Rory Despard

Rory Despard Saber lo que tiene que hacer no resulta igual que poder hacerlo bien. Rory está bastante nervioso, por tener que recuperar ese mapa que se encuentra en lo alto del rascacielos. Más que un problema con las alturas, es el asunto de la falta de confianza en la escoba que le han entregado lo que lo tiene sumido en la preocupación, pues siempre se ha solventado con su estrella fugaz, escoba que había querido usar en el programa hasta que Whisper pegando el grito al cielo le había hecho notar que necesitaban velocidad para no dejar margen de ventaja alguna al equipo rival. Así que allí estaba, con su Nimbus 3000, pensando en todas las maravillas que le han hablado sobre ella, pero todavía tratando de distinguir en la ruta que lleva hasta el rascacielos el tramo más corto. A su lado, el piloto de avión luce mucho más confiado, y más de una en las tribunas lanza desaforados gritos por él, o agita pancartas apoyándolo, lo que hace más mella en su confianza. Tiene que cerrar los ojos entonces, para hallar dentro de sí la tranquilidad que necesita. Sus manos se deslizan por la superficie dura del palo, tanteando su forma y de qué manera las condiciones climáticas generadas artificialmente para dificultar el reto influirán en su manejo. Para él, el asunto de volar en escoba casi siempre ha sido un acto de intuición, pero esta vez sabe que tendrá que usar uso de esos recursos que usualmente se ven en el quidditch e intentar emular a esos habilidosos jugadores. Cuando vuelve a abrir los ojos, envuelto en la exquisita voz de Gigi que anuncia el inicio de la competencia, recita una última plegaria antes de pegar una patada para elevarse en los aires. Invadido de la adrenalina que le ha generado ese despliegue velocidad se lanza entonces, mientras a su lado, el experto aviador también ha conseguido ya elevar su avión y por el momento lleva una pequeña ventaja, que ha hecho que las tribunas rujan de la emoción. Sin perder la concentración a pesar del ruido, Rory se esfuerza en mantener sus reflejos a tope, lo que le permite distinguir antes que su rival, una serie de obstáculos en el camino, que rápidamente solventa con movimientos zigagueantes y una caída en picada, que si bien luego lo obliga a presionar un poco más para recuperar la altura perdida, ha conseguido ponerlo ligeramente adelante de su rival. Y esta vez es su público (que no imaginaba que tenía) los que aplauden desde las graderías, emocionados en el fondo, del espectáculo que tanto él como el piloto, están dando.

Benjamin Whisper Malfoy había probado ser un reverendo inútil. A duras penas Benjamin puede controlar las ganas de avadear personalmente al tipo por haber dejado escapar así al mocoso con el poderoso mineral, hasta que ve al tipo huir de la estancia y poco después a Ludwig montarse en una alfombra voladora para seguirlo. De ser otras las circunstancias, habría ido también en pos de aquel mago maldito, pero Cillian no es del tipo que resulte una ayuda al tener un enfrentamiento, y de un modo u otro, dejarlo solo tampoco es conveniente, por lo que en cuanto ve que su semblante muestra leve mejoría, lo emplaza para que vayan juntos a la residencia de los Malfoy. — Cabe la posibilidad de que ese sujeto ataque a otra persona cercana a Ludwig. ¿Y él tiene una hija viviendo allí en casa de su familia no? Deberíamos asegurarnos de ponerla a salvo. Pero tienes que acompañarme, porque dudo que esa muchacha vaya a confiar en mí de buenas a primeras. No le resulta difícil abrir un portal y tendiendo la mano a Haughton ayudarlo a cruzarlo. Del otro lado, Benjamin se admira de la cúpula que evita que el raro fenómeno atmosférico en que está sumido Ottery prácticamente no haya afectado a esa residencia y camina los pocos pasos que los separan de la puerta de ingreso. Es esta la primera vez que Whisper está pisando esa residencia en un contexto que no es el de celebraciones en sus fastuosos salones así que no tiene idea clara de con qué va encontrarse, lo que lo lleva a hacer un gesto con la cabeza a Cillian para que sea él quien toque y pregunte por la jovencita. — No importa los medios a los que tengas que recurrir, lo importante es sacarla de este lugar para ponerla bajo protección del departamento auror ¿entendiste? Sus palabras se ven interrumpidas por el sonido de la puerta abriéndose de par en par. Sin embargo, Ben se sorprende porque del otro lado, no es la hija de Malfoy la que los recibe sino otro muchacho, uno que recuerda bastante bien de la reunión que tuvo con él en el ministerio ya varios meses atrás. — Que impensable volver a encontrarnos en estas circunstancias, señor Ryvak- atina a decir inclinándose la cabeza con un gesto cortés, pensando en lo problemático que resulta que alguien más esté en la residencia. @ Cillian Haughton @ Anthony Ryvak Dracony *** Rory Despard Es imposible no ruborizarse ante lo que Kimberly acaba de decirle ¿considerarse un héroe? Claramente, es el servicio al prójimo lo que lo motiva la mayor parte de las veces, pero es apenas cuando la bruja lo plantea en esos términos que entiende que puede estar siendo imprudente al salir de esa forma intempestiva, con o sin protección de por medio. Mucho más porque también está arrastrando a Wild al asunto. — Sí, porsupuesto Black, perdona si involuntariamente he estado complicando tu trabajo. En marcha entonces. El trayecto hasta la residencia Gryffindor le da el tiempo para profundizar un poco más en todo lo que ha estado conversando con ambos magos, y tiempo atrás, con Whisper, respecto a la influencia que podría tener la magia de esos minerales a futuro, dependiendo del portador que las tenga. Si como apuntan las sospechas, Mael Blackfyre es uno de ellos, sabe que el tipo probablemente solo empleará de forma egoísta su poder, aunque tampoco eso sea un delito. ¿Y de qué manera sería con los otros? Despard se convence que lo mejor va ser esperar a revelar la identidad de cada uno de los portadores para volver sobre esas cuestiones y se concentra más en su vuelo con escoba, pues aunque ya no hay las tormentas de momentos atrás, todavía una fina llovizna cae, la que lleva a tener que impermeabilizar sus ropas y la propia escoba. Incluso faltando una considerable distancia, la fuerza de la magia elemental que desprende el castillo Gryffindor es tan fuerte, que causa un reflejo dentro de sí, resonando con su propia magia de la naturaleza. Inquieto, se mueve entonces cerca de Kimberly, para hacérselo saber. — Puedo percibirlos, el rastro de magia elemental está por todas partes- ya prácticamente sobrevolando sobre los terrenos es más fácil nota que hay algunos daños en la infraestructura de la casa, como si hubiese sido escenario de una batalla- Y mira allí, creo que ese es Mael ¿y no es Mica quién está a su lado? En efecto, no era raro encontrar a ambos, pues eran miembros de la misma familia después de todo. Sin embargo, hay muchas cosas todavía sin explicación en la abrupta salida que Mica tuvo de la Orden del Fénix que hacen que Rory no sienta este encuentro feliz, y que al contrario sus alertas se enciendan. Así que a prudente distancia de ambos desciende al suelo y espera a que tanto Kim como Adrian hagan lo mismo, y se persigna pues la magia de su interior no deja de arremolinarse de una forma casi dolorosa. @ Darla Potter Black @ Adrian Wild @ Mael Blackfyre @ Mica Burke

Bel Evans Ollivander Bel se queda pensando un largo rato en las palabras de Valeskya. Del recordatorio inmediato que hace la bruja de que más allá del encanto que puedan derrochar, los humanos no son más que presas para seres como ella, o el resplandeciente Vincent. Y de que de todos modos, para los temas que están hablando, quizá sea lo más conveniente alejarse. Especialmente porque Melrose se les ha unido, y aunque sabe que la jovencita es bastante particular, tampoco puede tomarse a la ligera lo que una excesiva cercanía entre un licántropo y un vampiro puede generar, de manera que la presenta rápidamente como su prima e invita a todos a seguirla cuadras abajo, alejándose cada vez más de las luces de la tienda de electrodomésticos y la multitud allí reunida. — Yo no creo que sea locura Granger. Para quienes tenemos vidas efímeras, la posibilidad de la eternidad siempre es codiciable ¿por qué tantos magos sino gastaron su vida entera buscando la piedra filosofal? Sospecho que más que loca, la gente ya se siente y vive lo suficientemente sola como para considerar que una eternidad así no puede ser tan mala, si del otro lado se analizan cuidadosamente "las ventajas" que se tiene- aun si le ha dado tal trasfondo, Bel sabe bien por el público presente en el programa que probablemente sean en realidad las menos quienes han tenido tales pensamientos para coquetear con la posibilidad de volverse vampiros- quizá si otro como Vincent les mostrara la verdad completa, con las partes feas de lo que supone ser vampiro, se lo pensarían mejor ¿no te parece? Pero verá, aquí Scott que durante muchos años ha sido de la policía muggle, tiene la corazonada que algo muy turbio se esconde tras Vincent, así que decidí ayudarle a investigar más a fondo este asunto, y ver que sorpresas podemos encontrarnos. Está tan segura que a pesar de todo, la bruja se quedará con ellos, que solo cuando llevan caminando casi tres cuadras, es que finalmente Evans da un giro para ver si los demás están allí, antes de voltear por un estrecho callejón, pobremente iluminado y donde todo lo que hay aparte de contenedores de basura, es una puerta de aspecto ruinoso con un ojo que parece moverse en todas direcciones. Con un gesto de la mano, ella llama a los demás, y deja que el ojo los observa a cada uno, hasta que finalmente los goznes ceden y la puerta se abre con un espantoso chirrido. Del otro lado, un vampiro de barba crecida, que parece alguna clase de Papa Noel darks por la ropa que lleva, le saluda con gesto jubiloso. — Desde sus andanzas como directora del cuartel auror no la veía por aquí Evans. Y veo que incluso ha traído compañía ¿a qué se debe este milagro? Mientras les ofrece asiento en una mesa algo alejada de la pista principal donde cientos de cuerpos se mueven al ritmo de música electrónica alternada con los éxitos pop mágicos y muggles más recientes, Bel rápidamente pone en conocimiento del rechoncho tipo la situación. Él asiente de mala gana, y es que justo como Valeskya, también la situación le suena de locos. — Está siendo el tema del local desde que inició su transmisión- comenta hacia todos, mientras reparte la carta para que hagan sus pedidos y no puede evitar hacer un gesto de desagrado al acercarse a Mel- algunos aplauden su osadía, pero otros dicen que es una afrenta innecesaria considerando lo revueltos que andan los ánimos tras todos los sucesos de la Inquisidora. De cualquier modo, no puedo garantizar si tenga relación o no, pero la sala VIP por la que preguntaste Bel, precisamente no pude ofrecérselas porque fue alquilada con un mes de anticipación para este día. La reserva figura a nombre de un tal Erik, y bueno, sabes que por la suma adecuada, no hacemos demasiadas preguntas sobre los usos que la sala tendrá. Entonces, se supone que llegará en una hora. Yo que ustedes estaría atento. El tipo partió de la mesa, no sin antes guiñarle un ojo a Valeskya. Bel como siempre admiraba su capacidad de flirtear incluso en esos momentos y con tan pocas oportunidades, pero fingiendo no haber visto el asunto se concentró en la carta que les había dejado. — Vete hasta la última página Mel, solo ahí están las opciones sin sangre- era gracioso como de un plumazo el gesto de pesadumbre de Melrose se había transformado- Scott recién está conociendo el mundo mágico Valeskya, así que debe ser su primera vez aquí ¿pero tú conocías de este lugar? Es algo escondido por obvias razones, pero desde siempre fue un espacio predilecto de convivencia social de vampiros. @ Valeskya Granger @ Syrius McGonagall @ Melrose Moody

Harriet Travers - Finalista - Interia Harriet ve partir a Hess tras el patriarca Ollivander, alza la mano a modo de despedida cuando el hombre les desea éxito y les da unas últimas recomendaciones, y por un considerable tiempo se queda pensando en que si bien llegó allí motivada por su veleidoso deseo de ver a Gurëndriel, la visita le sigue dando información de esta nueva vida de Crouch que durante tanto tiempo, le había interesado averiguar. Las preguntas se están multiplicando también, como el conocer la clase de contrato establecido entre esa familia y Hessen, y como este a su vez ha dispuesto la colaboración de Guren e incluso de Quintel en los terrenos de esa familia. La voz de Bel asegurándole a los muchachos que estarían para la cena es la que le saca de sus pensamientos. A las finales, y a pesar de las palabras de Evans, han quedado únicamente las dos a cargo del mineral de Harriet, pero Bel no parece sentirse para nada incómoda con ello. — Sígame por favor. No tienen que caminar mucho para llegar hasta la habitación que antes la mujer había mencionado. Hattie reconoce en la puerta, hecha de una madera noble y antigua, una serie de grafías que parecen ser fundamentalmente de protección, pero que inequívocamente llevan consigo una energía negativa, lo que la lleva a concluir que la magia empleada para proteger esa habitación ha sido hecha con artes oscuras. Movida por ese descubrimiento, no sé detiene a examinarla mucho más, y en su lugar se admira de la cantidad de cachivaches que el espacio alberga. — No toque ninguno señorita Travers, a menos que quiera llevar alguna molesta maldición por tiempo indefinido. Hattie se sobresaltó, pues justo había estado a punto de tocar una bonita casa de muñecas que le recordaba a los caros juguetes con que solía jugar de pequeña, que parecía llamarla hacia su interior. ¿Sería entonces que todo esos objetos que veía a su alrededor eran objetos hechizados? Y de ser así ¿Cuál era el sentido de conservarlos como si de una colección macabra se tratase? La respuesta rápida de Evans, como si le leyese el pensamiento, vuelve a sobresaltarla. — Las maldiciones no son todas iguales y se sorprendería de lo fértil que puede ser el estudio de ellas, señorita Travers. - a medida que escucha la respuesta, Hattie se aproxima a la mesa donde Bel está colocando algunos instrumentos de observación y medición, viales de pociones y un pesado libro que la bruja reconoce como el Grimorio de Gryffrindor- Desde las más simples a otras elaboradas y con magia de sangre de por medio, uno encuentra en las maldiciones una ventana maravillosa para explorar la naturaleza humana. Y si bien su mineral no es precisamente un objeto maldito, podemos asumirlo como uno en la medida que desconocemos por el momento la magnitud del alcance de sus poderes y si puede o no generar daños. Todo este tiempo ha estado "libre" pero veremos que sucede ahora que hemos restringido esa libertad. Colóquese esto por favor. Acomodándose los anteojos alfa, la joven heredera observó el sketchbook (que era la última forma que había adoptado su mineral) en el suelo, sin perderlo de vista un solo segundo hasta que vio como el aura verdosa que había llevado todo el tiempo, comenzaba a ampliarse, dando la sensación de que podría explotar en cualquier momento. — Specialis Revelio- murmuró de inmediato la rubia, recordando aquel hechizo simple pero eficaz de sus clases de Conocimiento de maldiciones, para verificar si efectivamente el mineral ocultaba alguna maldición dentro de sí. Por un momento parecía que nada sucedería, pero entonces aquella energía que emanaba hacia el exterior se volcó hacia el interior del mismo objeto, llevándolo a elevarse por los aires, sin dejar de revolverse informe en lo que parecía una reconstrucción de cada una de sus partículas, hasta que finalmente nuevamente cayó al suelo, con su primigenia forma de esfera. Superado el momento de tensión, Hattie soltó un suspiro. No sé atrevía a tomar el objeto pero podía percibir a través de los anteojos, que la energía que portaba no dejaba de disminuir. — El Grimorio de Gryffrindor ilustra a través del mito de Ploteo, que ciertos objetos con cualidad de cambiaformas, pero una cierta vida propia, no podían transformarse en nada si conseguías atraparlo. Tal parece que, aún siendo extraterrestre, este mineral cumple ese principio, pues ha vuelto a su primera forma ¿Agregarías algo más? Bel estaba anotando cuidadosamente en su libreta sus primeros hallazgos, y Travers, tras medio minuto de silencio terminó asintiendo a la consulta, pues si tenía algo más para decir. — La magia de la transformación y la habilidad de la metamorfomagia han sido la especialidad de mi familia desde hace varias generaciones- su voz es calmada mientras se acerca ella misma a leer el contenido del famoso Grimorio que Bel acaba de mencionar- y aquí en estas mismas páginas Godric advierte que si alguien tiene predisposición a esta magia, es probable que resulte potenciando sus efectos dónde la aplique. Quizá y por eso este objeto no ha dejado de transformarse: Porque la conexión mágica conmigo que soy su portadora no ha dejado de alimentarlo. Eso explicaba a ojos de Harriet por qué el objeto podía haber tenido tan alto número de transformaciones ¿Pero qué pasaba con las formas adoptadas? Aún quedaba mucho para resolver. *** Cleo había estado mortalmente silenciosa en el trayecto con ambos jóvenes. En general, no era particularmente dada a relacionarse con personas del sexo opuesto, mas la situación lo hacía peor por la atracción que Gurëndriel le despertaba y que pese a sus esfuerzos, no había conseguido disipar tras ese tiempo. Ese hecho, por supuesto, ni siquiera había sido notado por Hattie (y ella lo prefería así) pero resultaba un tremendo inconveniente en esos momentos que la desconcentraba de la misión que tenían allí. — ¿Sabes de Adivinación Gurëndriel?- como los otros dos Cleo había también alzado su varita, creyendo que sufrirían un ataque, pero ahora, le movía la curiosidad se saber si ese objeto terminaría siendo de alguna ayuda a su investigación- porque sino lo mejor sería dejarla aquí. Quiero decir, aún si los señores Ollivander lo permitieron, hay límites entre lo que podemos tomar y lo que no ¿Verdad? Y sin el conocimiento tampoco nos sería útil... No podía decirlo en voz alta, pero ese cuarto por alguna razón le escarapelaba la piel, así que no veía la hora de salir de ahí, incluso si la perspectiva de volver a encontrarse con la maleante en los terrenos era aterradora, ella lo prefería a la húmeda oscuridad de ese lugar que se sentía casi como si tuviera una clase de (nefasta) vida propia.

Harriet Travers - Finalista Interia Hattie permaneció inmóvil, sin terminar de creer la escena que observaba, desde las palabras del cabeza de familia, Grelliam Ollivander al descubrimiento que ese animal de hábitos tan extravagantes no era otra que su ex esposa, Bel Evans McGonagall. No le ha pasado antes que los gestos de una persona parecieran ir en dirección contraria a sus palabras, así que aunque tiene muchas preguntas rondando en su cabeza, prefiere continuar en silencio viendo el derrotero que esa conversación va tomar. Gurëndriel es quien se adelanta a comentar del estado de la situación, y otra vez no pasa inadvertido para la rubia, la confianza con la que el muchacho se maneja en esa casa, sin por ello perder el carácter respetuoso que lo caracteriza. La opción de llevar los objetos al ministerio sale a colación, más afortunadamente, tampoco el patriarca de la familia se muestra interesado en transar por ahora con ellos. Si está entendiendo bien el panorama, no hay impedimentos a que puedan investigar ahí las cualidades de los minerales, con la condición explicitada por Hess de que cualquier daño mayor tenga que ser resarcido. — Asumiré cualquier daño, denlo por descontado señor Ollivander y señora...- Hattie no entiende bien la naturaleza de esos dos o si tiene que dar respetos también ante un animal, aún cuando ahora parece descortés no hacerlo, sabiendo la identidad humana tras la bestia- y señora Evans-termina diciendo, haciendo una reverencia elegante tomando el vuelo de su vestido con los dedos para inclinarse, para luego hacer su propia pequeña petición- agradezco mucho su hospitalidad, aunque si no es mucha molestia, preferiría quedarme dentro de la edificación para las investigaciones o lo que sea que vaya hacerse, porque con esa maleante que tienen afuera... Interrumpiendo su tarareo, Grelliam parecía haber dejado la última palabra en ese asunto a Evans. Sumidos en ese incómodo silencio, Harriet sintió los dedos de Cleo entrelazarse a los suyos, y bastó ese toque para comprobar lo nerviosa que se encontraba su ama de llaves, por lo que estrechando el agarre, la jovencita quiso darle un poco más de ánimo diciéndole suavemente al oído que no tuviera temor ante lo que veía. La transformación ocurrió entonces delante de sus ojos, las orejas fueron reduciéndose, la masa corporal aumentando y finalmente, la señora Evans estaba delante de ella, con el cabello castaño entrecano revuelto y unas ojeras malva pronunciadas acentuando su desaliñado aspecto. — Seríamos idi0tas si desperdiciamos la oportunidad de explorar las posibilidades de magia tan extraordinaria- las primeras palabras de Bel eran tan enérgicas como la chispa que se había encendido en sus ojos al contemplar la pequeña planta que era el mineral de Guren- ¿Dicen que provienen del mismo planeta? Lo encuentro curioso, porque emiten frecuencias de energía muy diferentes. Carecer de magia propia había vuelto a Evans extremadamente sensible a las fuentes de magia elementales. La misma Heredad, poseedora de una magia propia y ancestral ayudaba a la mujer a seguir por los vericuetos truculentos en que se había sumido a la búsqueda de explicaciones de algunas obsesiones particulares, pero prácticamente solo el fantasma de Geirant sabía de todo esto, convertido en el impensado cómplice de los escarceos que Bel hacía y que daban tanto dolor de cabeza a Hessenordwood. No era sorprendente entonces, que ahora sopesara lo distinto que había sido el encuentro con el mineral de Hattie, de una energía turbia y difusa, comparado con lo que le producía la esfera en poder de Gurëndriel, que emanaba un poder más concentrada en fondo y forma. — Creo que explorar por separado el funcionamiento de cada uno de estos objetos sería más conveniente, ya que reaccionan a estímulos muy diferentes- la esfera de Hattie había tomado la forma de un SketchBook de hojas multicolores que la jovencita conservaba en su regazo y que arremolinaba las hojas si alguien más se acercaba- Conozco dentro de la casa una habitación donde podríamos evitar que el objeto se desplazara, cuánto menos, fuera del cuarto donde estemos. Pero no es amplia, así que serían a lo sumo tres personas las que podríamos estar allí ¿Alguno de ustedes se anima a venir con nosotras? La pregunta flotó en el aire unos instantes antes que Cleo se pusiera de pie abruptamente, manifestando que acompañaría a su señora (lo usual). Bel contempló a Harriet, pues de alguna manera era ella la que tenía la última palabra en el asunto y entonces, más de uno se sorprendió al ver que la rubia negaba con la cabeza. — Hiciste bastante, quizá demasiado hasta ahora Cleo. Pero este asunto necesito resolverlo principalmente por mi cuenta, ya que fue también mía la decisión de incursionar en ese planeta. Así que si lo prefieres ve con Gurëndriel, o permítete un descanso. No imagino el nivel de tu agobio durante esas 84 transformaciones previas que mencionaste. Cleo volvió a quedar silenciosa, pensando para sí en si realmente merecía tal gentileza de su señora luego de haberle ocultado tan importante. Era en esos pequeños gestos, que poco iban con su carácter más bien indiferente el resto del tiempo, por los que la joven se convencía del buen carácter de Harriet ¿No habrían otros montado en cólera ante su desobediencia? Sin chances para oponerse, la jovencita se aproximó entonces a Guren, y esperó expectante a si habría una tercera persona que completara el grupo.

Harriet Travers- Finalista- Interia ¿Lo habían hablado? No, para Hattie el asunto estaba lejos de estar cerrado, pero no sé molestó en interrumpir a Hess, quien al menos como esperaba estaba ofreciendo las disculpas debidas. Sus ojos en cambio estaban puestos en Guren, pensando en si realmente él también había estado de acuerdo con todo eso. Y es que la forma como ve que es tratado por los Ollivander dista ostensiblemente de la función y el trato que tenía en Hampshire. De las palabras del propio Hessen, parecía desprenderse una cercanía e involucramiento mayor de Guren a la familia Ollivander y Harriet cae en cuenta de repente que nunca preguntó al jovencito desde cuándo o a razón de qué es que él se vio envuelto con esa familia. Tal vez ha tenido que venir hasta ahí para notar que efectivamente no es un asunto de dinero. Mas también, cuando Gurëndriel habla por fin, aún siendo una sola palabra, ella cree encontrar en la voluntad del muchacho para ayudarlas, el resquicio que le hace pensar que todavía tiene alguna carta para jugar en esa negociación dónde Grelliam Ollivander está llevándole ventaja. Por dentro, aquella casa no podía ser más diferente a lo que ella está acostumbrada que sean las residencias de las antiguas familias de Ottery. En más de una ocasión había escuchando incluso por boca de su abuelo de las grandes recepciones y convites que allí solían hacerse, pero no hay asomo de un salón de semejantes dimensiones a su paso, y el pasadizo por el que avanzan se le hace estrecho y agobiante, con todos esos crujidos tras las puertas cerradas, que invitan a imaginar las peores cosas del otro lado. Como si no fuera suficiente, estando a poco de llegar a la cocina comedor, ver lo que parecía un zorro de lomo rojizo empujar con una pata una puerta para entrar a una habitación próxima, la termina de desencajar, de modo que recibe con gesto ausente la taza que le ha tendido Hessen, poco preocupada por primera vez, de que tenga tomar té en una vajilla tan simple, pero agradecida eso sí, que la maleante permanezca en los terrenos de la propiedad y no en el interior de la mansión. — Es un té bastante bueno, se nota que la menta fue cortada en luna nueva, pues no opaca las notas de lavanda- un poco más reconstituida por el filtro de la paz que le ha agregado a la bebida, Hattie dejó la taza sobre la mesa - entonces Cleo ¿Desde cuándo sabías que el mineral tenía ese raro comportamiento y por qué no me dijiste nada? La ama de llaves había estado silenciosa la mayor parte del tiempo, alternando gemidos apagados a intentos disimulados de limpiarse las lágrimas. Para ella no había peor afrenta de su señora que el hecho que hubiera tenido que recurrir a un filtro para serenarse, muy consciente de que lo último que necesitaba era protagonizar un exabrupto en la Heredad. Y si no fuera porque la propia Hattie no le quitaba los ojos de encima, bien podía haber intentado estrangular ahí mismo a Guren por comentar tan alegremente lo que ella había intentado aclararle que era un "secreto" entre ambos. En fin, ya no tenía más sentido intentar ocultar el asunto, así que la muchacha ha ido compartiendo en el camino a la rubia heredera Travers, todas las formas que su mineral había adoptado hasta entonces que sumaban un total de 84 transformaciones. — Uhm, 85 con ésta - musitó cuando el travieso elemento reapareció sobre la mesa, junto a las otras extravagantes tazas de la familia, aunque el brillo de un verde claro que le rodeaba la distinguía de los demás- ¿Se da cuenta como no tiene ninguna lógica? transformarse por puro gusto, eso es lo que parece hacer. Hattie se quedó pensando en las palabras de Cleo, y también en lo que Guren le iba diciendo. No entendía de qué modo realmente podían controlar una magia que no era de ese mundo, pero coincidía con todos en que era un problema mayor si continuaba con ese despropósito de adoptar cualquier forma. Volvió a ver la taza entonces, que Guren había tomado para examinar queriendo ver si más allá del par de alas que tenía como agarraderas a ambos lados, había algo verdaderamente particular en el objeto, cuando de pronto, un recuerdo atravesó fugazmente por su cabeza. Aturdida, parpadeó un par de veces, y vio como el mineral volvía a desaparecer de las manos del muchacho, en el preciso instante en que alguien más hacia su ingreso desde el corredor. — Un árbol. Vaya, es un elemento muy estable Guren, que crece poco a poco, puede ser quebradizo al inicio y necesita muchos cuidados, pero luego es tan fuerte y robusto que puede darte sombra, reposo y refugio. Cleo sonrió por primera vez, desde que habían llegado a ese lugar. Fuera por los efectos de la poción o porque de alguna manera, la presencia del muchacho allí ejercía una inesperada influencia en Hattie, lo cierto es que ella lucía mucho más calmada de lo que había estado los últimos días en su hogar. Ella pensaba que únicamente podía ser esa calma la que hacía posible que estuviera allí contando sobre su amor por los árboles en voz alta, aun si en ese grupo, excepto por el chiquillo Guillam, todos eran ya personas en las que confiaba. Para Harriet, la tierra era el más importante bien que se tenía, y el deber de su legado mágico era hacerla más próspera de lo que lo habían conseguido hacerla sus antecesores. Por eso vivía tan cómoda en su residencia, apartada de la ciudad donde a sus ojos "nada más que el chisme y la malediciencia" crecían, y en dónde todos los magos y brujas parecían haber olvidado el importante mandato de no solo ser de la élite sino manifestarlo cuidadosamente en cada aspecto de su vida, desde las ropas y las buenas costumbres, hasta como no, una propiedad que no solo fuera encanto vacío sino magia viva generando vida. — La tierra de ese mundo tenía propiedades especiales ¿Recuerdas el tamaño descomunal de algunas plantas y frutos? incluso los animales eran robustos y esos sonidos en los túneles...no me extrañaría que la magia de la tierra fuera tan fuerte que diera poderes extra a las criaturas que vivían bajo ella ¿Poderes de transformación quizá?- Cleo a diferencia de su señora había echado en su bebida poción agudizadora de ingenio, intentando con ello alejar el malestar que la había sumido en el llanto por haber ocultado ese asunto a ella- ¿entonces a lo mejor la diferencia entre los minerales pueda ser porque uno proviene de la magia bajo la tierra y el otro de la magia sobre ella? No parecía que eso resolviera por completo el enigma, pero al menos era una explicación pausible a la diferencia, a falta de otra mejor. Travers no había perdido palabra de lo que Cleo había ido diciendo, pero una parte de su mente se había quedado en la visión de la taza, movida por esa visión fugaz que ya no sabía si era un recuerdo o simplemente una ensoñación ¿Pero por qué? No podía explicarlo, pero tenía la corazonada de que el asunto podía ser determinante para entender del todo la naturaleza de su mineral. — ¿Algo que quiera hacer con él? La verdad es que pensaba que la esfera era bella por si misma, pero para evitar problemas futuros pueda ser lo mejor examinarla - el ofrecimiento de Whisper respecto a que entregara el objeto a Misterios era más tentador a la luz de los acontecimientos, pero Hattie lanzó un suspiro y volvió la vista a Guillam- ¿Será que tienen aquí los recursos para tal cosa? Yo puedo ayudar con ello si hiciera falta, quiero decir, ya que es un objeto mío, no importa el dinero que deba gastarse. Tomando una servilleta, se limpió grácilmente los labios pero su tranquilidad se perturbó al ver al "zorro" de nuevo caminando al lado del más extraño e inquietante habitante que en ese corto periodo de tiempo, la residencia de los Ollivander le había llegado a mostrar.

Benjamin Whisper con @ Ludwig Malfoy Haughton & @ Cillian Haughton Los berridos del niño ensordecían a Ben y lo distrajeron lo suficiente para no notar la materialización de la daga del sacrificio en la mano del pequeño que de inmediato se infringió una herida en el muslo, provocando en el acto que una herida apareciera también en el suyo. Irritado por el punzante dolor, pero tan concentrado en la visión de su propia sangre derramada, Whisper no notó el objeto que había caído cerca a Deschain, sino hasta quela daga kansho invocada por Ludwig rasgó la tablilla, que envuelta en una luz escarlata terminó quebrándose en dos. Todo indicaba que el hombre al fin estaba recuperado y tras un abrazo efusivo a Cillian, explicó que aquel objeto maldito había sido el culpable todo ese tiempo del raro mal del rubio. Ben no estaba seguro que fuera el mejor momento para esas muestras efusivas de cariño que ambos se prodigaban, pero no dijo nada, y apenas ladeó la cabeza al escuchar la disculpa de Malfoy, pensando en que no era tanto una molestia el suceso, como el hecho de que pudiera librarse rápidamente de él para seguir tras la pista del resto de minerales. Lamentablemente, tras curarse con un episkey la herida provocada, al ver que el mocoso se alistaba para atacar de nuevo, supo de inmediato que la situación se complicaría un poco más. Pero contra sus sospechas, el tipo decidió atacar no a Ludwig , ni a él, sino a Cillian, asegurándose de que un sectusempra le impactase, aprovechando los poderes potenciados que daba la vara de cristal. ¡Como un demonio! ¿Cuánto es que finalmente le iba tomar salir de ahí? — Maldita sea Malfoy, ¿será que te encargas de ese infeliz?- inclinándose hacia el cuerpo de Cillian, Benjamin tomó el pulso del mago para comprobar el nivel del daño alcanzado y entonces volvió a ver a Ludwig con cierta mezcla de rabia e impaciencia- ¡hazlo de una vez, que yo me encargaré de curarlo! No entendía realmente al italiano ¿De que valía realmente sus disculpas cuando por alguna clase de escrúpulo no exterminaba a ese sujeto capaz de ocupar el cuerpo de un niño? ¿Qué clase de vínculo era el que realmente compartía con aquel ente? La necesidad de tener respuestas ante cada una de esas nuevas conjeturas se hacía urgente, pero debía posponer todo ello ante la prioridad de tener que volver a salvar a Cillian, cuya sangre había alcanzado a la suya formando un charco en el suelo, y como si se tratase de un imán, había terminado haciendo que la esfera rodase hasta ella absorbiéndola del todo. Dentro de lo infame, incluso tratándose de una escoria, Ben tenía que reconocer que el mago no había mentido respecto al requerimiento que ese peligroso objeto hacía. Pagos de sangre ni más ni menos le hacían pensar al asesor que definitivamente estaba frente a algo que generaría un grandísimo poder por lo que tenían que asegurarse que no quedase en manos de ese desquiciado. Estando tan cerca de ella, Ben tomó el objeto, sintiendo como un calor agradable invadía la palma de su mano, y lo guardó en el bolsillo de su gabardina, para enfocarse en curar a Cillian. Haughton seguía allí, mortalmente pálido, atravesado por esa multitud de cortes por los que su sangre lentamente seguía escurriendo, haciendo a ojos de Ben un bello contraste con su piel clara. Era este aspecto lacerado probablemente la más excitante imagen que iba tener nunca del mago, así que con una sonrisa, Whisper se aseguró de grabarla profundamente para sí, antes de inclinarse sobre él para a través de los poderes del curación y un nuevo episkey, detener la hemorragia y cerrar cada una de las heridas, y luego sosteniéndolo con cuidado, llevarlo hasta su cama, en donde a los pocos segundos vio que finalmente reaccionaba. — Te dije que tenías que andar con cuidado. Ahora te tocará tomar dos viales de poción reabastecedora de sangre por tu estupidez de no estar alerta a los ataques. *** Rory Despard con Kimberly ( @ Darla Potter Black ) & @ Adrian Wild Escuchar desde siempre se le dio mejor que hablar, así que Rory escucha paciente y concienzudamente primero a Kimberly, y luego a Adrian, cada uno con ideas que casi se contraponen, pues mientras la primera es partidaria de que vayan a Stonehenge y rastreen a la misteriosa mujer que dio inicio a todo eso, Wild muy en la línea de Whisper, desea investigar primero a los portadores de los minerales. Cada uno tiene un punto, así que el propio Rory se siente dividido en lo que debería hacerse. Lo más sencillo podía ser que cada uno iniciase por su cuenta, ya con su autorización y recursos del gobierno puestos al servicio de la investigación, mas justo en ese momento, el mensaje que llega a Adrian termina definiendo la decisión de Despard. Si como todo este tiempo ha temido, los ataques hacia posibles portadores ha comenzado, sencillamente tienen que intervenir ahí. — La magia como tal no es mala, es la intencionalidad nuestra la que pervierte un don. Y me encantaría ir directamente a desentrañar este misterio, pero creo que no hay misión más importante que salvaguardar la integridad de las personas. En todo caso, Kimberly - sus brillantes ojos azules observaron con fijeza a la bruja, dispuesto a dejarle en claro que la decisión última quedaba en sus manos- si deseas emprender la investigación en Stonehenge te creo más que capacitada para hacer frente a ello. Pero preferiría que nos acompañaras a la residencia Gryffindor a comprobar no solo la situación de los residentes de la casa, sino también toda pista aledaña que podamos encontrar. Con tu experiencia resolviendo casos, creo que harías toda la diferencia. No era que despreciase a los informantes de Adrian o las capacidades de su equipo, pero Kimberly convivía en el día a día con misterios como ese, y Rory sabía que esa era una diferencia fundamental entre ella y personas como él y el director. — En cualquier caso, creo que cuanto más tiempo perdamos aquí las cosas podrían ir a peor. Pero sea cual sea tu decisión, voy a respetarla. Poniéndose de pie, Rory tomó su abrigo del perchero y acomodó su varita en el cinto, junto a un puñado de viales de pociones. Su secretaria, algo confusa, entraba en esos momentos a recoger la bandeja del té y Rory no tardó en ponerla al tanto de que todos sus compromisos para la tarde quedaban cancelados.

Benjamin Whisper (Guía docente Runas Antiguas & CCM) Aunque más de una cámara lo había enfocado ya, Benjamin se mantenía lo más al margen posible de las luces centradas en los participantes y en los presentadores. Como parte de un acuerdo previo, cada equipo tenía personas que apoyarían a los participantes, papel que recaía en Ludwig para los conocimientos de Adivinación y Maestría con Escobas, en tanto él debía hacer lo propio con los de Runas Antiguas y Cuidado de Criaturas Mágicas. La explicación de las reglas había sido bastante sencilla, pero parecía que varios de los presentes eran presos de pánico escénico. Rory había hecho una presentación muy típica de él, citando versículos de la biblia pero olvidando siquiera decir su nombre (aunque ciertamente siendo Ministro de Magia, pocos eran los que podían no conocerlo), y Pepé dela Creme parecía realmente el único hecho para brillar bajo los flashes de ese pandemónium. Tras la presentación de la drag queen, las luces pasaron hacia el lado muggle, para enfocar a una muchacha ataviada con botas de combate, sombrero de ala ancha y pantalones holgados, francamente anodina comparada con lo despampanante que resultaba Pepé. — Mi nombre es Eloise Carter, arqueóloga especialista en códices y jeroglíficos de grandes civilizaciones- acomodándose los lentes de montura gruesa, la joven de cabellos rizados alborotados sonrió a la cámara- y hoy demostraré la superioridad de una disciplina que ha construido su conocimiento a lo largo de los años con esfuerzo y en base a evidencia, y no solo suposiciones o corazonadas. Pifias y aplausos se dejaron oír por igual tras la presentación de la joven. Whisper la vio retirarse hacia una esquina, a la cabeza de una mesa donde había lo que parecían mapas y papeles con toda clase de grafías. Era evidente que la muchacha se había preparado para ese momento, y no dudaba en que el resto de los muggles también habían tenido mucha mayor anticipación en ello. Partir con esa ligera desventaja era de alguna manera un reto interesante pero necesitaba de una vez ir construyendo las bases para su equipo. Se acercó a Pepé entonces, mientras veía que era el turno de los participantes de Adivinación (Tazz, Ada) de presentarse, y discretamente se inclinó cerca de su oído: — Tanto tú como Ada Dumbledore enfrentarán a esa joven Carter- señalando con su largo dedo índice la mesa donde la joven comenzaba a hacer anotaciones, Whisper volvió la vista a Pepé y luego saludó a Ada que se les unía mientras Gigi hacía un chiste tonto sobre escobas y aviones- como ven, ella está tomándose muy en serio todo esto, así que no espero menos de ustedes, más considerando que serán dos contra una. De mi parte, prestaré todo el apoyo que me sea posible, ya coordiné con producción y en breve, harán llegar algunos libros que pueden ayudarlos a cumplir con el reto que no tardarán en anunciar en cuanto concluyan las presentaciones. Pero escuchen, lo importante es que no busquen competir entre ustedes sino sean un solo puño para enfrentar a la muggle. El atronador sonido de aplausos, gritos y demás, desconcentró a Whisper lo suficiente como para que alzara la vista, intrigado de quién provocaba semejante revuelo. Sus ojos azules se quedaron fijos entonces en el domador de animales salvajes, un tipo de larga barba y cuerpo robusto, que no había dudado en usar los minutos de su presentación para jactarse del número de bestias que hasta entonces había conseguido someter y promocionaba su propio programa de TV, que de cierta manera explicaba, el por qué es que había sido tan ovacionado. Noe Malfoy de otra parte, no mostraba ni un ápice de la desenvoltura de su padre en el escenario, lo que preocupaba seriamente a Ben, así que aprovechando la promoción que en ese momento hacían a uno de los auspiciadores del programa, el mago avanzó hasta donde la mujer se encontraba. — Bien señorita Malfoy, cerrará con broche de oro las presentaciones. Lo mínimo que espero es que sepa poner en su lugar a ese jactancioso con el ego característico de su familia. Será solo usted contra él, así que es mucho prestigio en juego ¿no lo cree? Antes de salir a escena, ya había sido evidente para Ben que probablemente la jovencita era la menos contenta con ese espacio, excepto quizá por el otro muchacho (aparte de Rory) concursando con el conocimiento de adivinación. Pero esperaba que apelar a su familia le hubiese tocado lo suficiente para mostrar al menos el 20% de carisma de su padre. O cuanto menos la sagacidad necesaria para el reto que enfrentaría. @ Ada Camille Dumbledore @ noe_snape @ Ludwig Malfoy Haughton

Bueno bueno, vengo a apartar la víbora morti donde me sentaré, que digo, la que cogeré para chuparle todo el mal interior (?) XDDD @ Cillian Haughton mi Emma bonis, mi más sentido pésame por este cargo ingrato como bien dice la Val v,v, te abrazo fuerte y nadas, de mi parte ya sabes que a la orden pal desorden siempre +o+

Bel Evans Ollivander — Ya que Melrose ha terminado todos los tentempiés, y la botella de whisky está vacía, deberíamos lanzarnos a la aventura. Un agradable calor permanecía en mi garganta, por causa de la bebida ingerida, y un cierto impulso que no quería desaprovechar antes que las energías me traicionasen. Como si todavía sopesara cada una de las cosas que le habíamos dicho, Scott no daba una respuesta concreta, y Melrose revisaba entre las bandejas si en alguna todavía quedaba alguna masita, soleta o bollo. Hannity también había permanecido silenciosa, pero en su caso, estaba ya más que acostumbrada a que su carácter fuese pareciéndose más al de su padre, conforme el tiempo pasaba. De repente, un ruido de pasos se oyó con toda claridad desde el recibidor. Poniéndome de pie de la butaca, asomé la cabeza para ver quien era la que acababa de ingresar, y entonces distinguí a una joven de esbelta figura y cabello blanco, envuelta en un aroma particular, y acompañada de un elfo que cargaba varias maletas, las cuales quizá por el peso o por el simple cansancio, la criatura terminó soltando provocando un eco sordo en la estancia. El llamado de atención no se hizo esperar, y fue justo en ese preciso instante que la oí hablar, que la cadencia de su voz me remontó a tiempos tan lejanos, que sintiendo temblar las rodillas, apenas encontré la manera de mantenerme en pie. Y cuando rompió a reír, como si se tratase de otra de mis ensoñaciones experimentales, reconocí su rostro que casi no había cambiado (excepto por la excesiva palidez de su piel) y las noches de fiesta en los Baños Averiados de la extinta Academia de Magia y Hechicería de Ottery. Recordé de pronto, las competencias de casas, y los primeros pasos temerosos de la generación joven que habíamos sido, todos promesas de renovación para el bando de la Orden del Fénix. Los chillidos de P-ko al ver aquel charco de sangreproveniente de las bolsas rotas y aplastadas por las maletas me arrancaron de los pensamientos nostálgicos. Con un chasquido de dedos y refunfuñando, mi efina limpió el pequeño inconveniente, e indicó a su congénere que le siguiera escaleras arriba, y acto seguido, haciendo una reverencia se despidió de Marie, asegurándole que una habitación estaría preparada para ella en los próximos cinco minutos. — Esta noche de visitas sí que nos ha traído sorpresas. Marie ¿recuerdas aun a la revoltosa Belosa? - sin saber como había podido ser el derrotero de su vida, fue más fuerte el impulso y corrí a abrazarla, sintiendo que ese abrazo como ese encuentro me devolvían de cierta forma la juventud perdida— ¿Qué te ha traído hasta el Castillo esta noche querida? @ Melrose Moody @ Syrius McGonagall @ Agnes Lynn @ Hannity Ollivander Evans y bienvenida mi Kote🫀 @ Marie J. Báthory Poulain

ROL DE CONOCIMIENTOS ABRIL 2021 Benjamin bajó del auto, y tras de él lo hizo Rory, cubriéndose el cabello rojizo brillante con la boina de turno (de un sobrio color verde musgo) e intentando en vano que la luz de las docenas de flashes de periodistas no lo cegaran. La magnífica fachada del complejo ubicado en el corazón financiero de Londres era solo la antesala a la enorme escenografía construida para el que se había vuelto en el último año, tras la asunción de Despard del Ministerio de Magia, en el programa más sintonizado entre la población mágica y no mágica del país. “Magos vs Muggles: Una lucha sin límites” estrenaba su segunda temporada por todo lo alto, y tras arduas negociaciones con Whisper, el sagaz asesor había terminado reuniendo a un grupo de magos y brujas que apenas ese día habían tomado conocimiento que enfrentarían una muy diferente experiencia para profundizar en conocimientos bajo su guía y la de Ludwig Malfoy, el carismático ministro de Salud Italiano, cuyo encanto parecía traspasar las pantallas. —¿Ni siquiera vas a decirme quienes son los otros participantes? —cuestionó Rory, mientras se persignaba al ver pasar a la despampanante presentadora del lado muggle Gigi Waller-Bridge, una aviadora estrella que había dado el salto del aire a conducir programas de concurso, y volvía a observar con insistencia a Whisper— ¿O los retos que vamos a enfrentar? — Lo sabrá en su debido tiempo, ministro. Tiene que entender que ver su cara de asombro cuando lo sepa es parte también del show. Casi dos horas después, tras una sesión de maquillaje que prácticamente había desaparecido las pecas de su rostro y un hechizo para hacer un poco más respingada su nariz, Rory estaba listo para salir. Antes que él había ido escuchando uno a uno como Ludwig presentaba a los miembros del equipo mágico, alternado a como Gigi lo hacía con el equipo muggle, y los aplausos atronadores del público en el escenario lo aturdieron lo suficiente, como para apenas sonreír y hacer una reverencia silenciosa hacia el escenario. ¿Cómo podía pensar Whisper que él podía ser un talento de televisión? Separados por una malla de un material traslúcido que a Rory le recordaba la consistencia del obsistens, cada equipo tenía delante de sí un circuito gigante que culminaba en un templo que imitaba la forma de una pirámide, flotando cincuenta metros por encima de sus cabezas. Era una visión espectacular, pero el pelirrojo se obligó a concentrarse en las indicaciones que comenzaban a dar en el juego. Cada participante tenía un retador del lado muggle, y a ambos lados se les daba un reto a resolver, otorgando valiosos segundos extra para partir antes hacia la pirámide del desafío final, a quien lo resolviese primero. Para los magos la solución estaba empleando sus conocimientos mágicos, mientras los muggles tendrían que hacer uso de la ciencia y su método científico. Adivinación y Maestría con escobas eran los suyos. Que la certificación de especialidad en dichos conocimientos le viniera a través de un programa concurso decía muchas cosas de lo rápido que estaban cambiando los tiempos por toda esa cultura mediática muy propia del mundo muggle, pero ya era muy tarde para echarse atrás, así que cuando llegó su turno de dar unos breves palabras, Rory alzó la cabeza y con una sonrisa apacible enfocó la vista en el centenar de miradas ávidas que lo contemplaban desde el escenario. — Querida comunidad, que este espacio les proporcione un tiempo de sano entretenimiento, que todos merecemos luego de tantos tiempos de cruenta guerra.— Gigi lo miró sonriente, y micrófono en mano, le preguntó si creía que ganarían. Sonriente Rory se persignó, con las palabras precisas en los labios, casi como si fueran manifestación divina— Por mi fe en el altísimo, nuestro equipo se llevará la Victoria ¡Porque para Dios no hay nada imposible!* *(Lucas 1:37) *** GUÍAS @ Ludwig Malfoy Haughton (con el pj de Ludwig Malfoy) Adivinación y Maestría con Escobas @ Rory Despard (con el Pj de Benjamin Whisper): Runas Antiguas, Cuidado de Criaturas Mágicas ALUMNOS Runas antiguas: Ludwig Malfoy Haughton, Ada Camille Dumbledore Cuidado de Criaturas Mágicas: noe_snape Maestría con Escobas: Rory Despard Adivinación: Rory Despard, Ada Camille Dumbledore, Tazz Hitos por conocimientos: Runas antiguas: Desentrañar las indicaciones del mapa para llegar a la recámara del rey y averiguar la clave de acceso para ingresar a ella en la pirámide del desafío final. Cuidado de Criaturas Mágicas: Resolver el rompecabezas que da pistas de las criaturas que custodian cada uno de los tres niveles de la pirámide y enfrentarlas en el desafío final. Maestría con escobas: Una vez resuelto el misterio de CCM y Runas Antiguas, deberá llevar uno por uno a cada miembro del equipo a lo alto de la pirámide flotante. Adivinación: Utilizando cada uno un método de adivinación diferente, averiguar en 3 personas del público si es soltera o casada, si tiene o no hijos, y la profesión a la que se dedica. Instrucciones: Aparte del conocimiento en que se formarán, pueden hacer uso de los poderes, habilidades u otros conocimientos que dispongan para complementar, siempre vinculados a la tarea encomendada. Para distinguirlos, en cada uno de sus roles deberán resaltarlo en negrita y color rojo. La misión general consiste en sortear los retos puestos en el concurso y trabajar en conjunto en el desafío final para alcanzar el tesoro oculto de la pirámide flotante. Es muy importante que procuren seguir la coherencia de los demás roles y de sus demás compañeros. Se permite el uso de personajes secundarios en caso de que estén cursando dos conocimientos al mismo tiempo. También son libres, más allá del nombre y profesión que hemos dado a los retadores muggles, de imaginar y rolear su apariencia física, personalidad, etc. Para aprobar se deben realizar mínimo 5 roles por conocimiento adquirido. En caso de dudas las podrán emitir en el topic de dudas correspondiente etiquetándonos.

Rory & El Anarquista Visitar los Centros de Educación Comunitarios (popularmente conocidos como CEC) era una de las actividades que Rory disfrutaba verdaderamente, entre la casi siempre tediosa agenda de compromisos que tenía como Ministro. Lo más paradójico era que, ciertamente, dichos espacios no habían nacido fomentados por el gobierno, sino que eran una iniciativa autónoma de respuesta ante el edicto segregacionista educativo de Sagitas, que él había decidido impulsar en su tiempo como líder de la Orden del Fénix. Sin embargo, a puertas del referéndum que decidiría entre otras cosas la continuidad de esa medida en Hogwarts, la visita le servía al joven ministro para recabar y conocer toda clase de vivencias y experiencias exitosas que estaba dejando la combinación de enseñanzas tanto del mundo mágico como no mágico. Él era un convencido de que lo que en esos espacios se había generado era el mejor ejemplo y prueba de la necesidad de dejar atrás las visiones que imaginaban al mundo estancado en burbujas que no debían mezclarse las unas con las otras. La mañana se le había ido entonces, examinando curiosos prototipos de artefactos que, con el auspicio generoso del Departamento de Tecnomagia, habían podido llevarse a cabo, y poco tiempo después la videoteca con una envidiable colección de archivos que desde películas comerciales, hasta otras más de autor y documentales, ayudaban más a los magos a conocer del estilo de vida muggle y el papel fundamental que la ciencia y el método científico tenía para ellos. Un poco más allá, toda una colección de recuerdos podía verse en alacenas, clasificados según su utilidad y etapa histórica, para que los estudiantes, especialmente los muggles, tuvieran la oportunidad de sumergirse en pensaderos y observar a través de esos recuerdos el proceso histórico que el mundo mágico había vivido, incluidas las guerras mágicas. —Es un admirable trabajo Horace. Esto se siente casi como una utopía — sentados en la terraza del tercer piso de la edificación, Rory tomó un poco más de café, con la vista distraída en un grupo de muchachos que jugaban Gobstones en el patio del centro educativo— si sabes que el plan de comunicaciones ya está en marcha ¿verdad? Pronto los centros dejarán su relativo anonimato para ser el elemento central de la campaña por la anulación del decreto actual. ¿Estás bien con eso? El Anarquista arrugó el ceño, con una expresión que mostraba más resignación que disgusto. — Sabes que encuentro descarado que el gobierno inglés quiera sacar rédito de esto Despard, cuando tú y yo sabemos muy bien que lo que se ha conseguido aquí es todo fruto de la gente, con el apoyo económico de la Orden del Fénix y recientemente el convenio con el Departamento de Tecnomagia de MACUSA— resoplando airadamente, el hombre dejó la taza vacía sobre la mesa aunque su gesto disminuyó en brusquedad al ver cierta desazón en los ojos del pelirrojo a sus palabras- con esto no quiero decir que la idea que mencionas sea mala. Todo lo contrario. Es un pequeño triunfo ante el sistema que nuestros centros sean ejemplo de que una mejor educación alejada de agrios elitismos es posible. Pero, esto que has llamado "utopía" también tiene sus fallos. ¿Cómo es eso que dicen en tu religión? Que solo Dios es perfecto ¿no? Déjame mostrarte algo. Levantándose de la silla, Horace invitó a Rory a descender hasta lo que era una pequeña oficina atestada de documentos, y rebuscando entre ellos unos segundos, terminó sacando un pequeño folder azul. El expediente no eran más que fotografías estáticas, por lo que asumía que el registro era muggle, y mostraba a un grupo de estudiantes en un sitio oscuro y algo decadente, que rápidamente Despard reconoció como el peligroso Callejón Knockturn. — Conoces de sobra que las drogas son el mal endémico de este continente- comentó El Anarquista, mientras pasaba hojas para mostrar a Rory más vistas, hasta que en una de ellas el predicador reconoció a uno de los muchachitos que esa misma mañana le había expuesto uno de los prototipos- fantasías patentadas, polvo de unicornio, y ahora, es una cosa denominada "suero mágico" la que está causando furor, y lamentablemente, más allá de haber identificado algunos puntos de comercio, la procedencia de esta cosa es un misterio. Sin necesitar verbalizarlo, Despard había entendido que quizá poder averiguar sobre esa droga, y evitar que ese asunto siguiese escalando era la mejor moneda de cambio por poner a los CEC en las próximas semanas, en el ojo de la tormenta mediática. Así que con una última venia, partió de allí de regreso al ministerio, prometiéndole a Horace que personalmente vería de poder iniciar las investigaciones, con todos los recursos que tuviesen al alcance.

Rory Despard & Benjamin Whisper Por un momento Rory había sentido que todo aquel acontecimiento lo superaba. El Faroise había extinguido la mayoría de flamas del arco de acceso, y el hechizo metereológico de Melrose unido a los poderes de una espada del invierno que según habían informado a Whisper, Darla se había encargado de utilizar, también habían logrado controlar el fuego al interior de la Reserva. No obstante, la magia de la naturaleza que fluye por su interior debido al uso que le ha dado, le indica del evidente desbalance que comienza a haber. Se han llevado criaturas, y pronto, un Whisper le informa que dado que Potter Black está ya allí y ha desplegado a los aurores, él se retirará de regreso al ministerio. — Me temo que alguna clase de infiltración se dio en la reserva, pues reportan sabotaje en el proceso de evacuación de los civiles y conducta sospechosa de algunos funcionarios con credenciales ministeriales, que sin embargo no tenían orden de estar aquí. Necesito comprobar cada uno de esos reportes que están llegando y aquí es imposible hacerlo. También daré parte a Potter Black de lo que pueda corroborar como información verdadera, así que Despard, más te vale que tú …y tu gente- su gesto de desagrado hacia los miembros de la orden fue evidente- se encarguen de poner un tope a esos miserables de ideas trasnochadas. Por la forma como se expresaba no le quedaba para nada claro a Rory a qué grupo su asesor podía detestar más. Sin embargo era evidente que necesitaban ponerse en acción pues cada minuto que pasaba era la diferencia entre salvar una vida o a una criatura. Rory se gira entonces a Kaori, que ya le había indicado que le asignase en que lugar podía ser más útil, y con la pericia que la mujer había demostrado en la batalla contra la inquisidora, él no tenía dudas de a dónde enviarla. — Kaori, ve a la zona de los dragones. Son de las criaturas más valiosas que se tiene en esta reserva. Y muchos de esos ejemplares pertenecen a familias importantes que sabe Dios lo que pueden decir si sus animales desaparecen. Creo que llevarlos a un sitio seguro de la Orden o los terrenos, será lo mejor por ahora, hasta que las cosas en el Ministerio se estabilicen. Que Melrose te acompañe, pues su magia paladin nos ayudará enormemente. Ya Melrose había mostrado un excelente trabajo aislando a los erumpent, así que no había motivos para dudar de que no hubiera podido hacer lo mismo con los dragones. Mientras veía a ambas brujas ponerse en marcha, era turno esta vez de atender a Matt que de algún modo se las había ingeniado para hacerse paso entre la maleza. — Señor Blackner, que gusto encontrarlo. Verá, el departamento de Seguridad se ha desplegado ya en la zona, pero me gustaría que pudiera ayudar a los últimos civiles que quedan a evacuar. Creo que el señor Grelliam Ollivander era uno de los importantes, no sé si ya llegó a salir pero en general, esto pronto si no es que ya, se convertirá en un peor campo de batalla, así que debemos asegurarnos que ningún inocente quede atrapado en el fuego cruzado. Con todo dispuesto, siente ya que está listo para esa batalla que acertadamente Made le indicó que es totalmente desventajosa ¿pero no era casi siempre de esa manera que los enfrentamientos se habían dado? Las largas horas, donde guiado por las fichas de lectura de Scavenger, el pelirrojo ha leído en las memorias del bando, el tema de la desigualdad es constante, lo que de por sí exige un sacrificio mayor. Y sucede entonces, que lo que hasta ese momento no ha sido más que una posibilidad se materializa cuando uno de los mortífagos (Goldor) se acerca más de lo que cualquiera de los otros ha hecho, amenazando con poner las cosas peor si la orden no cedía y se retiraba, y luego más improperios, los usuales que no son más que provocaciones. Y aunque el impulso de responderle está ahí, bastó una mirada con Madeleine para comprender que todavía era pronto para una ofensiva. Necesitaban aguantar un poco más, al menos hasta saber que Kaori y Melrose estaban ya con los dragones. Lo inesperado sucede entonces: Sean aparece, según él para velar como otros sus intereses, y quizá como en el mismísimo concierto la actuación del hombre era a mitades admirable y a mitades temeraria, desafiando abiertamente a los mortífagos acusándolos de ladrones, una afrenta a la que Mael retruca rápidamente, y no solo eso, sino que como en el concierto, una vez más el mortífago muestra sus pocos escrúpulos atacando al hombre con un absorvere, y pese a todo Linmer consigue hacerle frente, a costa eso sí de mucho dolor en el proceso, con cada ataque infringido. "Ya están" es apenas el susurro apagado de Madeleine, y este coincide con la aparición de Darla en la batalla, y es el ataque dirigido hacia ella el que finalmente termina haciendo que Rory no resista más, y decida intervenir también, más al comprobar como el aura de la muerte se desplegaba en el espacio. No necesita en realidad de mucho más para conectar con esas voces de espíritus de plantas y animales que lo llaman y lo conducen por las vías de la magia de los elementos. Desplegando el aura de inmunidad para impedir que cualquiera de esos caprichosos poderes de otros mundos sea desplegado en la batalla, de inmediato concentró su magia para ejecutar el Sacrifixio Extremus, absorbiendo la energía vital de Goldor y los mortífagos en grupo que están un poco más atrás del hombre (incluido un tipo raro a los pies de una de las enmascaradas) cometiendo nuevas fechorías. Hay un impulso muy fuerte, viendo como una de ellas (Denébola) no tiene escrúpulos en atacar civiles, de quitar toda su energía hasta matarlos, pero sabe que no es un poder humano el decidir sobre la muerte, así que una vez que ha tomado de ellos la energía suficiente para debilitarlos hasta que les cueste incluso permanecer de pie, usa sus mismos poderes para detonar su habilidad de clan, y a través del Supremus, hacerlos pagar. Es esta la primera vez que Rory se permite usar la destructiva y a menudo incontrolable fuerza de la magia elemental, pero sabe bien que merecen ese ataque, así que su corazón permanece sin atisbo de compasión por ellos, mientras lo ve volar por los aires en un torbellino que los eleva varios metros como si fuesen hojas de papel, para luego aventarlos con furia contra las malezas repletas de espinas que el faroise hizo crecer en torno a ellos, convirtiendo sus cuerpos en un reguero de sangre, y en el caso particular de uno, el más desafortunado (Toji) haciéndolo caer en las propias llamas que se había encargado de propalar instantes antes. — Si valoran su vida, se irán de aquí, sin provocar más daños de los que ya han causado. Pues ya lo dijo Jesús, que de la misma manera, todos ustedes perecerán, a menos que se arrepientan* *** Mientras tanto, a kilómetros de distancia, en el despacho del ministerio, Whisper terminaba de redactar una carta al ya segundo ofrecimiento de apoyo que el ministerio de magia egipcio les ha hecho. Su olfato político le dejaba notar que había dobles intenciones en tan acomedido apoyo, pero decidido a no dejar pasar la oportunidad, decía la escueta respuesta. Señor Regente: Muy agradecidos de su gentil interés por este lamentable ataque terrorista perpetrado por la Marca Tenebrosa, es mi deber en primer lugar informarle que tanto las fuerzas del departamento de Seguridad mágica, como la Orden del Fénix, de la que nuestro Primer Ministro es orgulloso miembro, están solventando el problema. Por ello, no creemos necesario apoyo en esa área, pero sí confiamos en que, si está en sus posibilidades e interés, pueda ayudarnos a coordinar con el gobierno alemán el rescate de un grupo de criaturas que hemos confirmado han sido llevadas hasta ese país haciendo uso de los poderes uzza del Fulgura Nox. También hago llegar la consulta, sobre si conoce usted a la bruja Lucía Riddle, a quien nuestras fuerzas rescataron del interior de la Reserva y que dice trabajar en la empresa del señor Uriel Luxure. La comprobación de la varita de la señorita ha arrojado un uso indebido de hechizos, pero ella niega sistemáticamente estar confabulada con las fuerzas mortífagas en este execrable atentado. Confiamos en que, de poder confirmación de lazos y respaldo a la versión que la señorita ha dado de su estadía en el país, ella pueda recuperar su libertad, ya que por el momento permanece en custodia del departamento de Seguridad. Muy agradecido, quedo al pendiente de su respuesta, seguro de que la inestimable ayuda de su gobierno ayudará a solventar esta importante cooperación internacional y caso particular. Atentamente Benjamin Whisper Jefe del Gabinete de Asesores del Ministro de Magia de Gran Bretaña Off: Han pasado 84 años, así que etiqueto a mansalva perdón XDD: @ Mael Blackfyre @ Ellie Moody @ Melrose Moody @ Kaori Moody @ Thoth @ Ada Camille Dumbledore @ Valeskya Granger @ Malum Luxure @ Tazz @ Kahlan Macnair @ Matt Blackner @ Darla Potter Black @ Sean -Ojo Loco- Linmer

Bel Evans Ollivander con @ Hannity Ollivander Evans Me quedé un momento, pensando en la pregunta que Hannity acababa de hacerme, de si llevarnos a Florence, o quedarnos a ver que estaba sucediendo, y si acaso estaba intentando jugar conmigo y hacer una chanza que aminorara la presión e incertidumbre del momento. — No hay forma de sacarla de aquí. Aunque no te chamuscó, todavía está lejos de hacerte caso, y en cuanto a mí, pues, aunque siempre vengo surtida de muchas cosas, no tengo magia propia querida- en momentos era verdad que extrañaba por cuánto podía necesitarla, pero tratando de centrarme en las herramientas de las que disponíamos, continué explicándole mi plan- Yo creo que debemos encontrar la forma más rápida de salir, evitando esas columnas de humo. Por lo pronto comprueba por favor que el hechizo rastreador en Florence sigue activo. Sacando la cámara mágica, que siempre llevaba conmigo por la vieja afición de fotografiar plantas y cualquier particularidad que podía encontrarme, tomé una foto de la dragón y luego de las columnas de humo que se elevaban a la distancia. Y comencé a avanzar un poco más, fotografiando también a otros ejemplares cercanos, hasta que de pronto, a unos cien metros de distancia nuestra, la figura de una mortífaga apareció de la nada ¿ pero cómo era posible que los hechizos antiaparición estuvieran inactivos? Al instante, la sola presencia de la enmascarada figura hizo que buscara un espacio oculto, desde donde espiarla a gusto, intrigada por saber que pretendía hacer allí. ¿Significaba aquello que quienes estaban atrás de ese caos eran los mortífagos? Indicándole a Hannity que se colocara su capa de invisibilidad por un momento pensé en solo permanecer ahí inmóvil en mi escondite, pero finalmente, sin poder resistir a la tentación de ese extraño misterio y viendo que la bruja se ponía en marcha, comencé a seguirla, aun cuando a ratos, por la capa camaleón que llevaba encima, podía mimetizarse tan bien al quedar quieta, que no alcanzaba a verse nada más que el trozo de una bota de cuero negra. Una vez detenida su marcha, arrimándome y colocándome de cuclillas tras un peñasco, vi a la bruja detenerse frente a un hermoso opaleye de las antípodas que dormía profundamente a la entrada de una cueva. Pero como si el asunto no fuera confuso ya, mientras esperaba que ocurriera un ataque, la mujer simplemente volvió sobre sus pasos tras observar a la criatura y partió rauda de allí. ¿Qué había significado todo eso? Intrigada, me acerqué al dragón, todavía con la capa de invisibilidad encima, y alzando la cámara le tomé varias fotografías. La voz de Hannity llamándome desde el peñasco donde había estado oculta hizo que volviese hasta donde ella. — Una mortífaga vino hasta este dragón, pero se fue luego de solo verlo. Muy extraño ¿no te parece?- aquel raro comportamiento tenía los ingredientes de misterio por los que me sentía irremediablemente atraída e imbuida de la adrenalina del momento proseguí el relato, aun cuando Hann parecía más presurosa por beber un poco más del agua de la cantimplora (de la que no se había separado en toda la jornada) que en escuchar mi historia- tomé unas fotografías del animal, hay marcas muy específicas con las que cualquier cuidador de la reserva ubicará fácilmente a quien le pertenece. Al menos cuando fui directora siempre ellos debían hacer turnos que… Callé de pronto, pues inexplicablemente la misma mortífaga de la vez anterior estaba de vuelta, pero esta vez lejos de solo contemplarla, la bruja movía al dragón. Este, tras botar humo por la nariz visiblemente mortificado de que lo despertasen, parecía haberla reconocido y emprendiendo vuelo, se había elevado por los aires ¿pero hacia dónde? Mi impulso más fuerte era seguir a la criatura, pero también me había prometido no inmiscuir más a Hann en problemas ¡incluso le había dicho que solo buscaríamos la salida hace apenas minutos! Y ahora estaba allí, deseosa de seguir al dragón para saber a donde es que la misteriosa mortífaga le había ordenado conducirse. —Si partimos en este momento, estoy segura que con tu manejo de vuelo en escoba, podremos dar alcance a la criatura, pero debemos hacerlo ya ¿Qué dices, lo hacemos? Había querido sonar lo más neutral posible, pero en el fondo, no podía engañarla. La emoción de todo eso, y ese vieja pero nunca extinta búsqueda de acciones al límite se combinaba de tal forma en mi interior, que ahogaban mis propios pensamientos de culpa.

Creo que si me alcanza el nivel sldlf sino pues me quedo con el primer conocimiento que enlisto XD. Nick: Rory Despard ID: 111484 Conocimiento: Maestría con Escobas y Adivinación Link a la Bóveda: 90386 Link a la Ficha: 90357

Ficha para canciones de 2022: Canción: Everything's Electric Autor: Liam Gallagher Enlace a YouTube o Spotify:. ¿Por qué es importante? Las canciones de este hombre me dan razones para vivir aklfdslkf Otros datos: Ojalá pueda verle en vivo este año ✨

Harriet Travers- Finalista Interia Cleo camina nerviosa junto a Harriet, cada vez más convencida conforme avanzan por el cenagoso camino a donde han ido a parar, que dirigirse a la Heredad ha sido un grave error de su señora. Es la primera que ambas incursionan en la residencia, y aunque Hattie se había visto ligeramente decepcionada de no encontrar a nadie esperando por ella en los bordes del terreno, su decisión se había reforzado y restándole importancia al críptico letrero desvencijado y apenas sostenido de un lado por un clavo, se había adentrado en la propiedad. Desde entonces, no son muchas las palabras que han intercambiado durante ese trecho recorrido, pero es cuando vuelven a pasar por un árbol que la joven ya había marcado con un aspa sobre la corteza, que confirman que, de algún modo, están perdidas en ese lugar. A ojos de Cleo, ya nada podía ponerse peor, pero como si alguien estuviese leyendo en su mente tan solo sus nefastos pensamientos, la esfera que hasta entonces había estado tranquila entre sus manos se agita levemente y al instante desaparece ¿por qué venia a mostrar su extraña inestabilidad precisamente en esos momentos? Casi agradecida de que Hattie esté distraída observando una planta que asegura que sirve para confeccionar ropa en comunidades indígenas exóticas, la jovencita está más decidida a encontrar a Guren al costo que sea, hasta que de pronto ambas pegan un grito cuando un roedor similar a un cuy pasa por entre sus piernas, y luego vuelven a gritar alborotadas, esta vez por causa de una alta mujer que Harriet cree recordar de un incidente en la feria parisina de Les erratiques. Cleo es la primera que, alzando la varita, conjura un hechizo aturdidor para evitar que la joven vaya a agredirlas, pero lejos de ayudar, el ataque solo sirve para que la mujer más enfurecida, termine reduciéndolas con bastante facilidad. Harriet está atónita por como incluso luego de ser maniatada, la mujer se atreve a amordazarla, simplemente para que su “alborotadora voz” no siga “molestando”. Está segura que a esas alturas ya docenas de bichos se le han trepado encima, pero el terror que todo el incidente le ha producido la mantiene paralizada, hasta que es el olor a chamuscado lo que hace que finalmente tenga que admitir para sí misma que ha sido una completa locura ir hacia la casa de esa familia, que ahora cree que tiene bien ganada su mala fama de turbia y excéntrica. ¿Por qué quien en su sano juicio podía permitir a semejantes maleantes estar rondando los terrenos? El panorama es sombrío, pero de repente, la voz atronadora de Hessenordwood la saca de la angustia. No tiene idea de como es que el mago ha podido llegar hasta allí, pero no puede estar más agradecida de que como siempre, él parezca estar en el momento justo que lo necesita. Más pisadas y voces, que de a pocos va identificando también le confirman finalmente, que es un grupo mayor el que ha llegado hasta allí, y cuando aquella sucia tela con que las había cubierto cae, sus ojos se abren atónitos ante la escurridiza figura de Quintel Guillam. Si los hombres de confianza de Hess estaban allí, no había nada que temer. Está intentando convencerse de ello pero... ¿Cómo era posible que incluso en esos momentos la maleante (Yanna) se atreviese a desafiarlo? ¿Quién era pues esa mujer? A las finales, todavía sin averiguar la identidad de la tipa, la ve hacerse a un lado refunfuñando que se le ha escapado la cena y que lo pagarán caro, y luego de eso, son las enguantadas manos de Guren las que la ayudan a liberarse, ponerse de pie, y acomodándose el moño y el vestido, componer la dignidad que siente que ha perdido con semejante “recibimiento”. No esperaba que las cosas fueran de la manera que han resultado, y se siente tonta de haber venido allí, y de además querer increpar a Gurren por residir en semejante lugar rechazando su oferta de mudarse a Hampshire. Pese a ello, no es Hattie la clase de persona que pueda dar semejante espectáculo, así que tras respirar hondo, solo hace una inclinación de cabeza y es Cleo la que da un paso al frente para dirigirse al grupo de magos, explicando la ama de llaves de la razón por la que ella y su señora se encuentran de visita en la propiedad de los Ollivander. —Señores, sé que venir hasta aquí a solicitar la presencia de Guren por más tiempo del estipulado excede las cláusulas del convenio establecido, pero le aseguro que la señora Travers recompensará esto como es debido- no tiene ella ánimo ni se sabe con el derecho de cuestionar a Hessenordwood, pero pesa más su indignación, lo que la hace soltar un último comentario mordaz tras su correcto pedido, que no duda que el sagaz mago será capaz de identificar- de la misma forma en que confío en que usted, señor Crouch, podrá garantizarnos que episodios tan atroces como el que acabamos de experimentar no vuelvan a suceder. Si algo desea Cleo con todas sus fuerzas, es quedar a solas con Guren cuanto antes, pues la pérdida de la esfera la aterroriza casi tanto como las burlas de la maleante que tan desafiante se muestra ante el señor Crouch. Sin el batallón de elfos de los que dispone en Hampshire, encontrar el objeto realmente se le hace una tarea casi imposible, pero lo último que está dispuesta a hacer es admitir para su señora de aquel penoso inconveniente, por lo que lo único que le queda es confiar en la solvencia del administrador de la heredad para dirigir las cosas de la manera que más pueda favorecer a sus intereses. … Unos molestos ruidos, lastimando sus delicadas oídos, es lo que hace que Bel reaccione y abra el hocico en un bostezo enorme. A la sombra del árbol de ciclamor, que está a punto de florecer y llenar de coloridos tonos violetas sus ramas, la bruja que ha pasado otra noche merodeando los terrenos bajo su forma animaga, y algo entumecida por como ha estado enroscada sobre sí misma hasta entonces, estira las patas para sacarse del todo la modorra. Es entonces que nuevamente, el molesto ruido aparece. Movida por su instinto, que no sabe si es el venido de su parte humana, de la animal, o una rara conjunción de ambos, avanza entre los senderos de barro donde todavía la marca de sus huellas alcanza a distinguirse, en busca del lugar de donde provienen esos agudos chillidos. Nunca antes se ha topado con sonidos semejantes, pues ha memorizado casi la totalidad de graznidos, zumbidos y aullidos de la variopinta fauna de la heredad, hasta que cerca de la madriguera de un puñado de zarigüeyas, distingue un aroma particular que no duda en seguir, y es guiada por él que termina alcanzando un claro donde una pequeñísima figura de abundante pelaje, está tomando nerviosa, un poco de agua. A simple vista, la criatura luce totalmente inofensiva, pero aunque no puede explicarlo, los pelos de su lomo erizándose le advierten que está frente a una cosa tan peligrosa, que todos sus sentidos solo le reclaman una cosa. Que huya de ella. Sin embargo, incluso antes que pueda tomar una decisión al respecto, el animal se gira y tras dejarle en evidencia que es consciente de su presencia, automáticamente delante de sus ojos, muta a la forma de un jabalí. Aún sin procesar del todo lo que está sucediendo, Bel retrocede, pensando en que ahora que ha tomado esa forma corpulenta la embistirá, pero lejos de hacerlo, la bestia simplemente desaparece. ¿Hacia dónde? Se ha salvado por los pelos esta vez, más la adrenalina que la recorre hace que una vez más, quizá irracionalmente, emprenda la marcha para dar con el paradero de la criatura, al costo que sea, pues le preocupa que termine provocando daños en los terrenos o incluso en alguno de los habitantes de la Heredad.

Benjamin Whisper PP 7// PV 100 Un diestro uso del mutis incapacita a Ben de poder finalmente realizar el hechizo que tiene pensado, de modo que el uso de la daga del sacrificio tendrá que esperar. Sin embargo, es esa también una ventana de oportunidad que de pronto encuentra que puede aprovechar, ya que no durará mucho más el poder de su vara de cristal, así que no pensándolo mucho más, y antes que Quintel lance un nuevo ataque, replica igualmente con otro mutis, y disfruta al comprobar que esta vez su hechizo ha dado en el blanco. Lo que sea que el muchacho hubiera querido hacer apuntando a esa roca cerca suyo no resulta, pues ninguna palabra sale de sus labios. Es ciertamente placentero verlo de pronto allí, no sabe si ofuscado pero sí contrariado, posiblemente con su prodigiosa mente arremolinando pensamientos de forma frenética para evitar que esa situación se agrave y termine conduciéndolo a la derrota. Y es esta faceta, la de poder llevarlo a sus límites, de que pruebe para sí mismo hasta donde es capaz de llegar con tal de nunca inclinar la cabeza, así pueda romperse en el proceso, la cualidad que encuentra cautivadora en Quintel, tan impropia de alguien joven que por eso mismo es rara y especial y no hay un solo momento, siempre que tenga la oportunidad, que Benjamin no esté dispuesto a ir más allá de sus propios preceptos para descubrir qué de nuevo puede aparecer en ese camino que de formas tan torcidas, los dos han estado recorriendo juntos. El duelo está llegando a su punto culminante, ambos lo saben. El más mínimo paso en falso será el que decida al ganador, así que incluso si es una característica muy suya actuar lo más guiado por la razón que pueda a cada paso, sabe que cuando se trata de duelos, la intuición resulta mucho más preponderante y que ignorarla sería una estupidez. Debe prestar atención entonces, a las señales que su propio cuerpo le está dando y le demanda, que no es otra cosa que una pulsión muy fuerte de que necesita protegerse, y si las circunstancias terminan favoreciéndolo, hacer pagar de la forma más inimaginable posible a Quintel cada una de sus provocaciones durante la batalla. Así que alza la vista y pudiendo hablar nuevamente, conjura un ígnea máxima para ser inmune a cualquier ataque con de fuego, evitando así dicho peligro. Y aunque el efecto de la vara de cristal finalmente culmina, él se siente listo para dar el zarpazo final.