Retomando el control

[Ludwig Malfoy]

RETOMANDO EL CONTROL
Misión de Bando de la Orden del Fénix
Enero 2022

Guiados por una falsa esperanza de encontrar una cura para detener a los casos de neumonía férrica que azotaban a toda la comunidad mágica, varios miembros de la Orden del Fénix acudieron al llamado de un medimago que se hacía llamar Aldrich el cual se localizaba en una aldea de Dublín. Al llegar ahí se pudieron percatar que efectivamente los pobladores de aquella localidad se encontraban aparentemente sanos pero bajo el control del mismo sanador quien estaba convencido de que la única manera de salvarlos a todos era sometiendo al poblado bajo su control total.

Estando atrapados en el laboratorio de Aldrich, los miembros de la Orden del Fénix lograron identificar los ingredientes de su cura los cuales estaban hechos con magia oscura y poderosa, fue así que en un intento por detener al sanador, se vieron emboscados por toda la población de Dalkey quienes estando controlados tenían la misión de detener a los magos a como diera lugar. Ver mas.

A sabiendas de que enfrentarse a toda una población controlada no tenía un buen pronóstico, Ludwig Malfoy decide lanzar un expecto patronum en forma de gato para solicitar refuerzos. Esperando que la caballería pudiera llegar pronto, el equipo de sacerdotes, paladines y oscuros deberá encontrar la manera de resguardarse y detener los planes de Aldrich.
 

(*) Línea Cronológica de la OdF: Abril, 2021 - Octubre, 2021.

◈ ◈ ◈

Recuerden que este rol tiene un máster o guía, pero el desarrollo de la trama depende de ustedes. Les animo a que integren elementos interesantes, a que exploren situaciones que crean que pueden ayudarles a indagar en el perfil de su personaje. Y, por supuesto, deben leer y respetar los roles de sus compañeros, y entre todos debemos esforzarnos en unificar todos los aportes para que todos estemos en la misma página.

IMPORTANTE: La participación, interés, dedicación e iniciativa en esta actividad en rol son fundamentales para la obtención del conocimiento de bando al que estén optando. También es importante que lean el funcionamiento de las misiones para que sus roles vayan de acuerdo a la dinámica que seguiremos.

+Ver más sobre los Clanes de la Orden del Fénix
+Ver más sobre las Misiones de Clanes
 

Participantes de la misión

CONOCIMIENTO DE BANDO I

Oscuros • Control de Energía Interna

noe_snape
 

CONOCIMIENTO DE BANDO III

Paladines • Magia Sagrada

Cillian Hauhgton 
Mica Burke

Oscuros • Conocimiento de las sombras

Ludwig Malfoy Haughton 
Scavenger Weatherwax

Sacerdotes • Conexión natural

Ela Karoline

 

CONOCIMIENTO DE BANDO IV

Sacerdotes • Escritores del Aura

Luna Gryffindor Delacour

Editado 6 de Enero del 2022 por Ludwig Malfoy Haughton

[Luna Gryffindor Delacour]

Estaba tranquilamente en la mansión Gryffindor, leyendo algunos papeles de última hora y tomando mi te de naranja cuando un patronus de un gato apareció delante mío, a sabiendas de que me llamaban para una misión suicida dude de ir o no hasta allí, una duda bastante lógica si se sabe que una población controlada no sería fácil de ayudar o detener para el caso, pero el cariño que le tenía al medimago con quién había compartido las impresiones de la Neumonía Férrica, me hizo decidirme por ir hasta allí de una vez por todas. 

 

Enfundada en mi tapado violeta, mi pantalón violeta oscuro, mis zapatos violetas con tacón y mi camisa blanca me desaparecí hacia el lugar en cuestión, pensando en cómo podríamos ayudar está vez y si habría algo que pudiera hacer la bruja o no. 

 

Sus pensamientos eran lógicos y evidentes quería salvar a toda la población pero al estar controlada eso sería difícil y si fallaban? Suspiré pensando en que debería de tener fe en todos nosotros, después de todo, éramos una organización que se encargaba de salvar y velar por las personas así que, cómo podía dudar de nuestra valía? Tenía que tener esperanza en que realmente, mi buen amigo Lud jamás me mandaría a una misión suicida así que me arme del valor Gryffindor que me caracterizaba y suspiré al verme al fin en el lugar de reunión a sabiendas de que teníamos mucho que hacer aquel día. 

 

- Hola Lud mi buen amigo, las cosas parecen revueltas por aquí, para que soy buena? Válgame el cielo... Cómo pueden controlar a tanta gente?  Estas bien? No te pasó nada? Dos varitas son mejor que una así que estamos juntos en esto, y los demás? - Le dije feliz de verlo y deseosa de ayudarlo a que todo vuelva a la normalidad - 

 

El mago era uno de los pocos que solía saber seguir mi hablar rápido y lo consideraba mi amigo después de tanto tiempo de pasar juntos, me preparé con la varita en mi mano derecha, lista para defenderme o ayudar a como diera lugar y deseosa de saber cómo saldríamos de este entuerto, por lo pronto el pensamiento de que más de mis familiares vendrían a ayudarnos me dio paz, la paz que rara vez solía tener por estos días. 

 

- Entonces.... Cuál es el plan? Tu solo dime que lo seguiré, por lo pronto podríamos poner proteciones si quieres o no, como quieras, pese a todo estoy feliz de verte lo sabes no? - Le dije intentando pensar en un plan de acción y al mismo tiempo sacando el cariño que siempre le tenía - 

 

Sabía que lo teníamos difícil pero no imposible, mientras más seamos mejor sería lograr nuestro cometido y a la misma vez, seguía creyendo que las revueltas servían para entender cómo funcionaba el mundo o al menos, a mí me ayudaban a entenderlo, sin contar que fue gracias a las mismas que teníamos algunas de las mejores leyes de nuestro tiempo, así que me apresuré a pensar en un plan que seguir y porque no ayudarlo a como diera lugar, rezandole internamente al Dios de Rory porque nos ilumine y nos ayude en este glorioso día. 

 

[Cillian Haughton]

Cillian dejó escapar un pequeño suspiro, comenzaba a sentirse cansado. ¿Cómo es que lograrían salir de aquel problema? Tenían a todo un pueblo en su contra, todo un pueblo que sin duda estaba controlado por aquel hombre que ahora mantenían capturado. Ludwig se había quedado al frente, intentado ganar tiempo para que los demás intentaran sacar algo de información de Aldrich, pero al parecer lo tendrían difícil ya que algunos de sus compañeros simplemente habían desaparecido.

- ¿Qué le has hecho a toda esta gente, Aldrich? -inquirió una vez más al doctor que en aquel momento se veía completamente tranquilo como si nada de todo aquello lo afectara realmente.

Un segundo después Aldrich sonrió, creía que había ganado y Cillian comenzaba a sentirse realmente molesto. No iba a permitir que perdieran, no dejaría que Aldrich cumpliera su objetivo así tuviera que arriesgar cualquier cosa. No pregunto más a Aldrich lo que había hecho, en cambio decidió volver al frente, dejando al doctor a cargo de uno de sus compañeros.

- Vamos a terminar con todos ellos de una vez.

Si bien parecía ser que todo el pueblo estaba en aquel lugar, sabía bien que quizá algunas otras personas esperaban para tomar el lugar de los caídos. Se acercó hasta Ludwig y observó como intentaba mantener a sus oponentes a raya así que lo tomó de la mano para hacerle saber que estaba ahí para ayudarlo y bastó solo con ese sencillo gesto para sentir como su poder interior se hacía un tanto más fuerte.

- Staff of mercy -murmuró, invocando a un misterioso báculo el cual sostuvo con fuerza y apuntó con e mismo hacia sus oponentes. Un segundo después comenzó a sentirse como su poder recorría el báculo para después lograr su cometido.

El piso bajo sus oponentes se convirtió en arenas movedizas y estas comenzaron a succionar a los habitantes del pueblo que se encontraban dentro de su rango de acción los cuales eran la mayoría.

- Creo que ganaremos un poco más de tiempo, pero tenemos que lograr que Aldrich hable.

[Noeline Malfoy McFarlan]

Llevaba largo tiempo enfrascada en un libro de una autora muggle, no había levantado los ojos del texto por un sólo instante. Podría haber elegido el jardín de la mansión para ello, pero por esta ocasión había preferido quedarse al interior, en la biblioteca. Cada cierto tiempo sentía como uno de los elfos volvían a llenar la taza de té que tenía sobre la mesilla, algunos ya ni la saludaban, pues finalmente se habían dado cuenta que a la pelirroja le fastidiaban esos seres y cumplían su misión en el más absoluto silencio. 

En esto se encontraba cuando un patronus corpóreo se presentó en el lugar. El hechizo tomaba la forma de un gato, era la primera vez que lo veía en acción pera reconocía a quién le pertenecía, no cabía duda de quien era su autor, conocía el rastro de magia del mago que lo había provocado, y por si quedara espacio para dudas el patronus habló con la voz de su propio padre. Seguramente a ella y a muchos más los llamaban a una misión, era la primera desde que había decidido entrar a la Orden y no sabía que podía esperarse de aquello, al menos tenía la seguridad que la presencia de Ludwig le daba.

Ya en el lugar al que la había convocado, a más del de su padre encontró otro rostro conocido. Cillian, al que pronto llamaría de la misma manera, también se encontraba en el lugar. Y una bruja de vestimentas violeta que no había tenido el gusto de conocer con anterioridad era el único otro miembro de la Orden que les acompañaban hasta ese momento.

–Hola– es lo único que atinó a decir al acercarse mientras inconscientemente jugaba con un mechón de sus largos cabellos.

[Ludwig Malfoy]

Se encontraban rodeados y sin posibilidad de escapar, al menos sin utilizar la fuerza bruta, para los mago hubiera sido muy sencillo simplemente agitar la varita y poder deshacerse de aquellos muggles controlados, sin embargo como lugarteniente de la orden del fénix no podía permitirse caer tan fácilmente en esa clase de provocaciones, por el contrario debía convertirse en un ser de paz lo cual cada vez le estaba afectando más, Ludwig en su naturaleza siempre había sido violento y drástico con la forma de actuar, después de todo por algo había seguido el camino de la orden oscura y en aquel momento una sed de poder se apoderó de el.

Vio como Cillian con sus poderes de paladín había logrado detener a algunos de los pueblerinos en sus arenas movedizas sin embargo sabía que eso no los detendría de manera permanente pues algunos incluso comenzaban a caminar sobre sus mismos vecinos para poder alcanzar al rubio y a sus colegas fue entonces que después de durarlo mucho decidió hacer uso de sus poderes, sabía que tenía ahora el poder de invocar a cinco demonios tan poderosos que con solo verlos su poder podría volverlos locos y matarlos, debía ser cauteloso pues no quería provocar daños irreversibles. Fue entonces que concentrando toda su energía oscura cerró los ojos para decir – Daimōn.

El ambiente del lugar comenzó a volverse cada vez más oscuro y frio, y entonces de la tierra se elevó un espíritu cuyo nombre era Agramon, el demonio del miedo, parecía un fantasma cuyos ojos era amarillos y sin un tener que tomar una forma alguna miró a todos los habitantes que se encontraban ahí, los mismos inmediatamente se paralizaron pues vieron en sus pensamientos los peores recuerdos y miedos que alguna vez lograron tener, algunos incluso corrieron enloquecidos hacia sus casas y por primera vez la protección de Aldrich se rompió, estarían seguros por un rato pero debían quitar por completo el control mental.

-Rápido, Cillian llevemos a Aldrich a otro lugar donde los aldeanos no nos puedan seguir – fue hasta ese momento que pudo apreciar la llegada de Noe, su hija quien había decidido tomar el mismo camino de los oscuros y a su vez a su amiga Luna una fuerte sacerdotisa quien sin duda alguna haría el grupo más fuerte – me alegro que llegaran, hasta ahora la misión es ayudar a la gente a que vuelva a la normalidad y llevarnos a éste mago al Wizangamont donde será juzgado por sus crímenes debemos ser rápidos pues los aldeanos pronto descubrirán que todo fue una ilusión y volverán a atacarnos.

Miró a su hija quien apenas estaba aprendiendo a controlar su energía oscura, posiblemente no era la mejor situación para enseñar pero así Madeleine le había enseñado y ahora tenía que transmitir sus conocimientos a su hija – Noe, ha llegado el momento de que aprendas a controlar tu energía oscura, deberás encontrar la manera de vincularte con la misma para poder utilizar su poder al máximo, una vez que lo logres podrás adquirir una gran velocidad, tendrás la capacidad de controlar el cuerpo de otras personas hasta poder detener sus latidos cardiacos e incluso separarte de tu propia sombra y usarla a voluntad, usa tus habilidades con cuidado ya que utilizarlas de manera prolongada podrá debilitarte.

Acto seguido ayudó a Cillian a llevar al medimago, tenían que moverse a otro lugar, uno donde los aldeanos no pudieran encontrarlos para así sacarle la información que les ayudara a liberar a todos del control.

 

@ Cillian Haughton  @ Luna Gryffindor Delacour  @ noe_snape

[Luna Gryffindor Delacour]

Los aldeanos seguían bajo el influjo de Aldrich y me pregunté cómo podría ayudarlos a todos, se me ocurrió una idea que podría ser vista como descabellada o incluso peligrosa pero que pensándolo bien era lo único que nos podría salvar, escuché lo que decía y asentí pensativa, deseosa de ayudarla de alguna manera al menos. 

 

- Aigne - dije fuerte y claro sabiendo que lograría que mediante el control del Aura de Ludwing estuviera tranquilo y en paz y le mandé mis sentimientos esperando que surgiera el efecto logrado - 

 

Seguramente todos se preguntarían por qué se me ocurrió hacer eso en lugar de atacar o hacer otra cosa, la realidad era que sabía que el medimago podría luchar  mejor que yo y porque estaba guardandome mi poder para más tarde, barajando las cartas que podía usar para salvarnos a todos y pensando en un plan de acción que nos llevara a todos sanos y salvos a casa. 

 

- Juntos lo lograremos de seguro, no nos separemos mucho, nadie puede tener todo un pueblo a su merced, debe haber grietas... Podríamos encontrarlas no? Además de que salvaremos a los aldeanos como mejor podamos - Dije viendo cómo Cillian y Lud casi se encargaban de todo rápidamente - 

 

Les sonreí agradecida mientras preocupada llevaba a una señora a resguardo, hice lo mismo con dos niñas y sus padres que parecían aterrados de estar allí y me pregunté cómo estarían los animales al respecto, sintiéndo que realmente podríamos ayudar de alguna manera y pensando en algunas pociones curativas que tenía en mi haber en mi cartera y maldiciendo por lo bajo por no haberlas traído todas, al menos, un Herviboritarizante podría ayudarnos está vez y estaba feliz de lograr traer la paz a todos los de la aldea juntos, aún segura de que venceriamos más temprano que tarde y que éramos un equipo invencible, lo bueno de trabajar con amigos es que una ya sabía cómo actuaría el otro, así que no estaba asustada, solo alerta por si necesitaban más mi ayuda de nuevo. 

 

- Si podemos hacerlo y se que si estaremos a salvo en menos tiempo del estipulado... Lo saben no? Solo mantengámonos juntos y sin separarnos mucho si? - Les pedí pensando que más podía hacer mientras sopesaba mis opciones de nuevo - 

 

Vio como Lud le ayudaba a Cillian a llevar al medimago seguro que para curarlo o porque no para ayudarlo a volver a la normalidad, mientras tanto me mantuve con la varita en la mano, esperando haber que sucedía luego y con la certeza de que podríamos traer luz y paz a todo el lugar, a la espera de lograr nuestro cometido más temprano que tarde y feliz de que unidos todo saldría bien de un momento a otro o al menos, eso esperaba que pasara de ahí en adelante. 

 

@ Cillian Haughton  @ Ludwig Malfoy Haughton   @ noe_snape

[Cillian Haughton]

¿Y ahora qué?

Luna no estaba del todo alejada de la realidad, era imposible que todos en el pueblo estuvieran bajo el control de Aldrich, pero eso tendrían que intentar descubrirlo más adelante. Ahora tenían que huir de ahí ya que tenían de momento una oportunidad para hacerlo. Cillian saludó a Noe rápidamente, al parecer el llamado de ayuda que había realizo había surtido el efecto necesario.

- Gracias por acudir al llamado, Noe… Pero debemos ser rápidos, tenemos que buscar un lugar seguro en el cual sacarle toda la información sobre lo que esta pasando en este pueblo.

Cillian dio un par de pasos atrás y les pidió a todos que prestaran atención a todo lo que pasaba a su alrededor. De un momento a otro la protección que Madeleine les había brindado desapareció así que tenían que irse de ahí en ese momento o en un par de minutos estarían realmente en problemas.

- Yo iré al frente -anunció-. No pierdan de vista a Aldrich… Aspis Uther -Invocó.

Y utilizo la habilidad especial Luxna Evacure para tener una protección de cuerpo completo que devolvería cualquier ataque a sus contrincantes.

- Ellos no pueden ir más allá de los limites del pueblo… -Murmuró Aldrich.

Por fin decía algo, por fin soltaba un par de palabras sobre lo que estaba pasando en aquel lugar y sin duda aquella afirmación dejaba por completo el claro que el era el culpable de todo lo que sucedía en aquel lugar. Aldrich comenzaba a darse cuenta de que en aquel momento llevaba todas las de perder.

- Estamos casi fuera de los límites del pueblo….

El avance fue lento y algo duro debido a que aún había varios habitantes del pueblo que intentaban atacarlos, pero al final el grupo logró cruzar los limites del pueblo. ¿Qué pasaría después de aquello? ¿Contaría por fin Aldrich todo lo que había hecho en aquel pueblo?

[Rory Despard]

El patronus de Ludwig  alertando la situación de peligro en que varios miembros de la Orden se encuentran como parte de la última misión,  es el último eslabón en la mente de Rory, que termina conectando todas las historias extrañas que escuchó durante su cena navideña familiar sobre el poblado vecino de Dalkey, con un extraño mago que sus compañeros tienen por el momento, a su custodia.

En el Ministerio las cosas no están bien, y es evidente que su ausencia va notarse, pero alegando un serio dolor estomacal, el joven termina por irse, no sin cierta culpa interior por la mentira que ha tenido que inventar. Si bien desde antes de su elección, ya era conocida su pertenencia a la Orden del Fénix, por consejo de su asesor, Whisper, el pelirrojo ha tratado de minimizar ese perfil, en un intento por generar menos anticuerpos entre las clases acomodadas.

Es muy poco el tiempo que ha transcurrido para saber si está funcionando o no tal plan, pero deja de pensar en el asunto en cuanto pone un pie en el poblado, sorprendido de la enorme energía mágica desplegada en él, imperceptible para quienes no poseen lectura de auras, pero diáfana a sus sentidos. Lo más extraño sin embargo, es comprobar que las casas han sido abandonadas, e incluso hornos y otras actividades han sido dejadas a medio hacer. ¿Por qué? Cuando ve concentrada a un centenar de personas en un solo punto, encuentra su repuesta, pero además, como si de ondas rompiendo la superficie lisa de un lago se tratase, comprueba que mucha de la energía que en ese pueblo ha sido desplegada, proviene de esa edificación.

Todavía dubitativo sobre lo siguiente a hacer, de repente, una vocecilla tras de él lo sobresalta y le obliga a dar media vuelta para saber desde donde ha venido. Medio oculto, tras una verja, un niño de trece años le sonríe y junto a otra media docena de chiquillos lo llaman con las manos y se echan a correr ladera abajo. Rory sin entender del todo el comportamiento de ellos, los sigue y atraviesa con ellos campos escarchados hasta que finalmente, aquella rara "persecución" termina cuando todos ellos se detienen ante lo que parece un monolito de tres metros de altura, en el que incluso antes que los niños lo mencionen, identifica inequívoca una fuente de magia sagrada.

– Varios meses atrás, el sabio más antiguo interpretó en la rajadura de la piedra, una advertencia, una premonición que anunciaba que nuestro pueblo sería exterminado por la mayor de las pestes. Las personas se atemorizan a tal punto, que varias se quitaron la vida y otras ofrecieron al doctor Aldrich la suya, con tal de que él diera con una cura. Tiempo después, todos celebramos cuando él cumplió su promesa. Sin embargo, fue justo cuando el antídoto comenzó a entregarse, que nosotros los niños, los únicos en no ser inoculados, comenzamos a ver cambios en la gente, y en la tierra de nuestro pueblo, pero nadie nos creyó.

Rory sentía que lo que estaba viendo o era la pieza de un puzzle complejo que no terminaba de entender, o simplemente, el juego de estos niños sin supervisión adulta. Pero entonces, las voces conocidas de sus compañeros de bando se hicieron presentes.

De un modo inesperado, por fin los encontraba. El grupo era nutrido, pero el cansancio era evidente, especialmente en Cillian y Ludwig.

– Lamento llegar tarde. Entonces ¿Es él Aldrich?- atinó a decir señalando al hombre custodiado de cerca por Cillian, suponía que debido a que podía usar los poderes de paladin para mantenerlo a raya.

[Agnes Lynn]

Agnes Lynn

Le toma más de lo previsto sacudirse los efectos del Escendia, sus extremidades entumidas después de haber poseído ese árbol. Cuando su consciencia regresa a la realidad se da cuenta de varias cosas: el caos entre todos los habitantes ha aumentado considerablemente; más miembros de la orden del Fénix se han presentado para ayudar, entre ellos Luna Delacour, y el sólo ver a la sacerdotisa le da esperanza. Madeleine estaba en lo correcto cuando lamentaba la falta de sacerdotes en la misión, especialmente cuando son los más adeptos al leer a la gente.

También puede ver a Cillian, Ludwig y otra bruja a quién no reconoce arrastrando a Aldrich hacia un costado, no en dirección a su casa, sino hacia los árboles gruesos que la rodean. La multitud parece estar contenida por una bestia que le toma un par de segundos reconocer. Claro, el demonio debe ser obra de Ludwig. Agnes ha oído acerca de esa magia dentro de la orden oscura, el poder de traer seres demónicos hacia este plano de realidad con el pensamiento. No puede negar, al ver cómo el demonio mantiene a raya a los habitantes, que el control de estos seres tiene sus ventajas.

Entiende que con cada momento el plan se les sale más de las manos, y que el momento de actuar con paciencia y cuidado ha pasado. El caos que Aldrich ha causado debe ser detenido, y ahora está en sus manos el evitar que la situación se transfiera a otros lugares.

Le parece que conjurar otro demonio es innecesario, pero afortunadamente apenas leyó acerca de una técnica que puede ayudarle. Sin cerrar los ojos, recuerda a la Volkova. Tiene mucho que no la ve, pero sabe que si estuviera en su lugar, ella sabría qué hacer. Es una pena que la mujer esté demasiado ocupada en el norte del continente para venir a ayudarla. Controlando su respiración, se imagina un par de lobos, grandes, como los que su amiga le ha mostrado. Los lobos son leales y feroces, justo lo que necesita.

Poco a poco, como si se tratara primero de un eco, las criaturas de sombras empiezan a tomar forma, las sombras de los habitantes de Dalkey se fraccionan para dar paso a las bestias que aunque están compuestas de sombras, son tan sólidas como la tierra que los rodea.

»No permitan que nadie nos siga« Ordena al tiempo que empieza a correr detrás de los demás miembros de la orden. La visión de una anciana a su costado la hace añadir una instrucción más. »Nada de ataques mortales«

 No le toma mucho alcanzar a sus compañeros, el peso de Aldrich los obliga a avanzar más despacio de lo que normalmente se moverían. Una onda de alivio la recorre cuando se da cuenta de que entre sus distracciones han ganado un nuevo miembro.

— Rory, qué bueno es verte. — Exclama, algo cercano a la alegría en su voz. — Sí, este es Aldrich. No sabemos exactamente qué le ha hecho a la gente, pero necesitamos detenerlo antes de que se propague, o empeore.

Mira a sus demás compañeros. — ¿Tienen pensado llevarlo a un lugar en específico?

[Ludwig Malfoy]

La fuerza demoniaca que había adquirido poco a poco lo estaba consumiendo conforme más utilizaba sus poderes, se daba cuenta que el miedo que influía en los aldeanos le agradaba y deseaba que siguieran sufriendo para que de una vez los dejaran en paz, era una emoción desagradable pero que poco a poco iba adoptando y le recordaban su pasado oscuro. Para el rubio quien continuaba utilizando el poder del Daimón le comenzó a resultar incluso placentero. Sin embargo la pronta intervención del aigne de Luna logró calmar su sed de venganza y controlar los impulsos de hacer alguna barbaridad. El ambiente que lo rodeaba se fue calmando y alarmado volteó a ver a sus colegas esperando no haberlos alarmado con su poder.

-Gracias – dijo a Luna mientras continuaban por el camino – Luna tiene razón no puede estar todo controlado, la magia tiene un límite y debemos de encontrarlo lo antes posible – no fue necesario decir más pues Cillan se colocó al frente y con el escudo que había conjurado se dispuso a proteger a todos los miembros de la orden del fénix dejando así los límites del pueblo y permitiendo que Aldrich pudiera hablar de nuevo, era como si también al alejarse del lugar su conciencia hubiera recobrado.

-Es extraño y no quiero adelantarme a nada pero pareciera que éste medimago al alejarse del pueblo también ha recobrado la conciencia – comentó al grupo - ¿acaso es algo dentro del pueblo lo que está controlando a ésta gente? – no pudo continuar con su teoría pues pudo ver que alguien en las sombras se les había unido, levantó la guardia por unos instantes hasta que después pudo identificar que se trataba del apuesto ministro de magia quien se unía a la causa. El rubio sonrió y estuvo incluso tentado en ir a abrazarlo pues agradecía que se les uniera en el tiempo adecuado. Seguramente sus poderes de sacerdote ayudarían no solo a calmar a la población si no a encontrar el fondo del asunto.

-Llegas en excelente momento Rory, estamos a salvo por poco y tenemos al culpable pero no podemos dejar que ésta gente continue siendo controlada – miró justo a los pies del pelirrojo, se encontraban un par de niños detrás de ellos como protegiéndose de los demás – es claro que ésta gente tiene que ser liberada pero ¿Cómo? – mientras esperaban Agnes se encargó de realizar un par de protecciones extra, las criaturas de las sombras serían la perfecta distracción para que no pudieran seguirlos – tenemos que llevarlo al Ministerio de Magia para que responda por sus actos – contestó a Agnes – pero antes de ello es necesario saber como liberarlos.

Se colocó frente al medimago y supo lo que debía hacer, se encargaría de obtener la información a como diera lugar volvió a decir Daimōn ésta vez invocando a Lilith, la madre de los engaños, aquella demonio inmediatamente se metió en la mente del sanador prometiéndole todo tipo de tratos con tal de decir la verdad, poseído Aldrich volvió a hablar convencido de que hacía lo correcto.

-Yo nunca quise controlarlos deben creerme – dijo rompiendo en lágrimas – pero el espíritu ese mago tenebroso me convenció de colocar a la cura un fragmento de su alma, ustedes no lo entienden, ahora todos los habitantes son uno con el, todo el pueblo es un Horrocrux, yo solo hice lo que el me pidió – se cubría los ojos llorando – la única manera de derrotarlo es encontrar su cuerpo y destruirlo, sus restos se encuentran en…

Un flecha atravesó el cráneo de Aldrich justo mientras estaba por revelar el paradero de los restos de aquel mago tenebroso, al voltear uno de los aldeanos que había logrado alcanzarlos se encontraba sonriendo con un arco en la mano, sus ojos estaban inyectados con sangre y sus dientes amarillos sonreían, conforme iba saliendo del campo de fuerza su cuerpo se iba desintegrando pero aquella sonrisa no dejaba su rostro – lárguense mientras puedan ahora todos somos uno y uno somos todos, no hay salvación para nadie, ¡FUERA!

@ Luna Gryffindor Delacour  @ Cillian Haughton  @ Rory Despard  @ Scavenger Weatherwax  @ noe_snape  @ Ela Karoline  @ Mica Burke