Ravenclaw ╬ » Castillo de la Familia Ravenclaw « ╬ (MM B: 101487)

[Sherlyn Stark]

Kurt se encontraba bastante ocupado por una comunicación que estaba teniendo con sus elfos, los cuales minutos antes le habían prohibido su entrada en el lugar. Eran elfos muy amigable, a ella le gustaba mucho las criaturas, quizás no tardarían mucho en llevarse bien con ella en el transcurso del tiempo. Miró a su padre, este todavía no conocía este dato tan importante, ella quería que lo supiera lo más antes posible, era una cosa muy importante para la muchacha.

 

La gente comenzaba a acumularse por el acontecimiento que estaban sufriendo, desconocía de quien podría tratarse aquella horrible noticia que tenían desconsolados a los presentes. Un pequeño ataúd de color marrón como madera, se hacía visible ante el público. Era bastante triste asistir a un evento como aquel, y más si ellos contenían lágrimas en su rostro, era más desagradable no conocer a ninguna de aquellas personas.

 

De repente corrió la vista hacía una de las ventana del hermoso castillo, una lechuza almacenaba una carta, y la dejaba encima de una mesa bastante cerca de las cortinas. Sherlyn se encontraba con la duda por saber de qué podría tratar, así que se en camino hacía la carta que ahora estaba tirada. Esta no había podido contener la gravedad que producía el viento de tal forma que se deslizo hacía fuera pudiendo ser agarrada por cualquier elfo o integrante de la familia. La carta estaba bien sellada, y perfumada por un exquisito aroma, ella había creído que era algo muy importante, así que la cogió para entregársela al señor Kurt.

 

Una vez cerca de él, se la entregó. ― Tome, señor, creo que es para usted― Pronunció ella sin dejar el tono formal que con intensión pretendía pronunciar.

[Keaton Ravenclaw]

Después de algunos días fuera para olvidarse un poco del dolor que le había ocasionado la muerte de Aspiradora, Kurt había decidido que era prudente volver solo para revisar que el Castillo estuviera en buenas condiciones. Muchos de los miembros de aquella familia tenían cosas mil veces más importantes que andar por aquellos parajes, sin embargo, Ayrton había logrado hacerse un hueco en sus actividades para ir.

 

―Bola de flojos, ni un minuto dse pueden dar para venir a visitar su hpgar. Ya se las cobraré, algún día necesitarán de los galeones de nuestra bóveda y se los negaré olímpicamente ―Farfulló el Malfoy caminado por los jardines de aquel ostentoso Castillo.

 

Si algo era cierto, es que los Ravenclaw jamás se había identificado como los más responsables del mundo mágico, era más que desalentador ver que ninguno, en más de un mes, se había ido a fijar si el castillo seguía en pie. Pero bueno, nada se les podía pedir, cada quien sabía sus tareas y cada uno administrava su tiempo de diversas formas. Kurt se tiró el en césped a descansar, finalemnte, nada ni nadie podría impedir aquello, se lo merecía, su trabajo era arduo, tanto en La Marca, como en la Academia, era bueno un rato libre de entre tanto quehacer.

 

[Juliene Black Lestrange]

― ¿Te has puesto a pensar siquiera que tenemos una vida?―inquirió la Black Lestrange nublando el campo de visión del Ravenclaw.

 

Su estancia en el castillo se había extendido, más de lo esperado, luego de hacer explotar la reliquia familiar su salud fue puesta en un tercer plano astral, afortunadamente sus cuatros elfos si se habían preocupado porque se mantuviera con vida (¿?) Así que la acomodaron en una de las habitaciones, mientras comenzaban a curarle de aquellos moretones tan feos que se había hecho.

 

En uno de esos gestos locos que le daba cuando estaba cerca de su ex –padre se tiró junto a él en el césped, observando el cielo, recuerdos de lo que una vez fue llegaron hasta ella, soltó un suspiro, no era momento de dejarse llevar por el pasado, pese a que una parte de él estuviera a su lado, refunfuñando como siempre. Lo que le hizo sonreír, ciertamente, existían cosas que nunca cambiarían.

 

― ¿Me has perdonado lo de la aspiradora? ¿O debo morirme para que lo hagas?― inquirió volteando su cabeza para mirarlo fijamente.

 

 

OFF: Ando roleando con un muerto/preso soy la mejor

 

[Jessie Black Lestrange]

Jessie caminaba por el pueblo de forma cabizbaja. Aun recordaba las palabras de Kurt le dijera en prisión y eso la entristecía demasiado. Jessie quería mucho a su amigo, aun no recordaba como fue que lo conociera, pero lo quería bastante y lo que le dijo le había golpeado bastante.

 

Llego hasta el castillo Ravenclaw y toco la aldaba de la entrada esperando a que alguien la atendiera y un elfo llego a su lado en menos de lo que esperaba. Sonrió de lado y se agacho a su altura para poder hablar con él.

 

-Busco al patriarca... Kurt Ayrton... soy... una conocida de tu amo... ¿podrías decirle que lo busca Stabolito?

 

Sonrió con amabilidad al elfo frente a ella, esperando que este cumpliera sus demandas o en el mejor de los casos que su amigo quisiera hablar con ella.

[Pik Macnair]

-¡Pero que tenemos por acá!

 

La voz de Isaac penetró en los jardines del castillo de la familia Ravenclaw, hace poco segundos había aparecido en las afueras y se adentró a estas, directo al jardín delantero. En la puerta de la edificación se encontraba ella, Jessie, una sospecha se pertenecer a la Orden del Fénix. La mujer debía morir y ser llevada a la prisión mortífaga, de esta forma, Isaac podría cumplir su misión en pueblo mágico y empezar a deshacer a todos los sangre sucia.

 

Su rostro estaba oculto tras las mascara negra como el carbon, ocultando su identidad, era la única función de ella. Su cuerpo estaba protegido por una espesa capa blanca que descendía desde el cuello hasta el piso, rozando este y tras cada paso del Nigromante, esta ondeaba tras él. Isaac se colocó a diez metros de Jessie y mantendría la distancia en todo momento, de ser necesario, se movería para manterla.

 

-¿Lista para morir? -Y tras sus palabras, se tocó la marca tenebrosa, haciendo el llamado.

 

 

Captura a Jessie Stabolito.

 

Participantes:

• 
   
  
• Near
  
• Evarela
  
• Isaac
  
• Spectum
  

[Near]

- Claro que está lista para morir... - Dije detrás de mi máscara acercándome por detrás de mis compañeros hasta dode se encontraba Jessie. Me mantuve a 15 metrs de ella y a 14 de Isaac, siendo el tercer vertice de un triangulo formado por los tres, Spectum tambien se había acercado.

 

Había aparecido en las afueras del lugar e ingresado siguiendo los pasos de Isacc, quien al parecer tenía pistas sobre la ubicación de la mujer.

 

- Siempre están listos para morir, a eso se dedican - finalicé sonriendo y sacando mi varita de ébano de entre mi túnica negra. La única prenda que llevaba era aquella túnica de cuerpo entero. Sin calzado ni nada que la acompañara.

 

Mi madre, Evarela, aun no llegaba, no estaba seguro de la razón pero empezaba a preocuparme por el hecho.

 

- Empezaremos sin nuestra compañera, luego veremos si viene - solté en susurros hacia Isacc y Spectum. - Ataquenla.

 

Levanté mi varita y apunté irecto al rostro de la mujer.

[Jessie Black Lestrange]

Volteo a todos lados sorprendida cuando escucho una voz que al parecer le hablaba. Sin más se acerco al que le hablaba y extendió las manos para que la capturaran sin que hicieran gran cosa. No tenía ganas de pelear, no tenía ganas de jugar y estaba sumamente triste por lo que había pasado y si con eso lograba molestar a los que iban a por ella lo haría.

 

-Que, ¿tanto te sorprende que me entregue?- sonrió divertida llevando su mano al bolsillo interno de su cacheta y sacando la varita- toma... no la necesitare allá

 

 

Estaba feliz por pasar una temporada en Nurmengard, estaba demasiado feliz porque podría pensar ciertas cosas y dejar de lado ciertos problemas y con las cosas que tenía que hacer, pero le faltaba uno, una sola persona para que las cosas fueran perfectas, su mortifago favorito, Zack Black.

 

-Por cierto, ¿donde esta la serpiente de habitación V.I.P de abaddon? Zack Black creo que se llama, es tan divertido hacerlo enojar.- soltó una carcajada en dirección de quien le había hablado primeramente.

[Pik Macnair]

Isaac sabía que la mujer intentaría salir de ahí, corriendo, como si fuera lo más preciado de su vida y, de cierta manera, su vida estaba en peligro. De todas formas, el Macnair no dejaría que aquello sucediera tan fácil. Elevó su mano a la altura del pecho e hizo un movimiento con esta, rápido.

 

-Celerus -dijo, haciendo que sus palabras perduraran en el aire. Sintió como su cuerpo se invadió por una gran fuerza y su poder mágico aumentaba, estaba listo para atacar. <<Confundus>> pensó Isaac, de esta manera, Jessie quedaría en un estado de confusión del cual no se podría librar. El próximo hechizo que hiciera no saldría y para ella, su mente quedaría en un vacío en el cual no podría pensar con claridad. <<Leviscorpus>> pensó seguidamente, haciendo que la mujer se alzara a dos metros sobre el suelo y que, sus tobillos, quedaran en dirección al cielo.

 

-Sectusempra -exclamó para finalizar, haciendo que el hechizo verdoso surgiera desde la punta de su varita y acortara los diez metros de distancia que separaban a Isaac de Jessie. El hechizo tras impactar en el pecho de Jessie, causaría la muerte de la mujer. Demasiado fácil para su gusto, esperaba que todo fuera una mentira.

[Spectum Crouchs]

Moví mi rostro hacia la derecha se encontraban las ruinas del imperio y al final de la llamada "Via dil Fouri Imperiali" se encontraba el Monumento a Vittorio Emmanuelle II era una estructura bastante nueva pero el color blanco mármol lo hacía brillar a la luz de la luna, aunque no estaba hecha de mármol sino de un material similar que se llamaba Tramertino o comúnmente conocido como el mármol romano el cual los romanos usaban para construir todo su imperio, Era un lugar maravilloso.

 

La luna en lo alto del cielo brillaba regalándome su brillo al igual que las estrellas que adornaban la oscuridad del cielo. Las sombras del gran Colosseo tapaban la mitad del campo de arena, que era de un tamaño no mayor de 30 metros de largo con 18 de diámetros, con una forma de balón de fútbol americano. Me encontraba de pie allí de pie en la parte derecha de la arena del lugar. Con los ojos cerrados. Mientras que a cada lado de la arena habían dos enormes rocas de unos 3 metros cuadrados cada unas.

 

Al sentir que me ardía el antebrazo derecho desaparecí dejandome llevar por el llamado mortífago dejando una nube de humo negro en el lugar. Al aparecer en los terrenos fuera de la mansión Ravenclaw mirando la mansión desde lo lejos tras mi máscara olivasea corrí hasta llegar a 12 metros de distancia en donde estaban mis compañeros al parecer el objetivo a atrapar era Jessie.

 

- Buenas compañeros -

 

dije en un tono de voz transformado por la máscara quedandome a la distancia de todo y esa distancia me mantenía.

[Near]

Me quedé pasmado por un momento.

 

- Esperen, esto debe ser unabroma, una trampa, una emboscada - dije sorprendido - No se...

 

Levanté mi varita y utilizando un hechizo para revelar la posición de otros magos pude verificar que no había nadie. Luego de aquello y con algo de sorpresa aun marcada en mi oculto rostro pronuncié:

 

- Celerus incarcerus - Dije para enviar tres cuerdas gruesas a maniatar y amordazar a la mujer. La última cuerda atarí sus tobillos. Ya que se había entregado, las cuerdas nos servirían para trasladarla sin problemas a la cárcel.

 

Solo por las dudas, apliqué un segundo Confundus a la mujer. Las heridas del sectusempra de pik serían menos dolorosas si estaba confundida y premiaría su colaboración con algo de misericordia.

 

- Desmaius! - exclamé al final para desmayarla antes de llevarnosla. No era mi estilo, pero Near se econrtab dormido, no podría influír en mis actos con su poder y por lo tanto podría darme el lujo de ser un poco menos sanguinario.

 

Aún así debiamos tomar precauciones.