El Parque de las Lamentaciones y Circ dels Joglars (MM B: 102350)

[Maida Black Yaxley]

Casi ya caía el atardecer para cuando Eobard y Maida se vieron parados frente a la imponente reja del Parque de las Lamentaciones. Se sabía que en su interior los parques parecían no tener fin y que incluso contaban con un circo, pero nada de aquello llamaba la atención de la Yaxley. La lejanía de la gente sí. La oportunidad de no ser encontrada también.

 

La caminata hacia el lugar había sido más que agradable, la conversación entre ambos magos fluía con naturalidad, salvo algunas ocasiones en las que Maida hablaba con la boca llena de los restos que había guardado en las servilletas. Era gracioso, porque los ojos grises de Eobard le recordaban constantemente a un Black con el que jamás, se encontraría en el mismo estilo de conversación. Eso, sólo eso, ya la tenía sonriendo de cuando en cuando. Incluso su habitual sonrojo comenzaba a desaparecer.

 

— Y voilá —dijo fingiendo un pésimo francés—, supongo que esto vendría a ser aquí lo que en Nueva York tienen por el Central Park, un lugar que sirve para todo, y en mí caso, para mantenerse alejada de todo —encogió los hombros y se adelantó corriendo como si volviera a tener quince años— ¡Venga, no se vaya a perder!

 

Maida corría sintiendo el césped debajo de sus pies, una de las sensaciones más refrescantes que puede tener uno en la vida. Dejando que la brisa alborotara su cabellera y que sus preocupaciones se fueran con el viento. Igual no se alejó del todo, lo suficiente para llegar a un puente que cruzaba un lago artificial, ahí se detuvo, agradeciendo su respiración agitada. La sencilla noción de seguir viva.

 

@@Eobard Thawne

[Eobard Thawne]

A decir verdad, de inicio consideraba que el ofrecimiento de Maida respecto al tiempo de esparcimiento era en parte una broma, una de esas lejanas promesas que la gente rara vez cumplía pero, ahí estábamos. Una vez que abandonamos el local donde nos conocimos, tras un gracioso encuentro que casi termina en dos personas repartidas a lo largo de la calle, nos encontramos frente a esas rejas de gran tamaño, como si detrás de ellas hubiese algo valioso.

 

Aprovecho en ese momento para consumir lo poco que queda de mi postre. Durante al camino al Parque de las Lamentaciones, habíamos procurado romper el hielo. Al menos un poco. Y no resultó tan mal, pues la señorita Yaxley poco a poco dejaba de inhibirse, siendo más abierta a la hora de hablar. Lo que me sorprende es la facilidad con la que yo continué dicha conversación, pues, reitero, no soy de muchas palabras.

 

-El Central Park tendría que estar un poco más contaminado por aquello que los muggles llaman smog, me temo. -río ligeramente, metiendo las manos en los bolsillos. Definitivamente era una perspectiva distinta a la de Norteamérica. Más allá del parque en el que había familias y grupos de amigos conviviendo, frente a mí se extendía un paraje en el que podías venir a desconectarte un poco de todo el mundo. No hubo tiempo de seguir mirando, pues en ese momento, Maida salió despedida hacia un puente que parecía cruzar el lago.

 

-Ah, ¿por qué no? -la distancia que me separa de ella es considerable, por lo que decido hacer uso de mi peculiar condición. Una vez que pongo un pie sobre el verde césped, echo a correr de aquella forma que no había utilizado en casi 17 años. Observo mi alrededor como una borrosa mancha, pero la sensación del viento contra mi rostro es definitivamente aquello que me motiva a continuar así.

 

Me detengo justo a unos metros de donde se encuentra Maida, apenas habían pasado unos segundos. -Buena carrera. -me giro sobre mis talones y observo la reja de entrada, donde a partir de mi idea, ha quedado una especie de marca que indica el camino que he seguido hasta llegar a ese punto. Por suerte, no incendié el césped en esta ocasión. Para haber pasado mucho tiempo sin correr de esa forma, aún no perdía la práctica. -Por cierto, le agradezco muchísimo la ayuda con mis trámites ministeriales. -sonrío, sosteniendo una pequeña nota, que me había llegado en el lapso hacia el puente.

 

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[Noah Lockhart]

La tarde era soleada todos en el castillo hablan salido a hacer sus respectivas actividades,yo como siempre había terminado mis deberes con rapidez, asi que ya estaba de vuelta en casa no sabia que hacer estaba algo aburrido bebiendo un poco de té mientras miraba por la ventana perdido en mis pensamientos.

 

El te que estaba bebiendo se había acabado asi que decidí bajar a prepararme otro y de paso buscar por alguno de los escondites so es que aun quedaban galletas de las que mi hermano solia hacer y luego guardar para tener de reserva pero que con la ayuda de mi gato había logrado ubicar, baje las escaleras, el castillo parecia estar desierto salvo por algunos de los elfos que pasaban momentaneamente haciendo sua deberes.

 

Al bajar las escaleras y llegar a la sala de estar vi que junto al florero había unos de los volantes que había dejado sagitas a mi madre la cual los había puesto alli para que todos los pudiéramos ver y acudir cuando tuviéramos tiempo libre, me quede leyendo uno de los volantes, los colores y el texto dejaban ver que el espectáculo seria magnifico, después de mucho mirarlo decidi acudir para distraerme por un momento.

 

Subí a mi cuarto nuevamente llevando conmigo uno de los volantes para revisar bien la dirección y los horarios, me vesti rapidamente para después bajar las escaleras y posteriormente salir del castillo, una vez afuera me apareci en las cercanias del circo, parecia haber un buen ambiente, a lo lejos note que Antoni y esposa estaban formados en la fila para los boletos, al parecer no me equivocaba el lugar gozaba de una buena reputación y una gran fama.

 

 

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@@Shena Cindy de Ryvak M.

[Anthony R. Dracony M.]

Un instante basto para ponernos de acuerdo y estar enterado que solicitar al llegar a la taquilla. Me alegraba comprobar que el consejo que me habían dado, era verdad: el tiempo lo cura todo....sobre todo cuando uno podía de su parte.

 

 

Enviar a Shena Cindy la invitación, logro el milagro de restablecer nuestro afecto, ahora iría con más cuidado para no volver a crear problemas gratis entre nosotros.

 

 

Me sienta de maravilla ver su sonrisa, lo cual me hizo sentir que aumentaba mi entusiasmo, siempre quise asistir a una función del circo de mi tía Sagitas......hasta recuerdo que ella me prometió dejarme montar a uno de sus dragones ¿qué acontecería en esta función? ¿estará la prima Perenela? ¿Matt? ¿Heliké? ¿Xell? el tiempo ha pasado, yo mismo soy algo distinto...tomo la mano de Shena Cindy...me gusta contar con ella, me hace darme cuenta de lo afortunado que ahora soy.

 

 

Lanzo una mirada alrededor, los globos de colores y las caras sonrientes visten la tarde de un contento que anima mucho. Entre las personas reconozco algunos conocidos, levanto mi mano para saludarles con alegría, el más cercano a nosotros es @@Noah Lockhart

[Noah Lockhart]

Adelante de mi se encontraban Antoni y su esposa, ellos eran los mas próximos a la taquilla por lo que pasarían antes que yo, parecían muy felices juntos ademas de muy animados por la función de circo, yo mismo estaba deseoso de ver el espectáculo el cual prometia hacernos pasar un gran momento de diversión.

 

Creo que había tomado la mejor decision ya que seguramente allí no me aburriría como en el castillo donde estaba aburriéndome sin hacer nada, a decir verdad no siempre era bueno terminar el trabajo rápido ya que al ser el primero estas solo cuando regresas a casa estas solo ya que los demas aun están en el trabajo o fuera de la casa.

 

Por suerte parecia que no solo a mi se me había ocurrido ir al circo si no que tambien a Antoni y su esposa, eso me relajaba un poco ya que en ese caso tendría a alguien conocido en la función y alguien con quien hablar acerca de eso, me hubiera gustado haber podido llevar a Mika o a alguuien conmigo pero ninguno podia.

 

 

 

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[Shena Cindy de Ryvak M.]

Me gusta que Antoni tome en cuenta mi parecer, respondi contenta cuando quizo saber en que sección deseaba estar.

 

Le sonreí cuando tomo mi mano, ahora si que olvide porque estaba molesta...su mirada me decía lo mucho que le gusto y sus ojos miel me arrebataron un suspiro de admiración. Puedo ver que en verdad le importo mucho y me contagio al pensar como será la función...con mis "hermanos" también monte en el pasado, algunos actos circences, aunque no teníamos una carpa como la que veía en aquel enorme solar, la alegría nos rodeaba, banderines, globos y caras sonrientes. Yo veía fijamente a sus ojos miel y lo vi cuando miro alrededor y luego saludaba agitando su mano en alto.

 

Me giré a ver a quien saludaba y descubrí cerca de nosotros a @@Noah Lockhart me encontraba tan alegre, que yo también lo salude y le dije a Antoni, que ojala y nos tocará en la misma sección para ver la función.

 

Sería Sagitas la que haría el número principal?...esperaba tener suerte de mostrar uno de mis números como "Señorita Dragón"

[Randal Ravenclaw]

Era un día como cualquiera, sin mucho que hacer en el Castillo Ravenclaw el joven Randal se sentía aburrido bebiendo un poco de vino, mirando sus revistas de moda mientras miraba por la ventana, suspiraba esperando tener pronto trabajo, entrar a la academia, o tener más lugares y amigos con quienes salir a disfrutar.

 

– ¿Que hacer Lita? – pregunto a su elfa domestica mientras bebía todo el contenido de la copa de vino.

 

– Diversión, Diversión … – respondió ella saltando de un lado a otro mientras mostraba su jovialidad y vibrante juventud

 

– Si, pero ¿cómo me puedo divertir? – cuestiono de nuevo el joven mago mientras miraba a su elfa con ojos de tristeza esperado consuelo

 

Ella se apresuró a traer un volante, al parecer era de un Circo, él lo miro fijamente.

 

– No está mal, no está mal – exclamo alzando su mirada hacia Lita, aun así, siguió leyendo uno de los volantes, los colores y el texto dejaban ver que el espectáculo seria magnifico, después de mucho mirarlo decidió acudir para distraerse por un momento.

 

– Sera alistarme –menciono a su elfa, ella pronto saco uno de los vestidos del Joven y se lo paso para que se cambiara

 

– Ayy, Lita , ¿ crees que esto es apropiado? – indago mientras miraba el traje que le había pasado .

 

– No quiero robarme el Show – dijo con una pequeña sonrisa a sabiendas que siempre le gustaba robar show.

 

Se coloco su vestido, el cual hacía alusión a la reina de corazones, adorno su varita convirtiéndola como en un cetro de reina, se colocó una peluca negra y un corazón grande en ella, medias blancas, unos pequeños zapatos negros, finalmente un poco de maquillaje empolvando su cara, poniendo labial rojo, y un poco de lápiz en sus ojos.

 

Revisar bien la dirección y los horarios, se arregló un poco en el espejo antes de bajar las escaleras y posteriormente salir del castillo, viajando hacia el circo. Al llegar al lugar había una gran multitud y un buen ambiente, se dispuso a formarse en la Fila y a lo lejos noto algunos conocidos @@Noah Lockhart , @ a los cuales había visto en sus diferentes familias, les intento hacer señas con su mano esperando que lo reconocieran y no estar tan solo esa noche.

[Shena Cindy de Ryvak M.]

El ambiente festivo del lugar me hacía sonreir ampliamente. Por fin sería nuestro turno para comprar nuestros boletos de entrada, yo veía golosa aquel vendedor de algodón de azúcar que invitaba a pasar a comprar dulces y golosinas al stan junto a él, el olor a palomitas de mantequilla y acarameladas me abrian el apetito por esas delicias que siempre se me antojan.

 

Antoni saludaba con la mano a unos conocidos suyos, yo solo reconoci a Noah, pero mi vista alcanzo a ver a alguien que parecía la estrella de la función...

 

Me gusto su vestuario, aunque mi vestido vaporoso de satin y encaje rojo de "Princesa Dragón" era más mi estilo...adoro colocarme la tiara...

 

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La reina de corazones nos saludaba de lejos agitando su mano, esperaba que fuese conocida, algo me decía que gustaba de las golosinas...

[Sagitas E. Potter Blue]

Abrí los ojos, bostecé y estiré los brazos, casi tirando con la mano un estante lleno de potingues de maquillaje. Estaba haciendo la siesta en mi carromato del Circo. Sonreí. Era maravilloso estar allá escondida mientras fuera me esperaban reuniones importantes y conflictos miles en los que se suponía que tenía que mediar. El Carromato era mi escondite. Abrí con la punta del pie (sí, lo sé, soy una comodona y quería estar echada un ratito más) y vi el cielo azul. Ni una sola nube-

-- Lindo día para entrenar un poquito -- me dije. Era mejor que me quitara la pereza y que fuera al exterior. -- ¡Hale... hop!

Me levanté, me aseé y me puse una camiseta negra de tirantes con un pantalón laster ajustado también negro. Después me puse las zapatillas de gimnasia para poder hacer ejercicios de equilibrio. Necesitaba desentumecerme y nada me gustaba más que pasearme por la cuerda floja.

Salí del carromato y me dirigí hacia la zona posterior de la carpa. Un elfo me llamó.

-- ¿Aún está así? Si tiene menos de diez minutos para que empiece la función.

-- ¿Qué...? Pero si los martes es descanso de personal.

-- ¿Martes? ¡Hoy es sábado?

Le miré con desconcierto. ¿Sábado? ¿Dónde había perdido cuatro días? Tartamudeé.

-- ¿Sá...bado...?

-- Venga, vamos... Déjese de tonterías y vaya a vestirse, que la llaman ya las trompetillas.

Era cierto. Ya sonaba la música para que la Maestra de Ceremonias, oseasé, yo, acudiera a la carpa central.

-- ¡Demonios! -- Eché a correr a la Rouloutte y ni idea de como conseguí ponerme la ropa adecuada y el sombrerito y salir corriendo. En cuanto llegué a la carpa, me pegaron un empujón y... salí a saludar al público sin estar preparada.

Sonreí.

La función siempre debe continuar.

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[Shena Cindy de Ryvak M.]

Di voces apenas Noah recibio su boleto de entrada, Antoni también le saludo y se alegraba cuando dije que quería se nos agregara, lo cual me parecía sensato para pasarla mejor.

 

--Un gusto verte porque creo que nos iremos conociendo más, oye Noah, me acompañas a comprar golosinas? Aprovechemos que quedan unos minutos antes de que inicie la función que te gusta de lo que aquí se ofrece?

 

Mencione mientras caminaba hacia el estanquillo de golosinas, yo me compraría un algodón de azúcar y las palomitas azucaradas que me hacían sentir agua la boca...

 

Me di prisa pues no deseo perder el principio de la función y debiamos ir a nuestros lugares.

 

--Hola! Que lindo día para la diversión! No les parece? Podrá estar con nosotros Randal? La bolsa de palomitas azucaradas que compre, es familiar con mucho gusto le compartiré la cantidad que guste. ^^

Editado 9 de Julio del 2017 por Shena Cindy de Ryvak M.