Animagia

[Ludwig Malfoy]

Claro que si, estaba seguro de que tenía un vínculo muy fuerte con los delfines, aún no sabía la manera en cómo estaban conectados pero no tenía duda alguna de que se trataba de una conexión real y pura, a comparación con las arañas cuya conexión se sentía real pero tenebrosa, le llenaba de miedo e inseguridades, estaba seguro que no deseaba tener esos instintos dentro de su cuerpo pues no sabía si con eso su parte oscura regresaría, por el contrario, con los delfines se sentía seguro, libre, inteligente y noble, sabía que desde que vio los ojos de aquel animal acuático que su destino estaba escrito.

Accedió a regresar con Suluk hacia la playa, se encontraba ansioso por volver a encontrarse con aquellas especies marinas y comprobar que lo que había visto era real, mejor dicho, demostrar que lo que había visto era real, a su vez no estaba seguro en como comenzaría la transformación o de que manera aprendería a desenvolverse como animal una vez que hubiera realizado el cambio pero recordó cuando estaba en la cabaña y el comportamiento que Ada y Gabrielle había sido completamente natural, como si se hubieran olvidado de que eran humanas así que el rubio supuso que ese no sería mayor problema.

Llegaron a la orilla de la playa, el sol ahora se encontraba en todo su esplendor el agua sonaba con fuerza y la marea se observaba un poco alta sin embargo no había rastro alguno del delfín que había visto, era claro que no se quedaría ahí toda la tarde pero esperaba que al menos pudiera volverlo a ver – el delfín estaba justo aquí, lo juro – dijo mirando a Suluk quien continuaba con el rostro inmutable – supongo que se fue nadando ojalá pudiera volverlo a ver - ¿y si nunca hubo ningún delfín? ¿acaso se estaba volviendo loco? No, seguramente el animal se había ido nadando después de todo ya había pasado bastante tiempo – tengo una idea.

Se acercó a la orilla del agua y decidió que era momento de ingresar a ella, se quitó con cuidado sus botas y posteriormente toda su ropa, la dobló delicadamente para dejarla sobre la arena y comenzó a caminar hacia el mar, el agua era fresca y mojaba su cuerpo conforme iba avanzando, no estaba seguro si la arcana lo seguiría pero se detuvo justo a la altura en la que el agua llegaba a su torso y sonrió, sabía que tenía que convertirse en un delfín pero no sabía cómo, respiró profundamente y se concentró con todas sus fuerzas en la criatura que había visto con anterioridad, se concentró en esos ojos negros y en su color gris aperlado también en sus aletas y en toda la distribución del mismo, entonces abrió los ojos y pudo notar que su cuerpo comenzaba a cambiar, ahora tenía un color gris, sus manos habían desaparecido para formar aletas y entonces no pudo soportar más el equilibrio, su cuerpo fue impulsado causando que éste callera pues sus pies habían desaparecido, la transformación había comenzado.

[Ada Camille Dumbledore]

La tranquilidad que sentía estando en aquel lugar era indescriptible, los cachorros jugaban a mi alrededor mientras los Linces adultos nos quedamos observándolo y descansando esperando el instante en que el atardecer llegara para que el momento de cazar llegará y poder ir tras nuestras presas. La mayoría de presas que se daban en estos lugares eran los conejo y liebres silvestres quienes habitaban en el mismo territorio de los Linces, vi como el sol se tornaba naranja y debíamos alistar nos para salir a la caza.

La madre se quedaría en la cueva con los cachorros los demás debíamos ir a traer el resultado de la caza para alimentarnos, no podía negar que me parecía emocionante el hecho de dejar salir todos los instintos del Lince que estaban en mí, pero aún pensaba en casa en mis familia y hermanos que me esperaban en el Chateau. Suspiré pensando en ellos y en una deliciosa tarde al lado de mi familia, añoraba que fuera pronto. Nos alejamos dirigiéndonos a la pradera cercana, sentí al llegar a ese lugar algo y aguce mi oído, algo parecía haber entre el espeso césped delante de mí. Me detuve en seco a observar y a permitir escuchar si había alguna presa cerca, fue entonces cuando percibí su olor : una liebre estaba allí.

Apenas levante mi pata delantera derecha para el animal avanzó a gran velocidad, sin esperar empecé a correr tras ella iniciando una persecución. Ciertamente el herbívoro corría muy rápido, pero mi velocidad fuerza y peso era mayor no pasó mucho tiempo antes que le diera alcance y trato de esquivarme corriendo hacia el lado derecho, con gran habilidad y sin perder el equilibro cambie mi rumbo siguiéndole de cerca hasta que con ambas patas delanteras la atrape. Mis dos grandes patas estaba encima de torso y la abdomen del animal que yacía boca arriba agitado y con expresión de terror. Me acerque a ella y la olisquee, pude sentir como el hambre rugía en mí. Me detuve y levantando ambas patas me aleje de la liebre caminando alado contrario, la pobre liebre corrió desapareciendo en una madriguera cercana. La verdad me encantaba estar transformada en Lince, sentía que era una liberación de mi ser.

 

 

[Ludwig Malfoy]

Estando dentro del agua lo primero que le llegó a la mente fue una desesperación terrible pues temía que pronto se comenzara a ahogar, su cuerpo no se había transformado del todo pero su piel ahora se encontraba totalmente gris, su masa corporal se había incrementado de una manera desproporcional y su cuerpo estaba cambiando terriblemente, sus piernas habían desaparecido fusionándose y formando una cola que más bien parecía aleta. De la misma manera sus manos estaban desaparecidas y en su lugar habían salido otras dos aletitas. Su espalda había también sufrido una deformación bastante peculiar pues de su columna dorsal había crecido una giba la cual era casi tan larga como la aleta de sus pies.

“Como voy a respirar, no tengo nariz, no se moverme, ayúdame Suluk” – intentaba hacer algo pero de su mandíbula solo salían sonidos incomprensibles además que estando bajo el agua no había manera que se pudiera comunicar, la desesperación de no poder respirar se fue al momento que se percató de que sus pulmones no necesitaban respirar en aquel momento por lo que se tenía que concentrar en moverse para poder comenzar a nadar. Descubrió que aquellas aletas tenían un perfecto automatismo y se movían de manera involuntaria por lo que empezó a impulsarse rápidamente por aquel océano.

Entonces su mente se puso en blanco, no recordaba ya que alguna vez había sido un humano, su instinto únicamente le llevaba a nadar y a disfrutar de la tranquilidad del mar, se sumergía mas y más en las profundidades del océano e incluso estuvo a nada de dejar atrás su vida mágica sin embargo una serie de recuerdos le llegaron a la mente que le hicieron razonar y pensar que algo estaba mal, entonces dio al vuelta y regresó a la playa donde estaba la arcana, sacó la cabeza del agua y entonces dio su primer respiro como delfín, por alguna razón aquella mujer le había resultado interesante al delfin quien se mostraba bastante amistoso con Suluk.

[Suluk Akku]

Después de un par de minutos volvió a donde Jessie la esperaba. ¿Habría realizado la tarea que le había indicado? Sabía que aquello podía ser un poco complicado, pero todos los que habían pasado por su clase lo habían logrado dominar con un poco de práctica. En el momento en que volvió se encontró con Jessie en su forma humana.

- Entonces, ¿has logrado controlarlo? -Suluk se acercó hasta la chica y tomó lugar justo a su lado-. Estoy segura de que lo has hecho, ¿podrías platicar un poco lo que has sentido durante el proceso?

Su último grupo de estudio había sido demasiado grande, tanto que no había tenido demasiado tiempo para personalizar una clase para cada uno de ellos. En aquel momento se encontraban en la reserva mágica, en un lugar que se adecuaba a la perfección del hábitat de un panda.

@ Jessie Black Lestrange

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Suluk observó a Ada desde una distancia prudente, aquella chica había logrado conectar con su animal interior con bastante facilidad y ahora, al estar el hábitat principal de los linces pondría a prueba una vez más la habilidad de Dumbledore en no verse atraída hacia los instintos primarios de aquella criatura tan particular.

Al parecer aquello era el lugar ideal para Ada, había logrado tomar por completo la esencia de un lince ya que los pequeños cachorros que se encontraban por ahí ni siquiera habían desconfiado, aunque fuera un poco de la chica.  En opinión de la arcana, la chica estaba lista, era casi la hora de que avanzara en su prueba.

Pero espero un poco más, observo más de la escena y después lo supo. La última prueba que la chica tendría que pasar antes de dirigirse hacia la pirámide, tenía que relacionarse con aquella manada en su forma humana. Así que la llamo, esperando que respondiera a su llamado y le indicó lo último que tenía que hacer en aquella ocasión.

- Debes volver a tu forma humana, Ada. Debes hacer que ellos confíen en ti tanto como lo hacen en tu forma animal.

@ Ada Camille Dumbledore

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Regresó junto a Ludwig a la orilla del mar, aquel lugar donde el chico había comprendido por fin cual era aquel animal con el que tenía realmente una conexión. Escuchó lo que tenía por decirle y después observó como este se adentraba al agua. Suluk no tenía nada por decir, sabía que una vez que sus aprendices encontraban aquel tipo de conexión a ella solo le tocaba observar su avance.

Un par de segundos después el chico comenzó a transformarse lo cual era sin duda una buena señal. Y entonces, un hermoso delfín estaba ahí frente a ella y al parecer intentaba comunicarse de alguna forma por lo cual la arcana solo le dedicó una sonrisa y agregó:

- Debes confiar en ti, Ludwig. Sabrás que hacer, debes comprender como es que ese nuevo cuerpo funciona.

Pasados un par de minutos, Ludwig logró comprender lo que era ser un delfín, pero al parecer fue mucho más allá de lo que la arcana esperaba ya que de un momento a otro pudo notar un poco de peligro en aquella situación. Hacía bastantes años que no se sentía así de inquieta, que no temía por la seguridad de ninguno de sus aprendices.

Así que cuando el delfín se acercó a ella y pudo notar en sus ojos que había nada ya del mago quien era realmente ahí supo que tenía que actuar rápido.

- No, no… ¿Ludwig? -Envolvió al delfín en un extraño campo de fuerza, el cual impediría que el mismo se alejara de ella-. Debes volver Ludwig, sé que tu conexión con este animal es fuerte, pero no es quien eres realmente así que has un esfuerzo extra… Vuelve.

@ Ludwig Malfoy Haughton

[Ludwig Malfoy]

¿Para que volver si nunca antes había sentido tanta calma, tanta paz y felicidad? Claro que era feliz antes pero nada se comparaba con la felicidad que estaba sintiendo en aquel momento, no solo eso su cuerpo parecía que había desarrollado una inteligencia mucho mayor a la que alguna vez en su vida podía tener, sus sentidos estaban potenciados de una manera maravillosa, podía descubrir la presencia de animales o barcos a varios kilómetros de ahí. Tenía una vista maravillosa de 300 grados la cual le permitía ver prácticamente todo lo que le rodeaba y estar siempre atento ante cualquier depredador, también sentía una gran empatía era como si pudiera detectar las emociones de las personas que lo rodeaban y fue así que se dio cuenta de que aquella mujer tenía una gran preocupación.

El delfín pudo sentir sus emociones como si fuera un gran legeremante y no le agradaron aquellos sentimientos, decidió acercarse lentamente a ella hasta el grado en que su cabeza se acercó a la pierna de la arcana, e delfín la miraba tratando de ayudarla a relajarse, quería decirle que todo estaría bien, que Ludwig ahora estaba bien y que no correría ningún peligro pero que ahora debía irse, tenía hambre y quería ver que clase de peces podían alimentarlo. Para intentar relajar a la bruja le dio su aleta en señal de despedida y sacó un poco de agua por su espiráculo para mojarle un poco la cara, acto seguido emitió un sonido un poco extraño pero era lo más cercano a una risa, en verdad la estaba pasando de maravilla sin embargo nada de lo que hiciera podía hacer que Suluk se relajara. Ella seguía pidiéndome volver. 

Entonces el delfín la miró aún más y sus ojos tenían un gran parecido a los de alguien importante para el delfín, pero ¿de quien se trataba? Entonces una gran cantidad de recuerdos llegaron a la cabeza de la criatura, pensamientos sobre sus seres queridos, sus hijos y su amado Cillian. Si se iba para siempre nunca más los volvería a ver y ellos se deprimirían mucho, Ludwig estaba entendiendo y recuperando un poco de sus recuerdos. Tenía que volver pero no sabía cómo, decidió entonces acercarse lo máximo posible a la arena, tener contacto con una superficie que le ayudara poner sus aletas en la tierra y al hacerlo perder por un momento la conexión con el océano. Una vez en la arena recordó todo por completo y se sintió mal pues aquella felicidad de estar en el agua se había desaparecido, empezó a respirar con fuerza y desesperación mientras su piel regresaba al color original y lentamente sus aletas se separaban para formar las piernas y los brazos, regresar a ser humano era muy doloroso y una vez que su transformación quedó completa quedó unos minutos acostado completamente desnudo en la arena, era nuevamente humano.

[Ada Camille Dumbledore]

El estar transformaba en al maravilloso animal que era el Lince Ibérico me hacía feliz, hace mucho no me sentía libre de tal manera, parecía que al transformarme en el felino liberará algo de mi que no podía explicar. Sentía que en lo profundo de mi ser este animal siempre había estado y vivido en la esencia de mi alma, pero no yo misma lo había conocido anteriormente. Llegaba a mi el extraño sentimiento de logrará que algo dentro de mi encajaría e hiciera clic a la perfección. Justo en eso radicaba la felicidad que sentía en este momento, logre compaginar mi alma de una manera que no sabía que necesitaba
La Arcana me llamó y fui a ella corriendo con calma con mis cuatro patas, con la cabeza busque su mano para que me acariciarla la cabeza y las orejas. Sus palabras las entendí de inmediato y obedecí volviendo a mi forma humana, sentía mi cabello algo enredado pero me sentía libre en aquel paraje así de esta forma.

-    Esta bien Arcana, iré a presentarme y que ellos me acepten con mi forma humana.

Camine hacia dónde mi manada reposaba, muchos ya habían vuelto de la caza y compartían el alimento que habían conseguido para todos. Me quedé a un metro de donde la manada compartía los alimentos, los cachorros se alimentaban de la carne de una liebre parda que había sido cazado por una de las Linces de la manada.

Tome asiento en el suelo y les observe sin alterar su momento, algunos levantaron la cabeza de la comida y solo me ignoraron para seguir con lo suyo. Tras unos momentos los cachorros se llenaron de inquietud con mi presencia y de a poco fueron acercándose. Uno de ellos se acercó a mí olisqueándome y reconociendo mi aroma se acercó a mí a jugar con mis dedos, consentí con cariño al cachorro y luego su hermano vino tras él. Les acaricie y jugué con ellos un rato, una de las Linces de la manada se acercó a donde estábamos sigilosa, pero al sentir mi aroma y reconocerme empujó con cariño su frente con mi espalda yo me quedé quieta y tranquila mientras me rodeaba al terminar de dar la vuelta frente a mí puso su frente contra la mía y sentí como me aceptaba. Se echo a mi lado mientras los cachorros jugaban al lado nuestro, de a poco toda la manada fue acercándose y tras un tiempo me vi rodeada de ellos que retozaban casi quedándose dormidos tras comer. Mire en dirección a la Arcana con una sonrisa, sin saberlo me había enseñado como volverá los míos, cuando ni siquiera sabía que pertenecía a aquel lugar junto a los Linces. 

@ Suluk Akku

[Maida Black Yaxley]

Era la tercera vez que iba en busca de Suluk, y no estaba mucho más animada que las otras veces, a lo mejor era el tumulto, la gente, y sus incontables ganas de estar ella sola, de no tener que compararse con el resto o de desaparecer entre los muros del Ministerio de Magia. Desde hacía ya buen tiempo sólo el quidditch representaba algún vestigio de vida para la bruja, sin embargo, ahí seguía el bichito del cambio, de la Animagia, de la Metamorfomagia, no estaba segura, y eso era lo que la frenaba, lógico. O eso pensaba. De todas maneras, decidió ignorar un poco lo que le decía su voz interior y encaminarse nuevamente a la casa de Suluk, a lo mejor ya no la recibía con la misma tranquilidad de siempre, con los Arcanos nunca se sabía.

Resopló  cerrando los ojos y alzando la mano para tocar. ¿Qué necesidad había de tanto protocolo si ellos ya sabían quiénes los estaban buscando por conocimientos? Aún así, golpeteó con los nudillos y esperó paciente la respuesta. Ya antes le habían preguntado el porqué de esa búsqueda, por qué esa habilidad en particular, pero la respuesta era lo que no cambiaba, todo lo que sirviera para proteger a sus seres queridos valía la pena. Sobre todo si tenía que ver con las conexiones e informaciones, esa había sido su naturaleza en los últimos años y su fuerza para continuar.

 

— ¿Suluk? —dijo cuando volvió a tocar.

[Suluk Akku]

Con un rápido movimiento de su varita Ludwig estaba de nuevo vestido aún cuando continuaba recostado a la orilla de la playa. Suluk se acercó hasta él, intentando ser lo más respetuosa posible, conocía bien aquella sensación y sabía bien lo difícil al igual de gratificante que podía llegar a ser. Estaba conforme de no haber perdido a su aprendiz en el proceso, sobre todo por el nivel de conexión que había logrado sentir entre Ludwig y su animal interior.

- ¿Ha sido difícil, cierto? Hacía un par de años que no sentía este tipo de conexión.

Se sentó junto al rubio y observó el mar durante un par de segundos, hacía bastante tiempo que no tomaba la forma de un animal marino así que quizá aquella era la mejor oportunidad para hacerlo de nuevo. Pero no, no había tiempo que perder, tenía que seguir avanzando en el proceso de su aprendiz y el siguiente paso para él era dirigirse a la pirámide.

- Creo que es hora de que te adentres en la pirámide, estas listo para avanzar hacia tu prueba final. ¿Tú te sientes listo para ella? -Inquirió al rubio.

@ Ludwig Malfoy Haughton

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Suluk observó a Ada durante un par de minutos, podía notar que estaba lista para dar el siguiente paso así que una vez que le informó que una vez que estuviera lista volviera junto a ella y cuando lo hizo fue ella la primera en hablar.

- He notado que tu vinculo con tu animal interior es fuerte, Ada. Así que sé que estás lista para avanzar al siguiente paso en tu prueba. Así que la pregunta ahora es, ¿tú estás lista?

@ Ada Camille Dumbledore

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Había pasado ya un par de semanas desde la última vez que la Arcana había tenido casa llena, tanto que en ese momento se sentía bastante relajada. En ese momento se encontraba en su patio trasero bebiendo un poco de té, por lo que en el momento que escuchó que alguien tocaba la puerta del frente se sobresaltó un poco. ¿Quién sería? Dejó su té sobre la mesa junto su mecedora para dirigirse al frente de su casa, solo para volver a encontrarse con Maida quien había abandonado su aprendizaje en dos ocasiones ya.

- ¿Maida, cierto? -sabía bien quien era la chica, pero no estaba de más preguntar-. ¿Será que en esta ocasión lograremos avanzar un poco más en tu aprendizaje?

@ Maida Black Yaxley

[Ludwig Malfoy]

Le costó un poco de trabajo poder recuperar por completo la conciencia, en su mente aún era un animal marino con un potencial mucho mayor al de los humanos, su piel se encontraba totalmente mojada y pegada con arena de aquella playa. No había necesitado respirar en todo el tiempo que estuvo bajo el agua por lo que sus pulmones estaban totalmente vacíos y colápsalos provocando que emitida una estrepitosa bocanada tratando de volver a respirar. Entonces recuperó la memoria de todo lo que había pasado y no podía creerlo, jamás en su vida había imaginado que tendría una habilidad como tal y pese a todo aún no la perfeccionaba por completo.

Por su parte Suluk con ayuda de su varita de cristal vistió al mago por completo provocando quitarle los restos de arena incluso estaba seguro que la arcana le había ayudado con el peinado del mismo pues parecía como si nunca antes se hubiera metido al mar. Ludwig sonrió, se sentía completo como nunca antes y deseaba incluso volver a intentar transformarse, ahora si objetivo sería poder controlar sus impulsos como era debido y recordar cada uno de los momentos vividos. Supuso que tendría que esperar pues se estaba oscureciendo y tampoco quería quitarle su valioso tiempo a aquella anciana que tanto le había ayudado. No pudo resistir el impulso de abrazarla pues sin su ayuda el mago jamás hubiera adquirido un vínculo como aquel, ahora llegaba el momento de trascender y evolucionar siendo así objeto de la pregunta que tanto había esperado.

-Claro que me considero listo - la realidad era que se moría de nervios y estaba seguro de que no estaba tan listo como él aseguraba pero eso nunca había sido un obstáculo para el, al contrario estaba decidido a repasar y reforzar su transformación el tiempo que fuera necesario y ahora que tenía la oportunidad de presentar su prueba no podía rechazarla - deseo entrar a la pirámide lo antes posible Suluk, daré todo lo que esté en mis manos para vincularme por completo a los delfines así que ¿que tengo que hacer?

Esperó la respuesta de la arcana mientras escuchaba las olas que emitía el mar, la calma que le transmitían incluso juró que podía escuchar el movimiento de otros peces y barcos cercanos, no podía esperar para volver a nadar no quería irse pero sabía que no podía quedarse todo el tiempo ahí, tenía que seguir.

 

@ Suluk Akku

[Maida Black Yaxley]

La bruja, siempre consciente y apremiada por las correctas formas, por los protocolos y modos adecuados de hacer las cosas, sabía que los Arcanos merecían un respeto, que no había que tratarlos como si fueran tus compañeros de primer año en Durmstrang, pero al escuchar a Suluk no pudo evitar, y que conste en escrito que lo intentó, soltar una carcajada, durante un par de segundos se río y luego tapó sus labios completamente sonrojada por el exabrupto en pleno umbral de alguien tan importante como la arcana de Animagia.

— Lo lamento, no he querido ser mal educada, pero la pregunta que me hizo es justamente la que mi propio Pepito Grillo me anda haciendo, ¿será que esta vez no me escabullo? —dijo apenas pudo controlar su respiración y por tanto, la comunicación— Necesito controlar las necesidad de mi naturaleza animaga, pero no sé si realmente este capacitada para hacerlo. Por otro lado, hay muchas personas quienes van por la vida con la consigna de: "la tercera es la vencida". Si usted no se rinde en darme oportunidad, no lo haré yo en solicitarlas.

Lo último había borrado todo rastro de risas en su faz, porque si estaba siendo sincera. Sabía que tenía la capacidad, sus sueños no podían ser otra cosa más que el camino que estaba tomando, aunque ya no existieran cercanías con los que ella más quería proteger, aunque se sintiera realmente desconectada con el mundo en general, ellos seguían existiendo y para cuando tuviera que hacerlo, ella estaría lista. Sacudió la túnica turquesa que se había colocado esa mañana, desvió la mirada de la arcana, pero aprovechó para respirar profundo e infundirse un poco del valor que no conocía. Se tomó unos instantes además para lanzar algún pensamiento nostálgico en el saco de las cosas que debía dejar de lado en esos momentos. Debía concentrarse.

 

@ Suluk Akku