Kahlan Blackthorn

— Digamos que ser despistado es lo tuyo. Claro que he traído dos obsequios, no pensaba dejarte mal ante los ojos de tu hermana —sonrió mirándole fijamente a los ojos. Parecía haber olvidado el encargó que le hiciera días antes. Comprar dos obsequios para la fiesta que se celebraría en el castillo Dumbledore y no olvidar que el más especial era para su hermana Ada. No quedaba duda de que en manos de una dama, todo era más sencillo que para un caballero. Desde escoger el atuendo que luciría hasta el brillo que destacaba en sus zapatos recién lustrados. James era algo especial para Hasani, pero no en el mal sentido de la palabra sino todo lo contrario. Ahí a donde fuera, siempre estaría para sacarlo de cualquier percance. No quedaba duda de que ambos eran seres sumamente competitivos, pero cuando los pendientes se acumulaban ciertas cosas escapaban de las manos. Le gustaba perderse en esos ojos azules que poseía el Australiano, eran un mar en calma que la transportaba hacía un sitio donde solo moraban los dos, alejados del bullicio de la fiesta y la posible oportunidad de ir a parar a brazos de la pareja equivocada. Aunque confiaba en sus instintos, deslizando su mano por su pecho acarició la zona izquierda de este. Justo ahí se encontraba un nexo muy especial que compartía con el caballero, el secreto que se develó dentro de la taberna. Sintiendo un calor agradable abrazar su corazón tal y como lo hace el aliento de un dragón, cobijando entre sus llamas una hoguera que espera permanecer ardiendo por siempre. Era extraño todo lo que le provocaba tenerlo cerca, costándole un poco de trabajo prestar atención al resto de los invitados. — Yo siempre estoy lista, corazón—respondió tomando el escudo que le obsequiaba. La suerte les había jugado una buena pasada dentro de la Gala de Halloween, alistando todo para un segundo encuentro y el mismo se perpetró dentro de la Gala de Navidad. Curiosa era la forma en que el destino maniobraba con tal facilidad la vida de las personas, colocándolas en el sitio adecuado en el momento justo. Eso les paso al par de hechiceros, intercambiar una charla amena en Noviembre y en Diciembre una revelación que dejaría boquiabiertos a propios y extraños y ahora estaban juntos dentro de esa fiesta. Para rematar el cuadro perfecto, la posible elección de una pareja idónea para la gala de San Valentin o quizás para algo mucho más serio y duradero—Dudo que ese mapa funcione, según entiendo la magia no te ayudará a obtener lo que deseas—comentó apretando el escudo con su surda—Tenerte cerca, ya me da toda la suerte que necesito—confesó dejando una imperceptible caricia en su mejilla. Le agradaban los desafíos y los peligros que acarreaban verse inmensa en ellos, jamás se negaría a tentar a la suerte y toparse al final del laberinto con el caballero que no abandonaba, ni por error sus pensamientos. — Nos veremos al final o quizás no—siseó llevando su mano hacia el pecho de James, sintiendo como una de las alas de los dragones reaccionaba a su tacto— Ellos saben donde estaremos, no importa que sea el mismísimo infierno aún ahí podremos encontrarnos y terminar caminando por la misma senda—tomando su mano con discreción dejaba su tacto sobre la piel del Australiano. Algo provocó que su sonrisa mutará en un gesto cargado de emoción, posiblemente era el mismo trance que lo atrapará dentro de la taberna. — No me digas, escuchaste la misma canción, ¿no?—ladeando la cabeza, no le buscaría la quinta pata al gato y esperaría paciente a que él, le explicará que era eso de la “tonada misteriosa”. Centrando sus ojos en el laberinto, soltaba la mano del caballero, el destino decidiría si la noche la pasarían uno cerca del otro o acompañados por alguien más. Su especialidad era ir contra los pronósticos, aventurarse a echar toda la carne al asador y obtener lo que deseaba costará lo que costará. Siempre lo elegiría a él por encima de todo y todos, no existía más opción que esa para la Nigromante y lo sabía con absoluta certeza— Siempre tú—expresó para después mirar el mapa que no le resultaría para nada útil. Era momento de jugar, perdiéndose dentro del inmenso laberinto, no perdía detalle de sus pasos. Guardándose el escudo de Gryffindor en su pecho, sentía la compañía de su pareja en todo momento, justo a su lado susurrándole cosas que solo ellos dos eran capaces de comprender. El tatuaje que llevaba en el pecho, ya no emitía ninguna clase de calor o movimiento, posiblemente las alas de los dragones descansaban dejando al destino hacer su labor. @@David James Dumbledore

El caos corría por sus venas, tal y como lo hacía la lava al ser expulsada por el cráter de un volcán descendiendo por la base de ese cuerpo rocoso. Todo se salió de control de un momento a otro, no había un solo atisbó de razón por parte de los alumnos que se pusieron a lanzar hechizos como desesperados. Posiblemente para demostrar de forma errónea su poderío dentro del mundo mágico, el accionar de James fue por demás puramente de protección para con la Vidente. Los ojos de la mujer admiraban el tesón que poseía el Australiano, pero no por eso caerían en los insensatos arrebatos de los otros magos. Proteger y saber que proteger, distaba mucho de ser lo mismo. Porque una a una las runas flotaron en el firmamento, brotando de ellas un poder que era solo conocido por la Macnair. El bien y el mal se encontraban del mismo lado de la balanza, solo restaba como saber inclinar la misma y no dejar que uno predominará sobre el otro. Le sorprendía la imaginación que Kaori, poseía asegurar que delante de ella no estaba la profesora de Idiomas & Runas Antiguas. Ladeando la cabeza, le causaba gracia ver como atacaban a seres que eran simples ciudadanos. El asegurar que pertenecían a una facción u otra, no derivaría en nada más que un juicio o ser acusados ante el órgano correspondiente—Si quizás sea un espejismo o un fantasma que se escapó del otro mundo—su voz sonaba desprovista de toda clase de preocupación. Su varita se mantuvo en la pretina de su pantalón, la misma no sería usada por la vampiro, si ellos deseaban quedar como los malos del filme no se los negaría. Varios duendes corrían despavoridos por todo el salón, agolpándose contra el boquete que estaba en la pared. Las criaturas seguían causando el mismo daño que al principio, ya que la magia que las controlaba no provenía de ninguno de los presentes en ese sitio. Todo esta siendo manipulado por seres superiores, no por nada los dioses nórdicos eran conocidos por crear destrucción masiva. Tyr emergía desde las profundidades del Inframundo, proyectando parte del poder que poseía y dejaría sentir sin el menor miramiento. Berkana marcaba el renacimiento en medio de todo ese caos, al concluir todo lo referente a la enseñanza impartida por la rubia. No existiría dato alguno, ni físico, ni mental que se pudiera grabar en los recuerdos de cada uno de los alumnos. Mannaz abrió una brecha entre la arrogancia y la persistencia, no le importaba tener que entregar todos los conocimientos que poseía respecto a esas tablillas de madera, si con eso acababa de raíz con el problema. —Podemos continuar con la clase o si lo desean, acaben de derrumbar lo poco que queda en pie—algiz reposaba en su surda. James y ella estaban bajo la protección de los dioses nórdicos, no necesitaba emplear la magia. La conexión con esos seres era inquebrantable, Inguz se aferraba a la piel de la Animaga. Se había transformado en un imán para dicha magia, conectándose al mismo por completo con James. El escudo invocado por las runas era mucho más poderoso que la magia tangible, porque residía en seres que contaban con el don de crear o destruir a placer todo lo que se les cruzará en el camino. —Todo comenzó de la nada, yo no me adjudicaré ninguna responsabilidad de lo ocurrido dentro de estas paredes. Quedará solo como un pasaje que poco a poco perderá nitidez en los recuerdos que crean que pueden generar en sus cabezas—poniendo su mano sobre el hombro de James, le hizo entender que la vía de la violencia desmedida no les conduciría a nada bueno. Inguz y Eihwaz los dotaban de fuerza y los defendían de todo, porque confiaban en que poco a poco la razón haría acto de presencia. Teiwaz y Ehwaz el guerrero que se movía dentro del pecho de ambos magos, no dejaría que algún daño fuera irreparable en los implicados. La voz del orador recobraba la compostura, devolviéndoles el aliento a los duendes que aún no lograban salir por el boquete. Tan pequeños y conflictivos a la vez, jamás entendería porque recaía sobre las manos de esos seres la economía del mundo mágico. Ni siquiera eran capaces de escapar sin ponerse el pie uno a otro, caso contrario el resto de las criaturas que al estar bajo el control del lenguaje que la Neozelandesa dominaba, no opusieron la mayor resistencia. El show terminó con aplausos por todo lo alto, al aceptar las demandas que cada uno de los países expusieron por medio de propuestas que serían analizadas a detalle por el consejo para darles una respuesta satisfactoria. @@David James Dumbledore @@Nate Weasley @ @

— Todo está sumido en un constante cambio—siseó al sentir las olas del mar chocar con la orilla de la playa. Recordando la gala de Halloween y Navidad, le costaba un poco sacarse de la cabeza la presencia tan arrolladora que poseía James. Era como verse así misma, pero desde los ojos de tan atractivo y misterioso caballero. Una conversación bastó para despertar un interés genuino entre ambos, no existían de por medio caretas o pantallas que escondieran lo que verdaderamente uno inspiraba en el otro. En el centro de su pecho, reposaba expectante y silencioso su tatuaje conformado por las alas de varios dragones, circulo perfecto que al sentirlo cerca le quemaba de un forma por demás agradable y placentera. — El tiempo ha sido benevolente y ha valido pena la espera—sonrió al recordar la forma en que siempre solía retarla. Todo para que Hasani admitiera cosas que elevarán el ego del Australiano, pero eso era lo divertido de tan peculiar conexión. Saber como llevarse sin caer en la monotonía, rumores o chismes mal intencionados que pudieran afectar de alguna forma la relación que estaba comenzando. Le entusiasmaba la idea de ir más allá de lo permitido, aventurándose a jugarse el todo por el todo. El amor era muchas veces confuso, pero lo que estaba experimentando jamás lo sintió con nadie en el pasado. El mar era el sitio ideal para despejar cualquier clase de incógnita y tal y como se lo prometió. La sorpresa estaba lista, solo restaba que el invitado principal hiciera acto de presencia y la magia que ambos invocaban al estar juntos no tardaría mucho en hacerse palpable. Los elfos estaban terminando de colocar una mesa plagada de diversos platillos de todo tipo, además de una cantidad considerable de vinos de la más alta calidad. Su atuendo estaba compuesto por un traje de baño de dos piezas, resguardando bajo una capa traslucida que dejaba poco o nada a la imaginación. Recostándose sobre la blanca arena movía sus brazos sobre está creando un ángel con ese material. La brisa acariciaba todo lo que rodeaba a la Nigromante, deslizándose por su lozana piel se asemejaba a las manos de su pareja. Tocando con delicadeza lo más profundo de su ser, ahí donde el tatuaje le quemaba con una agradable calidez, al mismo tiempo que le recordaba que por siempre estaría conectada al Australiano. Bastaba solo una mirada para describir un mundo de sensaciones y emociones, extraño era que un ser como ella experimentará eso. Todo se lo debía al caballero que rondaba por sus pensamientos en todo momento, mudándose a su cabeza para habitar en ella sin previo aviso. — Aún me debes lo de la taberna—musitó recordando el reto que le lanzará entre líneas. Atreviéndose a dudar de que era más peligrosa que un colacuerno húngaro, aunque tal comparación distaba mucho de lo que realmente era capaz la Vidente. El poder verse como una mujer diferente, alejada de la pose de mortifaga dura y recia que era conocida dentro de la comunidad mágica. Con el podía ser mucho más que eso, rompiendo sus propios esquemas. Entre ellos no quedaba cabida para los secretos o omisión de información, ya que de común acuerdo convinieron ser transparentes con respecto a sus sentimientos y las situaciones que pudieran intentar dañar o entorpecer el avance de la historia que recién comenzaba gracias a la gala de Halloween. @@David James Dumbledore

Holi :3 Vengo a pedir mi baja de la familia, realizare algunos cambios dentro de la historia de mi personaje y todo eso. Les deseo suerte y nos estaremos viendo por el foro. Saludos

Holi xD Pues procedo a cancelar la petición de pertenecer a esta familia xD. Digamos que le daré otro enfoque a mi personaje y bueno, así las cosas. Saiudos xD

¡Bienvenido! @einar Me presento, soy Juv y seré tu tutora durante tu paso por Hogwarts. Por ahora tu clase iniciará en febrero, dándote la oportunidad de realizar otros trámites que necesitas concluir dentro del foro y estos son la creación de tu ficha personaje y bóveda personal. Debes empezar con tu ficha de personaje y una vez aprobada aperturas tu bóveda. Ya luego puedes ir pasando por los diferentes topics de rol, inscribirse a una familia inclusive. Aunque tienes la opción de tener dos familias una serpia sanguínea y otra adoptiva. ¿Ya tuviste la oportunidad de leer el manual del foro? Te invito a que lo hagas, ya que dentro del mismo se encuentra explicado todo el funcionamiento del foro. Pero si al leerlo te surge alguna duda puedes colocarla dentro de este topic y los tutores te responderemos y orientaremos a la brevedad. O si prefieres hacerlo de forma más personal(?) nuestras lechucerías están disponibles para recibir cualquier consulta de tu parte. ¿Deseas rolear y no sabes con quien? Puedes mencionar a cualquiera de los tres tutores y te acompañaremos a rolear. Tutores: @@Matthew B. Triviani @Juv Macnair Hasani @@Syrius McGonagall Espero sea grata tu estadía enn el foro de HarryLatino.org. Nos leemos pronto...

Nick: Juv Macnair Hasani ID: 31143 Conocimiento: Adivinación Link a la Bóveda: Bóveda de Juv Macnair Hasani Link a la Ficha: Ficha de Juv Macnair Hasani

Hysy observaba a los recién llegados experimentando la necesidad de torturarlos, hacia demasiado tiempo que no veía la sangre correr dentro de la mansión Riddle. Posiblemente su larga ausencia dentro de Londres, le había cobrado de la forma menos agradable a la Nigromante presenciar la ceremonia de iniciación. Ella no tuvo que pasar por esos menesteres, agradeciendo a su linaje contar con la marca tenebrosa desde nacimiento, aquel tatuaje que se volvió nítido tras aceptar prestar sus servicios eternamente al bando tenebroso. —No creo que tengan la menor idea, pero tampoco las dos jóvenes que nos acompañan. ¿Estarán al tanto del monto que deben cubrir o me tocará darles una explicación grafica de dicho pago?—intervino sin sacarle los ojos de encima al par de caballeros. Tener sangre nueva corriendo por las venas del bando mortifago, siempre le daba una vitalidad renovada que perduraría por mucho tiempo. Centrando su atención de David, percibía un nexo recién cercenando con el bando contrario. Era sencillo para ella detectar esas cosas, desviando sus ojos hacia Syrius experimentaba la misma sensación. Abandonar las raíces que nos dan pauta para destacar dentro del mundo mágico, no debe ser una tarea sencilla de realizar, pero ellos demostraban haberlo logrado con entereza y tesón. Esperaba no tener que arrancar los vestigios de plumas que hubieran quedado en sus cuerpos con métodos sanguinarios, no descartaba el uso de alguno de los tantos instrumentos de tortura y pena capital que se encontraban dentro de su colección. —Poseen potencial, solo resta explotarlo al máximo y ver que tan benéfico es para las filas oscuras tenerlos aquí—su voz se había tornado más gélida de lo habitual. Posiblemente era el demonio que se resguardaba en su pecho, aunque no estaban permitidos dentro del mundo mágico. Este le acompañaba desde que se presentó a la prueba para obtener la habilidad de Nigromancia, renunciando a lo poco que quedaba de humanidad en ella. La pieza sobrante del rompecabezas finalmente se desvaneció delante de sus ojos, dejando en su lugar la cicatriz que le provocará la daga que se incrustará con letalidad en su pecho. —Elevarse para alcanzar la gloria—sentenció acariciando con las yemas de los dedos su nuca. Sintiendo la serpiente danzar sobre su nívea piel, desprendiéndose de sus labios un agradable quejido. La gloria costaba menos de lo que muchos pensaban o se imaginaban, solamente necesitaban tomar la decisión correcta y está les llegaría como lo hacen los obsequios en navidad. Hysy jamás sintió simpatía por es clase de presentes, simplemente se dedicaba a matar todo lo que se cruzará en su camino. Aunque jamás se atrevió a lastimar a ninguna criatura que descendiera de la noche, pero su especialidad era cazar a los muggles que se atrevían a deambular por terrenos pertenecientes a magos de alta alcurnia. Practicar un poco de tortura no era del todo descartable para la Nigromante, echaba en falta esos tiempos en los que la torre negra se veía engalanada con los gritos de sus victimas. Fenixianos caídos en el campo de batalla pero que para su mala fortuna terminaron sus días dentro de un oscuro cuarto. Nurmengard no volvería y ella lo sabía, pero el echar raíces dentro de esa prisión sin duda socavo hondo en la vida de la fémina, obsequiándole un sitio que seria su patio de juegos aunque sólo lo usará en sus viejas usanzas de torturas interminables. La voz de su líder le devolvía al recinto de golpe, desviando su atención a los compañeros de bando que ya conocía. Le tocaba aguardar por ordenes o instrucciones precisas, porque si por ella fuera actuaría por mero instinto, apagando su razón para despertar su animal salvaje cediendo de sangre fresca.

—Así es todo esto esta siendo manipulado por las Runas, cada palabra que sale de sus bocas es una mentira—explicó escuchado a Kaori. Su duda sobre si los animales, se veían afectados por el poder de las tablillas de madera, no fue tan complicado de explicar. Desviando sus ojos hacia la serpiente que siseaba con desesperación, le indicaba a la joven que dicha criatura estaba libre de toda clase de control mágico o rúnico. —Los muggles no son fáciles de controlar y suplantarlos era una tarea demasiado ardua. Tuve que tomar medidas drásticas hechizándolos, al terminar esta cumbre, no poseerán el más mínimo recuerdo de lo acontecido dentro de estas paredes—el tema de los duendes era cosa aparte. Ellos no estaban bajo ninguna clase de hechizo o control mental, no le convenía tener a esos pequeñines refunfuñando tras pasar el efecto del conjuro—Deben estar en sus cabales, no se pueden robar los bancos del mundo sin contar con aliados como ellos—indicó notando que la joven se mantenía resguardada en su trinchera. —El derecho que nos proporciona el dominar la magia, estamos por encima de ellos y lo saben. ¿Acaso cree que todo esto es solo una clase más?, si pudiéramos dominarlos de verdad, créame que no tendríamos que escondernos de los muggles y pedirles a los nacidos en su mundo que se refugien detrás de una pantalla de humo—la frialdad en las palabras de la Vidente era palpable. Para ella no eran nada más que piezas dentro de un inmenso ajedrez. Astuto acto realizado por Hobb, enviando a su fiel aliada una serpiente a obtener información que para el sería de suma utilidad. Macnair se mantenía sentada en su silla, deleitándose con todo el caso. Lo que era capaz de provocar una pequeña tablilla de madera, si se empleaba el poder que poseía de forma errada. Levantar toda una polvareda, desatando un conflicto de naciones que haría perder a muchos la credibilidad que durante años les costo labrar con sangre, sudor y quizás una que otra lágrimas. Era cuestión de enfoques, bien lo citó Nate usaban la sedición y eso ahora les jugaría en contra. El accionar del Weasley, no seria cuestionado por la Nigromante. Eso era justamente lo que ella buscaba obtener del mago, despertar su instinto protector y salvaguardar a los duendes, aunque eso le provocaba cierto conflicto de intereses. Los rayos comenzaron salir de la punta de las varitas de los hechiceros, ella por su parte no se quedaría con las ganas de aumentar el caos—Cinaede—exclamaba centrando sus ojos en el orador que seguía hablando de cosas sin sentido. Viéndose rodeado por un gas invisible que se colaba sin mayor dificultad por sus fosas nasales, afectando las vías respiratorias, cercenando estás se introdujo en su sangre dejando paralizado su sistema nervioso y circulatorio. No le quedaba demasiado tiempo de vida y al no poder lanzarse un Anapneo, las posibilidades eran mucho menos alentadoras para su persona. David no se quedó atrás atacando a la criatura que estaba sobre la lámpara de araña, dándoles a los duendes un motivo más para intentar escapar de ese lugar. Sus planes se habían derrumbado como lo hace una torre de cartas, esconder un golpe de estados debajo de la manga, no era la idea más creativa y menos proviniendo de seres como esos. No los consideraba dignos de manejar las arcas de los magos y brujas dentro de Londres, porque por una u otra no acababa de confiar en esos seres tan desagradables a la vista. Una a una las runas iban saliendo de la caja, el grabado sobre ellas destello con fuerza causando mas revolú del que ya se estaba viviendo dentro de esa cumbre. Tyr se elevaba victorioso por todo lo alto, demostrando de lo que era capaz aunque ya no fuera nada más que una deidad que no contaba con un cuerpo para volver a sumergirse en un campo de batalla. El tener una sola mano no le limitaba como un gran guerrero, pero su mala estrella lo hizo morir y dejar un legado que fue plasmado en una runa. Era como si el Ragnarok se hubiera desatado de un momento a otro, el control por medio de la magia dejaba a los mandatarios atados a cordeles que les sujetaban de las manos y brazos. Cual títere uno a uno iban y venían sin encontrar la salida, morirían dentro de esa realidad alterna, donde nada evitaría que las criaturas se dieran n festín por todo lo alto. @@David James Dumbledore @ @ @@Nate Weasley

Las reliquias de la muerte eran objetos de valor incalculable, justamente por eso eran codiciados por los mortifagos. Contar con ellas dentro de las filas tenebrosas, les dotarían sin dudar alguna de control y poder ilimitado dentro de la comunidad mágica. Hysy era la clase de persona que codiciaba demasiado dentro de lo permitido, jamás se saciaba con lo que poseía y sus desmedidas pretensiones siempre terminaban arrastrándole más allá de los limites que debía respetar. — El poder es el poder—relamía sus labios bajo la máscara. El tacto con el misma era agradable para la fémina, semejándose al tacto de las manos de un amante que deseaba demostrar su afecto. Ella poco o nada recordaba de esas muestras de cariño, justo por eso su lienzo blanco, le impedía experimentar eso que mucho se jactaban de presumir ahí donde iban. Su única satisfacción era provocada por la fuerza que imprimía en cada golpe que lanzaba contra la cabeza del espía. Su aversión hacia los topos era por demás evidente y que estos hurtarán valiosa información provocaba un desmesurado enojo en la Senescal de Caronte. Pero todo caería por su propio pero al caer la noche. Ahora debía esperar instrucciones o quizás aventurarse a ir en busca de sus compañeros de bando. Aunque tenía un punto en contra, no contaba con la ubicación exacta de su paradero. Emplear la marca tenebrosa para realizar el llamado, no le cuadraba del todo. Levantar una polvareda de la nada, no haría más que alertar a los que estaban detrás de los pasos de los mortifagos. Aunque en últimas fechas se movían amparados en un perfil bajo, al grado de hacer pensar que se extinguieron dentro del mundo mágico. Esa sería una proeza épica que no terminaba del cuajar del todo. Dándole carpetazo de momento al tema, volvía a centrar su atención en la piedra de la resurrección. El poseedor de la misma, le reiría de frente a la muerte, si deseaba humillarla en el proceso está no tendría cara con que refutar tal osadía en su contra. Lo mismo sucedería si la varita de Saúco reposará en su surda, lanzaría un sin fin de maldiciones elevando la taza de decesos dentro de Ottery. La idea era sumamente tentadora, pero el enviarla a la papelera de reciclaje le resultó absurdamente sencillo. Decantándose por su habilidad para la Videncia, no le impidió a su tercer ojo intentar mostrarle donde posiblemente estarían los Discípulas de Nosferatu. Nada dentro de su visión estaba relacionado con el trio de magos, pero si veía a lo lejos la prisión de Azbakan. Los rumores serían ciertos sobre el prisionero que perdió la vida detrás de esas rejas, llevándose consigo el paradero de la Piedra de la Resurrección. No le molestaba la idea de arrancarse las uñas rascando las piedras para dar con tan preciado tesoro. Pero era mucho más sensato emplear la magia oscura que le corría por las venas, posiblemente echar mano de su grimorio y contar con la asistencia de algunos entes descarnados. Esperar era tortuoso para los muggles, pero en su caso le daba el tiempo necesario para planear su entrada y prestar sus servicios al bando que era su hogar desde siempre. Siempre acudiría al llamado de la marca tenebrosa, jamás podría negarse al ardor que abrazaba su nuca, percibiendo el danzar de la serpiente sobre su marmórea piel, provocándole una agradable sensación que se eclipsaba al adentrarse está en la boca de la calavera que era su morada.

La caída de uno de los Fenixianos más influyentes llegó a oídos de Hysy, regodeándose ante el acto perpetrado por su líder. Lamentaba no haber podido estar presente en un acto tan especial y rimbombante. Pero las misiones de matanza y tortura que pesaban sobre sus hombros, no podían ser postergadas más tiempo del debido. Quizás se tomaría el tiempo para ir al sepelio, pero no lo daba por sentado anotándolo en una imaginaria agenda que llevaba mentalmente. — En algún momento iba a caer. Lástima que fue más dolorosa la caída, que ver su ego inquebrantable, destruido y arrojado por los suelos—la sonrisa que se dibujaba en sus labios, se perdió detrás del lienzo que era su máscara. Protección que iba más allá de esconder su faz de los curiosos, para ella eso implicaba aferrarse a la inexistente capacidad de emitir cualquier clase de emoción o sentimiento. Hysy iba mucho era mucho más que un mote para darse a conocer dentro de las filas oscuras. Lo mismo ocurría con el significado que le asigno, faceless sintiendo como el tatuaje plasmado en el lado izquierdo quemaba con fuerza. Caín el hermano de Abel, el sujeto que le arrancará la vida a su contraparte. La misma tónica era empleada por Hysy, sacarse de encima a los familiares que consideraba inferiores a ella. Larga era la lista de los asesinatos perpetrados por tu persona, amigos o enemigos, pero el más atroz lo sufrió su hermano menor. La sangre que se impregnó en sus manos tras clavarle una daga en el pecho, no hizo más que aumentar el odio que el despertará en ella desde su niñez. —Algunas cosas deben hacerse si o si—deslizando la punta de su varita por la base de su máscara. Percibía levemente un escozor en su cuello, quizás la marca tenebrosa enviada por su líder aún no perdía su efecto y eran como ondas expansivas al lanzar una roca dentro de un lago. Haciéndose más grandes al desaparecer y perderse nuevamente en el caudal del cuerpo de agua. Sumergirse por un breve instante en ese trance, siempre le ayudaba a recordar el centro de sus objetivos, poder ilimitado dentro y fuera de Londres, aunado a eso el control total de toda nueva Zelanda y terminar de sellar las alianzas con los pauses que habían elegido seguirle en sus planes macabros. — Haremos que el mundo tiemble desde su centro mismo—revolviéndose en la silla, alargaba la mano para tomar la copa de bourbon. Australia era el primer sitio que iría a visitar, no olvidaba el pacto que tenía con el Primer Ministro de ese lugar, grandes dividendos le dejaría tal sociedad. Aunque le quedaba poco tiempo en el cargo, ya le había delegado su desaparición a un grupo de mercenarios que le fue ampliamente recomendado por un amigo sumamente especial para ella. Quizás no era el termino adecuado para referirse al caballero, pero la culpa recaía en la gala de Halloween. Aquel evento no le había dejado más remedio que tragarse su confesión, pero ya tendría tiempo de soltarlo todo y no quedarse con la duda de una respuesta negativa o afirmativa por parte del Australiano. Hysy abandonó la comodidad de su recinto en la Torre Negra, debía ir a enterarse de lo que pasaría con el cuerpo del Auror caído y de paso darle una merecida bienvenida a los nuevos magos y brujas que se unieron recientemente a las filas tenebrosas.

Hola Seba Te echo de menos, amigo. Justo en estos momentos me hace tanta falta un consejo tuyo, no ha sido sencillo seguir adelante con todo lo que está pasando. Recuerdo que una vez me dijiste que todo pasaba por algo, pero vamos hay cosas que me superan. Si tan solo por un instante pudiera volver a charlar contigo, te confieso que estás ganas de explotar se desvanecerían por completo. Te quiero y te extraño mucho T_T- Dios te bendiga allá donde estás

La oscuridad había sido su compañera desde siempre, ocultándola de la mirada de los curiosos. Sus pasos se dejaron sentir con autoridad dentro de Ottery, recordandole a ese sitio el dominio que su estirpe siempre tendría dentro de ese pueblo. La opulencia de las mansiones le rodeaba sin dejar que su rostro de viera empañado por las luces de los faroles que alumbraban de forma tenue el camino. Un antifaz que cubría solamente la parte superior de su marmórea faz, destacando sobre el color platinado sus orbes de dos tonalidades diferentes. La heterocromia era una condición que no le molestaba en lo más mínimo y aunque podía usar la metamorfomagia para remediarlo, prefería mostrarse tal y como era realmente. Faceless caminaba con elegancia por el adoquinado camino, jugueteando con su varita. Viéndose tentada a lanzar un par de maldiciones, no encontraba mejor forma para sacarse el malestar. Sus deberes como Primer Ministra de Nueva Zelanda, comenzaban a sacarle un poco de sus casillas. Una fiesta no era lo que tenía en mente, pero jamás rechazaba una invitación por muy tedioso que le pareciera socializar con personas que quizás jamás volvería a ver en su vida — El deber es el deber—siseó dibujándose en sus labios una lóbrega sonrisa. Esa clase de gestos eran característicos dela Vidente. Muestras de que era capaz de mutar su humor, cambiante como un camaleón, jamás se podía saber con certeza que pensaba o que se estaba cocinando dentro de su maquiavelica cabecita. Soltando una bocanada de aire, alisaba su capa de viaje acomodando el escote de su vestido azul oscuro, asegurándose que los tacones que portaba en esa ocasión fueran cómodos y le permitieran moverse con soltura y elegancia. — Aquí vamos—adentrándose en el recinto se despojaba de la fina tela que cubría sus hombros color nieve. Chasqueando sus dedos apareció una copa de bourbon, recordando que era le cumpleaños de Danny, no olvido comprarle un presente que sabría que le serviría en un futuro no muy lejano. Ese joven se había transformando en una persona de gran estima para la Nigromante, atrayendo vagamente a su memoria la última charla que sostuvieron. Aunque en esos momentos el tema no era trascendental para la rubia, sino que le causaba un poco de gracia ese momento tan peculiar entre ambos. Hasani recopilaba datos como esos sin pensarlo siquiera, volviéndose adepta a armar memorias que podría revisar cuando estuviera en la comodidad de su habitación el la Torre Negra. Perdiéndose en medio de la multitud lo que menos deseaba era ser notada en esos momentos, aunque era imposible logra su cometido con éxito. Poniendo los ojos en blanco se bebió la mitad del contenido de su copa, aunque no le afectaba en lo más mínimo consumir alcohol debido a su condición vampirica. —Ojala sirviera de algo, pero no hay caso—meciendo la copa con parsimonia terminaba el contenido de está. Rellenándola con magia se mantenía en silencio, percibiendo la presencia de algunas personas conocidas y otras que nunca tuvo el placer de tratar y realmente, no le interesaba hacerlo.

Siempre recurría al mismo lugar, aquel sitio que era su segundo refugio después de la Torre Negra. Seiryū paseaba en el jardín trasero, perdiéndose entre los árboles, quizás yendo en busca de algún aperitivo que le quitará el hambre. En su caso Hasani, no apetecía nada de comer, salvo que se tratará de una buena ración de sangre fresca recién extraída de una vena aorta. Sus placeres eran demasiado excéntricos, desde querer matar a todo lo que se le cruzará por delante, hasta devorar una buena cena aderezada con un bourbon del año más sanguinario que existiera en la historia del mundo mágico. Genbú recorría el cielo dando fuertes rugidos, posiblemente esperaba que la Vidente saliera de su encierro. Era común que sus dragones reconocieran el estado de ánimo de la mujer, intentando darle un nuevo aire a las decisiones que pudiera tomar en el futuro. Las cosas dentro de Nueva Zelanda se movían solas, no necesitaba pasarse el tiempo dentro de ese país y lo agradecía en verdad. Cruzando los pies sobre la cama, volvía a perderse en el oscuro techo de la habitación. —Como cambian las cosas de un momento a otro, nunca faltan las decepciones inesperadas—siseó desviando su vista hacia el joven que le miraba inquieto. Ver en ese estado a la Nigromante, no era común y le preocupaba lo que eso acarrearía al final del día. Los arranques violentos eran capaces de cobrar la vida de más de un infeliz que se cruzará en su camino. Su mente era un laberinto difícil descifrar, rearmando una pantalla en su marmórea faz intentaba no preocupar demasiado a su confidente. —Estaré bien, pero no puedo decir lo mismo de quién pagará por esto—la frialdad que se desprendió de sus palabras inundó toda la habitación. Algo en su interior cambio de forma radical, ya no sería capaz de confiar ciegamente en nadie y mucho menos depositar sus secretos en cualquiera que fingía ser una mano amiga incondicional—Ha sido un traspié, pero nada que no se pueda solucionara—afirmó saltando de la cama con astucia. Debía prepararse para la reunión que estaba por dar comienzo dentro de la Mansión Riddle, acomodando su dorado cabello sobre su hombro izquierdo daba los últimos retoques a su atuendo. Nada fuera de lo habitual unos pantalones de vestir ceñidos sus caderas, acompañados por un corsé que cubría lo necesario de sus atributos superiores. Sus características de piel sintética, siempre se decantaba por lucir elegante pero cómoda al mismo tiempo. Le desgradaba un poco la idea de asistir a la cena, posiblemente porque no tenía ganas de socializar o su humor le jugaba en contra en esos momentos. Cerrando sus ojos la Vidente le dio potestad a su tercer ojo para que hiciera lo suyo, visualizando cosas que le hicieron confirmar sus sospechas. —Así o más evidente la traición—ladeando la cabeza apretaba con fuerza sus puños, sintiendo la piel de sus nudillos abrirse un poco. Tronando su cuello en un acto reflejo, dejaba que todos los poros de su piel exudarán parte del odio que estaba experimentando tras esa visión. Abriendo lentamente se topaba con la mirada cómplice de Azai su fiel amigo y confidente—Debí verlo venir, pero ya no importa—acariciando su mejilla de forma imperceptible, le agradecía permanecer con ella la mayor parte del tiempo. —Siempre—tomando su mano dejaba un beso amistoso sobre la palma. Sabía que su nexo seria eterno, gracias a ella era lo que deseaba ser. Su compañero dentro del Ministerio de Magia de Nueva Zelanda y su apoyo incondicional junto con Hysy. Sólo podían confiar en ellos tres, nadie les conocía mejor y eso era una ventaja a la hora de poder dar la cara uno por el otro. —Lo sé—respondió cubriendo su faz con una máscara completamente lisa y sin un grabado aparente en ella. Al mover un poco su rostro la luz se proyectaba sobre la superficie, dejando a la vista una mueca que giraba distorsionándose en circulas que mutaban en otras formas que daban una falsa pantalla sobre quien se resguardaba detrás de ese manto blanco. Saliendo de la habitación se dispuso a ir al encuentro con sus compañeros, avanzando hasta donde estaba dispuesta una elegante mesa de bocadillos, procedió a saludarles con una ligera reverencia. Cruzándose de brazos se quedó en silencio, volviendo a perderse sin remedio en sus pensamientos.

Holi :3 Pues me paso a pedir que se revisen los descuentos que se acaban de hacer en mi boveda y no corresponden a la compra que realice. Solo los 15,000 galeones para comprar un Ironbelly Ucraniano. Se me han descontado lo que conpro otra usuaria y eso me deja con menos G. Por eso procedo a pedir la revisión y corrección de la manera más atenta. http://i.imgur.com/7vZwt.png -Nombre de la Bóveda: Bóveda de Juv Malfoy Croft -Link a la Bóveda Personal: 78357 -Trámite a Realizar: Revisión de descuentos por compras que no efectúe, salvo la del Ironbelly Uctraniano. - Link al topic de registro de familias: -- - Link a la Bóveda Familiar: -- - Link a la Bóveda de Negocios: -- Saludos y gracias de antemano

@Riuu Holi :3 Estamos en medio de la planeación del rol, pero es hecho que el mismo se realizará si o si. Solo te pedimos un poco de paciencia y pronto podrás rolear en el junto con el resto de los participantes. Saludos

Sets Fabricados Nombre Set Objeto Fabricado 1 Objeto Fabricado 2

Ingredientes y Reliquias Disponibles Ingredientes Normales: Nombre: Ajenjo Cantidad: 5 + 24 + 2 = 31 Nombre: Antimonio Cantidad: 5 + 24 + 2 = 31 Nombre: Azufre Cantidad: 5 + 24 + 2 = 31 Nombre: Escamas de basilisco Cantidad: 29 + 36 + 3 = 68 Nombre: Escamas de dragón Cantidad: 29 + 36 + 3 = 68 Nombre: Espinas de rosa Cantidad: 5 + 3 = 8 Nombre: Hierba de plata Cantidad: 5 + 3 = 8 Nombre: Hoja de peonia Cantidad: 5 + 24 + 2 = 31 Nombre: Ojo de tritón Cantidad: 5 + 3 = 8 Nombre: Pelo de gato Cantidad: 5 + 3 = 8 Nombre: Verruga de sapo Cantidad: 5 + 3 = 8 Ingredientes de rareza media: Nombre: Cantidad: Ingredientes raros: Nombre: Cantidad: Reliquias: Nombre: Flor Lunar de Nueva Zelanda Cantidad: 1 + 1 = 2 Nombre: Hilo de Luna Cantidad: 1 + 12 + 1 = 14 Nombre: Huevo de Ashwinder ciega Cantidad: 1 + 1 = 2 Nombre: Plata Maldita Cantidad: 7 + 12 + 1 = 20

Las maldiciones afectaban las vidas de las personas de una forma severa y lapidaría, cobrándoles un alto precio. Sobre todo cuando la perdida tenía que ver directamente con la familia, porque los bienes materiales pasaban a un segundo plano. El par de cuerpos tumbados en la estancia de la mansión, reflejaban el dolor de generaciones que estaban a nada de llegar a su fin, salvo por el par de jóvenes que estaban sollozando con las piernas abrazadas contra su pecho. — Pronto caerán—musitó el hombre que tenía el rostro cubierto por una enceguecedora luz. No pertenecía a las filas de la Orden del Fénix y tampoco a las de la Marca Tenebrosa. Era una nueva facción que se estaba levantando con fuerza, asesinos que eran perseguidos por los rompedores de maldiciones. Las leyendas que hablaban de las andanzas de ese grupo, no siempre estaban plagadas de detalles rosas o algo similar. Baños de sangre, persecuciones que debían ser concretadas con éxito tras dar con el sujeto que tenía la maldición sobre su persona. — Volveremos por ustedes—advirtió tomando el brazo de la chiquillas infringiéndole un corte con una daga maldita. Condenándola a cuidarse las espaldas hasta que ellos volvieran a dar con su paradero. La amenaza latía dentro del corazón de la jovencita, trastornando parte de su entorno personal, dejandole como única tabla de salvación a su hermano. El pobre no daba señales de mantenerse dentro del mundo de los cuerdos, ella se encargaría de cuidar de el todo el tiempo. *~*~*~* Dos años antes del ataque... Cassandra Farah Hasta sus oídos llego el rumor de un creciente grupo extremista, no era la clase de personas que se dejaba llevar por las habladurías. Pero ante la reciente ola de ataques dentro del mundo mágico, no podía descartar que eso fuera del todo cierto. Su cuerpo se tensó en el acto, tras sentir la mano de su camarada tocar su hombro izquierdo—Vamos Cass—la tranquilidad escapaba de sus manos. Sus ojos ambarinos delineaban con detalle el rostro plasmado en el pergamino, dolor brotaba de esas facciones femeninas. —Pides demasiado, Jael—se soltaba de su agarre—Es la primera en caer y créeme que no será la última. ¿Dónde están los rompedores que me prometiste?—su voz era como un tempano de hielo sobre el océano. Danzando sin un rumbo fijo, aunque su masa era considerable eso no le impidió ir más allá del iceberg del que se desprendió, para disfrutar de la libertad. —No lo se, quedaron en aparecer. Pero ya sabes como suelen ser, si la suma que les ofreces no es lo suficientemente alta—comentó sentándose en el mullido sillón. Echándole una ojeada al par de pergaminos que le entregarán sus espías. Era común entre ellos el intercambio de información, venderla al mejor postor, apostando por ganar algo que les fuera de utilidad. Justo eso era lo que tenían entre manos una papa caliente, que iba y venía de un lado a otro. — Van a matarlos esos malnacidos, ya tienen su ubicación exacta. Te lo advertí, no quisiste escucharme. Ahora sus muertes recaerán en tu conciencia, no me pidas que me cubra los ojos con una venda y me desentienda de todo—afirmó dando un golpe sobre el escritorio. Los esfuerzos de Farah darían sus frutos, no permitiría que otro inocente cayera inerte, no a causa de la maldición que les había sido impuesta por los Chestanni. La oscuridad era mucho más acentuada esa noche, abrazando con sus manto a los asesinos que iban tras uno de los rompedores de maldiciones. Caería sin remedio, el y toda su parentela desaparecerían de la faz de la tierra.

ID: 31143 Nick (con link a la ficha): Juv Macnair Hasani Link a la Bóveda Trastero: (en caso de poseerla): Bóveda Trastero Juv Macnair Hasani Link a la Bóveda de la cual se hará el descuento: Bóveda Juv Macnair Hasani Link al Premio obtenido (en caso de gala/concurso): --- Nivel Mágico: XL Fecha: 2021-01-10 Llave utilizada (para criaturas baby y Nundu): link a la certificación del Concilio Criatura: Ironbelly Ucraniano Puntos: 160 P Precio: 15,000 G Llave utilizada (para criaturas baby y Nundu): link a la certificación del Concilio Criatura: -- Puntos: -- Precio: -- Total de Puntos: 160 puntos Total de Galeones: 15,000 galeones

— La seguridad no lo es todo en la vida, no sirve de nada poseerla, sino se cuenta con una personalidad fuerte que la respalde—comentó la Vidente al escuchar la mención de David. Sus sentidos continuaban sumergidos en la charla del sujeto, parlaba más de lo normal y las facciones de este comenzaron a tornarse amorfas. La sonrisa en los labios dela mujer se hizo presente, ahí estaba la prueba más palpable de que la magia al ser empleada de forma errada, cobraba un alto precio — ¿De que sirve poseer un arma sino se sabe como emplearla?—la voz de la profesora se dejaba sentir como parsimonia. No le gustaba cuestionar las apreciaciones de sus alumnos, pero abrir la puerta para un debate siempre estaba a la mano. — Sujetos como estos emplean toda clase de pantallas, desde la que esta amparada por una falsa indefensión hasta la que nos da la cara más siniestra que pueden poseer—les indicaba con un gesto de la mano. Sacando otra runa de la caja, acariciando con la yema de sus dedos el grabado que estaba sobre la tabilla provocando que el mismo se iluminará tenuemente—Todos podemos ser supersticiosos, solo hay que saber como controlar esos miedos infundados y no dejar que dominen nuestra razón del todo o influyan en nuestras decisiones—agregó notando la mirada del Dumbledore sobre ella. Sus apreciaciones estaban siendo bien enfocadas, solo necesitaba aprender a ver más allá de lo evidente y no solo la corteza, sino llegar al núcleo y desenmarañar el mismo con astucia. — Las casualidades, no existen y creo que debe aprenderlo—le miraba fijamente, desviando su vista hacia Nate. Los dos estaban prestando la atención debida hacia las runas antiguas, dándoles el significado que ellos creían correcto. Las Runas eran capaces de transmitir toda clase de emociones o sensaciones, dentro o fuera de un sitio como ese. Los antiguos nórdicos solían usarlas para solicitar favores a sus dioses y salir victoriosos en algún enfrentamiento bélico, además de solicitar una buena cosecha y que los frutos sirvieran para alimentar la comunidad—Pueden trasmitir lo que la persona que las ha estudiado y conoce su significado desee. Amor, odio, gloria y hasta la conexión que se ha establecido con alguna deidad mayor—resolvió con una sencilla perorata. — Algiz es la runa del amor, suele emplearse para proteger los valores verdaderos de la familia, el amor y la amistad—se la entregó en la mano— Berkana es la runa asociada a la fertilidad , la procreación y la maternidad. Las madres en trabajo de parto complicado, elevaban sus peticiones hacia ella para que su hijo naciera sin problemas o daños irreparables—la otra runa descansó sobre la primera. La guerra estaba asociada con Tyr, obteniendo su nombre del dios nórdico que representaba la victoria, , el coraje, la conquista y la valentía —Digamos que es la representación ideal de un guerrero, que posee todas las cualidades que le destacarán como un triunfador dentro del campo de batalla—relataba con tranquilidad. — Las capacidades suelen ser limitadas, no siempre van más allá de los limites y cuando ese ocurre estamos delante de un superdotado—puntualizo—Pero para ella ese sujeto era todo menos, superdotado o un genio andante—respondió apremiante a Nate. Le gustaba como analizaba la forma del hablar del mago en el estrado, desmenuzando la personalidad de este desde la punta de sus cabellos hasta los pies. Sus dudas brotaron como lo hacen los botones de un rosal, abriéndose para dejar la verdadera esencia de sus brillantes colores a la vista.— Emplean la sedición, porque están bajo el hechizo de una runa que esta escondida dentro de está sala de reuniones—miraba alrededor indicándoles que irían en busca de dicho objeto para romper el encantamiento. Dándoles una reseña sobre los números que representaba cada criatura mágica, despejando sus dudas respecto a ese tema—Las criaturas también poseen su poder numérico dentro de las runas antiguas—apareciendo un demiguise detrás del orador. La criatura se mantuvo oculta gracias a su habilidad para mantenerse invisible— El representa el 0, el cuerno del Unicornio representa el número 1. Ahora es cuando comienza la verdadera diversión—una tropilla de unicornios que era liderada por una yegua galopaban sin controlo fuera del recinto. Una selva ambulante estaba apareciendo cada que la bruja recitaba el siguiente número—El 2 son los cuernos de un Graphorn, seguidos por el 3 que le da paso al runespoor por poseer tres cabezas. Ya nos haremos cargo de ellos—siseó continuando con el conteo, le estaba dando un aire aventurero a la clase. No deseaba caer en lo trillado, porque salir de lo tradicional era la mejor forma de infundir el conocimiento en sus aprendices. Un Fwooper de colorido plumaje sobrevolaba el firmamento, posándose en la lámpara de araña que pendía del techo. Cuatro colores radiantes engalanaban su plumaje, dándole un aspecto atrayente y que captó de inmediato la atención de algunos dignatarios, el número 4 estaba representado por esa criatura. El Quintaped con sus cinco extremidades, le daba forma al número 5, la salamandra se dejaba sentir al sobrevivir fuera del fuego y sus patas representaban el 6, quizás la forma que adoptaba al enroscarse o torcerse sobre si misma. El 7 no posee ningún animal asignado, justamente por eso se le consideraba sumido en el misterio. El 8 era la acromantula, porque posee 8 ojos y finalmente el 9 pertenecía a la Hidra por las nueve cabezas que poseía ese animal tan poderoso y poco común. — Desean levantarse en contra de una opresión inexistente, porque no les parece como se manejan las cosas. Suelen decir que los poderosos les quitan lo poco o nada que poseen, provocando que la miseria ser mucho más lastimera y lacerante para ellos—cruzándose de brazos retomaba la palabra—Una forma cobarde de alcanzar sus metas, porque muchos de ellos no pelean por una causa justa, sino solo por obtener venganza ante los crímenes cometidos en su contra o de sus familias—finalizó su relató. Dejando todo en manos de sus alumnos, ella los guiaría y les acompañaría en su travesía. @ @ @@David James Dumbledore @@Nate Weasley

~ Laboratorio de Fabricación de Juv Macnair Hasani ~ Hasani se había centrando el volverse una coleccionista de toda clase de pociones, viajando a través del mundo. Conoció a grandes magos expertos en esa arte, elaborar brebajes que eran capaces de curar y causar mucho en las personas. La mayoría de ellos solía venderlos al mejor postor, pero tras conocer a la Nigromante el mercado en que ellos se desempeñaban. Sus arcas eran demasiado tentadoras en esos rubros, moverse con grandes cantidades de galeones encima, captaban la atención de traficantes de pociones de procedencia. Eso poco o nada le importaba a la Vidente, saber reconocer el daño que esos brebajes causaban en sus amigos o enemigos. Jamás se cansaba de experimentar, elucubrando sobre nuevas forma de empleo de sus recientes creaciones. Las escamas de dragón era uno de sus ingredientes predilectos, aunque arrancarlas de la piel de esos seres, no le era del todo grato a la mujer. No teniendo en su poder al que era considerado el más peligroso de su especie. Seiryū estaba afuera volando como siempre, dejando sentir en el firmamento el poder de sus llamas. Bocanadas de aire brotaban de sus fauces, encendiendo las hogueras que la mujer dispuso para la creación de nuevos brebajes. Todos los ingredientes estaban alistados desde unos días antes, le agradaba la sensación de tener en sus manos la potestad para darle magia a algo que provenía de la tierra. Elemento que compaginado con el fuego era capaz de crear una catástrofe, pero ella lo emplearía de otro modo. Sus ojos delineaban con elegancia y parsimonia la anatomía de su compañero de andanzas. Siempre se imagino criando a uno de su especie, pero tuvo que esperar el tiempo justo para hacerse con el y darle el hogar ideal. Jamás lo mantendría dentro de una jaula o encadenado, prefería que anduviera a sus anchas recolectando nuevos ingredientes para la Nigromante. Su grimorio reposaba en su surda, acompañado por su varita y demás amuletos que le obsequiará el cursar los libros de hechizos. Las alianzas que llevaba en su mano derecha, daban constancia de su paso por las habilidades, recordando con añoranza a los cinco arcanos que dejaron una huella en su vida. Nigromancia, Videncia, Oclumancia, Metamorfomagia y Animagia, aparecían como cicatrices en su piel. Surcos que poco a poco se desdibujaban tras la sonrisa lóbrega que apareció en sus labios, acompañada por un brillo especial que enmarcaba la distinta tonalidad de sus ojos. Uno verde como esmeralda y el otro azul oscuro, variaba el dolor de esté dependiendo de su estado de ánimo. Pero la metamorfomagia ayudaba un poco en eso, pero no le molestaba mostrarse tal y como era delante de los que le conocían y los que no. Sus pasos la llevaron hacia la primera hoguera, dejando detrás de ella el edificio que era su laboratorio personal. Un amplio bastión de la vieja guerra compuesto por varias torres, dentro de ellas había habitaciones plagadas de mesas metálicas, sobre las cuales frasquitos de diversos colores albergaban las primeras pociones que creo en sus prácticas en Nueva Zelanda. Echaba de menos tener contacto con esa tierra, pero su cargo de Ministra de Magia, le permitía viajar a sus anchas y conocer un poco más de los países que eran aliados o enemigos de su causa. Índice de Sets Fabricados

Un par de magos se unieron al grupo, desviando por un momento su atención del sujeto que estaba hablando como tarabilla. Decidió que era momento de adentrarse en el mundo de los diverso idiomas que se hablaban dentro del mundo mágico, señalando al grupo de magos que parlaban amenamente en sirenio. Cualquiera pensaría que habitaban debajo del mar y serian denominados como gente del agua, pero no ellos solo eran representantes de los interesados en ganar beneficios para los habitantes de su pueblo. Caso contrario eran los duendes, ellos serán conocidos por hablar en clave para mantener en secreto los valiosos tesoros que guardaban las bóvedas dentro de Gringotts. Otros seres que eran conocidos por comunicarse solo con aquellos que supieran escuchar con atención sus siseos y descifrar el mensaje oculto que iba impreso en ellos — Cada uno tiene una forma diferente de comunicarse, pero todos tenemos en común una sola cosa—explicaba volviendo a centrar su atención en el orador. Escuchar los siseos constantes de la serpiente que estaba enroscada en el brazo de un hombre de mediana edad, poco o nada le sacaba de su ensimismamiento. El chirrido de un par de uñas sobre una pizarra se mantuvo presente en todo el recinto, quizás al estar debajo del agua permitiría captar el mensaje oculto de lo seres acuáticos. Los gigantes se mantenían relegados a la pared, provocando incomodidad en el resto de los presentes. — El lenguaje sireno tiene además una base escrita y se encuentra plasmada en el libro de Miranda Goshawk—puntualizó sacando el libro de una mochila. Además de las lenguas mágicas, existían otras clases de comunicación por medio de simbolos o dibujos. Un ejemplo claro eran los egipcios y sus jeroglíficos, plasmados dentro de las pirámides y que advertían de diversas maldiciones que recaerían sobre los que se atrevían a profanar esos recintos sagrados. Las lenguas muertas también era parte de los idiomas antiguos, varias comunidades se comunicaban por medio de sonidos guturales o aullidos. — Tambíen el lenguaje de señas suele ser empleado, ya sea por personas que no poseen el don de la palabra o aquellas que lo han aprendido por tener un conocimiento más basto sobre dicho tema—indicó haciendo la seña de unos cuernos con sus dedos pulgar y meñique— Eso significa “te amo”—agregó recordando algunas señas más que poco a poco se proyectaron en su mente. Los libros poseían diversas clases de idiomas, destacando entre ellos las lenguas romances o poemas. Era común que los escritores emplearán las palabras para enamorar a las parejas de enamorados o solamente para plasmar su arte en papel. @@David James Dumbledore @@Nate Weasley @ @

@@Niko Uzumaki Acá la ficha para indicar que se terminó la mazmorra Bando Fenixiano Nick 1: Rory Despard Link al perfil: http://www.harrylatino.org/user/111484-rory-despard/ Nivel del Personaje: 37 Link a la ficha: http://www.harrylati...showtopic=90357 Link a la bóveda: http://www.harrylati...showtopic=90386 Nick 2: Sophia Elvira Mackenzie Link al Perfil: http://www.harrylatino.org/user/74802-sophia-elvira-mackenzie/ Nivel del Personaje: 35 Link a la Ficha: http://www.harrylatino.org/topic/78560-ficha-de-zahil-aranel-granger/ Link a la Bóveda: http://www.harrylatino.org/topic/78637-boveda-de-sophia-elvira-mackenzie/ Nick 3: Kaori M. Link al Perfil: http://www.harrylatino.org/user/109080-kaori-m/ Nivel del Personaje: 51 Link a la Ficha: http://www.harrylatino.org/topic/85069-ficha-de-akane-kaori-matsudaira/ Link a la Bóveda: http://www.harrylatino.org/topic/85332-boveda-de-kaori-m/ Bando: Mortifago Nick 1: Orión Yaxley Link al perfil: http://www.harrylati...2-orion-yaxley/ Nivel del Personaje: 25 Link a la ficha: http://www.harrylati...showtopic=78282 Link a la bóveda: http://www.harrylati...showtopic=78333 Nick 2: Gatiux Link al perfil: http://www.harrylatino.org/user/135-gatiux/ Nivel del Personaje: 30 Link a la ficha: http://www.harrylatino.org/topic/77586-ficha-de-gatiux-malfoy/ Link a la bóveda: http://www.harrylatino.org/topic/77626-boveda-de-gatiux/ Nick 3: Maida Black Yaxley Link al perfil: http://www.harrylatino.org/user/120589-maida-black-yaxley/ Nivel del Personaje: 14 Link a la ficha: http://www.harrylatino.org/topic/108867-ficha-de-maida-ivashkov/ Link a la bóveda: http://www.harrylatino.org/topic/108870-boveda-de-maida-i-yaxley/ Nick 4: Aaron Black Yaxley Link al perfil: http://www.harrylatino.org/user/115687-aaron-black-yaxley/ Nivel del Personaje: 18 Link a la ficha: http://www.harrylatino.org/topic/96905-ficha-de-aaron-black-lestrange/ Link a la bóveda: http://www.harrylatino.org/topic/96937-boveda-de-aaron-black-lestrange/ Nick 5: Zoella Triviani Link al Perfil: http://www.harrylatino.org/user/121273-zoella-triviani/ Nivel del Personaje: 41 Link a la Ficha: http://www.harrylatino.org/topic/110950-ficha-de-zoella/ Link a la Bóveda: http://www.harrylatino.org/topic/110969-boveda-de-zoella-triviani/ Nick 6: Candela Triviani Link al Perfil: http://www.harrylatino.org/user/69618-candela-triviani/ Nivel del Personaje: 41 Link a la Ficha: http://www.harrylatino.org/topic/78212-ficha-de-candela-triviani/ Link a la Bóveda: http://www.harrylatino.org/topic/78262-boveda-de-candela-triviani/ Nick 7: Syrius McGonagall Link al Perfil: http://www.harrylatino.org/user/119634-syrius-mcgonagall/ Nivel del Personaje: 6 Link a la Ficha: http://www.harrylatino.org/topic/106835-ficha-de-syrius-mcgonagall/ Link a la Bóveda: http://www.harrylatino.org/topic/106847-boveda-de-syrius-mcgonagall/ Nick 8: Lisa Weasley Delacour Link al Perfil: http://www.harrylatino.org/user/115531-lisa-weasley-delacour/ Nivel del Personaje: 22 Link a la Ficha: http://www.harrylatino.org/topic/96555-ficha-de-luca-van-halen/ Link a la Bóveda: http://www.harrylatino.org/topic/96556-boveda-de-lisa-weasley-delacour/ Nick 9: Juv Macnair Hasani Link al Perfil: http://www.harrylatino.org/user/31143-juv-macnair-hasani/ Nivel del Personaje: 40 Link a la Ficha: http://www.harrylatino.org/topic/78319-ficha-de-juv-malfoy-croft/ Link a la Bóveda: http://www.harrylatino.org/topic/78357-boveda-de-juv-macnair-hasani/ Mazmorra: Título de la Mazmorra: Paris Mon amour Link al Topic abierto para realizar la Mazmorra: LINK

@Riuu Hola :3 Pues la diferencia que existe entre el subforo de la oficina de adopción y el registro de familias. Es que en el segundo ahí van los miembros de X familia y se ofrecen a adoptarte o vos podes postear que deseas ser adoptado y las personas que estén interesadas se pasan por ahí y te ofrecen ser miembro de su familia. Espero haber resuelto tu duda, saludos