Mansión "Ojo Loco" Potter Blue (MM B: 78439)

[Leslie Ashryver PB]

El rostro de Alessandra estaba rojo a causa de las palabras de Sean, su corazon latia con fuerza llenando sus ojos de lagrimas por la verguenza.

 

-Eres un pervertido, no me referia a...a...eso- chillo como loca.

 

Sus orejas tambien estaban rojas, al menos eso suponia ella al sentir el calor emanar de ella.

 

Dios.

 

Como podia pensar que ella queria saber su vida sexual.

 

Agg.

 

Asco, no podia siquiera pensar en su madre y el haciando algo, Merlin era igual a la vez que su madre le mostro el recuerdo de las noches pasionales con su padre.

 

Su rostro se pusomas rojo si es que podia hacerlo a causa del recuerdo. No pudo evitar estremecerse a causa de eso.

 

-Me referia al trato, tu trabajo y el de ella - fue enumerando de apoco - como haras para evitar engañarla- le acuso.

 

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[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Y para mi sorpresa Alessandra tomo mis palabras por el lado mas carnal. No entendia porque el color tomate de su rostro y orejas, a fin de cuentas esa era una accion justificada tanto desde el punto de vista del placer como biologico sino SJ no hubiera existido. Ademas no era que Perenela estuviese en mala forma como para pensar en que no estuviera en condiciones de amarse como es debido. La verdad es que no entendia a que esta escena de interrogacion. Ya solo falataria que me sentase en una silla y que Harpo le trajera una lampara para apuntarme al rostro con ella.

 

-Al trato...pues como una pareja normal....-dije encogiendome de hombros- en cuano al trabajo...sigo de accidentoso como siempre- lo de robar y contrabandear no era necesario decirlo aunque recibiese el apoyo no verbal de la matriarca. -y en cuanto a lo ultimo...curioso que preguntes. Digamos que estamos trabajando en ello....acaso has practicado juegos de rol??? -dije con picardia- pueden ser muy atrativos en pareja y ayudan a aliviar la tension hacia una desconocida e hipotetica futura atraccion....a ver...ya Perenela paso de enfermera, policia....maestra buenota de...Hogwarts.

 

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[Leslie Ashryver PB]

Alessandra jadeo y agito la cabeza como loca tapandose los oidos a causa de sus palabras, no podia creer que su madre participara en eso.

 

Diablos!!

 

No podia dejar que su madre y Sean conozcan a su esposa, no queria ni pensar en lo que le dirian y estaba segura que Kamra le pidiria hacer aquello.

 

-Te puedes guardar tus...tus momentos con mi madre para ti- le pidio exasperada. -Ya me quedo claro la forma...de amarse tuya y de mi madre, gracias por el dato-

 

Era tan dificil tener una charla normal con el sin que este insinuando su vida sexual.

 

-Mira he visto como ha quedado mi madre...- empezo no muy segura -cuando no estaban juntos mientras ella pasaba el embarazo, le duele estar sin ti- siguio frunciendo el ceño.

 

-Te quiere y eso se ve- prosiguio - pero le haces el minimo daño y te juro que esos dias de "juego de rol" quedaran en el olvido- le amenazo apretando los labios.

 

 

 

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[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Habia dado de lleno en la diana. Sabia que despues de su anterior reaccion ya con esto la dejaria fuera de combate. Que conste que pese a eso nada de lo que habia dicho era incierto. La realidad sea dicha, me estaba divirtiendo cantidad. Tanto como las veces que lo hacia con la suegri, Hayame, Amya....y media familia mas. Si, supongo que ir contra el sistema incluia la familia de mi futura y casi esposa.

 

-Que conste Alessandra que fuiste tu la que preguntastes..yo solo respondi.-una verdad tan grande como el Himalaya. El maestro Tekito-to me habia dicho que siempre habia que ser sinsero pese a las consecuencias.

 

Claro en lo referido a mis vicios. En cuanto a mis labores delictivas pues ya no tanto, a fin de cuentas eso era solo diversion. Pero regresando al tema en cuestion y ya que ella daba las conclusiones al asunto pues mejor fumar la pipa de la paz.

 

-Vez..eso ya es pensar con sensates-dije mientras me inclinaba agradecido- por cierto eras tu la del aliento etilico??? -comenzaria ahora mismo en mi labor de tipo cool (no padrasto..porque no molaba el nombre)

 

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[Leslie Ashryver PB]

-Pero si yo no pregunte- se exalto Alessandra -no te pregunte por la vida sexual que llevan sino el trato como pareja- se defendio.

 

Kamra la trataba con tanto cuidado que hacia que su amor creciera en su pecho como un globo de aire caliente, su esposa siempre tenia un gesto con ella que la enamoraba cada vez mas y era lo que buscaba para su madre.

 

Los ojos azules de la Delacour se abrieron con panico, habia estado tan concentrada maltratando a Sean que debia apestar a alcohol y eso solo aumentaba su molestia con el mago por haber descubierto aquello.

 

-N_o...no se de que hablas- mientras negaba las palabra de Sean habia estado jugando con sus dedos -debes limpiarte la nariz, no sabes que hueles-

 

 

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[Lucrezia Di Medici]

Passepartout, elfo doméstico.

 

De un segundo al otro Passepartout se encontraba centrando toda su fuerza en sus piernas y poniéndose en cuclillas. Tomó impulso y dio un gran salto, que podría haberse considerado extraordinario para una criatura de su naturaleza si otro hubiese sido el ámbito de realización de tal hazaña. Cuando sintió que la gravedad lo llamaba nuevamente al suelo, el elfo rodeó con los delgados dedos de su zurda el brazo de Sagitas y con la mano restante tapó bruscamente su boca. Hablar de pertenencia a bandos era algo aun tabú.

 

- Shhh, ama Sagitas.- le susurró, con una actitud entre maternal y regañona- Me ha entendido mal. Thiago pertenecía a…La Orden del Fénix y quería protegerla a usted porque temía que al ser su hermana sufriera las consecuencias. Tenía miedo que los señores esos de máscaras feas y poco lustrosas volviesen a atacarla. No quería que mancharan las alfombras de sangre y Passepartout lo agradece.

 

La sangre impregnada en la felpa era incluso difícil de limpiar para la magia de un elfo doméstico y él lo había sufrido una innumerable cantidad de veces. Sus pesadillas aun no retraían a épocas donde la “Ojo Loco” se había vuelto un objetivo popular de asaltos y la lucha entre organizaciones delictivas interrumpían a cada momento la paz que solía imperar en el hogar salvo cuando alguien quisiese casarse y no tuviera el detalle de invitar, claro.

 

Temiendo haber lastimado a la mujer con lo descuidado de sus movimientos soltó sus labios y se dejó caer al suelo. El amo Thiago posiblemente se hubiera reído de verlo colgado de su hermana, lo sabía. Agachó ligeramente su cabeza y bajó sus puntiagudas orejas en señal de valedero respeto y como un pedido honesto de disculpas. Recompuesto rápidamente de la culpa volvió a observar a Sagitas directamente a los ojos y tomó su mano aun trémula.

 

- El amo Thiago está vivo, lo sé. No hay nada que haga pensar lo contrario a la señora Lucrezia. Tenem…ella tiene la esperanza de que volverá cuando las aguas se calmen.- le dijo, girando sobre su propio eje y estirando de su brazo hacia los jardines.

 

Casi que la arrastró por el interior de aquella sala. Le fue relativamente fácil guiar sus pasos, quizás porque lo deseaba o quizás por lo débil que la habían dejado las noticias sobre el desaparecido Gryffindor. Passepartout caminaba con ímpetu, levantando sus pies a una altura exagerada. La llevaba tomados de las manos hasta los jardines, donde Lucrezia le había dado su última orden. Tal vez aquello ayudaría a disipar el fantasma de Thiago y la siempre viva duda de qué hubiera pasado si aún viviese bajo aquel techo.

 

- Ama Sagitas, lo siento, pero no puedo hacer esperar más a la señorita Di Médici. El calor la pone nerviosa ¿Sabe? Y luego se enoja con Passepartout. Es la sexta de su nombre ¡Sexta viene de seis!- le comunicó con inequívoca ilusión en su voz y su mirada.

Editado 9 de Septiembre del 2019 por Lucrezia Di Médici

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Mire a Alessandra con recelo, acaso creia ella que no sabia distingir olores cuando mas de una vez habia tenido en mi remanso de placer a chicas con un nivel de alcohol en sangre elevado???. Ojo....que con completo consentimiento...que capaz de que se comeince a regar por ahi que para ligar me hacia falta enborrachar a las feminas..cuando no es asi. Respire por un momento y lo deje pasar. Ahora que era daddy cool mejor ser compinche y no estar divulgando este prematuro estado de alcoholica.

 

-Bueno, dejemoslo asi- me resigne y pase a mejores cosas- por cierto no eras organizadora de eventos???...porque estoy casi que seguro que nada haria mas feliz a Perenela que tu le organizaces junto a Sagitas la boda.

 

Si, la suegri hablaba mucho de ser buena organizando pero ya estaba fuera de agenda. Si sabia que habia existido mucho jaleo con lo de las elecciones, pero casi que estaba sospechando que lo hacxia a proposito.

 

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Editado 11 de Septiembre del 2019 por Sean di Spinneto IV

[Sagitas E. Potter Blue]

Aún seguía enfadada por la noticia de que Thiago estaba vivo cuando me di cuenta que, en realidad no debiera haber enfado sino un altísimo "Alelu.ia" precisamente porque estaba vivo. Algo tironeó mi brazo, haciéndome inclinar hacia delante y, para mi sorpresa, el elfo de mi hermano (ahora que sabía que estaba vivo, no iba a decir más que fuera de Lucrezia) se había enganchado en él. Su expresión y la mano en la cara reforzó la sensación de peligro que intentaba darle a su comunicación.

 

Pero no lo hizo. Enarqué una ceja en señal de protesta muda que dejó de serlo enseguida. El elfo parecía compungido cuando me soltó y se quedó sentado en el suelo.

 

-- ¡Anda, jovencito! -- ¿jovencito a Paspartourtes? -- Estamos en familia y la Familia se protege y sabe todo de sus miembros. ¿Te crees que estos de aquí no saben que yo también pertenezco a la Orden del Fénix? En esta familia no hay secretos para nadie. Y los sustos, si esos bocaenmascarados nos los dan, los pasamos juntos. Y si hay sangre en las alfombras, compramos otras. Pero no abandonamos a la familia.

 

¿Por qué le estaba riñendo a él si, en todo caso, la decisión había sido de mi hermano? ¿Hermano? ¡Cuatro bofetadas le iba a dar en cuanto lo encontrara! Porque ahora que sabía que estaba vivo, ¡vamos que iba a encontrarlo! ¡Pues buena es Sagitas cuando se enfada! Y de tan enfadada que estaba que ni cuenta me di que me agarraba y tiraba de mí, arrastrándome [por los suelos, jajaja] hacia el exterior, hasta que sentí el fresco de los jardines sobre mi pelo manchado de tarta. Recordemos que no había aún limpiado mi cuerpo después de la bromita de Hayame.

 

-- ¡Eh, tú, espera! ¡Qué no estoy lista para ver a una dama tan importante! ¿La sexta dices? ¿Quieres decir que hay seis como ella? ¡Paspertotu, por favor! ¡No puedo lidiar con seis Lucrezias con esta pinta! ¡Deja al menos que me asee!

 

Por supuesto, no me dio tiempo y me encontré con ella, allá, sentada, tomándose algo mientras me esperaba. Sonreí, algo incrédula al verla tan cómodamente instalada en medio de aquellos jardines.

 

-- Lamento haberla hecho esperar. Espero que esté cómoda -- me presenté así, a lo burro, mientras con mi varita hacía desaparecer los restos del pastel. Esperaba que el pelo brillara, al menos, con el huevo de la masa, porque eso no se iba hasta que me diera una buena ducha.

[Tamarindo]

Desde que ahbia acusado a Hayame y que vi que no se llevara la furia de Sugus como había esperado que pasase... todo aquello perdió interés para mi. ya n habia peleas, furias y la comida se estaba acabando, ya n había espectáculo interesante para mi entretenimiento y cuando menos esperaba que pasase nada... o algo, o yo que sé... ya estaba pensando en ponerme a dibujar algo porque asi se me pasa el tiempo haciendo algo provechoso, ya sabéis (tuve que escribir esa ultima palabra 4 veces porque no era capaz de escribirla bien XD ese es el nivel de hoy) yo y mis ganas de dibujar a todas horas y mas de madrugada cuando nada me entretiene y yo no procrastino... En la galeria al menos siempre dibujo, pero aqui... no tengo material...

 

Per cuando pensé que tendría que hacer algo para aparecer material de dibujo y dibujar a la sugus con tarta en la cabeza... apareció un elfo al que no me quedó claro el nombre, algo de pasaportodo o algo asi, no sé... la gente no sabe ponerle nombres normales a los elfos, pepe, ernesto y asi?? en fin, que el elfo le dice a la sugus que parece ser que aun tiene un hermano vivo... La boca se me abrió para que pasase el ave por ahi... el asombro era impresionante, parece que se reanimaba esta tarde de merienda con espectáculo... Simplemente me recosté en el sofá y decidí que era hora de seguir viendo qué pasaba alí con la gente qye se iba presentando. Asombroso todo...

 

--Hablad alto, que en tribuna de sofá queremos enterarnos de todo... Y Sugus, no sabia que tenias otro hermano... hablamos poco tu y yo de cosas profundas creo... deberíamos sentarnos a contarnos mas cosas.

 

Dije con el fin de avivar un poco lo que estaba pasando

[Lucrezia Di Medici]

La larga uña de su dedo índice, pintada de un intenso negro, golpeaba el borde de aquella copa como una vía de escape a su impaciencia. Passepartout aún no cumplía con la orden que le había impuesto y el calor se había vuelto insoportable; el inoportuno lapso de tiempo había alcanzado incluso para que un Rambaldi, uno de los elfos domésticos de la mansión Di Médici, llenara los compartimientos de dos grandes maletas de cuero blanco con sus vestidos de época, sus bienes personales, sus variados objetos mágicos y las monedas de oro que tenía repartidas por la mansión gracias a su descuido. Aixo, el rechoncho gato otrora perteneciente a Thiago Gryffindor, parecía una bola de pelos anaranjada durmiendo sobre todo el equipaje que se había acomodado a espaldas de la blonda italiana.

 

- Era hora…- susurró al divisar los primeros atisbos de la figura de Sagitas y de Passepartout saliendo hacia pleno jardín.

 

Lucrezia se llevó los delgados dedos de su zurda hacia sus labios como si quisiera disimular una risotada pero solo dejó escapar una risa tonta. Trozos de crema y de pastel caían por la ropa de la “Potter Blue” con una lentitud casi desesperante. Una de las frases de cabecera de la aristócrata era esa que dicta “Al César lo que es del César” y, aunque le costase expresarlo, Sagitas siempre tenía esa habilidad innata para sorprenderla. Tal vez era por ello que le guardaba algo de respeto en lo profundo de su conciencia; por ello y por el cariño que Thiago le tenía. La mujer de un ahora enmarañado cabello violeta había evitado muy hábilmente llevarse la peor parte los pocos escrúpulos de Di Médici y eso era algo digno de admirarse. Al llegar Sagitas a su lado, la recibió con una mirada condescendiente.

 

- Antes que nada, mira lo que he comprado recientemente en el Magic Mall. Te encantará. - anunció, levantándose de forma elegante de la silla.

 

La aristócrata se movió dando pequeños saltitos hacia la parte trasera de la maleta y alzó con ímpetu un objeto que hasta ahora había permanecido oculto entre todo el equipaje. Se trataba de una jaula simple de barrotes de hierro, cuadrada y bastante compacta, pero lo que llamaba la atención era lo que encerraba en su interior: un gnomo, pero no uno cualquiera. Aquel gnomo era el más feo que cualquier persona presente en esa mansión hubiese visto en su vida e incluso dudaba si algún magizoólogo había presenciado alguna vez algo tan singularmente atroz. Los ojos diferían en su tamaño de forma grotesca, su cabeza era una exageración en cuanto a la proporcionalidad con el resto del cuerpo y de su boca deforme salía un hilo de baba espesa. Sus huesudos dedos rodeaban uno de los barrotes pero aún estaba adormecido.

 

- ¿Te gusta? Más te gustará el nombre que le he puesto…- le dijo con impostada confianza, dejando correr unos segundos de silencio para mantener la expectación- ¡Sagitas! Si, es macho, pero el nombre le pega.

 

Lucrezia logró con éxito ahogar la risa que golpeaba su garganta para salir pero aquella sofisticada burla se delató en la extensión de su sonrisa. Se volteó rápidamente pues lo último que quería era comenzar una nueva riña con la matriarca de aquella mansión y sumar una más a las tantas que habían tenido; solo quería sostener su impronta ligeramente maliciosa. No pretendía que su contraparte interpretara ese llamado a consensuar como un cambio en su altanería sino como una bajada de tensión en su relación. Dejó la jaula sobre una de las maletas, contemplando como la pequeña criatura en su interior se echaba a dormir, y volvió a dirigirse a Sagitas la humana:

 

- La verdad es que quería establecer esta reunión como un nuevo comienzo de nuestra forma de llevarnos, una que vaya más allá de las discusiones.- inclinó un poco la cabeza como señal de invitación y volvió a tomar asiento- Como primera medida a tomar, desisto de cualquier intento de obtener los derechos sobre esta mansión sobre los que Thiago quería que me hiciese cargo, solo mantendré su habitación. Claro, no firmaré nada porque luego me arrepiento pero puedes quedarte tranquila.

 

Di Médici retomó su actividad hidratante y bebió un sorbo del tercer Martini del día. Sus azules ojos, que parecían brillar ante el impacto de los rayos del sol veraniego, se clavaron directo en los de su interlocutora. Sabía que se encontraría en ella con algo cercano al alivio aunque por su ausencia la batalla legal nunca había comenzado realmente. Con su nueva y magnífica mansión, los terrenos ya algo antiguos de la “Potter Blue” estaban a lo último de su lista de prioridades al menos hasta que encontrase un negocio inmobiliario para llevar a cabo allí. Además no existe tregua alguna si todas las partes no están dispuestas a ceder algo. Bebió otro sorbo y prosiguió previo a cruzarse de piernas:

 

- La segunda es que mediante el Banco Médici he comprado una propiedad a la vera del río Otter y me mudo allí. Hay una considerable extensión de bosque así que dispuse el traslado de mis animales allí. Eso sí, no te librarás de mis visitas.- aclaró con cierta sorna amigable- Quiero establecer un conducto entre ambas mansiones porque quiero priorizar la seguridad de ambas familias a las que Thiago apreciaba, incluidas nosotras. Antes de continuar con la tercera, quiero saber qué opinas.