Cierre de SLE II: Camino a la Copa del Mundo

[Martin N Roses]

A pesar del agitado momento que les había tocado vivir aquella noche, Black ya se encontraba sereno y confiado. Lamentablemente no tenía la mejor de las respuestas posibles con la bruja.

—Indicios y muchas sospechas, pero poco más que eso. No nombres, o mejor dicho, muchos nombres en una lista de potenciales culpables... Pero no más que eso. —La mirada de preocupación de Mica era un reflejo de la propia—. Debemos investigar, a nivel europeo, el paradero de los dos equipos fantasmas del pasado campeonato. Esperemos que las Harpías y los Cuervos no repitan esa tendencia. —Se permitió sonreír durante un segundo, para luego volver a su semblante endurecido.

De forma distraída, tomó una de las manos de la bruja.

—Me alegra oírte. ¿Muchas responsabilidades? —Black no quería preguntarle mucho sobre la Orden del Fénix. Si bien su etapa en aquella organización había sido buena, su paso al costado lo dejaban al margen de las cosas tratadas allí dentro. Pensando en el Mundial y en lo mucho que lo emocionaba a él dar aquella noticia, le agradaba saber que la experimentada cazadora y capitana de las Urracas estuviera dispuesta a embarcarse en esa aventura.

Sonrió ante la acusación de culpabilidad, y entornó los ojos.

—Aun recuerdo tu vuelo magnífico con la túnica de Jupiter Justice y como eso te catapultó a liderar al equipo más ganador de Gran Bretaña. Ante la ausencia de Gales e Irlanda, espero que tanto Inglaterra como Escocia dejen bien parado el nombre de nuestras islas. —También tenía un sentimiento especial por Francia, debía reconocerlo. No era sólo por el hecho de que su joven primo jugara en la selección, era porque parte de su sangre provenía de aquellas tierras y era difícil de ocultarlo.

«Y Rusia...»

El conflicto con los rusos había escalado a una dimensión impensada, pero eso debería resolverlo a futuro.

—¿Te quedarás a degustar el banquete? —Miró de repente hacia el sitio donde había dado el discurso de presentación, allí donde las personalidades más importantes del continente se habían reunido.

[Mica Gryffindor]

Asintió. Deberían investigar lo sucedido, sin asumir culpables tan solo por ideas previas. Se encargaría de ayudarlo a saber el origen de tales movimientos, pues hacían también a su misión como Líder de la Orden. Se sorprendió al escuchar nombrar los nuevos equipos, había visto pasar a unas muchachas desconocidas y bastante jóvenes, mas no las había asociado con el deporte en forma directa.

El breve instante en que él sonrió la hizo sonreír también, había tenido el honor de ser testigo privilegiada de esa bonita sonrisa en múltiples ocasiones, cuando aquel escudo de hielo autoimpuesto por Black se lograba derretir y darle paso. Deseó, en ese momento, que los breves segundos de verlo sonreír se volviesen eternos. Lo extrañaba, más de lo que admitiría.

El contacto de su mano con su mano la sorprendió, pero se sintió muy cálido. Se permitió entrelazar los dedos con los de él mientras conversaban.

-Más responsabilidades de las que desearía tener- suspiró, por momentos quería que sus únicas preocupaciones fuesen lograr mejores dribles frente a sus rivales, o mejorar su puntería a la hora de intentar un disparo. Pero no. Había mucho más que eso en su vida, demasiada gente que confiaba en su criterio a la hora de accionar. Eso la volvía loca por momentos.

Una nueva sonrisa asomó tras la coraza, antes de hacer alusión a aquel primer partido en el que debutó con Jupiter Justice y posterior incorporación en Montrose Magpies. Inconscientemente se mordió los labios, al tiempo que sentía sus mejillas ardiendo de pronto. Sabía que sus adulaciones eran tan solo para convencerla, definitivamente, de jugar en el Mundial. La irritaba un poco que supiese cómo manipularla de aquel modo y, al mismo tiempo, le gustaba que tuviese ese conocimiento.

-¿Es su modo de invitarme a cenar, señor Black? ¿O tan solo intenta librarse de mí al enviarme al banquete? -bromeó ante la alusión a la siguiente parte del evento. Se quedaría, claro estaba. Se quedó un momento contemplando aquellos ojos grises, intentando saber más de él, pero sin atreverse a preguntar. ¿Tenía derecho de hacerlo? No estaba segura.

@ Martin N Roses

[Ada Camille Dumbledore]

 

La velada estaba tranquila, fue bastante curioso el incidente de la copa que había sido robada, pero en realidad no había sido hurtada en ningún momento cosa totalmente confusa para mí pues no era normal que este tipo de cosas sucediera en eventos así. Pero bueno ya que todo se había solucionado espontáneamente pues no había nada más que disfrutar de las delicias de una celebración y más si el quidditch era la idea central del evento. Me sentía más que nada agradecida por la cordialidad del Ministro Británico @ Rory Despard , a quien le debía una reunión privada donde pudiéramos conocernos más a fondo, pues apenas le había visto en algún par de ocasiones y no habíamos tenido la oportunidad de hablar como era necesario entre dos naciones vecinas. 

 

Con la distracción de mi cercano y viendo que el equipo llegaba, recibí el saludo de mi querida hermana y con una abrazo fraterno salude a  @ Malum Luxure , mientras me dedicaba a otra copa. Ella y el Capitán del equipo @ Tazz habían sido requeridos por alguien y yo pues sin querer interrumpir a nadie me quede cómodamente en mi silla de la mesa de Black Serpents disfrutando d e una maravillosa copa de Champagne, al fin y al cabo era momento de tener paz y tranquilidad. 

Editado 20 de Febrero del 2022 por Ada Camille Dumbledore

[Martin N Roses]

Auxerre se sintió algo abochornado por las palabras de Mosquito. En realidad, luego de la derrota que le supuso a Montrose Magpies caer a manos de los Tornados, una extraña sensación lo había invadido. Pero era natural, era el efecto de haber perdido un partido importante sobre un rival que con el paso del tiempo se había transformado en el clásico. Al día siguiente los pensamientos negativos se habían ido apagando hasta entonces, de eso se trataba el deporte, de pensar en el futuro, los nuevos horizontes existían para vislumbrarse y perseguir nuevos objetivos.

—¿C-cómo? —inquirió algo confuso. La miró fijamente, intentando entender lo que pasaba por la mente de aquella joven que tanto le producía.

Apelando a la misma valentía que adquiría sobre una escoba y rodeado de personas, Auxerre dio un paso hacia ella y con ambas manos apoyadas en sus mejillas, entornó los ojos mientras depositaba un beso en los labios de Aedis. Fue un roce similar al experimentado en su dormitorio, previo al inicio del campeonato, pero al mismo tiempo era diferente: ahora estaban rodeados de personas y poco le importaba.

—Espero que no dudes de lo mucho que me agradas —le dijo a apenas unos milímetros de su boca, mientras sus ojos entre azules y verdes la miraban con detenimiento.

Que fuera la estrellas de los Tornados y encima la capitana, hacían la relación de cierta forma compleja. Pero no por ello iba a reprimir los sentimientos que la bruja le provocaba.

La conversación derivó hacia el incidente inesperado y el mago de cabellos blancos negó levemente.

—Tampoco es que sé mucho. Un desconocido quiso hacerse el listo y estuvo a punto de dañar a varias personas. Para fortuna de todos, pudieron detener el avance de su magia maligna. —El joven francés indicó con su brazo izquierdo el lugar donde el reloj enorme de la torre, encima de donde se encontraba la tarima principal, mostraba claras señas de haber sido dañado—. Hay rumores de que quisieron robar la copa... Yo quisiera «robarte» la copa pero dentro del campo de juego... —Le sonrió y entonces pensó en el mundial—. Será excitante enfrentarte en Brasil —admitió.

[Ada Camille Dumbledore]

 

 

La noche estaba tornándose algo aburrida, los miembros del equipo se habían ido, mi queridísimo hermana y los demás, hasta el Capitán habían acudido al llamado de alguien que pedía la presencia de los capitanes. Amaba el quidditch pero mi pasión era más en el campo y demás, no me interesa estar más en reuniones… además era una gala!

 

Era el momento de la celebración, nosotros habíamos llegado hasta la semifinal, lo cual había sido bastante bueno y eso nos había unido más en equipo. Llamé al mesero y le pedí otra copa, me aparte de la mesa y me dirigí hacia una de las ventanas, delante de ella había un balcón y abrí la ventana así accedí al balcón. Salir al frío parisino había sido maravilloso, estaba acostumbrada a sentir el frío en el rostro en mi hermosa ciudad, cerré los ojos para disfrutar el momento. Mi ciudad tenía encanto hasta en el frío y el clima invernal le daba un encanto muy singular, el Sena se veía con un caudal alto y con trozos de escarcha encima, lo cual era bastante singular… pues París parecía una pequeña esfera navideña de esas que se regalaban de recuerdo. Las hermosas luces fulguraban titilantes en el horizonte en la ciudad le daban un encanto maravilloso.

 

Editado 25 de Febrero del 2022 por Ada Camille Dumbledore

[Mael Blackfyre]

Me estaba aburriendo, como en muchas otras celebraciones, donde no había tenido más opción que irme. Pero tenía que admitir que aquella pequeña jugarreta antes que empezara la ceremonia me había quitado todas las malas energías que podría haber llegado a acumular. Había pasado desapercibido o al menos nadie podría haber hecho nada, como pasaba en los últimos años. Aquel sitio era realmente era tranquilo y encantador, así que decidí ir a dar unas vueltas y tal vez encontrar algo con qué entretenerme (y llevarme, si así lo deseaba. ¿Quién iba a evitarlo?)

En algún rincón solitario encontré el momento para convertirme en mi forma animaga. Levanté vuelo como un búho, escapando de aquel sitio donde la gente solo estaba parada y aburrida hablando. En algún momento del evento, los capitanes habían recurrido a una reunión, por lo que se había despoblado todo por unos instantes. Sobrevolé ése sitio, dejando abajo a los árboles y las personas. Aleteé algunas veces emitiendo el chillido correspondiente y pude ver a un costado algunas ventanas y balcones. Tenían mejor vista y todo era más tranquilo. En el momento que estaba por aterrizar en uno de los balcones, la ventana se abrió mostrando a una de las brujas más hermosas que conocía en aquella comunidad. Ésta al parecer estaba buscando un lugar tranquilo. Tal vez podríamos compartirlo. Aterricé en el borde del balcón, convirtiéndome en mi figura humana.

— Espero que no te moleste compartir éste sitio. Me parecía tranquilo estar un poco acá —le dije a Ada Camille Dumbledore, aquella mujer que había visto un par de veces el año anterior con mi madre, en Quidditch, en algunas reuniones del Ministerio de Magia e incluso compartiendo algunos ideales tenebrosos. Me había quedado sentado en aquel borde, que era de una madera ancha, tan blanca como la nieve. No me interesaba quién estaba dentro pero desde allí teníamos una agradable vista—. ¿Todo el tiempo éstos eventos son así? Encuentros, alcohol y charlas aburridas.

@ Ada Camille Dumbledore

[Thoth]

"Creo que será necesario ordenar al equipo oficial de mi pais que se prepare, algo me hace suponer que un nuevo trofeo será obtenido par Egipto. " Pensó y comenzo a caminar,  este se alejaba poco a poco, en ese momento fue interceptado por un reportero, el cual le preguntaba sobre su rendimiento con los Blacks Serpents. Ante ello, el regente responde con franqueza.

 

-Fue un honor defender los aros del equipo, lamento si al momento de tomar el puesto no pude dar esos movimientos precisos, pero creo que es necesario reconocer a cada rival que algunas veces se gana y otras se pierde. - Hace pausa. -Aprovecho en anunciar a todos, que desde el momento que monte la escoba, tengo la dicha de anunciar que nuevamente en las escuelas egipcias se jugará al Quidditch, así como el fingimiento para mejorar al equipo de nuestro país. - Suspira. -Por ende, en caso de celebrarse a futuro la copa mundial, estoy seguro que seremos nosotros los egipcios quienes leventaremos dando ese honor a nuestro continente africano. - Y siguio dando ese discurso a favor de su pais, como aquellas medidas flexibles para ciertos deportes mágicos. 

[Malum Luxure]

Luego de esa "charla" de la cual había participado sin interés...volví con los míos, no iría al dichoso mundial puesto que Austria no participaba, entonces no me importaba en lo más mínimo, a ellos no parecía afectarle si me quedaba o no en la fiesta, así que que entendí que mi presencia no era necesaria en este lugar. Hice una mirada generalizada de los presentes y si la verdad necesitaba ir a Luxure para quitarme este color de cabello y volver al negro original, que tontería pensar que llamaría la atención con eso, yo no soy Lady y la verdad no me preocupa la estética a los ojos de los demás.

-Esto ya se puso muy aburrido...quizá dar de comer las truchas que había pescado la última vez a Cornelia sea más entretenido. -Hable conmigo misma en tono bajo, realmente lo que piensen de mí me tiene sin cuidado...podrían decir que estoy loca pero simplemente me resbala. -Es un gracias con hipocresía de los que te miran de afuera sin saber. - Me había vuelto filosófica en un momento o puede que sea el alcohol en mi organismo.

Caminé con elegancia a la mesa de los Black Serpents y allí se encontraban los jugadores de mi amado equipo, a veces las situaciones te hacen elegir opciones que no deseas, no iba a abandonarlos por que sabía lo que nos había costado reunir jugadores decentes para esperar el próximo campeonato, las traiciones se pagan con karma de eso estaba segura, las bajas son probables en todos los equipos y más con razones tan comprensibles, pero una falta de lealtad es una falla imperdonable.

Con esto de mi baja del próximo evento me daba la oportunidad de preparar cosas buenas para el equipo, tenía grandes ideas pero para eso dejaría la capitanía pues aquello era un poco pesado, a lo lejos vi a hermana y le sonreí, no vi a ministro lo cual me hizo sonreír aún más amplio, habrá desistido de querer entablar tratos con mi bella?, vi al actual capitán y me sentí contenta por él, aunque lo estaba mandando a la boca del lobo aún demasiado tierno, también noté a mi padre hablar con periodistas y en su voz el orgullo cuando anunció que Egipto volvería al quidditch, sin duda una gran noticia para el deporte...yo por mi parte lo apoyaría sin dudar tanto como a Francia esperando que alguno alcance la gloria desde la comodidad de mi hogar.

-Bueno mi gente me retiro pues no tengo más nada que hacer aquí hasta el próximo campeonato regular. -Anuncie con una leve sonrisa. -Debo ir a casa a quemar cierto regalo de paz que resultó ser una estafa.- hice una mirada a la persona en cuestión unos segundos. -Disfruten del resto de la fiesta.- Me di la vuelta y me fui con calma pues ya no tenía ni motivo ni ánimos de seguir perdiendo el tiempo ahí.

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 @ Ada Camille Dumbledore  @ Tazz  @ Mael Blackfyre  @ Azrael Lycan

Editado 7 de Marzo del 2022 por Malum Luxure

[Thoth]

Luego de terminar su entrevsita, esa que daba señales o indicaciones a su país. Este no pudo extrañarse con el comentario de la Luxure ( @ Malum Luxure  ) ¿Acaso la bruja se daba por vencido o era su jubilación? Pero meditando las palabras de la mismas, era seguro que ella se encontraba planeando algo, por ende no se preocupo, y si mando su plegaría a los dioses para que le acompañen en su camino, por lo que bajando su mirada, este le siguió para indicar un poco más, por ende antes que ella se marchará le expreso.

 

-Luxure.-

 

Aseveró, pero quizás la misma se marcho, por lo que camino algo apresurado a ver si encontraba en el exterior del lugar. Y sin saber, como algunos rumorean sobre ese evento, solo siguió su marcha, quizás se preocupo porque en secreto era su hija, por lo que ese detalle no era algo que se conociera, y más que algunos ya era extraño verle cercano a ella, y más porque se encontraba relacionado con Dumbledore. No obstante, solo se limito a salir, dejando a los demás metidos en sus asuntos, lo cual poco le interesaba, y viéndose a las afueras, volvió a pronunciar el nombre de la bruja, que en cierta medida esperaba que le diera una orientación sobre el como jugar, o más bien como liderar en caso que ella se fuera, este debería afrentarse a la posibilidad de liderar, algo que en referencia a la cooperación entre magos internacionales no le agradaba, él prefería gobernar con mano de oro, es decir, con belleza, dureza y elegancia.

 

[Ada Camille Dumbledore]

 

La noche estaba bastante fría, pero la vista de París desde el balcón de Hotel de los invalidos estaba preciosa. La nieve había cubierto con una alfombra blanca las calles alrededor y pocas personas se veían por ellas, algunas parejas a lo lejos caminaban abrazados muy juntos. Logre observar el vuelo de un ave, por la oscuridad apenas lograba distinguir que era una ave, ya al estar cerca pude ver que era un hermoso búho que bajaba de a poco al balcón a donde yo estaba. La sorpresa que me lleve a Mael sentado en el borde del balcón mirándome. Escuché sus palabras con una sonrisa.

-Si es bastante tranquilo y con una vista estupenda

Acote acercándome a donde él estaba sentado, recargue mis codos en el balcón y puse mi rostro entre mis manos. Me reí por sus palabras

-    La mayoría de veces, el truco está en compartirlas con alguien, pero existen momentos en que no tienes con quien hacerlo

 

Mi mirada se había perdido observando la torre Eiffel, la misma estaba iluminada con un tono naranja en ese instante.

-    Y que tal te trata París, ¿ si la disfrutaste un poco? Cuando quieras te doy un tour especial 

 

La verdad es que esta ciudad tiene tantas cosas que ofrecer, más que el cliché del romance
Solté con palabras calmadas, la verdad era que habían muchas cosas que amaba de aquí y eso era lo que más me atraía, que la ciudad se hacía amar
 

@ Mael Blackfyre

Editado 9 de Marzo del 2022 por Ada Camille Dumbledore