El Dragón Verde (MM B: 108933)

[Gabrielle Delacour]

– ¿Ayuda?

 

La Black había llegado al local. había escuchado mencionar en el departamento que ocupaban ayuda con una contingencia dentro de uno de los locales de otro de los del departamento y sonrío ¿A caso los accidentes estaban a la orden dentro de los locales de los Accidentosos? Pareciera maldición.

 

Caminó decidida hacia donde se encontraban la mayoría de sus compañeros, no preguntaría, era mejor no saber y no hacerse a ideas en su cabeza, a veces lo paranoica hacía que su mente le jugara malos ratos. Su vestimenta, jeans ajustados, una blusa suelta de color celeste y unos vans grises, demasiado informal a diferencia de los vestidos que solía usar.

 

– Vengo dispuesta ¿Algo qué hacer jefa?

Dirigió sus palabras a Helike y sonrió, ya estaba demasiado familiarizada con el departamento como para poder empezar tan "cotidiana" con palabras, de hecho sentía que de apoco estaba empezando a encajar más. Notó a la Potter Blue un poco indispuesta ¿Y su nariz?

 

– Creo que con lo que traes lo más apropiado será que uses cubre boca, la alergia no te dejará trabajar... ¿Si te encuentras bien?

 

 

 

off: sorry rol cortito pero de entrada (?)

Editado 16 de Abril del 2017 por Gabrielle Delacour

[Sagitas E. Potter Blue]

Sagitas Accidentosa:

 

Gatiux me saludó e informó que no había ningún dragón verde por allá. Creo que mi rostro mostró mi sentimiento de estar defraudada y decepcionada por la noticia, tanto que se me olvidó estornudar a pesar de la picazón que sentía en la nariz. Pero esa calma duró poco, hasta que le oí preguntarme por la hinchazón de la misma.

 

-- No suelo tener alergia primaveral, aunque alguna vez estornude y moquee un poco. Pero no es lo habitual en mí. No sé lo que pasó, puesto que mientras caminaba, respiraba con normalidad -- suspiré un poquito porque Helike acabó por destruir mi esperanza de encontrar un dragoncillo en aquel lugar. Hasta que mencionó a su hermana. -- ¿En serio tiene una reserva de dragones? ¿Al margen del Ministerio y de la Reserva Oficial de Newt Scamander? -- Paré un momento para respirar y después proseguí. -- ¡Dile que me invite, dile que me invite!

 

Empecé a pegar saltos y aún seguiría haciéndolos si no hubiera tenido un ataque de estornudos y fluidos nasales que tuve que solventar con un pañuelo. Mientras, sentía como mis compañeras me informaban de lo que había pasado en el lugar.

 

-- ¡Zi, zí, reforzá loz muroz! -- se entendió cuando hablé bajo el pañuelo. ¿Sabría hacerlo? Si fuera el techo, sería mucho más peliagudo. Me guardé el pañuelo en la manga. -- ¡Mujer...! ¡Así no se puede trabajar! Imagina que lanzo un hechizo a un mueble y con la fuerza del estornudo le doy a Gatiux.... ¡No me puedes hacer trabajar en este estado... Mira, ya reparo algo.

 

Me senté descaradamente en una de las sillas desperdigadas, en la que acababa de reparar para que me sostuviera.

 

-- ¿De qué va tu negocio? ¿Magic Land? Parece un parque temático o algo así. ¿Por qué da escalofríos? -- Volví a estornudar un buen rato y creo que la nariz se me hinchó un poco más. -- Porque sé que eres incapaz, sobrina, pero juraría que has esparcido polvos pica-pica en algún lugar atractivo para que metiera la napia y se me hincharan. Sólo he olido unos flores antes de entrar. ¿Les lanzaste algún hechizo urticante o algo así? Sabes que me gustan las plantas.

 

En aquel momento hizo su aparición una nueva compañera, Gabriella.

 

-- Bonito atuendo... ¿Tienes un cubreboca que te sobre? Yo no traje. Pero no os preocupéis, si no puedo trabajar, me quedo sentada y os dirijo. Estoy segura que lo haría mejor que la Jefa Heliké.

[Gatiux]

- ¡Hola cuñada!

 

Gatiux sonrió cuando vio aparecer a Gabrielle por allí. Había acabado de reparar su zona y se acercó a Heliké de nuevo, encontrándose con la Black. Poco a poco, y como gotas de agua iban cayendo los integrantes del departamento. La banshee miró a la la rubia, preguntándose donde habría dejado sus habituales vestidos. Tal vez el correr de un lado a otro como integrante de Accidentes Mágicos le había hecho optar por la comodidad.

 

Sagitas no se veía con ganas de trabajar. Reparó una silla sólo para sentarse en ella. Gatiux escondió una sonrisa esperando el estallido de Heliké al verla actuar de ese modo. Después de muchos meses iba entendiendo el modo de actuar de alguno de sus compañeros y cómo reaccionaban los unos a los otros.

 

- Se supone que Magic Land es un parque temático, Sagitas. Eso creía. -Gatiux se rascó la nuca mientras suspiraba- Se lo compramos a unos magos chinos, y lo que se figuraba como una buena inversión resultó un terreno baldío con una única atracción que parece que va a caerse en cualquier momento. Vamos, que nos timaron. Hay una investigación por parte de Cooperación Mágica Internacional.

 

Su propio negocio, lo que suponía que le iba a dar un montón de galeones estaba resultando un fracaso. Nadie pisaba aquellos terrenos que parecían encantados por magia oscura. Lo que pasaba es que no había ni una triste farola, la verja estaba oxidada y medio desmontada y había zonas donde las zarzas se habían hecho con el terreno. Eso le quitaba el sueño por las noches.

 

- Tiene pinta de ir para largo.... Mientras tanto sigo desembolsando galeones. Ugh.

[Gabrielle Delacour]

Sonrió al escuchar a Sagitas y bajó la vista apenada al ver su vestuario, en definitiva no se sentía ella misma pero había aprendido por las malas que en ese departamento, los vestidos no eran buena opción. Levantó de nuevo la mirada y apresuró a contestar.

 

– No nena, no traigo cubre bocas pero deberías ir a revisarte ¿Alguna alergia? A nosotros no creo ya tenemos tiempo socializando...

 

El saludo de Gatiux le hizo girar de inmediato el cuerpo, sonrió contenta ¿Cuñada? Era la primera vez que le llamaba por aquella relación familiar; caminó unos pasos mas y por costumbre acomodó una de las sillas cerca de Sagitas y se sentó en ella, no había quien dirigiera, o al menos Gabrielle no había visto.

 

No había prestado atención al bar desde que entró, pasó sus ojos miel por las paredes, las mesas, parecía un poco revuelto pero asumía que para eso estaban... ayudar. Su prima había comenzado a hablar y la Black se cruzó de brazos a escuchar su historia.

 

– Y ¿Nunca se les ocurrió el ir a ver el lugar antes de firmar?

 

Levantó la ceja, le era más que extraño que alguien como su cuñada hubiera confiado en solo un papel antes de ver en qué se estaban metiendo. Pero bueno, eso no era tanto de su incumbencia.

 

Recordó el por qué estaba ahí, ayuda, y de inmediato se levantó de su silla, como si algo en el asiento le hubiera picado. Recogió sus cabellos rubios en una coleta alta y pasó un listón azul para hacer un pequeño moño; si bien andaba poco arreglada, al menos conservaría un poco su toque femenino dentro de lo que la vestimenta le dejaba.

 

– Bueno, entonces ¿Para qué somos buenos aquí? ¿Algo que quede por hacer?

[Sagitas E. Potter Blue]

Mi cara empezó a ponerse de un color rojo, iracunda ante lo que decía Gatiux sobre el timo que le habían dado con la compra de su Parque Temático. ¡Estos chinos...!

 

- ¡Oh, me alegro que acudieras a Internacional y denunciaras el tema! Es lo más correcto. Dime si conseguís algo. Me ha dado curiosidad que puedan ocurrir este tipo de estafas en Inglaterra. ¿Y dices que la única atracción parece caerse de un momento a otro? Llama a Accidentes. Entra también dentro de su trabajo y, así, los gastos te los cubriría el Ministerio. Al fin y al cabo, debemos velar por todos nuestros ciudadanos y remendar los errores que puedan suceder, al margen de que después se les pida daños y perjuicios a los culpables.

 

Bueno, mi forma de ver las cosas siempre había sido peculiar, lo confieso.

 

-- En serio, Gatiux, haz un formulario como usuario en la Ventanilla y pide a Accidentes que te ayude a restaurar ese negocio.

 

Todo lo que decía lo hacía en serio, aunque pronunciado en medio de "atchís" y "atchús" y una carraspera y una voz tapada por el pañuelo con el que me sonaba constantemente, no parecía que fuera creíble. Cuando Gabrielle preguntó que si teníamos que trabajar, asentí, por supuesto. Yo no deniego un trabajo ministerial; sin embargo, no me moví de la silla.

 

-- Sí, hay que arreglar todo este desastre. Parece ser que hubo una plaga de algo que ocasionó esto. Tuvieron que usar algún plaguicida al que sea alérgica puesto que no paro de estornudar y mi nariz gotea como un grifo de whisky de fuego abierto porque pica mucho. Así que es mejor que espere sentada a que se me pase o me vaya al exterior mientras vosotras arregláis por aquí los desperfectos, ¿no?

 

¡¿Tendré morro?!

 

 

 

 

[Gatiux]

¿Y nunca se les ocurrió el ir a ver el lugar antes de firmar? -dijo Gabrielle-

 

Ahí estaba, la pregunta del millón. Sumada a la mirada de extrañeza que añadió Gabrielle. No era la única a la que le parecía extraño que alguien hubiera engañado a Gatiux y saliera vivo para contarlo. Había visto casi el mismo gesto tras una pregunta idéntica por parte de Maida la semana anterior. Sin lugar a dudas era algo dificil de creer. Incluso para la propia Gatiux.

 

- Lo creas o no, yo también me pregunto lo mismo, pero hay un vacío en mis recuerdos. Una bruma blanca y espesa aparece cada vez que intento recordar la transacción o algo de los días previos a la llegada a Magic Land.

 

Maida le había sugerido a Gatiux ponerse en manos de otros magos que podrían deshacer el hechizo y extraer los recuerdos difusos, pero ella se había negado en redondo a que alguien hurgara en su cabeza. No era algo que permitiría a conocidos, mucho menos a desconocidos. Sagitas por su parte le insistía para que llamase a los del Departamento de Accidentes, así arreglarían por lo menos el tema de la montaña rusa, la cual había decapitado a un oso de peluche cuando hizo la primera prueba de funcionamiento, pero la Malfoy negó suavemente con la cabeza.

 

- Se que sería lo correcto, Sagitas, o lo más conveniente, pero mi instinto y mi experiencia me advierten de llevar una cosa al mismo tiempo. Por algún motivo, cuando hay más de un departamento sobre algo las cosas empiezan a ir más despacio. Habría podido llamar a casi todo el Ministerio por esto: Accidentes, poner denuncias, El Profeta... -se llevó una mano a los labios- Pero cuando juntas a tanta gente diferente en un lugar, todos acaban dando vueltas sin sentido, preguntando como pueden ayudar pero sin hacer nada realmente. Por ahora voy a dejar que Cooperación lleve la investigación, y luego ya se verá. Paso a paso.

 

No dudaba que en otra época habría corrido dando la alarma por todo el Ministerio de Magia, pero los años le estaban convirtiendo en una jugadora de ajedrez que prefería la lógica al instinto. Quizás la gente no compartiese aquel punto de vista, o le pareciera extraño, pero prefería probar aquel método.

 

- Además, si llamo a Accidentes y todos se sientan a mirar... estaría en las mismas.

 

Rió por lo bajo mientras giraba para seguir arreglando el local de Heliké. Por un motivo u otro, Sagitas siempre encontraba alguna excusa para no mover la varita, como cuando los llamaron para socorrer a la gente en la carretera dirección Escocia, había llegado muerta de frío y la habían tenido que sentar a no hacer nada.

 

Una fregona comenzó a moverse para limpiar el polvo del suelo.

[Gabrielle Delacour]

La Black levantó la ceja al ver que Sagitas solo había comentado más no actuado, puso los ojos en blanco y sonrió, era más que obvio que con esa alergia mientras menos se moviera sería mejor. No importaba, manos sobraban y la chica, bueno, tenía varita así que no sería necesario que se levantara de su cómoda silla.

 

Volvió la mirada hacia su cuñada; sí, se la habían "bailado" y precioso con tal engaño pero al menos la chica ya estaba tomando cartas en el asunto; difícil dar con ellos pero lo último que moría es la la esperanza... y posiblemente las ganas de venganza de la banshee.

 

De nuevo Gabrielle giró la mirada hacia el lugar, recién fumigado y, a decir verdad, habían dejado demasiado desastre después de eso. Sacó su varita y apuntó hacia las mesas haciendo que se acorralaran hacia la esquina que la fregona ya había terminado de limpiar.

 

– ¿Y Helike? O bueno ¿Algo más en lo que pueda ayudar a parte de limpiar, Gatiux? No todos los de accidentes somos así...

 

Su mirada se clavó en Sagitas, no, la Black no deseaba juzgar ni hacerla menos pero los hechos eran esos. Metió sus manos en las bolsas traseras de sus jeans y volvió la mirada a las paredes del local; la Malfoy les había reforzado y Gabrielle se sentía más que llamada tarde para las cosas.

[Helike R V PB]

Lo siento chicas, resulta que el mes de mayo, nos pu... a todo el mundo y entre eso y otras cosas. A ver si vamos terminando y no alargamos más el rol de lo debido jejeje. Aún así, ¡muchas gracias amores!

 

On:

 

- ¿La verdad? No tengo ni la menor idea - le dije a la bruja, mientras veía hacer su magia- supongo que por aquí cerca, habrá una especie de... hum, no sé, poder concentrado y por eso se han venido -comenté, mientras me encogía de hombros.

 

- Buen movimiento de varita - le dije a la bruja, con una sonrisa.

 

- ¿Ah sí? ¿Escalofríos? No creía que fueses una mujer temerosa -le dije, sin poder evitar mostrar una sonrisa medio burlona.

 

Gabs también se había aparecido...

 

- Bueno mujer, pues espero que aquí, Gatiux haya dejado algo para ti -susurré con una sonrisa- adelante, adelante. Podéis hacer vuestra magia - sonreí a mi compañera accidentosa.

 

Y grité en voz alta.

 

- ¡Si termináis antes de cenar os invito y también a unas pintas, por el trabajo realizado! - suponía que, con esa invitación al menos, terminarían antes... Pero recordé enseguida que no tenía "material" por decirlo de alguna forma y tendría que llamar a mis elfos para que la trajesen del castillo Rambaldi.

 

Santa paciencia con Sagitas... No dije nada, porque sabía que diría algo de "abuso de poder" así que, mantuve la boca cerrada. Pero lo último que dijo, hizo que saliese mi genio.

 

- Si tan bien usas la varita, pues ya demuéstralo sin tanta queja -solté, mirando a Sagitas, enfadada- muy buena para las labores del hogar, pero dudo mucho que lo seas tanto para los duelos - ¿la estaba retando? Bueno, con el genio que tenía me daba lo mismo.

 

Había visto como Gatiux había encantado a una fregona para ir limpiando el polvo del lugar, algo que agradecía, porque la verdad no me hacía gracia eso...

 

- Bueno chicas... Cuando terminéis iré llamando a mis elfos, para que os sirvan unas cervezas, o bueno, lo que queráis - les dije a mis compañeras.

 

@@Gatiux @@Gabrielle Delacour @

Editado 3 de Junio del 2017 por Helike Rambaldi Vladimir

[Noah Lockhart]

Estaba aburrido en casa acariciando a mi gato recordando aquella tarde tan maravillosa que había pasado con @, aquella tarde en donde los dos habíamos dicho lo que sentíamos el uno por el otro,la verdad estaba muy feliz de lo que había pasado y de que ahora fuéramos novios, extrañaba tanto ver su hermoso rostro así que decidí invitarla a algún lugar para pasar tiempo juntos y para darle un beso, ya que me encantaban y necesitaba oír su hermosa voz, me habían contado de un lugar que era muy bueno y tenía ganas de conocerlo así que decidí enviarle una nota en donde invitaba a salir a Paula.

 

tome una pluma y en un pedazo de papel escribí" Hola mi amor como te va en este día, sabes tengo muchas ganas de verte y me han hablado acerca de un lugar y me gustaría ir contigo, ¿que dices vienes? bueno solo sino tienes planes para esta tarde" lo enrolle y le puse un pequeño listón de color rojo y lo entregue al ave que lo llevaría hasta mi amada ademas de también una rosa para que se la llevara como muestra de lo mucho que pensaba en ella.

 

me recargue en el marco de la ventana viendo como se alejaba el ave, y yo pensaba en lo muy feliz que me hacía estar con ella.

[Saori Rambaldi Ragnarok]

La joven Black lestronge estaba en el jardín de su casa mirando la hermosa decoración y de repente llega un ave a lo lejos la joven mira detenida mente y se fija que es el ave de su novio y en su cara mostró se vio una sonrisa muy grande y el ave dejo su carta en uno de los arbustos paula ve y actúa y va a recogerla después de aquella tarde que pasaron juntos y de expresar , paula con ansiedad toma la carta y quita el listón el cual traía una rosa su emoción fue tanta que se mordió ela labio superior y leyó la carta un viento suave soplo y al ver la carta se emocionó aun más que brinco y pego un pequeño grito y salio corriendo a su habitación a arreglarse.

 

Subió rápido a su cuarto y pidió a un elfo doméstico para que le trajera un té. Tomo se su armario una pantalones a azul un poco suelta no muy corta con unas medias que le llegaban déjanos de sus rodillas y unas zapatillas casual, la emoción de la Rambaldi era demasiada que dio unos bronquitis mientra se azulrreglaba. Se puso una camisa algo simile pero ajustada la cual se le notaba un poco su ombligo con una saco de lana de color neutro algo largo, de peino y maquillo suavemente con un bolsolo, en el cual echo su varita y se apresuró pero era tanto la emoción que tomó su varita y agitó brusca mente que apareció una cuadra antes donde estaba él.

 

Paula se emocionó más que no aguanto que corrió abrazarlo por detrás y con una voz chino dijo. -AMOR holaa . Dijo la joven mientras apretaba a su novio.

 

@@Noah Lockhart