~ Mansión de la Familia Malfoy ~ (MM B: 100774)

[Mefistófeles Evil.]

Nunca he tenido tanta vida social como en estos meses en el mundo mágico y no niego que tenía algo de curiosidad por el evento programado, por toda la gente que iba a acudir, me encantaba sentir aquel aire de hipocresía flotando en el ambiente, el sutil trato entre muchas personas que no se podían ni ver, en una reunión de "acción de gracias" por aquella falsa amistad que entre algunos se mantiene.

Disfrutaba eso, pero no era aquella la única razón, si fuera sincero conmigo mismo no estaría buscado otras razones más para ir a aquella reunión, sabía que ella estaría ahí, por más nuevas justificaciones que busque, la castaña era la más importante de mis razones últimamente.

No cambié para nada mi forma de vestir, el color negro y el rojo me privaban, era por eso que mi ropero solo esas tonalidades predominaban, mi terno negro y camisa igual acompañado de una corbata rojo sangre, esta vez un pañuelo carmesí en el bolsillo del pecho de la solapa le daba el toque de elegancia que tal vez se necesitaba para esta ocasión

No tuve problema al entrar ya que al parecer toda protección estaba desactivada para recibir a los invitados, mucha gente conocida en el lugar a los cuales observaba y saludaba políticamente con una sonrisa, todos formales y devolviéndome la sonrisa hasta que encontré a quien buscaba, nuevamente sin pensarlo.

Estaba ahí, con mi nuevo gran amigo Ludwig, creo que Ada también se encontraba por ahí, me acerqué de manera sigilosa, tratando de que no se dé cuenta que estaba a su espalda, su perfume me embriagó, coloqué mis manos cubriendo sus bellos ojos verdes, y susurré a su oído.

-Tienes al diablo a tus espaldas...-

Esperaba no se inoportuno, pero no me pude resistir, iba a ser una gran noche, tenía la intuición de que así iba a ser, bueno, al menos para mí estaba seguro que así será.

@ Mica Gryffindor @ Ludwig Malfoy @ Ada Camille Dumbledore

 

[Illidan Burke]

Tras los saludos y presentaciones aquella otra mujer en la que se había fijado se acerco al grupo, o tal vez estaba mas próxima que el antes de abordar la ronda. Asintió con la cabeza en forma de saludo, y tras ser correspondido con el abrazo de Ada, escucho las palabras de su viejo amigo, quien se vio mas que sorprendido por si presencia en aquel festejo. 

- Siempre estoy o no estoy, me alarma que no te hayas acostumbrando... - Susurro mas que nada para el circulo, pero centrado en el ministro.  Recorrió el lugar con su mirar y unas simples palabras helaron su espalda. No pudo evitar girarse para ver a Mica, recorriendo el mismo camino que había transitado el minutos antes. 

Se mantuvo estático apenas unos segundos, mientras las interacciones entre los presentes le permitían cierta libertad de acción, al menos eso interpretaba. Asintió al grupo en general y como si actuara en modo automático, sus labios pronunciaron... - Los dejo en paz, iré a la barra, la veo demasiado vacía... - Tal vez aquel cigarrillo que había fumado le había afectado demasiado, o la ansiedad del momento se había potencia por el mismo. Aun así, como si el piloto automático se hubiera activado solo, sus pies lo llevaron a la desolada barra. 

Sin pensarlo ocupo uno de los bancos, posando ambos codos en la pulida superficie,  levanto la mirada, obligándose a mirar al barman. - Cerveza por favor... - Dijo con voz seca. Sus pensamientos se centraron de repente en aquella mujer recién llegada. Su manera de actuar le decían que no era la misma mujer que había compartido tantas cosas con el,  un aura extraña la envolvía. 

Una pinta fue depositada frente a el, y el golpe sobre la barra lo devolvió a la realidad. Cogió la misma con su siniestra y de un simple sorbo aniquiló la mitad del contenido. Acto seguido, como si aquel elixir le devolviera el control de la situación, se giro sobre la banca, y observo el entorno del salón. Una vez mas analizaba al grupo desde otra perspectiva. 

[Ada Camille Dumbledore]

El atardecer me ha traído nuevas sorpresas la realidad era que ver a viejos amigos reunirse era todo milagro de Navidad para mí en especial que me gustaba poder tener cerca a las personas que quería apreciaba. La presencia de darla me traía mucha alegría además que el cariño que sentía hacia ella era muy grande y muchos sentimientos y emociones que ella realmente me despertaba no solamente era una mujer muy hermosa siendo muy inteligente y muy hábil y me alegraba poder tenerla cerca y que fuera una amiga cercana. Sus palabras me halagaron la verdad no creía poder opacar toda esa belleza vampírica que ella poseía pero él al lado había sido sumamente hermosa Así que solamente me dispuse a besar sumergida agarrar su mano y agradecerle profundamente.

 

-Siempre tan dulce, pero sabes que jamás podría alcanzar esa belleza que posees.

 

Observe mientras Ludwig y Darla se saludaban y las palabras de la Potter Black me sorprendieron después de esto, la mire con dulzura y me acerque a su oído susurrando.

 

-Claro que no preciosa, estoy seguro que se siente bien. 

 

Besé su mejilla y la mire con dulzura más personas iban arribando al lugar y entre ellas mi tío Mefistófeles,  a quien definitivamente lo veía muy involucrado con la Gryffindor y veía que eso iba por buen camino, de veían como buena pareja así que les daba mi bendición. Ludwig siempre cortes y dulce, quería de corazón a mi cuñado, pero extrañaba a mi hermano. A decir verdad Ludwig había llegado a ser como un hermano ahora y eso me agradaba, había ganado un hermano.

Una de las charolas pasó por nuestro lado y tome unas copas de la misma, pase una a @ Darla Potter Black y le ofrecí mi cristal para brindar.

 

-Que sea un buen motivo dar las gracias 

 

Las burbujas del champagne revotaban por el cristal de la copa en espera del brindis.

 

[Mica Gryffindor]

No pudo evitar ruborizarse al escuchar el halago de Ludwig hacia su persona. -También tu, te ves muy guapo – respondió con una sonrisa.

Contempló el sugerente modo en que Ada halagaba el traje de Illidan, un poco incómoda por la situación, pero ya conocía esa forma de manejarse de la bruja. Ya había sucedido que la muchacha se había comportado de esa manera con Mael, saludándolo con un beso en los labios para molestarla. ¿Acaso estaría haciendo lo mismo con su ex marido?

Suspiró. No se involucraría en un conflicto nuevo con la bruja, de nada valía si su afán era, como sospechaba, solo incomodarla. A fin de cuentas, Illidan no pareció darle demasiada importancia al asunto y se había alejado del grupo para dirigirse a la barra.

Por un instante, la Gryffindor, estuvo a punto de seguirlo. Se debían una charla, claro estaba, puesto que no habían logrado encontrar un momento de aclarar las cosas tras su divorcio. Sin embargo, se contuvo de ir tras él, puesto que el rubio no había mostrado interés alguno de acercarse y conversar. ¿Qué ganaría con ser ella la que lo siguiera? Nada, solo hacer una vez más el ridículo.

Su vista se vio bloqueada de pronto por unas suaves manos que la cubrieron. No pudo evitar una sonrisa al escuchar aquella voz en su oído, y todos los demás pensamientos quedaron atrás al instante. Tomó con delicadeza aquellas manos y las retiró con suavidad, volteando hacia su amante y dándole un cálido beso.

- Pues mejor que me mire de frente -murmuró finalmente, acariciando con ternura su rostro- temí que no vinieras…

@ Mefistófeles Evil.

[Mefistófeles Evil.]

Supo inmediatamente quien era, no era necesario tanto misterio entre nosotros, nos conocíamos tan bien que solo con el tacto nos reconocíamos, luego se volteó y con un suave beso me saludó, me perdí por un momento en el verde mar de sus ojos, era como si por instante la sala quedaba solo para nosotros dos, para en instantes volver a la realidad que compartíamos espacio en ese momento con más personas.

-No me la hubiese perdido por nada en el mundo...-acaricié su mejilla, su piel era cálida comparada con la mía...-hay muchas cosas por la que hay que dar gracias y parece que han escogido un día en particular para hacerlo...-

Las costumbres que tenían los mortales eran algo extrañas, un día al año para dar gracias, cuando tienen trescientos sesenta y cuatro días más para hacerlo, pensaba lo mismo de otras festividades, día del amor, día del padre y de la madre, muchos solo en ese día se acuerdan de otros que no sean de ellos mismos.

-Amigo Ludwig que gusto verte...-estreché su mano firme para luego posar mis ojos en Ada...-Hola querida, tan bella como siempre, que gusto verte...-tomé su mano y le di un delicado beso, Darla también se encontraba por allí y le di un beso en la mejilla...- ¿y que se tiene preparado para hoy? ...-

Lancé la pregunta a todos, tenía la esperanza que iba a ser una noche espectacular, llena de sorpresas, el mundo mágico tenía eso de especial, no podías dar nada por sentado, todo puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos.

Hace unos pocos días había estado con Mica, pero el tiempo sin verla se me había hecho largo, me acerqué a su oído y le susurré.

-Si con un beso pudiera demostrar todo lo que te he extrañado, te estaría besando siempre...-

@ Mica Gryffindor @ Ludwig Malfoy @ Ada Camille Dumbledore @ Darla Potter Black

 

 

 

[Mica Gryffindor]

Sonrió y cerró los ojos, disfrutando aquella suave caricia en su mejilla. Con él sentía que el mundo se detenía, todo se extinguía para solo dejarlos ser. Claro, no era el único por el que sentía algo similar, pero poco a poco la confianza mutua y la comodidad a su lado empezaban a ganar terreno. No se avergonzaba de mostrarse cariñosa con él en público, ni por lo que pudieran creer o pensar de su relación, algo tormentosa pero que fluía perfectamente.

-¿“Por nada en el mundo”? ¿Estás completamente seguro? -indagó, mirándolo en forma algo traviesa. -Aún me resulta algo raro realizar una celebración de Estados Unidos aquí… y no veo a nadie del MACUSA como para justificarlo… -agregó, en tono bajo para que solo él la escuchara.

Su amante pasó a saludar al resto de los presentes, alejándose un poco para también saludar a Ada y Darla, quienes estaban cerca de las copas de la entrada. Indagando respecto a lo que estaría preparado para esa noche, antes de dedicarse a susurrarle al oído. No pudo evitar sonreír y ruborizarse un poco, al tiempo que buscaba su cálida mirada.

-Puedes demostrarlo de todas las maneras que quieras… -respondió, divertida, sabiendo que de seguro encontrarían algún rincón en la mansión Malfoy donde perderse un rato, pero eso podría ser con la celebración más avanzada y permiso del Ministro.

Con la mano que sostenía la copa, señaló sutilmente hacia el rubio que se encontraba en la barra, con intención de que tan solo Mefistófeles notara aquel gesto.

-Mi ex marido, te lo presento… -murmuró con una sonrisa algo irónica, antes de alzar la copa hacia él, como brindando con el caballero que le daba la espalda, concentrado en su cerveza, y beber el contenido. 

@ Mefistófeles Evil.

[Mefistófeles Evil.]

El ambiente se lo sentía alegre, lleno de camaradería, amigos, conocidos y de los otros reunidos en un solo lugar, si hubiera sido el día de la "purga" se habría puesto mucho más animada, me parecía raro que muchos aún estén con vida, eso sí que me arrancó una sonrisa.

-Tu sabes mi vida que cuando un gringo estornuda a todo el mundo les da pulmonía, pero creo que más por el neto sentido americano de la fiesta, pienso que para dar gracias no necesitas un día en especial, ni que el agradecer sea un día de festejo, los mortales tienen eso, de dedicar veinticuatro horas a un festejo en especial cuando todo el resto de días de un año hace lo contrario...-tomé la mano que estaba libre de su copa y le di un delicado beso...-por ejemplo yo agradezco todos los días por aquella excelente decisión que tuve de ir a tomar un trago en aquel bar...-

Me encantaba recordar y revivir en mi mente aquel día, pero mucho mejor era cuando juntos lo recreábamos una y otra vez, han sido unos meses en los cuales he podido experimentar cosas nuevas, veamos hasta cuanto más podría aprender.

De manera divertida mi pequeña castaña me señaló a una persona que se encontraba solitaria en la barra, era su exesposo, no pude evitar sonreír, el mundo definitivamente era muy pequeño, siempre nos podríamos encontrar con alguien que haya influido en nuestra vida, sea de manera positiva que negativa.

-Definitivamente las apariencias engañan...-le dije mirando al individuo...-se lo ve inteligente, sin embargo, te dejó ir, eso a cualquiera lo convertiría en un tonto...-

Lo que me admiró es que no sentí ni un poco de celos como el que tuve hace unas semanas atrás, al contrario, me sentí tranquilo, más bien me divertía la manera en la que Mica me lo "presentaba", de pronto me ponía alerta por cualquier comentario inadecuado que el caballero pudiera proferir, no existía nadie que me incomode ese día, hoy venia conmigo por lo tanto era mía.

-Creo que mi toque se está perdiendo porque no veo ninguna ex mía por acá...-miré de un lado a otro como buscando a alguien con fingida preocupación...-aunque si hubiera una no estarían tan tranquilas en una barra, estarían poniéndome veneno en mi copa...-

@ Mica Gryffindor

 

 

 

[Darla G Dumbledore]

Las bellas palabras que le dedicaba Ada la hubieran hecho sonrojar de ser otro ser, pero simplemente sonrió con un dejo de timidez ante las dulces palabras de su cuñada. Segundos después, minutos, no importa cuánto después en realidad, una risita nerviosa escapó de sus labios. Sí, Ludwig podía parecer bien, pero ella lo podía sentir, aunque él había logrado esquivar a tiempo su mirada ella podía sentir que algo no cerraba. Pero terminó aceptando el beso en la mejilla de su cuñada.

Lo que la pelirroja no esperaba era ver de pronto aparecer al padre de Luna, claro que considerando su actuación en la supuesta mediación de la joven, debería haberlo imaginado. Le vio precisamente besarse con la contraparte de la joven Luna y luego saludar a Ludwig. Más cosas cerraban ahora en su mente, pensó mientras entrechocaba su copa con Ada y con voz suave ofreció su brindis.

—Porque las cosas buenas permanezcan para siempre y triunfen —no tenía idea de por qué había dicho aquello en realidad, dejándose llevar por un impulso.

No habían terminado de brindar cuando el Evil se acercó a donde ellas estaban y mientras saludaba él a Ada, Darla comenzó a marcharse, pero él, que acababa de besar en la mano a la Dumbledore, intentó besarla en la mejilla.

—Señor Evil, no tenemos tanta confianza —comentó molesta mientras esquivaba su beso colocando el dorso de su mano entre su mejilla y los labios de él, cosa que no fue tan difícil porque el hombre parecía apurado para volver junto a la que era evidentemente su pareja.

—Lo siento —se disculpó con Ada y miró su copa vacía luego del brindis —voy a ver si en la barra tienen mojitos —dijo la pelirroja alejándose hacia el bar.

—Un mojito por favor —pidió al barman, acomodándose en la punta de la barra, alejada del otro ocupante del bar.  

Habían sido días agotadores y había tenido que defender lo indefendible, su amigo Balmaceda insistía en que ella ocupase un lugar en la embajada y ella, solo porque aún sentía afecto hacia el Malfoy, no había dejado todo tirado para hacerlo todavía.

@ Ada Camille Dumbledore

[Anthony R. Dracony M.]

Por la mañana...

Ryvak se dio la vuelta... el frío matinal no le afectaba al estar entre la frazada, dormía en la habitación que ya hizo suya en la Mansión Malfoy, la familia de parte de su madre, ahora si que deseaba ser parte, lo necesitaba. Antes anhelaba involucrarse con su padre biológico y sus parientes paternos, algo que desafortunadamente no fue posible. Los pocos que creyó que develarían datos sobre él o sus padres, al parecer lo desconocían, quizás esos que conocieron a su padre Adriano Wallace estaban muertos, una historia muy distinta era con su primo Ludwig, siempre con comentarios halagadores sobre su madre Danielle Malfoy... Dany... la joven peliazul que el rubio ojiazul conoció cuando Ryvak era muy pequeño, fue un pasado feliz que el peliverde no recuerda, pero escuchar de boca de su primo sobre aquellos días, le proporciona alegría e incluso le impulsa a soñar con la madre de su pasado.

Aquellos sueños le hacen dibujar una sonrisa en sus labios, en su imaginación recrea aquellos pasajes que su primo le ha contado. Se siente tan alegre que no desea despertar. En su mente hay una pugna, al surgir recuerdos de vivencias acontecidos a tan solo seis años atrás, se mezclan con aquellas imaginativas escenas con la hermosa peliazul que se va "desfigurando"... otra hermosa chica de cabellera castaña surge sonriente, sus labios rojos le parecen bastante sensuales, ella se acerca llevando un vestido rojo de gasa que no deja nada a la imaginación. Habla con suaves susurros, imágenes de muchos de sus felices "juegos compartidos" desfilan en su sueño... saltando sobre la cama, deslizarse por la colina nevada, hacer muñecos de nieve, lanzar dagas, hacer acrobacias en la moto voladora, jugar quidditch... no puede negar que la castaña llego a su vida para iluminar su existencia, le mostró como disfrutar de los instantes juntos: preocuparse, enfadarse, asombrarse, resignarse, esforzarse, apoyarse, entristecerse... pero sobre todo reír. Cindy  es la chica optimista y valiente que se enfrenta a todo desafío por muy peligroso que sea... una "fierecilla indomable".

El peliverde la ve de la cabeza a los pies, no puede enfadarse con ella al cambiar lugar con Dany, a diferencia de la peliazul, Shena Cindy es real, tienen una historia entre ambos. La castaña desliza sus manos por su piel mientras Ryvak se estremece, es como si en verdad ella colocada a su espalda se re-pegara a su cuerpo, igual que aquel día en que ella le mostró como juega el pitcher en el juego de beisbol de los muggles... la siente muy cercana, mientras le muestra la posición de su espalda, de los brazos, un zumbido retumba en sus oídos, ella rosa con sus labios su oído izquierdo susurrando que debe relajarse, algo que Ryvak no puede hacer al sentir como un calor se apodera de cada tramo de piel que ella toca y tiene contacto, ella toca su entrepierna y a él se le acelera el corazón, abruptamente salta y abre los ojos... el sueño tan vivido le ha despertado.

Dracony pasa su mano por el rostro y aún siente aquel calor... abandona la cama para dirigirse a la cómoda donde colocó el frasco que Reena les entrego el día de su boda, en el interior la llama sigue ahí, la toma con ambas manos y está crece más... Dracony está convencido de que se debe a que su amor existe fuerte y duradero... -- Algún día... algún día estaremos juntos...--- Murmura con convicción. Deposita el frasco con ese hechizo que Reena hizo para que sea irrompible y decide iniciar el día, después de todo, la vida sigue... un día especial en que debe apoyar a su primo Ludwig.

Su querida amiga Ada, le aviso de aquella cena... nada sabe Ryvak de costumbres como la mencionada "Cena de acción de Gracias" su falta de familia le mantuvo como ignorante de aquellas tradiciones pero de lo que si ha participado, es de reuniones diplomáticas, así que no está ni remotamente nervioso, las relaciones sociales es algo que habitualmente él es participe. 

Ya que la hora para aquel evento se dispuso para la noche, Ryvak salió a cumplir con un concierto con su Banda, la música es una de sus actividades favoritas. Cuando se apareció en su habitación, se tomo algo de tiempo para arreglarse, un traje violeta con camisa de color plata, le ayuda al contraste con su cabello y aunque la fiesta ya está avanzada, baja hasta la sala, los invitados disfrutan de la amena reunión y él sonriente da un saludo a la concurrencia mientras se suma a la reunión.  

 

[Amit Lockhart]

Una carta me había llegado al hotel donde me hospedaba desde mi regreso al Londres, era una invitación en una de mis nuevas familias para que fuera acompañarlos en su cena de Acción de gracias, fue algo que me asombro por que aun no había conocido a miembros de la familias mas allá de mi padre y siempre coincidía en otro lugares públicos, o del ministerio, aunque el siempre me había invitado a pasar por la mansión yo siempre le daba larga al asunto, por miedo de ser rechazado con los demás miembros.

Pero luego de esa invitación , no hizo mas que emocionarme por que era la oportunidad de pasar mas tiempo con ellos y socializar entre todos, asi que espere con ansias el día y hasta me dispuse a comprar ropa nueva para la ocasión, quería estar estar a la altura asi que me compre una túnica azul  con pequeños brillos plateados,  y unos botas negras muy cómodas, no podía dejar de pensar como seria mi familia, como me la llevaría con ellos.

 

A llegar el día me dispuse a cambiarme y arreglarme  para poder llegar a tiempo, cuando ya estuve listo pase por un local a comprar una botella de licor para no llegar con las manos vacias, como aun no tenia ni licencia de vuelo, tampoco de aparición decidir ir caminando hasta la residencia disfrutando de la vista de la ciudad a llegar al lugar, toque el timbre que estaba al lado de cerca peritoneal esperando que alguien viniera a por mi.

@ Ada Camille Dumbledore  @ Ludwig Malfoy