Castillo de la Familia Burke (MM B: 116229)

[Mica Gryffindor]

Terminó aquel desayuno y dejó la bandeja a un lado. Si bien sentía su estómago aún algo revuelto, la poción que había llevado hacia ella su elfo había ayudado bastante para regular la resaca. Poco a poco el dolor de cabeza se apagaba, dejándola preparada para la ansiedad previa al momento tan deseado. En unas horas ya no sería “Mica Gryffindor”, en unas horas el apellido Burke, compartido con quien sería su esposo, iniciaría con ellos una nueva historia.

Fuera, empezaba a escuchar pasos que iban y venían, muchos de ellos acompañados con voces familiares. Contuvo el impulso de ir hacia la puerta y llamar a cada quien que pasaba, con intención de conversar con alguien un rato. “No” se dijo, pues sus damas de honor serían las encargadas de estar allí las horas previas y acompañarla hasta el sitio de la boda. No les privaría de ese privilegio.

 Alguien llamó a la puerta, sin dudar en traspasarla. Sonrió al ver allí a su nueva hija quien, llegaba junto con Luna. Se incorporó sin dudarlo, yendo a recibir a cada una con un cariñoso abrazo. La matriarca Gryffindor parecía algo insegura frente a ella, como si tuviese temor a sus reacciones. Sabía que se había mostrado algo dura en ocasiones con ella, pero era su sobrina y la amaba.

-Es hermoso, gracias Luna- el collar era realmente bellísimo- lo usaré con gusto en la boda, me encanta -sentía que sus ojos se empezaban a nublar un poco, el tener a las muchachas allí empezaba a volver a todo mucho más real.

Fue entonces cuando Sophie se unió al grupo, algo confundida. Sonrió y estiró los brazos hacia su prima, abrazándola también. Sabía que la rubia no se sentiría tan cómoda con ello, pero los nervios y la ansiedad que sentía no le permitían reprimir ese tipo de impulsos.

-Solo falta Cillian ¿lo han visto? -preguntó – Sophie tranquila que no es necesario mucho, solo tolerarme este tiempo, esa ya es misión difícil -rio, antes de asomarse a la puerta. Notó que el muchacho se acercaba y se hizo a un lado para que se sume al grupo -Ahora sí estamos todos ¿Has visto a mi futuro esposo? ¿Aún no intenta huir? -bromeó. Tal vez estaba hablando demasiado.

Se apartó del grupo para acercarse al vestidor de la habitación, donde, tras las puertas, se hallaba su vestido. Quería mostrarlo al grupo cuanto antes y obtener su aprobación.

-¿Quieren ver el vestido? -los invitó y, sin esperar respuesta, abrió ambas puertas para dejarlo por completo a la vista, contemplándolo en silencio unos instantes antes de voltear al resto, emocionada.

Se alejó entonces un poco del grupo y buscó en su mesa de luz su móvil. Si bien sabía que no podía ir a ver a su futuro esposo, escucharlo la relajaría un poco. Lo necesitaba. Buscó el número y no dudó en apretar el botón de llamar.

@ Cillian Haughton  @ Sophie Elizabeth Granger  @ Ashley Emily Black Lestrange M.  @ Luna Gryffindor Delacour  @ Illidan Black Lestrange

[toji]

Tazz había desistido en la lucha con su padre por asistir o no a la boda de sus amigos en Ottery, era importante, eso le quedaba claro al pelinegro, pero su padre estaba más nervioso de lo normal y de repente se le vino a cabeza que podría ser por su inminente boda con Cillian, aún les quedan cosas por organizar y desde luego eso pone nervioso a cualquiera. El caso es que Tazz esa mañana, resignado se levantó de la cama y llamó a unos de los elfos domésticos de la familia para que le preparase un baño caliente. El joven Malfoy cuidaba su aspecto, siempre le ha importado más estar presentable, con porte como siempre ha sido en la familia. 

—Y cuando acabes de prepararme la tina tríame un café— ordenó el mago a su sirviente. —… y esta vez que esté caliente, si no el castigo que recibirás será consecuente— sentenció mirando con altanería a su sirviente. Este con la cabeza gacha asintió acompañado de una reverencia hacia el Malfoy. 

Tazz tomó el baño que le había preparado el elfo, justo después de haberse tomado la taza de café recién molido que también le había preparado la criatura que le servía. Relajado después del largo baño, con aspecto más sereno y con humor renovado, el pelinegro se dispuso a vestirse, su padre como no, también se había tomado el atrevimiento de escoger lo que iban a llevar puesto a la boda, no tenía mal gusto su progenitor sin embargo Tazz modificó ligeramente su traje que llevaba ornamentos de oro por hilos en estampados color esmeralda, colores mas propios con sus ideales para con la marca. —Espero que no arruinarle la visión que tiene padre de “una familia” feliz— comentó el voz alta mientas esbozaba una ligera sonrisa maliciosa. 

Finalmente acabo de vestirse y arreglarse como es debido, con su esmoquin de color negro azabache, pañuelo y pajaritas a juego en tonalidades verdes y por encima el abrigo largo que había personalizado con estampados en hilo de color esmeralda. Satisfecho bajo por las escaleras principales y vio a su padre y su hermana esperarle para poder asistir a la boda de los Burke. Una cosa no podía negar, los tres estaban estupendos, quien quiera que los viera quedaría prendado ante tanta clase, clase que solo ellos podían ostentar. La familia Malfoy. 

Malfoy padre y sus dos hijos salieron de la mansión y atravesaron el jardín principal y posteriormente la verja que regentaba la mansión. Al atravesarla los magos se desaparecieron para volver a aparecerse en las inmediaciones de los terrenos de los Burke. —Bueno ya estamos aquí… espero que al menos la fiesta después d ela boda este a la altura— comentó el pelinegro. —Por cierto … recordarme por que hemos venido a esta boda ? Yo apenas se quienes son los novios— inquirio con tono seco. El Malfoy apresuró su andar en cuanto pudo vislumbrar la barra libre de bebidas que ofrecían. Se acercó al elfo que la atendía y pidió que le sirvieran un copa de vodka sin hielo. Mientras bebía observaba a su alrededor la llegada de más gente que no conocía. 

 

@ noe_snape  @ Ludwig Malfoy Haughton  

[Luna Gryffindor Delacour]

No estaba segura de nada pero recibir el abrazo de su tía la tranquilizo como hacía tiempo que no le pasaba, estaba en casa y se lo correspondió feliz olvidándose porque se suponía que tenía que tener miedo, sabía que no la había visto desde hacía tiempo pero era su familia y siempre lo sería, así que sonrió pensando en que lo mejor que le había dejado Elvis había sido a Mica, se preguntó que podría decirle y le dijo aquello que pensaba de corazón, ya sin tener miedo de que ella no la quisiera allí, al fin y al cabo, eran familia y la quería demasiado como para no estar allí en este día tan especial. 

 

- Yo solo... Me alegro que te guste y estoy feliz de verte, hacia mucho que no hablábamos y... Buen Dios felicitaciones por la boda y ahora tendré tío lo cual es genial, te extrañe demasiado, estaré aquí por si me necesitas para algo y te quiero mucho, siempre puedes contar conmigo - le dije dudando al principio y sonando mucho más segura después a medida que le decía aquello que realmente pensaba de corazón - 

 

Mi tía Sophie apareció haciéndome reir, estaba feliz de que estemos todas al fin acompañándola y me sentía honrada de que me eligiera de dama de honor, no se lo dije pero era como volver a tener familia de nuevo y eso me hacía sonreír mucho, sólo quería que fuera Féliz y si ella lo era, lo sería yo, así que me animé mientras me mostraba el vestido y solté un gritito de alegría esperando no dejar a nadie sordo con mi repique de campanas más alto fe lo habitual. 

 

- Oh por Dios es bellísimo, realmente me gusta mucho y me encanta el reliviebe que tiene abajo y todo es súper hermoso, se que te quedará genial y lo amé realmente me gusta mucho, serás la mejor novia del mundo y resaltará tu belleza - le dije de corazón aún asombrada por el hermoso vestido y intentando que no se notará lo emocionada que estaba en realidad - 

 

Por supuesto que falle estrepitosamente, todo el mundo podía ver mis ojos con lágrimas contenidas, por supuesto que al ser vampiro no lloraba como el resto de personas, pero si que tenía mis ojos brillosos de la emoción, estaba tan feliz que tuve que contenerme con lo justo de saltar, lo bueno es que al estar mi amiga Ashley allí mantuve la compostura lo mejor que pude, frunci el entrecejo al ver a Cillian ahí pero no dije nada, era un día feliz hoy así que cualquier rencilla que tuviera con el mago estaba completamente olvidada, sólo quería que mi tía disfrutará este día y lo recordara como el mejor de todos y lo haría me costará lo que me costará aquello. 

 

Deje que se alejara un poco supongo que para hablar con mi tío, así me me giré para ver a mi amiga y sonreírle feliz, porque dentro de nada seriamos familia realmente, no que ya no lo fuéramos, pero el casamiento de mi tía Mica y mi tío Illidian  lo haría completamente oficial, algo que me ponía feliz y alegre a partes iguales, me pregunté si Ashley compartiria mi mismo pensamiento y me dije que tal vez si, mientras me dirigía a ella y le decía con toda la alegría y emoción que tenía en este día. 

 

- Bueno supongo que ahora además de amigas, si seremos familia no? Lo cual será genial, no lo crees así? Por cierto Cillian querido, sabes cómo está mi tío? Supongo que muy nervioso pobre, quieres hacer un olivo de paz? Tu sabes para no arruinar la boda y esas cosas - dije dirigiendo lo primero a Ashley y lo segundo para Cillian tendiéndole la mano al mago, a la espera que la aceptará, termiendo que en su lugar me quisiera hechizar - 

 

Qué estaba haciendo? Sólo intentaba llevar la fiesta en paz y además saldar cualquier tipo de aminosidad que tuviera con él, sabía que nuestra pelea era legendaria pero bien podía ser olvidada en pos de una bonita amistad o al menos, algo de cordialidad que bien nos vendría en estos tiempos que corrían, tragué saliva nerviosa y me dije que lo estaba haciendo por mi tía Mica y por ganarme un amigo, que era lo que en realidad quería aquel lindo día, me dije que al menos tener a mi amiga allí haría todo mucho más bueno y dirigi mi mirada a ella y a mi tía Sophie, preguntándome si no estaría metiéndome en problemas al quedar la paz con Cillian en aquel momento. 

 

@ Cillian Haughton  @ Sophie Elizabeth Granger   @ Ashley Emily Black Lestrange M.  @ Mica Gryffindor  @ Illidan Black Lestrange

[Ashley Emily Black Lestrange M.]

Ashley miro aquel collar tan bonito que luna tendría como presente para la novia y futura esposa de su padre, en realidad estaba hermoso, escucho también cada uno de sus comentario, la ojiverde por un momento estaba completamente nerviosa, y recordaba algunas tradiciones muggles como lo que estaba comentando luna. - Escuche decir de lo nuevo, usado y prestado, ademas que hay una tradición entre las damas poder su nombre en la zapatilla y el que se borre es la próxima a casar.

No Pasarón mucho tiempo cuando una nueva dama se estaba integrando a la habitación para ayudar a la novia con los últimos detalles de su vestido y ademas compartir sus últimos momentos como soltera entre amigas y personas especiales para ella - Yo también traje algo - dijo Ashley entregando el anillo de jade con el pato mandarín aquel anillo que iba a juego con el que le había regalado a su Padre. - Es un pato mandaron, es Asía es muy común en las bodas, ya que simboliza de fidelidad.

Después de entrar su presente Ashley se fue al baño para sacar el vestido color violeta y arreglarse antes para así poder empezar ayudar a Mica con todo lo que ella requiera. La ojiverde opto por dejarse el cabello suelto con un pequeño broche de lado derecho, dejo las zapatillas para el final.

- Vamos, dinos en que podemos ayudarte - Dijo Ashley mientras salía del baño, se dio cuenta que ya estaba en aquella habitación Cillian  - Cillian y Luna nada de peleas - comento.

Después de analizar las palabras de Luna era verdad después de todo dejarían de ser amigas y ahora serían parte de la familia. - Sí, creo que seremos Primas - dijo - Estupendo, podremos ir de fiesta.

@ Luna Gryffindor Delacour @ Mica Gryffindor @ Cillian Haughton @ Sophie Elizabeth Granger

[Ada Camille Dumbledore]

Era el día de la boda, la verdad estaba entre nerviosa y emocionada, las bodas eran lindas demasiado sentimientos encontrados para todos: las familia se debatían entre sí ganaban o perdían un hijo, los novios querían pasar toda su vida juntos y tenían grandes expectativas con respecto a su pareja y a su vida juntos, finalmente los amigos y conocidos esperaban lo mejor en el futuro para ellos.  En este caso, yo era de las que mas me preocupaba por ello, jamás había anhelado casarme y demás cosas que conllevaban familia y cosas así, siempre fui dirigida a manejar la familia, a defenderla y por supuesto a administrarla, después mi tutor me guio por la senda de la política estando preparando para ser espía en los aurores del Ministere y tras ellos no había parado, ahora como ministra y teniendo la co-regencia de Mónaco con mi hermano, no era mi objetivo.
Mi pareja en esta boda era mi hermano mayor Fleamont, la verdad es que me agradaba que fuera conmigo, cuando estábamos juntos parecía que regresábamos a los 5 años y nos divertíamos con todo, era algo que me agradaba de él, siempre de alguna forma encontraba la manera de hacerme reír y hacerme sentir bien. Eso era tan lindo de la familia ese sentimiento firme y verdadero que era una base para la vida de cualquiera. Tal vez por eso era tan segura la base del cariño era la roca en la que basaba mi vida y me hacia ser yo misma siempre. 

 

-Gracias por acompañarme... 

 

Agradecí a mi hermano @ James Fleamont Potter  con cariño. El carruaje volaba con calma sobre los cielos de Ottery, en mis manos una pequeña caja de cristal que llevaba la tiara de Sissi. La leyenda decía que era que quien se casara usándola tendría un matrimonio duradero y con amor, así que la prestaría a Mica para ofrecerle mi buen deseo y cumplir otra tradición que es llevar algo nuevo, azul, viejo y prestado, la tiara sería el préstamo.

Arribamos a la Mansión Burke, me arregle el vestido verde oliva y baje tratando de no enredarme con el vestido, mi hermano llevaba el regalo que estaba en un cofre antiguo con algunas incrustaciones de piedras costaba de una propiedad en Francia un viñedo en Borgoña para que la pareja tuviera su primer lugar donde anidar fuera de Inglaterra. Caminamos hasta el lugar del jardín donde se llevaría a cabo la ceremonia solo se habían presentado algunas personas y la novia estaba todavía estaba en el edificio.

 

-    Fleamont iré a llevar la tiara a la novia, no me demorare, vuelvo en un instante.

Besé la mejilla de mi hermano y busque el ligar donde hubieran más damas en el segundo piso, en una habitación cerrada había algunos ruidos y escuche la voz de Ashley que le decía a @ Cillian Haughton  y a @ Luna Gryffindor Delacour  que no pelearán, golpeé la puerta para que me abrieran, debía entregarle la tiara a la novia @ Mica Gryffindor
 

[Adrian Wild]

Una boda... ¿Cuánto tiempo había pasado desde la última a la que asistí? O bueno, mejor dicho, me digné a asistir. Se habían producido muchas uniones entre familiares, amigos y conocidos que me había perdido por estar fuera. Y a pesar de pillarme en Ottery, también me replanteé seriamente si aceptar la invitación o no esta vez. ¿De verdad me apetecía una boda? Bueno, digamos que aquella no era la respuesta que debía ser contestada. Era Mica, debía ir. No había más razones.

Las últimas veces que había apenas compartido un momento con la muchacha desde que supe de su vuelta había sido en la tediosa batalla contra Laura Nielsen, la Inquisidora, batalla de cuyo final no fui siquiera consciente, sumido como estaba en aquella locura transitoria; todavía debía agradecer a muchos de los que estuvieron presentes haber cuidado de mí. La verdad era que sentía vergüenza y tener que enfrentarme a ella si veía a alguna de aquellas personas... Años parecían haber pasado desde aquellos fatídicos eventos, y que de aquellas cenizas surgieran muestras de amor como la que el pueblo mágico estaba a punto de presenciar aquel día, era algo verdaderamente reseñable. Me costaba mucho creer que todavía había gente que albergara tanto amor como para comprometerse de por vida. Bueno, ellos eran... Humanos. Y mi corazón se había enfriado mucho aquellos últimos años. Quizá demasiado.

Llegué a los alrededores del castillo de la nueva familia que Mica e Illidan, el rubio al que conocí días antes de aquel inesperado suceso del día de elecciones, comenzaban a formar. El pantalón de pinza tobillero bermellón oscuro abotonado, apresaba y ceñía en mi cintura la camisa de gasa negra transparente y manga ancha. Los zapatos de punta redonda negros hacían ruido en los adoquines de la calle, la cual paseaba arriba y abajo, colocándome una y otra vez la flor dorada, una Colorado Columbine, engachada a la altura izquierda de mi pecho, sobre mi silencioso corazón. Llevaba la americana, lisa y del mismo tono que el pantalón, doblada sobre mi brazo izquierdo.

Estaba nervioso. Me había retirado durante un tiempo de eventos sociales y a lo único que había asistido había sido a la feria de Les Erratiques, únicamente por el interés personal de conocer a la compañía de gitanos y a su cabeza de familia. Además, Robin me acompañó en aquello. Me salvó en aquello, más bien. Pero allí había acudido sin él. No podía utilizarle cada vez que necesitara apoyarme en su alegría y vitalidad para sobrellevar una situación incómoda. ¿Desde cuándo me ponía nervioso por un acontecimiento social? Habían cambiado tantas cosas... Pero no, no podía seguir escudándome y usando soportes. Además, nunca me había gustado ir a una boda acompañado por el simple hecho de estarlo. ¿No eran las bodas un evento de diversión?

— Pues a eso has venido, Adrian, a divertirte.

Lancé aquellas palabras en voz alta mientras atravesaba las puertas de los jardines del castillo, percatándome de que algunas personas alrededor que ingresaban al mismo tiempo me habían escuchado. El ritmo decicido que había forzado de mi paso se redujo a uno algo más titubeante, pero seguí mi camino en dirección a las puertas de la vivienda. De momento no parecía haber nadie incómodamente conocido. Vi a un ajetreado elfo frente a mí, indicándoles a quienes iban por delante hacia dónde dirigirse. Cuando llegué a su altura, después de que me destinara hacia el jardín trasero, se quedó algo desconcertado al ver que no me movía y le miraba fijamente.

— Perdona, ¿es posible que pueda ir a ver a la novia?

Ni siquiera sabía de dónde había salido la idea, pero sentía que prefería estar con el motivo por el que había acudido a rodearme de gente desconocida, o vagamente familiar o... Ya sabéis... Incómodamente conocida.

[Lord Cubias]

-¿Pero y donde esta el alcohol?, llevo ya un tiempo acá y nadie me ha ofrecido nada, que irrespeto y desconsideración hacia el ministro- La voz del ojinegro irrumpió de golpe en el lugar, lo cierto es que apenas llevaba un par de segundos parado en el umbral de entrada de la habitación en donde Illidan terminaba de decidir su vestimenta junto a los colegas de la Trifuerza y otra figura familiar.

Las palabras de Cubías lejos de ser un reclamo serio, solo significaron una forma de anunciar su llegada, aunque el deseo de la bebida era muy autentico, un buen trago de whisky le harían vivir la ceremonia lejos del aburrimiento que ese tipo de actos suponía, esperaba que los anfitriones tomaran su broma un tanto en serio y así satisfacer sus deseos etílicos. 

-Menos mal que te escondieron el traje de proxeneta…- agregó el Malfoy observando la vestimenta del rubio, en ese mismo momento se adentró en la habitación para saludar a los presentes de manera apropiada, a todos ellos les dio un cálido apretón de manos junto a un par de palmadas en sus espaldas. -Que gusto verlos, queridos- dijo mientras desplazaba su mirada desde Ludwig, Cillian, Thanatos y Mael, a quien había conocido en una gala anterior.

Para la ocasión, Cubías había optado por llegar recatadamente vestido a la ceremonia, su traje era completamente negro, a excepción de la delgada corbata que colgaba de su cuello, ella era de color plateado brillante, tan llamativa como un destello de luz. 

-¿Y bien?- preguntó el ojinegro seguidamente, pues a esas alturas aún dudaba si había llegado a buena hora, pues en su prisa había pasado de largo por el lugar y llegó directamente hacia el interior, por tanto no sabía si ya todo estaba listo para la ceremonia o aún quedaba tiempo para algo más...

@ Ludwig Malfoy Haughton  @ Cillian Haughton  @ Thanatos L. Lestrange  @ Illidan Black Lestrange  @ Mael Blackfyre

 

 

[Ashley Emily Black Lestrange M.]

Ashley se apresuro a seguir apoyando a mica en su vestuario, mientras terminaba se percato que Mushu se asomaba a la entrada de la habitación para avisarles que algunos invitados empezaban a llegar a la a la recepción de la boda. - Que nervios - murmuró la ojiverde al asomarse por la ventana y darse cuenta que era verdad que los invitados empezaban a llegar.

Mientras terminaba de ayudar a Mica acomodando algunas cosas tocaron la puerta de la habitación, Ashley hizo una pequeña mueca, estaban completas, esperaba que no fuera su Padre o alguno de sus acompañantes que quisieran inflarse aquella habitación, muy cuidadosamente se acerco a la puerta y la abrió mientras asomaba sus sus pequeños ojos, tratando de no abrir completamente la puerta y se dio cuenta que se trataba de Ada.

- Ada pasa pasa, bienvenida, estamos aquí terminando de arreglarnos - Le dijo al ojiverde a la ministra francesa, observo que la joven traia un pequeño cofre, al parecer era un presente para la novia - Mica esta ahí - dijo mostrándole el camino con dirección a donde se encontraba Mica arreglandose.

- Te encuentras bien, espero te diviertas mucho el día de hoy - dijo Ashley a ministra francesa, después de cerrar la puerta se regreso aun lado de la novia, ella ya se encontraba completamente arreglada, y era momento de poner apoyar a mica en lo que requería en aquel momento importan, los minutos pasaban y el momento de "SI" estaba por llegar.

 

@ Ada Camille Dumbledore

[Mael Blackfyre]

Aquella mini reunión de hombres en la habitación de Illidan, fue algo que realmente me había llamado la atención porque jamás en la vida me había pasado. Casi toda la infancia y adolescencia, había sido bastante solitaria. Igual que mí llegada a la mansión. Había durado solo unas pocas semanas que la Gryffindor se había llenado. Luego todos se habían vuelto a ir. Al parecer estaba destinado a estar solo. Salvo en aquel momento.

No agradecí en voz alta pero asentí con la cabeza cuando Ludwig fue el primero en recibirme e invitarme a pasar. Estreché fervientemente la mano del futuro marido de Mica y si le agradecí a él por la invitación y especialmente por esa invitación. Tomé lugar al lado de Lud aunque éste no tardó mucho tiempo en levantarse. Sonreí al ver como se comportaban, casi parecían niños.

El novio de Lud, Cillian, se retiró, ya que parecía que tenía cosas que hacer pero otro mago entraba, el primer ministro italiano, que también me saludo con un estrechón de manos. Me mantuve derecho cuando Illidan se dirigió hacia mí. ¿Era digno de ella? Me puse de pie.

— Creo… —entrecorté la oración tan solo por medio segundo. Tiempo suficiente para que en mi cabeza aparecieran un montón de imágenes. El ataque a la Burke que habíamos hecho con algunos compañeros de la Marca Tenebrosa, la pelea que habíamos tenido en aquel negocio con Illidan y como lo había llevado a in interrogatorio y ataque posterior. Si hubiera salido todo perfectamente, estaríamos en su velorio, y no en su boda. ¿Por qué había ocurrido eso? Ya ni me acordaba porqué me había obligado a desquitarme con él. ¿Por Mica? ¿O por lo que tenía Mica? No quise pensar eso, porque no estaba preparado para lo que me provocara desahogar—. Creo que puedes hacer el intento. Tienes la oportunidad, asi que has el intento, ella está permitiéndote eso.

Respiré. Pude controlarme y guiñarle el ojo a Illidan, esperando que fuera la respuesta que esperaba. No servía para mentir, muchos menos cuando me preguntaban algo. Pero lo que decía no tenía nada de mentira, esa respuesta la iba a obtener solamente de Mica y de él mismo. Con todo lo que estaba ocurriendo allí, no me había dado cuenta que no tenía los regalos para los novios. Era una persona horrible en cuanto a lo social, no sabía mantener ése aspecto bajo ningún sentido. Aunque tenía que admitir que el de Mica ya lo tenía, solo debía verla.

 

@ Ludwig Malfoy Haughton  @ Cillian Haughton  @ Lord Cubias  @ Illidan Black Lestrange @ Thanatos L. Lestrange

[Cillian Haughton]

— Siento llegar tarde…

En el momento en que entró a la habitación de Mica pudo notar que los novios eran tal para cual, ¿cuánto tiempo faltaba para que la ceremonia comenzara? Los invitados habían comenzado a llegar desde hacía ya un rato y los novios aún no estaban listos y aparte… No, no iba a permitirlo.  Sabía bien a quien era que estaba llamando Mica ya que eran pocas las personas entre su circulo que se habían adentrado en el uso de la tecnología muggle.

— ¿A caso no te has cansado de hablar con él qué no puedes estar un segundo sin escuchar su voz? Vamos, Mica… Estoy casi seguro de que él esta casi tan nervioso como tú y seguro que también quisiera estar escuchando tu voz en este momento, pero no es momento aún hay demasiadas cosas por hacer. —Le arrebató el teléfono de las manos y colgó antes de que Illidan pudiera siquiera contestar.

Les dedicó un saludo rápido a las presentes y asintió ante la propuesta de Luna, lo cierto es que aún existía algo dentro de él que no la toleraba por completo. ¿Cómo es que se había atrevido a tanto en aquella ocasión? Sin duda aquella chica era un incordio, pero no era ni el momento ni el lugar para montar una escena, lo había prendido a la mala en la gala de beneficencia.  Se acercó hasta el vestido que Mica había elegido y lo observó durante un par de segundos antes de volver a hablar.

— Por hoy estamos bien, Luna —respondió a la Gryffindor-. Y Mica, ¿puedes decirme porqué es que no estas vestida aún? Tú futuro esposo tampoco lo ha hecho aún —la imagen de Illidan semidesnudo volvió una vez más a su memoria. No era la primera vez que lo veía de esa forma y seguro que no sería la última—. Sigue dando vueltas por su habitación en calzoncillos. Pero bueno, ¿hace falta alguien más en esta habitación?

@ Mica Gryffindor  @ Ashley Emily Black Lestrange M.  @ Luna Gryffindor Delacour  @ Ada Camille Dumbledore