemente por cómo habia sido capturado pero ya no podía hacer nada al respecto

Excepto quizás...

Aprovechó que parecía haber otros poderes demoniacos manifestándose en aquel lugar por lo que alimentó su propia energía un poco más... y los matraces y demás herramientas de vidrio comenzaron a saltar disparados hacia los muros y hacia las mujeres, esperando darles con ello un gran susto que le hizo sonreír y reir malignamente entre dientes

[Ashley Peverell]

La chica comenzó a gritar y a cubrirse debido a todos los vidrios que comenzaban a saltar por todas partes y se cubrió lo mejor posible con las manos y los brazos aunque las cortadas de vidrios comenzaban a ser bastante notorias y algunas incluso eran profundas pero ella prefería mantener la vida hasta que entonces recordó que tenía la varita y creó el mejor escudo que tenía, el más bonito y fuerte con un reflejo rosado que estaba inspirado en su alma y su corazón, ahora que lo pensaba la bondad que había también en la otra bruja estaba ayudando a fortalecer aquella fuerza y el poder demoniaco decayó lo suficiente para que dejaran de cortarle las heridas pero su sangre brotaba de todas maneras y ardía.

-¿Porqué tenías que traer a ese demonio a este lugar? sabes que es peligroso ¿no te bastó lo que pasamos en la casa de Lisette para entender que con estos animales no se juega?

La recriminó la hermosa funcionaria del ministerio aún con el escudo en alto por si acaso aquella criatura volvía a crecer y entonces causaba todavía más daño a ellos.