Jump to content

Mansión de la Familia Potter Black (MM B: 90394)


Sagitas E. Potter Blue
 Compartir

Publicaciones recomendadas

En la biblioteca:

 

- ¿Y qué quieres? -protesté yo, mirando a Xell y no podía evitar sentir cierta tristeza - no era tan hijo de su madre por aquél tiempo, es más para mí, se comportó como un padre... No tengo la culpa - llamé a Galadriel y le dije que me trajera una tila. Lo necesitaba porque, hablar de él la verdad es que me ponía de los nervios y no era bueno, ni para mí ni para el bebé. Suspiré... Tenía algo de mono de un cigarro, debía reconocerlo, últimamente estaba algo insufrible, así que, cogí un lápiz que vi encima del escritorio y empecé a mordisquearlo para matar las ansias...

 

Escuché con atención todo lo que me decía Sagitas. Me sorprendía ese tipo de magia, no sabía que había ese tipo de poder y la verdad, me dejaba asombrada...

 

- Vaya... es interesante todo eso que me dices - asentí con la cabeza. Galadriel me trajo la tila y le di un sorbito. Estaba caliente y llevaba algo de limón, cómo a mí me gustaba y lo agradecía.

 

- pero... - me callé porque al final, no sabía cómo lo habían hecho, habían desaparecido las dos, como si usaran el encantamiento de la aparición. Bufé cabreada. Es cierto que no podría ir, pero tendría que conformarme, aunque era bien cierto, que a pesar de la tila, me sentía algo intranquila. ¿Qué pasaría si la mansión quedábamos pocas personas? Seríamos suficiente con tres varitas para defenderla si hubiese un ataque, por ejemplo, de los poshinos? A pesar de que esa magia extraña había barrido todo lo que yo conocía no podía estar tranquila del todo... Aún había enemigos que batir, a pesar de la misión de rescate, todo podía suceder...

 

- Pues sí, aquí estoy... como la última mona - protesté y le di un beso a mi marido en cuánto lo escuché llegar a la biblioteca, me acordé de algo - ¿qué tal está Hayame? ¿Bien? Si necesitas ayuda de una enfermera, avísame, recuerda que tengo experiencia en esos temas y bueno, te puedo echar una mano, para que se restablezca lo más pronto posible - le dije con una sonrisa.

 

@@Matt Blackner

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Sonreí levemente, e hice una mueca mientras me sentaba al lado de @, qeu parecía estar tomando una infusión...me preocupé, aunqeu seguramente fuera por la tensión de la situación, lo mejor era evitarle malos tragos.

- Los últimos monos. Mi madre ha huido de mi - me quejé.

 

Pero aquel beso me hizo sonreir como un bobo durante un momento, antes de reaccionar de nuevo.

- La verdad es qeu no me vendría nada mal. Va a necesitar reposo para que su brazo sane. Estaba bastante mal, pero se lo he inmovilizado como he podido. Le he dado pociones reabastecedoras y revitalizantes, además de alguna para calmar el dolor...Ahora duerme - me encogí ligeramente de hombros. - Pero tal vez dentro de una o dos horas podrías y echarle un vistazo. - contesté.

 

Era raro pensar que Sagitas y Xell se habían ido asi, sin avisar....se habían ido solas en busca de nuestro enemigo. Eso me era raro, extraño el hecho de que las dos, junto con el fantasma de Jack, se habían ido de aventuras y me había quedado alli. Pero nunca hubiera podido irme dejando sola a mi mujer...demonios....

 

Me quedé mirando un momento a Helike y noté que me sonrojaba un poco.

- Oye...de....de verdad se mueve tanto? - le pregunté, bajando un poco el tono de voz.

M4xQXhr.jpg

XaIHB03.gif.8d9da3f22cdcf76478ba8b5e63d5666a.gif KhGckEc.gif.6e9b2b71e2797bafac6806b66df1d1b0.gifXXBPo79.gif

 

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

La tía me puso algo nerviosa. Ella quería que estuviera bien segura de que podría llevarla al lugar que habíamos visto en aquel viaje espiritual. Hasta que no le aseguré que sí, que podía hacerlo, no dejó su presión psicológica. Después se volvió a la prima Helike y dijo que nos íbamos, me ordenó ponerme cómoda e irnos. No dije ni adiós a la prima y salí corriendo, del miedo que me daba cuando se ponía así de mandona. Corrí hacia mi cuarto y me puse zapatitos planos y cómodos. Dejé de lado el vestido que llevaba puesto y me puse un peto azul (adoro el azul), me puse también una chaqueta azul de lanilla, un par de botellas de agua en los bolsillos del peto y me recogí el pelo con una gomita también azul.

 

Después bajé a la entrada. Sagitas aún no había llegado pero lo haría, estaba segura. Busqué a Harpo y le di un mensaje para el tío Jack:

 

- Dile a Jack que no deje a solas a Sagitas, que corre peligro. Que es una trampa, estoy segura.

 

No estaba segura pero algo fallaba en aquella visión de la mariquita y no estaba segura de lo que era. El elfo se fue con el tiempo justo para que la tía Sagitas no nos pillara. Ella iba muy cómoda en chandall. La seguí porque ni siquiera me saludó, daba por hecho que le seguía. Otros podrían decir que se comportaba de forma despectiva pero yo sabía que era la preocupación lo que la hacía mostrarse así, callada y fría. Guardé silencio porque sabía que necesitaba eso. La seguí y llegamos al borde de los terrenos de la mansión, cerca del Bosque. Entonces, abrió un portal como aquel en el que ellos se fueron al futuro.

 

Asentí con miedo. Le di la mano y pensé con fuerza en aquel pueblo que había visto, aquellas calles, aquella casa... Cerré los ojos y cruzamos el portal juntas. Cuando los abrí, estábamos frente a la casa y una mariquita revoloteaba por dentro, visible desde los cristales..

YyV85FY.jpg

7sfPjxW.gif NiqQIUZ.gifidFgtQA.gif

 

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Aún en la Biblioteca con @@Matt Blackner

 

Sonreí levemente a mi marido.

 

- Tranquilo cariño es toda ésta situación que me pone más nerviosa de lo normal. La doctora en la clínica me dijo que si podía evitarlo, que no me sometiera a demasiado estrés. Le dije a Galadriel que me trajera la tila... pero tú puedes tomar alcohol o lo que quieras. Lo que daría por un sorbito de whisky de fuego... - susurré con cierta melancolía.

 

- está bien... - llevé mi mano a mi mentón y caí en la cuenta - esencia de díctamo. Para que le cure bien la herida y no le deje una fea cicatriz. Se podrían usar otro tipo de... bueno, como hacen los muggles aguja e hilo pero corremos el riesgo de que se infecte y sería mucho peor. No, prefiero lo bueno conocido... - le dije con una sonrisa en la cara.

 

- Por supuesto, claro que iré... aunque la reabastecedora de sangre, aunque no soy sanadora, convendría bien que la tomara cada dos horas. Aunque sea una poción bastante potente seguramente haya perdido mucho líquido, ¿verdad? -comenté preocupada- puedo hacer llamar a un sanador para que la revise si lo prefieres y estás más seguro. Sabes que yo soy una simple enfermera y aunque esté en plantilla lo mío es más práctica que otra cosa - comenté, elevando mis hombros. Seguí tomando un sorbito de tila con sabor a limón. Con el tiempo que estábamos ahí dentro de ese lugar, respirando el aroma de los libros tanto viejos como nuevos, conseguía que me tranquilizara del todo.

 

- y tanto que sí -le dije con una carcajada - hoy está tranquila pero hay días que me da cada patada - le dije, frotando la barriga con la mano izquierda. Agarré la mano de mi marido y la llevé hasta la zona superior de la tripa- ahora, como cuando vas a hacer un encantamiento potente, relaja tu mente y concéntrate... ¿la notas? - le dije con dulzura en mi voz.

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

- Bueno, prefiero tu práctica a otra cosa - dije, riendo. - Tienes razón, necesitará más reabastecedora, por suerte, entre mi madre y tu tenemos un buen surtido de pociones en casa. Además, el díctamo podría ser de gran ayuda para que las heridas sanen sin más dificultades - comenté.

 

Parecía qeu el ambiente de la biblioteca la calmaba un poco, lo cual me alivió, ya que los sanadores de la clínica le habían recomendado calma. Ahí sentados, juntos, podían olvidarse los problemas que rodeaban a la familia...por un momento.

 

Mi pregunta despertó las carcajadas de @, porque según dijo, hoy la niña estaba bastante tranquila. De ahí pasó a cogerme la mano, cosa que hizo que me pusiera tremendamente tenso...no sabía bien por qué, pero noté cierto nervio y quise salir corriendo, pero en lugar de eso, ahí estaba, con la mano sobre la parte superior del vientre de Helike. Me quedé mirándola, pero fue aquella dulzura en su voz lo qeu hizo que aquella sensación desapareciera un poco. Hice lo que ella me dijo, relajarme...

 

Y lo noté.

 

Fue como un golpecito que hizo notar una especie de hormigueo por el cuerpo. Supongo qeu me sonroje al notar el calor en la cara, mientras sonreía como un bobo. Era la primera vez que notaba algo asi. Acaricié la zona y lo noté de nuevo.

Me agaché y apoyé la cabeza con cuidado mientras suspiraba

- Eh... - murmuré, notando otro golpecito - Hola pequeñaja - dije. - Tu madre dice que a veces te mueves demasiado. - reí levemente un momento, pensativo, mientras notaba una mano sobre mi cabeza. Cerré los ojos, recordando a Sagitas y Xell. Se habían ido a ve a saber donde, solas...Casi tenía la ligera sensación de que aquella era la calma antes de que algo pasara.

 

Pero era la primera vez que sentía a nuestra hija.

- Pase lo que pase, cuidaré de vosotras.

 

 

 

 

 

JACK.

 

Si, ver a la tía Emmarjorie de aquella forma era lo único que necesitábamos. Eso, y saber qeu @@Xell Vladimir Potter Black había visto donde se encontraban los huesos de la tía de Sagitas. Matt echó a correr antes de escuchar la explicación de la rubia, o de aclarar nada más con su madre. Hayame había llegado, y no estaba en buenas condiciones. Apelando a su instinto por cuidar de la familia, había salido corriendo para ayudarla, y ahí fue cuando la mandona de mi mujer dijo a Xell qeu se preparase. Se marchaban antes de que Matt volviera protestando, y siendo honestos, yo me marchaba con ellas. No podía dejarlas solas, y un fantasma, cuando de fantasmas se habla, es la mejor ayuda.

 

Harpo me trajo el aviso poco antes de que se marcharan.

 

- Gracias sobrina - susurré a la rubia - pero no iba a dejaros solas. El chico debe qeudarse en casa, pero yo puedo acompañaros. - contesté, con una sonrisa. - No voy a dejar que vuelvan a ponerle la mano encima a Sagitas.

 

Coloqué la mano sobre el hombro de Sagitas, notando que poco a poco tomaba forma. Abrió el portal y asi, lo atravesamos, dejándonos guiar por la visión de Xell hacía una casa.

- Deberíamos asegurarnos antesd e entrar. - dije.

M4xQXhr.jpg

XaIHB03.gif.8d9da3f22cdcf76478ba8b5e63d5666a.gif KhGckEc.gif.6e9b2b71e2797bafac6806b66df1d1b0.gifXXBPo79.gif

 

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Misión: rescate de los huesos de Tía Emmarjorie:

 

No sabía en qué lugar estábamos. Sólo Xell sabría el nombre, si lo sabía... Pero nos había trasladado. Era una gran sacerdotisa, eso no podía dudarlo. Pero yo estaba demasiado enfurruñada para reconocerlo en voz alta. La voz de mi marido en el último instante y su mención a Xell me había puesto furiosa. Yo no quería que él viniera.

 

-- Te podías haber quedado a ayudar a Matt y a Heliké, ¿no crees? -- le dije, malhumorada.

 

Pero no era por eso. Era porque no sabía con lo que me iba a encontrar, o sí... Con mis demonios internos. Con los que me habían atacado meses antes. Tal vez estuvieran, tal vez no... pero quería matar. Asesinar. Acabar con sus vidas... Con Jack no podría hacerlo. Apreté la mandíbula sólo para no soltar mis miedos ni mis ansias y aceleré el paso en cuanto vi a aquella mariquita en el cristal.

 

Era allá.

 

-- Esperar fuera a que os diga si hay peligro.

 

Aceleré y entré deprisa, dejándoles atrás, enfadada con ellos y, por ello, sin fijarme en donde me metía.

 

-- ¡Tía Emmarjorie! -- murmuré, al abrir la puerta. -- ¿Estás aquí?

 

Yo sabía que estaba aquí. Lo sabía. Abrí la puerta y entré, sin más, sabiendo que encontraría sus huesos y que podría llevarlos a casa, enterrarlos en la cripta de mi casa, visitarla... Sonreí, feliz, sin darme cuenta que, al abrir la puerta, una nube de polvo machacado se esparció sobre mí. Xell estaba lejos porque me había adelantado y Jack... Jack es un fantasma. ¿Cómo iba a oler nada? ¿Cómo se iba a dar cuenta que era un hechizo de inhalación que bloqueaba los sentidos y creaba falsas visiones?

 

Sonreí al aire. Allá estaba mi tía, una agradable mujer con olor a rosas. Tenía calor. Dejé la varita sobre una mesa y me quité la sudadera del chandal, la mochila quedó también a su lado, dejándome así sin ninguno de los artefactos defensivos que había tenido la precaución de traer desde casa. Sonreía, feliz de verla.

 

-- Eres tal como me imaginaba, tía -- le dije al fantasma. Abrí los brazos y me acerqué a ella, feliz, muy feliz. Ella también me abrazó y sentí su piel contra la mía. Era una fantasma con mucho cuerpo. No me importaba, Jack también lo era cuando nos abrazábamos. En eso consistía la magia, ¿no? -- ¿Me contarás más cosas de la familia, tía?

 

Ella también me abrazaba, me tomó en sus brazos y me besó en los labios, me sentó en una silla y se alejó un poco.

 

-- Te lo contará Madame Everdeen, mujer... En un segundo estarás con ella... Ha sido tan fácil... Me encantará volver a tenerte en mis brazos, Sagitas.

 

¡Ay, qué dulce es mi tía Emmarjorie! A pesar que me haya atado las manos a la espalda y que su voz sea más varonil de lo que recordaba... Y la silla brillaba azul, como si fuera un...

 

... traslador en funcionamiento.

kNTUx8c.gifsf6Sw.gifHdDMuO2.pngXXBPo79.gifKRLtVZp.gif

D69M3Vr.jpg

  tOWLU4S.gif  KhGckEc.gif.6e9b2b71e2797bafac6806b66df1d1b0.gif     Icr0JPz.gif

0jsC0dL.pngWliKSjc.pngckkcxVm.png

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Biblioteca con @@Matt Blackner

 

- aish, qué ñoñería nos ha entrado - dije entre risas, pero fue una especie de "fachada" para que no me emocionase ante la actitud de mi marido. Y aún así, sus palabras me habían reconfortado. Sonreí con cara de tonta, puse una mano nuevamente encima de la de Matt, mientras sentía sus caricias y hasta me daba la sensación de que la criatura que tenía dentro, se relajaba con cada caricia...

 

Algo se me había ocurrido...

 

- Sí, lo de cuidarnos está muy bien, pero yo también lo haré - le di un beso dulce en los labios- pero eso sí... habrá que ponerse en movimiento. A mí tanta paz... no quiero ser pájaro de mal agüero, pero... me chirría. De momento, creo que estamos solos en la mansión. Y sí iré a ver a Hayame para que se recupere antes. Si prefieres que llame a mi sanadora, avísame. Trata todo tipo de dolencias y es muy buena en lo suyo - le dije con una sonrisa.

 

- pero antes de nada, habría que reforzar la seguridad de la mansión... -me quedé un momento pensativa- y es más, no estoy segura de si tengo lazo del diablo, podríamos ponerlo en los flancos de la casa. Generalmente, suelen atacar por ahí o por detrás. Es que, un día que fui al Mall, a la sección de criaturas, compré unas cuántas -dije nuevamente entre carcajadas- así que, tú que eres el patriarca, conocerás mejor éste sitio que yo... y otra cosa. La pequeña estaría bien en nuestra habitación pero, ¿no habrá que hacerle una? -pregunté, cayendo en la cuenta- y además, ponerle un nombre... a mí no se me ocurre ninguno -medio bufé y gracias al vaso autorrellenable iba bebiendo sorbitos de tila... al menos, estaba caliente y lo agradecía.

 

Saqué la varita y susurré:

 

- accio - con el encantamiento de llamada, tomé un pergamino al vuelo además de una pluma que tenía el tintero (?).

 

- Habrá que mirar los puntos flacos... sé que soy una pesada, pero no me extrañaría nada que nos ataquesen mientras estamos aquí en la mansión y mientras tu madre va a por esos huesos... Debe ser importante para arriesgarse de esa manera -susurré por lo bajo. No sabía porqué pero la biblioteca me daba sensación de que parecía molestarse (?) si hablaba en voz alta...

 

- Pero poco a poco... tengo fluído explosivo también, buenas cantidades de él. Los elfos, pueden lanzarlos desde las ventanas como proyectiles y además, puedo fabricar elementos con cuerno de Erumpent... que me parece que tengo ese animal protegido con encantamientos para que no vole en pedazos. Eso sí, tú eres el señor de ésta casa - le di otro beso - así que, tú decides... yo sólo doy consejos -elevé mis hombros y le di otro sorbo a la taza.

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Donde quiera que me hayan puesto, malvados, solo porque estoy de luto y nadie me avisa de nada JUM

Dónde estaba?

No recordaba como había llegado a donde quiera que la hubiera hecho reposar su familia pero la cabeza le pesaba, el hambre seguía siendo demasiado intensa y solo pensaba en que deseaba ver las auras suficientes para poder alimentarse; por lo general no sentía tanta necesidad de alimento ya fuera sanguíneo o de energía como para perder la consciencia de sitio pero en aquellos instantes era casi como estar en una especie de limbo negro

Le hacía recordar ese ataud de roca en la caverna de la cueva de las lamentaciones o como se hubiese llamado su santuario alguna vez, donde la habían tenido durmiendo hasta que había revivido otra vez

Esa era la vida de los vampiros, ser confundidos por muertos una y otra y otra vez hasta que finalmente la liaban a patadas

Que diversión

Hizo un esfuerzo a pesar de no estar viendo claramente para alzar una mano y frotarse los párpados, tratando de comprender que diablos estaba ocurriendo

-Sagitas?

Murmuró en un tono tan seco que le costó unos segundos entender que tenía una deshidratación muy fuerte y la boca tan seca y pastosa, que todo sonaba como si tuviera encima alguna especie de borrachera

B9rYupA.png



http://i.imgur.com/7WhajUW.gif


Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

@@Hayame Snape Potter Black se supone que Matt te dejó en tu habitación Haya jajajaja

 

On:

 

Biblioteca con @@Matt Blackner

 

Nos habíamos quedado en silencio. Aproveché la ocasión y empecé a rasgar en el pergamino el mapa de la mansión. O bueno, algo parecido a lo que sería el mapa. Era de vital importancia y aunque conocía la mayoría de las habitaciones, que contenía la casa Potter Black, tampoco conocía todos sus secretos, eso era de lo que me tenía que informar mi marido y de saberlo mi suegra, seguro que aclamaría al cielo por desvelar esos secretillos.

 

- Bueno, no soy arquitecto ni tampoco constructor, pero aquí he puesto lo fundamental - le dije, señalando la hoja - alrededor de la casa, podríamos poner lazo del Diablo, si no conocen cuál es su debilidad, les costará mucho entrar - le guiñé el ojo al pelirrojo- pero, conociendo a Lázarus, seguro que usaría alguna treta para deshacerse de él, así que, hay que pensar en todas las posibilidades - le comenté. Di un sorbo más de tila. Ya me sentía mucho más calmada y lo agradecía, eso me ayudaba a pensar con más claridad.

 

- Nuestros elfos podrán ayudarnos en la defensa usando productos químicos. Recuerda que fui y aún soy agente del Gobierno, así que, tengo varios ases en la manga y supongo que no se imaginarán que use cosas muggles como defensa. Podríamos instalar además varias piedras de cuarzo, si asaltan la casa, tendremos un avisador central. Éste brillaría y ahí estaríamos dispuestos...

 

<< se me ocurre además, de poner fluído explosivo como bombas en el suelo. Al pisarlas, ¡zas! - di una palmada y estaba segura de que Matt se asustaría, le di un beso dulce - volarían por los aires como un buen dragón y hablando de él, también nos sería de gran utilidad, además de tener suficientes lágrimas de fénix para ayudarnos en esa tarea - le indiqué- tengo en nuestra habitación en el baúl, un montón de cosas que podemos utilizar. Tendría que echar mano de nuestros pequeños seres para que busquen algo que tengo bien guardado - le guiñé el ojo - gases lacrimógenos, eso los cegaría antes de entrar a la mansión. Podríamos usar hechizos de Artes Oscuras y conozco algunos más potentes que el Avada Kedavra. Sé que no te gustan -aclaré- pero si queremos salir airosos, no nos quedará más remedio que usarlos...

 

- tú que eres cazador mi vida- le di un beso en la mejilla- podrías poner diferentes trampas en todo el perímetro. Nos será de utilidad tus conocimientos... Pero hay que hacerlo deprisa... No sabemos si nos van a atacar justo cuando peor estamos, sin defensas y con muchos puntos débiles. Podrán entrar en cualquier puerta y hay que mirar que no haya puertas evanescentes... las mías están guardadas bajo llave... Las colocaré en el Dragón Verde y también aquí. Nos podrán ser de utilidad si tenemos que huír de la casa, pero espero no tener que usarlas...

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Al parecer en mi cuarto (patada a Heliké nomas porque si xD)

Abrió despacio los ojos y entonces descubrió que tenía encima de la cabeza una gruesa cobija y por eso no estaba viendo nada más que oscuridad pero la sensación de hambre que la estaba acosando no se había disminuído en lo más mínimo por lo que emitió un gruñido y se retiró aquella pesada prenda de tela al menos de la parte superior del torso y la cabeza; se sentía bastante mareada entre el hecho de haber quedado inconsciente y el hambre, pero más que nada, la sensación de heridas que tenía en el cuerpo ya no eran lo mismo de antes.

Se revisó con los párpados aún algo caídos.

Tal parecía que alguien la había limpiado y curado mientras estaba inconsciente y se incorporó un poco más para que la revisión fuese más cómoda para ella

Entornó los ojos, intentando recordar...

Ah si

Muy vagamente venía a su mente la imagen del ataque que había recibido y como se había librado de ello pero no por eso estaba en menos peligro y eso era algo que se repetía una y otra vez en su cabeza

Había logrado a expensas de mucho poder y magia el llegar a casa de su hermana... había mucha sangre que salía de su cuerpo, iba marcando un largo camino carmesí así que en esos momentos su cuerpo estaba sosteniendose por pura magia y lo que le quedaba de energía vital de alimento y por eso la desesperación de recuperarlo...

Necesitaba sangre para poder equilibrar aquello o llegaría al punto de que mataría a alguien al arrebatarle toda su energía

Cerró los ojos y se pasó una mano por el rostro

-Me alegra verla despierta, ama

Czésar, su viejo elfo doméstico se había aparecido al parecer y ahora le veía con sus enormes, preocupados y serios ojos, como si pensara que debía de guardarse la reprimenda para otra ocasión

B9rYupA.png



http://i.imgur.com/7WhajUW.gif


Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Unirse a la conversación

Puedes publicar ahora y registrarte más tarde. Si tienes una cuenta, conecta ahora para publicar con tu cuenta.

Guest
Responder a esta discusión...

×   Pegar como texto enriquecido.   Pegar como texto sin formato

  Sólo se permiten 75 emoji.

×   Tu enlace se ha incrustado automáticamente..   Mostrar como un enlace en su lugar

×   Se ha restaurado el contenido anterior.   Limpiar editor

×   No se pueden pegar imágenes directamente. Carga o inserta imágenes desde la URL.

Cargando...
 Compartir

Sobre nosotros:

Harrylatino.org es una comunidad de fans del mundo mágico creado por JK Rowling, amantes de la fantasía y del rol. Nuestros inicios se remontan al año 2001 y nuestros más de 40.000 usuarios pertenecen a todos los países de habla hispana.

Nos gustan los mundos de fantasía y somos apasionados del rol, por lo que, si alguna vez quisiste vivir y sentirte como un mago, éste es tu lugar.

¡Vive la Magia!

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.