Chateau Dumbledore (MM B: 78647)

[Ada Camille Dumbledore]

El estar allí en ese lugar con mi hermano era algo realmente lindo, poder hablar así tranquilos sin presiones ni nada más, pensando en lo lindo que podía ser estar juntos y así hablar, compartir estar al tanto de nuestras vidas. Entendía porque mi madre había dejado el Chateau y nos lo había dejado a nosotros: quería que entre todos lo hicieramos un hogar. 

Casi nunca entendía a mi madre, había sido su hija mayor pero mi relación con ella había sido casi nula, aunque sabía por su actuar que no era una mala persona la peli violeta tenía una forma de proceder y hacer las cosas que no entendía del todo. Yo sólia ser más directa y me guiaba por la razón... Ella seguíaba por el corazón, tal vez por eso siempre había tenido ese afán de protegerla de sí misma. 

 

El pensar en el matrimonio de @ Cillian Haughton me emocionaba, ya los  acosaría, junto a  mi cuñado, para que nos dieran una fecha.

La Malfoy, pocos sabían que esa era la familia de mi padre, siempre había usado el apellido de mi madre y no el suyo por beneficio propio aunque bueno yo ya llevaba una vida política cuando lo había conocido. 

-Sabias que mi verdadero apellido... Bueno el apellido de mi padre también es Malfoy...

Solté distraída en mis propios pensamientos sobre mi padre y mi madre

-Si te casas en la Malfoy también me agradaría, lo único importante es que tu estés feliz... 

Empecé a hacer planes, me acomode con la cabeza en su muslo, ahora mi hermano era mi almohada y comencé a mirar las nubes. 

- El tema podría ser una boda nocturna y llena de antorchas y luces flotantes, ¿dime te gustaría? 

Miraba al cielo imaginándome todo

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Bebi un sorbo de vino escuchando a Darla. Y un cierto rubor cubrio mis mejillas..tal vez por el vino, cuando escuche la simplificacion que usaba la bruja. Y era de esperarse mi fama de mujeriego no es que me ayudara en esto, por lo que entendia el porque lo mencionaba asi. Y para que conste...si el sexo venia incluido en el paquete de mis sentimientos y si, fue de lo primero que pense cuando me senti tan fuertemente atraido por la bruja. Pero el roce diario y el hecho de conocerla por sus acciones, aunque fuesen opuesta a mis intereses me hizo respetarla..y admirarla mas. Y asi lo que puede que en un inicio fuera algo puramente instintivo y primitivo se fue cubriendo de las capas de lo que ahora no reconocia...y hacia latir muy fuerte mi corazon a su lado..y comportarme con un idi***...lo mas probable...es que ahora mismo estuviese muy enamorado de ella.

-No....no es solo sexo...estos sentimientos que sientos por ti. -me rasque la cabeza y mi vista se alzo hacia los ojos de @ Darla Potter Black  para sostener su mirada. -Estoy enamorado de ti Darla. 

Y ahora si no habia duda en mis palabras y todo mis facciones acompañaron la seguridad de dicha afirmacion. Y si...admito que me senti ligero al dejar de contener mis sentimiento y liberarlos frente a ti.

[Syrius McGonagall]

Matt Ironwood.

 

El brillo entre las rocas parecía cobrar vida con cada paso que el castaño daba, al principio apenas lo había notado, un leve destello entre el filón de basalto negro que se extendía hasta ingresar en el agua del mar. Matt por un instante pensó que se trataba de algún trozo de vidrio que la luz de la luna iluminó pero cuando vio que los colores del mismo cambiaban con vertiginosa velocidad descartó inmediatamente de que se tratara de un fragmento de basura dejado por algún descuidado. 

 

La curiosidad le estaba ganando y sabía que la misma no se aplacaría hasta que entendiera que era lo que realmente estaba viendo. Por lo que el mago se incorporó de la blanca y fina arena de la playa y enfiló sus pasos hacia la extraña luz. El viento fresco del mar agitó la camisa blanca y floja que llevaba puesta que junto con la bermuda verde y las chancletas eran su único atuendo.

 

Había salido de trabajar hacía unas horas y no había nada que le gustara más al Ironwood que disfrutar la sensación de la arena entre los pies mientras dejaba que sus pulmones se llenaran con el aire salado del océano, era su lugar en el mundo. Lo llevaba en la sangre. 

 

La luces de Honolulu brillaban más allá en la distancia, pero no le resultaban ni una décima de atractiva como aquel pequeño brillo entre las rocas. Cruzó los metros que lo separaban del afloramiento rocoso en un par de largas zancadas mientras sentía el batir de las olas contra la arena, sus pies se humedecieron mientras se acercaba al sector donde la luz se agitaba y danzaba como si la brisa la alimentara. 

 

El ojiazul se tuvo que poner de cuchillas para poder ver mejor, entre una de las fisuras de la roca un objeto esférico brilla con la luz del arcoiris, de rojos a naranjas, pasando por los verdes y a los azules. ¿Qué era aquello? 

 

El mago deslizó su mano hacia la concavidad donde aquello se alojaba y no sintió ningún cambio en el aire a su alrededor, aquello no era cálido ni frío, solo brillaba. Pero cuando sus dedos tocaron la suave superficie el mundo se puso patas arribas. 

 

Ya no sentía el suelo bajo sus pies, no entendía donde era arriba o abajo, solo giraba en medio de un sofocante viento que lo cegaba por completo. Fue tan solo unos segundos pero suficiente para dejar a Matt completamente desorientado, lo último que logró reconocer antes de desmayarse fueron las luces de un castillo que aumentaban en intensidad a medida que el suelo se acercaba para recibirlo.

 

@ Ada Camille Dumbledore  

 

 

[Darla G Dumbledore]

Lo vio imitarla, bebiendo el vino que ella había servido, recordó en ese momento que él dijo de su resistencia a las bebidas alcohólicas. Notó el sonrojo en sus mejillas, sin entender el porqué de aquello, pero no era la primera vez, los sonrojos de él habían sido durante toda la noche. ¿En qué momento habían pasado del nigromante a estar bebiendo juntos una copa de vino, a la luz de la chimenea hablando de…? ¿de que ella le gustaba?

Las palabras del mago la sorprendieron haciendo que quedase un poco en shock, sus labios se entreabrieron sin saber que decir. Que él le dijera que no era solo sexo que estaba enamorado de ella la había sorprendido un poco. Recordó sus ojos cerrados cuando salió del baño, recordó la forma en que le había visto quedarse viéndola en algunas oportunidades. Pasó por su mente la forma en que su corazón latía, la manera en que la había tomado por la cintura y luego acariciado sus labios. Cerró los labios y se enderezó en el asiento, sosteniendo la mirada de él, podía sentir que estaba siendo sincero.

—¿Estás enamorado? Yo… —se dio cuenta que no sabía qué decirle, pero sí le  quedaba algo claro, él le gustaba, él había provocado una revolución en su interior, el beso que le robara la había traído de regreso del lugar en que estaba a punto de perderse y no había podido sacar ese beso de su mente en los últimos meses. Con delicadeza dejó la copa en la mesa junto a ellos y se inclinó hacia adelante, dudando aún —creo que también siento algo por ti, yo… —se detuvo viéndolo a los ojos, sintiendo esa sensación de cosquilleo por todo su cuerpo y humedeció sus labios, recordando no el sabor del vino sino el de los labios de él cuando la habían besado y se dio cuenta de que deseaba volver a sentirlo, deseaba besarlo una vez más, inclinó más su cuerpo hacia él, dejando que sus alientos se mezclaran por unos segundos antes de preguntar —¿qué crees que podría pasar si tú y yo… —no terminó la frase, sus labios rozaron los de él por unos segundos y toda la esencia de su ser se estremeció con aquella sensación.

@ Sean -Ojo Loco- Linmer

[Ada Camille Dumbledore]

Departía agradablemente con mi hermano @ Cillian Haughton en el jardín, la verdad era un día calmado y eso me agradaba era de valorar ese tiempo de calma que podía tener en casa era algo que valoraba más que el oro. Había charlado de todo un poco y eso me traía relajada y tranquila. La elfina de mi hermana Maeve apareció pálida y asustada, me sente al verla así pensando que la elfina estaba herida o algo pero con prisa me habló.

 

- Un hombre, un hombre en el suelo de la entrada

 

Fruncí el sueño al escuchar sus palabras, quien podría estar en la entrada de la Chateau tirado en el suelo, me levante dejando mi sobrero en la silla y corrí hacia la entrada del edificio y efectivamente un caballero en el suelo sin sentido, me acerque para obsevar su rostro, revise si estaba vivo y lo estaba pero no era un desconocido. El mago frente a mi era el agente que habíamos conocido en Hawaii la último viaje a aquella paradisíaca isla.

 

-Maeve llevemos lo a una de las habitaciones de huéspedes, no parece herido, pero no estoy segura… no es norma que este sin sentido

 

La elfina obedeció y nos llevó a unas habitaciones del tercer piso en el ala de dione cerca a donde estaban mis habitaciones, le dejo sobre la cama, me dispuse a descalzarlo y a cubrirlo con la sabana.

 

-Monsieur Ironwood ¿se encuentra usted bien?, soy Ada ¿ me recuerda?

 

Le hable por si me reconocía o reaccionado al escucharme.

@ Syrius McGonagall

 

[Syrius McGonagall]

Matt Ironwood.

 

Una cálida voz lo sacó de la espesa bruma que giraba dentro de su cabeza, ¿Habían dicho su nombre? No llegó a comprender todo lo que le estaban diciendo… ¿o le estaban preguntando?, sentía la voz de aquella mujer pero no entendía sus palabras, como si le estuvieran hablando en algún idioma que le era ininteligible

 

Pero pese a la confusión y el cansancio abrió los ojos, buscando aquella voz que trataba de entablar una conversación con el mago. Un agradable rostro de delicadas facciones y enmarcado en una espesa cabellera castaña claro se cernía sobre el ojiazul, por un breve momento fue incapaz de reconocerla pero cuando se detuvo en los intensos ojos azules de la bruja supo que la bruja que tenía a su lado era la mismísima Primer Ministro de Francia.  

 

Ya nada tenía sentido para el Ironwood ¿Que hacía junto a la matriarca de la antiquísima familia Dumbledore? Sentía la lengua pesada y torpe y la boca muy seca pero aún así se forzó hablar - Señorita Dumbledore - su voz le sonó extraña, ronca - ¿Que paso? - logró formular la única pregunta que logró materializarse. 

 

¿Qué hacía junto a la Ministra? No veía  a la bruja desde aquella misión que compartieron en Honolulu, tampoco reconocía la habitación donde se encontraban pero era grande, amplia y finamente amueblada. Ya no estaba en Hawaii, ya no estaba en la playa viendo la luna reflejarse en el espejo negro que era el océano…. la luz cambiante… de pronto lo recordó todo. 

 

La luz, ¿era una traslador?, definitivamente no estaba en casa pero… ¿Por qué lo había transportado hasta aquel lugar? ¿Acaso la Ministra francesa lo había convocado? -¿Dónde estamos? - soltó Matt mientras miraba a la mujer, había otro mago en la habitación pero por el momento se mantenía algo alejado -La luz…. - le costaba pronunciar cada palabra - Necesito agua por favor -

 

@ Ada Camille Dumbledore

 

[Mica Gryffindor]

-Es que es demasiado inocente y el ambiente que hay dentro no sé si sea el mejor… -argumentó, aunque sabía que el desconocido tenía razón, debía dejar que su sobrina cometiese sus propios errores si quería que aprenda cómo manejarse en la vida. La última parte de aquella frase le dio un golpe de realidad, era cierto que ella cometía muchos errores y no había nadie a sus espaldas esperando para evitarlo, estaba sola.

Asintió y lo siguió hacia donde se encontraban los perros, pero éstos huyeron ante su intento de acariciarlos. ¿Qué les pasaba? ¿Acaso había algo en aquel extraño que aún no percibía? Estuvo a punto de dar un paso hacia atrás, pero se contuvo, si había una característica incompatible con ella era la cobardía. Él se incorporó y giró hacia ella, al tiempo que una brisa llevaba nuevamente el aroma las flores a su conciencia.

Él negó pertenecer a la familia Dumbledore, incluso argumentando tener cierta enemistad con los mismos por cuestiones que parecían demasiado lejanas como para indagar al respecto. Lo contempló, extrañada -¿Entonces qué haces en sus terrenos esta noche? -soltó sin pensarlo.

Algo alrededor parecía estar alterándose, pero no dio importancia, sentía mucha curiosidad. No obstante, con su mano izquierda, sujetaba su varita. No temía al extraño, pero tampoco sabía demasiado de los dueños de casa.

-Mica Gryffindor, aunque en la actualidad de mi familia estoy algo alejada… así que no se si puedo decir que “soy” miembro de ella realmente -lo último era innecesario, pero le salió decirlo -Me dedico al quidditch, soy cazadora -respondió a su última pregunta, extrañada -¿Y tú? -agregó, tal vez eso le diese un dato más respecto a tanto misterio.

@ Nexo Peverell

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Habiua sido audaz....habia sido valiente. Quien sabe ahora mismo lo que pasaria por la cabeza de la pelirroja. Mira que soltar que estaba enamorado de ella. Si, que era verdad...pero sin duda era mucho para procesar. Mire espectante a la vampira que parecia estar en shock, pero note que lentamente regresaba de ese estado. Y si antes habia sido yo el que habia lanzado la bomba....ahora era @ Darla Potter Black  la que dejaba explotar una en medio de todo mi estres. Trague en seco cuando comenzo a hablar y siguiendo casa letra que salia de su boca note como comenzaban a bailar una conga de alegria las mariposas en mi estomago. Y mas cuando la peliroja se inclinaba hacia mi, gesto con el que fui reciproco solo para dejarme naufragar en esos ojos que veian bien dentro de mi mientras acariciaba la mejilla de la bruja.

Y ahora donde estaba el vino....yo con la garganta seca...relamiendo mis labios instintivamente para hacercarnos cada vez mas hasta alcanzar casi la zona de no retorno...ahi frente a frente...con su aliento bañado en el aroma del vino golpeandome y su labios a solo un empujon de hacerlos mios. Si.....esas labios tan rico que no sacaba de mi mente despues de aquel beso. Y asi sin esperarlo...y en medio de una frase me beso.

Increiba como que a un ladron le puedan robar un beso...pero eso fue lo que sucedio. Y sin mas solo me deje llevar...por la suavidad....de tus labios rozando los mios...el tibio acomodo de nuestras bocas...la urgencia de nuestras lenguas en el baile de esa explosion de sensaciones que era besarte...mientras mis brazos se extendian sobre la bruja...acariciandola..y abrazandola contra mi...disfrutando de su aroma y su deliciosa esencia.

-Fuegos artificiales...-susurre en su oido- seremos fuegos artificiales iluminando la noche.