Librería "La Hermana Quisquillosa" (MM B: 98425)

[Soul Westrong]

*Absorto en pensamientos, no me pude dar cuenta de la pequeña figura cerca mio, hasta que su frase timida me desperto de mi ensimismamiento. Me gire con mi mirada de siempre, cansada y penetrante a la vez, y apunte a los de ella, celestes y brillosos, tenian una hermosa aura de calma e inocencia en ellos. Me gire completamente, observando en silencio su comportamiento. Todas sus acciones eran tan torpes e inocentes que era realmente tierna. Espere a que terminara de decir todo, y sonrei de manera calida y tranquila. A pesar de ser una mujer hermosa, Abaddon no salio a flote, mi control sobre el era fuerte ahora. Seguir con mis ojos fijos sobre las de ella mientras susurraba*

 

 

-Soy Soul Westrong, un placer conocerla...y, si, podria ayudarme en mucho...

 

*Me acerque levemente a ella, ampliando levemente mi sonrisa, para luego susurrar*

 

 

-Pero antes...me gustaria saber su nombre primero

 

*Susurre muy calmadamente, con un leve tono provocativo. No me estaba divirtiendo con ella, pero senti inevitable el deseo de comportarme asi con ella. Como si ella tuviera un gancho que me impulsara a tratar de seducirla, pero muy lentamente, con calma*

[Valent]

En verdad me había sonreído? Dudé un poco en darme cuenta de la realidad. Quedé parpadeando en mi lugar de una manera tan tonta y soñadora, librando dentro de mí una de esas batallas tan comunes pero a la vez tan molestas. Esta vez la disputa era en dejarme llevar o no por mis atracciones.

 

Cada vez que me pasaba eso, aunque no fueran tantas veces tampoco, me quedaba volaaando por los aires y nadie podía bajarme de mi escoba (olvidando el hecho de la fiaca que me daba el hacerme un carnet legal de vuelo), entonces mejor sería "mi escoba imaginaria". En fin, estaba perdidamente perdida de nuevo.

 

-Soul... que bon.. Mi nombre? Pues es Vol.. Vil.. Valentinedrycarcrowleyvladimir -solté sin respirar de una vez, casi me doy un golpe a mí misma por la taradez que estaba cometiendo, pero tomando una bocanada de aire continué-, me puedes llamar Valent, Val o Tine..

 

Sonreí levemente y sentí el rubor en mis mejillas, me tapé ambas con las dos manos y lo miré fijamente. Esperando algun indicio sobre el título que buscaba.

 

-Emm... Cómo puedo ayudarlo?-pregunté intentando borrar toda la torpeza que me habia mandado al abrir la boca la vez anterior.

[Soul Westrong]

*Su nerviosismo y sonrojo era mas que evidente, aumento su aura de ternura al por millon. Relami muy levemente mis labios, costumbre mia que tenia cuando estaba ante algo o alguien que me parecia interesante. Observe cada uno de sus movimientos, estudiandola. Sabia que ella podria ser muy manipulable, pero de alguna manera, el sentimiento mas fuerte que me generaba era el de protegerla, nunca de usarla. Al escuchar su nombre solo atino a sonreir de nuevo, pero sin alejarme de ella, sino acercandome mas a su rostro*

 

-Un placer, señorita Valentine...Es encantadora la manera en que se presenta

 

*No pude evitar decirle lo que pensaba, y en verdad no tenia la intencion de esconderlo. Me relamo nuevamente para luego susurar con el mismo tono de voz que antes*

 

-Como le dije, hay muchas cosas para lo cual la necesitaria...

 

*Me acerque un poco mas a su rostro, para luego pasar un dedo por su mejilla, acariciandola levemente, y esperando que mi atrevimiento no sea motivo de su ira*

 

-Pero, si hablamos de libros, no tengo ninguno en especial...asi que esperaba que me recomendara uno...

[Valent]

Absannbskjs en serio esto era nuevo para mí u_u nunca antes nadie me habia acariciado la mejilla de esa manera. Me daba algo en el estómago como cuando vi a Evarela y Leon besándose por primera vez. Era algo como waa, pero a la vez bonito. Aunque de caricias a besos era un tramo un poco mayor.

 

-Aammm -me rasqué la cabeza y achiqué los ojos más y más con cada palabra que decía y cada vez que se acercaba dejando pocos centímetros entre nosotros- Yoo... me gusta Quidditch a través de los tiempos, pero no sé usar la escoba, usted sabe?

 

Esta vez paré y abrí los ojos como platos bajando el dedo con el cual me rascaba constantemente la cabeza tal como una niña.. Y mejor me ahorro los comentarios de mortífaga. Quedé pálida por un momento y luego volví a reír tontamente.

 

-Para qué más me puede necesitar, señor Westro.. Conoces a Mikael?!

 

Podía ser eso cierto? Podía él ser el primo o hermano de Mikael? Ese chico nunca me habia hablado de ningun Soul, aunque nunca suelta nada... Ahora que haría? Estaba confundida u_u me sentía un poco más mal que la vez en que di una bebida demasiado alcoholizada a Mike y terminé haciendo que suba a un escenario a quitarse la ropa.

[Soul Westrong]

*La mezcla entre comentarios y preguntas era extraña, pero no me mareaba, y me entretenia al contrario. Muy pocas veces alguien me habia parecido tan entretenido. No podia dejar de verla de alguna manera. Tal vez por el hecho que no conocia de mi, era que se mostraba tan tranquila y nerviosa por mi presencia solamente. Las ganas de protegerla aumentaban, pero solo atine a sonreir de nuevo, hasta que menciono a Mikael, nombre que jamas habia escuchado*

 

-La verdad, no...Veras, soy nuevo aqui, completamente...asi que no se nada de nadie...y eres la primera que conozco

 

*Susurre, con sinceridad reflejada en mi mirada. Si era efecto de ella o algun hechizo, no sabia, pero el hecho de que algo evitaba que pudiera mirar otra cosa que no sean sus ojos era verdad. Pase mi dedo traviesamente por la comisura de sus labios, sonriendo con algo mas de provocacion, lentamente*

[Sagitas E. Potter Blue]

-- ¡Eh, tú! Los libros puedes ojearlos. A las dependientas no -- dije, detrás de aquel chico que se atrevía a toquetear los labios de mi sobrina Valentine.

 

Me puse a su lado, con una actitud bastante arisca. No había oído mucho de lo que estaba sucediendo, porque estaba ocupada con Merlín y con Kriss buscando aquel libro. Les había dicho que no funcionaban los hechizos convocadores y que había de ser una búsqueda manual. Y en eso estábamos cuando entró Valentine (¡por fin!) y se ponía a hablar con nosotros, como si no llevara años escondida en algún sitio, sin atender a la clientela.

 

-- Me temo que si lo que buscas no es un libro, revista o alguna información que quede reflejada en el papel, estás equivocándote de negocio, muchacho.

 

¿Cómo había dicho que se llamaba? Soul, me había parecido oír, de la familia Westrong. Arrugué el ceño. No me gustaba su frescura, su aire de galantería con el que estaba segura intentaba seducir a mi sobrina Valent. Y estaba segura que Reena, su madre, no estaría muy convencida de la bondad de aquel muchacho al igual que yo no lo creía. Mi mirada fue fría mientras me dirigía a Valentine.

 

-- Para las cosas que la necesitaría... hay un hotel de mal renombre y mujeres menos educadas que mi sobrina, por si tiene la necesidad de abandonar la librería sin despedirse.

 

¿Estaba siendo descortés? Mucho. Pero no me gustaban los frescos que venían a seducir a chicas inocentes y sencillas que se creían que los chicos eran caballerosos y después no llegaban ni a ser dignos de atención.

 

Avancé un par de pasos y me situé ahora al lado de mi sobrina, mirando a los ojos al muchacho. Sonreí, con esa media sonrisa que recordaba mi pasado oscuro y mi presente no tan lejos de la oscuridad como pretendía.

 

-- Y si no deja de toquetear a mi sobrina, tal vez no necesite ese hotel sino ir a San Mungo.

[Xell Vladimir Potter Black]

- Tía Sagis - protesté, al ver que mi tía trataba así a un cliente.

 

¿Pero que era lo que había hecho para decirle esas cosas? Yo me había puesto roja al sentir que le invitaba a ir a otro negocio, precisamente al hotel ese donde había... esas... Huy, qué descortés estaba siendo...

 

Pero no podía culparla, la experiencia de mi tía en el pueblo y en los negocios hacía que tuviera una nariz especial para oler cosas raras.

 

Y cuando dijo que ese chico había estado toqueteando a mi hermana, me asuste un poquito. Bajé corriendo la escalera donde había ido a conseguir un ejemplar especial y me había hecho retrasarme [durante 15 díaaaas]. Me acerqué a Valent.

 

- ¿Y tú por qué te dejas toquetear por nadie? ¿Le conoces? ¿O te estaba molestando?

 

Me puse a su lado, al otro lado que había dejado libre la tía Sagis, para protegerla si la molestaban o para zapearla si se estaba dejando toquetear sin invitarme a mi. Al fin y al cabo, como hermanitas, lo compartíamos todo.

 

 

OFF: volví, volví, qué ganas de rolear. Mi primer posteo en quince días.

[Kriss Black]

-Yo...- hizo ademan de decir su familia, pero la cosa era que aun no sabía con certeza a que familia pertenecía, aun estaba en su búsqueda por lo que calló rápidamente esperando que el chico no se hubiese dado cuenta.

 

-¿Aquí no funcionan?-preguntó la castaña algo aliviada, puesto que ella quería ir en busca del libro para matar el tiempo, aunque se dio cuenta de su tono -Digo, que mal supongo que lo tendremos que buscar- agregó sin ocultar la sonrisa de su rostro.

 

Llegó otra chica y se les presentó rápidamente diciendo varias cosas a la vez, igual que Sagitas; seguramente son familia. La chica, llamada Valent por lo que pudo entender se veía apurada y tan pronto como llegó se fue a atender a otro cliente que había entrado.

 

-Bueno, pongámonos en marcha- dijo sonriendo, y así lo hicieron, se pusieron a buscar el codiciado libro que no aparecía por ninguna parte.

 

Escuchar la exclamación de Sagitas la hizo perder el equilibrio y caer, haciendo que varios libros cayeran alrededor de ella. Sagitas los había abandonado y se había ido con Valent y el otro chico misterioso por el que la dependienta los había dejado, algo estaba pasando. Se levantó y miró a Merlin.

 

-Lo siento- se disculpó por su torpeza aunque el no parecía entender el motivo de la disculpa. Kriss se había puesto roja de la vergüenza ocasionada por el accidente y se dispuso a recoger los libros en lo que la Blue Potter volvía con ellos. Valla día pensó.

 

-Esto es vergonzoso- murmuró para si misma mientras recogía los libros.

[Soul Westrong]

-Ohh, disculpe usted si de alguna manera dañe vuestra moral conversando con Valentine...

 

Me ergui para enfrentar la ardida mirada de la otra dependienta. Por su actitud, supuse que seria algun familiar cercano o una compañera mayor. Era normal esa actitud de protección; probablemente en su lugar, yo hubiera hecho lo mismo, o peor, pero eso no evito que me pareciera algo extrema su actitud

 

-Pero claro que he venido a buscar un libro. Sino no hubiera entrado aqui en primer lugar, ¿no cree?

 

Susurre con la calma de siempre, no me gustaba exaltarme por nada, evitaba las discusiones, pero parte de mi se divertia viendola desesperada. Hasta que menciono lo otro, con lo que mi semblante cambio drasticamente, cualquier rastro de calma o bondad desaparecio de el para ponerse duro, y mis ojos parecian oscurecerse mientras le decia con frialdad

 

-En ningun momento le he faltado el respeto ni a usted, ni a la señorita Valentine, asi que no encuentro un motivo valido para esa actitud tan agresiva e inmadura de su parte...

 

Cerre los ojos un segundo para luego normalizar mis rasgos. Senti de alguna manera que su frase era una ofensa para Valentine, y eso origino mi cambio de actitud. Pero no queria liberar a Abaddon, menos aqui, asi que suspire lentamente para mirarla a los ojos de la agresiva chica de nuevo, mientras veia llegar a otra chica que tambien regaño a Valentine, de aspecto mas jovial

 

-Y, no hay necesidad de que use la violencia, señorita. Como dicen "la violencia es el ultimo recurso...del incompetente"

 

Tome la mano de Valentine ante sus miradas y de manera rapida roce mis labios sobre el dorso de ella, dedicandole una sonrisa pequeña mientras me giraba, saliendo del lugar

 

-Espero volver a verte, Valentine...

[Xell Vladimir Potter Black]

Me preocupé. La actitud de Tía Sagitas era de una protección total hacia Valentine. Eso indicaba la gran estima que nos tenía la tía, que nos protegía como si fuéramos sus hijas, en vez de sus sobrinas.

 

Y la contestación de aquel chico me hizo confirmar que Sagis era muy intuitiva. Había calado al muchacho a la primera. Bajé un poco la voz hacia mi hermanita.

 

- Fíate de Sagitas, mira que lo que dice de ese chico parece completamente cierto.

 

A mí también me daba la impresión de que era un frescales que pretendía aprovecharse de nosotras, las chicas inocentes y sencillas.

 

- No creo que entrara a buscar un libro. Más bien parece un… no sé…

 

No quise acabar la frase. Me parecía de mala educación insultar a alguien que acababa de conocer. Pero me parecía un poco fresca su actitud. Y encima llamaba inmadura a mi tía porque le había roto el juego de encaramelar a mi hermanita y vete a saber qué intentar con ella. Pues esperaba que aprendiera la lección. Las Vladimir nos protegemos entre todos y somos una barrera para los malcarados.

 

Y para prueba, el manotazo que le di para soltar su mano de la de mi hermana.

 

- Alguien que llama incompetente a mi tía es alguien que no la conoce y al que no merece conocer. Si es tan amable de abandonar el local, por favor…

 

Observé su salida, todas mirábamos hacia allá. Iba a decirle a Valentine que tuviera mucho cuidado con los que parecen ovejas, que suelen ser lobos disfrazados, cuando sentí un ruido enorme. Me asusté al ver caer a una chica, a una cliente. Corrí hacia ella.

 

- ¿Te encuentras bien? ¿Te has hecho daño?

 

Me preocupaba su salud, claro, pero también que no sabía si teníamos contratado ningún seguro civil que contemplara una lesión en los clientes.