Crónicas de Luces y Sombras II

[Luna Gryffindor Delacour]

Al ver como el fuego empezaba a llenar todo de humo, maldije por lo bajo preguntándome porque demonios teníamos que luchar de nuevo? Luego recordé que para eso había entrenado y que de hecho tenía que salvarlos a todos, cavilaba todo esto mientras veía a Lud sacar de una maleta diversas criaturas, abrí mis ojos azules claro de la sorpresa cuando vi al nundu, a la serpiente y a la quimera, parpadeo asombrada, aún con mi varita en la mano pensando en que hacer acontinuacion.

 

-Desmaius- dije apuntando a Goldor viendo como el rayo iba directo a su pecho y esperando que de no defenderse lo paralizará y que cayera, quedará inmóvil e inconsciente -

 

El séquito de Goldor no me asustaba, de veras creían que podrían vencernos? Suspiré pensativa mientras me decidía por hacer algo más para ayudar a las criaturas de mi amigo Lud, preguntándome si realmente ayudaría o no eso.

 

- Morphos - dije apuntando a una mesa y viendo cómo se transformaba en un gran León de color naranja -

 

- Defiéndenos de cualquier hechizo a Ludwig y a mí - Le pedí preguntándome si realmente podría funcionar y sonriendo feliz cuando vi al león parado enfrente nuestro rugiendo dispuesto a defendernos -

 

Luego de eso le frunci el ceño a Goldor preguntandome qué le pasaba? Sabía que Lud se había encargado de él, pero aún así había algo que quería decirle, tanto a él como a sus secuaces, había algo que tenía en mente desde el anterior altercado en el aeropuerto.

 

- Hermosa visita, la charla supongo que podría ser para luego no? Nunca podrán ver al ministro mientras nos tenga a nosotros, nos creen tan tontos?. Veo que les gusta el fuego no?, a veces es bueno combatirlo con el agua y Por cierto, la próxima vez me gustaría algun aviso de la tertulia, podría haber traído algo para comer - Dije con burla en la voz, preguntándome si no me estaría pasando esta vez -

 

No era tan tonta como para creer que mi despiste con el agua funcionaria, pero aún así era una buena manera para distraerlos y que pensaran que usaría ese elemento,cuando en realidad tenía algo mejor en mente, algo para lo que esperaba que estuvieran preparados.

 

- Entre tus animales y los míos podremos tratar de impedir que lastimen a alguien más, no lo crees así? - Le susurré a Lud, preguntándome como estaba llevando todo eso y si realmente le estaba ayudando o no -

Luego de eso suspiré y me mantuve alerta con la varita bien sujeta en mi mano derecha, por cualquier otro movimiento que pudieran hacer contra nosotros, me dije que pondría todo de mí para poder salvarnos a todos y porque no por volver al ruedo y que saliéramos ilesos todos de la contienda.

 

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@ todos @todos

 

[Darla G Dumbledore]

Y allí estaba en medio de aquel desastre, tenía que ingresar, tenía que intentar la promesa que le había hecho a Darla de estar para los magos y brujas que llevaban el fénix como señal de su creencia en la luz y el bien. Sus manos se movían ágiles con la varita de castaño en su zurda, hizo una floritura rápida mientras pensaba aguamenti en varias ocasiones para apagar las llamas de los incendios que rodeaban el lugar.

No podía creer lo que pasaba, buscó entre sus ropas la bolsa de piel de moke y la encontró, rebuscando en ella, tomó el amuleto dragón y se lo echó rápidamente al cuello mientras calculaba la forma en que podría entrar al lugar, finalmente un hueco que daba a una de las chimeneas le sirvió de ingreso, vaya a saber por qué no lo había pensado antes. Atravesar la red flú, la magia, llegar al ministerio, todo un tema, pensó tras reafirmar en voz alta el lugar al que iba.

Estar allí dentro le pareció algo inexplicable, su mirada del color del cielo recorrió aquella escena subrealista, eran pocos los magos que parecían defender el ministerio en comparación a los enmascarados rodeados de criaturas. Que locura.

Tess observó a una joven bruja que había convertido una mesa en un león y un joven rubio que junto a ella había invocado almas en pena. Ella era capaz de hacer lo mismo pero no lo intentó en ese momento, solo mantuvo la varita firme entre sus dedos, apuntando a nadie en particular, solo observando, como aurores al otro lado intentaban apagar aquello y mantener a raya a las criaturas y mortífagos mientras ayudaban a evacuar a quienes aún se mantenían en el lugar.

—Supongo que he llegado en el peor momento —musitó mientras sonreía, sin revelarse aún como una enviada a ayudar a quien había invocado un patronus de gato siamés.  Seguramente debía ser el rubio que invocaba fantasmas y animales, porque no se imaginaba quién más se atrevería a aquello sino.

[Mica Gryffindor]

La atención se desvió nuevamente hacia Mael, que empezaba a hablar de demostrar lo que podían hacer los Gryffindor, y empezaba a mencionar un ataque al Ministerio en el que todos estarían involucrados.

Mica abrió mucho los ojos, quedando un poco apartada de los demás. No supo en qué momento Arya la había soltado y se había apartado de ella, de seguro presa de las palabras de su Lugarteniente. Su corazón empezó a latir con mucha prisa. Si bien estaba segura del lado en que quería estar, no comprendía el hecho de dañar por el simple hecho de hacerlo. También sabía que si no acompañaba al grupo quedaría como una traidora, en el momento en que todos estaban dudando de su lealtad.

Todos rieron cuando las palabras de Mael finalizaron. Ella no. Estaban empujándola mucho más allá de lo que su razón le permitía.

Sí quería vengarse de la Orden, sí sabía que el Ministro era responsable de la muerte de su hermano… o al menos cómplice de no haber apresado al culpable. Sí, quería que tanto él como Luna y Darla pagasen por sus culpas pero ¿era el momento?

Buscó la mirada de Mael, pero él estaba demasiado metido en sus asuntos, regocijándose de lo que generaba en el grupo. Él no permitiría que le pasara nada malo ¿verdad? ¿Por qué la exponía de esa forma en un primer encuentro con los de su bando? No tuvo respuestas, pero confiaba en él, sabía que no lo haría para exponerla…

 

Se puso su máscara antes de dejar atrás las criptas, y con ello la seguridad de su hogar, apareció en las calles londinenses, donde se unió al resto para avanzar, manteniéndose en la retaguardia.

Una vez en el Ministerio, la invitación “a divertirse” acompañada de aquellas llamaradas lanzadas por Mael la hizo sentir fuera de sitio. ¿Acaso era divertido simplemente lanzar hechizos y destruir estructuras? De seguro era buena descarga para la ira pero ¿Divertido? No lo creía.

Aferró su varita a un costado de su cuerpo, avanzando lentamente con los demás. Estaría dispuesta a atacar si eran atacados, no tendría piedad, pero no se dedicaría a simplemente dañar el lugar.

A través del humo y las llamaradas, pudo descubrir que no estaban solos, más allá de la gente que se dirigía a sus ocupaciones y empezaba a mirar con cierta desconfianza, sabían que deberían huir. Frente a ellos se encontraba un grupo de miembros de la Orden del Fénix.

Le dolió la presencia de Ashley y Ludwig entre el grupo, aunque se centró en alguien más. “Luna” pensó, sabiendo que sería su objetivo. Si lograba salir de allí con aquella muchacha y darle su merecido, consideraría una guerra ganada, por el momento.

Las cosas pasaron a prisa. No pudo escuchar nada más, cegada como estaba con sus deseos de venganza. De pronto notó que la joven apuntaba hacia Mael y lanzaba un rayo. ¿Cómo se atrevía?

-Detritus- murmuró, generando una capa de niebla color verde esmeralda  que protegería tanto a Mael como a ella de los ataques, el rayo de la muchacha no sirvió de nada. – Absorvere- contraatacó, fracturando la muñeca con que tanto Luna como Ludwig sostenían la varita. Lamentó dirigir el ataque hacia su amigo, pero era de los rivales más fuertes allí, pudiendo poner en riesgo tanto a Mael como a ella misma en caso de no ser atacado.

[Mael Blackfyre]

♦Atrio. Ministerio de Magia♦
Aquel grupo de personas que se habían atrevido a aparecer en el Atrio, al parecer nos querían plantear frente. Si se ponían en nuestro camino, entonces íbamos a arrasarlos también. El que parecía liderar aquellos presentes hizo algo que me sorprendió, porque sabía que lo iba a usar de distracción ¿Pero acaso era consciente de todo lo malo que podía pasar? Sonreí ante aquello hasta que algo sucedió frente a mi. Miré fijamente a la pelirroja que había aparecido, y encima, me había atacado. Luna.

Ellos habían dado el primer paso, había empezado la batalla.

El rayo voló directamente hacia mi pero antes que pudiera hacer algo, una neblina me envolvió por completo y me protegió del encantamiento. La miré de reojo, la leona era ágil, sabía que aún podía ser más feroz. Se sentía bien tenerla de ése lado. Giré la varita entre mis dedos, estaba listo. No me sentía demasiado bien dentro de aquella barrera, necesitaba un poco más de movimiento. Estaba agradecido con Mica por su defensa pero sabía que podía sin ayuda, prefería que ellos se desquitaran con los presentes y el zoológico que habían armado.

Corté el aire en dos y avancé, sacándome de encima aquella protección del Detritus. Moví mi varita luego y apunté en dos direcciones lanzando aquella maldición.

— ¡Fuego Maldito! —aquellas dos figuras salieron expulsadas por segunda vez de mi varita, directamente contra las criaturas que posiblemente nos iban a molestar más. Incluso una de ellas había puesto su atención en mí cuando salí del Detritus. Las dos águilas reales hechas de fuego demoníaco, fueron directamente contra el Nundu y la Quimera, impactando en su figura, incendiándose. Deberían salvarlas y en ése intento, podrían caer ellos. Miré a Mica, estaba yendo directo contra Luna, así que mi objetivo era otro: — ¡Capturenlo! Me lo llevaré a pasear…

Exclamé cuando pensé en unas Necrohands que se materializaron alrededor de Ludwig, el mago que había sacado todas aquellas criaturas para distraernos. Las manos fantasmales lo rodearon de manera que lo aprisionaba con sus brazos pegados a su torso y la varita apuntando hacia abajo. Por más que tuviera criaturas no había logrado detenerme e intentaría uno a uno derrotarlos. ¿Podría encerrarlos en la Fortaleza Oscura?

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[Ashley Emily Black Lestrange M.]

Estamos rodeados, en cualquier momento entrarán los mortífagos - fueron de las primeras palabras que su Padre Ludwig les decía a Noe, Luna y Ash, que recién llegaban, en efecto aquel lugar estaba lleno de enmascarados, no paso mucho tiempo cuando uno de ellos dio unas palabras dirigiéndoselo a Ludwig y a luna.

Las cosas habían empezado muy rápido, aquellas figuras enmascaras empezaban a lanzar hechizo sobre su Padre y Luna, mientras tanto Noe y ella se encontraban a un lado, al parecer aun no habían captado la atención del aquellas figuras misteriosas, recordaba aquella vez cuando tuvo que ayudar a Mica y a su padre Illidan en el castillo, ellos habían destrozado todo aquel lugar.

Ashley quiso salir ayudar cuando sintió que su hermana la jalo, ambas se quedaron observando en espera de salir ayudar, ellos aun no se percataban de su presencia y podrían ser de utilidad, fue cuando el enmascarado que al parecer llevaba aquel ataque se acerco a su padre y Luna para atacarlos.

La ojiverde apunto directamente hacia aquel mortifago que figuraba ser el líder - Silencius - aquel hechizo lo dejaría callado un poco tiempo, sin embargo ella bien sabia que aquel mago era poderoso y no volvería atacar.

- Morphos - Dijo la ojiverde apuntando a la silla que se encontraba en aquel lugar, esta rápidamente se transformo en un Tigre - Anda ayuda a mi Padre y a Luna, y defiende a todo mago o bruja que sea agredido por esos enmascarados, incluyendo a mi hermana y a mi - Fueron las indicaciones que dijo la ojiverde

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[Luna Gryffindor Delacour]

Suspiré cuando me habían fracturado la muñeca, así que me apresure a pasar mi varita a mi otra mano, ahora debía de curarme y atacar a la misma vez, sonreí cuando vi que mi amiga Ashley no sólo había aparecido por la chimenea si no que me estaba salvando de Mael, estaba a salvo de momento y con una nueva decisión en mente, ataque aún a riesgo de que me saliera mal la idea.

 

- Disparo de Flechas - pensé viendo cómo doce flechas iban dirigidas al brazo de Mica y que de impactarle le impediría sostener bien su varita mágica - 

 

Suspiré agradecida con la ayuda de mi amiga Ashley y dispuesta a curarme ahora sí del Absorvere, así que apunte a mi otra mano esperando que se curará al menos un poco, a sabiendas de que necesitaría curarme de nuevo para no quedarme sin brazo derecho.

 

- Episkey - Dije apuntando a mi mano derecha que estaba herida y viendo cómo comenzaba a sanar un poco -

 

Le sonreí feliz a Ludwig y a Ashley, dispuesta a seguir luchando por impedir que entraran al ministerio y vieran al ministro, nadie molestaba a Rory en nuestra guardia y estaba segura de que podríamos lograr que no entrarán, estábamos listos y preparados para lo que sea que pensaran hacer y me dije que saldríamos victoriosos porque juntos como la familia que éramos lograríamos vencerlos. 

 

- Lástima que no inviten si quiera una taza de café, que descortés de su parte - Dije sonriendo con burla, mientras me preguntaba porqué seguía provocandolos -

 

Por primera vez estaba feliz de poder ayudar y ganar está contienda, también me dije que protegería a mi familia a como diera lugar y seguía pasando mi mirada azul oscuro desde Mael, Tessa y hasta Mica, como si esperara que se lanzarán de nuevo a atacarnos de un momento a otro, calculando sus movientos y esperando sus respuestas, preguntándome si no estaría medio paranoica en esa batalla en particular.

 

- Mantengan las varitas en alto y pues al ataque mis valientes - Susurré para mis amigos, en un intento de darles animos y sacarme la angustia que tenía de repente -

 

Era tan tonta que aún así y todo, me dolía pelear contra algún Gryffindor? Eso podría ser mi perdición, así que rechine mis dientes molesta, diciéndome que eso ahora no importaba y que lucharía con ahínco porque estaba segura que ellos no tendrían compasión conmigo, así que, por qué yo debería de tenerla? Decidí en ese momento que les plantaria cara así se me rompiera el corazón en el proceso y que no dejaría que a Ashley, a Ludwig y a Noe les pasará nada malo y que los defendería con uñas y dientes, porque a mi familia del corazón nadie la tocaba por nada del mundo.

 

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[Ludwig Malfoy]

La batalla finalmente había comenzado, todo estaba ocurriendo tan rápido que los hechizos comenzaron a volar a todos lados. Las criaturas que estaban ahí para defenderlos rápidamente cumplieron su cometido, aunado a esto las demás integrantes de la orden del fénix arremetían con hechizos. Una mujer apareció también en el llamado, Ludwig nunca la había visto pero de alguna manera le resultaba familiar, le sonrió y continuó observando el espectáculo que estaba ocurriendo. Sabía que estaba en desventaja pero gracias a su marcapaso de la inmortalidad pasara lo que pasara no podía morir.

Aunque Luna lanzó el primer ataque, una mortífaga (Némesis) rápidamente protegió a Mael y a si misma para después lanzar un hechizo que fracturó de inmediato la mano del rubio, tuvo que cambiar la mano y observar con cuidado. Mientras Mael por su cuenta lanzaba más fuego contra las criaturas del rubio las cuales rápidamente retrocedieron. Fue entonces que decidió invocar su – vara de cristal – su varita se transformó en un cetro transparente que aparte le sirvió de apoyo por la mano fracturada, miró a Mael con desprecio, el mago ya se preparaba para realizar otro ataque por lo que rápidamente dijo – sectusempra.

El efecto fue inmediato, las heridas comenzaron a abrirse rápidamente dejándolo mal herido, al menos eso debería darle tiempo a Ludwig para recuperarse de sus heridas, sin embargo las necrohands ya estaban rodeándolo, así que tuvo que pensar en salvaguardia mágica para hacerse intangible y soltarse de dicho hechizo. Los mortífagos estaban haciendo uso de magia oscura y Ludwig debía detenerlos por lo que conjuró el – aura de la llama del fénix.

Un gran fénix envuelto en llamas apareció cubriendo todo el lugar, el aire se tiño de naranja cubriendo a todos los que se encontraban presentes. Sin embargo el pico del fénix lanzó una especie de magia que obligaría a los mortífagos a no usar magia oscura. Al menos los miembros de la orden del fénix tendrían un poco de ventaja. La mano del Malfoy se veía tan mal que no tuvo otra opción más que pensar en curación y esperar a que el efecto del detritus pasara para poder lanzar ataques más efectivos.

 

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[Darla G Dumbledore]

Notaba que los hechizos eran cada vez más violentos, casi tanto como las criaturas que les rodeaban. Había algunos magos más activos y otros que parecían dispuestos a controlar que nada se les escapara, como unos custodios o quizás simples refuerzos para cuando cayeran los de la vanguardia. Quién sabe, pensaba Tess, observando a los hechizos que se sucedían de un lado hacia el otro. Los ojos de una pelirroja estaban fijos en ella y  la rubia supo que la mujer dudaba de su persona. Movió la cabeza, negando y luego apuntando con su varita lanzó un hechizo hacia la pelirroja [Luna Gryffindor]

—Aqueora —el efecto provocó que la masa de agua que surgió de la varita de Tesa cubriera a la joven Luna, creando una esfera protectora a su alrededor sin impedir atacar libremente y el aura blanca del mismo curaría alguna herida que la bruja tuviera en ese momento, a su elección.

Tess no tenía tiempo con la velocidad de las acciones de distraerse en un solo acto por  vez, al contrario, la vampiresa se movió con velocidad, sus ojos se adaptaron fácilmente al destello del aura de la llama del fénix que había sido invocada y acarició instintivamente con su mano libre el colgante de su cuello.

Sus ojos azules se habían posado en la máscara de la media mariposa [Némesis/ Mica Gryffindor], quién había lanzado el hechizo protector que impidiera que los ataques de Luna hicieran efecto alguno sobre el hombre de la máscara que le recordaba no estaba segura si un árbol siniestro o una medusa del mar. ¿Importaba? Pues no, solo era cuestión de definir, a cuál de ellos dirigiría su ataque porque… sí… ella tenía su magia y no era la de una adolescente, por más que su figura pareciera tal, Scarlet y Kimberly habían sido sus maestras y gracias al regalo de Darla ella sabía que más que nunca podía dominar aquella magia, así que sin dudarlo apuntó hacia el hombre, tras el detritus porque ¿cómo detendría un efecto tras él?

—¡Limitate! —la varita en las manos del mago [Goldor/Mael Gryffindor] vibró, no había muchas opciones, ésta debía obedecer la orden que le había dado la bruja y no podría lanzar ni rayos ni invocaciones, al menos a partir de su segundo hechizo de ahora en más y por un buen lapso de tiempo.  Una sonrisa se dibujó en los labios de Tess mientras su azul mirada se centraban en los ojos tras la máscara —ven gatito gatito… ven… vamos a jugar —susurró segura de que él notaría la invitación…

[Kahlan Blackthorn]

Sadakat

Un enorme bostezo le sorprendió de manera inesperada, jamás se había sentido tan hastiado y aburrido dentro de una batalla. Quizás los tiempos habían cambiado demasiado, jamás terminaría de acostumbrarse a los nuevos modos de pelear o intentar llamar la atención de los rivales o los propios compañeros de bando. Desconcertado por la falta de camaradería que reinaba, restándole importancia a un detalle que en otros escenarios si seria  esencial destacar.

Las peripecias realizadas por Ludwig, no le sorprendieron en lo más mínimo. Salvo el detalle de ese maletín que parecía tener a medio reino animal del mundo mágico en su interior— Le quedaría el dicho que suele decir, “todo cabe en una maletita tan pequeña sabiéndolo acomodar”—desviando su vista hacia los Fénix que amablemente envió atacar a sus dragones. No le daría el gusto de verlos dañados y mucho menos que les sacaran los ojos con sus afiladas garras. 

— Necrohands—pensó el Ángel Caído ordenándole al par de manos tomar a uno de los fénix apresándolo como si estuviera sujetado por una pinza y el segundo fue alcanzando por la llamarada que expulsará su dragón Kreston. Poco a poco la presión fue en aumento, no le matarían pero el graznido que emanará de su pico le causaba un placer desmesurado al Holandés. Todo con tal de ver el dolor plasmado en los ojos del Malfoy, siempre le fascino esa mueca que mostraba como por dentro los seres eran más frágiles que el cristal. 

Su maldad no tenía limites y dejaría una huella latente dentro del Atrio del Ministerio. El no buscaba objetivos entre ese grupo de luciérnagas, sino que iba mucho más allá de dejarse nublar los sentidos por los lazos de sangre que pudieran existir entre los presentes. Para el la familia era vital, pero cuando se trataba de matar o sembrar el terror, pasaba todo ese tema a tercer plano. Solía decirse que la sangre es más espesa que el agua o el aceite, ganándose un peso en oro que muchos no saben valorar y mucho menos defender con fiereza. 

Solo tenía a su gemela dentro del mundo mágico, dándose cuenta que todo el teatrito que se había montado se desmoronaba de forma irremediable. El creer que las cosas cambiarían y que la lealtad de mantendría, se transformo en arena que se le escapaba entre los dedos, al ser arrasada por el viento de la traición. Ladeando la cabeza con fuerza, centraba su atención en destruir todo a su paso, no dejaría un solo títere con cabeza. 

—Caudex—pronunció con ferocidad mirando a Tessa pasando el amuleto dos veces por su corazón, colocando esté en su cuello gracias a la cadena que lo sujetaba. El mismo se elevó una cúpula de luz que bloquearía la magia de la bruja, convirtiéndola en una squib. Lamentaba solo poder usarlo una vez, pero la misma fue aprovechada con creces por parte del Vidente. El confabularse para atacar entre todos a un mismo mago tenebroso, no era una idea del todo sensata o acertada.

Entornando sus ojos hacia la parte superior de la fuente que estaba dentro del Atrio, no dudo en ordenarle a su dragón Meraxes enviar una llamarada que provocaría que esa estructura perdiera la belleza que se jactaba de mostrar a los que laburaban dentro de ese sitio tan importante y emblemático— Algunas cosas deben ser renovadas o quedarán dentro del baúl de las cosas que ya son inútiles y han perdido su verdadero valor—encogiéndose de hombros soltaba esas palabras al aire.
 

@Todos 

 

Editado 5 de Junio del 2022 por Kahlan Blackthorn

[Ludwig Malfoy]

El fuego seguía destruyendo todo a su paso, mientras tanto la gente había terminado ya de evacuar todo el lugar. Solo quedaban los mortífagos y claro los miembros de la orden del fénix. La zona ahora parecía como lugar de guerra, una catástrofe parecida a los bombarderos de la segunda guerra mundial, solo que en ésta ocasión eran dragones los que estaban destrozando todo. Ludwig suspiró, el aura del fénix les daría ventaja para que los mortífagos estuvieran un poco limitados pero no sería suficiente para enfrentar a aquellos que tuvieran un mayor nivel de poder.

Mientras tanto, uno de los fénix había sido apresado por las necrohands de Black Reaper. Ludwig no pudo evitar emitir un grito de enojo y de dolor al ver como su ave sufría por culpa de aquel mortífago. Ludwig estaba enfurecido y al ver que Mael aún no se curaba de sectusempra dañado, observó la oportunidad atacar a la persona que había lastimado a sus criaturas por lo que pensó en un confundus. De inmediato Black Reaper se paralizó como si se le hubiera olvidado la acción que iba a cometer. Intentó mover su varita y decir algo contra Tessa pero su hechizo no funcionó en lo absoluto y la nueva integrante de la orden del fénix permaneció a salvo.

Las cosas se estaban nivelando, no había un resultado claro sobre que equipo pudiera ganar, sin embargo Ludwig continuaba aferrándose a su marcapaso de la inmortalidad, estaba listo para dar la vida si era necesario, miró de nuevo a Black Reaper y con el mismo enojo dijo – cinaede. Con un solo movimiento de su varita el efecto se hizo inmediato, un veneno extraño apareció alrededor del mortífago y comenzó a afectar gravemente sus vías respiratorias. Debería curarse o sufriría las consecuencias. Mientras tanto observó como su primer oponente, Mael, aún no reaccionaba, pronto moriría si no hacía nada al respecto.

-Rápido no les dejen cuartel, vamos a atraparlos a todos, no volverán a ver la luz del día – dijo triunfante y mirando a todos sus valientes colegas que habían llegado al lugar – hoy ganaremos.
 

@ Tessa Brower  @ Kahlan Blackthorn  @ noe_snape  @ Ashley Emily Black Lestrange M.  @ Mica Gryffindor  @ Mael Blackfyre  @todos XD