Runihura

Prueba del Libro de la Sangre Julio 2022 Aprobados @ Eterno Black Triviani (ANULADO POR DECISIÓN MODERATIVA) Perfil || Ficha

Prueba del Libro del Equilibrio Julio 2022 Aprobados @ Ada Camille Dumbledore Perfil || Ficha @ Malum Luxure Perfil || Ficha

Las cosas se habían puesto tensas de un momento a otro, parecía que los tropiezos terminaban por forjar el carácter de las personas de una manera certera. Esbozando una media sonrisa en sus labios, le gustaba ver la garra que eran capaces de demostrar sus alumnos dentro del campo de batalla. Ahí estaba a pocos metros delante de ella, la joven que osaba retarle con cada una de sus acciones— Puede mejorar y lo sabe—se limitó a decir solo eso y continuar con el duelo. No deseaba perder el hilo de todo lo que estaba por acontecer—Obsistens—pensó viéndose rodeada por un cerco de materia luminosa que le protegió de los filamentos de fuego que venían contra ella. Intercalando con éxito su defensa justo antes de que las flechas pudieran causarle alguna clase de daño a la guerrera del libro de las Auras. Ahora le tocaba a ella poner la balanza de su lado, jugando con las cartas que le brindará el destino en esos instantes—Arena de Hechicero—pensó lanzando al aire los huesos cristalizados de un mago que perdió la vida a causa de fuego mágico. Logrando que la vista de la Dumbledore se viera afectada una vez más, impidiéndole ver con claridad donde estaba ubicada la Uzza y atacarla con libertad. Era como el juego del gato y el ratón, sintiéndose un poco contrariada por no tener nada divertido con que sacarse un poco el tedio que comenzaba apoderarse de ella. Quizás el poner un poco más de peso del otro lado de la balanza, causaría que un desastre natural se desatará desatando un poco de revuelo entre las dos duelistas. @ Ada Camille Dumbledore

—Anapneo—pensó la guerrera destapando en el acto sus vías respiratorias. Soltando una profunda bocanada de aire que le devolvió la fuerza para contratacar con todo lo que poseía en su arsenal. Era divertido tener duelos con el Black Lestrange, parecía que ambos les agradaba hacerse bromas en medio del campo de batalla. Tal y como el lo dijo mentalmente, no se puso el pie invocando un Trol como ocurrió dentro de su prueba del libro del Caos. Una carcajada escapaba de los labios de la joven, recordando como la criatura moliera a golpes al pobre hombre. — Parece que la buena suerte, le sonríe. Pero no creo que sea así por siempre o ¿si?—la mirada de la mujer estaba fija en el cuerpo del hombre. Justo en su mano donde apareció la Kansho que no dudaría en usar en su favor y en prejuicio de la guerrera. Ella era de la clase que se mostraba como una persona juguetona y amena, pero que no le sacaran el lado combativo porque entonces las cosas se complicaban para su contrincante—Curación—pensó sanando la herida que le provocará el gas venenoso. Nada mejor que estar como nueva y darle su merecido a su querido alumno. Usando todos los hechizos que ella tenia a su disposición, no se lo pensó dos veces decidiéndose por el—Mutis—pensó transformando aquel rayo en un efecto que dejo mudo en el acto a Eobard. Al tener invocada la vara de cristal esta le permitía hacer uso de sus poderes durante tres turnos cosa que aprovechó al máximo en ese momento. Le tocaba mover las piezas a su querido alumno, confiando en que todo le saliera a pedir de boca. — No se puede ser invencible, pero se puede intentar—bromeó esperando a ver que era capaz de hacer ante lo realizado por la guerrera del libro de las auras. @ Eobard Thawne

Buenas Noches @ Eobard Thawne Le recuerdo un pequeño detalle, aunque haya hecho uso de la Kansho que no consume acción a la hora de invocarla. Le aconsejo que tenga en cuenta este detalle respecto al Expelliarmus. Esto para que lo tenga en cuenta durante nuestro duelo, no quiere decir que sus acciones hayan sido erradas. Solo deseaba dejar este dato por aquí. Saludos

Para la mala suerte de su alumno su ultima curación no había sido efectiva, tal y como ocurrió con el Sectusempra que le enviará anteriormente. Los ojos de la Uzza estaban fijos en los del joven, parecía que poco a poco sus ansías por irse de ahí con la vinculación al libro de la sangre se desvanecían como lo hacen las huellas de un felino en medio del desierto al ser arrasadas por una tormenta de arena. Dando un fuerte latigazo con su varita, daba el siguiente paso en aquel camino que comenzaron andar días antes—Veamos que le depara el destino en está ocasión—dibujándose en sus labios una traviesa sonrisa, no dudo en asentarle un golpe que seria letal sin duda alguna. Pero antes de ello, se curaría del corte que se hiciera con la daga al iniciar el duelo—Curación—sanando en el acto del daño causado con la filosa arma. Causando por sus acciones, disfrutando por un momento el dolor que eso causaba en otros al sentirlo tan profundo y lacerante al contacto con la daga. Centrando su atención en su alumno, curaba de paso el daño que el también le causará, ahí estaba más que palpable el sacrificio que tenía que hacerse para poder tener el control sobre el liquido vital que era capas de darla y al mismo tiempo arrancarla sin el menor remordimiento. —Juramento de sangre—haciendo uso del corte que hiciera en el cuerpo de Eterno, ahora sería el que el que no tuviera la oportunidad de atacar con libertad a la Uzza—Yo juro no atacar—le estaba prohibiendo atacarla a ella. Obligándolo a cumplir esa promesa, porque de no hacerlo pagaria las consecuencias por pasar por alto el mandato de la guerrera. @ Eterno Black Triviani

Ni los antiguos Uzzas hubieran predicho que Runihura tendría que pasar por todo aquello, viéndose forzada a colocar el filo de una daga en el cuello de su alumna. Al menos de manera metafórica, porque no le cortaría la cabeza y mucho menos de la lanzaría a las criaturas que solían acompañar a los guerreros en sus largas caminatas por los terrenos de Uagadou. Sus ojos estaban centrados en cada una de las acciones de la joven que estaba delante de ella, astuta a la hora de curarse del daño que le provocará la herida grave que causó en su anatomía el Cinaede. Ahora las cosas estaban parejas en apariencia, porque no le agradaba tener su visión afectada todo gracias a la Arena de hechicero que lanzarán en su contra. Revolviendo el mundo de ideas y posibilidades de defensa que tenía a su disposición, no se tomo demasiado tiempo para hacer uso de un conjuro bastante útil en situaciones como esa— Vara de Cristal—gritó con fuerza sintiendo como su invocación provocaba que su varita cambiará de forma por una de un material resistente e irrompible. El color del mismo era un azul intenso, reflejándose dentro de este burbujas que semejaban ser la luna trozada en mitades— Sectusempra—transformando aquel rayo en un efecto que abrió un puñado de heridas sangrantes en el cuerpo de la Luxure, tras intercalar su ataque gusto antes de que la Arena afectará la visión de la guerrera que al hacer uso de un efecto no necesitaba tener buena puntería para dar en el blanco. Añadiendo un poco más de dolor al que ya aquejaba su cuerpo maltrecho por el daño producido por el anterior conjuro lanzado por la Uzza. Debía curarse por dos, pero la mala suerte era que Runihura no le daría espacio para ello, devolviéndole la cortesía no dudo en atacarle del mismo modo que lo hiciera la aprendiz instantes antes— Arena de Hechicero—pensó la joven lanzando al aire los huesos cristalizados del un mago que tuvo la mala fortuna de morir preso del fuego mágico, dejando afectada la visión de Malum obligándole a usar hechizos solo de tipo efecto o invocación. @ Malum Luxure Las cosas estaban más animadas de lo que ella se pudo imaginar, deleitandose un poco por la situación que desencadeno con sus acciones.

Su rival se había defendido de manera ágil de las flechas lanzadas por Runihura, sintiéndose ligeramente satisfecha de desempeño de la aprendiz. No le gustaba celebrar antes de tiempo cosas como esas, porque les obligaba a sentirse confiados y eso generaba una sensación de comodidad que les hacía perder el rumbo. Dibujándose en sus labios una divertida sonrisa, no dudo en defenderse del ataque que le venia en contra intercalándolo con efectividad. —Obsistens—pensó creando un cerco de material luminosa de color azul celeste indestructible e inmune a la magia, que le rodeó por completo. Golpeando en este las flechas que deseaban quemar su cuerpo, además de causarle heridas que le harían sangrar irremediablemente. Cosa que no ocurrió al reaccionar de manera astuta y rápida, dándole la oportunidad a la alumna sentir el dolor que buscaba causar en ella con su siguiente ataque. Por un breve instante miraba las lozas amarillas, imaginándose a la joven correr hacia el castillo del mago de Oz y pedirle que no volviera a casa en mil pedazos. Entretenido le resultaba ver como se las ingeniaban para entretenerla dentro de los duelos, dándose el gusto de permitirles una que otra chanza en medio del ambiente serio que se generaba al estar dentro de la prueba—Cinaede—pensaba con una sonrisa de oreja a oreja en sus labios. Viendo como el gas venenoso rodeaba a Malum, presto para colarse por sus fosas nasales para paralizar su sistema nervioso y circulatorio, impidiéndole respirar con facilidad. El daño se acrecentaría al generarle una herida grave que se no ser sanada, entonces si pondría en riesgo su vida realmente. @ Malum Luxure

Le resultaba irónica la forma en como se estaban desarrollando las cosas, al menos no quedaría en la Uzza los tropiezos que la mujer cometiera cuando se encontrará dentro de una situación de batalla. Si moría esperaba que existiera quien le ayudará a salir de ese pequeño dilema, porque lo aprendido dentro de las clases se iba con ellos y los errores también les acompañarían por el resto de sus vidas. Se limitaría a responder de manera astuta a los ataques que recibiera, no desperdiciaría más tiempo en situaciones que estaban fuera de sus manos — Dudo que haya sido capaz de idear esa estrategia de defensa—sonrió al ver como su Cinaede quedaba anulado por el resto del duelo, gracias al efecto que lanzará su contrincante librándose de morir ahogada gracias al gas venenoso. La mujer creía que ahí se limitaba el poder que poseía Runihura, no estaba ni cerca de conocer de lo que era capaz la guerrera del libro de las Auras. La buena suerte, no tardaría en evaporarse como lo hace el agua al entrar en su punto de ebullición. Soltando una profunda bocanada de aire movía su cabeza de un lado a otro, reprobando sobremanera como se llenaban de obstáculos sus alumnos. Sus ojos se centraron en la punta de su arma, el siguiente conjuro que paso por su mente fue un —Casco Burbuja—quedándose con una mirada absorta en lo que ocurrió después. En su cabeza no apareció un casco que le permitiría respirar bajo el agua, sino un globo desinflado que fue a parar al suelo, vaya forma de desperdiciar un hechizo que le pudo ser de utilidad. Burlándose de su percance, no le guardaba rencor a ese globito que ninguna culpa tenía de lo ocurrido. — Flechas de Fuego—pensó con suma tranquilidad la guerrera, desprendiéndose de la punta de su varita una andanada de filamentos de fuego. Aquellos que de golpear a la mujer que estaba delante de ella, sufriría severas quemaduras además de heridas que debía sanar si deseaba continuar con vida dentro del duelo. @ Ada Camille Dumbledore

Era demasiado exigente a la hora de poner a prueba los conocimientos que habían adquirido sus alumnos. Claro ejemplo era el joven que estaba delante de ella, aunque con algunas deficiencias había conseguido librarse con éxito del daño que buscaba causar con su ataque. El ave que recibió el impacto graznaba de dolor, causando que una sonrisa divertida apareciera en los labios de la guerrera— Pobre sacrifico su vida por una buena causa—bromeó recordando en el acto su semblante serio. El tiempo de jugar no había comenzando, prefería dejarlo para más avanzado el duelo — Aguamenti—pensó sorprendida porque de su varita no salió un chorro de agua como ella lo esperaba. Sino todo lo contrario una serpentina saltó de la punta de su arma, causando que se soltará a reír como una pequeña que celebraba con asombro el hecho de que el conjuro se viera afectado por la maldición que lanzará sobre este Eterno. Una buena forma de romper un poco con el hielo, demostrando que al menos de momento estaba concentrado en librarse de los ataques que lanzará contra el la Guerrera y responder a ellos con ataques que le harían enseñarle como evitarlos y cuando no se podría librarse de algo que fuera un daño irremediable si impactaba en ella. — Daga del Sacrificio—pensó apareciendo en su mano aquella afilada arma provocándose un corte en la zona de la muñeca lo suficientemente profundo para que el mismo apareciera en la del Black. Añadiendo las siguientes palabras— Immolo Oppugnare—se estaba sacrificando para agredir. La sangre corría por la zona que corto limpiamente la daga, dando un golpe certero soltó con indiferencia— Sectusempra—emanando de la punta de su varita un rayo escarlata que de golpear en el pecho del hombre, abriría graves heridas sangrantes que lo harían poner su vida en riesgo. Estaba herido de la muñeca gracias a la jugada maestra de Runihura y ahora estaba a poco de tener más heridas que sanar, sino reaccionaba como debía y con rapidez. @ Eterno Black Triviani

Buenas Noches @ Eterno Black Triviani Vengo a comentarle algunas incidencias que se han presentado dentro de su prueba del Libro, antes que nada le aconsejo que sea un poco más cuidadoso con el tema de las defensas que desea crear para poder protegerse de los ataques que le vienen en contra. Lo resaltó por el tema que tiene que ver con el Morphos, según lo que coloca dentro del duelo invoca un ave que es capaz de detener el ataque. Pero no describe como es o de que especie, puede que le suene un tanto exagerado que se cubran esos detalles dentro del duelo. Pero en caso de no hacerlo, deja espacio a que se cree un vacío de rol que puede ser aprovechado por su rival en su contra. Debe leer con atención el rol del rival, luego de eso revisar la lista de hechizos y elegir el que ayude a defenderse o atacar esto según sea el caso. No hay prisa en que responda el duelo, prefiero que lo haga a conciencia y no solo al tanteo. Saludos y suerte en su prueba

— Creo que la fragilidad que uno posee, no debe ser tomada como un acto de debilidad. Sino como todo lo contrario, considérelo su punto fuerte y poténcielo al máximo—el consejo quedaba en el aire si lo deseaba tomar. Era la segunda vez que se batían a duelo, conociendo un poco más el uno del otro. Aunque nunca dejaba de sorprenderse de las habilidades que dejaban fluir sus alumnos, quedándose con un agradable sabor de boca— Recuerde que su peor enemigo es usted mismo, nadie más puede jugarle en contra—agregó sintiendo como la adrenalina comenzaba a fluir en el cuerpo de ambos. Era la fuerza que impulsaba a los cuerpos a aventurarse sin pensar en las consecuencias, ella misma se vio reflejada por in breve instante en el Black Lestrange. Quedando en evidencia el hambre que tenía por vincularse con el Libro de los Ancestros, poseer el control sobre los hechizos que recorrieron el paso del tiempo de la mano de los creadores de todo el mundo que regía el poder que ostentaban los Uzzas. Conocedores del arte de la batalla, el pelear por obtener lo que se desean jugándose el todo por el todo— Buen movimiento, espero que mantenga la concentración—advertía sin perder de vista como se curaba del daño causado por el Sectusempra lanzado por la guerrera. El aroma de la sangre quedo plasmado el en ambiente, despertándose en ella esa vena asesina que pocas veces dejaba fluir frente a sus aprendices. El siguiente movimiento de Eobard, no le causaba la menor gracia— Ya está aprendiendo, parece que desea volver de una pieza a su hogar—enunciaba con tono divertido la Uzza. El jugueteó entre ambos se estaba volviendo una moneda corriente, aquello le agradaba contar con una persona tan empática con la cual poder compartir los conocimientos que poseía—Silencius—sentenció la guerrera del Libro de las Auras, intercalando con efectividad su efecto, evitando que la invocación de la Vara de Cristal que deseaba realizar el caballero quedará en una mera alucinación. Aunque eso no evito que el rayo continuará con su trayectoria, sintiendo como un choque de adrenalina estallaba dentro de ella. Elevando su varita pensó con fiereza—Kansho—invocando la hermosa daga que absorbió en el acto el Expelliarmus y lo devolvió en el acto contra su contrincante. Ahora el quedo desarmado, viendo como su varita salía volando por los aires fuera de su mano, dándole un poco de ventaja a la traviesa joven. Tres metros exactos fue la distancia que recorrió la varita de Eobard tras soltarse del agarre que el mago tenía sobre ella. Le tocaba recuperarla y poner un poco más de atención a la hora de intentar atacar a la mujer que le mató la vez anterior y todo gracia a que el Caos hizo lo suyo dentro del duelo que sostuvieron. @ Eobard Thawne

El apresurar las cosas no siempre era lo más sensato dentro de los duelos, no cuando se tenia delante a un rival como Runihura. Si era la más joven de los guerreros Uzza, aunque eso no demeritaba en lo más mínimo el potencial que poseía la joven a la hora de batirse a duelo. Cerrando los ojos lamentaba la falla que tuvo su alumna al lanzar aquel ataque, si le obligaba a curarse y ante todo darle un lapso de tiempo considerable para hacerlo sin problema alguno—Anapneo—pensó destapando sus vías respiratorias soltando una profunda bocanada de aire. Entrando por sus fosas nasales de nueva cuenta el oxigeno que le permitía mantenerse con vida dentro del duelo. Centrando sus ojos pensó otro conjuro con una calma que dejaría pasmado a cualquiera—Curación—sanando la herida que le causará ese gas sin consumir la acción que usaría a continuación. Retomando el control de sus acciones y su cuerpo, sintiendo como la arena afectaba sus ojos. No era nada comparado con el ver morir al mago a causa del fuego mágico, sino todo lo contrario el malestar era grande al tener esa especie de arena en sus ojos impidiéndole ver con claridad. Jugando del mismo modo que lo había hecho Ada, se limitó a pensar con malicia—Cinaede—el veneno gaseoso que fue extraído de los pétalos del pensamiento, rodeó a su contrincante. Colándose por sus fosas nasales hasta su sistema nervioso y circulatorio, cortando sus vías respiratorias impidiéndole respirar con facilidad, avanzando hacia su sangre. Además de ahogarla y arrastrarla a la muerte, le causaría una herida grave que debía sanar, sino deseaba irse a su hogar dentro de un ataúd. @ Ada Camille Dumbledore

Buenas Noches Vengo a citar algunos detalles dentro del duelo que estamos teniendo, le aconsejo primero que nada poner especial cuidado a la hora de atacar o defenderse, Leer con atención lo que ha lanzando su rival en su contra, buscando la manera más efectiva de sanarse de ello o poder evitarlo (esto en caso de que el rol lo permita). Existe algo que se conoce como vacío de rol y deja espacio para que el rival interprete como mejor le parezca el ataque que ha lanzando, se lo comento por el Cinaede. Si uno debe curarse del daño que causa el gas. Pero, ¿Por donde entra al sistema que busca dañar?, recuerde que no deben dejarse esa clase de espacios sin llenar. Los duelos suelen ser un mundo de detalles que deben ser especificados con claridad, si no deseamos que eso nos juegue en contra. La incito a que lea con atención la lista de los hechizos, antes de responder y poner especial atención en los detalles. Saludos@ Ada Camille Dumbledore

Desatándose de la nada una tormenta de arena que entorpecería la visión de su alumna para dar con exactitud con el sitio donde se enfrentaría a la Uzza. Runihura se limitó a dejar por el camino algunas marcas parecidas a las lozas amarillas del camino que conducía a Dorita al castillo del mago de Oz. Dándole un toque humorístico a todo aquello, saliendo un poco de lo establecido por los guerreros Uzza, cambiando su mal talante por uno más jocoso. Aquello no quería decir que las cosas le resultarían del todo sencillas a la aprendiz, sino todo lo contrario— Espero que le vaya bien y no muera en el intento—indicaba con una sonrisa divertida en sus labios. Revisando con la mirada todo el terreno que pisaba, no le importaba tener como invitados a una que otra alimaña que habitará dentro de ese inmenso desierto. Si bien le agradaba la idea de usarlas en contra de su contrincante, colocándole un blanco en el centro del pecho— Flechas de Fuego—pensaba con tranquilidad la joven Uzza, desprendiéndose de su varita una andanada de filamentos de fuego. Todos ellos buscaban pegar en el cuerpo de la Luxure, causándole heridas sangrantes además de quemaduras que debía sanar sino deseaba irse derechito a los brazos de la muerte. — Preste atención, no pienso volver a repetirlo—hablaba con autoridad mirando con atención las acciones que tomaría al respecto al mujer que estaba frente a ella. Esperando que cada una de las nuevas lecciones que le dictará la guerrera fueran aprendidas y asimiladas con la astucia debida, sino en caso contrario no le costaría nada enviarla a su hogar sin vida. C O N D I C I O N E S Duración de la Prueba: del 20 al 30 de Julio. No existen los límites de tiempo entre respuesta y respuesta. Por tanto, la regla de hechizos impactados desaparece. Nos guiaremos por las nuevas reglas de duelos existentes. Lista de Hechizos (con especial énfasis en el Libro del Equilibrio) Están prohibidos los Off y las ediciones. Consultas, dudas o sugerencias, al topic de Consultas Libro del Equilibrio. @ Malum Luxure

Una balanza enorme apareció fuera del templo donde Ada debía aparecer, el mausoleo donde descansaban los Uzzas había quedado en el pasado. Volvía a sumirse en una tranquilidad que asustaría a cualquiera que no hubiera aprendido a lidiar de manera inteligente con el silencio y la paz interna. Ella era un reflejo de aquello tras vivir ese tropiezo con una de sus alumnas, recobró al instante la calma que solía acompañarle en cada una de sus clases. El viento soplaba con fuerza era un día despejado, no había una sola nube que empañará la belleza que otorgaba el cielo azul, postal que daba un toque equilibrado a todo el paisaje. — Espero que este lista, porque está prueba no será nada sencilla—aseguraba clavando sus ojos en los de su contrincante. Era momento de demostrarle a la guerrera que entendió todo lo explicado dentro de la clase teórica dando paso al verdadero reto. Aferrando con firmeza su varita, no le tomo demasiado tiempo elegir el hechizo con el que daría inicio a ese duelo— Arena de Hechicero—pensó lanzando al aire los huesos cristalizados de un mago que murió a causa del fuego mágico. Aquel efecto fue inmediato, impidiéndole a su rival poder ver con claridad donde estaba ubicada Runihura. Dejándola limitada a solo poder usar hechizos de tipo efecto o invocaciones, ganándose un poco de ventaja a su favor. La Uzza le haría sudar la gota gorda, sintiendo el abrazador sol quemar el terreno que pisaba pero eso no le incomodo en lo más mínimo, al estar acostumbrada a esa clase de climas. La balanza de inclinaría a favor de quien tuviera más habilidades para atacar y defenderse de lo que lanzará en contra su oponente— Recuerde lo aprendido en la clase, tómese un respiro y arme una estrategia que le sea útil—le aconsejaba dándole una mano amiga que esperaba supiera aprovechar. C O N D I C I O N E S Duración de la Prueba: del 20 al 30 de Julio. No existen los límites de tiempo entre respuesta y respuesta. Por tanto, la regla de hechizos impactados desaparece. Nos guiaremos por las nuevas reglas de duelos existentes. Lista de Hechizos (con especial énfasis en el Libro del Equilibrio) Están prohibidos los Off y las ediciones. Consultas, dudas o sugerencias, al topic de Consultas Libro del Equilibrio. } @ Ada Camille Dumbledore

La montaña donde se encontraban en esos instantes fue rodeada por una muralla que creo un circulo perfecto, dejándolos dentro de ella. Evitaría de esa forma que el Black Lestrange con la mala pata que se cargaba, acabara muerto por caer de una altura tan alta y de paso quebrarse el cuello como si fuera un pollo recien nacido. La imagen le resultaba un tanto cómica, acallando la carcajada que amenazaba con salir de sus labios como una bocanada de aire envenenado y viciado. Sujetando con firmeza su varita, no tardó demasiado en idear una estrategia infalible contra el hombre. — No es mi intención matarlo con un solo hechizo, pero si deseo que sufra un poco. Tal vez eso le ayude a prestar un poco más de atención y ser más dedicado y hábil a la hora de intentar defenderse de mis ataques—advertía con una simpática sonrisa en los labios. Esa era la Runihura que todos conocían, juguetona y jocosa, traviesa y sin una sola pizca de maldad a simple vista en su persona o rostro. El ser la más joven de los guerreros, solía dar una imagen más afable y amena a quienes se cruzaban con ella—Vara de Cristal—soltó con fuerza transformando su varita en una de cristal resistente e irrompible. Aquel material resplandecía como lo hace la luna en medio de la noche, iluminando con su blanquecina luz todo lo que tocaba, flotando dentro de ella algunas medias lunas brillantes que la hacían lucir intimidante y hermosa al mismo tiempo—Sectusempra—agregó transformando aquel rayo en un efecto que abriría varias heridas en el cuerpo de Eobard. La sangre teñiría de rojo la blanca nieve, trayendo a su mente un cuento muggle que hablaba de una joven con una belleza sin igual, blanca como la nieve y con los labios rojos como la sangre. Su mirada estaba clavada en los ojos del metamorfomago, no le serviría de nada cambiar su aspecto o hacer uso de esa cualidad que le daba un aspecto muy diferente al que conocía la Uzza. C O N D I C I O N E S Duración de la Prueba: del 20 al 30 de Julio. No existen los límites de tiempo entre respuesta y respuesta. Por tanto, la regla de hechizos impactados desaparece. Nos guiaremos por las nuevas reglas de duelos existentes. Lista de Hechizos (con especial énfasis en el Libro de los Ancestros) Están prohibidos los Off y las ediciones. Consultas, dudas o sugerencias, al topic de Libro de los Ancestros. @ Eobard Thawne

— La sangre es la que corre por las venas de los verdaderos guerreros, aquellos que se han elevado más allá de los conocimientos heredados por los primeros Uzzas—sentenciaba enérgica la guerrera Uzza del libro de las Auras. Su cuerpo era controlado por la energía que brotaba del liquido vital que le corría por las venas, alimento que nutría cada célula de su sistema— Espero que este listo para derramar la sangre que sea necesaria, el mayor sacrificio está por ser demandado por el conocimiento que desea poseer—añadía con una sonrisa amplia en sus labios. Tomando con firmeza el mango de su varita, aquella que quizás dentro de unos minutos cambiará su forma para volverse un arma mucho más poderosa de lo que ya era actualmente— Sectusempra—pronunció brotando de la punta de su varita un rayo de color escarlata que de impactar en Eterno, le abriría en el cuerpo heridas sangrantes que debía curar o perdería la vida de no hacerlo. El sitio donde se desarrollaría el duelo estaba alejado de todo ser viviente, quedando sujetos a los deseos de Runihura. Debajo del suelo que pisaba corría un rio sangriento donde varios huesos flotaban como si fueran peces inertes, carentes de vida en ellos pero siendo la prueba de que el podría terminando por hacerles compañía. Los arboles que rodeaban aquel terreno estaban secos en su totalidad y el ulular de los búhos era lo único que se dejaba sentir como un acto de bondad por parte de la naturaleza. La noche era oscura, no estaba una sola estrella destellando en el oscuro firmamento. Solo un manto que parecía la vestimenta del asistente a un funeral, velando al caído que no supo aprovechar las incontables oportunidades que se presentaron en su andar, para demostrar que tenía lo necesario para vincularse con éxito al libro de la sangre. A lo lejos varias tumbas preservaban dentro de ellas la esencia de los maestros que enseñaron todo lo que sabía a la guerrera. Honrarlos con una victoria era lo menos que podía hacer, ya había masacrado a varios aprendices en el pasado y ese enfrentamiento no sería la excepción. Echando una mirada a los amuletos que llevaba consigo acompañados por los anillos que le daban más poder del que ya poseía por el simple hecho de ser la encargada de trasmitir sus conocimientos a otros. C O N D I C I O N E S Duración de la Prueba: del 20 al 30 de Julio. No existen los límites de tiempo entre respuesta y respuesta. Por tanto, la regla de hechizos impactados desaparece. Nos guiaremos por las nuevas reglas de duelos existentes. Lista de Hechizos (con especial énfasis en el Libro de la Sangre) Están prohibidos los Off y las ediciones. Consultas, dudas o sugerencias, al topic de Consultas Libro de la Sangre @ Eterno Black Triviani

La mala suerte era la compañera inseparable del Black Lestrange, poco o nada faltó para que se quebrará la cara contra la superficie rocosa. Ella por su parte supo hacerse de un camino sencillo de escalar, clavando por última vez sus manos en las piedras y de un salto girar en el aire y caer como una gimnasta sobre sus pies con firmeza—La mala suerte es como su sombra, ¿no ha pensando hacerse una limpia?—le agregaba un toque jocoso al ascenso de su único aprendiz. Ya se conocían de otras clases, entablando una relación amena entre el y la Uzza. Ganándose en cierto modo un poco de aprecio por parte de la joven, le gustaba la forma desenfadada tan que se tomaba cada uno de los juegos o trastadas lanzadas por la mujer. — Solo tiene efecto sobre los hechizos de tipo rayo, consideré ese detalle. Verá que la definición que aparecerá en su libro cita lo que le he comentado, existen hechizos que solo se aplica dicho efecto, no al resto—una sonrisa simpática apareció en los labios de Runihura. Esperando que no se lesionará la dignidad de nueva cuenta, porque no dudaría en darle una paliza como lo hizo con mucho placer dentro del duelo del libro del Caos. Tras concluir su explicación sobre la Vara de Cristal, daba paso a la siguiente duda que se generará dentro de la cabecita curiosa de Eobard— Está en lo correcto, si los hechizos que desea absorber con la daga Kansho, vienen equipados con la Vara de Cristal, no sirve de nada. Puede considerarlo una acción desperdiciada, por eso es mejor asegurarse de usarla con los conjuros que no estén equipados con la vara antes mencionada—indicaba escuchando la añoranza al mencionar el amuleto antirrobo. Parecía que la vida del hombre sufrió demasiados cambios inesperados, pero eso era lo que le daba el verdadero valor a la vida. Aquello que era capaz de sorprendernos y darnos experiencias que la mayoría de las veces enriquecían más nuestra vida y las vivencias que compartiríamos con los que nos rodean— Deje el pasado donde está, no viva del el. Solo limítese a disfrutar lo que le ha brindado y camine hacia adelante, si va a mirar hacia atrás que sea solo para tomar impulso y no para caer en los viciosos o sin sabores que ya ha superado—dando por saldada la cuenta que tenia que ver con las dudas que tenía. Le tocaba comenzar a mentalizarse sobre la prueba final, porque como siempre la traviesa Uzza no dudaría en mandarlo dentro de una caja de cerillos a su hogar. @ Eobard Thawne

Se agradecía así misma no poseer las expectativas demasiado altas con respecto a sus alumnos, porqur varios de ellos habían resultado ser una apabullante decepción dentro del duelo de la prueba final. Lo estaba experimentando con la joven que intervino después de sus explicaciones en la clase—No poseo el titulo de Arcana, sino de Uzza. Yo no imparto una habilidad, sino los conocimientos que poseen cada uno de los libros de hechizos que ustedes deben aprender al acudir a estás clases—indicaba con serenidad. El prestar atención a lo explicado por los guerreros, no era una petición que costará demasiado concretar con altas expectativas o al menos eso pensaba Runihura. — No, no se pueden comprar dentro de un mercado. Tal y como lo explique, se van reponiendo una vez que se han usado de manera constante. Lo mismo ocurre con los pétalos del pensamiento, no puede crear el Cinaede y usarlo dentro de un duelo—la voz de la Uzza era tan fría que se quedaría corto un iceberg con ella— Una cosa es alucinar con el perfume que se crea de los pétalos del pensamiento y otra cosa es ahogarse por que las vías respitatorias están obstruidas por el gas que invoca el Cinaede—ladeando la cabeza se cuestionaba como había sido el paso de la joven por el libro anterior. Su compañera captó las palabras de la mujer con facilidad y sin crearse tantos debrayes mentales. — Algunos hechizos no le servirán dentro del campo de batalla, otros si. Le aconsejo que lea los que se han plasmado en las hojas de su libro, para que eso le ayude al momento de enfrentarse a la prueba de vinculación—cambiando su humor por uno que no conocía las bromas en ese instante. El jugarles una trastada no estaba en sus planes, no tras pasar por ese trago amargo— ¿Tienen alguna duda, señoritas?—mirandole fijamente espero que tomará esa oportunidad que le ofrecía la más joven de los guerreros Uzza. Su mirada pasaba de una a la otra, deseando que no le hicieran perder el tiempo dentro del duelo. Porque ahí no tendrían las cosas tan sencillas, ya que les tocaría enfrentarse a las dos a la Guerrera del Libro de las Auras. @ Ada Camille Dumbledore @ Malum Luxure

La guerrera había terminado la parte teórica de la clase, pero la sesión de preguntas estaba abriéndose paso. La sangre que fluía por las paredes no dejaba de correr como lo hace el agua de una cascada, fluyendo con fuerza desde la cima hasta golpear con violencia el fondo de ese cuerpo acuífero. Se sentía satisfecha en parte por la predisposición mostrada por parte de Eterno, restaba comprobar si estaba listo para enfrentarse a la prueba final — No es lo mismo entender lo que uno explica dentro de la clase, el verdadero reto inicia al entrar al terreno del duelo y demostrar que sabe como defenderse de los ataques que sean lanzados en su contra—hablaba con calma la joven clavando sus ojos en el rostro del hombre que estaba dentro del recinto acompañándole. Tomándose un momento para cambiar la sala donde se encontraban, ahora estaba delante de ellos una enorme mesa de piedra donde yacía el cuerpo de una persona que pereció al no saber como manipular con destreza los poderes que le otorgará el Libro de la Sangre. — Es fácil sonreír al sentirse conectado con esta magia tan poderosa, vinculado a la sangre que muchos derramaron para darle un sentido al poder y el conocimiento que este brinda—aferraba con más fuerza su daga a su mano. Ella sabía como cortar limpiamente la piel de un enemigo, dejándole un daño que sería curado por algo más que un simple curación o evitado con un Silencius. Si no hacia uso de la palabra para causar dolor, no había medio que le brindará una solución a su único alumno. Off- 1-. ¿No debería cortarme o si? En este caso,, al recibir el daño, ¿Cuánto tiempo dura la vinculación? 2-.Sin importar el daño, ya sea un corte extenso propiamente dicho o una puntada realizada con la daga la cuál es muy filosa. Esto sigue valiendo -30 pv ?? Así es, ya que es lo que cita la definición del hechizo. 3-. Si la daga del oponente me corta o en el caso de que yo le corte al otro con mi daga. En ambos casos por separado quedaríamos vinculados los dos ? Y así poder usar la vinculación en juramentos maldiciones y algo más? Y ¿Y cuánto tiempo dura estás vinculaciones?. En este caso se maneja el corte que se ha realizado para dañar, porque usted se hace un corte que aparecerá en el brazo de su rival. No es posible que uno queda tan cerca como para cortarlo o el lo corte a usted. Porque puede manejarse como abuso de rol, podría darse la oportunidad de hacerlo, si no queda descartada. Pero no parece viable, ya que muchas veces se prefiere usar el corte que genera el daño del sacrificio para causar una herida sin tener que estar en contacto directo con el objetivo en cuestión. Se le conoce como juramento de sangre, tal y como se lo comente dura una acción. Y se emplea una vez por turno la daga, aunque la misma permanece invocada sin problemas. Si tiene alguna otra duda, le pido que la poste y la responderé con gusto. @ Eterno Black Triviani Saludos Cordiales

— La soberbia suele ser mala consejera, posiblemente sea compañera inseparable de la ociosidad. He escuchado que se le cita como la madre de todos los vicios, esperemos que no le atrapé antes de terminar de ascender por esta montaña—clavaba con firmeza sus pes en el terreno con cada paso que elevaba hacia la cima. Sus ojos estaban fijos en la superficie rocosa, cuidando no dar un traspié e irse al fondo del acantilado que apareció gracias a la magia que poseía la joven Uzza. El ser la de menor edad, le dotaba de una energía incansable, fuerza inagotable que le permitía poner a prueba a cada uno de los aprendices que acudían a ella por una pizca del inmenso conocimiento que les habían legado sus Ancestros Uzzas. — Es correcto, no duran el mismo tiempo. Pero tienen un efecto similar, no es grato para nadie sentir tierra en los ojos y no poder ver con claridad que lo ha ocasionado y desquitarse por ello—el tono vengativo estaba impreso en sus palabras— Puede ver lo que desee, pero no creo que para ello deba perder un globo ocular o ¿si?—intentó no reír al verlo con un parche en el sitio donde debería estar su ojo y no un hueco similar a un pozo oscuro. Las bromas estaban por hacer acto de presencia dentro de la clase, no le gustaba la idea de que fuera todo tan cuadrado y lineal, justo antes de que el llegará removió un poco las rocas donde debía pasar Eobard para darle alcance a la guerrera. Todo resultó como lo esperaba, viéndole trastabillar por poco se iba a volar por los aires y sin alas que le sirvieran para planear por el firmamento, quebrándose algunos huesos— Cuide donde pisa, no creo que le apetezca morir antes del duelo—indicó tomando con firmeza una roca que sobresalía ayudándose con ella como palanca para impulsarse y dar un salto hacia la cima— Kansho es una daga de acero tan afilado que es capaz de partir diamantes con un pequeño roce. Su empuñadura es de plata con orfebrería en oros blancos y dorados, diamantes y esmeraldas completan la belleza de esa afilada arma—sujetándola con firmeza permitía que la viera. — Absorbe la magia de los enemigos y retiene los hechizos, para ser usados en el futuro. Aunque no posea el nivel para ejecutar los hechizos que la daga ha absorbido—musitaba viendo como una oleada de copos de nieve caía sobre ellos como lo hacen las gotas de lluvia sobre los techos de las casas. Quedando algunos de ellos atrapados en el cabello de la joven, dándole un toque cómico a esa postal que le hacía ver como una muñeca de nieve sintiendo una sensación de cosquilleo en sus mejillas producto de la nieve—Amuleto anti-robo, posee la forma de una porcelana que representa al dios griego Hermes con un casco alado. Impidiendo que puedan robar en los lugares en donde se encuentra colocada, puede proteger una mansión o negocio. Asimismo sirve para proteger las bóvedas trastero, pero no sirve dentro de un duelo—ladeaba la cabeza al verlo pender de la montaña. El ayudarlo era una opción, recordándole que existía un amuleto que le permitía volar distancias cortas y no darse contra el suelo tan fuerte que algunas neuronas de perdieran tras el impacto— Use el amuleto volador, no me diga que no tomo la clase donde explican para que sirve el mismo y debe llevarlo consigo para evitar tener que ser salvado por los Uzza que se crucen en su camino—reprobaba un poco la nula atención que se prestaba a los amuletos que los libros anteriores al de los Ancestros traían consigo. — Tenga en cuenta que la daga solamente puede ser usada una vez dentro de la batalla y no detiene los hechizos que estén lanzados con la vara de cristal—explicaba esperando a que retomará el paso el Black Lestrange— Vara de Cristal, no se consume ninguna acción para invocarla. Su varita mágica crecerá hasta convertirse n una vara o bastón de un material mágico irrompible con apariencia de cristal, cuyo aspecto y color serán diferentes según el mago que la invoque. Pude imbuir de poder un rayo, transformándolo en efecto—daba por terminada la parte teórica. Ahora le tocaba a Eobard, exponer las dudas que le pudieran surgir y prepararse para lo que la guerrera Uzza le tenía preparado en la prueba final. @ Eobard Thawne

La mujer que estaba delante de ella, parecía dispuesta aprender el exquisito conocimiento que brindaba el Libro del Equilibrio. Era como colocar en una balanza las posibilidades de vincularse con éxito al mismo o tener que dar un paso al costado, replanteándose si se contaba con lo necesario para acceder a un poder que a muchos les quedaba grande sin refutación posible ante tal aseveración. Los ojos de Runihura estaban fijos en cada una de las expresiones de la Dumbledore, la forma en que asimilaba lo explicado con anterioridad por la guerrera. — Las Flechas de Fuego son filamentos que causan quemaduras y heridas graves en la persona que impactan. Salen en una andanada y solo puede sanarse su daño, al apagar el fuego que las compone con un Aguamenti—comentaba continuando con su explicación para concretar con éxito la sanación contra ese hechizo— Luego de eso debe curarse con un episkey las heridas sangrantes que han causado, para que la gravedad desaparezca por completo. Debe hacerse antes de que sea demasiado tarde, recordando que muchos conjuros tienen un lapso de tiempo que permite ponerles fin o terminar del todo con los efectos que han causado—indicaba aferrando con fuerza su vara de cristal. — La Arena de hechicero debe usarse de manera no verbal y son los huesos de un mago que ha muerto a causa del fuego mágico. Se han cristalizado y al ser lanzados al aire son capaces de cegar a un contrincante, dejándole solo con la capacidad de realizar hechizos de tipo efecto e invocaciones, ya que esas no requieren de puntería—deambulaba por un grupo de lapidas que estaban cerca de la entrada del mausoleo. Conectándose con las energías que brotaban de los antiguos Uzzas, maestros que le dejaron la encomienda de transmitir los conocimientos que ella adquirió a base de esfuerzo, sangre, sudor y ni una sola lagrima. — Semillas de hielo—soltaba desatándose un viento helado de un momento a otro— Esto es lo que surge al emplear ese hechizo, este viento helado es capaz de paralizar cualquier criatura recubriéndola de hielo. No se puede usar en contra de criaturas de sombra o ofuscables—indicaba dando paso al último hechizo que formaba parte del Libro del Equilibrio— Cinaede, es un veneno gaseoso extraído de los pétalos del pensamiento. Alrededor de su rival surge un gas que penetra en el acto en sus vías respiratorias, cortándolas. Pasando posteriormente a la sangre, provocando la paralización del sistema nervioso y circulatorio, dando como consecuencia la muerte—jugaba con la idea de lanzarlo contra la mujer cuando estuvieran dentro del duelo. — El bezoar no ayuda a contrarrestar el veneno gaseoso del Cinaede. El veneno será más potente en función del nivel que posea el mago o bruja que lo ha empleado dentro del un duelo o situación de batalla, se requiere de un Anapneo del nivel 10 al 19 en el primer turno. Del nivel 20 al 29 se requiere de un Anapneo en el primer turno y un episkey en el segundo, ya que además de envenenar causa una herida grave. Al ser lanzado por magos de nivel 30 en adelante, debe usarse un Anapneo en el primer turno y la herida que se recibe es de carácter critico. Debe curarse si o si en ese instante con un episkey, siendo el mismo de emergencia—finalizaba su perorata. Lista para escuchar las dudas que le pudieran surgir, porque ella no sería tan condescendiente como sus otros compañeros Uzza. @ Ada Camille Dumbledore

La guerrera escuchaba con atención las dudas del hombre, dándole la oportunidad de percatarse de que su interés sobre el control del Libro de la Sangre, iba más allá de conocer el simple dominio básico de los hechizos que se comenzaron a plasmar en las hojas blancas que conformaban aquel tomo. Ella misma poseía intenciones similares, pero sus ansias por ver la sangre correr, distaban mucho de ser solo una practica educativa que le diera un panorama mucho más amplio y variado al Black. No era lo mismo experimentarlo en carne propia que infringir un dolor descomunal en un adversario. Controlar el liquido que le corría por las venas y elegir el momento idóneo, para extraerlo de su sistema, expulsándolo con la fuerza de la propulsión a chorro. Retratando en su mente aquel suceso como un cohete que sería enviado al espacio por la fuerza que generaba dentro del el el liquido combustible— Es como ofrendar parte de usted a esa persona, ¿Cómo quitarle lo que le ha dado por el mero hecho de decidir que ya no lo merece?—le miraba clavando sus ojos en los de Eterno. — Un vinculo tiene el mismo peso y valor que una promesa o juramento. Si no está seguro de hacerlo con la persona que desea evitar que sufra daños innecesarios, le aconsejo que lo medité antes de poner en practica ese hechizo—indicaba endureciendo el tono de su voz. Era necesario enseñarlos a respetar el valor de la sangre y más aún el de la vida de las personas que se conectarían por medio de ese vinculo con el portador de la daga del sacrificio. La serenidad que solían mostrar los guerreros Uzza delante de sus aprendices, pocas veces se veía perturbada por cuestionamientos de esa clase. Su deber era responder cada una de las dudas, dándole un fundamento valido y de peso a la respuesta emitida por ellos. — Es posible realizar un vinculo con más de una persona a la vez. Debe tenerse en consideración que todas las personas que desee mantener alejadas del peligro, se encontrarán dentro del mismo lugar en una fecha y hora elegida por usted a su conveniencia. Si está dentro de un duelo, ¿Qué hará para proteger a sus hijos y esposa, si quien es su rival pertenece también a su núcleo familiar?—le gustaba la forma en como colocaba todo dentro de un espacio y tiempo que no dejaba nada al azar. Solamente se limitaba a demostrarle que no era posible vincularse con una persona que estuviera dentro de Londres y con otra que se encontraba en Italia. Porque la distancia era un factor que jugaba en contra, no se acortaba la misma con solo desearlo mentalmente o pedirle a los antiguos guerreros cambiar lo que ya estaba escrito. Pero si los que deseaba proteger estaban dentro de la misma habitación o campo de batalla, la cosa era muy diferente a la hora de buscar salvaguardarlos. — La marca de sangre es como una huella digital que dejará impresa en la persona que toque. La maldición actúa directamente en los actos o acciones que su rival lleve acabo, dentro de un duelo provocará que el hechizo de defensa o ataque, no surta el efecto esperado en usted—miraba su daga— Un ejemplo simple es un Aguamenti, no saldrá un chorro de agua de la varita de su contrincante. Quizás una serpentina o algo similar a eso, pero no agua como suele ocurrir al poner en practica ese conjuro—su explicación era detallada y clara. Continuaría con el resto de los encantamientos, no deseaba que el tiempo se les fuera como agua entre los dedos— Cuando invoque la daga, no consumirá ninguna acción al hacerlo y tendrá que hacerlo de forma no verbal. Y para que pueda usarla deberá pronunciar las siguientes palabras “Dañar”, el mago podrá usar la daga para infringirse daño el mismo, proyectando este en su objetivo. Cada vez que se haga un corte con la daga, no debe olvidar curarse el mismo con un Episkey, porque en caso de no hacerlo el daño se acumulará y pondrá su vida en riesgo—señalaba la punta de la afilada arma, observando con detenimiento la expresión que se plasmaba en el rostro de su interlocutor—“Proteger”, también podrá utilizarla para proteger a un mago de su elección, sufriendo en lugar de este el daño que haya recibido, durante una única acción que acabe de ocurrir—fijando sus ojos en las antorchas que cada vez atenuaban un poco más la vaga iluminación que emanaba de ellas. — Tenga en cuenta que al usar la daga deberá pronunciar, en voz alta las palabras “Immolo Oppugnare”, me sacrifico para agredir. "Immolo ad protegendum", me sacrifico para proteger. Ambas acciones deben ser realizadas de manera verbal, tomando en consideración que le será más benéfico dentro del duelo, agredir o proteger—asentía avanzando hacia el centro de la sala. La sangre que fluía de las paredes era cada vez mayor, anunciando que el duelo de la prueba final se avecinaba en poco tiempo— Marca de Sangre, si logra tocar a su objetivo o algún objeto que le pertenezca, le grabará la marca que le permitirá controlarlo por completo durante una acción. Se debe pronunciar la palabra “Obedire”, el afectado no podrá causarse asi mismo ninguna herida sangrienta que requiera del empleo del hechizo curativo “episkey”—enfatizó esa parte de su perorata. — La marca también afectará a las criaturas, invocaciones y objetos que el conteniente posea. Si se logra tener contacto con ellas, surte el mismo efecto que al tocar al mago enemigo. Pero no se puede aplicar a criaturas ofuscables a menos que se posea el nivel necesario para ello, el efecto a la hora de usarlo debe realizarlo de manera no verbal—la sonrisa en los labios de Runihura se hizo presente alcanzado sus ojos dándoles un brillo maquiavélico, comenzando a marcar los lineamientos que seguiría dentro de la prueba final— Juramento de Sangre, tomando como objetivo a una persona que haya cortado anteriormente con la daga, se considerará a las personas que hayan sido laceradas por ella tras elegir ser dañadas por el corte de dicha arma. Se le ligará a una promesa durante un periodo de tiempo, siendo las siguientes las que debe cumplir. Prohibición de atacar, prohibición de defenderse, prohibición de desaparecer, prohibición de lanzar rayos, prohibición de lanzar invocaciones, prohibición de lanzar efectos, prohibición de lanzar hechizos verbales, prohibición de lanzar hechizos no verbales—hizo una breve pausa antes de proseguir. — Si el objetivo no cumple con la promesa que se le ha encomendado, recibirá un corte en su cuerpo hecho por la daga y requerirá de un episkey para sanar el mismo. Del mismo modo el invocador de la daga, quedará sujeto a las mismas promesas que le mencione con anterioridad y deberá pronunciar “Yo juro”, seguido de la promesa que desee que el rival o usted cumplan. Por ejemplo, Yo juro no atacar a mi rival”, el efecto es verbal y deberá pronunciarse con claridad el “Yo juro”—rodeaba con su mano el mango de la daga— Maldición como le comente hace unos minutos, provocará que el hechizo que haya sido lanzando por su rival, ya sea de manera verbal o no verbal, no surta el efecto deseado. Sino que sea una versión ridícula del original, sin ningún efecto real sobre nadie y para ponerlo en practica lo hará de manera no verbal, es decir pensando la palabra “maldición”—concluía de ese modo la parte teórica del libro de la Sangre, dejando espacio para que planteará las dudas que le fueran surgiendo en el camino. @ Eterno Black Triviani

— Insensato ofrendar todo lo que posee, para obtener el poder de la sangre. Piense antes de lanzar toda la carne al asador—respondió sin expresión alguna en su joven rostro— No queremos que muera antes de comenzar con la lección, agradezco el ímpetu que demuestra y eso le será de utilidad dentro de esta clase sin duda—indicaba Runihura. Le gustaba la idea de conocer personas que daría el todo por hacerse con el control de un libro como lo era el de la sangre. El liquido que era capaz de dar la vida e igualmente del mismo modo la sesgaba de manera irremediable o eso se les hizo creer desde siempre a los magos, que al no curarse de manera correcta lesiones que ponían en riesgo su vida la perderían sin remedio. Extrayendo la Daga del Sacrificio del cinto que la protegía de las miradas curiosas, admiraba la belleza que irradiaba aquella arma tan poderosa y al mismo tiempo letal. El objeto destello al ser rozado por la tenue luz que emanaba de las antorchas— Este poderoso objeto se utiliza para invocar el ritual de la sangre, conectado a dos almas para que compartan el dolor y sufrimiento—hablaba con tranquilidad, sintiendo el poder que brotaba de la afilada hoja— Puede realizarse cualquier clase de herida y está se producirá de manera simultanea en la persona con la que haya decidido conectarse. Derramando la misma cantidad de gotas de sangre y experimentando el mismo dolor ambos—añadía a su explicación deslizando el filo por su brazo sin realizar ningún daño sobre la piel de momento. — Otra facultad que posee la daga es la de proteger a otra persona que no sea usted, sacrificándose. Cualquier daño que reciba la persona que ha elegido proteger, será infringido en su persona, ya que el portador de la daga es el objetivo. Objeto que se moverá por propia voluntad para infringir ella misma los daños que hubiera recibido la persona a la que esta conectada—esperaba haber sido clara en su explicación. Le daría unos minutos para procesar la información, dando paso a otro hechizo del Libro de la Sangre. — La Marca de Sangre, el mago le coloca una marca imborrable a su rival en el lugar donde se ha producido el contacto. El dibujo y tamaño es único en función del invocador, no siendo nunca inferior al tamaño de la palma de su mano. De inmediato esa persona cae bajo el control de su voluntad, convirtiéndose en su siervo durante unos pocos minutos. Las ordenes se pueden dar de manera telepática, pues se ha establecido un vinculo entre ambas mentes—apuntaba su dedo índice a su sien para darle un enfoque más real a su alumno. —Juramento de Sangre, haciendo uso de la daga de sacrificio se puede realizar un juramento de sangre que vincula a todas aquellos magos o brujas que esta haya cortado, atándoles a una única promesa, que debe ser pronunciada en ese instante. Si el juramento se incumple y se rompe dicha promesa, el que lo haya hecho recibirá un doloroso y profundo corte en su cuerpo, comenzando a sangrar el mismo de manera profusa, requiriendo un hechizo curativo para sanarlo o al menos calmar el derramamiento de sangre—recordaba varios conjuntos que le vendrían bien a esa escena tan dantesca y tortuosa. — La Maldición, le permite al mago de sangre maldecir a una persona, volviendo la suerte de este nefasta. Las cosas le irán mal, la gente se enfadará con él o ella sin motivo aparente, sufrirá pequeños accidentes, caerán cosas a su paso, se resbalará en charcos que hubiera jurado que aparecieron de la nada. Extraños sucesos que lo dejarán sin creer que todo es real y no solo un traspié causado por la maldición que lo persigue—finalizaba su explicación, notando que el hombre que le acompaña mantenía un semblante serio y concentrado en apariencia. @ Eterno Black Triviani