╚ Parque Acuático Witch ╝ (MM B: 102556)

[Sagitas E. Potter Blue]

Gruñí. Me tapé las orejas con la almohada pero aquella maldita campanilla se metía en mi cabeza. ¿Quién sería el loco o la loca que estaba jugueteando con la campanilla de la entrada, estando el Hotel cerrado? El Parque acuático estaba fuera de temporada y habían cerrado para limpiar, pintar, arreglar y tenerlo todo a punto para la temporada de Semana Santa que empezaba en nada.

 

Como se suponía que no había nadie, pensé que era obra de elfos cansados de trabajar que se tomaban un momento de asueto pero yo estaba muy cansada, después de una jornada de dos días en el Consejo de Warlocks, discutiendo sobre temas importantes para la vida civil del pueblo (sí, algo así sobre subirnos el sueldo y pedir que las ensaimadas que nos traían del catering estuvieran rellenas de cabello de ángel). Sabía que en casa iba a tener problemas de ruido y por eso me había venido al hotel, donde podría dormir a pierna suelta.

 

Pero ahora jugueteaban con la campanilla de la entrada. ¡Se iban a enterar!

 

Bajé con el ascensor en pijama y con mis zapatillas cómodas aunque lentas (sí, por algo tenían forma de un Strealer y me hacía ir lenta cuando quería ir deprisa, una jugarreta que mi hijo había considerado divertida cuando me las regaló) y me acerqué a la recepción vacía.

 

Dos silueta reconocibles estaban hablando allá y rellenando el libro de visitas. Suspiré fuertemente para que me oyeran:

 

-- ¿Es que se os pegó el dedo a la campanilla, muchachitas? Me habéis despertado y mira que cuando no duermo, muerdo.

[Helike R V PB]

- Venga, vamos a tomar un chocolate caliente - les indiqué a mis dos compañeros y puse la escoba en el hombro. Tendría que dejarla en recepción, antes de ir a la cafetería...

 

Empecé a caminar, esperando que mis colegas me acompañaran.

 

En cuánto llegué a recepción estaba Sagitas refunfuñendo, ¡y cuándo no! Además, estaba también Hayame con una chica que, conocía de vista, por verla en 'La Taberna de la Tía'.

 

- ¡Chicas! ¡Qué gusto verlas! -les dije con alegría - qué, ¿también venís a daros un baño? -pregunté, curiosa mirando a las dos jóvenes.

 

- Sois valientes, he de decir... Ni loca me atrevo con éste tiempo a meterme en el agua... ¡Debe estar congelada! - negaba con la cabeza y con la mano. Puse la escoba en el suelo y ésta flotó unos centímetros del suelo.

 

- Shh, quieta, que no voy a volar dentro del hotel -le dije, medio regañando a la escoba. Quién me escuchara hablar así, pensaría que estaba como una cabra, y con razón.

 

- Sagitas mujer, deja de refunfuñar, ¿Acaso, no habéis contratado a nadie para que haga de recepcionista? - inquirí, mirando a la pelivioleta.

[Sagitas E. Potter Blue]

A pesar que Heliké dijo que no gruñera, reaccioné gruñendo bien fuerte, por varios motivos. El primero, por supuesto, era encontrarme con mi sobrina de nuevo. Desde que sabía que se iba a casar con Matt como que le tenía ojeriza. Supongo que es algo normal cuando una nuera y una suegra chocan tanto.

 

Por supuesto, el siguiente era porque ella me había pillado en pijama y zapatillas de cama originales, como a mí me gustaba cuando estaba a gusto a solitas y sin compañía de nadie, así que me crucé de brazos y le lancé una mirada furibunda, si como con ese gesto fuera capaz de tapar los dibujitos de mi ropa.

 

-- No se puede volar en el recinto del parque así que te la requisaré y la pondré a buen recaudo con una mordaza, hum... -- seguía con los brazos cruzados y miraba a Hayame y a Ash para pedirles una disculpa con los ojos por lo vacaburra que era mi sobrina, sin darme cuenta que yo misma me estaba comportando como otra. -- Además, no hay elfos porque estamos cerrados. ¿Entiendes lo que significa? CERRADOS. Ya te puedes ir con...

 

Parpadeé. Ash no estaba acostumbrada aún a mis enfados.

 

-- Ya puedes salir del recinto. Por favor. -- ¡Qué difícil fue decir ésto último! Lo hice forzando los dientes. -- Y yo tengo que retirarme. Jack me espera. Por algún sitio.

 

No es que fuera cierto pero tampoco mentira. Era un fantasma, podría estar chafardeando en cualquier lugar del hotel.

[Helike R V PB]

- ¡Ni hostias me requisas tú nada! - le dije, gruñendo yo ahora agarrando el palo de la escoba con fuerza- o te doy con ella en la cabeza. ¿Estamos?

 

- Es más, ni siquiera he volado por encima. Lo he rodeado y aterricé delante del negocio -negaba con la cabeza. Si es que, cuando ambas teníamos genio... Aunque suponía que de los presentes, ya conocía nuestra forma de proceder.

 

- Mira, deja de protestar. Matt nos invitó aquí dentro aunque estéis CERRADOS -enfaticé la última palabra con un gesto bastante grotesco en mi cara. Si es que, cuando conseguía sacarme de mis casillas. Lo lograba. A la mínima...

 

- ¿Jack, Jack el destripador, o el fantasma desaparecido? Hace siglos que no lo veo -bufé yo- a ver si se acuerda de la familia, para una vez. Espero que esté corpóreo para el día de la boda...

 

- Bien, me tomaría unas cuántas caipirinhas para ver si entro en calor. Si es que... Espero que el bar esté abierto, por lo menos...

[Sagitas E. Potter Blue]

Estuve con los brazos cruzados hasta que me amenazó con darme con la escoba en la cabeza. Bufé con tal furia que un mechón de mi pelo se movió con la fuerza del aire que moví. Ahora me puse las manos en jarras, acabadas en puños y apoyadas en la cintura.

 

-- ¿Qué tú vas a hacer qué? ¡Atrévete, so... burra! ¡¡Atrévete a romperme la escoba en la cabeza!! Que puede que yo te la... haga comer.

 

En serio, cualquiera que nos viera pensaría que éramos verdaderos enemigos irreconciliables cuando, en el fondo, éramos familia (no tal vez muy bien avenida, pero familia al fin y al cabo).

 

-- Matt no sabe lo que hace. Por invitarte al parque y por casarse contigo -- espeté, con rabia, creo que hasta le escupí en la cara. Es que cuando soy rabiosa expulso saliva como los perros (jajajaja).

 

Intenté ver de reojo la reacción que tenían las chicas al verme con tanto enojo. Normalmente, yo era buena pero es que Heliké sabía sacarme el rostro oscuro mortal que escondía y que una vez me dominó. Con lo difícil que era tenerlo controlado y ella lo atraía... Con lo que me había costado tenerlo dominado y ella lo extraía como si fuera un imán. Ahora, con la mención de Jack, me sulfuré tanto que mis dedos se engarfiaron en el aire. Di un paso hacia ella.

 

-- ¿Cómo... te... atreves...? ¡Maldita seas! ¿Jack... el Destripador...? Mi marido... fue... destrozado... y desmembrado... en su muerte... Tuve... que encontrar su cuerpo... enterrar su cadáver... -- Las lágrimas rodaban de rabia por mis mejillas. Di otro paso hacia ella. -- Tuve que invocar a la misma Muerte para encontrar... los trozos que faltaban y se habían comido las... aves carroñeras... ¡¡Jack Blackner es tu suegro!! Ya que no me respetas a mí, respétale a él.

 

Tuve que pararme a respirar. Tenía que apoyarme o sentarme o me caería al suelo. Estaba sufriendo un ataque de ansiedad; no era tan fuerte como quería hacer creer a todo el mundo. Mujer fortaleza... No, las cosas me hacían mucho daño y las escondía. Casi siempre... Hoy no. Seguro que me moría del disgusto que me daba esta mujer.

 

-- ¡Vete... de mi vista!

[Matt Blackner]

Nos encontrábamos en plena temporada. El parque funcionaba a pleno rendimiento, como el calor había llegado de golpe a ottery. Demonios...había llegado a pensar que no íbamos a tener verano, pero de golpe, el calor había provocado que las oleadas de bañistas, familiar y grupos de jovencitos vinieran a refugiarse del calor en nuestro parque acuático.

 

Aunque una de las ventajas de ser el dueño es qeu puedes, además de reservar las suites del hotel para tu disfrute personal, darte un chapuzón en la soledad del parque aun cerrado al público.

 

Eso es lo qeu hacía. Con los ojos cerrados, flotaba relajadamente en una de las piscinas, con un bañador de color azul claro.

 

La vida era extraña...en la mano derecha brillaba el anillo de plata que me unía a Helike. Nunca me hubiera imaginado casado, y sin embargo, ahí estaba. Eran muchas cosas, eran muchos cambios. Había sido una boda de lo más movida, una boda que había significado una gran lucha en la familia.

 

Suspiré, con una ligera sonrisa, mientras sentía pasos acercándose. Aun faltaban un par de horas para la apertura, más bien, era tiempo del desayuno. Asi qeu, si habían pasado...tenían qeu ser de la familia.

[djvash Asturias]

Era algo temprano para caminar por el lugar, pero quiera ver si es que el parque que me habían dicho era muy bueno, estaba muriendo con el sofoco del sol, y no estaría nada mal algo refrescante, al llegar era como lo suponía grande, las puertas aun estaban cerradas, pero ya había algo de gente esperando, no tardarían en abrir por lo que observaba.

 

Mire el lugar y decidí que era el apropiado, llame a mi elfo Soren, que siempre estaba ahí para ayudarme y le di una pequeña nota. Esta tenía un breve mensaje para Kaori, la joven bruja que hace un par de días me había entregado varios objetos a petición de Valkyria.

 

--Soren, esta carta a Kaori, sin bromas y rápido, y antes de que regreses debes traeme esto

 

Le di un pequeño pergamino que pedían cosas muggles personales. Mire al elfo quien desapareció inmediatamente, la hora estaba cerca, solo esperaba que ella le gustara divertirse un poco.

 

Soren entregando la carta

Kaori...

 

Espero te encuentres bien, hace días que no se de ti, pensé verte en el negocio nuevamente pero o eh tenido la fortuna de hacerlo, te envió esta nota invitandote a pasar un día divertido y diferente, espero te animes.

 

Un cordial saludo djvash.

 

Pd. Anexo una pequeña lista de objetos que pudieses necesitar, en caso de que te animes venir.

 

 

Lista de objetos.

*Traje de Baño (indispendable)

*Toalla

*Bloqueador solar

*Sandalias

Si bien el elfo regreso rápidamente sin darme una respuesta de la joven, trajo todo lo que le había solicitado, eso me lleno mas de entusiasmo. Ahora solo esperaba que ella si viniera, pues después de la ultima vez que la había visto no la podía sacar de mi mente. Editado 27 de Julio del 2018 por djvash Asturias

[Sagitas E. Potter Blue]

http://oi50.tinypic.com/20gze2w.jpg El elfo estaba a cargo de la seguridad del amo Matt y de su ahora ya esposa. Aunque el parque funcionaba a pleno rendimiento, había una zona en la que descansaban ambos mientras no se iban al viaje de novios; él se encargaba de que nadie les molestara. En aquel momento, sólo el amo estaba en la piscina, así que Harpo salió de la zona privada para encargar el desayuno del matrimonio.

 

La situación en la mansión era muy tensa. La Ama Sagitas no quería ver al otro patriarca y su enfado era de aúpa por lo sucedido en la boda. Aún así, era el patriarca y, sencillamente, ella pasaba de largo ante su presencia, como si no estuviera. Por ello, cuando decidieron estar en el hotel del Parque, para el elfo fue un alivio para no soliviantar más la tensión.

 

El Parque estaba a punto de abrir y el elfo debía de ocuparse de que nadie estorbara a los recién casados, así que aquel lado del Hotel y sus servicios permanecerían cerrados al público. Menos mal que, por regla general, la gente que llegaba era para pasar el día y no solían usar las habitaciones privadas ni los accesos particulares.

 

En cuanto llegó a la entrada observó la gran cola que se estaba formando. Esperaba no tener que frenar la entrada de ninguno de esos en la zona cerrada. Fue cuando se fijó que había un miembro de la familia esperando, algo que le sorprendió.

 

-- Amo Djvash, por favor... Los miembros de la Potter Black tienen entrada directa por la zona del Hotel. Por favor, es allá... No hace falta que espere... ¿Quiere que le acompañe?

[Valky]

Kaori.

El sol apenas estaba apareciendo cuando una joven de cabello negro y muy largo paso corriendo en dirección a la Mansión de los Delacour. Se trataba de Kaori, a la bruja le gustaba hacer ejercicio muy temprano en las mañanas, cuando la brisa es fresca y no hay ruido alguno. Cansada la joven se dispuso a bañarse para luego desayunar y terminar de alistarse para ir a trabajar.

Apenas había dado un mordisco a las tostadas con mantequilla que estaba en el sustancioso desayuno que los elfos le habían preparado, cuando un sonoro > la sobresalto. Se trataba de un pequeño elfo, recordaba haberlo visto anteriormente pero el nombre se le escapaba en ese momento.

—Hola pequeño ¿Qué te trae por aquí? —preguntó dando un mordisco a la tostada que momentos antes casi había terminado en el piso.

—Mi amo Dj me pidió que le entregara esto… —Le entregó un pergamino y desapareció.

Con curiosidad y algo de sorpresa abrió la nota. Era una invitación a pasar el día con él y por las cosas que le solicitaba llevar era claro que habría que nada > pensó cuando terminó de leer. > se reprendió mientras seguía desayunando > se dijo y era como si estuviera conversando con otra persona.

—Para luego es tarde…—Susurró. Claro que iría a divertirse un rato, ya si alguien la veía inventaría alguna escusa que para eso era buena.

Minutos más tarde había sustituido el feo uniforme del concilio por un vestido blanco cuya parte baja era de una tela muy suave, el mismo tenía una abertura que le llegaba a medio muslo y en la parte de la cintura había una parte bordada que dejaba entrever su piel. La parte de arriba también tenía bordados, el escote era en “v” no muy pronunciado, todo el vestido estaba sujeto por dos tiras blancas que se anudaban en la parte de atrás de su cuello. La parte posterior estaba descubierta hasta media espalda. Era sin duda un atuendo muy cómodo, además de que debajo de este llevaba puesto un terno de baño en dos piezas.

 

Guardó todas las cosas que en la lista estaban y un par más que consideró y podía necesitar. Se puso unas sandalias bajas muy sencillas. Con todo listo giró sobre sí misma y desapareció rumbo al Parque Acuático Witch, que era el lugar en donde seguramente DJ ya la estaba esperando. Cuando llegó ya estaba abierto y varias personas dentro por lo que buscó con la mirada al apuesto rubio.

—¡Bu! —dijo en un intento por asustarlo —Hola… —lo saludó con un beso en la mejilla —Espero no haberte hecho esperar mucho — dijo pues era consciente de que se había tardado un poco más de lo acostumbrado arreglándose y es que quería verse hermosa para él o al menos intentarlo.

[djvash Asturias]

Soren me había entregado la maleta con las cosas que le había pedido cuando de la nada otro elfo se acerco a mi, lo reconocí de inmediato era Harpo, el elfo de la prima Sagitas, me invitaba a pasar de manera directa al lugar, que no era necesario hacer fila *vaya, eso no lo esperaba* pensaba mientras lo seguía, con la mirada había dejado a Soren en espera de la chica, yo solamente me cambiaría y regresaría para esperarla en la entrada.

 

--Vaya Harpo, no sabia que este lugar era familiar, eh venido a refrescar el cuerpo, espero no haya problema, invite a una amiga.

 

Le dije sonriendo, mientras lo miraba entre a los vestidores, me cambie la ropa, la que llevaba era tan formal que me estaba, desde cuando yo usaba ese tipo de vestimentas, desde cuando había formalizado mi ser, mire al elfo sin decir palabra alguna, el mismo no se opuso a que me cambiara ahí, después de unos instantes me coloque una bermudas para playa color verde militarsin playera, el calor empezaba a sentirse en mi cuerpo y era una buena sensación.

 

--Bien Harpo, ahora iré a buscar a mi invitada, espero no haya molestias por eso,

 

Dicho esto salí del lugar, al llegar a las puertas, las mismas ya estaban abiertas, el publico empezaba a entrar al recinto, y bueno yo esperaba a ver a la pelinegra, el tiempo pasaba y por mas que agudizaba mi vista no la veía, fue entonces cuando su voz me hizo sobresaltar, en serio las palabras que salieron de ella me habían espantado, o era mas el porque si había acudido, la salude igual con un beso en la mejilla, se veía hermosa con su vestido blanco, no pude dejar de recorrer su cuerpo con la mirada.

 

--Claro que no, el tiempo fue el suficiente-- le dije sonriendo --me da gusto que hayas venido, te ves hermosa,-- le dije al momento que sentía el calor en mi rostro --perdona mi atrevimiento, yo ya me he puesto cómodo, o mejor dicho ya estoy preparado, pero ven vamos pasemos al lugar.

 

La invite a que entrara, era la primera vez que yo iba a ese lugar también pero no había duda que por lo que había escuchado era muy refrescante y relajante el estar ahí.