Castillo Karlštejn (MM: 108937)

[Rory Despard]

http://i.imgur.com/UjoGd65.png

Y quizá solo por ser navidad valía la pena llegar hasta allí, y que el cálido sentimiento de un hogar compartido hiciera el resto del trabajo.

 

De pie en la entrada del Castillo había sido difícil no evocar la ceremonia del matrimonio de Ethan y Kutsy mucho tiempo atrás por esos mismos corredores. El frío invernal golpeaba fuerte y parecía especialmente violento con mis mejillas por lo que elevando la bufanda y reacomodando la ushanka sobre mi cabeza saqué las manos enguantadas del abrigo y di tres golpes a las enormes puertas, que no tardaron ni medio minuto en abrirse.

 

Por dentro, el lujo y buen gusto en la decoración de los patriarcas se dejaba notar en cada rincón. Siempre me resultaba curioso observar esos espacios de cada residencia porque eran capaces de contarte algo de la vida de quienes lo habitaban. Pensaba por ejemplo en el viejo Castillo Stark, el más tosco y rústico de los lugares donde me había encontrado, con una practicidad en su diseño y escaso mobiliario que se mostraba en sintonía con el espíritu de sus miembros. Sin embargo, lo encontrado en la Lenteric nada tenía que ver con los Stark, y me encontré divertida viendo delicados adornos traídos desde Asia y muebles de primera factura. Eso hasta que al pasar al comedor donde se realizaría el banquete la curiosidad dio paso al asombro, con aquellas cintas plateadas brillando como diminutas estrellas en el techo, y las guirnaldas dándole el contrapunto de color.

 

- Bueno, quien quiera que realizara toda esta magnífica decoración merece mi auténtica felicitación- exclamé mientras me quitaba la capa de viaje (dejando ver un atuendo típicamente muggle de jeans y un suéter de lana verde) para luego notar la presencia de Reviguelle en aquella enorme mesa del comedor- Revi ¡buen día! espero no estar llegando muy temprano, o muy tarde- tomé asiento donde la diligente elfina me indicaba y observé cada uno de los platos cayendo en cuenta de la mucha hambre que traía- ¿no creo que sea molestia empezar de una vez verdad?

 

Y si lo era, no me esperé a la respuesta de Revi para tomar un poco de la ensalada, la carne y las patatas servidas y comenzar a cuasi devorarlas ¡todas una auténtica delicia! y que hacían cierta aquella frase de que la comida gratis era la que más se disfrutaba. Porque allí, después de todo no tenía que romperme la cabeza organizando una cena sino solo comer.

 

- ¿Qué planes tienen para luego? ¿Será una reunión tranquila con coros de villancicos e historias junto a la chimenea o planean algo más...emocionante?

 

Yo adoraba lo infantil que podía ponernos la navidad, pero tenía que admitir que necesitaba más que cualquier villancico un poco (mucho) de alcohol en el cuerpo. Los últimos acontecimientos en mi vida lo ameritaban, pero no quería tan tempranamente provocar una mala impresión en ellos que tan bien dispuestos habían estado para recibirme.

 

Aunque talvez algo acerca de los desmadres de las fiestas Evans podía haber llegado a sus oídos. Ya que no en vano Kuts era una Evans y de hecho alguna vez había sido parte de uno de esos eventos...

 

@@Reviguelle Fiorentini S.

[Andromedario]

http://i.imgur.com/UjoGd65.png

 

 

 

Al llegar al comedor, miles de guirnaldas colgaban del techo, haciendo cosquillas algunas sobre sus cabezas… y claramente tapando un poco la visión de Edward. Soltó una carcajada ante aquel hecho, y soltándose un poco de su mano comenzó a girar alrededor de la sala, con sus manos extendidas tocando todos los detalles.

 

Revi la miraba con cuidado; obviamente no iba a destrozar nada de lo producido, pero la tentación de nadar en medio de aquel mar plateado y lleno de brillo era mayor a no tocar nada. Antes que su tía pudiese reprocharle nada, llegaba al castillo una nueva persona.

 

La bruja de bajita estatura saludó a todos alegremente y no pudo evitar soltar todo el aire de golpe. Bel, la conocía, pero no sabía que tenían parentesco alguno. <<Demasiado nueva en este mundo aún.>>

 

—¡Buenas noches a todos! — exclamó para saludar a los presentes. Una sonrisa se formó en su rostro al percatarse que sería una de las primeras fiestas que pasaría con sus familiares, ya que por decisión propia los últimos años la pasaba en las inmediaciones de Hogwarts. —Revi, amo tus decoraciones. Podría llevarlas al registro para casarme con ellas lo juro. — bromeó mientras se sentaba y elegía uno de los tantos platos para comenzar a rellenar su barriga, la cual hacia minutos había empezado a rugir.

 

—¿Planes? — respondió mirando a todos en la mesa. —Bueno, no sé cuál es la tradición Lenteric, la verdad es una de las primeras fiestas que paso aquí. —se encogió de hombros mientras devoraba los diferentes tipos de carnes con sus respectivas salsas. Todo sabía delicioso y era una experiencia única y espectacular para sus papilas gustativas. — Podríamos realizarlo todo si es que la noche nos alcanza — comentó divertida.

 

 

@@Reviguelle Fiorentini S. @ @@Syrius McGonagall @@Darian Mcnair @ArielRichiesXD

[Kutsy Stroud Lenteric]

Todo era una confusión constante - demasiado - respondió sin mucho ánimo la mujer que yacía sumergida en ensoñaciones, tal vez absurdas, quizá innecesarias. Mas al final de cada jornada la abrumadora sensación de saber que le necesitaban en otro sitio la mantenía en un constante dilema entre continuar ahí - sola -, sus labios se abrieron por pura autonomía, o volver sus pasos a ese sitio que le parecía lejano y completamente un sueño. Uno que resultaba demasiado bello para que ella siquiera considerará que realmente esa es su existencia.

 

 

Sólo un recuerdo guardaba para si. Sólo el sonido de voces infantiles parecía devolver un poco de brillo a sus pupilas, donde la luz y la oscuridad habían mantenido una batalla a costa de su propia cordura y ahora no era más que la sombra de quien fuera en tiempos pasados. Su ropa devela que ha pasado demasiado tiempo en soledad y en el bosque. El vestido azul marino se ha transformado en girones que, apenas cubren sus torneadas piernas, van acorde a las hojas de los árboles que se han enzarzado entre su largo cabello negro. Los pobladores del lugar han comenzado a llamarle : la dama de la noche.

 

 

Sabe posee un nombre, sin embargo teme pronunciarlo y descubrir que se ha equivocado, que la mujer sonriente con la que sueña cuando duerme no es más que un siniestro espejismos. Le aterroriza la sola idea de que sus recuerdos se desvanezcan ya que cada noche sus delgados labios se quedan quietos ante las fuertes inspiraciones de quien fuera una bruja feliz, llena de vida, de amor, de pasión, de entusiasmo, de todo aquello que la hacían quién era. Pero ya no hay nada, - nada - repite tomando un puñado de tierra mojada entre sus dedos para observar cómo esta se le escapaba de entre la mano con la misma velocidad con la que el llanto inunda sus ojos y se deslizan una a una aquellas finísimas perlas saladas sobre sus pálidas mejillas.

 

 

Entiende que fecha es y su corazón reclama un poco de remanso y redención ante lo que no comprende. De lo que sabe a luchado y perdido, porque no sabe cuál es su sitio o si aún hay salvación para quienes se vio obligada a dejar atrás. Quizá por egoísmo es que actuaba al internarse con más ahínco en espeso bosque, sin embargo, comprende que no puede seguir escapando. Qué su abuelo había obtenido su sumisión al callar el porqué de su partida.

 

 

Tomó una sencilla flor de color ocre que parecía luchar contra el frío que anunciaba la estación, le resguardo con cuidado entre sus ropajes, limpió su rostro dejando que el remanente de su llanto se mezclará con la tierra haciendo que líneas marrones atravesarán su rostro. Aquél donde la calma y el vacío se expresan con total claridad. Cerró los ojos y se permitió pensar en ese lugar al que hacía tiempo atrás llamó -hogar-.

 

 

La magia era un atributo que nunca podría olvidar incluso con cada parte de su memoria fragmentada, el amor de su compañero la mantiene anclada a un mundo que resulta abrumador y confuso pero donde ambos existen. Tras un parpadeo, sus ojos mostraron una pintura que la desconcertó porque aunque todo le parecía familiar se sentía completamente ajena a los rostros que contemplaba en esa pequeña cabaña en la que más de una tarde había pasado pintando a... -mi familia.

[Syrius McGonagall]

-Si sabía que el regalo iba a ser este hubiera inventado una buena excusa para llegar a la hora del postre – comentó con picardía mientras salían de la habitación y cerraba la puerta detrás de sí. –Ahora vas hacer que termine la cena rápido – bromeó tomando la mano de la bruja mientras bajan rumbo hacia el comedor.

 

Al llegar al salón se encontraron con una espectacular transformación del mismo, siempre había sido un lugar elegante de hecho de los lugares favoritos de Edward en el castillo, pero aquella noche lucia completamente distinto. Todo rezumaba Navidad, decoraciones en los techos, las paredes, una nueva alfombra cubría el suelo y hasta los muebles parecían haber cambiado.

 

Revi era una maestra en las decoraciones, Andrómeda no se había equivocada no había más que hacer que ir a felicitarla por el trabajo. Una vez cruzó el umbral de la puerta notó que su altura volvía a jugarle una mala pasada cuando prácticamente toda guirnalda en el techo se ponía ante su rostro. Sonriendo corría con sus manos los largos y abrillantados flequillos mientras buscaba una zona libre de los mismos.

 

-Espectacular decoración Revi – la felicitó cuando la pudo ver parada cerca a la larga mesa repletas de platos, cubiertos y copas prontos para ser gastados aquella cena de nochebuena. –Y las guirnaldas… ufff – bromeó mientras le daba un beso en la mejilla a la bruja.

 

Unos pasos llegando al salón lo alertaron de la llegada de una nueva bruja y su sorpresa no fue poca cuando descubrió que aquella mujer pelirroja era su madre. –¿Mamá? – se acercó sonriendo antes de estrechar en un fuerte abrazó a la bruja –pensé que pasarías la cena de nochebuena en la Evans- estaba encantando de tenerla aquella noche.

 

-Amor esta es mi madre, Bel Evans McGonagall – le hizo unas señas a su novia para que se acercara a saludar. No esperaba ninguna especie de drama, sabía que en eso Bel era una genia. Las presentaciones duraron lo que tenían que durar y los cuatro pronto tomaron sus lugares en la mesa.

 

-Esta es mi primera Navidad en Europa – se alcanzó un trozó de cordero que se deshacía en la boca una vez que lo probabas –no sé qué costumbres tendrán en el viejo continente, pero quiero divertirme- dejó el cuchillo y el tenedor a un lado del plato para mirar a sus acompañantes –En América un clásico de la navidad son los deportes ¿Les gustaría un partido de Quodpot?

 

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[Reviguelle Fiorentini S.]

A penas empezó a llegar mi hermosa familia, una sonrisa enorme se dibujó en mi rostro, a pesar de ser pocos, lo importante era mantenernos unidos ya que no quería que todo esto muriera, el castillo, mi hogar se merecía tener siempre entre sus muros gente amorosa que cuide de ella. Abracé a Andro cuando entro alabando la decoración- Mi linda niña! Muchas gracias…ehhh como es eso de llevarlas al registro?-la mire con duda divertida- Cuando eso pase, decoraré el registro a tu gusto y complacencia- observe tanto a Edward como a mi sobrina-

 

Bel también ingresaba al comedor y por su vista también muy encandilada con la poca decoración que se me ocurrió a última hora ayudada por los elfos- Bienvenida seas Bel, y no, estamos justo en hora para poder tener una pequeña reunión navideña, y empezaremos ya!- Bel fue la primera en dirigirse a la mesa y la seguimos para dar inicio al banquete. Me serví algo de ensalada de papas, y un asado de carne junto con algo de vegetales. Las copas de cada uno fueron llenándose automáticamente de champagne.

 

-Bueno en cuanto a planes, no se me había ocurrido algo, sin embargo podemos hacerlo a la marcha- dije animada comiendo de mi plato- Quodpot? Que es eso??- pregunte a Edward sorprendida por aquella terminología de un posible deporte. La cena pasaba entretenida entre los presentes disfrutando del banquete y de las conversaciones, a pesar de ser pocos me sentía tan en paz con cada uno de ellos. Llego un momento en el que me levante y aclare mi garganta para dar mi respectivo brindis de la noche:

 

-Querida familia, escogí esta noche por que todos me dijeron que es especial, es la noche en que todas las personas queridas se reúnen para comer juntos, jugar juntos, disfrutar la nieve y el árbol de pino juntos. Sé que aquí faltan algunas personas importantes para nosotros, pero eso no significa que no estén en nuestros corazones, así que estas palabras van también para todos ellos. Cuando llegue a Inglaterra por primera vez, quise acoplarme a las esferas familiares tradicionales del mundo mágico sin éxito, en ese entonces culpaba a mis pobres relaciones sociales y tal vez al hecho de que podía pasar desapercibida.-

 

- Ahora se puede decir que me siento más importante, más querida, y eso es gracias a ustedes que me dan aquella hermosa energía roja llamada amor acompañada de la confianza para mantenerme energética y vivaz. Quiero brindar por todos nosotros como una unidad familiar, brindar por cada uno de ustedes no como brujas o magos sino como personas, brindar por la oportunidad de ser especiales entre nosotros…Salud!- extendí mi copa hacia el centro para terminar las palabras que tanto tiempo estaban acumulándose en mi garganta. Ahora esperaba que los demás también tomaran la palabra.

 

@ @@@Syrius McGonagall @@Darian Mcnair @ArielRichiesXD

[Andromedario]

Las comidas y bebidas iban y venian en la mesa junto con la charla amena y divertida que se desarrollaban entre los familiares. Andrómeda no esperaba conocer aquella anoche a su suegra; es más, esperaba más una escena llena de nervios caras raras y metidas de pata. Sin embargo, se sentía a gusto como nunca antes, y su sonrisa no desaparecía de su rostro.

 

—Quodpot es un deporte americano. — respondió automáticamente. Casi toda su familia se basaba en miembros del departamento de transportes y juegos mágicos, por lo que podría decirse que era un rayo en el tema. —Verás tía, en vez de Quaffle se utiliza una pelota hecha de material de quod; esto implica que la pelota está hecha para explotar. — satisfecha con la comida, ahora solo se dedicaba a beber con tranquilidad, su segunda... o tal vez tercera copa de champagne. Sus mejillas se habían puesto algo sonrojadas ya y sentía esa extraña alegría que iba invadiendo su cordura.

 

—Entonces, el miembro de un equipo debe salir de la punta del campo y volar lo más rápido que pueda hacia el otro extremo para depositar la pelota en una cesta... sino — empezó a hablar realmente emocionada—¡BUM! — golpeó con fuerza la mesa haciendo mucho ruido. Soltó una risa divertida ante el respingo de todos en la mesa.

 

Los minutos siguieron corriendo, y pronto Revi se levantó. Supieron al instante que era hora del brindis y sonriendo todos se pusieron de pie alzando sus copas. Las palabras de su tía fueron hermosas y caragdas de cariño; por unos segundos, creyó que soltaría algunas lágrimas reveldes, sin embargo se contuvo. Era cierto que la mesa no estaba llena. Faltaban personas, muy importantes para el entorno familiar. Sin embargo, se contentaba y acariciaba su alma pensando en lo que Revi había dicho: <<Están con nosotros en nuestros corazones>>

 

—¡Por la Familia Lenteric!— gritó llena de euforia. Al instante agregó en otro grito —¡Y Evans!

 

 

 

@Bel Evans McGonagall @@Reviguelle Fiorentini S. Fiorentini S. @@Syrius McGonagall @@Darian Mcnair @ArielRichiesXD

[Ragnar Bjorn Lodbrok BL]

Las fiestas ya habían pasado, pero no podía dejar de ir a visitar a mi hermana. A pesar de que descubriéramos que no eramos nada sanguineamente tantos momentos de haber pasado juntos lograban hacer que la extrañara en muchas de las ocasiones por ese motivo es que la decisión se tomaba y era ir a su castillo donde vivía con su actual esposo un amigo del departamento así que probablemente tuviera un gran recibimiento.

 

Aún así me fui vestido muy elegantemente, mi pantalón casimir de color azul se ajustaba a mi cuerpo. De la misma forma el saco a juego dejaba entrever la camisa de color blanco y la corbata que portaba para lucir frente a esa familia que hacía tiempo que no visitaba. Los nervios me recorrían por la espalda, no entendía el por que simplemente me emocionaba volver a verlos.

 

Finalmente llegaba a la puerta del castillo, con nervios apenas si lograba poner el puño en la puerta, incluso los nervios me ponían a pensar que lo mejor sería regresar por donde había venido y no molestarlos. Una visita inesperada podría no agradarles, no sabía que pasaría por lo que me senté en la puerta pensando en lo que haría, como saludarlos, como actuar, como estar frente a ellos.

 

@@Ethan Lenteric, @@Kutsy Stroud Lenteric, @@Darian Mcnair

[Andromedario]

Andrómeda Lenteric

Departament de Transportes y Deportes mágicos

Empleada

El día había sido corto pero agotador. Mientras caminaba por las calles de Ottery buscando el árbol donde encontraría el traslador, pensaba en cómo estaría su hogar, en sus hermanos esperando su llegada... Un suspiro se escapó de sus labios cuando recordó a su padre. Literalmente, no lo veía desde hacía demasiado, y no lo culpaba. El dolor había sido dificil de controlarlo al irse su madre, y su padre no parecía estarlo tomando bien... Vamos. Que ni siquiera ella lo estaba tomando bien, sin embargo lo ocultaba, porque la necesitaban... porque aún estaban sus otros familiares que en cierta forma rellenaban su corazón marchitado.

 

Luego de un tirón en su estómago y un viaje algo corto, finalmente llego a los terrenos del castillo. Si bien su día laboral ya había terminado, aún debía activar el bendito hechizo antiaparición allí, y lo debía realizar junto a su compañera June. Cómo era una habitante del castillo, decidió no molestar a sus padre o Darian, ya que sabían perfectamente lo que debía realizar allí. Mientras esperaba, decidió caminar un poco por los terrenos, acercándose lentamente a la puerta del castillo. Para su sorpresa, Dave se encontraba allí, pero no parecía estar en calidad de Director.

 

- ¡Hola Dave! - saludó con un grito desde la lejanía en el preciso momento en que June hacía su aparición en el terreno. Se volteó y sonrió hacia ella. -¡June! Qué bueno verte. Vamos a activar los servicios de mi hogar así terminamos rápido. Dime, ¿Recuerdas que pedían los dueños del castillo?

 

Al ser aprendiz, deseaba saber si conocía como activar los servicios y si estaba aplicando correctamente sus conocimientos. Sonrió recordando la vez que su padre la llevó a realizar el mismo trabajo cuando era aprendiz. El tiempo corría, pero las circunstancias parecían repetirse, aunque algo modificadas.

 

@imkup

@

[June Miller]

June Miller

Departamento de Transportes y Deportes mágicos

Aprendiz

Mientras caminaba por las calles de Ottery buscando el árbol en el que encontraría el traslador que me llevaría hacía el Castillo, el cual me había mencionado previamente mi compañera, iba pensando en lo realmente nerviosa que me sentía, era la primera vez que acompañaría a alguien a activar servicios en un castillo, sin embargo mi compañera Andromeda era bastante amigable y aquello me tranquilizaba.

 

Cuando por fin encontré el mencionado traslador dudé durante unas fracciones de segundo, no había usado uno anteriormente y la idea de usarlo sola me asustaba un poco, con pasos torpes me acerqué a este, inhalé profundo y lo toqué, al instante sentí ante mis pies el piso moverse, el estómago se me revolvió y al cabo de unos segundos nuevamente me encontraba de pie, ante un lugar que identifiqué como el castillo karlstejn, mientras me reponía del "viaje" escuché la voz de mi compañera, por lo que giré a su dirección. ¡Hola! también es bueno verte Andro dije sonriendo. Claro que lo recuerdo, es más traje una copia de la solicitud del requerimiento y la aprobación hecha por Darian, no estaba segura de cual de los dos eran necesarios, pero hay que ser precavido ¿no? añadí con un tono de diversión en la voz, sacando del pequeño bolso unos pergaminos que entregué a mi compañera.

 

 

 

 

Hechizo Anti Aparición.

Presente:

Por medio del presente memorándum, indico que sí deseo mantener los siguientes servicios, y estos consciente de los costos:

Indicar detalle de los servicios solicitados, ejemplo:

- Hechizo antiaparición activado: 800 galeones.

*Los patriarcas pueden aparecer y desparecer en cualquier parte del castillo y la propiedad.

*Los miembros de la familia y amigos pueden aparecerse en sus respectivas habitaciones y en los jardines de la propiedad.

*Todos aquellos que no pertenezcan a la familia, deberán usar el traslador de Ottery y aparecer en el inicio de la colina que da acceso al castillo, para luego entrar en la propiedad.



Total: 800 galeones, que autorizo que se descuenten de: Bóveda de Ethan Lenteric

Agradezco de antemano su atención.


- Indicar aquí: Familia Lenteric
- Tópico de Registro de la Familia o Negocio. Familia Lenteric
- Tópico de la Granja, Mansión, Castillo o Tienda. Castillo Karlštejn

 

 

 

Estimado Sr. Lenteric:

Su solicitud de hechizos de anti-aparición fue aprobada satisfactoriamente. Una vez que los duendes de Gringotts efectúen el pago del servicio, un miembro del departamento se aproximara al "Castillo Karlštejn" para hacer valido el servicio. Sin mas que agregar me despido.

Saluda, Atte

Darian Mcnair

Jefe de Oficina

 

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Editado 13 de Enero del 2017 por imkup

[Syrius McGonagall]

Otra nueva mañana en el castillo Karlstejn y Edward parecía estar ya acostumbrado a despertar en aquel lugar. Se estiró en la cama para despertar todo musculo en su cuerpo y abrió los ojos, la luz de un nuevo día entraba a raudales por los amplios ventanales iluminando todo y volviendo imposible cualesquiera ganas de volver a dormir.

 

Estiró su mano derecha hacia el otro lado de la cama y no encontró nada más que las sábanas blancas de la cama, Andrómeda se había ido a trabajar al Ministerio. A él no le quedaban muchas mañanas de sueño, si todo salía bien podría ejercer la medicina en Reino Unido y trabajar en el más prestigioso hospital mágico del país: San Mungo, situación que lo emocionaba bastante.

 

No había más tiempo para perder, se levantó, se dio una ducha rápida en el baño privado que tenían en su habitación y bajó ya vestido a desayunar. Últimamente el castillo había estado muy silencioso, no había mayor indicio que el de aquella mañana mientras bajaba por las escaleras hacia la cocina y no sintiendo otro sonido que el de sus pasos contra la piedra del suelo.

 

Pero no había otra persona que padeciera más aquellos silencioso que su novia, y era algo que él no podía hacer que mejore, estaba fuera de sus manos el origen de aquel triste y abandonado silencio del castillo. Pero no podía ver más así a Andrómeda, quería sacarla por un tiempo de aquel castillo para que el recuerdo se disipara un poco y después de mucho pensar encontró una solución y esperaba que ella la aceptara, por el bien de ambos y sobre todo el de ella.

 

Unos pasos antes de llegar a la inmensa cocina, el timbre de la puerta principal resonó por todo el castillo. - ¿Tan temprano? – dijo en alta voz el ojiazul mientras cambiaba la dirección de sus pasos hacia el vestíbulo, no estaba seguro de quien sería, pero alguien de la familia seguro que no era.

 

Con la duda de quién podría ser abrió las grandes y detalladas puertas principales y se encontró con tres figuras. Un mago y una bruja que no conocía y la tercera figura era alguien que conocía muy bien y al verla una sonrisa se dibujó automáticamente en su rostro –Hola amor – saludó a Andrómeda -Buenos días – saludó alegremente al resto de los presentes –Asuntos del Departamento de Transportes, supongo – dijo sonriendo.

 

 

OFF: Dave, cambie la historia de mi pj por lo tanto el nunca trabajo en Transportes asi que no los conoce jajaja.

 

 

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