Orden del Fénix • Familia Potter •

[Darla G Dumbledore]

 

Modalidad A - Rol Final


Todo parecía se había encausado por el buen camino, Seere, príncipe de los demonios, había logrado terminar de atrapar a Batibat y quitarle las voces que de alguna manera la demonio había logrado atrapar en los sueños y la había devuelto a las miembros de la Orden del Fénix que la habían perdido. Los elfos habían ayudado a dejar todo en orden nuevamente en la Casa de los Potter, con el agradecimiento de Kim y Darla. Las dos brujas habían vuelto donde los demás para agradecer a Lunita su ayuda con toda aquella situación una vez más. Ambas luego habían tenido una discusión, Kimberly quería hacer volver a Diagon a la Potter Black pero ésta insistió en quedarse unos días en el Valle de Godric. Kim buscó quedarse para acompañarla pero la vampiresa se había negado, recordándole que ya había demasiada gente en aquel lugar para que la cuide, que ella no necesitaba cuidados y que la sobrina de Kim aún esperaba poder disfrutar sus vacaciones de navidad juntas.

 

Cuando Kim se marchó Darla regresó a la habitación que había elegido ocupar en el primer piso de la mansión, ¿su objetivo? no era para nada el descansar como le había dicho a la Black sino volver a inducir su ingreso en el mundo de los sueños para encontrarse con un Seba más real y poder convivir con él, fuera de lo que había sido originalmente aquella pesadilla. Claro que con lo que no contaba es que aunque vencida Batibat aún podía jugar con sus sueños y ella, aunque con sangre de viajeros del sueño no había utilizado jamás sus poderes, por lo cual, aunque estuviera en el mundo de los sueños Darla no estaría en el mundo que ella esperaba estar.

 

 

 

 

Shizuku Tsukishima - Extendiendo la Magia de Ghibli

 

--Shizuku tus notas deben mejorar si quieres entrar en una buena secundaria --la voz paterna había sonado en sus oídos y la bruja elevó sus ojos de sus manos de adolescente para mirar a sus padres frente a ella.

 

En ese momento supo que no era ella y que ya no se trataba ni de Darla Potter Black ni de Scarlet Akane.

 

--Lo prometo papá, mis notas mejorarán y entraré a esa secundaria --su voz surgió de sus labios de una manera inesperada, la joven charló un poco más con sus padres y luego se levantó de la mesa con su permiso para dirigirse a su cuarto, la habitación que le había cedido su hermana al irse a la Universidad.

 

Ya en el cuarto sintió esa loca necesidad de mirarse en el espejo que había en el vestidor, se paró de pie frente a él, sintiéndose extraña, como si por primera vez se reconociera a sí misma: sus ojos castaños le devolvieron el reflejo de su figura esbelta, de cabello castaño oscuro y corto ligeramente por debajo de las orejas. Sí, definitivamente fue como un descubrirse por primera vez, era muy extraño pensó, mientras regresaba al cuarto.

Editado 10 de Diciembre del 2020 por Scarlet Akane

[Thoth]

 

Al parecer ese ser no deseaba hablar con alguien que no poseía algún rostro, pero si tenía una gran boca. Por ello es que su cuerpo comenzo a cambiar, volviendose el triple de grande, saliendo varios brazos que le sirvieron como patas, su careta ahora se elevaba un poco, y su enorme boca se observa a la perfección. Ésta era gigantesca mostrando en su interior una gran lengua, y unos molares todos dispuesto para devorar, ya que su apetito voraz se encontraba desatacado.

 

Ésta sombra se mueve como una animal, quizás una araña, corriendo a gran prisa por las calles, buscando algo que devorar, allí uno de sus brazos toma un gato callero, y lo comienza a devorar, ingeriendole de un solo golpe, como si se tratase de una gran serpiente. Al momento que lo hace, dos orejas de gato se le crea, y una gola, incluso unos bigotes. No obstane, no era Jiji, u otro ser extraño, simplemente era algo más.

 

-Tengo hambre, y vos serás mi proxima comida.-

 

Le dice a un niño, y va contra éste, saliendo corriendo, tumbando algunos transeúntes fantasmales y otros en cambio salían corriendo al verle, ocultándose en las casas cercanas.

[Sophie Elizabeth Granger]

Jiji - Extendiendo la magia de Ghibli viendo a sin rostro

 

Mientras se acomodaba en aquel nuevo rincón para dormir un ser extraño se acerco a el. Como todo gato lo miro con curiosidad por unos segundos, Mas aun cuando este saco una papa frita y se la ofreció, Jiji jamás le decía que no a una comida pero desde luego, primero tenia que olerla. Había tenido malas experiencias con comida echada a perder, Jiji era muy inteligente e intuitivo, apenas se acerco a olisquear la papa se dio cuenta que no era comida. Miro de reojo a aquel ser extraño y se alejo sin apartar la vista de el, caminando hacia atrás mientras su lomo y su cola se erizaban.

 

- Hueles a muerte y a maldad, no quiero nada de ti - siseo en idioma gatuno mientras salía corriendo por las escaleras lejos de aquella cosa. Corrió por los pasillos y se encontró una puerta abierta, parecía una habitación así que se coló rápidamente y empujo la puerta con las patitas delanteras para cerrarla mientras se aseguraba que aquel ser de sombra no lo hubiera seguido. Se subió a la cama que estaba cerca de la ventana, lo cual le era muy conveniente en caso de tener que huir y se acomodo para descansar mientras vigilaba que aquella cosa no entrara, si lo hacia correría hacia la ventana y saltaría, no quería gastar una sola vida por su culpa.

 

Aquella habitación rezumaba magia y se pregunto si ahi dormía algún mago o bruja, el solia ayudar a una pequeña bruja pero en cuanto esta creció ya no necesito su ayuda por lo que el decidió buscar a una nueva persona a quien ayudar. Claro, en este mundo las cosas parecían muy diferentes de lo que eran de donde el provenía. Mas temprano había visto a un mago adulto hablar con un gato que repentinamente se había convertido en humano. Eso si que no lo entendía, porque un gato querría ser humano, era mucho mejor ser gato, cabías en todos lados y eras mas veloz y sobre todo eras hermoso.

 

Volvió a lamerse la patita para limpiarse, si algo no podían decir de un gato es que fuera sucio, eso si que no, lo mejor era limpiarse rapidito antes de que alguien lo pescase sin brillo en su pelaje. De pronto se pregunto si además de convertirse en humanos, los gatos en aquel lugar podrían hablar con los adultos, en su mundo, los niños dejaban de hablarles cuando crecían.

 

- lo intentare con el próximo humano que encuentre - maulló para si mismo mientras se comenzaba a quedar dormido de nuevo. Ser gato era muy cansado a veces

[Thoth]

 

El Ser sin rostro se encontraba lleno de espíritus malignos que le habían hecho volverse tenebroso, ya que de por sí es un ser que ni una voz posee, por ello, al ingerir alguien puede hablar ¿A quien había ingerido? Aunque, ahora su voz en varias, en muchos los seres que ahora esa criatura que parecía ser más grande con cada comida que hacía, era alguien de temer, además de poseer la cualidad desaparecerse y aparecerse a voluntad, no sería facil si alguien la enfrentaba. Sin embargo, allí se encontraba causando un gran miedo a muchos, pues antes se mostraba inofensiva pero ahora era un malvado.

 

-Tengo hambre, deseo ver muerte y destrucción.-

 

Y seguía avanzando como si nada, sin nada, sin motivo o propósito, se encontraba vació, y antes una niña había captado su interés, ahora andaba causando caos por la influencia de un mal espíritu. Este aprendía rápido, por ello lo único que hacia era observar a la distancia, mirando era la forma que aprendía.

[Luna Gryffindor Delacour]

No era la primera vez que se perdía en sus pensamientos y olvidaba la empresa que tenía delante, recordaba que estaba en un grupo rindiendo homenaje a sus muertos pero nada más, su mente se había quedado en blanco y no podía recordar ni que hacia allí ni como había llegado y tan distraída estaba que ni cuenta se dio que el servicio a los difuntos había terminado tiempo atrás.

 

- Alguno recuerda que pasó? No recuerdo mucho y me quedé perdida como siempre, recuerdo que Rory decía algo de unos difuntos, luego fue algo de números y oscuridad y ya no se más, me Temo que ando perdida, así que, quien necesita mi ayuda? - Dije al aire a nadie en particular, observando a todos los que allí había, preguntándome si podía ayudarlos o no -

 

Odiaba sus despistes pero todos ya la conocían y la querían así de despistada como era a veces tomaba buenas decisiónes y resoluciones de casos, claro que esto no significaba que eso fuera siempre y extrañaba la ayuda que le daban algunas personas, como Rory, Elvis, Lisa o mismos Made o Eileen, quienes siempre solían ser los que más la ayudaban para que no se perdiera de absolutamente nada como siempre le pasaba.

 

- sea como sea los ayudaré así que aquí tienen una varita más por si la necesitan y pues saben que pueden contar conmigo, jamás dejare sola a mi familia nunca - Dije con ímpetu y determinación, mostrándoles una faceta más decidida mía, una que no todos conocían en realidad -

[Rory Despard]

Rory despertó en su habitación, intentado olvidar la vívida imagen de Batibat y su voluminoso cuerpo, bamboleándose al compás de una risa desaforada. No ha abandonado la pequeña pieza que ocupa en el Pink Palace, pero las visitas se han espaciado, producto de los deberes que cumple en la Orden del Fénix, que se han ido incrementado con pasmosidad las últimas semanas.

 

Rascándose la cabeza, y todavía adormilado, se levantó de la cama y se cambió con una ropa casual, cómoda más que bonita. Diez minutos después, sus pasos hacían eco en la escalera de camino a la cocina.

 

Múltples hechos extraños habían ocurrido en la Potter en las últimas semanas. Desde aquel demonio del sueño que había causado estragos en los presentes, a la criatura mosntruosa con un apetito infinito que nadie sabía como había llegado y tampoco se supo de que manera se fue. A pesar de todo eso, la casa seguía constituyendo un espacio de refugio, cálido y seguro para todo miembro del bando. El día anterior se había ido a la cama temprano, pero le había parecido oír ruidos de pasos y otras voces en la primera planta, así que intuía que no se encontraba solo.

 

Corriendo las cortinas que tapaban uno de los grandes ventanales, observó hacia fuera el cielo límpido de nubes que auguraba un día calmo libre de tormentas. Agradecido por ello, elevó una rápida plegaria, y pidió a Dios que , por esta vez, le dejase tener una mañana tranquila, sin sobresaltos.

 

¿Estaría pidiendo demasiado?

 

Tras las celebraciones navideñas y de cambio de año, que habían traído a muchos miembros del bando de vuelta a Londres desde los rincones más apartados del mundo, Rory había instado al Alto Mando a que pudiese organizarse en la mansión una pequeña ceremonia de confraternidad, pensando en ellos, y también el resto de miembros que conformaban lo que él empezaba a creer que era una cálida familia. Le hacía ilusión la idea de ver el recinto lleno, inundado del olor dulzón de galletas recién horneadas, y la alegría de charlas casuales rompiendo el silencio en que muchas veces la casa se sumergía. Las bebidas alcohólicas no las aprobaba, y había preparado abundante ponche de fruta con la receta del Grimorio de Hufflepuf que Bel Evans le había prestado, pero a las finales, en ese aspecto concreto era poco lo que podía hacer, porque el vicio estaba fuertemente arraigado en Ottery, y las gentes del bando no estaban exentas de ello.

 

Subyacente a todo, Rory sentía la necesidad de fortalecer y estrechar lazos con los demás. Las tareas al interior del bando eran tantas, que no siempre había oportunidad de hacer un alto para verse las caras, y para recordar, que también tenían que cuidar de sí mismos tanto o más que de los demás. Y él gustoso, quería recordárselos.

 

¿Habrían visto todos la invitación? ¿Llegarían?

 

@@Mica Gryffindor @@Beryl Serenity Hawthorne Serenety Hawthorne @@Hannity Ollivander Evans @@Martin N Roses @@Sherlyn Stark @@Ela Karoline @@Richard Moody @@Lillian Potter Evans @@Scavenger Weatherwax @@Luna Gryffindor Delacour @

[Luna Gryffindor Delacour]

Ordenaba los papeles del ministerio intentando entender porque había salido todo mal en esa redada, cuando una lechuza con una invitación había volado hacía mi escritorio blanco mate, sonreí cuando le desaté de la pata la misiva y le di un poco de mis galletas de chocolate que tenia en la mesa, abrí la misiva entre preocupada y alarmada, pero mi alarma se transformo en sonrisa cuando descubrí que nada malo pasaba y que solo me invitaban a pasar el día con mis familiares y amigos de mi amado bando, así que sonriendo ordene mi escritorio, lave mi taza de perritos dalmatas dejándola en la mesa y me puse el sobre todo violeta dirigiéndome hacía mi destino final.

 

- Espero no llegar tarde y que ya no estén todos reunidos, me preguntó si habrá café en la Reunión o galletas, con los tiempos que corren tener café es un privilegio de unos pocos, pero al menos pasaremos una bonita velada ¿no? - Le hable al ave que aún me miraba asombrada, mientras me dirigía a la puerta saliendo rauda y veloz de allí -

 

 

Traspase el umbral de la salida del ministerio, saludé a unas pocas personas que me cruce y me alise mi traje violeta claro, mascullé un juramente cuando al salir a la calle paso un tipo corriendo empujándome, miré mis zapatos violetas claro impolutos y le saque la tierra al bajo de mi pantalón violeta mascullando un juramento contra ese señor que me había dejado medio echa un desastre, parecía que los accidentes siempre me sucedían a mí por alguna extraña razón que nunca podía entender del todo.

 

Me dirigí caminando hacía la mansion de los Potter, tanto porque estaba cerca del ministerio como para tomar el aire, no quería ese día ir por escoba o aparición, solo quería caminar y sentir el sol de aquel cálido día, sonreí feliz y alegré cuando medía hora después divisé el lugar al que me tenía que dirigir y me tomé un momento para pensar si los Potter no extrañarían ese lugar, que parecía ser el refugio de todos cuando el mundo se nos venía encima.

 

Abrí la puerta de calle y como cada día me tropecé con el paraguero, haciendo un estruendo digno de una maratón, me apresuré a acomodarlo lo mejor que podía, mientras avanzaba hacía la cocina, lugar donde siempre nos reuníamos cuando había que charlar, conversar o simplemente armar alguna redada o algo por el estilo, me apresuré adentrarme allí viendo a Rory al fin y sonriendole alegremente, estaba en familia y en casa como cada vez y ya nada malo podría pasarme, porque el mundo afuera podría desaparecer, que yo estaría feliz de al fin estar sana y salvo con mi amada familia.

 

 

- Hola Rory, ¿Cómo andas? ¿Qué tal pasaste las fiestas? lamento la tardanza pero me tropecé con ese paraguas que esta por allí y ¿Qué novedades tienes? por dios que linda mesa, creo que pasaremos una bonita velada ¿no? ¿sabes si viene alguien más? - le dije feliz y alegré mientras le daba un abrazo rápido y me separaba de él sonriendole feliz de verlo al fin -

 

Estaba feliz y observaba el lugar y el ponche frutas, sonreí cuando vi aquello recordando mi infancia en un minuto, mis padres siempre hacían ese ponche cuando alguien venía, así que recordar a Annick y Elvis siempre era un momento alegré y feliz para mí, me pregunté si los vería o si por el contrario no lo haría, también me pregunté si Scarlet vendría o si alguien más de mi amada familia se pasaría por aquí.

 

@@Rory Despard @@Mica Gryffindor @@Beryl Serenity Hawthorne Serenety Hawthorne @@Hannity Ollivander Evans @@Martin N Roses @@Sherlyn Stark @@Ela Karoline @@Richard Moody @@Lillian Potter Evans @@Scavenger Weatherwax @

[Hannity Ollivander Evans]

Hannah Rambaldi

 

 

Recordaba la última vez que había pisado el hogar de los Potter como una pesadilla, una recurrente pesadilla que trataba de olvidar, aquel demonio, del cual no recuerda, ni quiere recordar su nombre le había hecho recordar parte de un trágico pasado, al que había viajado con aquel artefacto a una misión como inefable y había sido una de las pocas cosas que había odiado de su trabajo.

 

Pero una vez más recibía una invitación por parte del predicador para reunirse con los demás compañeros de bando en aquella casa, que por ahora le daba escalofríos.

Dejó la nota en la mesita de centro de su sala en el piso del Pink Palace y se dirigió a la ventana, el paisaje en calma y el cielo despejado la hacía pensar que tal vez aquella visita no sería tan mala como la anterior, aún así no estaba del todo convencida, si no iba la tacharian de antisocial o que no le importaba la convivencia entre los miembros, a fin de cuentas era casi lo mismo.

 

-¿Qué mal podría pasar?- suspiró.

 

No tardó mucho en salir del piso en dónde vivía, con un vestido corto y que hacía resaltar su figura, el cabello ahora lacio y que volaba con las ligeras brisas de aire.

 

Llegó a las afueras de la mansión de los Potter y al entrar invadía un rico aroma a galletas recién horneadas y una bebida que no recordaba por su aroma, lo que nadie podía saber era que en el bolso, con hechizo de expansión indetectable, llevaba una botella de whisky que, en algún momento, podría llevarse bien con la bebida preparada por el pelirrojo.

 

Una compañera de bando, a quien identificaba como Lunita Gryffindor ya se encontraba hablando con el predicador.

 

-Buenas tardes a ambos, espero que hayan disfrutado las fiestas...

 

No dijo más por el momento y tomó asiento en un lugar cercano a ellos, sin duda Lunita tenía razón, la decoración que había realizado el joven Despard en la casa era fantástica.

Editado 14 de Enero del 2021 por Hannity Ollivander Evans

[Luna Gryffindor Delacour]

Al escuchar el saludo de Hannity sonreí alegre y feliz de verla allí con nosotros, preguntaba si habíamos disfrutado las fiestas y la realidad era que no lo sabía, suponía que si que las había disfrutado al menos antes de que su papá se fuera y así, las había disfrutado demasiado y se preguntó si haber sido tan feliz no sería un crimen.

 

- Pase unas bonitas fiestas en familia, había desde galletas hasta bebidas y vitel tone, estabamos todos en familia así que si lo disfruté como nunca antes, y pudieron pasarlo bien? - Les dije a ambos sonriéndoles feliz y viendo la mesa puesta que parecía una hermosa velada familiar -

 

Nada me gustaba más que reunirme con mis amigos y socializar, la vampireza siempre estaba lista para pasar una reunión amena y encantadora con sus familiares y le ponía la feliz ver cómo seguía llegando gente al baile, así que esperaba que más personas vinieran y poder pasar una bonita reunión familiar.

 

 

- Bueno no siempre lo digo pero estoy feliz de compartir con ustedes y poder pasar una linda fiesta, además de charlar un poco, a veces hace bien reunirnos para algo que no sea guerra y pelea, creo que será una bonita velada - Dije feliz y alegre, mientras me preguntaba si me haría mal el ponche o no -

 

La idea de Rory era encantadora y la había recibido feliz, tanto porque se acordará de mí, como porque podríamos pasar un rato en compañía de quienes consideraba mi grupo y mi gente, así que me acomode mejor en la silla y espere que me dijeran las nuevas novedades, mientras agarraba una galleta y la degustaba feliz, esperando que todo siguiera así de tranquilo y bien.

[Thoth]

Un cuervo comenzaba a sobrevolar el firmamento, éste era uno de los tantos horrocrux que había creado Licaón. Está criatura había sido dotada con el hielo del averno, además de ser oídos, ojos y voz del mago tenebroso que había profanado a esa criatura. Éste ser sólo deseaba explorar los terrenos para así lentamente actividad sus planes, a él no le importa si era descubierto o no, igual, nadie de la Orden del Fénix podría revelar quien era, su conexión con la criatura era de magia tenebrosa, muy diferente a la antes estudiada en las escuelas Mágicas, pero sin duda alguna de aquellas que pudiera dejar un rastro.

 

El ave se posó en una de las ramas, y sus garras a voluntad del nigromante congelaron lentamente ese árbol. La misma comenzaba a disfrutar del hermoso paisaje, de ver cómo en las calles los niños jugaban y todo parecía normal, el ave vuelve a tomar vuelo y pasa a otro árbol, cerca del mismo se decía que se encontraba el hogar de los Potter. El ave de plumaje oscuro no hizo uso del poder del cual había sido dotado, simplemente se encontraba allí para espiar, ya que si el rumor de que la orden Fénix tendría un escondite, su ave de hielo sería el inicio de que más criaturas tenebrosas podrían aparecer. En ello el cuervo observó cada casa de las que allí existían, buscando señal de esos seres que esconden su rostro desde una luz.