El Día de la Ira

[taison logan greyback]

TRUMP INTERNATIONAL HOTEL WAIKIKI -HAWAII

 

El lycan emito una lebe carcajada ante la respuesta de la chica , ni siquiera el sabia bien que era lo que habia dicho pero entendia que no queria pasar ni un segundo mas sin ella a su lado , corrio un mechon de pelo de aquel hermoso rostros mientras volia a inhalar aire , pero ahora con un poco mas de fuerza ya que le habia entrado un poco de nervios , sabia que era algo estupido pero debia hacerlo.

 

-Jajaja no amor , te lo pido por que es lo que deseo y entendiendo que dado nuestro estilo de vida jamas tendremos paz , yo no quiero vivir sin ti asi que que dices ? aceptarias casarte conmigo??- se habia puesto de rodillas tomandola de la mano , habia visto eso en una pelicula y nuncase lo revelaria a ella , por que quedaria en ridiculo .

 

Su mirada desde el suelo se clabo en los ojos de la dumbledore a la espera de una respuesta , sabia que la pregunta la tomaria por sorpresa asi como a el los nervios , ya que no estaba acostumbrado a este tipo de situaciones , sonreia al pensar como seria su vida en el futuro mas inmediato con ella a su lado.

 

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Hotel Sofia - Bulgaria

 

Salio caminando como pudo de la tina , le costaba un poco el caminar por lo cual decidio apoyarse en las pared para sostenerse , no sabia a donde estaba la dumbledore pero su aroma no iva muy lejos , asi que con un gran esfuerzo empezo a caminar de regreso a la habitacion , despues de unos momentos no supo como lo logro pero habia llegado hasta su objetivo , sin aguantar mas se derrumbo sobre la cama.

 

Se sentia como si estubiese en una nuve , el dolor empezaba a bajar de a poco lo que le hubiese aplicado la rubia empezaba a surtir efecto en el , lo que lo alegraba por que mientras mas rapido se curase mas pronto volveria a su caceria , el asunto se estaba prolongando mucho y entendia que necesitaba refuerzos aun cuando los habia pedido antes de irse de Suiza.

 

@@Ada Camille Dumbledore

[Mael Blackfyre]

Mansión Gryffindor.~

Golpeé la mesa. Si había alguna palabra para describir todo aquello era frustración. La lista de problemas había empezado tiempo atrás y ninguno parecía solucionarse por si solo. Y ni bien terminábamos de concluir con alguno, aparecían dos nuevos. Junto a Zahil habíamos estado observando algunos detalles que, quizás en su momento, habíamos pasado desapercibidos sobre el Inquisidor. Pero aquello se anteponía a todo.

¿Sagitas sin magia?

Leía las pocas palabras que decía la nota y me recorrió un escalofrío por toda la espalda. Le tendí el papel a mi prima para que lo leyera. El grupo principal de la Orden era Sagitas con su entorno y el mio. Si alguno de los dos caía, no íbamos a poder contra el Inquisidor, claramente. Teniamos que hacer una parada antes de ir a Alaska. De hecho saber con precisión sobre lo ocurrido, podía llevarnos mas rápido.

— Prima, debemos ir al Circo. Tenemos que saber lo que pasó con Sagitas. ¿Has leído bien? Ya tu sabes que si no sabemos a lo que debemos hacerle frente, es como ir directamente a la tumba.

Claramente que no era como los magos que pensaban que los muggles eran inferiores. Si tenía en cuenta que sabían muchas menos cosas que nosotros. Y que de alguna manera, siempre nos podíamos aprovechar. Estaba seguro (sacando Fabricante de Mentiras por un momento) que jamás me había aprovechado de ninguno. Siempre incluso había dado una mano en el mundo muggle. Pero ésta vez se estaban pasando de la raya. Quitarnos la magia no era su derecho y era nuestra obligación detenerlos.

Tomé mi varita y le hice una seña a Zahil. Sabía que iba a seguirme (tenia qué) así que sin dudarlo, salimos de la mansión. Y cuando decimos salir, fue tomar de la mano a Zahil y desaparecer rumbo a los terrenos de la Potter Blue.


Mansión Potter Blue.
El Circo.~
Lo primero que podía ver eran las estructuras de aquella mansión. Y tenía que admitir que había ido hacía tiempo atrás que visitaba aquellos terrenos. Y era un mal momento para tener que buscar pero Sagitas había mencionado al Circo y eso se encontraba a un costado de aquello, cerca del lindero del Bosque Prohibido. Le hice otra seña a Zahil, acomodándome el cuello de mi camisa. El clima era lo menor en aquello y no sentía nada, ni calor ni frío.

Caminamos con paso apresurado, la varita siempre lista. De a poco fuimos acercándonos a aquellas estructuras que decoraban el Circo. Me hubiera encantado ver lo que contenía las jaulas y demases rincones pero no teníamos tiempo. Respiraba para tomar oxígeno ¿Cómo había encontrado la Carpa? No tenía idea. Tal vez intuición o la misma magia de llegar a mi otra prima. Encontré una escena algo extraña.

Sagitas en un rincón. Un señor que no conocía. Y también Xell. Y Sean. Y Matt. Y Hayame. Traté de entrar lo más tranquilo y le dirigí una reverencia al grupo en general. Tal vez estaba pasando por alto mis modales pero aquello era más importante. Fui directamente hacia Sagitas.

— ¡Prima! Que diablo… —la bruja pelivioleta físicamente era igual pero hasta parecía que era alguien diferente desde que la miraba a sus ojos. Me quedé anonadado. Esperando que me dijera que las palabras que me había escrito en las cartas eran mentira.

Claramente que dediqué cada segundo en mirar a los ojos del resto. Sagitas era una bruja poderosa. No quería usurpar su mente en aquel momento de fragilidad. Pero si me encargué de saber sobre el dardo. Y sobre lo que había ocurrido.



@ @ @@Sagitas Potter Blue @@Xell Vladimir Potter Black

[Lisette Ryddleturn]

LA GUARDERIA

 

La bruja estaba escuchando todo entre la impresión y el miedo que le daba lo que estaban hablando y por unos momentos se quedó mirando al enorme hombre herido

 

Afortunadamente Xell Vladimir parecía ser todavía más apta que ella para curar y asegurarse de que nada lastimase a nadie de la familia y se puso una mano en el pecho

 

-Está bien, yo no tengo ningún problema en cuidar de los bebés y asegurarme de que todos tengan de comer de ser necesario, también puedo ver que si sean sus padres los que los recogen

 

Dijo sonriendo de forma agradable pero entonces escuchó que estaban hablando de la orden del fenix y empezó a frotarse las manos de manera nerviosa por eso

 

Todavía recordaba lo que había pasado casi que hacia un año cuando las cosas se volteasen de cabeza y hubiese visto a un Dumbledore resucitado y a una Hayame que quería atacar a la familia

[Malum Luxure]

Playa de Kahanamoku, Oahu. Hawaii

 

Estábamos muy a gusto en la playa descansando puesto que el evento de la noche requeriría de toda nuestra concentración para que salga todo a perfecciona, sabia que seria muy riesgoso y que debería interpretar muy bien mi papel para no levantar sospechas sobre mi persona. La compañía de mi hermana @Ada Camille Dumbledore y mi hermanito @Danny Lestrange era muy divertida, mientras charlábamos de todo, un grupo de jóvenes no dejaban de mirarnos, yo no les prestaba atención ya que cierto mago pelinegro ocupaba mi mente, lo normal hubiera sido un coqueteo descarado de mi parte.

 

-Gracias hermanita.- No pude evitar una sonrisa cómplice en mi rostro cuando entendí el juego de mi bella.

 

Me acomode dejando que ella jugara con la mirada de los muchachos, no podía evitar de vez en cuando hacer algún movimiento provocador, esto era muy entrenudo, luego me toco hacer lo mismo con ella...mis manos le daban caricias delicadas y masajes de paso...notaba que ellos se debatían que hacer. Mientras note como @ se iba al mar, arquee una ceja por que estaba siendo dramático, haciendo que Ada se preocupe por él y eso cortara el momento.

 

-La vérité est que je ne l'ai pas vu partir ... voudriez-vous mettre une punition.- Le respondí pero ella salio tan apurada que no me oyó, la verdad me molesto la actitud del pulgoso pero en su momento se lo diría.

 

Para quitarme el mal sabor de boca le sonreí a mi hermanito y decidí seguir un rato mas con el juego, me senté boca arriba en la reposera moviendo las piernas de manera elegante sin dejar de mirarlos y sonreír, entonces uno se animo a venir, solté una risita que sonó aparentemente inocente.

 

-Buenas tardes señorita...pude notar que quizá necesite compañía.- Dijo un jovencito ojigris de cabellos castaños.

 

Le mire atenta tras los vidrios oscuros y jugué con mi cabellos, analizando su valentía, podía notar que sus amigos estaban a la expectativa y lo alentaban a seguir con su intento de ligue...realmente el pobre no sabia con quien se estaba metiendo, lo dejaría continuar antes de despacharlo.

 

-Eso depende que ofrezca la compañía caballero...puede que la acepte.- Conteste con voz dulce y algo tímida, me consideraba una buena actriz.

 

El joven se sentó donde antes había estado mi hermana y lucio su sonrisa mas ganadora al parecer, sus intentos de ser galán la verdad no me provocaban nada mas que mucha gracia.

 

-Que le parece si la invito a una fiesta privada esta noche y vemos si surge algo que podamos hacer.- Comento en tono sugerente.

 

Me acomode la bikini y el pareo para luego ponerme de pie y hacerle señas a Danny que me siguiera, me puse delante del jovencito y con una tierna sonrisa le acaricie levemente el rostro, prestando atención a la reacción de sus amigos, que parecían celebrar el acercamiento.

 

-Si eso implica los dos solos...- Le susurre al oído derecho, lo que pareció interesarle. -A ti gritando desgarradoramente, vulnerable y lleno de dolor.- Mi voz había cambiado a una bastante tétrica.- Entonces estaré mas que dispuesta a ser como la viuda negra para bañarme en tu dulce sangre.- Respondí dejando aflorar una sonrisa torcida.

 

Él abrí los ojos de forma desmesurada pues lo que le dije no era para nada lo que se imaginaba, mi diversión era pura, de verdad gozaba la cara pálida que me dio en ese momento, todo intento de coquetería se expuso en un instante, podía ver en sus ojos el tinte de el miedo asomarse.

 

-Q...que?...-Tartamudeo parándose tratando de alejarse de mi.

 

Solté una risa por que ya no podía contenerla mas, le mire con pena para empezar a irme derecho al hotel, necesitaba empezar a prepararme realmente y aun no había elegido un vestido, tenia una idea de que llevaría, maquillaje, peluca y de mas...Lady Luxure Triviani debía desaparecer esta noche para cumplir mi misión.

 

-Si cambias de opinión búscame....me llamo Naomi Boncarter.- Entonces lo deje allí junto con su gente desconcertada mientras me iba mas que feliz.

 

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Editado 3 de Agosto del 2020 por Lady Luxure Grindelwald

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Sean en el Circo con medio Orden.

 

Sin lugar a dudas mi mejor arma era utilizar el silencio. Porque siempre, al tratar de no sobresalir, caian por si solos los pejes gordos, soltaban la lengua y ta chan.....tenia yo informacion importante. Con Sagitas eso era asunto de casi todos los dias. Y el padre Andrews como que ayudaba mucho. Primero el asunto de los crios robados por extremistas con su posterios rescate con Xell (junto a otro grupo) metida en el ajo. Segundo que despues Sagitas hablo de destrucción de Tenenbaum Futuristics. Alguna relacion??? yo diria que si. Claro necesitaba confirmacion y por tanto mover mis fuentes

 

En cuanto a lo del dardo...a no ser que lo tuvieramos el mismo no es que hubiese nada que hacer. Por suerte no hube de esperar mucho para que de pocos pasasemos a manada. Ya que minutos despues llego Elvis y su comitiva. Sabia que tenia lazos con Sagitas, como todos en este mundo magico, pero ya me comenzaba a parecer sospechoso tanto trabajo en grupo. Porque si....segun Sagitas ¨los...plural....habian..plural..grabado¨. Rapidamente mi agenda conspiranoica comenzo a encender su bombillito....y no es que fueran muchas las posibilidades para un grupo que trabajaba mancomunadamente por el bien de la sociedad magica....eso me olia familiar....y comenzaba a estornudar por cierta alergia a vestimenta de ave.

 

-Hola Elvis....por tu reaccion supongo que ya estas enterado de lo se Sagitas. -Claro si yo la vi escribiendo la nota...-Ahora bien...podria alguien decirme que es eso de niños robados/rescatados y que sucedio en Tenenbaum Futuristics???

 

Deslice mi rostros desde Elvis a Sagitas y la vi sonriendo teniendo en sus manos un celular que antes habia pedido prestado al padre Andrews. Claro, dada la situacion verla sonriendo me llamo la atencion.

 

-Encontraste algo??? -le pregunte para que compartiera la informacion.....que alli todos estabamos para ayudar.....y algunos para ademas cobrar galeones por ello.

 

@@@Xell Vladimir Potter Black@@Sagitas Potter Blue

 

 

Sean en Hawaii

 

Despues de limpiarme la nariz ensangrentada despues del topless de Ada y las sugerentes artes de Lady(en las cuales perdi tiempo en gastar todo un rollo de fotos) ya tenia un buena arsenal de todo lo que rodeaba la futura mision. Preocupante pues los animos hormonados y sentimentales, en una situacion de infiltracion podria presuponer un riesgo pues si alguien caia en manos del adversario podrian llegar a ponerlo en contra nuestra. Lo bueno es que al parecer compartian ideales de vincular placer y negocios...cuando la ocasion lo ameritaba. Ahora solo faltaba la ocasion para extraer cierta pieza intima...por suerte Lady hablo de una fiesta...que seria un momento perfecto para actuar.

 

@@Lady Luxure Grindelwald@@taison_greyback@Ada Camille Dumbledore

[Leslie Ashryver PB]

Re perdida e.e

 

 

 

Alessandra estaba que echaba chispas por los ojos, el maldito de Sean trataba de calmar a todos pero tanto el verdadero padre como ella sabían que no era un cura de verdad, ¡estaba casado!! Merlin sin mencionar que era mago, pero si se ponía a pensar no había leyes que por ser un ser mágico no pudiera ser sacerdote, pero dudaba que Dios o alguien quisiera a alguien como el Linmer.

 

La cuestión es que ambos hombres se enfrascaron en una conversación de la que se había perdido, enojada por aquello se dio media vuelta y se marchó, demonios, Sean sabía la verdad y para colmo con todo lo que estaba pasando en el mundo mágico era un caos, se ajustó el abrigo al cuerpo y se dispuso a seguir caminando.

 

Las calles estaban desiertas mientras caminaba directo a su hogar, deseaba que @ estuviera con ella, claro en la calle con con Sean y el cura, lo único que faltaba era que el padre Andrew abriera su bocota también diciendo algo que no debía a la peliblanca, la rubia suspiro y decidió ir a San Mungo, era el único lugar donde podía distraerse, trabajar y concentra su atención hay.

 

Camino a un callejón sin salida y oscuro para abrir un portal donde la llevo a su oficina del hospital. Escribió una nota donde le pidió a la Ashryver que fuera a verla.

[Sagitas E. Potter Blue]

 

Enarqué una ceja y empecé a pensar de esa manera rápida que se me da también. Había perdido la magia, vale, pero no las reacciones rápidas. Así que en Alaska... ¿Por qué tan lejos? Si tuviera que ir, tendría que usar varios aviones y hacer transbordo en diferentes aeropuertos y... Fruncí el ceño, enfadada. ¿Cómo pensaba en ir a ningún sitio si me había convertido en una squib? Solté aire y después me fijé en la cara de los otros y puse cara de risa.

 

-- De acuerdo. Alaska. Muy lejos para mi gusto.

 

Salté sobre mis pies, no me da vergüenza reconocerlo. Sentí el ruido de apariciones múltiples y me puse roja, no sé si de sorpresa o de miedo. O tal vez fueron ambas cosas porque miré a mi primo Elvis con desconcierto y sí, ahora sí, con vergüenza. Me había atrevido a confesarle por carta lo sucedido, de forma muy escueta, pero ahora, cara a cara, me sentía toda roja.

 

-- ¡Elvis! ¡Has...! ¿Has recibido mi...?-- ¿Para qué una pregunta tan tonta? Claro que la había recibido o no estaría aquí. Él siempre se preocupaba por mí. -- Lo siento, yo...

 

No sé porqué me disculpaba. Yo era una víctima, no era culpable de nada. Apreté la mandíbula e intenté recuperar el control antes de volver a hablarle.

 

-- Hubo una emboscada en la calle, donde nos vimos por última vez. -- No quería mencionar el cuartel porque aunque casi todos los presentes habíamos estado allá, Matt y el Padre Andrew no, así que tampoco hacía falta mencionarlo. -- Unos soldados de los del Inquisidor irrumpieron con disparos de esos que hacen con esas varas gruesas y huecas. Pistolas, no me acordaba. Yo estaba de espalda y uno de esos dardos me dio y... Y ya está.

 

No iba a repetir en voz alta el resultado o me pondría a llorar; no me gusta llorar en público. Noté cierto cosquilleo en la nuca y parpadeé, ¿alguien usaba la Legeremancia conmigo? ¡Demonios! ¡Todos mis secretos al aire libre! Menos mal que yo era previsora y los más oscuros y temibles estaban bajo una llave oculta de pensamientos y pliegues de memoria que sería imposible de violar. Empecé a alterarme. ¡No era nada sin la magia!

 

Miré con cara agria a Sean. ¡Cómo fuera él quien se estuviera metiendo en mi mente para saber dónde escondía cierta daga que él quería...!

 

-- Elvis. -- Intenté que no se fijara en que Sean parecía saber demasiado de ciertas cosas que no debiera. -- Este señor es el Padre Andrew, un muggle quien amablemente nos ha defendido ante los soldados del Inquisidor. Parece ser que están peinando todo Londres en nuestra búsqueda. De Sean, Babila, Xell y yo por algo de esos dardos. Es un buen hombre y le estoy muy agradecida por su apoyo.

 

Después me giré hacia Sean, con los ojos clavados en él:

 

-- ¿Por qué crees que Elvis tenga algo que ver con ese Tennebaum como se llame? Mi primo es una gran persona -- Y esta segunda frase estaba llena de admiración y pena por no poder emularle, y menos ahora que ya no era nada. -- Elvis, yo no puedo ayudarte, al menos mágicamente. Soy... -- Ahora sí que me salían de nuevo las lágrimas y lo dije con rabia. -- Soy una sencilla Squib.

[Sophie Elizabeth Granger]

Mientras pensaba como podía hacer salir a aquella rata de su agujero llego una misiva a manos de Elvis. El cambio en su expresión no auguraba nada bueno lo cual comprobó cuando este le paso la pequeña carta. Si fuese humana se habría puesto pálida cuando leyó lo que había pasado con Sagitas. Aquella bruja era del grupo de magos con mas poder en la comunidad inglesa, si ella había caído, lo que pudiese pasarle a los demás era un panorama desolador.

 

Sabía que tenia que ir al Circo junto a su primo, por lo que se levanto rapidamente y se coloco la capucha sobre la cabeza antes de tomar la mano que le ofrecía el Gryffindor para desaparecer. Sabía que no iban a un lugar donde su presencia era grata, así que prefirió tratar de pasar desapercibida para no incomodar a la Potter Blue, bastante tenia su compañera de bando con haber perdido sus poderes. En cuanto aparecieron en los jardines, camino junto a Elvis pero al entrar a la carpa decidió quedarse un poco atrás, cerca de la entrada.

 

Desde ahi podía escuchar muy bien lo que estaban hablando y sin incomodar a nadie, incluyéndose. Mientras seguían hablando sobre la localización del Inquisidor, se pregunto si podría aparecerse directo a la Fortaleza Errante con alguien que no fuera de la Orden Oscura, esto les daría una ventaja sobre el Inquisidor porque la Forta no era un lugar donde un muggle se pudiese colar. De pronto alguien pregunto sobre el laboratorio que había sido destruido

 

- Asi es, Elvis no tiene nada que ver, fue un grupo terrorista, que le hizo un gran favor al mundo - dijo mientras seguía recargada en la entrada. - tenemos que ir a Alaska y hacer que el Inquisidor salga de su escondite, Elvis. Creo que es la unica manera de ayudarla, estoy segura que el debe tener un antidoto para esa cosa que le inyectaron

 

@

[Syrius McGonagall]

Matt Ironwood.

 

Hotel Halekulani. Día de la Gala.

 

 

 

 

La fiesta llevaba una hora de empezada y la mayoría de los invitados ya se encontraban presentes, pero para desconcierto del mago no encontraba a los franceses, ¿Podrían haber abortado la misión? No parecía probable, sino le hubieran notificado ¿Les habría pasado algo? Esperaba que no, quizas solo estuvieran algo retrasados, o tal vez no habían ido con su apariencia, podrían encontrarse bajo los efectos de la poción multijugos o algún encantamiento de transformación, con esa perspectiva podrían ser cualquiera. Recorrió con la mirada el gran salón de fiesta pero ningún rostro le resultó familiar, si así fuera y se hubieran presentado con otras apariencia esperaba que en algún momento de la velada se acercaran hasta el para revelarse.

 

Lanzó una rápida mirada a la entrada al sentir que alguien ingresaba pero no eran los franceses, era una pareja en sus cuarenta con un aire de superioridad insufrible.

 

Como había hecho varias veces desde hacía cuarenta minutos, centró su atención a la mesa junto a la zona VIP de la tercera ventana a la derecha. Donde los empleados de Genetics, Emily Bronson y Patrick Dixon se sentaban, los llevaba observando y escuchando desde hace un rato, parecían ser unos invitados tan normales y aburridos como cualquiera de los otros, el nombre de Akito Matiba solo había sido nombrado una vez desde su llegada y simplemente fue una pregunta de Emily a Patrick si lo habia visto.

 

Matiba no bajó a la fiesta desde su llegada hacía casi dos horas, ¿Donde estaría? No creía conveniente ir a investigarlo, levantaría muchas sospechas por parte del resto del cuerpo de seguridad si abandonaba su puesto, además el rumano cuando se apartaba del banquete recorría el lugar para comprobar que sus empleados estuvieran donde les había indicado.

 

Por fin algo sucedió, un celular sonó en la mesa de Genetics, el de Patrick. Observó cómo el hombre se levantaba y abandonaba su lugar rumbo a la puerta que conducía a los baños. El castaño se fijó en el viejo rumano y estaba muy entretenido con unos huevos, al baño de todos modos tenía permitido ir.

 

El mago cruzó el abarrotado salón, sorteando a las parejas y grupos que recorrían y se movían al son de la música sobre la pista central tras el tipo de Genetics. Cruzar las puertas que llevaban al pasillo de los baños era como entrar en otro mundo, dentro la cálida luz blanca que lo iluminaba y el sonido amortiguado de la fiesta al otro lado le daban un ambiente tranquilo.

 

Patrick a un par de pasos por delante del ojiazul sacó su teléfono del bolsillo de su pantalón y observó el número que lo llamaba y sacudió la cabeza ¿Molesto? Tendría que averiguarlo.

 

Un hombre salía del baño en el mismo momento que Patrick entraba, el empleado de Genetics lo saludó con una leve inclinación de la cabeza e ingresó y el Ironwood tras de él. El baño era enorme y lujoso, el suelo se encontraba cubierto por un lustroso mármol negro que hacía juego con las paredes de los cubículos donde se encontraban los inodoros junto a la pared derecha y con la larga mesada donde estaban los lavabos en la pared izquierda.

 

Patrick fue hasta uno de los urinales que se disponían en la pared que se enfrentaba a la entrada, al otro extremo del baño y mientras orinaba atendió el teléfono. Matt mientras tanto fue hasta el lavabo más cercano a los urinales y fingió lavarse la cara y las manos. Activó antes su intercomunicador para no perder detalle de la conversación.

 

-Si, cancela el vuelo para Los Ángeles de mañana - dijo Patrick al teléfono y realizó una pausa, el mago no podía escuchar que decía la otra persona al otro lado de la línea pero lo que sea que dijo pareció exasperar al empleado de Genetics, que suspiró molesto.

 

-Claramente, cancela el otro vuelto también… bien….. no nada más, cualquier otra situación te aviso… no, no, no, ya lo tengo cubierto, tu cancela esos vuelos… ok, hasta luego - y Patrick cortó la llamada.

 

El mago terminó de lavarse las manos y se dirigió hasta el secador automático mientras Patrick iba hacia uno de los lavabos, aprovechó para desactivar su comunicador y saludó al empleado de Genetics antes de salir del baño. Una vez en el pasillo el ojiazul volvió a activar su comunicador pero con otro efecto, comunicarse con la Oficina del FBI.

 

-Quiero los registros de vuelos de Patrick Dixon…. Y los de Emily Bronson - agregó al pensarselo mejor, cortó la comunicación al escuchar la afirmativa, tenía que volver a su puesto antes de que el rumano y el resto de sus compañeros lo notaran.

[Hayame Snape Potter Black]

Guardería del Hipogrifo

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Mientras que la vampiro esperaba a su sobrina para saber si habría en aquel sitio un lugar seguro para comenzar a preparar los antídotos (después de todo, era consciente de que mucho de lo que hacía en pociones podía ser corrosivo y mortal, especialmente para los bebés pequeños), iba anotando una lista en un pequeño pergamino que tenía a la mano; sabía que iba a necesitar más de un ingrediente y mientras aguardaba respuesta, lo mejor era que se fueran consiguiendo las cosas que iba a necesitar

Además de que Babila también iba a necesitar un poco de material adecuado a su tamaño, no quería que el pobre hombre se hiciera daño mientras intentaba ayudarla, eso era lo correcto; finalmente terminó de puntuar todo con su pluma de águila y le tendió el pergamino a su elfo que se había acercado y asentía seriamente, sabiendo que lo que le pedían era importante

-Que no se te olvide nada -ordenó hayame entornando los ojos y con un fuerte sonido, su elfo doméstico se inclinó y luego desapareció