Clinica Santos Mangos (MM B: 87868)

[Matt Blackner]

http://i425.photobucket.com/albums/pp336/Brutalmentehonesta/Foro/Accidentes/GIF_03-Matt__zps996a824a.gif

 

 

Caminaba por los pasillos con Sherlyn La joven me escuchaba con atención. Una parte de ella estaba preocupada por los muggles, lo sabía. Le había encomendado la tarea de ayudar a los chicos de desmemorizadores y revesiones, ya que mientras los chicos de Amya arreglaban la casa, los primero debían controlar a los muggles y decidir que hacer con ellos.

 

No dudaba de que les había sido de gran ayuda, además de que era evidente que el decorado el sótano de la mansión no había sido de su agrado. No había sido del agrado de nadie.

 

- Sagitas llegó a tiempo y al final logró detener la magia que impulsaba a la daga. La verdad es qeu me quedé paralizado justo antes de qeu me controlase.

 

Si, hablaba con mucha calma, pero cuando te habías criado como un cazador de demonios y te habías dedicado a eso, al final aprendías que lo mejor era no temer las cosas. Estaba vivo y nadie más había salido herido, aparte del tío Adrian y su extraña nariz, pero aquel era un tema distinto al que nos ocupaba con los muggles, asi qeu al menos me alegraba de poder contarlo.

 

- El cuchillo está en accidentes, a la espera de qeu hagamos el inventario y lo etiquetemos en la Habitación Blanca, junto el libro de magia negra que también encontramos.

 

Nos detuvimos tras las puertas vigiladas por uno de los celadores. Mostré mi identificación para que nos dejaran pasar.

- Sean ya se encargó de desmemorizar al primer grupo de muggles, los que peor estaban, y Amya los devolvió a sus hogares. Solo nos faltan estos, qeu sobre todo están muy nerviosos. - susurré.

[Amya An]

http://i.imgur.com/fLPcO3w.gif

 

 

¿Qué estaba haciendo la última vez?

 

Ahhh, sí ... estaba tras alguna trastada (¿?)

 

*Je Je Je*

 

La bruja se había escurrido muy cerca a varios mugglecitos y les escuchaba hablan bajito.

 

- Sí, sí ... cosa rara ésta ... - se inmiscuía en la conversación susurrada, - ... yo creo que no solo los "americanos" tienen su área 51 ...

 

Ésos muggles! siempre creyendo en hombrecitos cabezones verdes (serían parientes de los elfos adlerianos???) e interesándose en esos Cultos taaaaan raros y sin sentido (desde el punto de vista de un mágico), xDDD ; « o.O y se asustan de nosotros??? », pensó ella paralelamente mientras les sostenía la charla.

 

- Es que con aquello de las Profecías del Fin del Mundo y toda la gente volviéndose como loca ... - aseguraba Amya_An como si fuese toda una entendida en la materia (!)

 

Y quien sabe qué tenía en su hablar, la revertora, pero los mugglecitos se sentían atraídos a callar y asentir como amaestrados a sus desvaríos (sería que pensaban en conjunto que .. era mejor no contrariar a una loca???)

 

Si los desmemorizadores les borraban la mente ... la bruja se ocuparía de rellenárselas de todas las mas irrisorias historias para que las regasen entre ellos y después se las contagiasen a sus autoridades (?)

[Helike R V PB]

http://i.imgur.com/4gxgTI0.gif

Misión Ministerial; atendiendo a Adrián en el box

 

Escuché atentamente a mi tío Adrián, la verdad es que no me esperaba que por culpa de esa magia mis familiares acabasen de ese modo. El maldito brujo había hecho un buen trabajo. Sean se transformó en un viejo verde, Matt cuasi muerto por una daga y mi tío, con esas cosas colgando en la nariz. Negué con la cabeza, frustrada como estaba, se me ocurrió una idea, quizá un tanto, pero quizá así se pudiese resolver el problema...

 

-Estoy de acuerdo tío Adrián. Quizá Sean sea un peligro andante, por la magia que transporta en su cuerpo. Ya sabes que al estar en el sótano se transformó en un viejo y me parece raro que no esté a éstas alturas siguiendo acosando a las enfermeras -chasqueé la lenga, molesta- creo que el aviso que le dejé fue más que suficiente...

 

-Bueno como no podemos arrancarte esa "nariz" mediante ninguna magia, lo mejor será que vuelvas a tocar a Sean para que vuelva a tu nariz, tal y cómo estaba antes de la transformación. Pero -caí en la cuenta en ese momento- ¡maldita sea!

 

Saqué la varita y la apunté a las "cosas" esas de Adrián...

 

-Es tan sencillo como hacer un finite, ¿porqué no nos daríamos cuenta antes? Sean se transformó mediante la magia del sótano de la mansión Rambaldi, quizá si no lo hubiésemos pensado antes... -negué de nuevo con la cabeza- es un encantamiento y cómo tal podemos acabarlo, con un hechizo tan sencillo. Si no funciona eso, habría que investigar más a fondo, cómo tu dices para investigar esa maldición protectora. Pero, primero voy a intentarlo -le dije con una sonrisa...

 

Moví la varita en sus "narices" y pensé en esos momentos:

 

<<¡¡finite incantatem!!>> -esperaba, rogaba que fuese lo bastante fuerte para deshacer eso. El efecto siguiente fue que, un haz de luz salió de la punta de mi arma mágica. Al cabo de un momento, cuando terminó Adrián por fin tenía su nariz, tal y cómo estaba antes de la transformación:

 

-¡Bien! -exclamé orgullosa- ya estás curado tío Adrián. Por tu bien será mejor que no te acerques a Sean -le advertí, poniendo una mano en la boca para no intentar reírme a carcajadas.

 

Una de las chicas, enseguida vino hacia a mí y me comentó:

 

-Señora, hay alguien en el ala de psiquiatría -escuché atentamente y comenté:

 

-Imagino que serán los muggles que ya estarán rellenando "los informes" -susurré, la enfermera negó con la cabeza- no, es su prima Perenela -la miré extrañada:

 

-¿Segura? -asintió con la cabeza, afirmando- ¡maldita sea!

 

-Bueno, enseguida voy a verla, pero ahora debo de ir ver a los muggles para borrarles la memoria...

 

Fui lo más rapidamente que pudieron mis piernas y también a la habilidad que tenía gracias al vampirismo, con la varita en mano, subí al ala de psiquiatría, con ayuda de los ascensores...

 

Por fin, se escuchó el murmullo de los muggles diciendo insensateces, pero giré la cabeza y vi una sala en dónde podía verlos sin interrumpirlos. Me metí y me fijé en que observaban las plumas y los pergaminos con ojos asombrados, como que no entendiendo nada mientras los iban rellenando, sin más tardanza fui al pasillo y de ahí a esa sala, luego abriendo la puerta con cuidado y poniendo la varita en una esquina, susurré:

 

-¡obliviate máxima! -un fogonazo de luz azulada invadió la habitación por la potencia del hechizo, cerré la puerta con cuidado.

 

Vi a una de las enfermeras y la avisé con la mano:

 

-Bueno, los muggles ya están desmemorizados, avisa a Amya, para que vaya preparando una buena excusa y luego hay que trasladarlos rápidamente a su mundo.

 

Suspiré, neceistaba un cigarrillo con urgencia, demasiado estrés para lo que se suponía un día tranquilo.

Editado 19 de Agosto del 2014 por Heliké Rambaldi Vladimir

[Sagitas E. Potter Blue]

http://i.imgur.com/IHGtlB1.gif

 

No me gustaba sentir a mi hija cantando aquella nana. No tenía nada de malo, excepto... la envidia. Era una canción que su padre le había enseñado y me recordó la relación tan intensa que habían mantenido. ¿Qué hubiera sucedido si no hubiera muerto? ¿Perenela se habría ido con él y me habría abandonado y sólo vendría a verme en algunas fiestas? ¿Me mandaría una postal para el Día de la Madre?

 

Bah, era una tontería estar preocupándose por hechos que ya no podían ser. Escuché la contestación de mi hija y palidecí.

 

-- ¡Demonios, estás loca! ¿O es que has leído ese libro diabólico y te ha hechizado? Eso es un trabajo para Matt, de la oficina de Indebidos y....

 

Perenela se puso a reír de mí. Me hice la ofendida.

 

-- ¿Te burlabas de mí? Pues ahora te dejo dentro. -- Pero ante su acusación de que yo la había metido dentro, negué con la cabeza. -- Para el carro, muchacha, yo no te he encerrado ahí dentro. Acabo de llegar de Jaiflai de buscar una medicina. Así que culpa a otro.

 

Ella intentó levantarse pero no pudo y me puse a reír por su culetazo. Pero su alegación era lógica, debía trabajar.

 

-- Vale, vale, te abro... Intenta hacer un buen trabajo con los muggles, ¿vale? Yo voy a averiguar qué pasó para meterte aquí dentro. Aunque estoy segura que le hiciste alguna maldad a alguna enfermera y pensó que estabas loca.

 

Cosa que yo no negaría nunca.

 

-- Tengo demasiado de lo que ocuparme ahora, así que... ¡Heliké! Hola... ¿Que demonios está sucediendo con los muggles? ¿Y qué le ha pasado a Adrian con sus... hem... mocos? ¿Y a Matt? Me han dicho que está herido? ¿Y por qué Perenela estaba dentro de una sala acolchada? ¿Y por qué no tengo ya los informes de los trabajos efectuados en Accidentes?

 

Sí, cuando quiero soy algo engorrosa.

[Amya An]

http://i.imgur.com/fLPcO3w.gif

 

 

Tan bien que se estaba ¿perdiendo? el tiempo en conversa con esos muggles despistes ...

 

A Amya_An le vino a cuchichear casi en la oreja una del personal de la clínica, sobre a qué horas se los llevaba a todos ... ó bueno, al resto de ellos (los muggles).

 

- Eh? yo? - se vio sorprendida por "la noticia", - por qué yo?

 

Pero el gesto en la cara de ... era una enfermera? fue tan definitivo que, a la bruja no le quedó mas que de otras (?) que asumir la tareita ; « Menudo trabajito ... », se quejó mentalmente porque a ella ^^ siempre le gustaba quejarse así sin mas ♥♥♥, OwO aunque en el fondo *0* adorase su labor (¿?)

 

La mujer de la clínica se le iba alejando convencida de que la adleriana se las bancaría sola ¬¬ como sí ella pudiera >.< echarse a la bolsa a todos los muggles medios zombies, y cargárselos (=llevárselos) devuelta para su mundo.

 

- Ey! >.< al menos dile a mi jefa que es también tu jefa que me llevo a su autobús volador y a su elfo doméstico!!! - le gritoneó a la fémina quien se le encongió de hombros, ya que ni el coso ni el bicho estaban dentro de ¿sus dominios?

 

Resopló por la nariz como bestia. Se levantó de su comodísimo lugar en donde chismografeaba un poquito y se dirigió de inmediato hacia la zona de parqueo para alcanzar a Harpo (si es que aún no se había marchado) para secuestrárselo para esta final fase de tan larga asignación (xDDD)

 

En la mesa de recepción, le robó el ¿alto-parlante? a la recepcionista que ya estaba en el colmo de la histeria con toda esa familia loca de la directora, poniendo de cabeza y media a tan respetable clínica mágica.

 

- Misión ministerial! - le chillaba Amya_An a la de la recepción, enfrascadas ambas en un jala-jala con el coso aquel, - MISIÓN MINISTERIAL! ¬w¬ prioridades ciudadana, pri-o-ri-dades ...

 

U.U La que terminaría en psiquiatría OwO sería la pobre recepcionista ¬¬ de un colapso nervioso.

 

- *Piiiiii* [inserte aquí ruidos molestos de ¿acoplamiento? de micrófono] ... Su atención por favor, a todas los pacientes con cintillos de colores en muñeca, tobillos y similares (?), por favor, acercarse a recepción ... en breve minutos, serán conducidos hacia el vehí.cu.lo que los conducirá de regreso a su vida normal.

 

Amya_An pegó el coso contra su pecho para silenciarlo un ratito mientras le pedía a la recepcionista, con cara de estar a punto de estallarle en la cara a la adleriana, una provisión de pócima para dormir que diluir en algo de juguito ó agüita fresca ... ¬w¬ a ver si se los dormía a todos para poder sacarlos volando.

[Adrian Wild]

http://i1028.photobucket.com/albums/y348/AmyaAn/Ministerio%20de%20Magia/DAMyC/00_DAMyC%20v%200%204/00_PLANILLA/2013Ago/GIF_07-Adrian__zpscf586a46.gif

- ¡Me estás diciendo que me ha visto medio mundo mágico y no mágico si contamos a los muggles que me han visto en el hall para terminar solucionándolo con un "Finite Incantatem"! -mis pensamientos se dirigieron a Sean-. Lo mato. Me da igual lo que le pasase en la Rambaldi. Yo, lo mato.

 

Obviamente no lo decía en serio, porque por la poca información que había conseguido recopilar sobre la misión a la que habían acudido en la Rambaldi, todos habían salido mal parados. Pero deseé fervientemente que el próximo número del profeta no llevase mi cara con aquel bulto envuelto en una bufanda en la portada. Me toqué la nariz con gran alivio y entonces me centré en aquella información. Había muggles que desmemorizar, según había entendido.

 

- Eso, lo de los muggles...

 

Heliké ya había desaparecido de la sala. La iba a preguntar por lo sucedido y a ofrecerme para ayudarla en la tarea, pero para cuando hube levantado la mirada, ya no estaba. Me levanté de la camilla donde me había sentado para recibir el encantamiento y salí del box de urgencias.

 

Por alguna parte escuché algo sobre la planta de psiquiatría, así que giré hasta casi dar una vuelta entera y subí por las escaleras que había dejado atrás al dirigirme a recepción. Subí hasta la tercera planta, al ala de psiquiatría, y allí vi a Heliké y a Sagitas, frente a una puerta. Me acerqué y observé por los vidrios espía a un grupo de muggles desconcertados.

 

La jefa de desmemorizadores ya les había desmemorizado, pero había una nube de recuerdos sobre sus cabezas. Menuda jefa. Sagitas parecía estar esperando respuesta de Heliké por el gesto de su cara, así que me adelanté.

 

- Voy a recoger los recuerdos -hice aparecer frasquitos en mis bolsillos-, iré mandando a los muggles al Hall, creo haber escuchado a Amya por allí -le lancé una mirada con algo de reproche a mi nueva jefa-. Hay que tener mucho cuidado con no almacenar los recuerdos. Si se pierden, se nos puede caer el pelo y creo que a mi hermana le gustan sus brillantes pelos violetas.

 

No quise decirlo a malas, pero debía advertirla. Había sido un descuido tonto, pero grave. Y echaba de menos a Eledhwen, para qué negarlo.

 

Entré en la sala y llamé la atención de los alterados muggles mientras observaba la nube casi transparente sobre sus cabezas. No podían verla.

 

- Por favor, señoras y señores, calma. Han sufrido un pequeño accidente y tras la atención de médicos y enfermeros y su consiguiente recuperación, les hemos traído a esta sala a la espera del autobús que les condujera de nuevo a sus casas -esperaba que Amya hubiese contratado algún autobús, o cogido el familiar; me dió un escalofrío al recordar mi primer y último viaje en él- Bajen ordenadamente al vestíbulo, donde una mujer de pelo negro les guiará.

 

En cuanto fueron saliendo, bastante diligentes, fui guardando sus recuerdos en los frasquitos que llevaba en los bolsillos, colocándome tras todo el pelotón para que no viesen mi varita.

 

- ¡Dejen bajar a los ancianos por los ascensores y los jóvenes por las escaleras, hombre por Dios, que usted tiene sus treinta años bien puestos! -anuncié al salir tras ellos y ver a un hombre que pretendía dejar fuera a una mujer mayor que él.

 

"Amya, allá van", pensé deseando que la jefa en excusas para los muggles supiera cómo manejarles.

 

- Vale, ahora, ¿alguien me explica qué demonios pasó en la Rambaldi? -dije mirando alternativamente a Heliké y a Sagitas.

[Sagitas E. Potter Blue]

http://i.imgur.com/IHGtlB1.gif

 

-- Hay un dicho chino que dice algo así como "no preguntes algo si no quieres saber la respuesta". Ese es mi consejo, mano. No preguntes lo que pasó en la Rambaldi porque cuando menos sepamos mejor.

 

Suspiré, muy cansada. De verdad, necesitaba unas vacaciones donde lo más movido fuera el darme la vuelta en la hamaca para tostarme al sol. Tantos accidentes, nuestros y de otros, provocados y provocadores de más revuelos, en este año. A veces deseaba no trabajar en el Ministerio. Pero... ¿Dónde iba a encontrar un sueldo además de los consabidos rumores, chismes, desbarajustes y algo de verdad que me contaban los globos? Eran mejor que Radio Macuto.

 

-- Parece que lo tenéis todo dominado por aquí -- dije a Adrian, quien demostró su profesionalidad al recoger todos los pensamientos borrados por Heliké a los muggles. -- Voy a bajar, creo que esos gritos eran de Amya. Me gustaría que, por una vez en la vida, esta clínica fuera un remanso de paz.

 

Les dejé a su bola, ya sabían hacer las cosas y yo prefería no permanecer mucho tiempo con ellos o me daría un ataque de histeria-pánico-mala leche con lo que me ganaría una estancia en el psiquiátrico. Y no quería correr riesgos.

 

Llegué a la planta baja mientras los muggles iban mirando a los lados, algo idos todavía por la desmemorización. La pelea de mi hermana con una recepcionista que parecía a punto de caer en una psicosis, con un tic en el ojo y con los pelos de punta, me obligó a intervenir.

 

-- Vamos, Amya, te prometo que de regalo de reyes te compro un micro para que juegues en la Adler. Devuélvele el micrófono a la recepción.

 

Y mientras me acercaba a ella, para ayudarla a subir a tanto muggle despistado en el bus (¡eh, un momento! Es el mío. ¿Quién me pagará la gasolina? ¿Podré ponerlo como Gastos Varios en la minuta al Ministerio¿) pensé que necesitaba un whisky o un somnifero.

[Adrian Wild]

http://i1028.photobucket.com/albums/y348/AmyaAn/Ministerio%20de%20Magia/DAMyC/00_DAMyC%20v%200%204/00_PLANILLA/2013Ago/GIF_07-Adrian__zpscf586a46.gif

¿Un dicho chino? Eso sí que me sonaba a mí a chino. Pero mi hermana tenía razón, hay veces en las que no es conveniente remover lo sucedido y mucho menos cuando han acontecido tantos desbarajustes y accidentes.

 

Asentí manteniéndome en silencio, sin preguntar nada más aunque deseara saber cada detalle. Aunque bueno, siempre podría matar mi curiosidad echándole un ojo al informe de la misión sin que nadie se enterase. Sí, era todo un cotilla, pero sobre todo cuando se trataba de temas importantes.

 

Despedí a la pelivioleta con una sonrisa torcida. Tenía que estar muy cansada, pero sobre todo de ver la clínica siempre con algún alboroto. A mi parecer, le salía extremadamente caro que todos estuviésemos cubiertos por el seguro laboral de la clínica. Amya daba voces con un micrófono desde el vestíbulo, aunque la oirían desde la otra punta del callejón.

 

- ¡Quitadle ese cacharro a Amya, por Merlín!

 

Dicho y hecho. Creo que Sagitas llegó justo a tiempo.

 

Entonces, miré a Heliké. Sabía lo que había hecho, y para colmo, delante de la directora del departamento: la había desacreditado. Con mi intervención había resaltado su negligencia, aunque tampoco era para considerarla así, porque había tenido fácil arreglo. Lo dejaríamos en un despiste. Pero supe que me tenía que disculpar, aunque me siguiese sabiendo amargo que Eledhwen no estaba. Tenía que asumir que ahora ella era la jefa del departamento, aunque mejor, la vería como una compañera. Esa era la diferencia, que a Eledhwen nunca la vi como a una jefa.

 

- Perdóname por haberte... Mmm... Puesto en evidencia delante de Sagis... Pero no podíamos esperar a que los recuerdos se tergiversasen y acabasen donde no debían. Lo siento.

 

Miré hacia otro lado, incapaz de mantenerle la vista. Ya era más que suficiente que Kirara me tuviese manía, como para que hubiera malas tensiones con Heliké.

[Amya An]

http://i.imgur.com/fLPcO3w.gif

.

.

- U.U bah! solo lo quería un ratito ¬w¬ ni que hubiera querido echármelo a la bolsa?

.

La bruja hacía su pucherito como niña ¿buena? siendo regañado injustamente (?)

.

Sagitas vino a poner la paz entre ella y la de la recepción, la que ya quería agarrarla del cuello (a la adleriana) ... ¬¬ a ver si con UNA MENOS, U.U volvía la calma a tan respetable establecimiento (!)

.

- ¬w¬ y no me eche esos ojos! - le acusó como crio a la mujer del personal, - ... U.U ya me voy ¬¬ y me llevo a mis mugglecitos conmigo ♠♠♠

.

o.O sus muggles???

U.U ésa Amya ^^ cada día se pone PEOR ♥♥♥

.

Trató de seguirle la vibra a su mana-jefa (la de "take-it-easy" ... ¿?), así que le puso la sonrisa de oreja a oreja mismo gato de Alicia en el país de las maravillas ^^ b

.

Se adueñó de todo el botellón de agua (para pacientes?) de la clínica y sin que le viesen, se atrevió a verter de la botelita de pócima de dormir que ella misma habría adquirido en el Magic Mall tiempo atrás. El líquido encarnado (rojito?) se diluyó con extrema facilidad.

.

Amya_An sabía que haciendo ésto, los efectos de dicha poción posiblemente se anularía ; « no importa », pensó, « los quiero medios atontados pero no tiesos por completo » ... ella se contentaba con que se estuvieran "mancitos, mancitos" OwO ♣♣♣

.

[Sherlyn Stark]

http://i.imgur.com/gVL1Gmh.gif

Al escuchar la respuesta de Matt, no le quedó dudas de que Sagitas era muy eficaz para resolver problemas, como lo de la daga en el sótano de la mansión Rambaldi. Era una pena no haber estado en esos momentos para poder ayudar aunque sea en algo, o aprender cómo se detenía esa magia de cierto objeto. Luego se lo preguntaría a su jefe para que se lo detallara. Suponía que los daños habían sido muy graves, como para terminar en la sala de urgencias, pero esos datos prefería omitirlos.

Examinarían la daga en cuanto llegaran a la Oficina de Indebidos, bueno eso si se lo permitían. Sería interesante conocer y examinar a la causante del incidente, aunque no ocultaba que también le guardaba un poquito de miedo por lo que podía llegar a hacer. En la Habitación Blanca estaría bien asegurado por Pipo para que ningún accidentoso entrara y lo agarrara. En ese momento recordó a la cerradura que no le había respondido la última vez que estuvo en el departamento.

Recordaba al libro de magia oscura que estaba en el suelo de ese lugar tan escalofriante. Era mejor que se almacenaran en la habitación blanca, ambos artículos malvados, y así no hacia ningún tipo de daño a la sociedad mágica. Esperaba poder capturar una gran cantidad de artícu.los de esas características. Escuchó lo que decía su jefe. Era como lo había pensado, Sean desmemorizó a una gran parte de muggles y Amya los envió a sus respectivos hogares. Era una buena noticia, sólo quedaban los que estaban en la sala.

— ¿Cómo detuvieron la magia oscura de la daga? —se detuvo a preguntar, para sacarse aquella duda.