~Mansión de la Familia Gryffindor~ (MM: B 104490)

[Ludwig Malfoy]

Había llegado el momento, nunca se había sentido en una situación así. Claro que antes había estado unido muy estrechamente a alguien y bastante enamorado pero ésta vez era diferente ya que sabía que una clase de vínculo así no podía romperse. No se trataba como sus anteriores relaciones amorosas en las que estaba más que acostumbrado a ser dejado por otras personas. En esta ocasión se trataba de unirse a alguien que simbolizaba más que un amor. El rubio bien sabía que las amistades eran para siempre, eran familia escogida.

-Listo estoy – dijo ahora más seguro que antes y sacando su varita tocó la punta de la de la Gryffindor y sonrió -  debo de admitir que no recuerdo mucho como hacerlo pero espero que quede bien – concentró toda su energía y su magia en aquel momento mientras cerraba los ojos y pensaba en vinculo.

Mientras eso ocurría una luz purpura salió de su varita y comenzó a crear un lazo mágico que unía a Mica y Ludwig como si de alguna manera los estuviera atando. También parecía reaccionar a la varita de la chica pues de alguna manera ambos lazos deberían de unirse así que esperó a que la chica hiciera lo mismo para ver lo que ocurriría.

 

 

@ Mica Gryffindor

[Mica Gryffindor]

Él aseguró estar listo, y fue quien dio el primer paso, uniendo su varita a la de ella. La Gryffindor supuso que él estaba pensando en aquella magia que los guerreros Uzza les habían transmitido, así que lo hizo de igual modo, cerrando los ojos, concentrándose para lograr el deseado vínculo. Pese a tener los ojos cerrados, pudo percibir el destello que la obligó a abrirlos, para observar cómo aquella magia milenaria la enlazaba definitivamente a Ludwig. 

Fueron apenas segundos, en que aquella magia los envolvió, los enlazó, pegándose cada vez más a los cuerpos de uno y otro, hasta parecer ser absorbida por ambos. Sus verdes ojos se centraron entonces en los de su amigo, sintiendo la paz que le causaba su presencia allí. Sabía que ahora estarían conectados para siempre y eso le generaba al mismo tiempo varios sentimientos. Por un lado, la tranquilidad de poder siempre estar para defenderlo, por la felicidad de saberlo en su vida, la certeza de que siempre estaría allí. 

-Gracias -susurró simplemente, extendiendo su mano para tomar la de él. No sabía qué más hacer o decir, no tenía idea de cómo continuaría todo entre ambos ni qué intenciones tendría el Malfoy, pero no se atrevió a hacer preguntas. 

@ Ludwig Malfoy

[Luna Gryffindor Delacour]

Luna Gryffindor Delacour- Visitando a Elvis.

 

Caminaba como tantas otras veces sin rumbo fijo por Oterry, hacia 1 año que vivía con su mejor amiga Ada en su hogar de Francia y visitaba ocasionalmente a sus padrinos, Malum y Eterno, pero por alguna razón sin importar las nuevas personas que la cuidaban o lo muy feliz que viviera con su nueva familia sustituta, seguía pensando en la mansión Gryffindor, la misma que ya no era su hogar, suspiré pensando en porque debía de ir allí, mis pies se dirigieron solos hacía la Gryffindor y me quede en la entrada, sin atreverme a cruzar el umbral de la puerta, podría tocar el timbre, llamar a la tía Mica y rogarle que me dejará entrar, pero esta vez ese no era mi destino en concreto y no quería que me echaran de mi hogar de nuevo.

 

Me arme de valor y cruce la reja de entrada, la que era custodiada por los leones, sonreí cuando no me impidieron entrar ahí, ¿La tía Mica había cambiado de opinión? me encogí de hombros y vi como el viento arremolinaba mis cabellos pelirrojos, hice algo que hacía años que no hacía, corrí hacía la tumba de papá, parecía que el tiempo la había llenado de hojas, pero aún así se veía desde la distancia, supuse que Mica o Mael no me podrían echar si mi destino era solo visitar a Elvis ¿no? tardé más de la cuenta en sentarme a su lado, de acuerdo, solo estaba sentada al lado de una piedra fría y sin nada que hacer, tan inmóvil que cualquiera pensaría que me había muerto, si no fuera porque estire mi mano blanca y delinee despacio el nombre de papá, decidiéndome que le contaría primero en esa visita intempestiva.  

 

- Hola papá, hace mucho que no te veo ¿me recuerdas? de acuerdo, preguntarle a una lapida si la recuerda es algo inútil, por aquí esta todo más o menos igual, ya no estoy en la Gryffindor, vivo en la Chateu Dumbledore con mi amiga Ada, aun me culpo por tu muerte, ¿Qué más? estuve mucho tiempo fuera de la ciudad, en Francia con mi amiga, no quise volver a la que era mi hogar, ya no se siente así desde que te fuiste, sigo trabajando de Auror, tengo muchos más amigos que antes pero los descuidé demasiado, ¿Crees que la tía Mica en algún momento me volverá a querer? de acuerdo, esto es inútil, no me dirás ninguna palabra de aliento y es algo tonto por hacer no te conté, estoy ayudando a Lud a que se recuperé pobrecito tiene un problema del corazón pero ya se pondrá bien o bueno eso espero, en Francia ayude con las relaciones internacionales con Inglaterra, luego seguí viajando por el mundo, fui a Italia y a España en mis vacaciones, ¿te conté la vez que me opuse a una ley que prohibía las relaciones con los muggles? por suerte cuando Lud fue elegido abolió esa ley, igual hizo el día de la expiación que no me gusto mucho, permitió que muchos hicieron destrozos por doquier, yo ayude en San Mugo a patrullar y cuidar que nadie entrará para lastimar a los enfermos, me asignaron allí con mi amigo Hades y pues esto es todo por ahora, ojala algún día pueda volver a casa y por Merlín, ¿te das cuenta que parezco una loca hablando sola? te pondré algunas flores para al menos que sepas que vine a verte ¿si? - le comenté a la carrera solo recibiendo el murmullo del viento como respuesta -

 

Levanté las flores que traía en mi mano derecha, era un conjunto de girasoles muy lindos, olí las flores mientras cerraba las ojos pensando en días mejores, en cuando las poníamos en una mesa y festejábamos que todos estábamos unidos, negué con la cabeza y deposité las flores con cuidado en su tumba, sacando las flores anteriores que ya estaban marchitas sobre su tumba, ¿Cuánto hacia que nadie visitaba a Elvis? ¿Por qué había dejado de venir? sabia que al principio, todas las noches venía a escondidas para verlo, aun con riesgo de que me descubrieran y me echarán de la casa sin pensarlo dos veces si quiera, luego había dejado de venir, más preocupada por hacer dinero y devolverle algo a mi amiga Ada, además como esté ya no se sentía mi hogar tenia miedo de que Mael o Mica me sacarán corriendo si me veían merodeando por ahí, todas esas cosas habían hecho que hacia demasiado tiempo que no le rendía ningún homenaje, más que en sus cumpleaños o aniversario de muerto, que le ponía girasoles en un jarrón para honrarlo y le prendía alguna vela blanca, simplemente para decirle de esa forma que nunca lo había olvidado.

 

Me quedé allí sentada, no me importaba que se hiciera de noche o que el viento estuviera soplando más fuerte, nada de eso podía afectarme, al fin y al cabo, era un vampiro y el clima nunca me sería impedimento para nada, no sabría decir que me impulso a ir a verlo, tampoco podía explicarle a nadie porque me estaba quedando para hacerle compañía, solo sabia que tenía una paz que no conseguía desde hacia mucho tiempo, por eso me prometí visitarlo más seguido y quedarme todo el tiempo que quisiera, no me importaba si alguien me veía, al fin de cuenta, nadie podía impedirme visitar a Elvis tanto como quisiera, o eso fue lo que me dije para quedarme en silencio al lado de su tumba, como si el viento mismo me diera una respuesta a todo el lio en que se había convertido mi vida desde que mi papá salio de ella para siempre.