Aventuras Mortífagas 12 — Laeanat Muzlima

[Ada Camille Dumbledore]

La realidad era que definitivamente no sabía poder buscar Arya para que pudiera aclararme sobre sus visiones que podíamos hacer, si conocíamos a fondo que era lo que había sucedido, seguramente habría alguna estrategia para asegurarnos que esto no sucediera. Mientras camina a la voz de Mael me hizo voltear, agradecí al cielo por poder verlo allí y así él podría darme alguna razón de la Macnair. El ver el aspecto de Blackfair me hizo recordar de inmediato a su madre y sentí como una punzada me atravesó el pecho, disimule tras una sonrisa amable, realmente extrañaba a mi querida pelirroja pero ella había tomado otros caminos. Ahora mi objetivo era centrarme en buscar que debíamos hacer. Cuando preguntó por Arya me sorprendió.

-No se nada de Arya, justo vine aquí porque creí que la encontraría, ustedes siendo más cercanos pensé sabían de ella.

La ansiedad empezó a subir en mi, si ella no estaba como haríamos para logrará que esto avanzará a lo que debía hacerse para evitar la destrucción de la marca. Otras personas se reunieron con nosotros, reconocí a Uriel por ser un Luxure y le salude con una inclinación de cabeza mientras nos dirigíamos al salón, seguramente allí otros mortífagos se reunirían con nosotros para ponernos manos al asunto.

Llegando al salón, Grelliam un ente bastante singular por su forma de expresarse y la extraña sensación que me causaba nos explico lo que había sucedido antes de ser convocados. Darla también apareció allí, le salude con una sonrisa, al parecer ellos habían estado antes que nosotros y eran justo los que conocían la información crucial para poder seguir con esto.

-Mael si saben como son los objetos y todo esto paso en la biblioteca, podríamos empezar las búsqueda en ese lugar, es posible que siendo ahí donde desvanecieron podríamos encontrar rastros de su magia. Y además seria el primer lugar lógico para buscar los objetos.

Añadí a los dicho por el, estábamos listos para empezar a buscar, era el primer paso para saber que era lo que debíamos hacer.

@ Mael Blackfyre  @ Darla Potter Black  @ Hessenordwood Crouch  @ Azrael Lycan

[Hessenordwood Crouch]

Grelliam

La respuesta de Mael sobre la consulta de la profecía de Macnair no simpatizó en absoluto ni supo aliviar las sospechas que tiene el brujo al respecto. No lo llevan más que a pensar en que están utilizándolos para algo más grande u oculto,  en algún tipo de prueba tal vez para demostrar su lealtad a los cada vez más inciertos ideales mortífagos, y decir que ella no estaba más cuerda cuando profetizó aquella visiones no mejora las circunstancias. Pero, ¿quién era él para juzgar una mente confundida? Puede ser que Grelliam no se encuentre más motivado por estas personas o sus propios propósitos hacia los misterios que estas fuerzas despiertan, sin embargo, todo es tan retorcido todavía que remueve su interés sobre el estudio de esta materia oscura. Sería un tonto además si dejaba pasar esta oportunidad.

De todas formas se mantiene, esta vez caminando casi en círculos, en un lento vaivén cerca de la única persona que le es más real en toda la habitación. Las pulsaciones de Kila se escuchan en sus oídos todavía, puede sentirlas en las yemas de sus dedos como si aún sostuviera su mano. Al menos ese sentimiento relajó los músculos nerviosos de su cerebro que comenzaban a alterarse cuando Blackfire retoma la palabra. Grell negó apenas cuando vuelven los cuestionamientos sobre lo que estos fantamas habian dicho en aquella sesión. Eran algo tercos para ser un grupo, ¿cómo es que han sobrevivido tanto tiempo? Piensa él que debería ser por toda esa fuerza bárbara que poseen muy secretamente. 

—Era otra lengua, es fácil hacer malas interpretaciones-, comenzó-, y con un gesto de sus manos a la distancia empujaba a Kila a que les mostrara lo que había quedado del pergamino tras la partida de los espectro de los reyes magos. —Yo pienso mi señor, que podría bien tratarse de una especie de armadura, en su totalidad… quiero decir, con los tres ingredientes juntos-, dice esta vez acercándose a Mael, pues susurra aquello como si sospechara que algo fuera de los muros de esa sala pudieran escucharlo. Pero luego chasquea la lengua, no quiere ponerse maniaco tan pronto.

—La corona de oro habla de un rey de reyes-, comienza señalando sobre el pergamino los fragmentos donde han sacado la información. —Una vez coronado este “regente” necesitará preparar su cuerpo desde adentro hacia afuera, como si fuera a embalsamarse con mirra, para que sea capaz de soportar un vínculo con esta armadura-, mascullando así, con monotonía en su acento híbrido, recuerda porque no fue nunca un maestro popular en el séptimo curso durante su docencia en Hogwarts. —Finalmente necesitará una ofrenda como el incienso para que sea reconocido como único y unifique a su vez toda la fuerza de la que está compuesta.

No va a terminar su explicación diciendo que él piensa en esta armadura como una especie de ascenso de un gran y poderoso señor tenebroso, sin embargo, la influencia que hay en esta fuerza unificadora sobre los clanes mortífagos era muy evidente. 

—Aunque, podría haberme equivocado y traducir algo mal-, se alejó hasta una sombra y con la punta de sus dedos pareció deshilachar. Podía sentir una conexión ahí, quizá las sombras podrían guiarlo hasta donde el fantasma con el ingrediente que correspondía a las fuerzas de Nosferatu se había ocultado. 

Existía además un hecho ante todas las cosas que ahora les juegan en contra y era el que estos objetos, ingredientes o magia, debían encontrarse dentro de los límites de la Torre, lo que de alguna manera reducía las posibilidades, aunque no los peligros.

—Ella tradujo una parte del mensaje-, se refirió en la ausencia de Hysys en el grupo. —Dijo: las letras están ocultas entre líneas, nada es evidente ante los ojos que no saben ver más allá de lo que es una observación detallada de lo que él desea-, él dudó, tal vez no era Grelliam el más indicado para guiar los rastros de los fantasmas. —El ingrediente del Caronte debe encontrarse ahí-, apoyaba la idea de la bruja Ada de volver a la biblioteca donde se había inspeccionado el pergamino, aunque también estaba de acuerdo con Mael en que quizá si el grupo se dividía había más oportunidades de encontrar más pronto los ingredientes, sobre todo ahora que Blackfire les ha informado de esta entidad que merodea por los alrededores de la torre negra. 

Si hay algo o alguien que quisiera y pudiera además de ellos obtener estos poderes seguramente los fantasmas o las partes del pergamino que no han sido traducidas lo explican mejor, sin embargo, Hysy se había ido de ahí, y con ella decidió llevarse parte del mensaje. 

[Thoth]

-Regresa.-

 

Ordeno y el demonio aparecio a su lado, el egipcio se encontraba cansado y noto como en su mano se habia creado algunos hechizos de comando. Esto bien puidera ser algo propio del ser demoniaco con quien habia pactado o bien ser algo que dejaba a todos los del clan al hacer uso de esa habilidad.

 

-¿Que averiguaste? - Cuestino y el demonio respondio sobre los objetos.  -Si son tres, quizas algode información exista en la biblioteca del bibliotecario o en el faro, o bien pudiera ser otros objetos que no tenga nada que ver con lo que me imagino.- Y bajo la mirada, suspiro y ordeno. -llevame a donde estan esos sujetos que oistes. - Ordeno. -Y al llegar permanece invisible a sus ojos, creo que sera mejor asi. -

 

Al terminar de pronunciar esas palabras se marcharon y se fueron junto o cercano a donde estan @ Ada Camille Dumbledore  y los demas,  sin embargo, el demomio empleando su magia demoniaca se encontraba oculto a la vista, ademas Lycan podia emplear todo su poder, ya que algo del mismo lo gastaba en mantener esa invocacion.  En ese sentido, quizas al dominarla pudiera mantener mas poder al usarlo. Sin embargo, al ser un aprendiz en el uso de esa habilidad del clan de los Senecales de Cartonte era el motivo que no mostraba todo su potencial. 

 

-¿Qué ocurre?  ¿Quien nos ha convocado y para que tarea?-

Editado 28 de Febrero del 2022 por Azrael Lycan

[Mael Blackfyre]

Asentí a las palabras de Ada que también apoyaba la idea de ir a la biblioteca. Lo que más me preocupaba era que teníamos poco tiempo y al meternos adentro de aquel sitio, podría llevarnos semanas. Pero estaba seguro que con las pistas que estaban obteniendo los mortífagos, tal vez ahorrábamos un poco más de tiempo. Los protocolos era algo que me sacaban de quicio pero las palabras del chico Grelliam hicieron notar una cosa importante. Gracias a lo que decía teníamos de qué se trataba aquello. Y por lo poco que había descrito Hysy, teníamos dónde.

— Es mucho más de lo que creíamos. ¿Una armadura? Puede ser. Las traducciones siempre puede variar dependiendo de quien las lea —hablé al chico y a todos los que habían llegado—. Pero puede ser un objeto en si o una “armadura” referido a poder. A fin de cuentas, representaría lo mismo. Tal vez logrando encontrar eso, salvemos la Torre Negra. Tal vez con ése poder se estabilice nuestra fortaleza oscura —exclamé como pensamiento.

Me ponía nervioso al pensar que había una fuerza exterior queriendo entrar. No me daba miedo, porque éramos mortífagos, conocíamos magia oscura como muchos otros. Pero en el afán de querer hacerse con ésa maldición, tal vez sería la causa que llevaría a la destrucción de la Torre Negra. Tal vez era inevitable que sucediera. Y era el momento donde la líder desaparecía. ¿Y si ésa figura se la había llevado? Nadie había visto a Arya Macnair, todo podía llegar a ser. Una figura se revolvió a nuestras espaldas. El joven Luxure tal vez era la primera vez que había aparecido en el momento justo.

— Tenemos problemas. Han encontrado una maldición y creemos que es la solución ante la caída de la Torre Negra. Tres espíritus antiguos nos dieron algunas pistas de tres objetos. Descifraron que seria una especie de armadura. Aún no sabemos si es a modo objeto o a modo poder, según las diferencias en las traducciones. Pero todos coincidimos que la biblioteca es el lugar a empezar —me fui acercando a la nueva persona que había aparecido en ésa reunión. Todo aquel se sumara era una varita más disponible y más tiempo conseguido—. Arya aún no aparece y una fuerza externa quiere entrar aquí. Tal vez el motivo de la caída de nuestro bando. ¿Tienes algo en lo que puedes ayudar? Entiendo que estás ultimando detalles con los Senescales, tal vez puedas brindarnos un ayuda con eso —lo pensaba ya que Hysy jamás había aparecido. Me di vuelta ante los demás—. ¿Vamos a la biblioteca?

@ Azrael Lycan  @ Darla Potter Black  @ Ada Camille Dumbledore  @ Hessenordwood Crouch

[Thoth]

-Supongo que se refieren a esa biblioteca donde no podemos entrar, la cual custodia el bibliotecario. - Agregó. - Y si es así, creo que no todos podemos ir. - Enfatizó. - Incluso en la fortaleza oscura, existen parajes exclusivo, por lo que sería imposible soñar en conocerlos todos, ya que la magia en ciertos puntos no lo permitirá. - Suspiro. - Además, si son tres objetos será mejor si nos dividimos. Aunque, si se refieren a una biblioteca común supongo que no habrá algún problema, quizás en las pertenencias de Black pueda dar una pista de ocurrido o bien en las memorias de las antiguas líderes, pero no estoy seguro si esta un lugar con tan valiosa información. - 

 

El egipcio comenzó a dar ciertas trabas o más bien indicar lo establecido para los tres clanes, ya que tres ubicaciones no era posible de entrar a todos. En ese sentido, la biblioteca era uno de estos, otro era el Faro y ese último dedicado a las bestias, por lo cual éste mago regente de Egipto no tomó mucha importancia de su ubicación, a pesar que siempre pensó que estaría representado por un bosque, igual esos seres los veía como herramientas. 

 

"¿Qué tiene que ver mi Clan en todo esto?" 

 

Se cuestionó y agregó. 

 

-Quizás... - comenzó hablar en clave para que su demonio comprendiera. - una identidad desconocida, ya este ingresando a la biblioteca en estos momentos, por lo cual debemos tomar acciones. Por ende, sugiero dividirnos y buscar los tres objetos. O sería una lástima que la líder no apareciera y ese captor le dé un triste final. - En ello comenzó hablar parsel, luego de aquel comentario algo chocante para algunos, pero eso le permitirá ganar tiempo y adquirir ese objeto- Ve. - Hizo pausa. - y busca. - ordenó y dejó de hablar.

 

El demonio se marchó y fue hasta la biblioteca, pero como había expresado su invocador este lugar se encontraba protegido y no le sería fácil ingresar. Por ese este toma en posesión alguien de aquel Clan que ese anciano bibliotecario era líder. 

[Darla G Dumbledore]

Su expresión se ablandó y correspondió al gesto de Mael hacia ella, no entendía con exactitud lo que parecía ocurrirle al mago, aunque entendía el cuestionamiento en cuanto sus palabras continuaron. Que Arya estuviera desquiciada no era bueno, no que la bruja no hubiera sido toda la vida, en su opinión, algo temperamental, pero lo que él expresaba ahora era algo muy distinto. Pero de allí a que se les perdiera y ahora dependiese de las palabras crípticas de tres espíritus y un pergamino tramposo, no era lo óptimo, no, para nada.

Su sonrisa se volvió más cálida al corresponder a su cuñada, pero la tensión por el gesto de Mael regresó a ella, además de que le incomodaba la presencia de un demonio allí. A eso debía sumarse de que desde hacía algunas horas su anillo contra la presencia de enemigos irradiaba un calor muy leve pero significativo.

Siente a Grelliam a su alrededor y le viene a la mente si él puede haber alterado la mente de Arya en algún momento. Es gracioso, él podría llegar a conocerla más incluso que los que estaban allí y la conocían de antes. ¿Por qué pensaba eso? Pues por la simple razón que su mente parecía funcionar en planos múltiples distintos a los que uno maneja habitualmente. Estaba segura de que era capaz de comprender esa supuesta locura o inestabilidad de la Macnair. El gesto de él hacia ella la hace suspirar y asiente.

—El pergamino manchado de sangre mostró las fórmulas de diversas pociones, pero creo que a su vez trae una historia y las palabras que se deben pronunciar al mezclar dichas pociones para que con las tres piezas, recubiertas con ellas, una magia más antigua se haga presente y produzca el efecto  correcto y no se vuelva… nada… —piensa en cómo se complementan los clanes. Quizás Mael tenga razón, a ella se le ha hecho más fuerte la presencia de uno de los espíritus, pero Grelliam no puede estar tan errado, su sangre ayudó a la magia.

—Creo que tiene razón, si los Carontes están mejor en la Biblioteca y si los objetos o los fantasmas se manifestarán a sus afines, es lógico caminar cada uno por su cuenta pero interconectados por la magia —no tenía idea de por qué había dicho eso —quiero decir, debemos buscar dentro de nuestros límites e incluso impedir que lo que sea que nos merodea llegue hasta nosotros —hizo una pausa, pensativa.

El Bastión Salvaje estaba en las afueras de la Fortaleza Oscura ¿cómo afectaba eso a su clan? Estando fuera de los límites, por más cercano que estuvieran a la fortaleza quizás corrieran un cierto riesgo. Pero obviamente sabía que estaban preparados para ello y más. Así que el fantasma podía estar a salvo allí. Movió ligeramente la cabeza, pensando en ello más al notar la llegada de alguien más ¿o simplemente había cambiado de lugar? Fue una sensación extraña.

Pero no podía permitirse volarse hacia otras ideas, no cuando Mael analizaba si la armadura propuesta por Grelliam no era en realidad el poder que restableciera y salvara la Torre Negra y con ella a la Fortaleza. Aunque la llegada del Luxure y sus respuestas a la temática. Dudo, tenía lógica, pero no existía una única y exclusiva biblioteca en la Fortaleza, ella había estado en una hacía no tan poco. Levantó una ceja al escuchar las palabras en Pársel.

—¿A dónde quieres que vaya y busque?  —preguntó fingiendo desorientación al sentir en su piel como volvía a la normalidad, se giró y sus pupilas de gato siguieron la figura que se alejaba. Las leyendas muggles de que los gatos pueden ver a los espíritus y seres de otros mundos eran tan ciertas como la piel que de pronto la recubrió fortaleciendo su propia piel. Esa Segunda Piel permitió que la suya adquiriera la dureza de un metal flexible y dúctil mientras dirigía sus pasos hacia donde había visto desaparecer al demonio.

—Quizás tengamos razón en que debamos separarnos, hay un fantasma para los Carontes, para los Nosferatus y para los Walpurgis y son tres objetos, si antes nuestras fuerzas y sangres servían unidas ahora solo —le dan pista a un desconocido, pensó para expresar en voz alta —nos retrasa en inútiles planeamientos que no llevan a nada. Arya, loca o no, es una bruja de excelencia y sabría defenderse sola —dijo ya en el umbral de la puerta —a menos claro que no confíen en que algunos sean capaces de manejarse solos y quieran mandarles en parejas —agregó clavando la vista en Mael —tú eres el lugarteniente, tú decides —dijo en voz alta per deseando hacer lo que a ella le viniera en ganas, o mejor aún, deseando darle caza a las entidades que merodeaban o se infiltraban en el lugar.

[Anthony R. Dracony M.]

Aunque el resto de integrantes no le comprendiera a él y sus acciones, trata de ser coherente con lo que cree y para enriquecer los conocimientos que posee. Llega al lugar atendiendo al llamado. Uno esperaría que fuesen más personas presentes pero quizás, solo llegaron las que están dispuestas a aportar su ayuda.

Envuelto en su capa negra de viaje, llego ávido de noticias nuevas, antes logró presenciar  a una de las mortifagas diestra en las artes adivinatorias como muy hábil en las bien "Intencionadas" Artes Oscuras, logró convocar a tres fantasmas los que revelaron existen tres objetos que otorgarían gran poder al Bando Oscuro.

Los compañeros y compañeras, consideraban igual que él, que cada objeto estaba relacionado con cada uno de los clanes... eso hace pensar a "Flagelo" que hay una remota posibilidad de que pueda tratarse del símbolo que cada clan tiene determinado... pero eso podrá comprobarse más tarde, así que el nigromante no expresa su pensamiento, sino que permanece silencioso escuchando con atención a los demás. No tiene claro lo que están hablando, culpa suya por tardar en asistir pero... siempre hay una primera vez, está es la  ocasión en que tendrá que ser considerado solo un mortifago ocasional, por ese motivo, no se desprende de la máscaras de cobre que oculta su rostro y aguarda para mencionar su propuesta. 

[Ada Camille Dumbledore]

 

Con la disposición de encontrar una respuesta satisfactoria  al porque las visiones de Arya habían aparecido en primera instancia y como era que habían encontrado razones para solucionarlo estaba justo allí, un ser singular estaba explicándonos  como era que él junto a otros dos mortífagos habían descifrado un mensaje que hablaban de tres objetos que nos llevarían a tener una especie de escudo en contra de la maldición que acechaba a nuestro grupo. Quería a los integrantes de la marca tenebrosa como a una familia y estaba dispuesta a defenderlos a costa de lo que fuera. 
Había estudiado artes oscuras, en especial los maleficios y propiedades de los hechizos de sangre, era la razón por la que mi corriente, los discípulos de Nosferatu eran a quienes pertenecía. Utilizaría mi conocimiento magia en uso de ayudar a los míos para salir de esto. La propuesta de ir a la biblioteca había sido apoyada por el Blackfyre, pero nos entrábamos por otro integrando del grupo que estaba custodiaba por un bibliotecario. 

-    Si es la biblioteca el lugar do de esta la información debemos deshacernos de quien sea con tal de obtener los tres objetos que podrán protegernos. 

Me sentía decidida a ir sola, pero espere un poco más para saber que decidiríamos como equipo, era mejor el trabajo así.  El que Arya la líder no apareciera era otro problema, tan vez parte de la caída era justo dejarnos si una cabeza, pero nosotros éramos como las Hydras, si cercenaban una cabeza salían dos más en su lugar. Escuche atentamente a Darla, ella tenía una forma muy clara de ver todo así que asentí a hacia ella dándole la razón, lo peor es que podíamos esperar mucho más planeando allí. Salude al recién llegado Anthony con una sonrisa. 

-Mael tu eres la cabeza ahora, además eres discípulo de Nosferatu dinos en donde buscar al fantasma y lo haremos enseguida, creo que no debemos perder más tiempo, estamos en riesgo. 

Observe a  Grelliam con la mirada fría podía sentir en mi Sangre que el también pertenecía a mi Clan, así que sería uno de los que me acompañaria. 

@ Darla Potter Black  @ Mael Blackfyre  @ Anthony Ryvak Dracony  @ Azrael Lycan  @ Hessenordwood Crouch

[Anthony R. Dracony M.]

Flagelo cambio su mirada de dirección pero seguía sintiendo aquella sensación fastidiosa que le saca de quicio. Ha estado presente desde aquella vez en que Arya Macnair, la líder actual del Bando Oscuro, tuvo aquella extraña visión que vaticino el peligro existente en la Torre Oscura... un peligro tan enorme que para detenerlo, se pensó en un principio en destruir en su totalidad la Torre que alberga la excelsa biblioteca de los mortífagos. 

Fue el primero en expresar a grito  abierto su ferviente negativa, estuvo en contra de la idea que provocaría la desaparición de tan única biblioteca, para él, es evidente que el conocimiento lo es todo, así desea que los demás lo vean. ¿No acaso fueron los libros los que ayudaron a dar la pista para descubrir los símbolos ocultos en el antiguo pergamino que examinaban? ¿No fueron los antiguos escritos de donde emergieron aquellos tres fantasmas? los libros son como espejos, al reflejar lo que sus lectores son en realidad. Los libros son ventanas por las que se ve al interior de ellos. Los libros son portales para conocer sobre otras personas, lugares, mundos...   

Flagelo se coloco  la mano en la barbilla, el frío del metal de cobre de su máscara le hace hincapié de que se encuentra en el tiempo presente, donde la ausencia de Arya es más preocupante de lo que quieren admitir... incluso al mago nigromante, le intriga que Sagitas tampoco da señales de vida... Flagelo mira a los presentes, entre ellos se halla Mael, lugarteniente de Arya, al menos el Bando tiene un mago del Alto Mando... ¿Pero por cuanto tiempo sería de  ese modo?   

Expresar sus preocupaciones no servía de nada, la prioridad era aquellos objetos que la investigación señal como necesarios para usarlos contra la maldición, esa que tampoco han definido cabalmente pero que se cierne sobre el Bando Oscuro, era en lo que tenían que concentrar su atención.

A Flagelo se le forma un hueco en el estomago, de pronto ha pensado que no pertenecer a ninguno de los clanes, le hacen solo un integrante sin objetivo... pero es como estar fuera de aquella "pecera" donde sus instintos de su animal interior (por ser un animago) le hacen mantenerse cerca observando todo... ¿Por qué  debe hacerlo? ¿Cuál será la razón?

Pensando en ello, clava la mirada en ellos, por si ve algo que los otros no... eso es parecido a los humanos que psicoanalizan... ¡Cómo odia a esos muggles con tan aberrante profesión de una seudociencia tan inexacta!

La propuesta de ir a la biblioteca le alegra de inmediato, eso si que le resulta inteligente, nada mejor que consultar la excelsa biblioteca...entonces siente que una idea le golpea con tan enorme fuerza que se siente tambalear y debe sujetarse al marco de la puerta, su boca  y sus ojos miel abiertos por la impresionante idea...

-- ¿Y si con esos tres objetos se logra crear un mundo de la nada? ¡Eso explicaría porque hay un ente deseando traspasar las defensas de la Fortaleza y llegar a la Torre Negra! ¡No podemos permitírselo!           

[Mael Blackfyre]

Era entendible que el joven que tenía enfrente hablando libremente, aún no sabía cómo desenvolverse con sus compañeros de bando. Fue la primera vez que dejé que el chico dijera lo que se le cruzara, porque había una pequeñísima cosa en la que podía llegar a tener razón, que seguro aquel ente podría estar ingresando en cualquier parte de los terrenos de la Fortaleza Oscura. Pero en las demás estaba equivocado.

— Es por eso que como mínimo, necesitamos a una persona de cada Clan —miré al joven pero estaba murmurando a alguien más y hablaba para sí solo y en pársel. Aquel joven siempre prefería manejarse por sí solo. Esperando que no terminara como muchas otras veces ya lo había hecho, le grité (esperando que me escuche) — ¡Tú ve a los puertos! —él ya sabía sobre los fantasmas, sobre el pergamino, la maldición y las visiones de Arya. Ya sabía lo que tenía que hacer.

Miré ésta vez a las otras dos brujas que se encontraban debatiendo entre si. Se sumaba Anthony a aquel sitio. Darla comentaba lo de la poción y el revestimiento en los objetos. ¡Teníamos toda la información completa! Escuché cada palabra de las que la pelirroja murmuraba pero abrí un poco los ojos al notar que ponía todo el peso en que tomara la decisión. Sonreí nervioso ante la observación de Ada que era el único allí de quienes dirigían al bando. Comenté en voz alta a ver si aquellos 4 mortífagos coincidían conmigo (Azrael se había ido)

— Tenemos lo que los Tres Reyes hablaban, de los objetos. Cada uno con representación en cada Clan. Hysy consiguió la info de dónde empezar, con una parte del pergamino pero las otras seguramente hablaban de los otros dos clanes. Y Darla, tiene la parte final, de cómo terminar todo esto —explicaba todo eso para ver si tenía ordenada la información. Pude ver la cara de preocupación tanto en Anthony como en Darla. ¿Sería por lo que pensaba?

— Creo que la única posibilidad, es que cada miembro del Clan vaya a su zona. Azrael a los puertos, Darla a bastión salvaje y Ada con Grelliam a la Biblioteca de la Noche —iba mirando a cada uno. Estaba organizándome. Esperaba que funcionara—. Anthony puede ir con Darla, ya saben que ésos terrenos están fuera de nuestro territorio, estarán más expuestos por lo que necesita defensas —miré a los dos, esperando que estuvieran de acuerdo—. Y yo creo que lo mejor es encargarme de la Torre Negra y distraer a éste ente. Tal vez logré distraerlo y llevarlo a otro sitio mientras ustedes consiguen los objetos. Confío que pueden hacerlo… —miré el reloj. Arya jamás habló de alguna hora en sus visiones. Pero si ordené: —En una hora regresaremos aquí con los objetos. Guíense con los fantasmas y con los líderes de cada Clan, tal vez puedan ayudarles.

Si estaban listos, podrían irse de inmediato. ¿Cómo atraería a un ente que no conocía ni sabía de lo que era capaz? Si aún no había entrado a la Fortaleza Oscura es porque no podía. Busqué en el interior de mi túnica para corroborar que el objeto Uzza de resurrección estuviera cerca por si lo necesitaba. “Una hora…” volví a repetir.

@ Ada Camille Dumbledore  @ Hessenordwood Crouch  @ Azrael Lycan  @ Darla Potter Black  @ Anthony Ryvak Dracony