Botica Macnair (MM B: 97349)

[Brardolla Black]

La campanilla de la puerta de entrada tintineó y un joven bien parecido y ataviado en ropajes oscuros ingresó en el local, llevando un par de carpetas en sus manos. Saludó a ambas brujas con una frialdad demasiado fingida en opinión de Brardolla y le entregó a Juve, su madre, lo que segundos antes había traído consigo. Tras unos breves comentarios entre los presentes, la dueña de local apareció sobre el mostrador y, ante una primera reacción de sorpresa, se dispuso a saludar cordialmente a los tres magos.

 

— Buenas tardes, hija. — Dijo la Black, apoyando con tranquilidad su codo sobre la madera. — Veo que te sorprende nuestra visita, pero no temas. Las carpetas que portan Juve y su hijo son de información que nos servirá a todos... Sobre todo a ti, por supuesto. — Comentó misteriosa, al tiempo que le dedicaba una mirada de complicidad a Juve.

 

Antes de que pudiera continuar con su explicación, un mago de poca edad se unió a la reunión. Ante el ruido de la puerta, la bruja había tomado su varita del bolsillo y la había mantenido presionada con su mano por si debía utilizarla de improviso. Sin embargo, el recién llegado no era más que el aspirante que acompañaría en la guardia, quien rápidamente se disculpó por su llegada tarde.

 

— Deax, ¿cierto? — Preguntó Brardolla, acercándose al mago hasta casi rozar su rostro con el de él. — Justo le estaba diciendo a Juve que, hoy en día, las personas tienen una cierta tendencia a no cumplir con los horarios pactados. — Dijo, arrastrando las palabras y pronunciando cada una con un énfasis y una frialdad desagradable. Detestaba que la gente llegara tarde a las citas y, aunque aquel fuera un aspirante a la Marca Tenebrosa, haría lo que estuviera en sus manos para intentar educarlo en los buenos hábitos. — A los mortífagos nos fascina la puntualidad. — Puntualizó, alejándose del joven mago y volviendo a su lugar, mientras se giraba para dedicarle una sonrisa de suficiencia.

 

[Kahlan Blackthorn]

Ian Malfoy Haughton

Rol Guardianes- Informante dentro de la trama

 

-La puntualidad es un privilegio, creo que no todos lo pueden poseer…-comentó el castaño uniéndose a la causa de Brardolla. A él tampoco le gustaba que las personas fueran impuntuales o pasaran por alto sus deberes, pero comprendía la demora del joven y la aceptaba con buena cara-Tal vez el retraso no fue intencional, no podemos crucificarlo así como así…-agregó saludando a Cissy con una ligera reverencia- Es un placer…-sonrió abiertamente-Señorita Macnair…-ensanchando aquel gesto en sus labios, no pudo evitar verse preso por un peculiar deja vu. No tenía tan mala suerte, porque la mayoría de las veces acababa rodeado de bellas féminas y esa no era la excepción.

 

-Todo lo que supe de los objetos y pociones que son ilegales, ya está en sus manos. No ha quedado un solo cabo suelto, salvo el que tuve que amarrar a la hora de hacerme con esos datos…-saboreó los restos de sangre que tenía en los labios-Hice lo que tenía que hacer, si le dejaba vivo iría de chivato y eso no nos conviene…-se excusó por echarse un pequeño bocadito-Hasta me deshice de los restos, no crean que le deje tirado en alguna esquina a la vista de todo el mundo…-rodeando sus ojos se mantuvo apoyando contra la pared-En fin, no estamos aquí para ver que me comí o me deje de comer. Creo que el asunto es movernos y evitar que los miembros del ministerio se metan en esto…-expuso cruzándose de brazos-No sería lindo ver a todos los Inefables metidos dentro de este local, tampoco sería grato verse en medio de un cateo y hasta una presunta acusación sin algo que la respalde…-respingo notando la gélida mirada de su madre sobre su gallardo rostro.

 

-¿Qué?, sabéis que tengo razón y no podéis negarlo…-encogiéndose de hombros, no pudo pasar por alto el cargo que ostentaba su madre dentro del ministerio-Aunque puedes usar lo que poséis a favor de Cissy y borrar los rastros que puedan conducir a actos fraudulentos que no son del todo veraces…-hizo hincapié en la última palabra-Puedes hacerlo o podemos hacerlo al modo de Brardolla o al de Deax o al mío…-ofreció cualquiera de esas alternativas a la demonio-Yo me ofrezco para arrancarles la cabeza, además de beberme toda la sangre que poseen sus cuerpos…-mostrándose gustoso ante la idea de darse un buen banquete-O solo puedo mirar y dejar que vosotros os hagáis cargo de este asuntillo y mantenerme al margen como un buen chico…-aquello sí que supo matizarlo de forma magistral. Detestaba las bromas, pero si se le daba la oportunidad lanzaba una que otra puntilla afilada de arrogancia y frialdad.

Editado 20 de Octubre del 2014 por Juve Aiiden Aiel Malfoy

[Brardolla Black]

Puso los ojos en blanco y suspiró con hastío al terminar de escuchar las palabras de Ian. Aquel joven tenía tanta arrogancia como sangre corría por su cuerpo y Brardolla no tenía paciencia para aquel comportamiento justamente en aquel momento. Habían llegado a aquella botica con la intención de prevenir a la dueña y las bromas le parecían fuera de lugar, al igual que la conversación que no tuviera que ver con el asunto que debían tratar.

 

— Niño, deja de parlotear. Hazme ese favor, ¿sí?. Deja que los mayores nos ocupemos de lo importante y, mientras tanto, tú observa y aprende. — Comentó con malicia, aunque algo divertida. — Igualmente, agradezco tu ayuda. Hiciste bien al no dejar cabos sueltos. No queremos a nadie siguiéndonos la pista. — Finalizó, volviéndose hacia Cissy, quien contemplaba la escena desde detrás del mostrador de atención.

 

— Volviendo al tema principal, estamos aquí para ayudarte. Sabemos que algunos de los productos en tu negocio no están realmente en regla. No es necesario que lo niegues, Cissy, lo sabemos. — Dijo, adelantándose a la respuesta de la dueña, quien ya había abierto la boca para replicar. Su rostro ceñudo era todo un espectáculo. — Y no estamos aquí para hacer de jueces. Todos tenemos nuestros trabajillos ocultos, ¿no es cierto? — Preguntó en general, guiñando un ojo como gesto de aprobación. — Lo importante es que no nos descubran. —

 

Se acercó a Juve y, susurrándole algunas palabras que sólo ambas brujas pudieron escuchar, tomó una de las carpetas y la abrió. Comenzó a revisar el contenido, señalando con su dedo índice la lista de productos, y volvió a clavar su mirada en su hija.

 

— No sabía que había tanta demanda de Poción Matalobos... — Comentó a continuación, con real interés, depositando la carpeta sobre el mostrador de madera. «Los hombre-lobos están descontrolados» pensó, negando con su cabeza con visible preocupación.

 

 

 

 

[Cissy Macnair]

Giraba la cabeza a uno y otro lado mirando a Ian, Juv y mi madre a medida que hablaban, más entre ellos que conmigo. Una persona más se les unió y no pude más que asentir para saludarlo porque enseguida saltaron sobre él, hablándole de la puntualidad. Yo no era una persona muy puntual a veces y agradecía no tener que hacer guardia con esas dos maníacas del tiempo, sino iba a terminar dándome la cabeza contra la pared. Sentí un poco de pena por el chico nuevo... ¡Lo que tenía que sufrir en su prima guardia! No se lo deseaba a nadie.

 

Observé las carpetas negras y luego a Ian, que hablaba sobre atar cabos sueltos, sangre y otro tipo de cosas. Me había quedado muda, perdida en lo que decían, hasta que mi madre volvió de nuevo sus penetrantes ojos hacia mi y comenzó con su perorata sobre mis ilegalidades. Sonreí. Me había interrumpido cuando yo quise acotar algo. Era tan de ella no dejarme hablar que poco más y gritaba pero respiré profundo, metiendo aire en mis pulmones que no necesitaba, sólo por cierto reflejo de cuando había estado viva.

 

-Mi trabajo en el Concilio me permite tapar muchas de estas cosas -dije con tranquilidad. Pero si Juve y mamá habían encontrado algo que pudiera ponerme en peligro, tanto como para enviar a Ian para acabar con los responsables, entonces mi sentido de control total se estaba perdiendo. Últimamente había estado tan ocupada con la Academia y el Concilio que había pasado por alto algunas cosas.

 

-Hay una manada que se ha salido de control. Los vampiros de Londres los mantenían a raya hasta que... hubo un problema- dije, haciendo una leve mueca con mi labio, esa que siempre demostraba que algo no iba bien.

 

Un grupo de vampiros había exterminado a una manada completa de licántropos, incluidos mujeres y niños, sin miramientos. Era eso por lo que otras manadas de afuera habían aparecido para cobrar venganza. Yo no podía inclinarme para ninguno de los dos bandos. Era medio licántropo por mi madre, lo llevaba en la sangre. Pero había sido convertida en vampiro y debía vivir con eso. Ambas razas covivían dentro de mi. ¿Acaso debía odiarme por ello?

 

-Aún no ha venido nadie del Ministerio a preguntar por msi negocios... No veo por qué vendrían ahora- me encogí de hombros, quitándole importancia al asunto.

[Kahlan Blackthorn]

Juv Malfoy Haughton

Rol Guardianes

 

-Claro que no han venido, porque Ian se encargo de cerrarle la boca al único ser que pudo ir de chivato…-reconoció con esa mención el accionar de su hijo-Los Licans suelen ser un dolor de cabeza y no solo para los vampiros…-resolvió reconociendo que no sentía afecto por esos seres peludos que iban dando tumbos por el mundo mágico, causando destrozos a su paso poniendo todo patas arriba-Yo no vengo en calidad del miembro del Ministerio, pero no está demás que echemos una miradita por aquí y por allá. Ya sabéis lo que dicen, no está demás prevenir, para evitar lamentar…-sonrió desviando su vista hacia Dolla-Es bueno mantener todo en orden, yo puedo hacerme cargo de mantener todo en silencio respecto al tema de las pociones y uno que otro objeto que sea ilícito…-se ofreció desinteresadamente, no por nada le fascinaba la idea de ser la directora del departamento de misterios.

 

Ya que en muchos aspectos la vida de la Malfoy era un misterio, poco se conocía de ella fuera de las altas esferas del mundo mágico y era mejor que eso se mantuviera de ese modo. Nadie podía saber que era miembro de la organización más poderosa de Londres, tampoco que le importaba muy poco ir matando a diestra y siniestra a todo aquel que se interpusiera en sus planes. Era una mujer siniestra en esencia, no por nada se había ganado el desprecio de los que consideraba sus enemigos, aunque aquello no despertaba el más mínimo interés en la demonio de cabellos dorados.

 

-Dolla tiene razón, si se sabe que hay un exceso en la venta de poción de mata lobos, no dudéis que comenzaran a soltar rumores y eso causara que el Ministerio se meta en esto. Por eso deseamos manejarlo a nuestro modo, ya sea que vayamos cortándoles las vías de escape a los que desean pasarse de listos o acabar de tajo con el problemita…-externó plasmándose en sus labios una lóbrega sonrisa-Además me salta un poco el asunto del verita serum, creo que no he expedido un permiso para que esta cantidad este dentro de tu local…-puntualizó señalando con el dedo el porcentaje que de existencias dentro de la botica-Estamos aquí para ayudarte, ya sabéis que como miembros de la misma familia…-carraspeó con suavidad-No podemos pasar por alto darnos la mano y sacarnos de uno que otro altercado…-finalizó su perorata, comprendiendo que la situación estaba en su punto más álgido.

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Andar corto de dinero...y mas despues de haber perdido mi mejor muda de ropa...(fina..hecha a la medida...tejida con hilos de luna...) por unos elfos domesticos era una deshonra para mi nombre..de hecho si mi hermana se hubiese enterado lo mas seguro que enviaria la noticia al Profeta...y claro en esos caso ella se las arreglaba para dar fotos y todo...y bueno mostrar mis partes privadas en el Hall de la Mansion Macnair...no era nada bueno....

 

Asi que movilice mis contactos...y bueno..que mas podria pedir...habia llegado un nuevo cargamento de contrabando de piel de basilisco, escamas de dragon, y algunos bezoars...incluso me dijeron algo de sangre de unicornio....y eso..en el mercado negro valia una fortuna...De hecho cuando comprobe habia mas...eso si...el legitimo dueño del cargamento tendria que darse un buen tratamiento pues ahora pensaba y realmente creia ser muggle...insertar recuerdos era una especialidad de la casa...Eso le pasaba por intentar iniciar negocios en Londres si pagar su cuota de impuestos...

 

Por suerte tenia el lugar perfecto a donde acudir....que bueno es tener un familiar donde legalizar el contrabando....y ambos sacar ganancias....En fin llegue a la botica y empuje la puerta sin tocar....Evidentemente habia llegado en mal momento...que se podia hacer mi sentido de la oportunidad se habia ido de vacaciones....de los visitantes solo conocia a uno...era el mismo malfoy que habia visitado la Mansion Macnair....Por lo demas no deje de mirar detalladamente a las dos feminas...tratando de definir sus proporsion y ya archivarlas en mi base de datos pervertida..y evidentemente pase de largo al optro chico.

 

Sin embargo lo que me extraño era verlos con carpetas???...no me caian muy bien esos formalismos..ahora la pregunta seria si serian del Ministerio o no...de todas formas sonrie a los presentes..para despues dejarles mis disculpas- Lo siento..no sabia que teniamos visita..pero Cissy necesito hablar contigo- y he aqui donde mi caracter a veces chocaba con el de los demas....ese afan de ¨lo mio primero¨siempre me causaba dolores de cabeza.

[Deax Black Lestrange]

http://i.imgur.com/dj6260k.png

 

 

Le lanzó una mirada seria a la bruja que le había regañado por su tardanza. No respondió a sus palabras, sabía que la mortifago estaba en lo correcto. Asintió a sus compañeros que habían hablado sobre la puntualidad y continuó callado para escuchar la conversación que estaba empezando a desenvolverse.

 

Sus dos compañeros morfífagos hacían dado la explicación de lo que pasaba y cómo pensaban manejarlo. La dueña del local en un momento se mostró a la defensiva pero poco a poco pasó a cambiar el gesto comprendido lo que estaba pasando y lo que los magos podían hacer para ayudarle a ocultar lo que estaba sucediendo.

 

–Creo que esto es una oferta que no se hace de todos los días, y es tan atractiva que es imposible de rechazar –pronunció para los presentes mientras en sus labios se dejaba mostrar una sonrisa irónica –supongo que si no aceptas nuestra ayuda… tendrás muchos problemas -. Se encogió de hombros y sonrió de nuevo, pero esta vez con sinceridad. Posó la mirada sobre sus compañeros esperando otras palabras o instrucciones para seguir; por ser su primera guardia no sabía qué más podía hacer que esperar indicaciones.

 

Pasó su mano sobre el estante que tenía a su lado, tomando entre sus dedos una posición; el frasco era transparente y pequeño, y el líquido de color verde claro y brillante, casi fosforescente. Jugó un momento con el frasco de vidrio mientras otro mago interrumpía la conversación que manteníamos con la dueña del local.

Editado 26 de Octubre del 2014 por Deax Black Lestrange

[Brardolla Black]

Había oído el relato de Cissy sobre la manada de hombres-lobo que se había salido de control y no pudo evitar preocuparse por de más al respecto. Lo licántropos no solían ser como los vampiros ni como los animales salvajes, no se movilizaban en manadas. No entendía entonces cómo era que un grupo se había descontrolado... ¿Acaso estaban formando grupos organizados de asedio? Negó con la cabeza al pensar en aquello, pues si eso era lo que estaba sucediendo, no tardaría en hacerse notar en cada punto del mundo mágico.

 

— Estoy de acuerdo con Juve, no debemos permitir que se sepa sobre este incremento en la venta de la poción matalobos. No se trata sólo del Ministerio cayendo sobre tu local, hija, también estamos arriesgándonos a que el Ministro tome medidas contra los licántropos y, ¿por qué no?, contra los vampiros que los mantienen a raya también. — Comentó, pensando en la posibilidad de una nueva guerra de razas y, la sola idea, la hizo temblar de pies a cabeza. Estaba segura que nadie querría volver a pasar por algo como eso. — Así que, como dijeron mis compañeros, estamos aquí para ayudarte. Para eso, necesitamos que nos informes qué otros productos ilegales tienes en el local, así podremos tapar cualquier agujero que pudiera delatarte. —

 

Fue Deax quién habló por último, completando las palabras de Brardolla. El mago había estado callado, escuchando con atención a las dos mortífagas más experimentadas de aquel grupo, pero había dado justo en el clavo al volver a la conversación, pues si Cissy no aceptaba la ayuda que le estaban ofreciendo, realmente tendría muchos problemas.

 

Otro mago ingresó en el local y, por la expresión de su rostro, pareció sorprendido de encontrarse con tantas personas en su interior. Brardolla lo miró con curiosidad, tratando de analizar su presencia en aquel preciso momento. Le daba un poco de mala espina que alguien hubiese llegado justo en aquel momento, pues se habían organizado minuciosamente para llegar a última hora de la tarde, cuando la botica estuviera a punto de cerrar. Era justamente por aquel motivo que el arribo de aquel mago le resultaba tan sospechoso, pero decidió no inmiscuirse en el asunto a menos que fuera realmente necesario.

 

— Disculpas aceptadas. — Dijo, dedicándole una sonrisa maliciosa al recién llegado. — Sin embargo, creo que nuestros asuntos son algo más urgente que los tuyos. Quizás puedas hacernos el favor de esperar afuera... No nos tomará mucho tiempo. — Aseguró la Black, acercándose al mago para observarlo más de cerca y, así, intentar intimidarlo. No creía que fuera tan poco inteligente para no darse cuenta que debía obedecer, pues si no lo hacía, las cosas no tomarían un buen curso.

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Evidentemente la cuestion era seria.....pues a pesar de que aceptasen mis disculpas...una de las chicas presentes bueno... como que no entendia que alguien interrumpiese....asi que se acerco a mi persona..mirandome fijamente..tal como los muggles llaman al ser traspasados por rayos X...acaso intentaba intimidarme????...si era asi..no lo habia logrado...de hecho...

 

-Sabes que tienes unos ojos hermosos señorita -dije dedicandole una esplendida sonrisa...-son como dos luceros que avenguenzan con su luz al resto de las estrellas.

 

Y he aqui cuando mi desenfrenada forma de ser..por un instante... dejaba los negocios a un lado para dedicarle tiempo a una chica...y no es que me olvidase de la mercancia de contrabando...no...para nada...sino que ya lo hablaria con Cissy..despues....tal vez cuando regresase de invitar a una copa a la chica que tenia frente a mi.

 

-Sabes cerca de aqui hay un buen pub- continue- ...podriamos compartir un rato..bailar tal vez...a veces las responsabilidades agobian tanto que lo que hace falta es un poco de alegria para desestresarse.- y sin complejos le tome la mano y cual caballero del medioevo le deje en estas un beso.

 

A saber como reaccionaria la chica...no todas reaccionaban igual...pero a fin de cuentas que haria...me lanzaria un Avada por mi galanteo...no creia que tuviese tan mal corazon...las chicas bellas nunca tenian mal corazon...ejemplo calsico...mi madre adoptiva Cissy que era bella....y era un pan...bueno un pan bien moldeado y amasado....y ahora que me acordaba de Cissy- Este...creo que me ha caido algo entre manos..despues hablamos- dije mirando a Cissy

[Kahlan Blackthorn]

Ian Malfoy Haughton

Rol Guardianes- Informante dentro de la trama

 

-Disculpa aceptada…-respondió mecánicamente el Haughton-Creo que nos conocemos, aunque no recuerdo el lugar…-agregó dedicándole una media sonrisa a Sean-No es que seamos formales, solo deseamos darle la importancia que requiere el asunto. Estamos aquí para proteger los intereses de la señorita Macnair, tomando en cuenta el daño que esto puede causarle a su local y su reputación en particular…-asintió desviando su vista hacia su madre-Juv puede ayudarle a borrar los actos ilícitos, redactando un permiso para que Cissy pueda seguir vendiendo todo lo que ofrece su local…-recordó el puesto que tenía su madre dentro del Ministerio.

 

-Seria un placer para la señorita Black, el aceptar su invitación e irse a bailar. Lastimosamente, no creo que eso sea posible de momento…-intervino de forma descarada ante la invitación del joven para con Brardolla-Cuando todo esto pase, no es mala idea irnos a tomar unas buenas copas y bailar hasta que nos duela el cuerpo. Hasta entonces, no creo que sea mala idea centrarnos en lo que nos ocupa y dejar las galanterías para otro momento…-asintió sintiendo una colleja por parte de su progenitora-No le prohíbo que coqueteé, solo quiero que todo esto afecte lo menos posible a Cissy. Ella tiene mucho que perder e irse a bailar, dudo que le ayude a mantener el problema a raya y no causarle dificultades mayores…-reconoció en parte la gravedad de la situación.

 

-Yo me puedo hacer cargo de mantener a los Licans a raya, pero no con eso creo que pueda evitar que los miembros del ministerio metan sus manos donde no les llaman…-se ofreció a matar desinteresadamente a sus peores enemigos, dado que jamás había sentido simpatía por los hombres que mutaban de seres humanos a criaturas que perdían el control de sus actos y eran capaces de atacar hasta sus amigos y familiares, evitado pensar en el daño que eso les provocaría al pasar el efecto de la transición en sus cuerpos.