Crónicas de Luces y Sombras III

[Maida Black Yaxley]

No había mucho más que hacer en la Riddle, sin embargo, Maida había permanecido en silencio, escuchando las informaciones, tratando de ver si se podía hacer algo para ayudar a uno de los suyos, independientemente de lo que había sucedido con anterioridad. Finalmente, decidió que no podía aventurarse con el rostros descubierto, pero seguía sin saber si quedarse en la mansión mortífaga o ir hacia el Ministerio de Magia, un lugar que podía jugarle en contra en su propia mente. Eso era lo que temía.

Cuando vio la desaparición de Mefistófeles y luego, gracias a un hechizo, oyó que estaba acompañado en los pisos superiores, supo que la estaba engañando, de cierta manera. Aprovechándose del vínculo de confianza que se notaba, tenía con la mujer. Sintió pena por ella, pues conocía en carne propia, la emoción oscura de sentirse utilizada como una simple pieza de ajedrez por aquellos que pretendían el poder sin mirar a los lados. Tragó salvia siendo consciente que en la Riddle o en el Ministerio, no iba a lograr escapar de su mente, desapareció en una voluta oscura y en el camino pensó en materializar la máscara que cubría tres cuartas partes de su rostro.

— ¡Auch! —chilló al aparecerse detrás de una de las columnas, pero sosteniéndose el rostro, pues al hacer ambas apariciones, había perdido visión por unos segundos y se había topado la frente con el concreto— Recordemos mejorar esto en un futuro —susurró antes de  enfocar bien los azules.

Se suponía que Goldor debía llegar ahí, se suponía que debían estar atentos por si eran necesarios para entrar en acción. Maida puso la varita en alto, aunque estaba escondida y miró a su alrededor en busca de compañeros mal camuflados. 

@ Balderik Von Alexandros

[Luna Gryffindor Delacour]

Sonreí porque reconocí el cuervo de mi madrina y lo mire asustada cuando quemó la nota, tuve que tomarme dos minutos en poder escucharlo y asentir a lo que decía porque me había dejado asombrada, qué pasaba? Sonreí feliz cuando dijo que la veríamos, adoraba a mi madrina y lamentaba haber pasado tan poco tiempo con ella, así que verla siempre era algo lindo, el recordatorio de que aún tenía familia por la que velar.

 

- Quiero ver a la madrina y además es comprensible que lo quemarás así nadie sabe que estoy aquí, la extraño mucho y sería lindo re-encontrarme con ella - Le dije féliz y alegre de saber que la vería y casi olvidándome de lo de la lechuza -

 

Sonreí feliz cuando dijo que salía con alguien, era lindo saber que tendría nueva madrastra y recién me enteraba de eso, lo mire con dulzura cuando me preguntó mi opinión, suponía que se sentía así, como miel y calor y algo de picante, no lo había experimentado todavía pero imaginaba que sería algo como eso más o menos.

 

- Es bonito saber que tengo nueva madrastra y cómo se llama? Cómo es? Cómo te enamoraste de ella? Bueno supongo que se siente así, tú sabes como miel y calor y paz, espero que el día que me enamoré de alguien me de paz, como estar en casa y protegida, así que espero que esta persona te de paz y momentos felices pa, pero si entiendo cómo te sientes, no estás enfermo papá, sólo te enamoraste y te gusta esta persona y está bien, es normal y me supongo que se sentirá así cuando pase no? Y debe ser un sentimiento hermoso, así que no te preocupes por nada, sólo quiero que seas feliz lo sabes no? - Le dije sonriéndole amablemente dándole animos -

 

Estaba feliz por él y muy contenta, siempre había pensado que merecía ser feliz y estaba intrigada por saber todo de quién se había enamorado, además de estar feliz porque mi madrina le escribiera, seguro que verla sería super bonito y esperaba poder tener una linda reunión familiar, me pregunte si mi padrino también estaría allí o no, pero me encogí de hombros diciéndome que estar con la madrina y con papá sería super genial y bonito, como tener a la familia reunida de nuevo al fin y me di un momento para darle las gracias a Papá Elvis para mis adentros,por haber escuchado mis ruegos de tener una familia de vuelta, al menos así sabía que nunca más estaría sola de nuevo.

 

- Me pregunto si Ludwig estará bien, oh a Lud lo conocí una vez en el hospital de Italia por culpa del Covid y nos ayudamos porque tanto aquí como allá habia enfermedades feas y pues gracias a eso lo conocí, decía que espero que esté bien, él es mi mejor amigo y lo extraño mucho, ojalá pudieras conocerlo pa, seguro que te caerá súper bien ya lo verás, junto con Rory son a quienes más quiero, bueno y a la Tía Mica también la quiero mucho, sólo que bueno tenemos nuestras diferencias con ella claro está y a Ada, podemos ver a Ada también? Es que extraño a todos ellos pa y quisiera verlos se puede?  Y a Malum, aunque sea a Malum si podemos verla? Dime que sí - Le pedí sonriéndole alegre de saber que quizás si veríamos a algunos de mis familiares -

 

Estaba alegre de saber que Malum se preocupaba por mi, era evidente que había recibo mi carta y que conociendo a papá de antes tenía más confianza para escribirle o así imaginaba yo en esos momentos, solo sabía que estaba feliz por ir a verla y por tener un lindo rencuentro familiar.

 

@ Mefistófeles Evil. @ Malum Luxure

[Noeline Malfoy McFarlan]

Residencia Potter

Desde que había llegado a la antigua residencia de los Potter parecía que este sería "el acontecimiento" de la Orden, se encontraban reunidos tantos miembros que algunos de ellos le resultaban completamente desconocidos, en el tiempo que llevaba dentro no había tenido la oportunidad de encontrarlos. No había sido la última, pues un par más habían unido luego de la pelirroja.

Era claro que había diferentes opiniones dentro del bando, algunos más radicales que otros, pidiendo la muerte del cautivo. Y no llegaban a ponerse de acuerdo, ¿eran tan 1d1otas que no se daban cuenta hacia dónde llevaban al bando? Hasta que Despard habló, ya se había dado cuenta que las palabras del Ministro solían afectar las decisiones del bando.

Alguien había levantado la voz sugiriendo un navío en aguas extranjeras. Su conocimiento de leyes internacionales era nulo, lo que no le permitía hacerse con una opinión al respecto, por lo que era mejor continuar escuchando con atención. Parecía que algunas decisiones ya habían sido expuestas y descartadas antes de su llegada y aún así no lograban concretar nada. La pelirroja sería de las primeras en ofrecerse a liquidar el asunto, pero había que medir las consecuencias. Un mortífago asesinado fuera del campo de batalla podría traer consigo el revuelo de toda la Marca y con justa razón, y ser el desencadenante de una guerra y era evidente que la Orden no estaba lista para algo así. Ilusos.

No se había dado cuenta de la presencia de Darla, hasta que su voz llegó a sus oídos apurándolos a decidirse por alguna de las opciones propuestas. Otra voz, esta vez desconocida, hizo eco de aquellas palabras. La paciencia se agotaba en aquel salón. Finalmente fue su padre el que dio la orden, claramente era así, para que fuera trasladado al lugar que proponía Darla y luego de ello sencillamente desapareció del lugar, en consecuencia de la nota recibida.

El Ministro, que varias veces se le había ofrecido confiable le perturbó con sus palabras. Primero contradiciendo la clara orden de su padre, por algo era Lugarteniente. Y luego pidiendo que alguien lo siga, aunque lo dijo con voz tranquila no le gustaba que pudiera haber un mínimo de desconfianza a alguien de su propia familia. Las lealtades hacia su propia sangre estaban muy por encima de los reunidos en aquel lugar.

La partida del Malfoy logró que lo que hasta ahora habían sido solo palabras expuestas se convirtieron en acciones. Darla que había estado muy cerca de Goldor todo el tiempo desapareció con él. Y algunos de los otros al ver que sus deseos no eran complacidos decidieron huir del lugar. No había otra palabra para definirlo, por cruel que aquello sonara.

De a poco cada uno de los que habían estado presentes comenzaron a retirarse. ¿A donde iría ahora? No lo sabía. Darla había sugerido su local, así que podría estar ahí y necesitaría ayuda para con Goldor. Su padre había mencionado la Gryffindor como el rumbo que tomaba. ¿Y Cillian? No tenían noticias claras del destino actual del líder.

@ Ellie Moody  @ Hobb Graves  @ Rory Despard  @ Kaori M.  @ Dennis Delacour

 

 

Rumbo a la Mansión Malfoy

No tenía claro qué rumbo tomar, así que saliendo de la Residencia de los Potter se desapareció rumbo a su propio hogar. Esperaba encontrar a sus hermanos para que le ayudaran a aclarar sus ideas. Aunque lo mejor sería encontrar primero a Ashley ella estaba en conocimiento de las lealtades que ambos, su padre y ella misma, tenía hacia la Orden del Fénix. Y Tazz... aún le resultaba extraño no poder hablar claramente con él.

Apareciendo frente a la verja de hierro, esta reaccionó de inmediato a su presencia abriéndole el paso a su interior. Luego de cruzar la puerta logró escuchar voces y hacia allá se dirigió, por el enorme tamaño del edificio y la actividad de sus habitantes, resultaba raro dar de inmediato con alguien entre sus paredes.

¿Cuánto tiempo se había tomado en trasladarse? Nada más ingresar reconoció a la pelirroja acompañada del cautivo, se suponía que estarían en otro lado. Y junto a ellos su propio padre acompañado de Mica, la presencia de esta última le llamó la atención. No había tenido noticias de ex-líder fuera de la cancha de juego, desde que se había separado del bando.

@ Darla Potter Black  @ Mael Blackfyre  @ Ludwig Malfoy Haughton  @ Mica Gryffindor

[Malum Luxure]

La situación se estaba saliendo de control necesitaba crear caos para que no se movieran pero como? Era el asunto en cuestión, pensé por un momento y recordé que en mi bolso de piel suelo llevar toda clase de tonterías, unos pequeños petardos que hicieran gran ruido en una porción pequeña de fuego y este mismo que se extienda al explotar eso llamaría la atención de los cuatro ahí.

-Incendio...- Susurré y prendido una pequeña mata para luego arrojar aquellas bolitas de pólvora escandalosas.

Corrí lo más pronto posible sin que me vieran y repetí esto cuatro veces más aprovechando de mala gana los dotes de vampiro...detestaba hacer tal cosa pues era rebajar mi estatus de demonio, por eso aborrecía el mundo mágico y sus tontas reglas.

Esperaba que mis compañeros se muevan de una vez o esto pondría en riesgo mi vida y la posibilidad que también me capturen, esperaba que Goldor este bien y que esa mujer también salga bien librada no sea que algo le pase y me echen la culpa luego, si algo le haría sería de mi mano no por que alguien más.

-Amor vuelve pronto...- Pedí como si mi amado Kártajan pudiera oírme, detrás de otra planta agachada casi en forma de bolita sin que nadie pudiera verme.

---------------- ❤️

@ Eterno Black Triviani   @ Darla Potter Black   @ Ludwig Malfoy Haughton   @ Mael Blackfyre

Editado 22 de Agosto del 2022 por Malum Luxure

[Balderik Von Alexandros]

 

Tan pronto como la marca tenebrosa ondeo en el aire, de alguna manera, sin saber cómo el castaño notó que algo se había activado. Como si magia se hubiera realizado en esos precisos momentos. La situación no era enfrentar a los aurores del ministerio, Kraven tenía conciencia que era solo tentar la seguridad que allí estaba para custodiar a Goldor.  De pronto sintió una mano en su hombro, y el Von Alexandros se giró un segundo al ver quién o que era  lo que le tocaba. Estuvo a un milisegundos de alzar su varita contra la persona y atacarle, pero para su alivio momentáneo era un compañero suyo de bando, Flagelo. Escucho sus palabras mientras examinaba las entradas del ministerio de magia.

— El plan es simple Flagelo, activar las defensas mágicas del ministerio, observar si hay más aurores que de lo normal pero al parecer no, solo hemos activado defensas mágicas autómatas, es decir no hay nadie, creí que si habrían muchos más magos de lo usual tendrían custodiando al lugarteniente mortífago pero al parecer deben tenerlo en otro lado.—

Observó un poco más pero nadie salía a su encuentro de los mortífagos, tal vez seguir buscando en otro lugar como en Ottery St. Chapole sería la solución.

—Vamonos de aquí, aún no hay pistas del lugarteniente desaparecido. — Oculto tras su máscara mortifaga el Von Alexandros junto con Flagelo y Galia estaban a punto de desaparecer o eso creía cuando escucho el leve crack de una aparición a sus espaldas. Cerca de unos pilares estaba una joven que el Von Alexandros conocía o eso creía conocer.

—¿Perséfone? Soy Obelisk pero ¿Que haces aquí? De igual manera no te escondas, en el ministerio de magia no hay nadie solo defensas automáticas, no sé si estés perdida pero ¿nos acompañas? Nuestro siguiente objetivo será la mansión Delacour, conozco ese lugar muy bien y creo que podría estar allí Goldor.— En realidad no sabía si tendrían allí al mortífago de alto rango, pero de un descarte de posible lugar a otro descarte podrían dar con suerte con el lugar correcto. Además decía su plan por si algún espía ya fuera de la orden o del ministerio les escuchaba.

 

Kraven cómo Obelisk era eso lo que quería, que delataran sus defensas. Al mortífago no podrían tenerlo capturado los de la orden con una par de miembros, debían tener toda una guarnición y una casa o lugar convertida en una fortaleza mágica. El objetivo no era enfrentar a la orden si no saber con exactitud que lugar tenía más defensas, activar una por una porque si era correcto ese lugar sería donde tuvieran capturado a Mael. 

 

— ¿Entonces me acompañan?— Preguntó Obelisk a Flagelo, Galia y Perséfone. Esperando que si el Von Alexandros giró sobre su mismo usando la magia de la desaparición para sentir el viaje en unos segundos y reaparecer a las afueras de la mansión Delacour. Lugar que conocía muy bien.

 

 

@ Maida Black Yaxley  @ Anthony Ryvak Dracony

@ Ada Camille Dumbledore

Editado 24 de Agosto del 2022 por Balderik Von Alexandros
Por autores xD

[Kahlan Blackthorn]

 

 

Los secretos solían ser un arma de doble filo, silenciosas estrategias que debían ser usadas en el momento preciso. Él albergaba varios entorno a los miembros de su familia que pertenecían a las filas tenebrosas, quedándose callado a piedra y lodo— Son el picante de la vida de las personas, yo les añado un poco de sal y pimienta. Si vieras que son deliciosos cuando sabes cuando revelarlos y en contra de quien—sonreía con suficiencia dejando ese gesto detrás de su máscara. El plasmarlo sin aquella protección diría más de lo deseado por el Ángel Caído— Pago 10,000 G, si consigues llevarme a cuestas en tu espalda—bromeó rompiendo un poco la tensión del momento. Percibiendo el ardor que se intensificaba sobre su marca tenebrosa, disfrutando de como quemaba su piel al removerse la serpiente que buscaba refugio en aquella calavera que abría sus fauces gustosa de recibirla.

— Existen toda clase de planes, sugerencias y los que realmente son el factor sorpresa—la punzada en esta ocasión fue mucho más certera— Vamos a la Mansión Malfoy, pocos saben quienes iremos ahí y la sorpresa que le aguarda a la Orden del Fénix—relamiendo sus labios le sacaba la botella de la mano— A tu salud, Hathor—dándole un largo trago la lanzaba contra la chimenea desatando que una llama de color verde ardiera con fuerza. Tomando de la mano a la castaña, desaparecieron envueltos en varios cráneos compuestos por una espesa neblina, siendo devorados por las fauces de esas almas que jamás descansarían en paz.  Dejando detrás de ellos la calma que reinaba dentro del pasadizo de la Mansión Riddle, respirándose una tensión que fácilmente seria cortada con un cuchillo. 

Varios de sus compañeros ya estaban congregados en algunos de los sectores de los terrenos, apareciendo en su zurda su varita azul oscuro. No dudaría en usarla en contra de quien se cruzará en su camino— Se que tus tutores han hecho un excelente trabajo con vos, podes demostrar de lo que sos capaz o ¿no?—la retaba sin esperar una respuesta. Avanzando con firmeza por ese sitio que visitará anteriormente, deseando romperle la cara en mil pedazos al gracioso de Ludwig. Meterse con el lugarteniente de la marca, si que había sido una de las estupideces más grandes que pudo perpetrar y solo por tomar venganza por un suceso que involucraba a un amigo cercano del Malfoy.

— Nos llevaremos a Mael como sea o me dará mucho placer, hacerle una visita a la rehén que tenemos en nuestro poder y no darle oportunidad de suplicar por su existencia—estaba decidido a matarla de ser preciso. No existía nada que le ligara con la joven, poco le importaba que su sangre se derramara en su casa. De que lloren en la Orden a que lloren en la marca, pues mejor que sean en la Orden, adaptaba aquel dicho de una forma demasiado cómica a su parecer.

— Trabajaremos juntos, apoyándonos entre nosotros y al resto—indicaba apareciendo en su mano su daga Kansho, pensando todo el tiempo en ese conjuro que era uno de sus predilectos. El arma se materializo en su diestra, ahora estaba más que listo y dispuesto a dar batalla, ya se encargaría personalmente de poner los puntos sobre las íes y colocar en una pica la cabeza del Lugarteniente de la Orden del Fénix. Divisando a su hermano Eterno a lo lejos, se sentía mucho más en confianza teniéndolo a el y a su esposa Malum como apoyo en esa emboscada.

@ Juliette Macnair ❤️ @ Eterno Black Triviani @ Malum Luxure  @Todes xD

 

Editado 24 de Agosto del 2022 por Kahlan Blackthorn

[Rory Despard]

Cuando sale de lo que siente como una corta ensoñación, alguna clase de poder ilusorio, la situación ha cambiado drásticamente. Ni Darla ni el mortífago estaban más en la residencia, y Kaori, claramente decepcionada, procedió a cerrar el portal y con él su ofrecimiento. De inmediato, un silencio incómodo se instaló en el ambiente.

¿Se habría colmado la paciencia de Darla y por eso había tomado esa decisión? ¿Establecería alguna otra clase de negociación? Lo único que quedaba claro era que haciéndolo sola, definitivamente estaba asumiendo todas las cargas si aquello salía mal. E increíblemente, habían pasado de un escenario relativamente favorable, a otro donde los peligros eran crecientes, no ya solo en la Potter, sino a donde la pelirroja hubiera ido a parar.

Eso sin contar que el propio lugarteniente se había puesto voluntariamente en riesgo yendo a la casa de los Gryffindor. Y por las palabras de Kaori, Rory entendió que pese a su pedido de que alguien pudiera ir hasta allí para asegurarse de que él estuviera a salvo, muchos de los otros presentes parecían haber interpretado en el acto de Ludwig el más patente egoísmo, y en esa medida, que estaba de más cualquier clase de preocupación por él.

— Odiaría que alguien más esta noche quedase expuesto a las venganzas de los mortífagos- las palabras salieron con una franqueza imposible de reprimir en la medida que también él se contagiaba con la desesperanza que todo ese acto había traído consigo- tú tienes una bella familia que te espera en casa Kaori, creo que deberías darle prioridad a eso, y no irte de copas con...bueno...esas amistades disipadas que podrían ser una mala influencia...

La mirada hacia Madeleine había sido elocuente, pero Rory se había negado a pronunciar abiertamente su nombre a último momento, porque igualmente podría comprometerlo si tenía que explicar el cómo conocía de los excesos de la jovencita (que no era más que la involuntaria asistencia a una fiesta de los Evans). Así que asintiendo con una venia a modo de despedida, vio partir al nutrido grupo y un tiempo después, también vio a Dennis salir rumbo al ministerio, lo cual agradeció infinitamente, pues ya empezaban a llegar reportes del avistamiento de la marca tenebrosa en calles aledañas a la edificación.

Y esa era la más clara señal de que él debía volver también. Aun así, exhausto y con la mente súbitamente atrapada en otra clase de recuerdos más felices, echó un vistazo alrededor, y comprobó que Noelin, la última que quedaba de los convocados, salía por la puerta principal, tan silenciosa como había llegado. 

Persignándose, Rory se reacomodó el abrigo azul y nunca como en ese momento, lo golpeó la terrible sensación de que ya no podría volver a la residencia Potter y sentir que allí tenía una familia. Quizá él también debía solo irse y aceptar la idea de que incluso en la orden del fénix, había dejado de existir el diálogo de antaño entre todos, para mantenerse unidos incluso con diferentes puntos de vista. Tocaba entonces aceptar que el tiempo de los acuerdos en mayoría había desaparecido para dar paso a una clara línea jerárquica donde tocaba callar y obedecer.

¿No se había cansado de repetirle Benjamin que eso de pensar en consensos no traía más que problemas y dificultaba la toma de decisiones? Y aun así, cuando finalmente salió de allí para cumplir la que esperaba fuera su última acción como ministro, rogó a Dios con todo su corazón que Ludwig estuviese a salvo, y de ser posible, que Darla hallara el modo de contactarlo y no siguiera sola y expuesta, a un mortífago del que nada bueno podía esperarse.

Editado 25 de Agosto del 2022 por Rory Despard

[Ludwig Malfoy]

Las palabras de Darla eran dagas en su corazón. ¿Quién hizo que Luna se fuera? No le dijo a nadie y solo mandó unas cartas a ciertas personas que nunca aparecieron. No quería desconfiar de su amiga quien le había dicho que ellos la tenían. Respetaría su palabra pero entonces ¿Quién lo hizo? Ludwig no podía decirle a la chica que fue Mica la que le contó todo, si lo hacía descubriría su secreto y ella quedaría expuesta. Estaba consiente de que la petición de no matarlo era mucho. Cualquier persona con los suficientes motivos podría asesinarlo pero Ludwig necesitaba creer que existía todavía una orden del fénix buena y que podía luchar contra todas las adversidades juntos.

Observó como realizaba el juramento de sangre obligando a Goldor a no atacar a ningun miembro de la orden, eso podría ser una ventaja en caso de que finalmente se liberara pero no duraría mucho tiempo. Mientras tanto Noe finalmente llegaba viendo una escena bastante perturbadora y extraña. Ludwig no tenía idea de como explicar la situación pero ella era lugarteniente, sabía lo que hacía y tenía que estar enterada de todo – hija, Luna fue secuestrada por la marca tenebrosa y piden a Mael como intercambio a cambio de su vida, yo no negocio con terroristas pero tampoco puedo permitir que la vida de nuestra amiga corra peligro - boooom

No pudo terminar, el sonido de unos explosivos retumbó por toda la mansión. A lo lejos unas paredes recién construidas comenzaron a desplomarse mientras en el cielo la marca tenebrosa imponía el miedo y destrucción de antaño – nos están atacando – gritó en vano pues todos ya sabían lo que ocurría – rápido todos en guardia, si se quieren ir adelante, yo no abandonaré mi casa y no permitiré que éstos malditos no amenacen – esperaba que el y sus colegas pudieran hacer frente pero sabía de antemano que los números jugaban en su contra pero esperaba que algunos miembros de la orden al ver la marca tenebrosa acudieran en su ayuda.

 

@ Mica Gryffindor  @ Darla Potter Black  @ noe_snape  @ Mael Blackfyre  @ Malum Luxure

 

[Mica Gryffindor]

-¡Claro que en una pieza! -dijo hacia Ludwig, evitando hablar a Darla directamente, sabía que la fenixiana sospecharía de que continuaba en la Marca Tenebrosa, no sería para ella secreto -Si le hacen daño dañarán a Luna… no queremos que eso suceda ¿o sí? -empezaba a tener miedo. El hecho de que su tatuaje hubiese empezado a generar picazón era mala señal. -Lud… me…

Estuvo a punto de avisarle que ya estaban en camino, cuando escuchó aquella explosión a sus espaldas. Quedando interrumpida también la explicación del Malfoy hacia su compañera de Montorse Magpies.

-Amigo, necesito llevármelo, no puedo quedarme… -murmuró hacia él, sabiendo que tendría graves problemas en caso de encontrarse en medio de una batalla entre ambos bandos, a cara descubierta y sin intención de atacar a ninguno de ellos -Vamos, déjame que me lleve a Goldor y me encargaré de que Luna esté pronto segura y contigo. Te lo prometo. -agregó tomando su brazo con delicadeza pero intentando asegurarse de que él le preste atención. -Luna no resistiría que la torturen, no merece eso… -continuó, temiendo que sus palabras pudiesen ser realidad, su sobrina era descuidada y dudaba mucho de ella, pero sí era una chica delicada que no merecía torturas del tipo que podrían darle entre miembros de la Marca Tenebrosa.

Creía que la Orden del Fénix no volvería a abandonar a uno de los suyos de ese modo, creía que lo sucedido con su mellizo era un hecho aislado, pero estaba presenciando algo similar. Darla sabiendo el peligro que corría Luna, dispuesta a seguir con sus acciones contra Goldor, y Ludwig dudando ante el hecho de generar ese intercambio, la llave para que la joven fuera liberada.

@ Ludwig Malfoy Haughton  @ Mael Blackfyre  @ Darla Potter Black  @ noe_snape

[Darla G Dumbledore]

De total desmadre en la Malfoy con Goldor, Ludwig, Mica, Noe y Denebola a menos que BR y Eterno editen diciendo que no están más en la Evans, cosa que no aconsejo para no dejar más mareada a la gente de lo que ya están 😵

Si había que ser honestos Darla estaba perdiendo la paciencia tanto como la podía haber perdido Goldor siendo el lastre que ella cargaba de aquí para allá. Sus ojos observaban con desconfianza ahora hacia Mica, ya que sabía que la bruja había abandonado el bando, aunque desconocía las circunstancias y vamos, ella no era quien para juzgarla ya que apenas la habían elegido líder ella misma se había marchado. ¿Podemos acaso juzgar los motivos de las dos mujeres? Difícil. Pero había algo o más bien alguien, por quién la Potter Black había regresado y en ese momento, luego de mostrar su incondicionalidad comenzaba a dudar gracias a la presencia de la que había sido la íntima amistad del lugar teniente.

La daga estaba nuevamente en la cintura de Darla y empujó a Goldor a un metro de ella mientras a su alrededor varios acontecimientos comenzaron a sucederse en rápida sucesión. El sonido de una aparición había sido notado por ella y varios explosiones de petardos comenzaron a sucederse. La mano de la bruja se cerró más firmemente a su varita mientras apuntaba a Goldor.

—Si tus amigos intentan hacer ese est****o juego para distraernos creo que se equivocaron de persona, ya no tengo nada que perder Goldor, y tú sí… crucio —las palabras de la bruja habían sonado frías y no dudó en utilizar la maldición imperdonable en el mago —¿en verdad crees que puedo confiar en que los tuyos devolverán sana y salva a Luna si te entregamos? Corpus Patronus —la pelirroja acababa de invocar frente a ellos un erumpent que comenzó a correr hacia los arbustos donde parecía oler la presencia de la persona que había lanzado los petardos. Darla esperaba que ambos, mago y criatura, tuvieran el cuidado suficiente para no volar por los aires.

Debía confesarlo, en ese momento podría haber utilizado el control corporal para destruir a cualquiera de los que estaba allí, incluso la fragoquinesis para manejar todos y cada uno de los objetos que quisiera y hacerlos caer sobre ellos sin ningún problema o explotarlos junto a Mica y al mortífago que parecía querer jugar a la navidad. Y ni hablar de que si quisiera tendría bajo su poder al propio Goldor mediante el escendia. ¿Por qué se contenía?

Era obvio que tener bajo el poder de la Orden, en una prisión o perdido en medio de la nada al lugar teniente de la Marca era algo que ponía el juego en jaque, seguramente podían pasar dos cosas, todo se detendría, con ellos desorientados, o cientos, cuando no miles de víctimas irían cayendo una a una mientras ellos intentaban conseguir recuperar al que parecía que era uno de sus titiriteros. Darla veía aquella situación como una “ventaja” no real. Donde uno de nosotros cae seremos como una hidra, nos multiplicaremos por mil por cada tentáculo que cortes. Sí, era un riesgo que consideraba que ni el propio Despard hubiera estado dispuesto a correr. La primer víctima era Luna, una Luna tan ingenua que la creía capaz de volverse mortífaga si le mostraban el suficiente cariño. De algún modo Darla supo que la joven bruja estaría mejor donde fuera y ya no necesitaba la protección de nadie.

Por todo eso ella había estado dispuesta a correr con la suerte de ser la culpable de todo. Porque nadie ganaba con un Goldor menos, diez mortífagos más activándose solo para matar a cien personas cada uno para vengar la desaparición o posible muerte del que parecía ser el futuro líder de la Marca.  ¿Quién iba a pagar el precio de eso? ¿Quién iba a aceptar la culpa de los efectos de sus acciones? El odio por lo evidente la envolvió y apuntó una vez más hacia Goldor a un metro de ella mientras pensaba en un Fuego púrpura, la llamarada violeta impactó en el mago dejándolo inconsciente.

—¿Cuánta gente vas a matar por recuperar a tu líder Mica? —su pregunta fue fría —¿crees que tú tengas más estómago que yo para asumir todas y cada una de las muertes que tener a Goldor aquí lograrán? Si lo hubiera llevado lejos de todos y de todo, a donde nadie lo pudiera encontrar ¿realmente hubieras sacrificado a tu sobrina? Porque yo sí estoy dispuesta a sacrificar a quien sea por el bien mayor —su varita volvió a apuntar a Goldor —¿y si un simple avada terminara con todo? ¿Dejarías que maten a Luna por ello? –la voz de la pelirroja era totalmente neutral y sus ojos castaños observaban todo el panorama frente a ella, incluyendo al hombre caído a su lado y a la pareja junto al ingreso de la Malfoy.

Y sí, ya no cabían más dudas, las palabras habían salido de la boca de Ludwig casi de la misma manera que en algún momento en la Potter habían salido de la boca de Luna, inconscientes.  Y era obvio que de la forma en que Mica le hablaba ni siquiera podía confiar ya en él tampoco. Ni las explosiones ni las paredes una vez más derruidas, ni la marca tenebrosa que ya no era nada para ella ni la certeza de que lo que siempre habían querido, socavar la Orden desde adentro porque odiaban los bandos, se estaba cumpliendo. Quizás fuera mejor que todos se fueran de una vez por todas a su lugar favorito, ya que no habían venido nada más que para figurar. Entonces… supo que tenía razón… hacía diez años había visto el inicio de la corrupción y ahora veía el resultado de ello ¿para qué seguían allí? Si nada valía la pena ¿a dónde terminarían? Respiró profundo y volvió a ver a Goldor, era hora de llevárselo de allí a menos que se quedara junto a Ludwig a proteger su hogar, pero ¿podía confiar en él? ¿o pasaría como con Despard? A quien ya no podía creerle ni una sola palabra.