๑Moco de Troll๑ (MM B: 104903)

[Allensote]

Los locales del Callejón Diagón pasaban lentamente por ambos lados. Sus cabellos castaños caían sobre sus ojos por la brisa fría que pasaba en frente de su cara. Una camisa blanca, pantalones y zapatos negros era la vestimenta del mago. Sus ojos cafés observaban las diferentes fachadas y vidrieras que estos sitios exponían en los cuales se notaba el esfuerzo y trabajo duro que sus dueños habían plasmado cada uno de ellos. Aún así su meta era el negocio: ๑Moco de Troll๑, el cual era un lugar que siempre había querido conocer, y no iba a perder la oportunidad ahora que se estaba adentrando en el mundo de la magia. Sus pasos empezaron a ser mas rápidos y siguiendo fielmente las instrucciones que le habían dado sus ojos se agrandaron cuando vio el letrero que tanto había esperado encontrar.

Era mucho mas pequeño de lo que imaginaba, solo una puerta celeste y unas paredes amarillas separaban el negocio del callejón. Su mano derecha sacó un papelillo de su bolsillo el cual contenía las palabras claves para poder entrar. -¡Travesura realizada!- Exclamó esbozando una sonrisa y así la pequeña puerta celeste se abrió, de la nada una nube de burbujas le daban la bienvenida al local.

El lugar era mucho mas grande de lo que imaginaba, los estantes exponían todo tipo de objetos y de cosas divertidas. El mago no dudo en moverse hacia ellos y poder así encontrar caramelos de todo tipos, desde Grageas de todos los sabores y ranas de chocolate, hasta Piruliés con sabor a sangre y tarros de cucarachas. Sin duda no se iría del lugar sin comprar unos cuentos dulces, en especial las plumas de azúcar las cuales era perfectas para comer en las clases de la academia. Empezó a coger cuanto dulce se encontraba y cuando ya sus brazos estaban repletos de ellos se dirigió a la caja registradora. Pudo notar que había otra maga de estatura baja a quien decidió pedir auxilio ya que no quería que ninguno de los dulces se cayeran.

-Disculpa me podrías ayudar a poner los dulces en la caja, por favor.- Se dirigió a la castaña de rasgos asiáticos con una sonrisa.

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[Saori Rambaldi Ragnarok]

El momento de silencio paso mientras esperaba la respuesta del joven, re soplo un poco mirando esquiva hacia al techo no dudo en cambiar su rostro de alegría. Una pequeña voz pero con grosor pensó que la asiática era parte de el clan de este negocio que al parecer el joven que la atendía no le prestaba atención, saori pensó que tal vez pensaba en su pareja o hijos no sabia quien era pero su rostro y expresiones eran familiares.

 

Voltea para ver al joven que ali se encontraba con un sonrisa leve y los dulces en la mano le dice.- Esto.. mm disculpa pero al parece el cajero e quedo en las nubes - continua.- pero bueno este negocio es de un familiar mio si te interesa probar este nuevo dulce .- le muestra los dulces que ella desprevenida se iba a comer tal vez el joven de apariencia fuerte lo hiciera.

 

-Saori quería hacer la maldad -

 

Con una mirada tierna le ofreció un dulce rojo .- Mira lo invito yo veras que son deliciosos .- dice con algo de convencionalmente hacia el joven quería probar suerte ademas, aunque ella sabia que no iba ser posible.

 

@Allen @Haberth Portillo

[Allensote]

Los ojos del mago se voltearon hacia arriba al no recibir ayuda por parte de la maga pero por suerte uno de los duendes que atendía el lugar se apareció de la nada y asistió al mago con su problema. Sólo un chasquido bastó para desaparecer todos los dulces de sus manos y reaparecerlos sobre el contador de la caja. La eficiencia de los elfos era algo que no se podía negar, se preguntaba cuanto tiempo pasaría para obtener su propio elfo para así facilitar las diferentes actividades rutinarias que a veces daba tanta pereza realizar. En unos pocos segundos la compra fue realizada y la bolsa con los caramelos sería guardada mientras exploraba las otras plantas del negocio.

 

Escuchó la suave voz de la desconocida, quien no lo había ayudado, la cual le ofrecía un dulce de envoltura roja que descansaba en la palma de su mano. No lo pensó dos veces y aceptó ese gesto de amabilidad extendiendo su mano para coger el dulce. Ninguna sospecha o duda pasó por su cabeza ya que la maga se veía demasiado inocente para saber lo que se traía algo entre manos.

 

-Muchas gracias.- dijo abriendo el caramelo y poniéndolo en su boca.

 

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[Saori Rambaldi Ragnarok]

Sostenía la risa viendo al joven abrir el dulce, era inevitable y que el cajero se pierda esta pequeñas no era justo, los dulces ofrecidos al joven son mas mas que los bomba esos que te dejan sabor a explosivo, saori tenia deseos de ver la reacción de el peli castaño sol esperaba que no se fuera a enojar aunque no había muchas razones para hacerlo era una tienda de bromas y esa era una cualidad de ella.

 

.Jejeje . una pequeña y suave risa soltó.

 

-Emmm de nada de nada es un placer siempre al servicio .- Continua la joven asiática mientras sostiene la risa, tratando de no hacer notar lo que iba hacer.

 

Saori toma su pelo y lo acomoda un poco mientras espera aquel joven, mediante la acción quería establecer un poco de contacto con aquel joven tenia curiosidad lo cual no era extraño en ella. -mmm como te llamas - dice amable mente despejando su cara de su risa . Extiende su mano.

 

-Yo me llamo saori Rambaldi Ollivander un placer .- dice con una risa carismática. -Espero te guste os dulces .- dice mientras voltea a mirar al joven cajero

 

 

 

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[Allensote]

No había vuelta atrás y había caído en las manos de aquella chica traviesa. El mago se dio cuenta de las intenciones de Saori justo cuando el dulce caía dentro de su boca. No podía creer lo ingenuo que había sido incluso cuando era obvio que estaba intentando contener su risa. Y pensar que había recibido el dulce con una sonrisa pero esta era una regla de la vida: los que aparentan ser los mas inocentes, son con los que hay tener mas cuidado.

 

La cara del mago se puso roja y el humo salía a toda presión por sus dos orejas. Sus ojos casi se le salen de la cara y varias venas sobresalían por el lado de su cuello y arriba de su cabeza. A pesar de que no duró mucho la reacción del dulce, era una sensación que jamas había experimentado; como si su cabeza hubiese explotado. Levantó la cara hacia el techo y sus manos pasaron por su nariz y por sus orejas para comprobar que todo se encontraba en el lugar correcto. Con una mano en el pecho miró indignado a Saori quien con una sonrisa había disfrutado lo que había pasado. Sabía que esto no se iba a quedar así y juró que se vengaría de la Rambaldi.

 

-¡Oh vaya! No me lo esparaba. Parece que caí en tu broma- dijo entre risas -Mi nombre es Allen Delacour.- respondió extendiendo su mano. -Un placer conocerte. No sé si te interesa explorar las demás plantas, sé que hay otras cosas igual de divertidas.- Propuso Allen disimulando con una sonrisa inocente sus verdaderas intenciones. -Dos pueden jugar a lo mismo.- Pensó.

 

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Editado 2 de Diciembre del 2018 por Allen

[Saori Rambaldi Ragnarok]

Las expresiones y gestos del joven Delacour eran graciosas a decir verdad la asiática no podía ocultar su risa asi que se hecho a carcajadas no sabia que decirle al joven pues pena no le daba mucho menos vergüenza por lo que paso, su simple carcajada ya de demostraba todo ademas de su grata presentación la verdad que la joven esperaba una reacción mas agresiva pero al parecer el joven se lo tomo bien lo cual hizo sentir bien a la joven.

 

Jajajajaja .- Disculpa no puedo perder la tradición de este lugar eres el cliente numero 120 que le juego una broma jajaja.- con un gesto burlón continua con la charla El nombre del joven era algo raro pero no podia alegar pues su nombre no es que fuera el mas común entre el mundo mágico.

 

-jajja un placer.- entre risas.

 

El joven sabia que eso no se iba quedar ahí de cualquier forma tenia que devolvérsela a saori, pero ella no tomaba los gestos o indirectos del joven hacia su broma.

.Si aqui ay mucho que ver y probar .- calma su risa .- Jeje por que quieres probar de nuevo- dice burlándose del joven por lo acontecimiento.

 

 

@Allen

[justo]

Pasaba por la puerta del local cuando vi una cosa que hacia mucho que no veia, un patronus en forma de nutria. Sabia perfectamente quien me lo enviaba. El animal luminoso se me acerco y con voz firme me hablo:

 

"Tengo que comunicarte que he hablado, personalmente, con Dolores Umbridge. Le he ofrecido el puesto de Asistente de 3ª categoria del Departamento de Criaturas magicas. Ha vencido su natural repugnancia y lo ha aceptado. Tiene que estar muy necesitada para no poner pegas. Te mantendre informado"

 

El patronius se extinguio suavemente. ¡Pobre Umbridge! Con la mania que le tiene a todo tipo de criaturas magicas....tendra que lidiar con los centauros, espero que no le ponga de los nervios.

 

Y ahogando una risita, entre en el local.

[Allensote]

-¿El cliente número 120 que cae en tus bromas?- Exclamó sorprendido.-Ya veo, eres una experta en este tema. Así no me siento tan mal de haber.- Dijo entre risas, risas que enmascaraban las verdaderas intenciones del mago, estaba seguro de que esto no se iba a quedar así. Por lo general no le molestaba cuando le jugaban una broma, al contrario, siempre apreciaba una buena broma y no estaba molesto, era mas su instinto de competencia y el deseo de quedar a mano con la Rambaldi.

 

-¿Un placer?- Pensó -el placer va a ser todo mío...- Los dientes sobre salían en la sonrisa falsa del mago, no podía esperar a que pagará lo que le había hecho. -¿Quieres subir al segundo piso? Sé que hay muchas bromas y caramelos para probar. ¡Ya sé! ¿Por qué no hacemos una carrera a ver quien llega primero?- Saori asintió -En sus marcas. Listos...- y arrancó enseguida sin aviso alguno. Subió rápidamente las escaleras, esperando encontrar primero alguna broma o caramelo para jugarle.

 

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[justo]

Hace un frio tan intenso en la calle que sienta estupendamente entrar en este local. Se ve el vaho en los cristales que denota que hay un calorcillo interior. espero que el jardin este cimatizado, no me gustaria que las plantas sufrieran por las bajas temperaturas, aunque tambien es cierto que hay algunas plantas que si les pasa algo no creo que me afectase demasiado, como el lazo estrangulador ¿Pero quien demonios se le ocurrio crear una planta semejante?

 

Me acuerdo cuando cuidabamos cristuras magicas, habia bichos que estabamos de acuerdo en que no debian haberse inventado pero otros...¡eran tan tiernos! Como los bebes escarbatos, unas bolitas de pelo que atrapaban todos los objetos brillantes que podian, pero luego, te miraban con esos ojillos y se te humedecian los ojos.

[Saori Rambaldi Ragnarok]

la mirada del mago no era de un agrado menos para el momento de risas que la joven vivía pero hasta ella se esperaba que pasara algo por que entonces que gracia tuviera jugar en el moco, el joven preguntase que tenia esta joven en la cabeza para ser asi, saori empezó a ver para todos lados mientras guardaba el silencio, saoi pudo analizar su rostro calmando un poco su loca risa se acomoda su abrigo y su pelo tocando su piel un poco.

 

-mm jaja no te veo tan emocionado de conocerme - Tomando un aire

 

Saori peno por un momento " ahora que prosigue, este chico se va vengar tiene que ser astuta Rambaldi ". Al parecer el joven toma una buena iniciativa que hace que saori se vea aun mas niña, una carrera saori se quedo un poco quieta y sin mucha atención el joven ya estaba corriendo el elfo le advirtió para que saliera.

Gritando dice

 

-ERES UN TRAMPOSO ¡ - sabiendo que no iba a ganar. -jajaja oye no se vale -casi que tocando su hombro en la escaleras saca su varita y dice -Zancadilla- haciendo caer al joven.

 

-Ups que paso joven Dellacour jajajja - continua llegando al piso 2.

-Toma un poco de polvo pica pica para lanzar un poco en su rostro aguardo detrás de unas las vitrinas.

 

 

@Allen