Mael Blackfyre

CASILLERO 13. (De casillero 5 a casillero 8. De casillero 8 a casillero 13.)

— Ludwig —murmuré saliendo de mis pensamientos al escuchar aquella desagradable palabra salir de los labios de Mica Gryffindor. El cepillo había actuado como se esperaba y nos había traslado de un ministerio al otro, pasando de un país a otro. Gracias a Jeremy pudo guiarme hasta donde Mica creía que era el camino, lo cual, estaba muy en lo cierto—. No me sorprendería que ambos gobiernos quieran matar gente tras una fachada. ¿Acaso crees que todos son santos, Mica?

De a poco mi cabeza se había estado despejando un poco más. De un sitio a otro, se me habían nublado algunos pensamientos y no me habían dejado visualizar todo correctamente. Las chicas aún se aferraban entre sí, guiándonos con mi compañero, el cuál gracias a su guía nos ayudó para atravesar la puerta que todos habíamos localizado.

Era un largo pasillo, como un túnel donde no se lograba divisar el final desde donde nos encontrábamos. Avancé un poco más acercándome a las chicas, las cuáles caminaban buscando algo. Saqué mi varita mientras la puerta que dejábamos detrás, se cerraba lentamente y el sonido viajaba por aquella especie de tubería, una de un par de metros de ancho permitiendo un paso más libre.

— ¿Vas a terminar de explicarnos ahora, Mica? ¿Qué querías, qué buscamos? He visto que muchas más personas merodean. ¿Qué está ocurriendo? —moví mi varita y media docena de pequeñas brillantes esferas de luz levitaron en el aire para tener un mejor panorama. Había una extraña sensación en el aire, como alguien que nos estuviera vigilando desde cualquier rincón oscuro, sin haber un rincón oscuro. No me detuve pero levanté un poco el mentón mirando un poco más allá: — ¿A dónde lleva esto? ¿Eso es una persona? —señalando con la varita esperando alguna especie de reacción tras nuestra presencia. Me aferré mejor a mi varita. Miré a Jeremy por encima de mi hombro, luego la chica desconocida y por último, a Mica.

@ Mentita  @ Jeremy Triviani  @ Mica Gryffindor

Hola, quería hacer una pregunta, espero que puedan responderme. Cuando hablan de los participantes deben ser activos. ¿Cómo pretenden medir ésa actividad? ¿Hay una medida estipulada o van a hacerlo a ojo? Gracias!

Ficha de reporte:
Motivo de lanzamiento (si es el diario, con fecha): Diario 02/11/22
Resultado del dado: 2, 4, 6, 3, 6, 5= 26
Premio obtenido: 26. 1 Mano de la Gloria

INICIO – Posteo 5

Frente a mi tenía a una persona que conocía y a otra que no. La primera habíamos compartido algunos buenos momentos y hacía muchas semanas que nos cruzábamos palabra. Las últimas veces también habíamos pasado por la Marca Tenebrosa y no recordaba dónde más. La otra mujer no la reconocía (Candela), la miré un par de segundos para analizarla y veía algo extraño en sus ojos, especialmente. Eso me motivó a leer superficialmente sus pensamientos porque me confundía. Algo dentro se estaba quejando de Jeremy. ¿Quién era esa mujer?

Aquella pregunta se disolvió como azúcar en el aula. La hermosa figura de Mica Gryffindor aparecía animadamente por aquel pasillo, dirigiéndose directamente hacia nosotros. Le dirigí una sonrisa casi sin poder evitarlo. ¿Cuántos días habían transcurrido? Varios, la última vez que nos habíamos cruzado era dentro de la mansión Gryffindor, luego de que varios compañeros intentaran rescatarme fallidamente. Habían sido una suma de sucesos que me habían facilitado el escape. La chica desconocida se aferró al brazo de Mica mientras me colocaba a lado de Jeremy.

— ¿Quién es ésa chica? No deja de amenazarte en su cabeza. ¿La has hechizado? ¿Para qué la quieres? —caminamos de regreso por aquel largo y oscuro pasillo. La sala circular de aquel piso se iba acercando a medida que avanzábamos los cuatro. Las chicas caminaban por delante con aquel traslador que estaba a punto de partir. Le hablé a Mica: — ¿Hay que esperar a alguien más? ¿A dónde vamos exactamente, al MACUSA?

Esperé a que Jeremy me respondiera mientras llegábamos al sitio. Si alguien más se debía sumar, podíamos esperarlos cerca de los ascensores hasta que el objeto nos llevara a nuestro destino. También Mica podría comunicarle a la persona dónde nos dirigiríamos para ahorrar un poco tiempo. Miré al chico, luego a Mica y a la desconocida. ¿Estaba bajo las órdenes de Jeremy? ¿Esa era su apariencia real? Una extraña intuición me decía que no, pero detuve de pensar en ella cuando llegamos cerca de los ascensores.

@ Mica Gryffindor  @ Jeremy Triviani  @ Mentita  @ Martin N Roses  @ Maida Black Yaxley

INICIO – Posteo 2.

Los rumores volaban a velocidad de la luz dentro de la comunidad mágica. Y en aquella época donde los muertos resucitaban y los problemas se acercaban. De alguna manera, una vez más, Mica me había pedido que le brindara una mano y había aceptado amablemente ¿Por qué? La principal porque apreciaba a la bruja y sabía que si se metía en problemas podría ayudarla. Y segundo, porque de toda la situación tal vez sería capaz de obtener algo a cambio. Me habían nombrado algunas palabras que resultaban más que interesantes.

A pesar de ir conociendo algunos detalles a medida que transcurría el tiempo, me hubiera entendido igual de todas maneras por lo que estaba sucediendo. Camino a Ministerio de Magia me había cruzado alrededor de 50 lechuzas que iban y venían en todas direcciones. Por cada cuadra que me acercaba, podía ver que los muggles escaseaban y las barreras protectoras habían aumentado. Aleteé un buen rato hasta que divisé el pasaje y aterricé, observando que había muchísimas brujas y magos que teníamos en común el mismo objetivo. Eso me disgustó un poco porque significaba que necesitaría un poco más de ingenio y de mi varita para enfrentar la solución. Ya había ocurrido en Stonehenge y había salido con uno de los minerales. ¿Qué sería de diferente ésta vez?

Me adentré desde los baños y en ése momento me pregunté por qué no había usado mi red flú personal para poder asistir a mi despacho. Me encaminé rápidamente hasta los inodoros que me llevaron automáticamente al Atrio. Muchas explosiones verdosas continuaban saliendo desde las chimeneas donde pude ignorarlos, tras haber atravesado todo hasta el Atrio para llega a los ascensores, donde me tomé uno para escuchar como descendía piso a piso. Hasta que llegamos al Departamento de Misterios. Las rejas doradas se abrieron y se anunciaron, donde salimos como media docena de personas, al final del pasillo, pude visualizar a una de las personas que no esperaba encontrarme, pero que automáticamente pude reconocer que también pudo pedirle ayuda la bruja.

— ¿Y Mica, dónde está?

@ Mica Gryffindor  @ Jeremy Triviani  @ Mentita  @ Maida Black Yaxley  @ Martin N Roses

@ Destino  ¡Buenas, amigo! Nos complace recibirte dentro de la mansión, aprovechando que la familia está un poco vacía a pesar de la cantidad de miembros que somos. Ya mismo te agrego al árbol familiar tanto de la mansión como del registro. Cuando quieras pasarte a rolear con nosotros, pasate por el topic de la mansión: LINK. ¡Saluditos!

***************************************
ÁRBOL GENEALÓGICO ACTUALIZADO
***************************************

 

Buenas, paso a avisarles que me uní al equipo 3. Seguro vengan luego a confirmar esto y a avisar si hay algun que otro cambio. Gracias por todo.

Hola. Vengo a dejar mi raza para avisar que soy Licántropo.

Holi. Vengo a pasarme por aquí, me desocupé un poco de lo muggle y espero poder participar de la gala. Asi que me anoto de manera individual y si luego puedo entrar (y algun grupo me acepta [aunque yo lo eliija] ahi me sumo) Gracias por la gala, se ve prometedora!

ID: 66173
Nick : Mael Blackfyre
Link a la Boveda Trastero: #106707
Link a la Boveda de la cual se descontara: #78420
Fecha: 30/10/2022
Link a la Compra: Ver pedido

Producto: Radio conmemorativa
Puntos: 20 P
Precio: 0 G


Total de puntos: 20 P
Total de galeones: 0 G

Hola. ¡Que buen avance! Solicito mi cuenta, gracias.

El fuego verde me expulsó por la chimenea que se encontraba en mi despacho del Ministerio de Magia. Era la primera vez que llegaba bajo el nuevo puesto donde me había colocado el Ministro de Magia nuevo, Ludwig Malfoy. Era en el mismo piso que su despacho, por lo que no tardaría demasiado en llegar. Miré alrededor y noté el cuarto lo más simple y ordenado posible: la chimenea estaba justo frente a la puerta. En las paredes de los laterales se encontraban por un lado un amplio escritorio con una pequeña biblioteca y dos mullidos sillones, y por el otro, unos cuantos archivadores donde se encontraría la información de cada una de las personas, criaturas y seres que se encontraran dentro del terreno del colegio.

La única manera de abrirlos era con mi huella.

Las pocas lámparas que se encontraban distribuidas en el cuarto, quedaron encendidas cuando decidí salir de allí, rumbo a un despacho donde se notaba a leguas que estaba completado infestado de presentes, eran aquellas primeras reuniones informativas para acomodar un poco la situación. Entré y me encontré con unas diez personas, siendo que conocía a casi todos. Me mantuve contra la pared del fondo, escuchando tanto lo que tenía para decir el Ministro como todos los demás presentes.

— Buenos días a todos los presentes —exclamé en algún momento que tuve tan solo unos segundos para al menos, como mínimo, llamar la atención del primer Ministro—. Aprovecho ésta oportunidad para comentar que aprovecharé la noche de la Expiación, para resguardar la seguridad de los alumnos, ya sean muggles o sangre pura y asegurarme que estén en un sitio seguro. Lo llevaré a cabo mediante una excusa tanto de noche de Halloween como el nuevo convenio con los muggles que desde ahora, tienen esa posibilidad de convivir en el mismo lugar.

Las últimas palabras las había dicho disimuladamente, siendo que no podía comentar en voz alta el desagrado que portaba al saber aquella decisión sobre el mundo muggle y mágico. Además ¿Quién iba a sospechar en realidad que era un llamado ante la mayor cantidad posible de muggles reunidos en un mismo sitio y que alguien pueda llegar a atreverse justo a atacar el colegio? Todo iba a ser legal.

@ Ludwig Malfoy  @ noe_snape  @ Darla Potter Black  @ Mia Zoeh  @ Mefistófeles Evil.  @ Mica Gryffindor   @ Luna Gryffindor Delacour  @ Matt Blackner  @ Ada Camille Dumbledore  @ Ellie Moody

MANSIÓN GRYFFINDOR.~

Me aferré a la varita por aquella leve sensación que me había provocado escalofríos. Miré alrededor dentro de mi habitación y esperé algunos segundos, escuchando muy en el fondo el murmullo que provenía desde el comedor, siendo que teníamos algunos invitados y no les había prestado la atención que necesitaban. Ya me había bañado, dejando atrás lo sucedido algunos días detrás con el secuestro. Ya limpio, me coloque una simple túnica se cruzaba la tela sobre el pecho de izquierda a derecha. Llevaba bordes de un color plateado y portaba el broche de oro con forma de cabeza de león.

Moví mi varita cuando salí de mi habitación, tanto la ventana como la puerta se sellaron mágicamente. Miré a ambos lados del pasillo y me encaminé hacia la sala, donde se habían juntado algunas personas. Cuando llegué, lo primero que noté era que Ludwig y Sagitas ya se habían retirado, Mica y Mefistófeles no se encontraban en la sala. Y en ella, cerca de la mesa se hallaban Malum, Eterno, Ada y Luna.

— Disculpen por mi ausencia... necesitaba un baño. ¿Aún no trajeron la cena? Éstos élfos estú-pidos. ¡Tanis! ¡Tanis! ¿A qué están jugando en la cocina? Hay invitados en la Gryffindor y tienen hambre —mientras me iba a acercando a la mesa, Tanis, el elfo que me había llevado ante el primer problema con los integrantes que querían sacar provecho de la mansión, ahora salía corriendo de la cocina con sus dedos chasqueándolos, mientras se colocaban una docena de platos, copas doradas, montones de velas que se encendían (algunas sobre la mesa y otras levitando) y los primeros platos aparecían.

¿Cuándo había sido el último banquete en aquella mansión? Hacía muchos años atrás. Había algunas carnes asadas como de vaca o cerdo, algunas ensaladas, papas, incluso frutas decorando los rincones vacíos de la mesa. Las copas se irían llenando a medida que los comensales lo desearan. Me acerque a los cuatro presentes.

— Creo que todos tenemos hambre. ¿No? Ya se los dije, la mansión puede recibirlos cuando lo deseen, incluso para ti, Luna. Luego tenemos que hablar —la miré seriamente, pero si había algo que me había quedado claro es que dentro de la mansión Gryffindor había cosas escondidas y magias ocultas, nadie podría sacarle algo a nadie. Caminé hasta donde estaba Ada y me senté a su lado, aunque le hablé en dirección a todos los presentes—. ¿Qué dijo el nuevo Ministro? No escuché detalladamente.

@ Ada Camille Dumbledore  @ Mica Gryffindor  @ Mefistófeles Evil.  @ Luna Gryffindor Delacour  @ Malum Luxure  @ Eterno Black Triviani  @ Sagitas E. Potter Blue  @ Ludwig Malfoy

La mansión Riddle nuevamente era sede de eventos relacionados a la Marca Tenebrosa. En ésta oportunidad, donde la comunidad mágica era invadida por las celebraciones por Halloween, dentro del Cuartel General de la Marca Tenebrosa se llevaría una semana plena con diferentes escenarios, donde sucederían cosas realmente honorables y tenebrosas. Los mortífagos tendríamos el honor de brindarle tributo y sacrificios a Lord Voldemort con algunos muggles que habíamos logrado capturar.

¿Quién iba a darse cuenta de las desapariciones en noche de Halloween?

En aquella ceremonia, organizaríamos un banquete digno para compartir con una especie de recuerdo del Señor Tenebroso. Nos visitaría por ésa noche con rumores de posibles personajes célebres dentro del bando como Bellatrix Lestrange, Rodolphus Lestrange, Barty Croch Jr, entre otros. Casi toda la mansión estaba preparándose para éste evento y casi todo estaba listo. Una vez más sacaríamos a relucir nuestras mejores vestimentas.

Algunos elfos y fantasmas habían preparado una larga mesa con diferentes platos que se extendían en todo su largo. Muchas velas flotaban en el aire cerca de los cuadros que mostraban a todo tipo de mortífagos. Las copas de plata se llenarían con las bebidas que los presentes desearan y un cálido fuego mantendría templado casi toda la sala. Muchos presentes se preguntaban si realmente Lord Voldemort se presentaría. ¿Había un número específico de sacrificios para que apareciera? ¿Comería algo de todo el festín?

— Es un placer servirle, señorita Macnair. Cualquier cosa qué necesite, ya sabe dónde encontrarme. Ah, por favor, llamame Mael. No los molesto más. Un gusto, señor —le dediqué una especie de reverencia a Kyle, el mago con quién Juliette había entablado una conversación. Datura no me había escuchado, o quizás no quería sumarse a ésa especie de reunión, asi que le dí los últimos tragos a la bebida y me encargué de alejarme de allí.

El murmullo en aquel sitio se había convertido en algunas charlas con carcajadas, grititos de emoción y algunas en conversaciones secretas aprovechando las distracciones en general. Les hice otra reverencia y comencé a caminar algunos pasos. Mi primer intento de infiltrarme en el Ministerio de Magia, había resultado. Pero no con las intenciones que deseaba. Había estado en una buena posición pero el puesto no era para nada relevante. Ahora con Ludwig como Ministro tal vez podría llegar a tener un poco más de influencias. Debía pensar claramente lo que quería para lograr algunos cometidos.

Caminé algunos pasos más, cerca por allí se encontraba mi prima Sagitas. Más acá estaba Mica, Mefistófeles y Ludwig charlando amenamente. Tal vez podía llevar a conversarles un poco y ver cómo adentrarme en todas esas palabras. Tomé una segunda copa de aquella bebida dorada esperando a ver cómo podía incluirme. Me acerqué unos pasos más y volví a saludar a Sagitas, llegando muy cerca de los otros presentes.
 

Las palabras del nuevo Ministro habían casi concluido en aquella ceremonia que había juntado a casi todos los ministeriales actuales. El mundo mágico convergía toda clase de personas e instituciones actualmente, por lo que tenía un punto a favor, donde había logrado evolucionar desde el pasado estado. A un punto a favor, donde todo era más grande y más difícil de controlar. Sabía de alguna manera que tanto Ludwig como yo, habíamos tenido una charla puramente protocolar, donde las intenciones estaban escondidas entre falsas intenciones.

La suya era mantenerme vigilado, como lo había querido hacer el anterior ministro. Pero no contaba con que su mente estaba muy predispuesta hacia mi persona y siempre podría estar un paso adelante. Solo me impedía un poco Mica, pero aquella joven tal vez también tenía otras intenciones, o por lo menos eso había mostrado ante mi maldición. Ella quería formar parte y sabía muy bien que las consecuencias podían ser mucho peores de lo que imaginaba. ¿Les importaba de verdad o solo jugaban con esas personitas?

— Ehm, si, ¿por qué no? —me dije a mismo aferrándome a una de las copas que había empezado a levitar por allí. Con un movimiento de mi varita capturé a tres de éstas, como si el aire hubiera cambiado de dirección. Había divisado algunas personas y podría pasar el tiempo con ellas—. Oh, señorita Macanir. Qué bueno es verle en otro contexto, en menos peligro —dije con una especie de reverencia moviendo mi varita para que las copas quedaran entre nosotros—. Noté que no llevaban nada para tomar y me pareció una agradable idea que tengamos un poco de alcohol en nuestras sangres. Un gusto, soy Mael Blackfyre. Espero no equivocarme al decir que aprecio mucho a su melliza, Kahla. Lo ha mencionado un poco. ¿Quieren? Espero sí. ¡Ey, Datura! Ven, hay una copa de champagne, si lo deseas.

No esperé demasiado a que la charla avanzara para darle unos cuantos sorbos a mi bebida. E había hecho algunas señas al chico Datura y esperaba que se uniera. Tenía una nueva filosofía donde creía que las nuevas relaciones podían ser contactos poderosos. Alrededor había unas cuántas personas más que también conocía y esperaba poder charlas también. Tal vez tenía algunas intenciones escondidas pero aún no lograba poder empezarlas. Quise romper un poco el hielo.

— ¿Qué motivo hay de que el Ministro holandés esté en Inglaterra? ¿Hay negociaciones de por medio? ¿En su estado no hay tantos problemas que prefiere estar por aqui? Espero poder preguntar —no era muy bueno para los protocolos ni mucho menos para la parte social .La mayoría de las veces las personas solían ofenderse pero eso ya era problema de la otra persona.

@ Datura  @ Juliette Macnair  @ Kahlan Blackthorn

La Marca Tenebrosa, legado de nuestro señor tenebroso, dicta que MALUM LUXURE, habiendo cumplido con los requisitos establecidos, obtiene el conocimiento FORMA TENEBROSA en concordancia al conocimiento 2 correspondiente al clan DISCÍPULOS DE NOSFERATU, por lo que su tatuaje evolucionará impregnando la tinta mágica en su piel con un ardor que no le permitirá olvidar su nuevo poder.

Atentamente.

Sagitas E. Potter Blue, Líder de la Marca Tenebrosa.
Mael Blackfyre & Mica Gryffindor, Lugartenientes.

La Marca Tenebrosa, legado de nuestro señor tenebroso, dicta que MEFISTÓFELES EVIL, habiendo cumplido con los requisitos establecidos, obtiene el conocimiento FORMA TENEBROSA en concordancia al conocimiento 2 correspondiente al clan DISCÍPULOS DE NOSFERATU, por lo que su tatuaje evolucionará impregnando la tinta mágica en su piel con un ardor que no le permitirá olvidar su nuevo poder.

Atentamente.

Sagitas E. Potter Blue, Líder de la Marca Tenebrosa.
Mael Blackfyre & Mica Gryffindor, Lugartenientes.

La Marca Tenebrosa, legado de nuestro señor tenebroso, dicta que MICA GRYFFINDOR, habiendo cumplido con los requisitos establecidos, obtiene el conocimiento LA VOZ DEL AMO, en concordancia al conocimiento 3, correspondiente al clan CABALLEROS DE WALPURGIS, por lo que su tatuaje evolucionará impregnando la tinta mágica en su piel con un ardor que no le permitirá olvidar su nuevo poder.

Atentamente.

Sagitas E. Potter Blue, Líder de la Marca Tenebrosa.
Mael Blackfyre & Mica Gryffindor, Lugartenientes.

Una llamarada verde explotó en una de las chimeneas por las que salí al atrio. Ya había una gran cantidad de personas presentes por lo que el acto por el nuevo puesto del Bondadoso Ludwig como Ministro de Magia. Habíamos tenido grandes altercados, especialmente porque habían sido malos entendidos. Pero habíamos apaciguado un poco los humores y habíamos pactado una relación laboral por el bien de todos. Aunque tenía que admitir que aún podía imaginar claramente su cabeza enganchada en la varita del Mago de la estatua como si fuera una pica.

Acomodé un poco el cuello de mi túnica por las cenizas que le habían quedado. Llevaba una túnica negra, simple. Con una camisa, chaleco, pantalón y borcegos, todos negros también. Los adornos eran en dorado, botones, bordes y algunos arabescos que se mostraban en la vestimenta. Mi cabello y ojos también eran oscuros como la noche. Lo único en color era un nuevo pin que portaba a un costado de mi pecho, por el nuevo puesto que ejercía. ¿Cómo lo había conseguido? Eso era otra historia.

Avancé hacia el cúmulo de personas, esquivando a otros muchos. Tenía sentimientos encontrados en cuanto trabajar allí, no quería encerrarme en alguna de las oficinas como había sucedido. Aunque tenía que decir ex oficina, porque había sido destruida por el mineral de Plaeria que había logrado transformar en uno de los objetos. La comunidad mágica había sido desastrosa en general y por suerte era un daño menor. Casi imperceptible. Llegué a uno de los laterales, para ver como Ludwig Malfoy comenzaba a subir al estrado y le hablaba a un público ubicado en algunas sillas dispersas por ahí.

Pude reconocer a algunas personas. Principalmente a Mica que se encontraba con Mefistófeles. Por allí merodeaban otras figuras como la hermosa ministra francesa, Malum y Eterno, mi gran compañera tenebrosa Sagitas. Entre otros más. Mucho más cerca pude reconocer a la chica Juliette Macnair con un chico. Había muchos rostros conocidos. La voz de Ludwig llegó entre los presentes:

— Reforma educativa, para ella he decidido nombrar a Mael Blackfyre como nuevo inquisidor de Hogwarts quien será ojos y oídos sobre todo lo que ocurre en dicho colegio, confío en su criterio y estoy seguro que Hogwarts estará en muy buenas manos, también se establecerá una sociedad de padres de familia quienes podrán acudir para apoyar en la toma de decisiones de lo que ocurra allá, evidentemente se necesita supervisar la educación que los muggles y magos compartan así que esa parte también la dejaré a su responsabilidad.

Habíamos hablado poco. Aún quedaban algunas cosas por organizar pero si de algo estaba seguro, era que no iba a permitir muchas cosas de las que creían allí. ¿Muggles en Hogwarts? ¿Padres metiches en tomas de decisiones? No, estaban equivocados. Acomodé un poco mi cabello hacia atrás, observando a algunas personas. Crucé mis brazos por detrás de mi espalda, preguntándome qué sucedería cuando terminara la conferencia del Ministro Malfoy.

MANSIÓN GRYFFINDOR.
Era una de las pocas veces en toda mi vida en las que me había mantenido callado. Observaba a aquellas personas con sonrisa que se desviaba hacia uno de los lados de mis comisuras. Al parecer la situación había sido estresantes para todos, no solo para Mica, quien ahora se encontraba semi inconsciente al resguardo de Mefistófeles y el Ludwig Malfoy. ¿Cómo lo había logrado? Era increíble pero todo el escenario lo había imaginado tan solo en mi cabeza: el joven Mefistófeles salía volando por una de las ventanas, Luna levantada por uno de sus tobillos a tres metros del aire, siendo devorada por cuervos en el patio de la mansión y el Grandioso y Bondadoso Ludwig, o la cabeza de él mejor dicho, colgada en el Atrio del Ministerio como digna señal de quienes me molestara. Podría haber hecho eso con todos los que se atrevían a dirigirse asi en mi propia casa. Pero de reojo vi a Mica y decidí por una vez, mantener la calma.

— ¡Veo que la mansión Gryffindor se ha convertido en el bar del pueblo! Qué bueno… —el sarcasmo había salido como las flores en primavera y era inevitable comportarme de otra manera, después de los escenarios que se habían recreado en mi cabeza. Observé a Ludwig y había decidido dos cosas: ignorarlo por el momento para tener una charla después, a solas. Le guiñe un ojo a Sagitas, entendiendo en parte lo que estaba haciendo.

Malum, Sagitas, Eterno y Ada habían llegado en diferentes situaciones pero se encontraban allí como el resto. Ludwig y Mefis se tomaban las molestias de custodiar a alguien que claramente se les había escapado de las manos. Luna había estado comentando algunas cosas fuera de sí, preguntándome a mí mismo, si aquella demencia de algunos Gryffindor, como había invadido al Viejo Auror, también había llegado a su mente. ¿Pedirles a los mortífagos que se comportaran? ¿En qué mundo vivía la directora de los Auror? Me volví a resguardar aquellos pensamientos.

— ¡Tanis! ¡Rhaenya! Ayuden a armar todo en la sala con Arturo y Mushu. Traigan al resto. ¡Apresurense! Que los invitados de la mansión tienen hambre —en aquella comitiva de elfos se habían sumado Tethys, Eneas y Dido, pero realmente nunca recordaba a aquellos elfos, de hecho, no me relacionaba con ninguno, pero si estaba seguro, era que no iba a traerles la comida a su plato.

La gran sala de la mansión Gryffindor había contenido a tres decenas de miembros en su máximo esplendor, asi que no tenían que temer por su lugar. Algunos elfos se habían distribuido en diferentes zonas: los primeros habían colocado la gran mesa, otros traían la comida desde la cocina. Otros más encendían algunas lámparas y velas, y los últimos, acomodaban las sillas y les indicaban a los presentes que ya podían sentarse. Miré a los más cercanos—. Si alguien desea descansar en la mansión, son más que invitados, tenemos lugar de sobra —le dirigí una leve sonrisa a la ministra francesa, tan hermosa y radiante como siempre—. Siéntense y sírvanse unas copas. ¡Por quien sea nuevo Ministro! Ya regreso, ésta situación amerita vestirme un poco mejor.

Y desaparecí.

Ser patriarca de aquella mansión te daba ciertas posibilidades de manejarse incluso dentro con apariciones. Los miembros podían pero solo desde afuera. Tenía que cambiarme ante la situación, el tiempo había transcurrido secuestrado y no me encontraba en el mejor de los estados. Fue tan solo unos segundos, que me tomé un baño y cambie aquellas ropas por una camisa, pantalón y capa negra, con el broche dorado característico de los leones. La puerta de mi habitación había quedado abierta. Y un objeto pequeño, aleteó por el techo, cerca de la puerta. Eso hizo que no volvieran tan rápido como había querido.

@ Mica Gryffindor  @ Sagitas E. Potter Blue  @ Mefistófeles Evil.  @ Luna Gryffindor Delacour  @ Ludwig Malfoy  @ Malum Luxure  @ Mentita  @ Ada Camille Dumbledore  @ Eterno Black Triviani

Hola, vengo a actualizar mi trabajo, a ver si con ésto surgen tramas xD
_____________________________________________________________________

Nick: Mael Blackfyre
Link a la Bóveda: Bóveda Nº78420
Rol de Personaje: Sumo Inquisidor de Hogwarts
Información Adicional: Ocupa su cargo oficialmente para Ludwig Malfoy del Ministerio de Magia inglés controlando la calidad de la educación mágica, en el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería, tanto de los profesores como a sus estudiante || Agente e Investigador privado para resolver encargos, situaciones y/o problemas de manera clandestina en "Fabricantes de Mentiras" en el Callejón Diagon.

Felicidades a ambos por su puesto. Espero que sea un momento para empezar a coordinar un poco más roles interbando, a destrabar lo que se encuentra trabado y a prosperar muchas actividades para que los bandos se levanten aún más. Y ahora especialmente abrazo a Sagis y desear muchos éxitos en éste año. Te conozco de añares en todos los puestos posibles. Sé que vas a hacerlo de maravilla.

Casi me olvido de pasarme. Perdón. La facultad consume el poco tiempo libre, y encima no tengo internet en mi trabajo T.T pretenden que trabaje (? cuestión... La verdad que estoy satisfecho con las 5 personas que quedaron nominadas. Pero no estoy seguro si todos estarían para un puesto como ser Lider. Los conozco tanto del otro lado del bando como del mismo bando, y sé que serían capaces. PERO, por eso mismo que estoy dentro del bando se quien está y quien no. Quién podría y quién no. Adoro a Lisa desde añares pero se que está más para otras cosas. Aunque llevas mucho ausente, igual que Hades. Estoy 100% seguro que es por los tiempos muggles. Anthony fue un apoyo único en todo el año que llevamos el bando con Sagis, pero creo que aún le quedan maduras ciertas cosas, tal vez ahora no es el momento. Juv podria llegar a serlo pero creo que el ingrediente que le falta es la objetividad y la unificación del grupo. Que seguro pueda lograr si se lo propone.

 

Asi que mi voto es para Sagitas E. Potter Blue. La vi todo el año, si supieran todo lo que se hace desde las oficinas, seguramente también la votarían.