Hablantes de Parsel

[Lawan Nguyen Thanh]

Fue Wootang quién lo despertó.

 

—¿Qué, qué? —el somnoliento Lawan se resistía a despegar el ojo para poder seguir con su plácido sueño, pero cuando la boa vio que esto no iba a funcionar se acostó sobre él, descargando todo su peso en el vientre del Arcano que al no querer morir aplastado no le quedó más remedio que levantarse.

 

«Ya estan aquí», le indicó Wootang.

 

— ¿Tan rápido? Qué fastidio —Lawan de verdad creyó que no volverían, que mientras estuvieran en sus hogares se lo pensarían, pero nunca había conocido estudiantes tan testarudas e insistentes como esas tres. Bostezó desperezándose, subió un poco su Nón Lá destapándose los ojos y miró alrededor. Tenía tantas cosa que hacer, tanto que ordenar que entonces se le ocurrió algo.

 

— Wootang, ve allá y diles que entren a mi casa, luego les cierras la puerta y no las dejas salir hasta que todo esté medianamente limpio. Su siguiente desafío será hacerte reír o encontrar otro modo para que las dejes salir. Quiero que usen a sus propias serpientes para persuadir al resto.

 

Cuando la boa se marchó, Lawan se dispuso a ir al río para capturar algunos peces con sus pripias manos.

 

La gigantesca serpiente se apareció frente a las tres mujeres, apenas mirándolas, como si no le importaran, como si fueran poca cosa delante de el.

 

«Las está esperando dentro de su casa». Una vez entraran, Wootang cerraría la puerta con su cola y se quedaría allí erguida para que ninguna se atreviera a pasar. Sus ojos brillaron con malicia y nada podía ser peor para ellas que varias serpientes con hambre.

 

Cuando Lawan hubo terminado de pescar para alimentar a sus pequeñas cachorritas, caminó de regreso al Bungaló y afuera las esperó.

 

«¿Estarán preparadas para la prueba?» siseó y las serpientes que estaban adentro con ellas también dijeron lo mismo.

[Sagitas E. Potter Blue]

¿Mirar fuera?

 

Eso es lo que pretendía aunque "algo" me lo impidió. Ese algo era una serpiente enorme, más aún, enoooooooorme, que recordaba (?) que era la mascota más querida del Arcano. O eso me parecía porque... (sssshhh, que no se entere Don Taiwan)... a mí todas las serpientes me parecen iguales, sólo cuando hablan puedo distinguirlas.

 

-- ¿Cómo que dentro de casa? Pero si acabo de... -- protesté ante la grandota serpiente, pero había algo interesante: me había hablado, le había entendido, le había hablado y me había ignorado; pero sabía que me había entendido, así que mi Lengua Parsel estaba volviéndose fluida. Le sonreí, levanté las dos manos en son de paz y volví hacia el interior. -- Aquí esa serpiente dice que Taiw...esto... el Arcano está aquí dentro. A ver si va a encontrarse dentro de ese baúl que las serpientes no querían que mirara.

 

Sonreí a las dos serpientes y entonces pegué un salto con el "BOOOM" al cerrarse la puerta.

 

-- ¡Demonios desdentados! ¿Ese es el ruido que hace una puerta de bambú? Ha sonado como si fuera de hierro.

 

Intenté abrirla, por supuesto, pero con la mano fue imposible (no encontré el pomo) y en cuanto quise usar la varita, las serpientes que estaban dentro sisearon, enfadadas.

 

-- Vale, vale, sin magia... Hum... Veamos... Parseliano... ¡Eh, tú, Zancas! Sal por debajo de la puerta y pregúntale a esa serpiente grandota qué es lo que pretende encerrándonos aquí dentro. Pero procura que no te coma, Babila mataría a Amya y eso no es lo que queremos, ¿verdad?

 

Y sonreí a mi hermana, mientras esperaba a ver si a alguien se le ocurría qué hacer. Fuera era malo con la serpientaza pero dentro, las cosas no mejoraban. En fin, Zancas era reptiliana, seguro que le sacaba a la grandota lo que pasaba y, después, nos lo contaba.

[Amya An]

~Paffff~, pero qué dolor de espaldas le estaba dando a la bruja fingiendo ser perchero de culebriles, todas y cada una PELIGROSAS, a su propio estilo ... inclúyase Zanka, xDDD.

 

Amya_An solo le mostraba la mueca sonriente a su hermana, no porque no tuviese ganas de chillar (deporte de los mas favoritos de la Adler) ó porque nuevamente el arcano le hubiese tapado la boca con algo mas que sus calcetas sucias (?) ... no, sabía que tal postura enfadaba a Sagitas ... bueno, éso y además que tenía que cuidar que poner a la culebra prestada a su manis ¡muy DELICADAMENTE! al suelo porque si le provocaba un chichón, ese Wantan seguro que la entregaba de botanita a su Inmenso Bicho.

 

Ni tiempo de responder a Tau ... o.O cuando había llegado??? no era irrespetuosa, solo que el día anterior, entre tanto berrinche su cerebro no había procesado nada mas que ¡Haz lo que tengas que hacer y salte de aquí!

 

Abrió la jeta tan grande que seguro mostró hasta la cena de anoche (que salió muy temprano hoy y apenas y un par de puñados de cereal muggle se echó a la boca).

 

No obstante, fueron sorprendidas por ahora un encierro.

 

Symmetra estaba sana y a salvo (así que no busquen excusas para matarle, so pretexto de maltrato culebril ajeno), Ch.D. (la suya) se creía bailarina de "tubo" (seee, la adleriana como barra de pole-dance, xDDD) pues allí iba la muy coqueta (de la serpiente) tras Zanka que ya había corrido y saltado en pos de las ódenes de la peli-violeta ... ¿¡¿y por qué le hacía tanto caso a la Potter-Blue si ella era "la dueña" del bicho?!?

 

Iba a gritar pero ¡nada! todo extremadamente ¿rápido? y mas allá de su capacidad de reacción (?)

 

Había quedado con la varita en la mano (recuérdese que trajo a la otra bicha levitando) ... mas allá de ello, no entendió nada ¡no la culpen! no es fácil concentrar el cerebro con Ch. D. parloteándole en una oreja mientras Zanka andaba al otro lado de su cabeza escabullándosele, xDDD.

 

- Qué pasa ...?

 

Casi susurró aguantando la respiración sin guardar el palito mágico.

 

Su mascota de 3 cabezas chifladas, se revolvía aún dentro de su bolsillo, ansiosos por salir ... sobretodo, ¡porque el efecto del embrujo que les había lanzado parece que estaba disolviéndose! ... es decir, estaban volviendo a su normal tamaño que aunque no era el de mas de 2 metros (adulto), era mucho mas que versión bolsillo (!)

 

Y, ¿ahora qué? .. ♪♫ si no soy yo ... mi miro al espejo y ... ♫♪ (ok, no) ... ¿habrían de hacer que Zanka cantara y bailara a su modo cual Rana Cantadora?

 

- Pssss ... yo he estado entrenando a mis culebriles haciéndoles ver un show muy entretenido en la T.V. muggle ... ¿creen que con éso nos dejen salir con vida?

[Sagitas E. Potter Blue]

La confesión de Amya me pilló desprevenida. Pensaba en buscar un objeto con el que intimidar a las serpientes de dentro de la casa, tipo una silla o una mesa fácil de levantar sin usar magia (aún recordaba que ellas se habían negado a que antes tomara mi varita) para domarlas cuando sentí que mi hermana decía que había enseñado un número cirquense (bueno, de TV, que es más o menos lo mismo) a sus serpientes. Dudaba si traía a toda una jauría (¿cómo se llamaba la madriguera de serpientes? No estaba segura) o es que tenía varias repes, pero era un buen espectácul0 verla con sus parientas (ella es slytheriana) jugueteando al "hula-hop". Bajé la voz un octavo y me puse la mano en la boca, como disimulando lo que hablaba, aunque lo dije lo suficientemente alto para que ambas se enteraran:

 

-- ¿No creen que se merece un mordisquito, sólo para probarla? -- les dije en Parsel, pero sólo para demostrar que sabía hablarlo, puesto que sabía (o creía) que ambas dos presentes también lo entendían y lo hablaban, por lo que no sería un secreto lo que le murmuraba al ¿oído? a las ofidio gigantes.

 

Carraspeé y me puse la mano en el cuello, como si estuviera resfriada, con muchas ganas de reírme de mi hermana. Me senté en el suelo y, lerda de mí, me olvidé de guardar las distancias con las serpientotas enormes que guardaban la casa del Arcano; me quedé casi a un palmo de ellas, observando las cabriolas de mi hermana con sus manada de serpientes domesticadas.

 

-- ¡Qué se la pegue, que se la peque! Digo... ¡Muy bien, Amya, bien hecho! -- hay que animar al enemigo, aunque sólo sea para quedar bien.

 

Estaba tan ensimismada con el ¿baile? de las mascotitas de mi hermana que, al principio, no me di cuenta que las serpientes hablaban. Fruncí el ceño, sin entenderlas. Es decir, sí que entendí lo que decían, cada vez tenía más fluidez para entender el parseliano, ahora que me había soltado el cerebelo en aprender al máximo esa lengua. Lo que no entendí era a lo que se referían.

 

-- ¿Preparadas para qué...? -- repetí, como boba, sin comprender nada.

 

Zancas sacó su lengua ¿viperina? (demasiado contacto con Amya, seguro, todo se pega) y repitió:

 

-- Preparadas para la prueba.

 

-- ¿Qué hay que probar? ¡Ah, no! Yo no como nada que no me cocine Harpo en casa, que después se enfada. Así que me niego a una cata de ratones y otros "manjares" que os gusten a vosotras -- increpé a las serpientes.

 

De verdad, no sólo me tienen paciencia los humanos, aquellas serpientes eran unas Santas por no saltarme al cuello y mandarme al otro barrio de una dentellada.

 

-- Pru-e-ba -- susurró Zancas y entendí, ahora... Es que mi única neurona sana aún estaba pendiente del baile de Amya_An y sus serpientes (casi parecía un anuncio de la tele muggle para anunciar algún lavavajillas; no pregunten por el símil, sería imposible explicar porqué pensé en eso).

 

Era la prueba, la PRUEBA, el portal y todo eso. Me lo pensé... Era divertido hablar con serpientes pero las otras veces que había pasado por los obstácul0s para llegar a la pirámide casi la palmo, así que...

 

-- ¡Qué demonios...! Pues claro que estoy preparada. Si no lo estoy ahora, sólo hay que dejar que Amya entre primero con Zancas y ya veréis como ningún obstácul0 me detiene para atraparla.

 

No sé si con eso quedaba claro que sí, quería pasar la prueba. Al fin y al cabo, no podía permitir que mi hermana lo consiguiera y yo ni lo intentara.

[Amya An]

Desafinó.

 

Sus orejitas habían escuchado la palabra Prueba y se le "escarapeló" todo el cuerpo.

 

- Prueba? qué prueba? ya la prueba? qué clase de prueba? una prueba como la de Sajag? (a la hora que se acordaba correctamente de ese otro arcano, xDDD)

 

Tragó saliva y se pusó toda helada mientras la triada culebril fraternosa (es decir, su runespoor de 3 cabezas) continuaba con la borrachera, digo escribo, el karaoki ♥

 

Se empezó a agitar pues si el otro chinche los había dopado para la suya, qué no haría el de ahora para matarlas ¿entrenarlas amorosamente?

 

No obstante, no estaba dispuesta a volver otro día mas, no xDDD, ¡muerte súbita! la pasaba (la habilidad) en esta ocasión ó se moría en el intento (aunque de preferencia no lo último)

 

Comenzó a apretarse las manos de los puros nervios porque ya veía que no sería una vieja nada divertida ... no con el humor que se gastaba ese "te eN-GU-YEn" que a duras penas y les había visto la cara durante todo ese período (mas anti-social que ella misma, xDDD) ; «Deberían de darle el título Arcanoide a las serpientes ...», se quejó en pensamientos, porque solo en su mente estaría libre de que la colgasen ... de nuevo ... de una pata, por mal-hablada ... bueno, éso hasta que tomase la Oclumancia (y mejor ese arcano va corriendo desde hoy mismo, ¡?)

 

- Lista ...

 

Anunció tras exhalar convencidísima que ¿sobreviviría? ... bueno, también "mas ó menos" (?)

 

Miró de re-ojo a Sagitas ... de lo que no estaba segura era si era a favor ó en contra, tener a la manis durante todo aquello ... que si se descuida seguro le ata las agujetas y la deja encerrada en el terrorífico salón de las examinaciones arcanesca.

[Tauro M.]

Después de permanecer un rato esperando, sin recibir más ayuda de que el Arcano estaba ''estudiando'', la enorme boa que no se separaba de Lawan vino hacia ellas como si estuviera a punto de comérselas y no dudaba de que así fuera, pero en su lugar Wootang les indicó que su maestro estaba dentro de la casa y que las estaba esperando allí. Ahora tenía un poco más de sentido eso del estudio, aunque la verdad tampoco lograba imaginarlo en esas. No dudaba de que fuera alguien muy instruido, pero tampoco había visto muchos libros -por no decir ninguno- en la residencia del viejo. Suspiró y decidió seguir a las dos mujeres que como siempre no dejaban de parlotear, pero al entrar alguien o algo les cerró la puerta.

 

— ¡¿Pero qué?!

 

Adentro solo habían varios centenares de serpientes, entre ellas la suya propia. Sabía que sería inútil, pero de todos modos se apresuró a preguntar.

 

«Chicos o chicas, ¿nos dejarían salir?»

 

Era obvia la respuesta, además de que quién parecía tener el control era la enorme boa que no las dejaba de mirar. Cuando a Tauro no se le ocurría más que hacer y pensó en emplear la magia, Amya intervino de una forma totalmente inesperada. Jamás entendería lo que pasaba por la cabeza de esas dos y la experiencia le había enseñado que era mejor no tratar de hacerlo o podría terminar peor.

 

Tauro soltó una risotada que asustó a las cinco serpientes que más cerca se encontraban y aunque quisiera parar simplemente no podía. El espectáculo, Amya cantando y Sagitas animándola era demasiado para ella, si de verdad tenían un circo lo cierto es que tenían mucho talento. Pero entre risas y con el estómago doliéndole a más no poder, le pareció escuchar a la lagartija hablarles. No escuchó a la primera, mucho menos a la segunda y tuvo que preguntarle a su Ashwinder qué era lo que le había dicho.

 

«Quiere saber si estás lista para la prueba».

 

«¿La prueba? ¿Tan rápido? ¡Por supuesto que sí!»

 

No sabía muy bien quién había hecho la pregunta inicial, pero si de ese modo lograban salir de la residencia del Arcano diría que sí a todo, aunque por dentro Tauro había estado esperando por ese momento.

 

«Amya, me tienes que decir cómo logras que tus serpientes hagan eso. ¿Tienes algún tipo de campamento o algo? Quizás pueda mandar a las mías de vacaciones». soltó sin pensar.

[Amya An]

O.O o-ohhhhhh ... la ex-Dire de la Cuarta le daba la confianza de ... ok, de éso no pero si de echarle garras a sus mascotitas viperinas ; O.o se había vuelto loca??? mas Loca que las 2 hermanas JUNTAS!!! ... o.O ó en realidad lo que quería era deshacerse de sus culebritas y solo ponía el pretexto de desaparecerlas con un posible adiestramiento adleriano? (~Ja Ja Ja~)

 

Pero ello sería tema posterior pues ahora había que sobrevivir al arcano, ó mejor dicho, a su Wooo-culebrota y sus amarillosos ojazos que de nada sexy tenían.

 

- ... ehmmmm ...

 

Titubeó, ella pensó que era mas seguro hablar en humano porque definitívamente Pársel todos los presentes (de alguna manera) entendían y lo que prefería era que el ashwinder de Tau, desde ya no le agarrase tirria por un siseo mal pronunciado.

 

- ... "lo suyo" siempre será bienvenido en lo mío ...

 

Pronunció extrañamente debido al nerviosismo ; bah! rodeadas y encerrados con serpientes que no les obedecerían en nada, que no dudarían ni un segundo en desayunárselas, con el ojo vigilante del Tra-la-lán por ahí seguro escuchando (un ojo escuchando, oh sí), le venida inminente de la terrorífica prueba (por qué todas tenían que explotar las penas y terrores de los concursantes???) ... y bueno, Tau era Tau, xDDD ... Tau, campamento, "culebras" es para poner "nervioso" al que menos (?)

 

Aún aguardaban ¿contestación? del misterioso mentor que ni las sobras de su arroz blanco les había convidado en ningún momento.

 

- Sagitas, si no salgo de ésta viva ...

 

.... e iba a añadir algo así como ; « No esperes, sobrevivirme ... »

~Je Je Je~

 

 

 

 

 

o.O Sería que la manis la podría "regresar" de la muerte si el Wantan le daba el matarile-rile-ló? ... si podía, ¬¬ y querría, xDDD.

[Lawan Nguyen Thanh]

Lawan observó o más bien escuchó atento todo cuanto pasaba dentro de su vivienda, pues sólo él tenía la capacidad para saber lo que decían cada una de las serpientes y escuchar cada uno de sus pensamientos sin perderse. Wootang estaba imparcial, como siempre, pero pronto, al igual que los demás, se entretuvo mirando los movimientos de las serpientes de Amya y al rato estaba también moviendo su cola para imitarlas. El Arcano sonrió. De vez en cuando le gustaba que entretuvieran a sus serpientes para mantenerlas felices, además de que eso le había dado más tiempo para seguir pescando.

«Es suficiente» siseó, haciendo que la boa se apartara de la puerta para dejarlas salir.

«Debo decir que ha dado un buen espectáculo, así que a cambio de dejarla tomar la clase, le pediré que venga una vez al mes a darnos un show y puede venir acompañada si así lo desea». Se podría pensar que Lawan no hablaba en serio, pero sus palabras no sonaron así.

«Dicen estar preparadas para la prueba, pero antes una enseñanza más. Las serpientes, si bien son criaturas muy difíciles de controlar, si llegaran a tener una conexión tan fuerte como yo la tengo con las mías, les obedecerá únicamente a ustedes. Esto quiere decir que si la serpiente de Taurogirl le obedece sólo a ella, Sagitas, a pesar de dominar el idioma, no podrá más que intercambiar algunas palabras con ella, pero nunca controlarla. Eso explicaría por qué al inicio Wootang no hizo caso cuando le pediste soltar a Amya» explicó «Aunque claro, yo sí podría controlarlas todas, pero ese soy yo»agregó con una sonrisa de medio lado.

— Ahora acérquense únicamente con las serpientes que trajeron —dijo cambiando al idioma normal. La varita de Lawan pronto fue cambiando de forma, estirándose por todo su antebrazo hasta convertirse en una serpiente cuya cabeza se asomaba por encima de la muñeca —Una vez más les pregunto, ¿están listas para enfrentar la prueba? —como estaba convencido de que las tres dirían que sí, los ojos de la serpiente de su vara de cristal se iluminaron, dejando todo alrededor como un rayo de luz tan potente que no les permitía ver donde estaban o a donde estaban siendo transportados.

[Tauro M.]

Cuando Tauro creía que estarían allí por mucho más tiempo, la enorme Boa por fin cedió y abrió la puerta, pero únicamente por orden del Arcano, quién las miraba de manera muy tranquila mientras le pedía a Amya que le diera un show para las serpientes o quizás para él. Sin embargo, lo que dijo después llamó especialmente su atención y trajo cierto alivio a la peli-azul que sólo hasta ese momento mostró preocupación por el hecho de que otro hablante pársel pudiera poner en contra suya a alguna de sus serpientes.

 

— Es bueno saberlo, al fin y al cabo ellas son quiénes deciden a quién obedecer o hacerle caso —añadió para suavizar sus propias palabras. Dicho esto se acercó como lo indicaba Lawan seguida de su Ashwinder. Allí pudo ver el cambio impresionante de la varita del viejo que se transformaba en una serpiente enroscada en su brazo, cuya cabeza siempre les apuntaba.

 

— Estoy lista —alcanzó a responder antes de quedar cegada por la luz que irradiaba los ojos de su serpiente-vara de cristal. La luz era tan fuerte y potente que le resultaba imposible abrir los ojos o si los tenía abiertos no podía decirlo. El suelo bajo sus pies se movió o desapareció, la verdad es que eso tampoco lo sabía, pero lo cierto es que ya no estaban en el Bungalow de Lawan, ellas habían sido transportadas hacia otro lugar.

Editado 28 de Septiembre del 2016 por Taurogirl Crouchs

[Lawan Nguyen Thanh]

Regresar de su tierra le dejaba un sabor amargo, a pesar de su avanzada edad no dejaba de recordar a sus padres y a su mentor, siendo que el único recuerdo vivído y palpable que tenía de ellos era la boa constrictor que lo acompañaba, a quién había cuidado desde que era una cría respondiendo al nombre de Wootang. Sin embargo, esos viajes cada cierto tiempo lo ayudaban a reconectarse con su cultura y más ahora que se encontraba tan lejos, además de que siempre lograba traer consigo una que otra serpiente con la cual se hubiese encariñado.

 

Sus brazos lucían más bronceados que de costumbre, eso se debía a los externas jornadas bajo el sol mientras relizaba su actividad favorita: pescar. Lo único que no había cambiado era su humor y el saber que de nuevo debía tratar con esos personajes del Ateneo, sumado a los aprendices, hacían que se replanteara su posición allí, pero al recordar los motivos de su permanencia se conformaba con asustarlos y ponernos el situaciones de peligro que les hicieran desistir de la idea de aprender la habilidad o al menos amenazarlos con ser el alimento de Wootang.

 

— Seguro no tarda en llegar —, dijo el Vietnamita en perfecto parsel mientras degustaba un cuenco de arroz a la orilla del río. Una serpiente habitante se subió por el brazo del anciano hasta su hombro, mientras Lawan tomaba un poco de arroz con los palillos para alimentarla —Las tengo muy malacostumbradas —comentó con desgana arrastrando las palabras —. Por hoy prefiero que me busquen —. Echándose hacia atrás Lawan recostó su espalda sobre la hierba, ajustó su Nón Lá de tal manera que le tapara los ojos y se dispuso a tomar una corta siesta, no sin antes darle una pequeña orden a la serpiente que recién había alimentado —Ya sabes qué hacer —agregó.

 

Linh debía buscar a Shalyit, la nueva aprendiz de Lawan que no tendría idea de cómo comunicarse con ella, por lo cual sería muy difícil para la bruja lograr que Linh le indicara el camino hacia el Arcano, pues primero debía ganarse el respeto del reptil y discernir entre las buenas intenciones que ésta tuviera.