Mansión "Ojo Loco" Potter Blue (MM B: 78439)

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Me quede pensativo ante la reflexion de Perenela. Nunca habia parado a pensar en eso. O sea ese dia mas que una cana ante mi vi pues tiempo desperdiciado, una vida sin nada sustancial a lo que agarrarse, sin una identidad manifiesta. Basicamente casi todo eran fracasos por lo que el saldo de lo vivido era sumamente negativo.Asi pues solo quedaba buscar el significado de ser Sean, era ladron?, un pervertido? o era mas...mucho mas que eso. En fin, que mi busqueda seguia y claro aun faltaban muchas disculpas.

 

-Me agrada que te guste el cambio....al menos parece que estoy haciendo las cosas bien.- dije mientras me rascaba la cabeza- eso si....no debes subestimas lo que puede significar una cana - y sonrei.

 

Claro la curiosidad de Perenela iba mas alla y claro ante su segunda pregunta pues ni yo tenia respuesta. A fin de cuentas lo que decidiera hacer con mi vida estaba intrinsicamente ligado al final de mi busqueda. iba a responder cuando oi un grito que me estremecio. No era para nada sensible al miedo pero sabia que las malas pulgas de Sagitas eran paligrosas. Tendria que mostrar aplomo para hablar con ella, con lo protectora que era sabia que seria la mas dificil de convencer de mi nuevas intensiones.

 

Por suerte Perenela tambien conocia la madre que tenia y repidamente subio a aplacar los animos. Y heme aqui solo....delante de la chimenea. Respire profundo y me sente en el piso, para adoptar una pose sentada de meditacion..-Aummmmmm.....Aummmmmm

[Perenela Arya Grindewald Potter Blue]

Suspiré. Sabia que me había pasado en la forma en que me había expresado al ver esa expresión entre dolida y sorprendida en el rostro de mi madre, casi nunca me daba esa mirada ni siquiera cuando la había matado una o dos veces por diversas situaciones, nunca había visto miedo en su mirada, nunca había visto esa mirada de dolor... Su espalda recta, sus ademanes rígidos, ese modo en el que reculaba y escondía la mirada me dijo mas que lo que sus palabras expresaron, froté mis ojos sintiendo como el cansancio me estaba pasando factura.

 

Apreté los dientes debatiéndome entre acercarme a ella y pedirle perdón y tal vez abrazarla o irme como lo había pedido. Por el rabillo del ojo había visto a Xell que se comía en silencio toda nuestra disputa y Harpo había salido del cuarto tan silenciosamente que no lo había percibido. Di un paso hacia su dirección y me sentí derrotada como nunca antes lo había sentido. Suspiré y me di media vuelta para salir de la habitación, miré sobre mi hombro y le dije:

 

-Tu siempre seras mi hogar... No es esta casa, no es nadie mas que tu... Si tu estas en el circo pues el circo sera mi hogar como lo fue hace muchos años. Si tu estas en el ministerio, pues el ministerio sera mi hogar, si tu estas en una cueva en medio de la nada entonces esa cueva será mi hogar... tu eres mi hogar, tu y solo tu seras mi hogar, mi casa, mi familia... mi centro, por favor, recuerdalo siempre por que sin importar si Sean regresa a mi vida, o cualquier otro viene a cortejarme siempre te escogeré a ti por encima de cualquiera. - Salí de la habitación y me quedé a un lado del pasillo intentando hacer que el aire entrara en mis pulmones ¿Porque me sentía asfixiada?

[Hayame Snape Potter Black]

Llegó a casa de su hermana pero apenas y había pisado un poco de las entradas y se detuvo con los párpados caídos y un tic en una de sus cejas

Ese aroma...

-Buen señor Tenebroso... en verdad?? Y yo no estaba aquí??

Se quejó más para sí misma que por ninguna otra cosa

Y es que últimamente había estado tan ocupada y atendiendo tantas cosas que la mantenían corriendo de un lado a otro, que el hecho de llegar a las casas que tenía la familia a veces era algo que su mente engañaba con facilidad; podía estar segura de haber pisado cualquier sitio para al día siguiente despertarse en el sillón de la casita Snape y no notar que todo simplemente lo había soñado

Emitió un quejido, extrañando aquellos días en los que podías estar oficialmente vinculada a todas las familias que te dieran en gana (y es que al Ministerio ya se le hacía lio el añadir quince apellidos al propio, cosa de lo que no los culpaba) y alzó la varita para hacer aparecer un puño gigante y aporrear la puera a lo bestia

Tradiciones eran tradiciones y Hayame cumplía con las suyas

-HARPOOOOO!!

Llamó la bruja sin verguenza y sin más a sabiendas de que haría enfadar al viejo elfo mientras recordaba entonces, a un muggle en una serie de televisión que le gustaba mucho. Sonrió.

-Harpo.... Harpo.... Harpo... Harpo... Harpo... Harpo... .empezó a repetir tocando muchas veces a la puerta

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Estaba meditando ahi frente a la chimenea cuando oi desde afuera un grito. Indudablemente este era el metodo de llamar de esta Mansion y por la voz, que se me hacia algo familia, pues no ddaba que pronto el interpelado o sea Harpo haria acto de presencia para abrir la puerta. Por lo pronto parecia que la tormenta de arriba se habia amainado, aunque suponia que era probable que hubiese varias bajas en los sentimientos de ambas. Ahh las discusiones ese momento donde uno dice cosas que quiere decir, pero que por lo general o no es el momento o mas bien se usan palabras que tienden a dejar por el piso a la contraparte.

 

-Ammmm........-dije mientras comenzaba mi serie de ejercicios con la postura del arbol.

[Perenela Arya Grindewald Potter Blue]

Me quede un rato allí esperando a ver si mi madre salia, no se que esperanza vana tenia para pensarlo pero no podía seguir allí como un árbol, SJ me necesitaba y Sean me esperaba, así que baje las escaleras esperando que mi madre recapacitara o al menos se diera cuenta que yo no era el enemigo. Respiré profundamente y abrí la puerta de mi habitación para ver a Kiwi arrullando a SJ en la cuna, le sonreí a mi elfina y volví a cerrar la puerta bajando de nuevo al recibidor, Harpo venia corriendo a abrir la puerta que insisitentemente estaba siendo llamada por mi tía Hayame, le sonreí al elfo y me devolví a la sala de la chimenea, enarque una ceja mientras veía a Sean haciendo varias posiciones de Yoga, me acerqué con sigilo, golpeé la pierna para hacerle perder el equilibrio y me trepé encima de él sujetándole las manos:

 

-Si vas a hacer eso, deberías estar mas consciente de tu entorno... un ataque puede venir de cualquier parte - me aparté de él al sentir demasiado la proximidad de nuestros cuerpos y el calor que emitía, acomodé mi falda y me senté de nuevo cruzando mis manos sobre mi regazo:

 

-Sj sigue dormido...

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

Y ya estaba lo suficientemente concentrado cuando alguien me ataco....Que conste que me di un buen golpe...pero lo peor fue lo que encontre cuando abri los ojos. Perenela sobre mi, sujetandome mis manos....y si.....muy cerca...demasiado cerca. Asi que plan B....Y asi...aunque la miraba enfoque mis pensamientos en la tranquilidad del Tibet.....la nieve....el Yeti???...y frio.....frio.....muuuuuuuucho frio. Y realmente ahora mismo agradeceria que apareciese Harpo abriese la puerta y apareciese alguien...a si mismo fuese Sagitas con su ballesta.

 

Por suerte ese momento no duro mucho sino que lentamente se retiro, acomodo su falda y tomo de nuevo asiento. Claro lo otro que me dijo pues ya cambio todo el escenario, digamos que pasar de una situacion complicada a mi posible rol de padre. Asi que cambio de chip.

 

-Entiendo..-me detuve....pero...podria verlo??

[Perenela Arya Grindewald Potter Blue]

Sentía las mejillas hirviendo de lo rojas que estaban, estaba comportándome como si el tiempo no hubiera pasado para nosotros y si lo había hecho, nos habíamos hecho daño, nos habíamos dicho cosas que no siempre fueron ciertas o buenas y aquí estaba yo, saltándole encima, como cuando eramos una pareja y jugábamos en los jardines, traté de calmarme, de no sentir que volvíamos a lo de antes... no quería que volviéramos a lo de antes ¿o si? Estaba confundida, Sean indudablemente me confundía, carraspeé tratando de no sentirme abochornada:

 

-Claro... podría... pedirle a Kiwi que le traiga... Emmm Es... que él... ummm... SJ está en mi habitación y... no me siento muy cómoda... teniéndote allí - mas que nada porque sentía que podía saltarle encima de nuevo y no para atacarle, pasé saliva y traté de refrenar mis impulsos, de refrenar las ganas de besarle... ME abanique con la mano esperando que Harpo llegara, que mi madre bajara, que algo pasara para desviar la atención de Sean sobre mi y desviar la mía

[Sean -Ojo Loco- Linmer]

observar el carmin que adornaban las mejillas de Perenela me hizo sonreir. Era casi como regresar a aquellos tiempos. Incluso yo aun no salia de mi estupor. La concentracion que habia tenido minutos antes se habia ido por el caño, Asi pues tome asiento e intente reponerme mientras una Perenela mas ecuanime comenzaba a explicarme el porque no me llevaba al cuartoa ver a SJ. Evidentemente yo entendia bien lo que decia, irnos solo a su cuarto presuponia un riesgo para ambos y.....donde estaba sagitas cuando se le necesitaba...para evitar estos momentos incomodos.

 

-Entiendo....seria mejor verlo aqui abajo.

[Perenela Arya Grindewald Potter Blue]

-Si seria mejor verlo aquí abajo - coincidí con Sean esperando a que algo pasara por la mansión, a que mi madre apareciera o alguno de los elfos... Pero teniendo en cuenta mi suerte seguro iban a aparecer en el momento mas embarazoso para alguno, tomé con la mano temblorosa el vaso de la limonada que habíamos preparado con Harpo y me lo llevé a la boca tratando de calmarme. Aun seguía fría y fresca lo cual ayudo muchísimo a mis nervios y un poco a mi bochorno, traté de respirar con calma y estiré el brazo para acomodar el vaso sobre la bandeja. Miré de reojo a Sean y a su sonrisa y sentí un vuelco en el corazón, solté el vaso y este calló sobre el piso de madera, haciendo estruendo y haciéndome sentir mas expuesta aun.

 

Me apresuré a arrodillarme en el suelo para tomar el vaso y ponerlo sobre la bandeja, sentía la cara que me quemaba y tenia esa sensación de que tenia que salir pronto de allí, me levanté erguida y rígida sin mirarle, me dirigí hacia el marco de la puerta tratando de tomar aire fresco:

 

-Voy... voy a ir a buscar a Kiwi para que traiga a SJ - no pude dar un paso mas fuera de la habitación, así que me quedé allí mirando hacia las escaleras tratando de rehuir la mirada de Sean

[Xell Vladimir Potter Black]

¡Me perdí con tantas páginas!

 

 

ON:

 

Puse morritos a la tía Sagis cuando dijo que no podía quedarme aquel lindo cuervo azul. Me gustaba mucho. Me gustan mucho los animalitos, sobre todo las aves, será porque yo me siento muy ligada a mi animal interior, la golondrina. Quise protestar a la tía cuando dijo que lo enjaularíamos pero no era el momento de discutirle nada, estando tan enfadada por la visita de aquellos enmascarados. Por supuesto, había oído el consejo del último de los malos antes de irse, que le diera pellet al pajarraco. Sonreí un poquito a la espalda de la tía para que no me viera. Lo haría, le daría de comer mucho para que se quedara, mientras durara el hechizo.

 

La seguí. Noté que Sagitas se fijaba en los arañazos de la pared al ir a su habitación. Yo no dije nada, sólo la seguía, y me mantuve en silencio mientras ella se cambiaba de ropa, hablando de cosas sencillas mientras se desvestía en su tocador. Llamaron a la puerta y Sagitas gruñó (seguía de mal humor); entró Harpo con limonada para las dos y le di las gracias. Me apetecía mucho, después de lo sucedido.

 

Sagitas insistió en que no podía quedarme el cuervo. Intenté protestar pero Harpo traía una sorpresa que hizo que la tía saltara sobre sus pies: Perenela estaba en la sala de la chimenea con Sean. Iba a aplaudir pues me gustaba el muchacho pero Sagitas no pensaba lo mismo, a juzgar por el gran grito que dio. Me tapé las orejas.

 

La prima subió casi al instante y el enfrentamiento no se hizo esperar.

 

- Yo como si no estuviera - dije, flojito. Las dos se peleaban, a cada cual más tozuda, con palabras duras, de ambas. Sagitas quedó muda en cuanto su hija se enfrentó a ella; después nos mandó irnos a todos de su habitación. No quería irme, sabía que estaba tocada. Pero Harpo tiró de mí así que salí de la habitación, en silencio.

 

Bajábamos las escaleras y sentimos que alguien gritaba en la puerta. Al principio, pensé que aquellos enmascarados habían vuelto pero cuando sentí el "Harpo, Harpo, Harpo..." acompañado de tantos golpes, me puse a reír. Era la tía @@Hayame Snape Potter Black. Corrí yo a la puerta.

 

- ¡Voy yo! - Abrí la puerta y casi me tiro encima de mi tía. - ¡Tía Hayame! Llegas a tiempo, hay una crisis en la casa. Tía Sagis y la prima Perenela se han enfrentado. Y está Sean - ese nombre lo dije casi susurrando, por si alguno de los partícipes me oían.

 

Casi la empujé para que entrara. No quería que esperara en la puerta de la mansión.

 

- ¿A dónde vamos? - no sabía a qué venía ni si quería inmiscuirse en la pelea de la familia. Me moría de ganas de ver a Sean pero... ¿y si querían estar solos?